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Programa de Estudios de Posgrado

SOCIEDAD, PESCA Y CONSERVACIÓN EN LA


RESERVA DE LA BIOSFERA DEL ALTO GOLFO DE
CALIFORNIA Y DELTA DEL RÍO COLORADO

TESIS
Que para obtener el grado de

Doctor en Ciencias

Uso, Manejo y Preservación de los Recursos Naturales


( Orientación Ecología )

Presenta
Gerardo Rodriguez Quiroz

La Paz, Baja California Sur, Octubre de 2008


Comité Tutorial y Revisor de Tesis

Dr. Miguel Ángel Cisneros Mata (DIRECTOR DE TESIS)

Dr. Eugenio Alberto Aragón Noriega (DIRECTOR DE TESIS)

Dr. Alfredo Ortega Rubio (CO-TUTOR DE TESIS)

Dr. Álvaro Bracamonte Sierra (CO-TUTOR DE TESIS)

Dr. Luís Felipe Beltrán Morales (CO-TUTOR DE TESIS)

Jurado de Tesis

Dr. Miguel Ángel Cisneros Mata


Dr. Eugenio Alberto Aragón Noriega
Dr. Alfredo Ortega Rubio
Dr. Álvaro Bracamonte Sierra
Dr. Luís Felipe Beltrán Morales
Dr. Cesar A. Salinas Zavala (SUPLENTE)
RESUMEN de la tesis de GERARDO RODRÍGUEZ QUIROZ presentada como requisito
para la obtención del grado de Doctor en Ciencias en uso, manejo y preservación de los
recursos naturales con orientación en Ecología.

Resumen aprobado por:


Dr. Eugenio Alberto Aragón Noriega
Director de Tesis

SOCIEDAD, PESCA Y CONSERVACIÓN EN LA RESERVA DE LA BIOSFERA


ALTO GOLFO DE CALIFORNIA Y DELTA DEL RÍO COLORADO

En este estudio se hizo un análisis de la pesquería ribereña en tres comunidades del Alto
Golfo de California: San Felipe, Baja California, y el Golfo de Santa Clara y Puerto
Peñasco, Sonora. Primeramente se analizaron los volúmenes de captura de las principales
especies desembarcadas en las tres comunidades, en el periodo 1995-2007. Posteriormente
se hizo una descripción del área donde se capturan esas especies, obteniendo el porcentaje
de captura en las áreas de Reserva de la Biosfera, y Refugio de la Vaquita marina, para
evaluar la cantidad de ingreso que proviene de esas dos zonas y proponer una
compensación económica que permita una captura cero en ellas. También, se hizo un
análisis de los factores socio-económicos de los pescadores, a partir del decreto de la
Reserva de la Biosfera. La evolución o crecimiento de las sociedades cooperativas de
pescadores ribereños en los últimos 15 años, en el que se presenta el número de
cooperativas, socios y embarcaciones menores, la generación de ingresos, costos de
producción y el producto interno bruto de la población de pescadores ribereños. Además,
de analizar aspectos sociales como la migración, edad de los pescadores, tiempo de realizar
la actividad, y su interés y beneficios de la Reserva. Se analizó los posibles beneficios
ambientales que ha traído consigo la Reserva, al revisar el interés de los pescadores sobre
alternativas productivas. Posteriormente se hizo un análisis del manejo de las áreas
naturales protegidas en el Alto Golfo de California y se plantearon propuestas de manejo
para el Refugio de la Vaquita marina, desde un punto de vista que privilegia el bienestar
social. Se tuvo siempre como factor determinante en la conservación de este ecosistema el
que los habitantes del lugar mantengan una visión más realista de la situación en que se
encuentran, y busquen soluciones que los lleven a la sustentabilidad de sus actividades con
visión de largo plazo. Por último, se hizo una recopilación y análisis de la investigación
biológica, el cuidado del medio natural y la interrelación de la vaquita marina con las
actividades económicas que suceden en esa parte del país, sobre todo con la actividad
pesquera. Se hizo una recopilación de los sucesos y actividades que se han llevado a cabo
por organismos gubernamentales y sociedad civil para el cuidado y protección de éste
cetáceo dentro de la Reserva de la Biosfera y del polígono donde se han realizado la
mayoría de los avistamientos de estos organismos. Se proponen algunas alternativas tanto
ambientales como económicas para disminuir el esfuerzo pesquero en la región y cuidado
de las especies en peligro de extinción.

Palabras clave: Pesca ribereña, Alto Golfo de California, Vaquita marina Phocoena sinus.
FISHERY, SOCIETY AND CONSERVATION IN THE BIOSPHERE RESERVE OF
THE UPPER GULF OF CALIFORNIA AND COLORADO RIVER DELTA

ABSTRACT

This thesis study does an analysis of the artisanal fishery of three communities of the Upper
Gulf of California UGC: San Felipe in the state of Baja California, El Golfo de Santa Clara
y Puerto Peñasco in the state of Sonora. Fishing data since 1995 to 2007 were analyzed and
a GPS description of the fisheries is described. Fishing areas in the Vaquita Refuge Area
are described and fishing effort is analyzed. An economical run was performed to assess a
potential closure of the fishery within these two marine protected areas, particularly
shrimps and curvina fisheries. Subsequently, a fishermen socio-economic analysis was
done since the Biosphere Reserve was established. We describe the cooperatives and
members of the cooperatives evolution, as well, the artisanal boats increase. We also
analyzed fishing incomes, production fees and the gross domestic product of the fishermen
in the UGC. Then, we continue with some social analysis as a migration, fishermen hood,
time of being in the activity, and their interest and knowledge of the Reserve benefits. We
continue with an environmental welfare analysis, which has come with the Reserve to the
fishermen. We make a review to those alternatives suggested by fishermen, so we can
propose a rough management programme for the Vaquita Refuge Area. With this, we try to
give some solutions to prevent environmental and social conflicts, generating sustainable
alternatives to fishermen, so they could improve their quality of life and protect their
environment. At last, we compile and analyzed all of what is written about Vaquita biology,
environment and status to our days, in particular its relation with the fishery in the region.
We also collected information about all actions and activities that has been performed by
Mexican authorities and no governmental organizations to protect this cetacean inside the
two marine protected areas. We proposed some environmental and economic alternatives to
decrease fishing effort within the marine protected areas and support endangered species.

Keywords: Artisanal fishery, Upper Gulf of California, Vaquita marina Phocoena sinus.
DEDICATORIA

A Dios

A mi esposa Susy, por haberme apoyado, comprendido y dado ese tiempo para que yo

pudiera dedicarme a mis estudios, sin ti hubiera sido muy difícil hacerlo

A mis hijos, Carmen María y Miguelito, por ser lo más bello del mundo y mi motivación

A mis padres, Papá y Mamá, por que siempre serán lo máximo y mi mejor ejemplo en la

vida

A mis hermanos, Héctor y la nena, con sus respectivos peores nada

A mis sobrinos,

A mi familia política, por domarme a la fiera cuando yo no estaba en casa

A mis amigos y compañeros en todos lados que creyeron en mi


AGRADECIMIENTOS:

Al CIBNOR por haberme dado el tiempo, dedicación y oportunidad de estudiar y hacer uso
de sus instalaciones para mi superación académica, en especial a la Dra. Thelma
Castellanos Cervantes, a las Licenciadas Osvelia Ibarra y Leticia González, y a Claudia
y Bety por facilitarme mi estancia durante todo este tiempo.

Al CONACYT por otorgarme la beca (registro: 112401) durante estos tres años de
realización de mi tesis doctoral. Además por el apoyo otorgado al proyecto 48445, que
fue parte importante para realizar mi trabajo de campo durante mi doctorado.

Al IPN a través de COTEPABE por haber facilitado la Licencia con Goce de Sueldo
(Dictamen 326) para realizar mis estudios, que sin ella no hubiera cumplido con mis
objetivos personales y de estudios.

Al Dr. Alberto Aragón Noriega por haber creído en mí y en mi trabajo, pero sobre todo por
ser más un amigo que mi guru doctoral.

Al Dr. Miguel Cisneros Mata por haber confiado en mi criterio para desarrollar el trabajo
de tesis, gracias por sus consejos, me sirvieron de mucho.

A los Drs. Alfredo Ortega Rubio, Álvaro Bracamonte Sierra y Luís Felipe Beltrán Morales
por haberme prestado su tiempo y apoyo para mejorar la calidad de mi trabajo de
investigación, así también a los Drs. Bracamonte y Ortega por su tiempo en el
desarrollo de la escritura y publicación de los artículos que coronan mi trabajo de
investigación.

A WWF por su apoyo logístico y económico para realizar mis salidas al campo y mapeo de
la pesca en la región del Alto Golfo de California en los veranos de 2005 y 2006.

A los pescadores del Golfo de Santa Clara y Puerto Peñasco que se prestaron para
responder a la entrevista que se les realizo durante mis salidas al campo.

A todos los funcionarios públicos que no dudaron en apoyarme con toda esa información
tan valiosa y confidencial para hacerla publica.

A mis compañeros de doctorado en Guaymas y otros en La Paz, que se prestaron en


aconsejarme y ayudarme en la realización de este trabajo, Alfredo, Alma rosa, Lanz,
Darrichie, y a mis cohabitantes Oscar González y Oscar Gerardo Gutiérrez
Páginas

Acta de revisión de tesis


Resumen de la tesis en español
Resumen de la tesis en inglés
Dedicatoria
Agradecimientos
Contenido
Lista de figuras
Lista de tablas

Capitulo I
Marco teórico
I.1 Introducción……………………………………………………………………... 1
I.2 El Golfo de California…………………………………........................................ 3
I.3 El Alto Golfo de California……………………………………………………… 5
I.4 Políticas de manejo ambiental y áreas naturales protegidas…………………….. 7
I.5 Reserva de la Biosfera del Alto Golfo de California……………………………. 10
I.6 Refugio de la Vaquita marina……………………………………………………. 13
I.7 Organizaciones sociales y gubernamentales…………………………………….. 14
I.8 Objetivo general…………………………………………………………………. 15
I.9 Hipótesis…………………………………………………………………………. 16
I.10 Metodología general……………………………………………………………... 16

Capitulo II
La pesca en el Alto Golfo de California y Refugio de la vaquita marina
II.1 Introducción……………………………………………………………………... 19
II.2 La Reserva de la Biosfera y la pesca del Alto Golfo de California…………….... 21
II.3 Objetivo………………………………………………………………………….. 23
II.4 Metodología……………………………………………………………………... 23
II.5 Resultados……………………………………………………………………….. 24
II.5.1 Pescadores y artes de pesca……………………………………………………… 24
II.5.2 La pesca en el Alto Golfo de California de 1995 al 2007……………………….. 27
II.5.3 La pesca de las principales especies en la Reserva del Alto Golfo de California 30
y Delta del Río Colorado………………………………………………………...
II.5.4 La pesca en el Alto Golfo por parte de las comunidades que de ella se
benefician………………………………………………………………………... 31
II.5.5 La pesca en el Refugio de la Vaquita Marina…………………………………… 34
II.6 Discusiones……………………………………………………………………… 36
II.6.1 Influencia de los factores ambientales e hidrológico……………………………. 36
II.6.2 El manejo de la pesca en el Alto Golfo de California…………………………… 37
II.7 Conclusiones…………………………………………………………………….. 40
Capítulo 3
Dinamismo económico y social de la Reserva de la Biosfera del AGCDRC
III.1 Introducción…………………………………………………………………… 42
III.2 Historia de la pesca en el Alto Golfo de California…………………………… 43
III.2.1 Desarrollo de la pesca del camarón durante la última década del siglo 20…… 45
III.2.2 Diversificación de la pesca en la región………………………………………. 46
III.2.3 Composición de las comunidades……………………………………………... 47
III.3 La pesca ribereña en el Alto Golfo de California y acciones para su
protección……………………………………………………………………… 48
III.4 Objetivo………………………………………………………………………... 51
III.5 Metodología…………………………………………………………………… 51
III.5.1 Económicos……………………………………………………………………. 51
III.5.2 Sociales………………………………………………………………………… 52
III.6 Resultados……………………………………………………………………... 53
III.6.1 Económicos……………………………………………………………………. 53
III.6.1.1 Población ocupada en el sector primario………………………………………. 53
III.6.1.2 Valor de la captura por especie desde 1995 al 2005…………………………... 55
III.6.1.3 Numero de cooperativas, permisionarios y embarcaciones de pescadores
ribereños de 1990 al 2005……………………………………………………... 57
III.6.1.4 Ingreso promedio de los pescadores ribereños………………………………… 59
III.6.1.5 Gasto realizado en la adquisición de equipo de trabajo, combustibles y
alimentación para salir a pescar……………………………………………….. 61
III.6.1.6 Egresos por parte de los pescadores en servicios básicos……………………... 62
III.6.2 Impacto de la Reserva sobre la economía de los pescadores en el Alto Golfo
de California…………………………………………………………………… 63
III.6.2.1 La actividad pesquera dentro de la Reserva de la Biosfera……………………. 63
III.6.2.2 Ingresos, pesca y otras actividades complementarias…………………………. 64
III.6.2.2.1 Ingresos………………………………………………………………………... 64
III.6.2.2.2 Pesca…………………………………………………………………………… 65
III.6.2.2.3 Turismo y otras actividades……………………………………………………. 68
III.6.2.2.4 Capturas por especie…………………………………………………………… 68
III.6.2.3 Sociales………………………………………………………………………… 69
III.6.2.3.1 Migración……………………………………………………………………… 69
III.6.3 Alternativas de trabajo a la pesca en la Reserva………………….…………… 71
III.6.3.1 Compensación económica al posible cierre de la pesca……………………….. 72
III.7 Conclusiones…………………………………………………………………... 73
Capitulo IV
Situación actual de la Reserva y alternativas de manejo para la pesca y
conservación de la vaquita marina
IV.1 Introducción…………………………………………………………………… 76
IV.1.2 Estrategias de manejo de Reservas Marinas…………………………………... 78
IV.2 Objetivo………………………………………………………………….……. 80
IV.3 Metodología…………………………………………………………………… 80
IV.4 Resultados……………………………………………………………………... 80
IV.4.1 La Reservsa y las vedas……………………………………………………….. 82
IV.4.2 Los pescadores y la Reserva…………………………………………………… 85
IV.5 Discusiones……………………………………………………………………. 87
IV.5.1 El manejo de la Reserva por los pescadores del Alto Golfo de California……. 88
IV.5.2 Alternativas para la protección del sistema marino de la RBAGCDRC y
Refugio de la vaquita marina………………………………………………….. 88
IV.5.2.1 La pesca deportiva y recreacional………………………….……………….. 89
IV.5.2.1 Observación de mamíferos marinos………………………………………… 91

Capitulo V
Interpretación de los conflictos entre conservación de la vaquita marina y
la pesca en el Alto Golfo de California: un caso de estudio
V.1 Introducción…………………………………………………………………... 93
V.2 Generalidades de la especie…………………………………………………... 94
V.3 Mortandad incidental…………………………………………………………. 97
V.3.1 Mortandad en actividades pesqueras…………………………………………. 98
V.3.2 Redes agalleras……………………………………………………………….. 98
V.3.3 Redes de arrastre……………………………………………………………… 99
V.4 Aspectos de su medio ambiente……………………………………………… 100
V.4.1 Destrucción de su hábitat……………………………………………………... 101
V.5 Medidas y acciones derivadas a la protección de la Vaquita marina………… 103
V.5.1 Organizaciones No Gubernamentales………………………………………… 104
V.6 Análisis de la situación 2000-2007…………………………………………… 105
V.6.1 Alto Golfo Sustentable……………………………………………………….. 106
V.7 Conclusiones………………………………………………………………….. 109

Conclusiones generales……………………………………………………….. 106

VI Literatura citada.……………………………………………………………... 115


VII Anexos.………………………………………………………………………… 134
Figuras

1 Áreas protegidas a nivel nacional…………………………………………………… 9


2 Limites de la Reserva de la Biosfera del Alto Golfo de California…………………. 12
3 Ubicación del área de refugio de la vaquita marina en el Alto Golfo de California… 14
4 Diagrama de Flujo de las actividades desarrolladas para analizar la actividad
pesquera en el Alto Golfo de
California……………………………………………………………………………. 18
5 Localización del Golfo de California……………………………………………….. 19
6 Cobertura de la actividad pesquera en el Área Natural Protegida del Alto Golfo de
California, y del Refugio de la Vaquita Marina…………………………………….. 31
7 Pesca realizada dentro de la reserva del Alto Golfo de California y en el refugio de
la vaquita por los pescadores de: a) Puerto Peñasco, b) Golfo de Santa Clara, c) San
Felipe. A) Chano, B) Manta y tiburón, C) Camarón, D) Sierra, E) Curvina, PP,
GSC, SF) Pesca total……………………………………………..………………….. 34
8 Impacto de las distintas pesquerías a la zona de Refugio de la Vaquita Marina. A)
Chano, B) Manta y tiburón, C) Camarón, D) sierra, E) Curvina, PT) Pesca total…... 36
9 Capturas históricas de totoaba y camarón con respecto al flujo de agua proveniente
del río Colorado. Tomado de Cisneros et al. 1995………………………………….. 44
10 Volumen de la pesca y valor de la producción en el Alto Golfo de California (1995-
2005)………………………………………………………………………………… 56
11 Número de embarcaciones de pescadores ribereños en el Alto Golfo de California
(1995-2005)………………………………………………………………………….. 59
12 Ingreso anual promedio distribuido por pescador de cada comunidad……………… 60
13 Rango de edades por grupo de los pescadores en las tres comunidades en el Alto
Golfo de California………………………………………………………………….. 81
14 Rango del tiempo que llevan viviendo los pescadores en las comunidades del Alto
Golfo de California………………………………………………………………….. 82
Tablas

I Embarcaciones registradas por principales pesquerías, según litoral y entidad


federativa, 2002.………………………………………………............................. 20
II Sociedades cooperativas de producción pesquera registradas por tipo de
actividad. Según litoral y entidad federativa, 2002…………….………………... 21
III Volumen, precio y valor de la captura de las principales especies capturadas en
el año en el Alto Golfo de California durante el año 2004……………………… 23
IV Permisionarios y embarcaciones autorizados para la flota ribereña en el Alto
Golfo de California……………………………………………………………… 25
V Por ciento de las capturas mensuales de las principales especies comerciales en
el Alto Golfo de California……………………………………………………… 26
VI Longitud y altura de las redes de enmalle usadas por los pescadores del Alto
Golfo de California……………………………………………………………… 26
VII Redes y tamaño de abertura usados por los pescadores en las principales
pesquerías del Alto Golfo de California………………………………………… 27
VIII Volumen de captura de las principales especies dentro de la Reserva del Alto
Golfo de California desde 1995 al 2007………………………………………… 29
IX Movimiento de la población masculina en los municipios fronterizos adjuntos
al Alto Golfo de California……………………………………………………… 47
X Crecimiento de la población en las comunidades del Alto Golfo de California y
las personas ocupadas en el sector primario en el periodo 1990-2005………….. 54
XI Sociedades cooperativas, socios y permisionarios en el Alto Golfo de
California………………………………………………………………………... 58
XII Costos imputados a la pesca en el Alto Golfo de California………………….… 62
XIII Gastos de los pescadores del Alto Golfo de California en servicios básicos…… 62
XIV Impacto de la Reserva de la biosfera en la actividad pesquera.………………… 64
XV Impacto de la Reserva de la Biosfera a las comunidades pesqueras……………. 67
XVI Impacto de la Reserva en las capturas por especie……………………………… 69
XVII Lugar de nacimiento de los pescadores ribereños……………………………….. 70
XVIII Alternativas económicas a la actividad pesquera en el AGC..………………….. 71
XIX Compensación económica exigida al gobierno por el cierre de la pesca en la
Reserva………………………………………………………………………….. 72
XX Qué opina el pescador de las vedas……………………………………………… 83
XXI Conoce las regulaciones sobre vedas……………………………………………. 83
XXII Que opina sobre la inspección y vigilancia de las áreas de pesca……………...... 84
XXIII La Reserva de la biosfera influye para que el cumplimiento de la regulación…... 85
XXIV Conoce las zonas en que se divide la zona de la biosfera……………………...... 86
XXV Considera que los objetivos de la Reserva se han cumplido……………………. 87
XXVI Captura, valor de primera mano y costo operativo de las principales especies
explotadas por las pesquerías artesanales del Alto Golfo de California dentro
del Refugio decretado en diciembre del 2005 para proteger a la vaquita
marina……………………………………………………………………………. 102
1

Capítulo 1

Marco teórico

I.1 Introducción

El estudio de un ecosistema requiere considerar un listado de elementos que en su

relación entre ellos, y los posibles cambios que éstos experimenten representen en su

mayoría la estructura y función para poderse establecer como un recurso que deba

protegerse por su importancia en el ámbito nacional (León, 2004).

Los ecosistemas manejados adecuadamente soportan la explotación de sus recursos

naturales permitiendo un desarrollo armónico de las poblaciones humanas que de ellos se

benefician. Esto se destaca primeramente en los usos y costumbres de los pobladores, la

seguridad en la tenencia de la tierra y en el cumplimiento o no de las leyes, normas y

reglamentos, el cual asegure la conservación y propiedades del paisaje, la variación de las

especies explotables comercialmente y críticas (León, 2004).

En México, a través de las políticas, programas o instrumentos establecidos por las

distintas secretarias y dependencias encargadas en el manejo de los recursos naturales se

instrumentan las medidas de manejo. Sin embargo, generalmente las políticas ambientales

no han sido orientadas al manejo integrado de las áreas o comunidades costeras (Zárate,

2004). Esto deriva en un crecimiento desordenado de las poblaciones, y que difícilmente se

pueden programar inversiones en infraestructura y servicios que conlleven a una mejor

calidad de vida y cuidado del ambiente. El Alto Golfo de California es un caso donde la

falta de programas bien establecidos ha impactado al ecosistema marino y el desarrollo

económico de la región.
2

El marco conceptual de este trabajo hace unos análisis de los sucesos pesqueros,

ambientales y socio económicos en de las tres comunidades que se encuentran adyacentes a

la Reserva de la Biosfera del Alto Golfo de California y Delta del Río Colorado: San Felipe

(SF), Baja California, y Golfo de Santa Clara (GSC) y Puerto Peñasco (PP) en Sonora,

adoptando a la Reserva como una unidad de análisis. Por un lado, se hace una integración

de toda la información que se generó a través de encuestas con los pescadores y datos

oficiales de las distintas dependencias que registran información sobre los aspectos

pesqueros, sociales y ambientales. Por otro lado, se abordan los problemas de la Reserva

bajo un concepto holístico, abierto, contextualizando en la protección del ecosistema

marino y en las especies en peligro de extinción, con el fin de discernir medidas de manejo

adecuados que coadyuven a la conservación del medio natural y sustentabilidad de los

recursos marinos explotables en esa zona.

La primera parte del documento, observa el desarrollo pesquero de las comunidades

que se benefician del espacio que comprende la Reserva y el Refugio de la Vaquita. En esa

zona se pescan especies de alto valor económico, lo cual compromete de alguna manera la

sustentabilidad de la zona y algunas especies endémicas en situación crítica o en peligro de

extinción. En esta parte se analiza el volumen de captura dentro de la Reserva realizado por

los pescadores de las tres comunidades a partir de 1995 hasta el año 2007, se ubican las

áreas de captura a lo largo y ancho de las dos áreas naturales protegidas por especie y

comunidad, así como, se hace un análisis de la temporalidad de la pesca, sus artes de pesca,

del esfuerzo, y de la captura en esa región del país.

Posteriormente se hace un análisis socio económico de los ingresos de los

pescadores, a partir de la implementación de la Reserva de la Biosfera. La evolución o


3

crecimiento de las sociedades cooperativas de pescadores ribereños, del número de socios y

embarcaciones menores, la generación de ingresos, costos de producción y el producto

interno bruto de la población de pescadores ribereños. Además, de que se analizaron

aspectos sociales como la migración, edad de los pescadores, tiempo de estar trabajando en

la pesca, y su interés en y de los beneficios de la Reserva.

Se continua con un análisis de los beneficios ambientales que ha traído consigo la

Reserva, del interés de los pescadores sobre alternativas a otras actividades productivas e

iniciar con una propuesta de manejo para el Refugio de la Vaquita marina, tratando de

ubicar desde un punto de vista más social, que factor determinante en la conservación de un

ecosistema y sus especies puede ser compartido con los habitantes del lugar y se busquen

soluciones que lleven a la sustentabilidad de sus actividades y con ello minimicen sus

necesidades económicas.

Por último, se hace una recopilación y análisis de lo que ha sido la investigación en

la biología, el cuidado del medio natural que suceden en esa parte del país, haciendo una

recopilación de los sucesos y actividades que se han estado llevado a cabo por organismos

gubernamentales y sociedad civil para el cuidado y protección de éste cetáceo dentro de la

Reserva de la Biosfera y del polígono. Se proponen algunas alternativas ambientales como

económicas para disminuir el esfuerzo pesquero en la región y cuidado de las especies en

peligro de extinción.

I.2 El Golfo de California

El Golfo de California es uno de los mares interiores más productivos del mundo.

Su localización morfológica y oceanográfica esta delimitado por la península de Baja


4

California y el macizo continental al noroeste de México, que favorecen el desarrollo de

una riqueza biológica y social (Cisneros, 2001). Cubre 282,000 km2 de ambiente marino y

costero, circundado por los estados de Baja California, Baja California Sur, Sonora, Sinaloa

y Nayarit (CSGC, 2004). Presenta una alta productividad biológica gracias a la gran

cantidad de nutrientes que surgen de sus aguas profundas (Casas y Ponce, 1996; Anónimo,

2005).

El Golfo de California ha sido dividido por varios autores, según sus características

ecológicas, biológicas, físicas y oceanográficas, y en distintas regiones o provincias

considerando las comunidades de especies marinas (Brusca y Wallerstein, 1979; Badán-

Dangón et al. 1985; Briton et al. 1986; Gaxiola-Castro et al. 1999). No obstante su

importancia, se conoce poco sobre sus funciones ecológicas y su relación con los procesos

socioeconómicos que determinan los estándares de vida de las comunidades (Enríquez-

Andrade, 2005). Esta región presenta una gran diversidad de grupos humanos asentados a

lo largo de la franja costera en campos pesqueros, ejidos, comunidades, puertos y ciudades,

que constituyen un extenso universo cultural y social (Cisneros, 2001), radicando de esa

manera su importancia social y económica con respecto al manejo de los recursos naturales.

La diversidad de organismos marinos hace del Golfo de California la región

pesquera más importante de México. Ahí se descargan la mitad de las capturas pesqueras

totales con 650 lugares de desembarco a través de embarcaciones mayores, y/o

embarcaciones menores o pangas. Estas últimas embarcaciones contribuyen con el 20% de

la captura nacional y con una generación de 150,000 empleos tanto directos como

indirectos (Cisneros, 2001; SAGARPA, 2002).


5

I.3 El Alto Golfo de California

El Alto Golfo de California, es una de las cuatro regiones establecidas por sus

condiciones especiales. Es clasificado por sus características hidrográficas al presentar una

plataforma somera (≤ 30m) con una topografía irregular, con una serie de canales y bajos

(Álvarez Borrego, et al, 1978), y un comportamiento anti-estuarino (Lavín et al. 1998), ya

que la salinidad decrece hacia la boca del Río Colorado (Lavín y Sánchez, 1999). Las

descargas del Río Colorado satisfacían algunas de las necesidades de los ecosistemas

terrestres y marinos (Cortez, 2004), pero al ser modificado por la disminución de las

descargas de agua dulce debido al gran número de presas o embalses a lo largo del Río

Colorado, han afectando las poblaciones de peces, invertebrados y mamíferos marinos al

alterarse los procesos ecológicos en la zona marina costera (Álvarez Borrego, 2001, 2003).

Estudios demuestran que la región del Delta es un refugio para especies amenazadas y en

peligro de extinción que ya no hay en la cuenca del Río Colorado (Glenn et al. 1996).

En 1935, el flujo de agua dulce del Río Colorado era de casi 500 m3/s, de la cual el

59% del agua dulce llegaba al GC (Brownell, 1982, 1986; Lavín y Sánchez, 1999). La

reducción del agua modificó las condiciones ambientales de la región reduciendo la

cantidad de nutrientes y el área inundada provenientes del Río Colorado afectando el ciclo

de vida de las comunidades acuáticas y el crecimiento de las poblaciones de ciertas especies

consideradas en peligro de extinción, como la totoaba y vaquita marina (Vidal, 1995;

Fleisher, 1996). La salinidad en la desembocadura es de 38 ups disminuyendo hasta 35.4

ups en la región oceánica, prevaleciendo una condición antiestuarina (Álvarez-Borrego et

al., 1975; Nieto-García, 1998; Lavín y Sánchez, 1999).


6

Durante los eventos de El Niño se incrementan las precipitaciones y flujos del Río

Colorado hacia la desembocadura en el Alto Golfo de California, aumentando el aporte de

nutrientes y el área inundada en el ecosistema marino (Kahya y Dracup 1996; Cortez,

2004), se incrementa la temperatura del agua, provocando un desfase de las épocas de

desove de varias especies de organismos acuáticos (Aragón –Noriega, 2000).

Varias pesquerías han sufrido un cambio importante en sus niveles de captura

debido al esfuerzo pesquero y a la modificación de su medio natural, pero no todas estas

pesquerías presentan cambios por la variación en los flujos de agua dulce hacia el Alto

Golfo de California, ya que existe una distribución homogénea de postlarvas de diferentes

organismos en toda el área del Alto Golfo de California, Delta del Río Colorado y zona

litoral (Castillo-Moreno, 1999; Aragón-Noriega y García-Juárez, 2002).

En el Alto Golfo de California actividades económicas que generan ingresos

importantes como la pesca, turismo y acuacultura influyen en el desarrollo de toda la región

(Enríquez-Andrade et al. 2005). Estas actividades se han modificado durante el tiempo

debido al creciente esfuerzo pesquero que se realiza en la zona y a los cambios hidrológicos

que han sucedido (Rojas-Bracho y Taylor, 1999, Álvarez-Borrego, 2003). La explotación

excesiva de ciertas especies por cooperativas y particulares disminuyó con la entrada en

vigor de la Reserva en 1993 y del Refugio de la Vaquita en el 2005 (Greenberg, 2005).

El impacto antropogénico en el Alto Golfo de California es mínimo, pero esto no

quiere decir que la región no esté libre de problemas ambientales, debido a una pesca mal

planificada asociada a una degradación excesiva de los ecosistemas provocado por el

acelerado crecimiento de las ciudades y comunidades rurales de la zona (Cárdenas-Torres,

2001).
7

I. 4 Políticas de manejo ambiental y áreas marinas protegidas

La creación de áreas marinas protegidas predisponen un beneficio para la pesca de

aquellas regiones donde se implementan debido a que hay una migración de organismos

adultos y juveniles a estos lugares, y por la exportación de huevos y larvas fuera de las

reservas (Gell y Roberts, 2003; Mous et al. 2005), y esta debidamente comprobado que

dentro de las reservas las poblaciones aumentan en tamaño y los organismos viven más

tiempo aumentando su capacidad reproductiva (Bohnsack, 1998).

Se ha observado que una adecuada planeación de las reservas marinas tiene como

resultado una pesquería sana, mejora las capturas e incrementa la sustentabilidad de los

recursos pesqueros (Agardy et al. 2003; Gell y Roberts, 2003; Gelcich et al. 2005). Existen

varios ejemplos donde se reportan incrementos de la pesca en zonas protegidas marinas,

teniendo los casos del Sargo Romano, Chrysoblsphus laticeps, en el Parque Nacional de

Tsitsikamma de Sudáfrica (Buxton y Smale, 1989); la almeja, Pinna nobilis, en la Reserva

Marina de Tabarca en España (Sanchez-Lizaso, 2001); peces coralinos en las Islas Apo de

las Filipinas (Russ y Alcalá, 1996); el pargo, Pagrus auratus, el bacalao, Parapercis colias,

y la langosta espinosa de la reserva Long Island-Kokomohua en Nueva Zelanda (Davidson,

2001; Kelly et al. 2002), entre otros. Pero estas áreas de reserva no han resuelto del todo los

problemas en el manejo de las pesquerías, sobre todo en especies que tienen una alta

movilidad (Hilborn et al. 2004).

La teoría y práctica del manejo de las áreas marinas protegidas establece ciertos

puntos para su funcionamiento: el lugar donde se establecen, la forma de ser administrados,

sus límites territoriales, y el cumplimiento de sus objetivos y evaluación en su manejo. Pero


8

el reto más importante es el como empatar su manejo con los factores externos que la

rodean como los son los cambios ecológicos, sociales, económicos y políticos del que

forman parte. Las áreas costeras son el hogar de mas de la mitad de la población en el

mundo y en se llevan a cabo actividades como turismo de playa, comercio y actividades

relacionados con la extracción de hidrocarburos (Cicin-Sain y Belfote, 2005). El

establecimiento de estas zonas debe ser acompañada por una serie de acciones regulatorias

para la protección del medio ambiente dentro de las fronteras sin ignorar aquellos factores

externos que ejercen presión sobre el área protegida (Ortiz-Lozano et al. 2007).

A partir de 1992, en el Consejo Internacional de la Tierra, auspiciado por la

Conferencia de las Naciones Unidas para el Desarrollo y Medio Ambiente, se unifican los

criterios de manejo integrado y protección a las zonas costeras y oceánicas con el

establecimiento y manejo de áreas naturales protegidas, a través de la promoción del

desarrollo sustentable de las zonas adyacentes a las áreas naturales protegidas, la

conservación y uso sustentable de los recursos biológicos dentro de los planes, programas y

políticas de manejo en cada uno de los países, con la cooperación entre autoridades

gubernamentales y sociedad civil para desarrollar la metodología en el uso sustentable de

los recursos naturales en las áreas a proteger, enfocándose en objetivos basados en criterios

científicos, económicos, éticos y culturales (Jones, 1994; Cicin-Sain y Belfote, 2005).

El establecimiento de un área marina protegida en una región donde el medio

natural ha sido alterado y con condiciones de que han sido explotado por mucho tiempo sus

recursos, hace necesario observar que beneficios pueden tener y su impacto de los

habitantes de SF en Baja California, y el GSC y PP en Sonora, que colindan con la Reserva

de la Biosfera del Alto Golfo de California.


9

La política ambiental en México en áreas naturales protegidas se dirige a través del

Sistema Nacional de Áreas Protegidas (SINAP). El artículo 46 de la Ley General del

Equilibrio Ecológico y la Protección del Ambiente (LGEEPA, 1988), define a las Áreas

Naturales Protegidas (ANP) como “porciones terrestres o acuáticas del territorio nacional

representativas de los diversos ecosistemas, en donde el ambiente original no ha sido

esencialmente alterado y que producen beneficios ecológicos cada vez más reconocidos y

valorados” (FFE, 1996; Figura 1).

Las ANP son sitios importantes para la subsistencia de aquellos grupos o

comunidades que la habitan. En ellas se promueven proyectos que ayuden a incrementar el

nivel de vida de sus habitantes de manera sustentable, garantizando un aprovechamiento

adecuado de los recursos naturales, el respeto a la tenencia de la tierra y la participación

conjunta de las comunidades en su manejo ANP (LGEEPA, 1988).

Figura 1. Áreas protegidas a nivel nacional.


10

Uno de estos casos de ANP, son las Reservas de la Biosfera, que son “áreas

representativas de uno o más ecosistemas no alterados por la acción del ser humano o que

requieran ser preservados y restaurados, en las cuales habitan especies representativas de la

biodiversidad nacional”, incluyendo a las consideradas endémicas, amenazadas o en peligro

de extincióna.

En esta estructura de ANP, el Golfo de California con una superficie de 15000 km2,

presenta varios ecosistemas únicos con una gran variedad de especies acuáticas entre peces,

invertebrados, aves y mamíferos (Grande- Vidal, 1983). Toda esta variedad le da un

potencial económico para desarrollar distintas actividades que pueden alternarse con la

pesca que es la principal actividad de la región (Hendricks, 1985).

La sustentabilidad y conservación del AGC va más allá del cuidado y manejo de los

recursos naturales a proteger, se basa en atender los problemas humanos creados a lo largo

de los momentos políticos, sociales y económicos que se han querido atender durante los

últimos tiempos (Ludwing et al. 1993), teniendo un beneficio directo y permanente al

desarrollo de las comunidades (Danemann, 2005; Greenberg, 2005), cuidando los valores

sociales y culturales que conforman estas poblaciones (Feick, 1996), y así delinear

alternativas y políticas bien definidas para el manejo de los recursos naturales con un

arraigo comunitario (Sewell, 1973).

I.5 Reserva de la Biosfera del Alto Golfo de California

El 10 de junio de 1993 se declara área natural protegida con carácter de Reserva de

la Biosfera, la región conocida como “Alto Golfo de California y Delta del Río Colorado”

a
www.conanp.gob.mx, 06 de diciembre del 2005.
11

ubicada en aguas del Golfo de California y entre los Municipios de Mexicali, en el estado

de Baja California, y Puerto Peñasco y de San Luís Río Colorado, en el estado de Sonora.

Con una superficie total de 934,756-25-00 has, integrada por una zona núcleo denominada

“Delta del Río Colorado” con una superficie de 164,779-75-00 has, y una zona de

amortiguamiento con superficie de 769,976-50-00 has (Figura 3).

El aspecto físico de la Reserva es de una provincia fisiográfica del desierto

Sonorense. Los hábitats presentes en esta área reúnen características únicas, como son los

hábitats remanentes del antiguo Delta del Río Colorado, las ciénagas y los afloramientos de

agua dulce en la franja costera. Incluye zonas de hibernación y descanso de aves

migratorias, y zonas marinas de alta producción primaria; además de que incluye tipos de

vegetación de gran valor por su biodiversidad. La tenencia de la tierra está conformada por

propiedad federal, terrenos ejidales, terrenos del estado de Sonora y una pequeña porción

de terrenos privados (Morales Abril, 1993).

La Reserva presenta cinco ecosistemas: zona de bajos, esteros, la Ciénega de Santa

Clara, los canales de la desembocadura del Río Colorado y el desierto. En ella confluyen

tres sistemas ambientales: marino, costero y terrestre, con un alto nivel de ocurrencia de

flora y fauna, poco deterioro y un alto potencial de conservación. Existe un desarrollo

continuo y sostenido de las actividades económicas, sociales y culturales de las

comunidades del lugar.


12

Figura 2. Limites de la Reserva de la Biosfera del Alto Golfo de California

Su biodiversidad y elevada productividad ha sido sujeta de varias declaratorias para

su protección, ubicándola como un área trascendente en la reproducción, crianza y

desarrollo de especies marinas como terrestres endémicas que están consideradas en peligro

de extinción (Álvarez-Borrego, 1983; Cisneros Mata et al., 1995; Aragón Noriega y García

Juárez, 2002), como lo son la totoaba Totoaba macdonaldi, la vaquita marina, el pez pupo

del desierto o Cyprinodon macularius macularius, y el ave palmoteador de Yuma Rallus

longisrostris yumanensis, que han venido disminuyendo su población año tras año, debido

al mal manejo de los recursos naturales (VaquitaMarina, 2008; De Groot et al. 2002;

D´Ágrosa et al. 2000; Cisneros-Mata et al. 1995). Los humedales e islas del delta

proporcionan refugio y hábitat para un gran número de aves migratorias y residentes. La

Reserva también procura la sustentabilidad con una pesca responsable de aquellas especies

de interés comercial por parte de los pescadores de esa región (Cudney y Turk, 1998).
13

I.6 Refugio de la Vaquita Marina.

En diciembre del 2005, se publicó en el Diario Oficial de la Federación el Programa

de Protección de la Vaquita dentro del Área de Refugio ubicada en la porción occidental

del Alto Golfo de California (Figura 3). El decreto considera la participación social como

eje importante para disminuir los factores de riesgo que han llevado a la vaquita a ser una

especie considerada en peligro de extinción, sin que se vea afectado el bienestar de las

comunidades que llevan actividades productivas en el área de refugio.

El área de refugio comprende una superficie de 1,263.85 km2, frente a las costas del

estado de Baja California y se divide en dos polígonos: el polígono A que se encuentra

dentro de la Reserva de la Biosfera con una superficie de 897.09 km2, y el polígono B, que

esta fuera de la Reserva con una superficie de 366.76 km2. En el Refugio se prohíbe el uso

de redes con luz de enmalle de 6 pulgadas o más. Se elimina la práctica de la pesca de

forma pasiva y que la red quede por debajo del agua más de 30 minutos. Se restringe el uso

de redes de arrastre alrededor del polígono y se establece un tamaño mínimo de largo para

el chinchorro utilizado para el camarón. Se limita el esfuerzo pesquero a 162

embarcaciones de altura, y no se determina el número de embarcaciones menores.

Contemplaba una serie de medidas que coadyuvan a disminuir el impacto

económico que la reserva pudiera generar al disminuir la actividad pesquera con la creación

de actividades económicas alternativas, apoyándose en un ordenamiento pesquero realizado

por la CONAPESCA con el apoyo de los gobiernos de los estados de Baja California y

Sonora, en beneficio de las comunidades del lugar. El Programa trata de disminuir los

problemas ambientales de la interacción económico-social con el ecológico, suscritos en


14

una interdependencia, que al acoplarse pueden desarrollar un vínculo de beneficio mutuo

(Gamarra, 2002).

115º 114º 113º

Co
BCN USA
North

l
or
32º

ad
32º

o
Ri
ve
Sonora

Gu
Santa Clara

lf o
fC
alifo
rnia

S
Gore Island

in
BCS

al
oa
Pacific
Ocean

Puerto
Peñasco

Vaquita
Protection
Area

San Felipe
31º 31º
N Latitude

Gulf of
California

115º 114º 113º


W Longitude

Figura 3. Ubicación del área de refugio de la vaquita marina en el Alto Golfo de California.

I.7 Organizaciones sociales y gubernamentales

El crecimiento de las actividades económicas y la demanda de espacios para el

desarrollo y crecimiento de las comunidades en la región ha despertado un interés por parte

de las organizaciones sociales de carácter ambientalista, como de los tres niveles de

gobierno, para desarrollar, ejecutar e implementar planes y programas en la región que

coadyuven a un desarrollo armoniosa con su entorno de manera sustentable.

Estos grupos, y cada uno en su especialidad, realizan y complementan estudios que

beneficien y conlleven a un buen manejo de los recursos naturales evaluando el valor

económico que pueda tener el capital natural, representado en los bienes y servicios
15

ecológicos, para la conservación de los recursos marinos y costeros, encaminadas a apoyar

decisiones y políticas de desarrollo sustentable, así como, la diversificación de las

actividades económicas que se demandan para elevar la calidad de vida de las comunidades

de la Reserva de la Biosfera del Alto Golfo de California (Enríquez-Andrade, 2005).

Estrategias de desarrollo aportadas por las organizaciones no gubernamentales

(ONG’s), como los centros de enseñanza superior que han contribuido a planificar e

instrumentar el conocimiento adquirido de la región para dar propuestas de manejo de la

Reserva (Enríquez-Andrade, 2005).

Un trabajo integrado entre las ONG´s, pescadores y gobierno permitirá establecer

los programas y políticas de desarrollo para las comunidades asentadas dentro y alrededor

de la Reserva, y así fomentar el crecimiento económico armónico con el medio natural,

haciendo un uso responsable de los recursos naturales, bajo los lineamientos establecidos

por las diferentes dependencias de gobierno federal y estatal.

1.8 Objetivo general

Conocer de que manera ha impacto la creación de la Reserva de la Biosfera del Alto

Golfo de California y Delta del Río Colorado en el desarrollo económico y social de los

pescadores ribereños de San Felipe, Baja California, Golfo de Santa Clara y Puerto

Peñasco, Sonora.
16

I.9 Hipótesis

La creación de la Reserva de la Biosfera del Alto Golfo de California y Delta del

Río Colorado ha propiciado un impacto positivo en el desarrollo de los pescadores

ribereños de San Felipe, Baja California, Golfo de Santa Clara y Puerto Peñasco, Sonora.

I.10 Metodología general

Para alcanzar los objetivos del proyecto, las actividades se orientaron a reunir información

de avisos de arribo e información socioeconómica de los pescadores. Se realizó una

integración de la información de las pesquerías ribereñas en las comunidades de SF, Baja

California, el GSC y PP, Sonora. A través de encuestas a los pescadores de estas

comunidades, se elaboró un sistema de información con la ubicación geográfica de las

zonas de captura, la cual se apoyo con un posicionador geográfico (etrex-garmin®) y los

puntos de referencia (lugares de conocidos) mencionados por parte de los pescadores. Por

separado en un mapa de la región se sobre puso la información en las ÁNP, donde se

calculo el porcentaje de incidencia de la pesca en lugar, a través del uso del software Arc

View 3.2 y se proyectaron en un mapa a través del software Lambert Cónica del año 2002.

Se obtuvo información estadística contenida en los avisos de arribo de

embarcaciones menores encada una de las oficinas locales de pesca (Forma ROP-02)b. La

información de los avisos de arribo se capturó en hojas de cálculo del programa Excel.

Además, se consultó y sistematizó la información contemplada en los anuarios de INEGI,

para indicadores demográficos y socioeconómicos. Las variables obtenidas de la pesquería

b
El Aviso de Arribo reporta los volúmenes de captura obtenidos durante una jornada de trabajo o viaje de
pesca, además de incluir datos sobre el precio de playa, lugar de captura, entre otros.
17

de unidad de esfuerzo (CPUE), peso, estación y especie, que se evaluó por medias o

estadística no paramétrica. Todos los análisis se realizaron a un nivel de significancia de =

0.05.

Se aplicó una encuesta, cuyo propósito era enfatizar la opinión de los pescadores en

torno a si la Reserva había significado un cambio importante en materia pesquera,

económica y ambiental. Entre los aspectos considerados en la encuesta se encuentran el

valor de la pesca, los gastos ejercidos, características de la población (si son nativos o

migrantes) y sobre todo si en su opinión, la ANP les ha traído beneficios o noc. Se aplicaron

en los sitios de reunión de los pescadores: La gasolinera, sitios de descarga y sitios para

zarpar. La encuesta contenía un total de 48 preguntas cerradas, integradas en cinco

apartados y un mapa, en el cual el encuestado señalaba áreas de pesca.

Para obtener el tamaño de muestra se utilizó el método propuesto por Cochran

(1989) y así obtener el número de pescadores a entrevistar:


(1) Donde:
Z 2q n= Tamaño de muestra;
E 2p
n= Z= CI=95%;
1 ⎡ Z 2q − 1⎤ p & q = Distribución de la ecuación;
1+ ⎢
N ⎣ E 2 p ⎥⎦ E= 6% Nivel de precisión;
N= Tamaño de las comunidades pesqueras.

Se aplicaron 172 encuestas a pescadores de cooperativas, grupos solidarios,

sociedades y libres, seleccionados en un muestreo aleatorio simple. La muestra representa

aproximadamente el 10% del Registro Nacional Pesquero de cada comunidad. Las

encuestas fueron capturadas y procesadas en el paquete estadístico SPSS (Statistical

c
La referencia metodológica para formular este instrumento fue tomada de Greenberg (1993b) mismo que hizo algo
parecido para las tres comunidades ubicadas dentro de la RBAGCDRC.
18

Package of Social Science) por sus siglas en inglés, versión 10.0. Los encuestados fueron

mayores de 15 años, con una residencia de cinco años antes de la entrada de la declaratoria

de la Reserva de la Biosfera. 61 encuestas se aplicaron a pescadores ribereños de la

comunidad de GSC, 28 a los de PP, Sonora y 83 en SF, Baja California.

Pesca en el AGC

Puerto Golfo de Santa


San Felipe, BC Peñasco, Son Clara, Son

Método muestreo

Captura de Encuesta
información

Gobierno
INEGI Oficnas de pesca Pescadores
de los
Estatados

Variables Evaluación

Volúmen, Ubicación pesca en mapas,


embarcaciones, temporalidad pesca,
cooperativas, pesca por año,
lugar de captura, valor de captura,
precio de playa, inversión,
.
variables sociales y egresos,
ambientales. migración,
edad,
tiempo residencia,
alternativas de trabajo,
impacto de la reserva.

Figura 4. Diagrama de Flujo de las actividades desarrolladas para analizar la actividad


pesquera en el Alto Golfo de California.
19

Capítulo II

La pesca en el Alto Golfo de California y el Refugio de la Vaquita marina.

II.1 Introducción

El Golfo de California es la región de pesca más importante de México. Ocupa a un

gran número de personas y empresas impactando de manera positiva al noroeste del país.

Gran cantidad de especies son capturadas en las costas de Baja California, Baja California

Sur, Nayarit, Sinaloa y Sonora, siendo los dos últimos estados los que más ingresos generan

en la pesquería. La ubicación de los estos estados como la extensión de sus costas ofrecen

ventajas para la explotación de muchos recursos marinos (Figura 5).

Figura5 Localización del Golfo de California


20

Para el año 2002, en la región existían alrededor de 106,000 embarcaciones, con

∼3,600 embarcaciones mayores para la captura de cinco especies, y ∼102,000

embarcaciones menores (SAGARPA, 2002). Además, la pesca no solo se limita a la

captura, sino que además, se comercializa, separa y congelan todos estos productos para su

distribución al mercado regional, nacional y de exportación (Tabla I).

Tabla I. Embarcaciones registradas por principales pesquerías y producción total en


toneladas según litoral y entidad federativa en el 2002.

T EMB PA CAMARÓN ATÚN SAR-ANC ESCAMA PR T PROD


Total 106,434 3,627 2,412 132 91 992 102,807 1,354,897
LP 58,476 2,064 1,674 102 91 197 56,412 1,056,422
BC 1,842 233 43 62 24 104 1,609 104,352
BCS 3,696 63 28 1 7 27 3,633 141,439
SON 7,925 691 625 2 50 14 7,234 447,353
SIN 12,668 840 776 30 10 24 11,828 233,468
NAY 4,470 28 20 - - 8 4,442 18,644
Fuente: Anuario estadístico de pesca, 2003. LP: Litoral del pacífico, BC: Baja California, BCS: Baja
California Sur, SON: Sonora, SIN: Sinaloa, NAY: Nayarit, T.EMB: Total embarcaciones, PA: Embarcaciones
de altura, SAR-ANC: Sardina-anchoveta, PR: Embarcaciones ribereñas, T.PROD: Total producción.

Las sociedades cooperativas pesqueras registradas en la región se especializan por el

tipo de especies a explotar, de la cual, el número de socios, equipo y embarcación varia

(SAGARPA, 2002; Tabla II). En la región del pacífico hay más de 2000 embarcaciones

mayores, de las cuales ∼500 embarcaciones están en los estados de Baja California y

Sonora, y de estas, alrededor 180 se encuentran en el Alto Golfo de California, en las

poblaciones de Puerto Peñasco (PP) en Sonora y San Felipe (SF) en Baja California.
21

Tabla II. Sociedades cooperativas de producción pesquera registradas por tipo de actividad.
Según litoral y entidad federativa, 2002 (Número de Cooperativas)

Total Alta Ribera2 Alta Dulces1 Acuícolas Turísticos Deportiva Industriales


mar2 mar1
Total 2,976 483 1,685 113 415 180 28 58 14
LP 2,129 330 1,267 65 223 164 20 50 10
BC 76 41 23 7 2 2 1
BCS 154 8 117 17 1 2 7 2
SON 421 73 276 27 15 26 4
SIN 695 107 364 5 89 123 2 5
NAY 107 29 57 8 2 1 9 1
1
Servicios; 2Pesca

La diversidad de la estructura social en el Golfo de California, permite el desarrollo

de una diversidad de actividades económicas y que no solamente el sector pesquero sea el

principal detonante de crecimiento de las comunidades costeras. La región por estar en un

sistema único por su clima y diversidad biológica es un atractivo para el desarrollo de otras

actividades que contribuyen a moldear la fisonomía de la región, y su organización será

importante para influir en las decisiones que se tomen sobre el manejo de los recursos

económicos, políticos, sociales y en especial ambientales, a los que cada sector de esas

comunidades o sociedades quiere tener acceso (Doode-Matsumoto y Wong-González,

2001).

II.2 La Reserva de la Biosfera y la pesca del Alto Golfo de California.

Por las características climáticas de la región del Alto Golfo De California, la única

actividad primaria es la pesca, y una cada vez más, parte de la población económicamente

activa se dedica al turismo o comercio (Greenberg, 2005). La pesca comercial en el Alto

Golfo de California es de dos tipos: artesanal e industrial. La pesca artesanal se realiza en

embarcaciones (pangas) de 7 m de largo, con motor fuera de borda y dos tripulantes; no se


22

utiliza maquinaria para desplegar o recobrar las artes de pesca. La pesca industrial se

realiza en barcos de casco de acero, de cinco tripulantes mínimo, con maquinaria para

operar las artes de pesca (Cisneros, 2001).

La pesca artesanal del Alto Golfo de California es realizada por cooperativas y

particulares de PP y El Golfo de Santa Clara (GSC), Sonora y en SF, Baja California. La

actividad pesquera se desarrolló desde principios del siglo XX con la pesca de totoaba

(Totoaba macdonaldi), y a partir de 1950 con la pesca del camarón; desde entonces, es la

fuente de ingresos más importante para las tres comunidades pesqueras del Alto Golfo de

California. Con el paso del tiempo se desarrollaron otras pesquerías como la del tiburón,

rayas, chano, curvina, roncacho, sierra, y moluscos. Actualmente, fuera de la temporada de

captura del camarón (septiembre a marzo), los grupos de pescadores se especializan por

producto o especie. En consecuencia, el número de pescadores activos y equipos de pesca

varían según la temporada de captura durante el año (Cudney y Turk, 1998).

Dentro de la Reserva del Alto Golfo sobresalen dos especies que destacan, una por

su volumen de captura, y la otra por su precio. Son el caso, de la curvina “golfina”,

Cynoscion othonopterus, especie migratoria que se captura cuando arriba a la zona en

grandes cardúmenes a desovar al Delta del Río Colorado, y el camarón azul, Litopenaeus

stylitrostris, que se caracteriza por su alto valor económico en los mercado nacional e

internacional (Cudney y Turk, 1998; Tabla III).


23

Tabla III. Volumen, precio y valor de la captura de las principales especies capturadas en el
año en el Alto Golfo de California durante el año 2004. Precio en pesos.

Especie Corvina Sierra Chano Camarón Manta Tiburón Otras Total


Volumen 2,365,980 592,957 919,544 516,950 215,257 31,511 219,765 4,862,064
Precio kilo 12.23 9.84 4.25 125.25 8.35 11.08 13.99
Valor
captura 28,935,935 5,834,697 3,908,062 64,747,988 1,797,396 349,142 3,074,512 108,647,732
Fuente: Elaboración a partir de los avisos de arribo proporcionados por la Oficina de Pesca de SAGARPA.

Cada comunidad desarrolla su actividad de manera indistinta estableciendo sus

áreas de captura, temporadas y estrategias para salir capturar, dependiendo de se encuentre

el producto a extraer para abastecer la demanda de pescado fresco y otros organismos en

los sectores y zonas donde comercializan sus excedentes.

II.3 Objetivo

Analizar el comportamiento de la pesca ribereña dentro de la Reserva de la Biosfera del

Alto Golfo de California y Delta del Río Colorado y del Refugio de la Vaquita marina con

el énfasis de establecer una zona de no pesca en ella.

II.4 Metodología

Para alcanzar los objetivos del proyecto, las actividades se orientaron a reunir información

de avisos de arribo e información socioeconómica de los pescadores. Se realizó una

integración de la información de las pesquerías ribereñas en las comunidades de SF, Baja

California, el GSC y PP, Sonora.

Las especies consideradas por su importancia económica fueron: camarón, curvina,

sierra, eslamobranquios y chano, para la cual se les ubicó su lugar de captura por separado
24

en un mapa de la región sobre poniendo la información al polígono del área de refugio de la

vaquita, donde se calculo el porcentaje de incidencia de la pesca en lugar.

La información de los avisos, de arribo se obtuvo en las Oficinas de Pesca en las

comunidades mencionadas, con el objetivo de capturar la información estadística contenida

de los avisos de arribo de las embarcaciones menores, sus resúmenes mensuales de ingresos

para los años de 1993 al 2007. La información de los avisos de arribo se capturó en hojas

de cálculo del programa Excel. La base datos registró los avisos de arribo con la siguiente

información: número de folio, fecha, permisionario, número de embarcaciones, lugar de

captura, días efectivos de pesca, especie, peso en kilos, precio por kilo (pesos). Es propio

aclarar que se trabajó con la información oficial registrada en las oficinas de pesca, la cual

tiene un sesgo no calculado debido a que la mayoría de los pescadores se quedan con parte

de la captura, y que no entregan a la cooperativa a que pertenecen, para consumo propio o

su venta a otro consumidor final.

II.5 Resultados

II.5.1 Pescadores y artes de pesca

En la tabla IV se presenta el número de embarcaciones registradas oficialmente por

comunidad con un número superior a las 2100 lanchas. El GSC tiene el mayor número de

embarcaciones. Dos pesquerías concentran el mayor esfuerzo de pesca autorizado: camarón

con 606 pangas y peces de escama (curvina, chano, sierra, tiburón y rayas) con 882 pangas.

Respecto al número de persmisos, PP y el GSC tienen el mismo número de

permisionarios con 76 permisos. Los pescadores de SF son los que menos permisos tienen

con 47. Los pescadores de SF y PP tienen permiso para pescar la mayoría de las especies
25

que se encuentran en la zona. En cambio los de El GSC tienen permiso para 5 de los 8

grupos de pesquerías que se pescan en la región.

Tabla IV. Permisionarios y embarcaciones autorizados para la flota ribereña en el Alto


Golfo de California.

San Felipe Santa Clara Puerto Peñasco


Permisionario Pangas Permisionario Pangas Permisionario Pangas
Calamar 1 4
Camarón 17 318 31 232 3 56
Caracol 1 1 5 42
Escama 20 295 34 412 24 175
Jaiba 3 11 7 39 27 229
Lisa 1 10 2 76 2 8
Pulpo 2 2 5 40
Tiburón 3 10 2 26 9 69
Fuente: Oficina de Pesca en cada una de las comunidades en el Alto Golfo de California

La actividad pesquera que se realiza sobre las especies comerciales dentro de la

Reserva del Alto Golfo de California y Delta del Río Colorado es constante, y varía su

esfuerzo dependiendo de la especie y de la temporada de captura (Tabla V). En la

temporada de camarón más del 90 % de los pescadores se dedican exclusivamente a su

captura. A partir del mes de febrero, el esfuerzo pesquero se diversifica sobre otras

especies. Durante febrero y marzo se inicia la temporada de curvina, misma que en abril se

alterna con sierra y chano. Para junio la sierra y el tiburón son las especies preponderantes.

En los meses de julio y agosto la actividad pesquera es prácticamente nula.


26

Tabla V. Por ciento de las capturas mensuales de las principales especies comerciales en el
Alto Golfo de California.

Mes
Especies Ene. Feb. Mar. Abr. May. Jun. Jul. Ago. Sep. Oct. Nov. Dic.
Camarón 11% 7% 21% 21% 21% 19%
Chano 8% 16% 37% 29% 8% 3%
Sierra 19% 31% 29% 15 4% 2%
Curvina 32% 36% 21% 7% 4%
Tiburón 18% 10% 59% 12% 1%
Fuente: Encuestas realizadas a los pescadores del Alto Golfo de California.

En lo que se refiere a las artes de pesca, los pescadores encuestados dieron datos

sobre los equipo-redes, cantidad, luz de malla longitud y caída-altura. Los resultados

indican que en la pesquería del camarón, el 93.3 % de los pescadores utilizan chinchorro.

De estos, el 85 % señaló utilizar artes de pesca con luz de malla 2 ¾; en cuanto a la

longitud de las artes de pesca para la captura de camarón, el 60 % de las artes de pesca

tienen una longitud que varía entre los 600 a 999 metros. En cuanto a la altura de las redes,

el 65 por ciento de los encuestados tienen redes de 75 mallas de altura (Tabla VI).

Tabla VI. Longitud y altura de las redes de enmalle usadas por los pescadores del Alto
Golfo de California.

Pesquería Longitud (metros) Altura


100 300 600 1000
a a a a 25 50 70 75 80 85 100 150
299 599 999 1500
% % % % % % % % % % % %
Camarón 20 11.8 60 8.2 1.7 3.3 65 1.7 5 16.7
Chano 20 40 30 10 14 43 21 7 14
Sierra 29 15 44 5 11 22 4 41 4
Rayas 100 50 50
Tiburón 50 50
Curvina 56 32 11 88 12
Fuente: Encuentas realizadas a los pescadores en el Alto Golfo de California.

En la tabla VII se presentan los datos de las artes usadas en la pesquería de la

curvina. El 100 % de los pescadores utilizan el chinchorro, de estos el 88 % utilizan redes


27

con malla 6 pulgadas. También se observan los datos de las artes usadas en la captura de

chano, sierra, tiburón y raya.

Tabla VII. Redes y tamaño de abertura usados por los pescadores en las principales
pesquerías del Alto Golfo de California.

Pesquería red Tamaño abertura


2 3 3
Chinchorro Red de línea 3 4 5 6 7 8
¾ ½ ¼
% % % % % % % % % % %
Camarón 93.3 1.7 85 5.7 5
Chano 44 37 63
Sierra 68 44 12 12 12 4 12
Rayas 44 11 25 25 50
Tíburón 10 50 50
Curvina 100 12 88
Fuente: Encuestas realizadas a los pescadores del Alto Golfo de California.

II.5.2 La pesca en el Alto Golfo de California de 1995 al 2007.

La pesca en el Alto Golfo de California ha variado cada año, y estas variaciones

surgen de manera directa con la entrada en vigor de la Reserva de la Biosfera del Alto

Golfo de California y Delta del Río Colorado (RBAGCDRC).

Como se puede observar en la tabla VIII, el camarón, curvina, chano y sierra son los

recursos capturados en mayor volumen por los pescadores de SF y GSC, debido a la

cercanía a sus comunidades. La manta y tiburón son pescados en grandes volúmenes por

los pescadores de PP.

La captura del camarón, curvina, chano y sierra, muestra una estabilidad en su

captura a lo largo de los años, sin registrar cambios bruscos en los volúmenes de captura en

cada una de las comunidades. De manera particular, las capturas de camarón, son similares

para las poblaciones de SF y GSC, con capturas mayores a las 200t al año.
28

En el caso de la curvina, los pescadores del GSC reportan la mayor captura de las

tres comunidades, en parte debido a la cercanía al área de reproducción de la curvina en la

boca del Río Colorado. Para los pescadores de SF y GSC, la curvina y el chano, son la

mejor alternativa para la pesca fuera de la temporada de camarón, ya que la pesca de estos

organismos sobre pasa por mucho a lo que se captura del camarón. La pesca en PP registra

capturas muy por de bajo en cuatro especies en comparación a los otros dos puertos, pero

en la captura de manta y tiburón, los volúmenes de captura son mayores a los otros dos

puertos.

Viéndolos por especie, en el caso del camarón en PP para lo que va del 2007 la

producción es ∼250% mayor que la obtenida en el 2005. En el GSC, la tendencia se prevé

similar a los años anteriores. Con lo que respecta a la curvina, chano y sierra, la producción

en el GSC es mucho mayor en esos primero semestres que lo producido en todo el año

2005. Estas tendencias demuestran que la cantidad de organismos va en asenso aún del

número de embarcaciones menores en la región.


29

Tabla VIII. Volumen de captura de las principales especies dentro de la Reserva del Alto Golfo de California desde 1995 al 2007
(Toneladas).

Camarón Curvina Chano


SF PP GSC SF PP GSC SF PP GSC
1995 273.06 0.00 230.83 18.78 0.00 564.83 382.93 0.00 510.89
1996 96.46 0.00 87.21 72.21 0.00 281.41 127.97 0.00 1041.34
1997 45.62 0.00 139.66 230.29 0.00 1960.68 1655.34 0.00 687.20
1998 237.35 0.00 240.44 235.05 0.00 2337.23 2018.39 0.00 850.00
1999 156.63 49.44 225.40 219.65 26.76 3342.93 927.83 121.57 963.00
2000 187.96 86.56 173.44 815.58 9.70 2685.72 695.48 57.35 330.13
2001 190.54 85.87 217.48 641.68 8.33 2607.69 577.70 66.59 465.28
2002 350.38 135.54 356.14 918.10 4.13 4296.92 195.77 40.14 360.25
2003 265.44 76.23 206.40 265.49 4.46 2214.79 403.83 36.81 466.08
2004 199.01 22.33 221.63 357.59 13.56 1569.39 480.07 111.94 1072.05
2005 398.85 53.00 278.67 677.29 42.92 1551.94 726.29 86.56 507.64
2006 0.00 31.73 128.76 0.00 7.31 2240.67 0.00 78.22 833.96
2007 0.00 128.76 126.22 0.00 3.75 2608.19 0.00 62.16 703.30

Sierra Manta Tiburón


SF PP GSC SF PP GSC SF PP GSC
1995 44.17 0.00 226.72 34.65 0.00 2.70 66.29 0.00 14.69
1996 86.84 0.00 323.06 87.02 0.00 34.01 94.71 0.00 21.39
1997 54.28 0.00 453.48 171.12 0.00 11.95 53.16 0.00 3.16
1998 16.63 0.00 299.65 111.79 0.00 7.74 49.51 0.00 46.40
1999 52.23 3.93 587.82 111.85 276.50 33.67 96.98 305.82 34.37
2000 186.11 1.08 627.71 238.66 209.33 56.89 144.64 279.16 0.10
2001 86.19 0.00 519.50 212.96 105.92 34.97 62.35 149.71 16.78
2002 39.89 1.88 301.79 170.77 121.54 17.27 45.79 121.09 14.16
2003 40.27 10.67 470.35 179.21 138.28 20.98 40.58 186.10 3.45
2004 41.73 49.24 653.12 234.46 107.22 18.57 20.93 228.76 5.81
2005 94.77 58.35 888.06 244.33 121.11 106.16 24.03 25.85 2.51
2006 0.00 31.59 605.85 0.00 99.46 1.45 0.00 31.59 0.00
2007 0.00 11.38 743.05 0.00 247.18 14.90 0.00 26.82 7.14
30

II.5.3 La pesca de las principales especies en la Reserva de la Biosfera del Alto

Golfo de California y Delta del Río Colorado.

El espacio que se ocupa para realizar esta actividad económica por parte de los

pescadores en la zona del Alto Golfo de California es de 7,444.57 km2, y de ese espacio el

57.09 % se realiza dentro de la Reserva de la Biosfera, es decir, 42501.05 km2 (Figura 6).

La parte marina de la Reserva es altamente explotada durante todo el año y el área

que abarcan los pescadores es del 75.22%. Solamente hay tres zonas donde el esfuerzo

pesquero es mínimo o casi nulo: en la zona núcleo alrededor de la Isla Montague, en la

parte sur occidental frente a la costa de SF, y la parte sur oriental hacia la comunidad de PP

y la bahía de Adahir.

Según los datos recabados, encontramos que la captura de las especies de

crustáceos, escama y eslamobranquios, tienen un impacto directo dentro de la reserva sobre

todo en la parte central de la misma. La comunidad que ejerce mayor impacto sobre la

reserva es la de El GSC, ya que las zonas de captura se encuentran cerca de su zona de

influencia y el costo por viaje en la captura de ciertas especies no es tan elevado como lo

podría ser para los pescadores de SF y PP.

Los pescadores de SF realizan su pesca enfrente a sus costas dentro de el Refugio de

la Vaquita. En cambio, los pescadores de PP tienen que viajar distancias largas para llegar a

los distintos lugares de captura, influenciando mucho en los costos de producción. La pesca

en el polígono A del refugio de la vaquita se realiza en el 100 % de la superficie.


31

115º 114º 113º

Co
BCN USA
North

lo
ra
32º 32º

do
Ri
Sonora

ve
A

Gu
Santa
SantaClaraClara

lf o
fC
alifo
rnia

S
Gore Island
B

in
BCS

a
lo
Pacific

a
Ocean

Puerto
Puerto Peñasco
Peñasco

Vaquita
C
Protection
Area
D
San Felipe
San Felipe 31º
31º
N Latitude

Golfo
Gulf ofde California
North
California

115º 114º 113º


W Longitude

Figura 6. Cobertura de la actividad pesquera en el Área Natural Protegida del Alto Golfo de
California, y del Refugio de la Vaquita Marina. A) Zona núcleo, B) Zona de
Amortiguamiento, C) Refugio de la Vaquita Marina, D) Áreas de pesca.

II.5.4 La pesca en el Alto Golfo de California por parte de las comunidades que
de ella se benefician.

Los pescadores de la comunidad de PP son los que en mayor proporción ven

afectadas sus ganancias durante la actividad pesquera en el año, ya que deben realizar

largos viajes a las zonas donde se encuentra la pesquería de algunas especies de

importancia económica. Cuatro de las cinco especies las capturan tanto dentro como fuera

de la reserva, ejerciendo un mínimo impacto sobre la reserva, ya que la mayor parte de la

pesca la realizan en un área cercana a la costa sonorense y de la población de PP.


32

Con respecto al chano y la curvina los pescadores realizan viajes largos y

prolongados hacia la parte norte de la reserva. La pesca de la curvina se realiza desde los

límites de la zona núcleo de la reserva que incluye el Delta del Río Colorado bajando por

ambas costas hasta el límite superior del refugio de la vaquita sin alterar mas del 10 % de la

misma. La pesca del chano se realiza a lo largo de la costa de Sonora, desde el sur de la

zona núcleo y ocupando un 20 % de la zona de refugio en su parte noreste. (Figura 7a).

Estos pescadores aprovechan aproximadamente un 75% de la reserva para realizar

sus actividades. Con respecto a la pesca de las otras especies de importancia económica,

debido al precio de primera venta o de playa, así como su volumen de captura, no sería

redituable el acercarse a la costa bajacaliforniana, ya que la distancia elevaría los gastos por

viaje, aumentando los costos de producción para los pescadores, a parte de impactar el

Refugio de la vaquita

En el caso de los pescadores del GSC, como se mencionó con anterioridad, son los

que realizan por completo su pesca dentro de la reserva de la biosfera para la captura de

estas cinco especies de interés comercial. Como se observa en la figura 7b, la captura de

manta y chano son las que en menor proporción se pescan en la reserva, y que a su vez no

son capturadas dentro de la zona de refugio.

Para la pesca de curvina, camarón y sierra el esfuerzo pesquero abarca una

superficie mayor al caso de PP en la reserva, siguiendo una línea de pesca desde el litoral

sonorense en frente de la comunidad, viajando en forma diagonal hacia el refugio de la

vaquita con el límite inferior de la reserva. La parte nor-oriental del refugio de la vaquita

marina es la que se ve impactada por los pescadores de esta comunidad.


33

La pesca del camarón en la zona del refugio se realiza en la parte norte hacia el

occidente de la reserva, abarcando un 37% del refugio y un 35% de la reserva. Para el caso

de la curvina, esta también se realiza hacia la parte norte del refugio abarcando un 40% del

mismo y una parte semejante al camarón en la reserva. La sierra es pescada en menor

proporción que las especies anteriores, siendo el esfuerzo máximo hacia la zona costera de

la comunidad con un 20% del área. El impacto sobre el refugio es menor que en los dos

casos anteriores teniendo una presencia en el refugio de las capturas no mayor a un 15% del

área.

Con respecto a los pescadores de SF, estos son los que directamente utilizan la

superficie del área del refugio para pescar debido a su cercanía en que se encuentra la

comunidad como se muestra en la Figura 7c. El esfuerzo pesquero en la temporada de

curvina cubre casi la totalidad de la zona de refugio (95%) tanto por dentro y fuera de la

reserva, además, más del 50% de la curvina se captura dentro de la reserva de la biosfera.

La pesca del camarón se da en 60% dentro de la reserva cerca de la costa bajacaliforniana y

abarcando un 80% del polígono. Para el caso del chano, el mayor esfuerzo se da dentro de

la reserva (75%) pero no abarca la totalidad del refugio (70%).

Los costos de producción para los pescadores de SF son bajos debido a la corta

distancia a la que salen a pescar. Pero el impacto sobre el refugio de la vaquita marina es

alto, ya que el esfuerzo pesquero es constante durante todo el año


34

A B C
a A B C
b
Sonora Sonora Sonora Sonora Sonora Sonora

Gulf of Gulf of Gulf of Gulf of Gulf of Gulf of


California California California California California
California Baja Baja
Baja
Baja Baja Baja California California
California
California California California

E PP D E GSC
D Sonora Sonora Sonora Sonora
Sonora Sonora

Gulf of Gulf of Gulf of


Gulf of Gulf of Gulf of
California California California
California California California
Baja Baja
Baja Baja Baja Baja
California California
California California California California

A B C c
Sonora Sonora Sonora

Gulf of Gulf of Gulf of


California California California
Baja Baja Baja
California California California

D E SF
Sonora

Gulf of
Gulf of Gulf of
California
California California
Baja Baja Baja
California California California

Figura 7. Pesca realizada dentro de la reserva del Alto Golfo de California y refugio de la
vaquita por los pescadores de: a) Puerto Peñasco, b) Golfo de Santa Clara, c) San Felipe. A)
Chano, B) Manta y tiburón, C) Camarón, D) Sierra, E) Curvina, PP, GSC, SF) Pesca total.

II.5.5 La pesca en el Refugio de la Vaquita Marina.

Como se puede observar en la figura 8, la captura de las seis especies de mayor

valor comercial se realiza en la totalidad del espacio del Refugio de la vaquita y del 75.22

% de la Reserva del Alto Golfo de California y Delta del Río Colorado. El camarón es

capturado en un 97 % de la superficie del Refugio que representa el 55.73 % de la pesca

total dentro de la RBAGCDRC; la captura de la curvina cubre el 94 % de la superficie del


35

polígono y ahí se captura el 55.24 % de la producción en la RBAGCDRC; la manta y el

tiburón abarcan el 85 % de la superficie y son el 38.55 % del total; la sierra se captura en el

69 % y representa el 30.38 % de la captura total en la Reserva, y el chano se extrae en el 78

% del área y de ahí se obtiene el 43.96 % de la producción total de esa especie dentro de la

RBAGCDRC.

De la pesca total en el Alto Golfo de California, es decir, dentro y fuera de la

Reserva y polígono de la Vaquita, lo que se captura dentro del polígono de camarón

representa el 31.35 % de la captura total; chano 31.89 %; curvina 26.02%; sierra 39.07 % y

manta y tiburón 24.99 %.

Es poco el espacio que queda libre en el momento de cada una de las pesquerías por

su temporada. Se debe considerar que en esta zona de pesca existen alrededor de 2100

embarcaciones menores que salen en su tiempo a la captura tanto de camarón como de

especies de escama.
36

A B C
Sonora Sonora
Sonora

Gulf of Gulf of Gulf of


California California California
Baja Baja Baja
California California California

D E PT
Sonora
Sonora Sonora

Gulf of Gulf of Gulf of


California California California
Baja Baja Baja
California California California

Figura 8. Impacto de las distintas pesquerías a la zona de Refugio de la Vaquita Marina.


A) Chano, B) Manta y tiburón, C) Camarón, D) Sierra, E) Curvina, PT) Pesca total.

II.6 Discusión

II.6.1 Influencia de factores ambientales e hidrológicos

Las variaciones de temperatura, salinidad y abundancia de nutrientes en la zona del

Alto Golfo han variado durante los años. Diferentes factores climatológicos y

antropogénicos han marcado el desarrollo de las actividades económicas de la región, así

como, de la adaptación de las distintas especies que se encuentran en esa zona del Golfo de

California (Álvarez-Borrego, 2001). Las descargas de agua dulce del Río Colorado

repercuten de manera positiva en el hábitat marino para las postlarvas de una variedad de

especies al incrementarse la calidad y cantidad de nutrientes, como el aumento del área


37

inundada (Aragón-Noriega, 2000), es decir, un mayor numero de organismos disponen de

un espacio más amplio y con mayor cantidad de alimento para crecer. Cisneros-Mata et al.

(1995) concluyeron que estas aportaciones ha beneficiado tanto aquellas especies

comerciales como en peligro de extinción (Totoaba macdonaldi), que utilizan el Alto Golfo

de California como zona de crianza.

Hay un incremento de las capturas de las especies como camarón, curvina y chano

en en los años posteriores al fenómeno de El Niño fuerte de 1997 y sobre todo permitiendo

un reclutamiento importante en la población de camarón azul (Aragón-Noriega, 2000;

Velarde et al. 2004). Por su parte, El Niño del periodo 2002-2003 fue débil (Durazo et al.

2005) sus efectos no se reflejan durante los siguientes años un incremento en el volumen de

las capturas, siendo igual para cada una de las especies y comunidades.

II.6.2 El manejo de la pesca en el Alto Golfo de California.

Las reservas marinas permiten en teoría la recuperación de especies que se

encuentran en un nivel bajo de su población, por que en ellas el esfuerzo pesquero es

limitado a ciertos criterios y tiempos (Gell y Roberts, 2003). El esfuerzo pesquero dentro de

la Reserva no permite una recuperación real del ecosistema y de la población de los

organismos que en ella habitan, aunque la captura sea de forma artesanal (Quintero et al.

2002). Esto se debe a que hay un continuo esfuerzo pesquero en la Reserva durante todo el

año, comenzando con el camarón que es el producto genera mayores ingresos económicos y

seguido por la curvina que es el producto que más en volumen se captura (Cudney y Turk,

1998; Álvarez-Borrego, 2001) y estas pesquerías se combinan en una parte del año con
38

otras de menor importancia pero que combinadas representan una entrada importante de

dinero para el pescador fuera de la temporada del camarón y curvina (Quintero et al. 2002).

El número de embarcaciones, el tipo de arte de pesca y el área donde se realiza la

captura de las distintas especies comerciales no ha permitido un crecimiento de la pesca en

la región. Aunque se observan épocas distintas en el repunte de las pesquerías sobre todo en

los años de 1998 y 2002, estos se ha venido acompañados del incremento del número de

embarcaciones menores en la región, sin permitir un repunte de la pesca en el corto tiempo,

pero manteniéndose estable durante los 10 años.

El espacio ocupado por los pescadores para pesca en el Alto Golfo de California es

muy grande abarcando el 75.22% de la superficie acuática, lo que hace que la Reserva en

este aspecto no sea efectiva para permitir el incremento poblacional de las comunidades de

organismos que existen en el área (Little et al. 2005), y sobre todo de aquellas especies en

peligro de extinción como la vaquita marina, en que el polígono donde se distribuye es

explotado al 100% durante casi todo el año.

Tanto la zona núcleo como el área de Refugio de la vaquita marina son zonas

altamente explotadas. Estas zonas deberían funcionar como área de reclutamiento y de

recuperación de las poblaciones de especies marinas afectadas por la pesca (Sumaila et al.

2000; Gell y Roberts, 2003; Hilborn et al. 2004; Little et al. 2005). La recuperación de las

comunidades de peces y mamíferos marinos debe estar acompañada de una regulación

específica para la pesca de cada una de las especies explotadas en la zona y manejada de

forma independientes de los mismos organismos de su especie en el Golfo de California.

Un ejemplo de esto es el tiempo en que se levanta la veda del camarón, que presenta

un mal manejo de la pesquería (Hilborn et al. 2004; Baelde, 2005), ya que es igual para
39

toda la región que cubre el estado de Sonora sin diferenciar las condiciones ambientales de

cada lugar, el estatus o clasificación del área, si es o no Área Natural Protegida, y a su ves

los decretos establecidos para la Reserva no tipifican un tipo de arte de pesca que se deba

utilizar y no impacte el ecosistema marino (ver DOF, 1993, 2005).

El caso de la Reserva del Alto Golfo de California es complicado y requiere de

mucho trabajo de investigación pesquera y social. El buen funcionamiento de esta Reserva

precisa de un manejo distinto de la actividad pesquera, donde se establezca un número

adecuado de embarcaciones menores que operen en el lugar sin permitir la incorporación de

nuevas embarcaciones, modernización de la flota pesquera, y eliminar a las embarcaciones

mayores de la zona. Además, de cambios en las artes y técnicas de pesca, como de adecuar

las vedas de los distintos organismos a las épocas que se presentan los desoves por especie

en el año, y que estos sean monitoreados y evaluados para verificar si han tenido éxito en

su aplicación, a través de programas a largo plazo para incrementar el conocimiento del

manejo de la pesca, sus beneficios y los niveles de protección hacia el ecosistema (Sumaila

et al. 2000; Hilborn et al. 2005).

Otra alternativa posible de manejo, es la concesión territorial de la pesca en áreas

contiguas a las comunidades pesqueras. En ellas se involucra de manera directa a los

pescadores en el cuidado y manejo de la pesca, reduciendo los costos de operación, y se

vuelve una responsabilidad directa de la comunidad el cuidado de su área de manejo (King

y Faasili, 1999). Esta opción puede ser aplicada sobre todo a los pescadores ribereños de

San Felipe que son los que inciden directamente sobre el Refugio de la vaquita, ya que ellos

mantendrían un control sobre el número de embarcaciones que podrían pescar en el


40

Refugio y el tiempo de captura adecuado para no impactar sobre las poblaciones de vaquita

dentro del polígono.

Un manejo compartido de la Reserva con los pescadores puede ser importante para

disminuir el impacto sobre las áreas más criticas de para la conservación y reproducción de

los organismos marinos como lo es la zona núcleo y el Refugio de la vaquita, permitiendo

vedas temporales en esos lugares sobre todo en las etapas criticas de la reproducción de las

especies como la vaquita y totoaba (King y Faasili, 1999; Sumaila et al. 2000; Gell y

Roberts, 2003). Se deben buscar objetivos precisos para lo que se quiere alcanzar en la

pesca y la conservación de la biodiversidad en este ecosistema marino (Hilborn et al.

2004).

II.7 Conclusiones

La cantidad de pescadores en la Reserva de la Biosfera del Alto Golfo de California

y Delta del Río Colorado, no ha permitido que los objetivos de la Reserva se lleguen a

cumplir, y estos conlleven a un beneficio hacia los pescadores y se observe una

recuperación de las especies en peligro de extinción. Durante los últimos doce años la

captura de las especies marinas en la región se ha mantenido estable sin señas de un repunte

importante en los volúmenes de la pesca de aquellas especies que más se explotan y del

aumento de las poblaciones de la vaquita marina y totoaba.

El esfuerzo que se realiza dentro de la zona núcleo como en el Refugio de la

vaquita, no solo pone en peligro la sustentabilidad de la pesca en la región, sino la pesca

misma, ya que en un mundo globalizado en el que pertenece México el deterioro ambiental

puede traer consigo repercusiones económicas y políticas, que no permitan aumentar el


41

apoyo social a las comunidades de la región, deteriorando cada ves más, la por si ya

decaída, actividad pesquera.

Es importante que se busquen estrategias de manejo en la que coparticipen por igual

el gobierno, organizaciones no gubernamentales y los pescadores, ya que estos últimos son

los que más conocen de la problemática que vive la pesca y de las soluciones que se pueden

dar para mejorar su actividad económica, apoyados de la asesoría científica y económica

que pueden dar las instituciones educativas a los pescadores. La búsqueda de un buen

manejo de la Reserva puede llevar a la sustentabilidad de la actividad pesquera y a la

recuperación de las especies en peligro de extinción.


42

CAPITULO III

Dinamismo económico y social de la Reserva de la Biosfera del AGCDRC

III.1 Introducción

El Golfo de California exhibe una complejidad interesante pues reúne en su entorno

situaciones de orden físico, biológico, cultural y económico; propiciando una problema

particular en las relaciones individuo-sociedad-naturaleza (Leff, 1996); esto se explica en

virtud de que la pesca por si misma es un desafío a la sustentabilidad (es una actividad

abierta para cualquier persona), algunos productos con elevado precio, provocan una

migración de personas a la zona costera, favoreciendo el crecimiento de las comunidades y

desarrollos urbanos (Cisneros, 2001). Esto ha derivado en un conflicto del aprovechamiento

de los recursos pesqueros, favoreciendo el incremento del esfuerzo pesquero, así como, la

proliferación de conflictos entre sectores productivos debido al impacto que hay sobre la

pesca comercial y las especies de valor ecológico (Vásquez-León, 1993; Soares et al.

2005).

En especial el Alto Golfo de California es una zona con un gran dinamismo

productivo. En ella se desarrollan una gran diversidad de actividades económicas, las cuales

al ubicarse tan cerca de la frontera con Estados Unidos, atraen a un número considerable de

usuarios, incrementando la presión sobre los recursos naturales con que cuenta esta zona.

Las autoridades en el Alto Golfo de California, han convenido y aplicado diferentes

estrategias para regular la sobreexplotación de los recursos marinos y mejorar el

aprovechamiento de la actividad pesquera. Una de estas estrategias es la realización de un

ordenamiento pesquero que parte de la premisa de que es indispensable generar una pesca
43

responsable que conlleve a mejorar la calidad de vida de los pescadores en conjunto y

permita a su vez el rescate de las especies en peligro de extinción (Alcalá, 2003; Soares et

al. 2005; Hernández, 2004) sin que ello contaponga el crecimiento regional (Bretón, 2001).

La pesca ribereña tiene un alto grado de complejidad, una gran dispersión física y

diversidad social con diferentes niveles de relaciones sociales y económicas (Doode y

Wong-González, 2001). El programa de manejo de la Reserva se orienta en la preservación

de la biodiversidad, privilegia la economía de las comunidades y busca alternativas

productivas que compensen la regulación de la pesca en beneficio de la sustentabilidad de

la región (FFE, 1996). La efectiva implementación de los programas de desarrollo y

preservación de los recursos naturales en esta región sólo tendrán éxito si se propicia un

repunte de la economía y calidad de vida de los pescadores en las comunidades.

Las comunidades en el Alto Golfo de California en los recientes años han

manifestado un desarrollo importante debido a una creciente actividad turística, que se ha

vuelto en el principal detonante económico de la región, sobre todo en las comunidades de

San Felipe en el estado de Baja California, y Puerto Peñasco en el estado Sonora.

III.2 Historia de la pesca en el Alto Golfo

El esfuerzo de la pesca dentro de la zona del Alto Golfo de California se venía

dando sobre el camarón que fue el principal producto de explotación tras la caída de la

población de la totoaba a mediados de los años cuarenta del siglo pasado (Figura 11).

Pero a partir de 1987, la pesquería del camarón enfrenta una crisis de producción

donde los volúmenes de captura empiezan a descender de 275,043 a 33, 623 kg en un


44

periodo de cinco años debido a la sobre explotación pesquera realizada en aquella región

del país (McGuiere, 1993). Esta crisis de la pesca se agudiza con el cambio de régimen en

el pago de las deudas, ya que el banco (BanPesca) que capitalizaba las cooperativas se cerró

pasando las deudas a la banca privada (Valdez-Gardea, 2001). En 1990, los bancos dejan de

prestar dinero a las cooperativas y estas se ven obligadas a disminuir su flota pesquera,

disminuyendo casi hasta la mitad de la misma (McGuiere, 1993). Se comienza a dar un

desempleo no solo para los pescadores que se quedaron sin su fuente de empleo, sino que

se produce una reacción en cadena y empresas relacionadas con la actividad pesquera

también empiezan a cerrar como: embarcaderos, astilleros, plantas procesadoras y

congeladoras). Algunas cooperativas como la Venustiano Carranza en El Golfo de Santa

Clara, una de las que mejor funcionaba, tuvo que vender la mayoría de sus barcos,

congeladora y empacadora (Greenberg y Vélez-Ibáñez, 1993).

Flujo del agua


Totoaba
Camarón
Capturas (Ton)

Flujo (109 m3)

Año
Figura 9. Capturas históricas de totoaba y camarón con respecto al flujo de agua
proveniente del río Colorado. Tomado de Cisneros et al. 1995.
45

III.2.1 Desarrollo de la pesca del camarón durante la última década del siglo 20

En 1930 aparecen las primeras cooperativas y para la década de los cuarenta se

empiezan a dar los primeros apoyos a la industria del camarón cuando la captura de la

totoaba declinaba. Las capturas de éste crustáceo pasan de 690 ton en 1930 a 51, 766 ton en

1980, al igual los barcos se transforman y pasan de ser de madera a acero con capacidades

distintas que fueron de las 11 ton por barco a 70 ton respectivamente.

Al darles la exclusividad de la pesca a las sociedades cooperativas, el gobierno

mexicano también obligó a estas comprar las embarcaciones del sector privado, la cual se

encontraban en mal estado y a un precio muy caro. Esto se hizo a través del crédito

otorgado con la banca estatal (BanPesca), con intereses bajos (Vásquez-León, 1993). Los

créditos mantuvieron a las cooperativas en una situación muy difícil para poder cumplir con

sus pagos, y cuando la pesca decae a finales de los ochenta, la economía de las cooperativas

entra en crisis y caen en bancarrota (Valdez-Gardea, 2001). Esta situación se conjunta,

primeramente con una sobre explotación del camarón al haber un alto esfuerzo pesquero

por el número de embarcaciones, y segundo, por los cambios climáticos provocados por el

fenómeno del niño durante el último tercio de los ochenta (Greenberg, 1993a).

Debido a la falta de nuevos créditos, un gran número de cooperativa venden sus

barcos a precios muy bajos a inversionistas privados, y en 1991 deja de ser la pesca del

camarón exclusivo para las cooperativas (Vásquez-León, 1993). En 1987 existían 276

embarcaciones en el Alto Golfo y para 1993 quedaban 123 barcos en manos del sector

cooperativista. Esta reducción en las embarcaciones en un principio afectó directamente a

la economía de las comunidades de San Felipe, Golfo de Santa Clara y Peñasco, ya que

también se afectaron empresas que se generaron alrededor de la pesca del camarón como
46

las empacadoras, congeladoras, hieleras, transportes, etc. Aunque el problema no fue mayor

en las comunidades de San Felipe y Puerto Peñasco, ya que en ellas se presentan una gran

diversidad de alternativas económicas que podían emplear de manera inmediata a aquellos

trabajadores de la pesca y más, que se quedaban sin trabajo (McGuire, 1993).

III.2.2 Diversificación de la pesca en la región

En 1980 se inicia la construcción de la infraestructura portuaria nacional donde San Felipe

en Baja California y Puerto Peñasco en Sonora se ven beneficiados en su momento. En el

sexenio del presidente Luís Echeverría se da el mayor crecimiento del sector impulsado por

el crecimiento de la industria del camarón (McGuire, 1993), pero para finales de los

ochenta, decae la pesca de camarón afectando directamente la economía regional y del

sector cooperativa, lo que generó en encontrar nuevas oportunidades de pesca como lo fue

la captura de especies de escama (Valdez-Gardea, 2001).

A partir de este momento las embarcaciones se adaptan a las nuevas circunstancias

y se empieza a capturar especies como el chano y la sierra, que no son económicamente

atractivas como el camarón pero que se encuentran en gran abundancia en la región. En

1993, la curvina reaparece en la región provocando el regreso de los pescadores a la

actividad, y la migración de personas de otras regiones del país a esa zona de pesca

(Valdez-Gardea, 2001), mismo año que entra en vigor la reserva de la biosfera. Las

cooperativas en la región adquieren embarcaciones menores o pangas, siendo en ocasiones

mayor al número de socios que hay por cooperativa (SAGARPA, 2002).


47

III.2.3 Composición de las comunidades

El desarrollo la región noroeste del país, en particular en los estados de Baja

California y Sonora, ha propiciado un crecimiento de la población en los municipios

fronterizos debido a la alta migración de personas del interior del país que buscan

oportunidades de trabajo en los diferentes sectores de la economía regional.

Los municipios de Mexicali en Baja California y Puerto Peñasco y San Luís Río

Colorado en Sonora, han visto un cambio importante en su población sobre todo la

masculina que es la que se mueve más por las oportunidades de trabajo durante los últimos

15 años (Tabla IX). La región es una zona captadora de emigrantes que encuentran

excelentes oportunidades de trabajo en todos los sectores de la economía regional. Ha ella

llegan personas provenientes de otras partes del país sobre todo en el estado de Baja

California por su colindancia con el estado de California que es el principal captador de

mercancías de la unión americana. Sonora también es un receptor de emigrantes pero en

menor proporción.

Tabla IX. Movimiento de la población masculina en los municipios fronterizos adjuntos al


Alto Golfo de California.

Población nacida
Estado/ municipio Población hombres Población nacida en la entidad
en otra entidad
1990 2000 2005 1990 2000 2005 1990 2000 2005
Baja California 832 090 1 252 581 1 431 789 424 200 601 620 1 077 381 371 686 512 378 88 049
Mexicali 300 629 384 270 764 602 184 953 233 772 341 180 103 263 118 601 17 427
Sonora 915 088 1 110 590 1 198 154 747 210 911 360 1 010 892 152 256 182 302 27 557
Puerto Peñasco 13 487 15 816 31 157 8 644 10 577 18 051 4 687 4 788 2 099
San Luís Río Colorado 55 048 72 864 145 006 32 083 42 603 63 918 20 287 27 156 3 351
Fuente: Censos de población y vivienda 1990 y 2000; II Conteo de población y vivienda 2005.
48

Mexicali es el municipio que tiene mayor número de personas y la que también

recibe un número alto de emigrantes en esta región. En el municipio hay una gran variedad

de oportunidades por su diversidad económica. En cambio en los municipios aledaños del

estado de Sonora, la actividad económica es menor. San Luís Río Colorado es un municipio

eminentemente comercial y Puerto Peñasco pesquero pero con una creciente actividad

turística.

En los respectivos municipios de Mexicali, San Luís Río Colorado y Puerto

Peñasco, la mayor concentración de su población esta en su cabecera municipal y el resto

en pequeñas comunidades que en su mayoría se dedican a las actividades primarias.

De estas comunidades encontramos que en San Felipe, Puerto Peñasco y El Golfo

de Santa Clara se dedican a la pesca el 25, 23 y 76% de la población respectivamente. En el

sector secundario, esta el 17% de la población en San Felipe, 19% en Puerto Peñasco y 3%

en El Golfo, y en el sector terciario o turismo el 58% de la población de San Felipe y

Puerto Peñasco y 21% de El Golfo. Estas últimas alternativas de trabajo han sido

aprovechadas por los pescadores que se quedaron sin trabajo, pero no viene siendo su

principal fuente de trabajo, ya que la gran mayoría regresa al mar, ya que es lo único que

saben realizar bien (Greenberg y Vélez-Ibáñez, 1993).

III.3 La pesca ribereña en el Alto Golfo de California y acciones para su protección

El auge de la pesca ribereña se dio a partir de la quiebra de las cooperativas camaroneras

que trabajaban con embarcaciones mayores debido a la reducción de alrededor del 50% de

su captura (Hoyos, 1991). La única manera de poder existir y mantener a los socios

trabajando fue a través de la adquisición de embarcaciones menores o pangas.


49

Esta crisis de la pesca provocó una diversificación del esfuerzo pesquero en la pesca

artesanal. Especies no aprovechadas con anterioridad, se volvieron especies importantes y

alternativas a la pesca del camarón. El chano, la curvina y los roncachos se capturaban para

abastecer al mercado oriental para la elaboración de surimi. Además, los pescadores

empezaron a alternar la pesca deportiva con la comercial durante el año, sobre todo en las

comunidades de San Felipe y Puerto Peñasco. El esfuerzo pesquero realizado en la zona

marina del Alto Golfo de California puso en peligro la diversidad biológica del ecosistema

marino, como lo fue en el caso de la totoaba y vaquita marina, que se decreto la región

como Reserva de la Biosfera (Godínez-Plascencia, 1995; Cudney y Turk, 1998; CSGC,

2004).

La mayor parte de la pesca se realiza utilizando chinchorros y cimbras. La forma y

la utilización de cada una de estas artes de pesca variaron entre pescadores y comunidades,

dependiendo de las especies, la región y la época del año. El chinchorro es el arte de pesca

más utilizado, y la captura de muchas especies recae en las variaciones que le haga el

pescador a la red y su modo de empleo (Cudney y Turk, 1998).

La importancia que tiene la zona del Alto Golfo de California y Delta del Río

Colorado suscitó la búsqueda de su protección, y a partir de 1955 se inicia con los esfuerzos

para conservación declarándola “Zona de Refugio” y después en 1974 en “Zona de

Reserva” (Cudney y Turk, 1998).

A principios de los noventa se busca a través de investigadores del país en

Mazatlán, Sinaloa, dentro del Taller para la Identificación de Áreas Marinas Prioritarias

para la Conservación, organizada por la Secretaría de Desarrollo Urbano y Ecología y el

World Wildlife Found (WWF), incorporar a la región dentro del Sistema Nacional de Áreas
50

Naturales Protegidas en México (SMANP) (Ferman-Almada, 1994). Este grupo tuvo el

respaldo del sector industrial camaronero y en 1993 la zona fue decretada Reserva de la

Biosfera (CICTUS, 1994).

No solamente la Reserva esta dentro del SMANP, sino que también se encuentra

incorporada al Sistema Internacional de Reservas de la Biosfera, el cual cumple con el

modelo desarrollado por la Naciones Unidas en el Programa de “El Hombre y la Biosfera”

(Cudney y Turk, 1998).

La Reserva esta divida en dos zonas distintas de manejo: una zona núcleo que tiene

la finalidad de conservar el medio ambiente en su estado natural, es una zona de criadero y

desove de especies comerciales, endémicas y en peligro de extinción; y de una zona de

amortiguamiento, que busca un balance entre las actividades antropogénicas y la

naturaleza, permitiéndose la explotación de los recursos naturales bajo ciertos criterios de

manejo (comunicación personal José Campoy, 2007).

El pescador ha experimentado una diversidad de cambios en el modo de pescar

durante el tiempo. A partir de la entrada en vigor de la Reserva, nuevas modificaciones a su

manera de pescar se han venido suscitando para hacer de la pesca una actividad sustentable,

aunque estas no han sido adecuadas para todas las pesquerías.

La Reserva ha presentado un cierto beneficio, ya que la pesca de las especies que se

explotan se han mantenido estables durante el tiempo. Esta estabilidad ha permitido el

crecimiento de la flota pesquera en ciertos periodos y teniendo una producción que

mantiene la productividad del ecosistema marino.


51

III.4 Objetivo

Determinar si la Reserva ha sido un factor de crecimiento económico para los

pescadores ribereños de las comunidades que la integran.

III.5 Metodología

Para evaluar el desarrollo de las comunidades y el crecimiento de la calidad de vida de los

pescadores ribereños en el Alto Golfo de California a partir del año 1990 al 2005, se hizo

una búsqueda en los documentos estadísticos realizados por el INEGI en materia de

población: los decretos en materia ambiental que se han generado.

Por otro lado, se realizó un estudio de campo para obtener información oficial en las

oficinas de pesca de cada una de las comunidades, además de una serie de encuestas a los

pescadores ribereños para determinar aspectos de población, migración, valor de la pesca y

los gastos que se ejecutan, como de su opinión sobre los beneficios que trae consigo o no la

Reserva en su área de trabajo, tratando de encontrar respuesta a algunas variables

económicas y sociales para poder entender de la mejor manera lo que sucede en el Alto

Golfo de la siguiente manera:

III.5.1 Económicas

Para resolver este punto se tomarón en cuenta los factores económicos involucrados en la

pesca de cada comunidad. Con estos datos se busco respuesta a los siguientes incisos:

a) Población ocupada en el sector primario. Donde se hizo una revisión de la población

económicamente activa desde 1990 al 2005.

b) Valor de la captura por especie desde 1990 al 2005. Se hizo un análisis del valor de la

pesca durante los últimos 15 años, de las principales especies capturadas en la región.
52

c) Número de cooperativas y permisionarios de pescadores ribereños existentes desde

1990 al 2005. Se hizo un análisis de la evolución de las cooperativas en la región como del

número de embarcaciones con la que cuenta cada una de las cooperativas y permisionarios.

d) Gasto realizado en la adquisición de equipo de trabajo, combustible y alimentación

para salir a pescar. Se hizo un registro de los gastos que hacen los pescadores para cada

una las pesquerías durante el año.

e) Egresos por parte de los pescadores en servicios básicos. Se hizo una análisis de los

gastos que realizan los pescadores en servicio básicos y alimentación.

III.5.2 Sociales

En este punto se tomo encuenta información sobre aspectos socio demográficos, además de

utilizar datos del INEGI para completar la información:

a) Movimiento de la población. Se hace un análisis del origen de los pescadores.

b) Edad y tiempo de trabajo en la pesca. Se analizo la edad promedio de los pescadores y

el tiempo que llevan en la actividad.

c) Alternativas de trabajo fuera de temporada. Se analizaron las opciones cuando no se

encuentran trabajando en la pesca.

d) Alternativas de trabajo si se cerrara la pesca. Se analizaron las opciones a realizar si

su actividad fuera cerrada por motivos ecológicos.

e) Impacto de la Reserva a la actividad pesquera. Se analizo la opinión del pescador

sobre el efecto de la Reserva sobre la pesca desde que se decretó en 1993.


53

III.6 Resultados

III.6.1 Económicos

III.6.1.1 Población ocupada en el sector primario

Las comunidades que están en el Alto Golfo de California, son primordialmente,

pesqueras dedicadas a la captura de especies como curvina, chano, tiburón y camarón.

El crecimiento de la población en estas comunidades ribereñas ha tenido distintos

matices. Mientras en el Golfo de Santa Clara (GSC), Sonora y San Felipe (SF), Baja

California, la población se duplicó en los últimos 15 años (111% y 160% respectivamente),

en Puerto Peñasco (PP) se dio en menor medida, pasando de 26,141 habitantes en 1990 a

44,647 en el año 2005, un incremento del 70%, siendo en el último quinquenio con el

mayor crecimiento de su población (Tabla X).


54

Tabla X. Crecimiento de la población en las comunidades del Alto Golfo de California y las personas ocupadas en el sector
primario en el periodo 1990-2005

Golfo de Santa Clara Puerto Peñasco San Felipe


1990 % 1995 % 2000 % 2005 % 1990 % 1995 % 2000 % 2005 % 1990 % 1995 % 2000 % 2005
PT 1506 100 1830 100 2777 100 3186 100 26141 100 26810 100 30466 100 44647 100 9263 100 11310 100 13123 100 14831
PEA 434 29 536 29 829 30 0 7694 29 9342 35 11391 37 0 3075 33 3732 33 4325 33
PEI 529 35 929 51 1065 38 0 9666 37 11812 44 10308 34 0 2941 32 3959 35 3993 30
PEAO 434 100 530 99 817 99 0 7468 97 9202 99 11316 99 0 3034 99 3676 99 4296 99
PSP 319 74 368 69 400 49 0 1676 22 1356 15 1128 10 0 722 24 567 15 634 15
PSS 13 3 57 11 115 14 0 1356 18 2179 24 2951 26 0 500 16 757 21 790 18
PST 87 20 105 20 245 30 0 4271 57 5667 62 6672 59 0 1708 56 2352 64 2742 64

Fuente: INEGI. Censos de 1990, 2000 y Conteo 1995. PT: Población total, PEA: Población económicamente activa, PEI: Población
económicamente inactiva, PO: Población ocupada, PSP: Población en el sector primario, PSS: Población del sector secundario, PST: Población
del sector terciario.
55

La población económicamente activa (PEA) para el año 2005, representa

aproximadamente una tercera parte de la población total en cada una de las comunidades,

Para el año 2000,4 la PEA en el GSC era del 30%, en PP alcanzó el 37% y en SF 33% de la

población total, manteniendo una proporción semejante durante el período analizado.

La población ocupada para este mismo año fue el 99% en cada una de las

comunidades, con bajos índices de desocupación laboral, y que varía según las actividades

que se realicen por temporadas. En el GSC el 49% de la población trabajó en el sector

primario con respecto a 1990 cuando tenía el 76%. El cien por ciento de las personas en el

sector primario se dedicó a la pesca ya que no existen campos agrícolas y ganaderos que

permitan la diversificación de las actividades económicas. El 51 por ciento restante se

dedicó a servicios y turismo.

Por su parte la distribución de trabajo en las comunidades de SF y PP es más

variada; en estas se ubican personas dentro de los tres sectores productivos. En particular,

solo entre el 10 y el 15 por ciento de los habitantes de PP y SF respectivamente laboraban

en el sector primario, mayoritariamente dedicados a la pesca, y de menor medida a la

agricultura y ganadería. En esas localidades el empleo generado en el sector turismo

representa más del 50 por ciento de toda la población ocupada.

III.6.1.2 Valor de la captura por especie de 1995 al 2005

Con el establecimiento de la Reserva en la región y la disminución de las embarcaciones

mayores se observa un incremento de la producción pesquera al disminuir el esfuerzo

ejercido sobre todo en las comunidades de SF y GSC, ya que en estas comunidades la flota

4
Último censo de población INEGI 2000.
56

camaronera fue vendida en su totalidad, solamente en PP siguió una mayor parte de esta

flota mayor. A partir del año 1998 hasta el 2002 hay un periodo en la que se incorporan un

mayor número de embarcaciones menores, incrementando los ingresos en las comunidades

en dos periodos distintos como se puede observar en el GSC y SF (Figura 10).

SF PP GSC SF PP GSC

6000 80000
70000
5000
60000

Miles de pesos
4000
Toneladas

50000
3000 40000
30000
2000
20000
1000
10000
0 0
1994 1996 1998 2000 2002 2004 2006
Año

Figura 10. Volumen de la pesca y valor de la producción en el Alto Golfo de California


(1995-2005). Fuente: Oficinas de pesca en las comunidades. SF: San Felipe, PP: Puerto
Peñasco, GSC: Golfo de Santa Clara. Valor de la captura. Líneas continuas: Toneladas;
líneas cortadas: Ingresos.

Los mayores volúmenes de captura registrados antes del año 2000 se traducen en

incrementos sistemáticos de las ganancias de los pescadores sobre todo para los de PP y el

GSC, donde los ingresos aumentarón en un 250% a partir de 1995. En el 2001 se observa

una disminución en la producción pesquera de SF debido al aumento de la flota pesquera

menor, pero aun así el valor del producto se mantiene por arriba de los 30 millones de

pesos, siendo 2005 el mejor año para los pescadores cuando obtuvieron ingresos por una

cantidad de 62 millones de pesos gracias al precio que alcanzó el camarón en esa


57

temporada;5 El 2002 fue el mejor año para GSC con 72 millones de pesos, al capturarse

grandes volúmenes de curvina y chano. En cambio la producción pesquera en PP repunta a

partir de 1999 manteniéndose constante hasta el 2005; lo mismo pasa con sus ingresos.

III.6.1.3 Número de cooperativas, permisionarios y embarcaciones de

pescadores ribereños de 1990 al 2005

En esa región del país se encuentran 62 cooperativas pesqueras, mismas que se integran por

un total de 2,418 socios. Existen también los llamados permisionarios, que son aquellos que

tienen el permiso o concesión para pescar distintas especies acuáticas otorgados por la

autoridad correspondiente, y cada uno de ellos maneja o renta un número indistinto de

embarcaciones menores que pueden ir desde 3 hasta 30 pangas, con un número igual o

mayor de pescadores.

La comunidad con el mayor número de cooperativas es el GSC, seguido por PP y

SF, lo cual corresponde en gran medida a la estructura de la PEA y la proporción de la

población del sector primario en cada caso. En el número de socios, PP cuenta con la

mayor cantidad de pescadores y los del GSC con el menor número, debido al pequeño

tamaño de su población. Una característica interesante de las cooperativas existentes antes

de 1993 fueron cooperativas de embarcaciones mayores, pero al no poder solventar el pago

de sus deudas cambiaron su inscripción por embarcaciones menores. Muchas de ellas con

el tiempo se fueron fraccionando aumentando el registro de las cooperativas pero no de

socios o pescadores inscritos en las mismas, siendo el caso de las cooperativas en el GSC

con la mayor cantidad de cooperativas y el menor número de socios pescadores. En el

5
El precio del camarón para aquella temporada estuvo entre los $150 y180 por kilogramo con respecto a los
años anteriores que fue en promedio menor de los $125 por kilogramo.
58

número de permisionarios, en SF se encuentra el mayor número de registros, después PP, y

en el GSC ninguno (ver tabla XI).

Tabla XI. Sociedades cooperativas, socios y permisionarios: distribución de los pescadores


en el Alto Golfo de California.

Puerto Peñasco Golfo de Santa Clara San Felipe


No de SCPP yA 19 25 18
No de Socios 1120 458 840
Permisionarios 3 - 9
Cooperativa 46.4 90.0 84.3
Permisionario 21.4 3.3 1.2
Ninguna 7.1 5.0 13.3
Unión o Ejido 25.0 1.7 1.2
Fuente: Oficinas de pesca en las comunidades y Oficina Estatal de Información para el
Desarrollo Rural Sustentable del Estado de Sonora (OEIDRUS).

No todos los pescadores ribereños están incorporados a una cooperativa y varios de

ellos se encuentran organizados en otros grupos o simplemente trabajan por su cuenta. En

PP, 21.4% de los pescadores trabajan para. En tanto en el GSC y PP son pocos los

pescadores que no pertenecen a una cooperativa, 10% y 15.7% respectivamente, del total de

pescadores encuestados.

Analizando el número de embarcaciones, en el registro del 2006, en SF se tienen

840 pangas, seguido de PP con 673 y 550 para el GSC. Para 2003, el número de pangas

llega a sobrepasar las 2,000 embarcaciones cuando en 1995 existían solo el 30.7% de ellas

(635). En la comunidad de PP el mayor incremento de pangas se dio entre los años de

1996-1997 y 2001-2002, con un 62.83% unidades. En el GSC, en el periodo de 1995 al

2000 se incrementó en 335 unidades el total de embarcaciones, llegando alcanzar las 550

unidades, y para el 2006 se incorporaron 7 embarcaciones más. En SF se registra el mayor


59

incremento de embarcaciones en periodos cortos. El primero entre 1995 y 1997 con un

incremento de 30 a casi 300 embarcaciones. De ese año hasta el 2002 hay fluctuaciones

leves; y en el 2003 se incorporaron 500 nuevas embarcaciones, registrándose el

aumentando a más de 800 pangas (figura 11). El mayor incremento en conjunto en estas

comunidades ribereñas se aprecia entre los años 1995-1997 y 2000-.

PP GSC SF

900
800
No. Embarcaciones

700
600
500
400
300
200
100
0
1995 1996 1997 1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005
Año

Figura 11 Número de embarcaciones de pescadores ribereños en el Alto Golfo de


California (1995-2005). Fuente: Oficinas de pesca en la comunidades. SF: San Felipe,
GSC: Golfo de Santa Clara, PP: Puerto Peñasco

III.6.1.4 Ingreso promedio de los pescadores ribereños

En el Alto Golfo de California la pesca se distribuye entre un número mayor de pescadores

(∼4,000) que operan particularmente dentro de la Reserva y Refugio de la vaquita. El

ingreso de los pescadores varía dependiendo a la comunidad a que pertenece. En la figura

12 observamos que los pescadores con menor ingresos son los de PP, pues en esta

comunidad se encuentra la mayoría de pescadores y registran el menor volumen de captura

en comparación con GSC y SF. Por su parte, los pescadores de SF tuvieron altos ingresos

durante el periodo de 1997 al 2002, llegando a alcanzar ganancias por arriba de 100 mil
60

pesos per cápita anuales6, La tendencia de los ingresos para los pescadores del GSC es

similar a los pescadores de SF. El monto máximo de ingresos en 1999 fue mayor a los 80

mil pesos anuales por pescador. A partir de entonces y hasta ahora sus ganancias están

ligeramente por arriba de los 40 mil pesos al año. En el 2004 se inicia un proceso de

crecimiento del ingreso por pescador de cada una de las comunidades debido,

principalmente, a dos situaciones: 1) el precio alcanzado por el camarón de la región que

sobrepasa el promedio de otras zonas camaronícolas, y 2) la casi nula presencia de

embarcaciones mayores pescando dentro de los límites de la Reserva de la Biosfera y

Refugio de la Vaquita.

Figura 12. Ingreso anual promedio por pescador de cada comunidad.

SF PP GSC

120

100
Miles de pesos

80

60

40

20

0
1995 1996 1997 1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005
Año

Fuente: Oficinas de pesca en las comunidades. SF: San Felipe, GSC: Golfo de Santa Clara,
PP: Puerto Peñasco

6
Una situación diferente se presentó durante 1993 con el aumento de personas dedicadas a la pesca,
disminuyendo las ganancias a tal grado que los ingresos posteriores se ubicaron por debajo de los 20 mil
pesos anuales.
61

III.6.1.5 Gasto realizado en la adquisición de equipo de trabajo, combustible y

alimentación para salir a pescar

Uno de los gastos más importantes de la actividad pesquera provienen del mantenimiento y

renovación del equipo y las artes de pesca en cada temporada, así como en la compra de

combustible (gasolina, lubricantes) y alimento para cada uno de los viajes realizados por las

embarcaciones. Como se observa en la tabla XII, los pescadores que más invierten en

equipo son los de SF; estos gastos se registran principalmente durante la captura de

camarón, tiburón y sierra. Las redes que utilizan para capturar tiburón las utilizan también

en la época de la curvina. Otra especie en que invierten es en la jaiba, con una inversión

mínima de 750 pesos por pescador. Los pescadores de PP al igual que los del GSC realizan

su mayor inversión en equipos para el camarón, sierra y manta.

Los costos de viaje de cada pescador varían según la comunidad donde se encuentra

y la distancia a la que debe salir a buscar su producto. Mientras los pescadores del GSC y

SF realizan más de 200 viajes al año promedio, en PP cada pescador realiza 76 salidas al

mar. En lo que se refiere al gasto en combustibles, la inversión para cada pescador del GSC

es mucho mayor que los pescadores de las otras dos comunidades, ya que estos salen más

veces al mar y a distancias más lejanas. La inversión en alimentos es aproximadamente el

doble para los pescadores del GSC y PP que para los de SF.
62

Tabla XII. Costos imputados a la pesca en el Alto Golfo de California

Promedio por Viaje en pesos ($) Redes Costo total


Viajes Combustible Lubricante Alimento Costo promedio temporada en la temporada
GSC 209 881 138 180 1109 54,630.96 $286,411.96
PP 76 624 185 190 999 49,446.08 $125,370.08
SF 279 593 75 150 818 64,869.52 $293,091.52
Promedio 188 752 161 185 1054 56,315.52 $234,957.85
Fuente: Elaborado con base en la encuesta aplicadas a pescadores ribereños de San Felipe,
B.C., Golfo de Santa Clara y Puerto Peñasco, Sonora, en junio de 2004. GSC: Golfo de
Santa Clara; PP: Puerto Peñasco; SF: San Felipe.

III.6.1.6 Egresos por parte de los pescadores en servicios básicos

El gasto promedio de los pescadores se distribuye entre los servicios de luz, agua, gas,

salud y alimentación. En el caso de GSC destinan cerca del 80 por ciento de sus ingresos al

consumo de alimentos. Los de PP menos de la mitad; un tercio de ellos gastan menos del

20% en alimento. Los pescadores de SF son los que mas invierten en este rubro (Tabla

XIII).

Tabla XIII. Gastos de los pescadores del Alto Golfo de California en servicios básicos

Alimento Servicios Salud


% GSC PP SF GSC PP SF GSC PP SF
0-20 5.0 37.5 0.0 85.0 57.1 100.0 96.6 85.7 100.0
21-40 23.3 16.6 12.5 15.0 42.9 0.0 1.7 3.6 0.0
41-60 36.7 29.2 50.0 0.0 0.0 0.0 1.7 10.7 0.0
61-80 28.3 8.4 21.3 0.0 0.0 0.0 0.0 0.0 0.0
81-100 6.7 8.3 16.3 0.0 0.0 0.0 0.0 0.0 0.0
Fuente: Elaborado con base en la encuesta aplicadas a pescadores ribereños de San Felipe,
B.C., Golfo de Santa Clara y Puerto Peñasco, Sonora, en junio de 2004

Con respecto al pago de servicios cerca de un tercio de los pescadores en el GSC y

más de la mitad en PP gastan menos de 10% en luz, agua y gas; cerca del 40% de los
63

pescadores de esa comunidad dedican en promedio un tercio de su ingreso en esos servicios

básicos. En lo que respecta al gasto en salud, menos del 97% de los pescadores GSC y las

dos terceras partes en PP destinan cerca del 20% de sus ingresos en servicios médicos.

Solamente un 16% de los pescadores gasta más de un 50% en salud.

III.6.2 Impacto de la Reserva sobre la economía de los pescadores en el Alto

Golfo de California.

III.6.2.1 La actividad pesquera dentro de la Reserva de la Biosfera

Tras la declaración y puesta en operación de la Reserva de la Biosfera en 1993, se preveía

una mejora en las condiciones de vida de la población de las tres comunidades ubicadas

dentro del área de protección. Específicamente, los cambios se reflejarían en el tamaño y

variedad de los organismos y por tanto, en nuevas especies capturadas, lo que provocaría

efectos directos en los ingresos de los pescadores. Ello ante el supuesto que la política de

conservación y manejo controlado de la pesca en la Reserva presupondría la presencia de

incrementos en los volúmenes de captura y consecuentemente una mejora en el poder

adquisitivo.

Como se puede observar en la tabla XIV, la visión y reflejo del éxito de esta área

natural depende del punto de vista de los pescadores en cada una de las comunidades. Así

se observa que cerca del 40 por ciento de los pescadores de PP consideran que sus ingresos

se han elevado a consecuencia de la mayor variedad de especies capturadas y también al

aumento en el volumen registrado. Otro grupo de pescadores consideran que la Reserva no

ha implicado mayores beneficios en los ingresos ni tampoco en cuanto a producción. Por


64

otra parte, son muy pocos los pescadores que observan un impacto negativo en su pesca (<

4%).

Tabla XIV. Impacto de la Reserva de la Biosfera en la actividad pesquera.

Impacto Comunidad (%)


SF GSC PP
Positivo 71.1 66.7 39.3
Negativo 20.5 18.3 3.6
La Reserva no influye en la pesca 3.6 15.0 21.4
No lo menciono 4.8 0.0 35.7
Fuente: Elaborado con base en la encuesta aplicadas a pescadores ribereños de
San Felipe, B.C., Golfo de Santa Clara y Puerto Peñasco, Sonora.

La opinión es notablemente distinta en el GSC y SF, donde más del 66% observa un

impacto positivo en la actividad pesquera al verse reflejado en el tamaño y volumen de

captura de los organismos marinos. Un poco más del 18 por ciento de los pescadores no

han visto un cambio significativo: ni positivo ni negativo.

III.6.2.2 Ingresos, pesca, turismo y otras actividades complementarias

III.6.2.2.1 Ingresos

La percepción de los pescadores en este rubro es distinta por comunidad y varía

mucho con respecto a su cercanía y dependencia de la pesca en la Reserva (Tabla XV).

En SF casi el 40% de los pescadores señala que la Reserva ha sido positiva para sus

ingresos. Un tercio de ellos manifiesta que la Reserva no ha traído beneficio alguno o no

observa cambio alguno en sus ingresos. En tanto, los pescadores del GSC, un tercio de ellos

observa que la Reserva tiene un impacto positivo a sus ingresos, pero la mitad de ellos

siente que sus ingresos han disminuido. Menos del 20% no ve mejoría alguna. Por otro
65

lado, la mayor parte de los pescadores de PP manifiesta que no ha percibido un cambio en

sus ingresos o no le ha puesto interés al mismo. Menos de un 20% manifiesta un beneficio

positivo al ingreso desde que existe la Reserva, y menos de un 4% dice que sus ingresos

han ido a menos. Podemos observar que los impactos positivos de la Reserva en la

percepción general de las comunidades ribereñas han sido reservados, mientras que una

mayoría encuentra estos impactos casi imperceptibles.

III.6.2.2.2 Pesca

Considerando que la efectividad de un área protegida descansa parcialmente en la

diversificación de las pesquerías pues ello reduciría la presión sobre las especies en peligro

de extinción, con la aplicación de la encuesta se encontró que la diversificación pesquera

varía para cada una de las comunidades, por ejemplo, los pescadores de SF señalaron que

hay nuevas especies que se explotan, mientras que los del GSC observan que hay una

disminución; por su parte, los de PP no identificaron cambio alguno en la abundancia de

especies (Tabla XV).

Los pescadores de SF y GSC conocen un poco más sobre los objetivos de la

Reserva que los de PP, expresada justamente cuando mencionan que la Reserva ha

funcionado como una zona de reproducción de especies; más de la mitad piensa que se ha

registrado un mayor número de organismos juveniles en las especies capturadas, es decir,

se advirtió un cambio positivo.

De los pescadores que opinaron positivamente, los de SF y PP registraron

variaciones en la abundancia de las capturas y un poco más del 20% de los pescadores del

GCS admitieron incrementos en la captura general de las especies con mayor valor
66

económico. Menos de un tercio de los pescadores menciona que hay un impacto negativo

en la pesca del camarón, que es precisamente la pesquería más importante de la zona. .

Sobre el acceso a la pesca, cerca de un tercio de los pescadores de SF y PP han

experimentado menos dificultades para desarrollarse en otras pesquerías desde que se

estableció la Reserva; en cambio sólo un 15 por ciento de los pescadores del GSC han

diversificado su pesca. Casi un tercio de los pescadores de SF respondieron negativamente

cuando se les preguntó si les rechazaron solicitudes para explotar otras pesquerías y menos

del 15 por ciento en el GSC y PP presentaron ese problema.

Casi el 17 por ciento de los pescadores de las comunidades opinaron que la Reserva

no ha impactado la pesca en la región; más de un tercio en el GSC y PP no sabían sobre el

posible beneficio derivado de un mayor volumen de capturas en la Reserva. Lo anterior nos

señala un notable desconocimiento de los impactos de la Reserva entre los pescadores de

las comunidades ribereñas.


67

Tabla XV. Impacto de la Reserva de la Biosfera en las comunidades pesqueras

San Felipe Golfo de Santa Clara Puerto Peñasco


Contenido / % Positivo Negativo N.I. No sabe Positivo Negativo N.I. No sabe Positivo Negativo N.I. No sabe

Actividad pesquera 71.1 20.5 3.6 4.8 66.7 18.3 15.0 0.0 30.3 3.6 21.4 35.7
Ingresos – sueldos 38.8 35 23.8 2.5 33.3 50.0 10.0 6.7 17.9 3.6 35.7 42.9
Diversidad en la
pesca 52.5 28.8 16.3 2.5 31.7 45.0 20.0 3.3 21.4 10.7 32.1 35.7
Zonas para la
reproducción de
especies 71.3 10 13.8 5 53.3 21.7 13.3 11.7 32.1 7.1 17.9 42.9
Turismo 46.1 14.5 36.8 2.6 21.7 5.0 48.3 25.0 53.6 0.0 10.7 35.7
Pesca ilegal 25.7 47.3 16.2 10.8 28.3 15.0 31.7 25.0 28.6 21.4 10.7 39.3
Acceso a la pesca 35.8 32.8 19.4 11.9 15.0 13.3 25.0 46.7 32.1 10.7 17.9 39.3
Capturas 50.8 21.5 16.9 10.8 20.0 33.3 15.0 31.6 50.0 7.1 3.6 39.3

Fuente: Elaborado con base en la encuesta aplicada a pescadores ribereños de San Felipe, B.C., Golfo de Santa Clara y Puerto
Peñasco, Sonora. N.I.: No ha impactado.
68

III.6.2.2.3 Turismo y otras actividades

San Felipe y Puerto Peñasco muestran un desarrollo turístico notable. Esto queda

confirmado cuando observamos la estructura de la PEA: el 64 y 59 por ciento,

respectivamente, de la población ocupada tienen un empleo vinculado a la industria

turística Por su parte los pescadores en esas comunidades consideran que la Reserva los ha

beneficiado pues les ha brindado la oportunidad de diversificar sus actividades económicas

ofreciendo algún servicio derivado de la creciente llegada de visitantes.

El GSC exhibe una proporción menor de habitantes dedicados al turismo (30 por

ciento) y sólo el 22% de los pescadores aprecian efectos positivos de las áreas naturales

protegidas; ya que la mayoría opina que la Reserva no ha favorecido el desarrollo de la

actividad turística en la comunidad debido a la falta de nuevas oportunidades de trabajo

relacionadas al turismo.

III.6.2.2.4 Capturas por especie

La opinión de los pescadores varía dependiendo de si las especies capturadas tienen

importancia comercial y si esta se realiza dentro de la zona de influencia de su comunidad.

Con estas consideraciones los datos de la encuesta arrojan los siguientes resultados:

Camarón. Los pescadores de PP y SF consideran que el establecimiento de la

Reserva ha tenido un impacto positivo, pues más del 40 por ciento de ellos señalan

incrementos en la captura del crustáceo, menos del 30 por ciento registran disminuciones y

el 23 por ciento no advierten cambios significativos (Tabla XVI). En cuanto al GSC, poco

menos de dos tercios señala haber experimentado disminuciones o han mantenido los
69

promedios históricos, el resto de la muestra dice que ha visto incrementarse los volúmenes

de captura.

Tabla XVI. Impacto de la Reserva en las capturas por especie

Impacto (%) Camarón Chano Curvina Sierra Tiburón


SF GSC PP SF GSC PP SF GSC PP SF GSC PP SF GSC PP
Aumentó 44.6 36.7 50.0 30.1 20.0 17.9 16.9 8.3 25.0 28.9 10.0 25.0 14.5 1.7 17.9
Disminuyó 26.5 31.7 21.4 24.1 16.7 3.6 15.7 38.3 32.1 18.1 25.0 17.9 10.8 25.0 17.9
No influye 22.9 31.7 10.7 18.1 35.0 46.4 13.3 20.0 14.3 14.5 41.7 32.1 13.3 10.0 10.7
No lo mencionó 6.0 0.0 17.9 27.7 28.3 32.1 54.2 33.3 28.6 38.6 23.3 25.0 61.4 63.3 53.6

Fuente: Elaborado con base en la encuesta aplicadas a pescadores ribereños de San Felipe, B.C., Golfo de
Santa Clara y Puerto Peñasco, Sonora.

Chano, curvina y sierra. Menos de un tercio de los pescadores en cada una de las

comunidades señalaron que tuvieron aumentos; el resto disminuciones o en el mejor de los

casos sin variaciones importantes. Para las otras especies no hay un patrón de

comportamiento específico pues varía de acuerdo a las especies.

Tiburón y manta. Son las especies de menor relevancia en cuanto a valor y

volumen de captura. Por lo mismo más de la mitad de los pescadores no proporcionó

opinión; de los que si se expresaron solo el 18% experimentó un cambio favorable.

III.6.2.3 Sociales

III.6.2.3.1 Migración

La región desde sus inicios ha sido un receptor de pescadores por la variedad de

especies que en ella habitan y el precio que alcanzan sus productos en el mercado nacional

e internacional. Un tercio de la población de pescadores de PP y el GSC es nativa de la

comunidad. En San Felipe, el 50 por ciento de los que ahí radican nacieron en esa localidad
70

(Tabla XVII). Los pescadores no nacidos en las tres comunidades proceden

primordialmente de Sonora y Sinaloa. Los renacidos en Baja California, Chiapas,

Guanajuato, Jalisco, Nayarit y otros estados, residen principalmente en GSC y SF. Un

tercio de las personas provenientes de estas últimas entidades se integraron a la pesca

después de hacer por lo menos un intento de cruzar a los Estados Unidos de América, lo

que da idea de los diversos orígenes de la población asentada en estas comunidades

pesqueras.

Por otra parte, el arraigo de los pescadores en las comunidades es de 24 años para

PP y el GSC, y 32 años para SF (Tabla XVII). En PP y SF casi un tercio de la población

tiene menos de 20 años de residencia. El el 60% y 70% de estas comunidades

respectivamente tiene entre 20 y 40 años viviendo en la región. En cambio, en el GSC, más

de un 40 por ciento de ellos tiene entre 1 y 20 años, y el 55 por ciento tiene arriba de 20

años. El 90% de los pescadores tiene menos de los 40 años en la región.

Tabla XVII. Lugar de nacimiento y tiempo de residencia de los pescadores ribereños.

Estado o región (%) Puerto Peñasco Golfo de Santa Clara San Felipe
Alto Golfo de California 32.1 31.7 49.4
Resto de Sonora 21.4 21.7 3.5
Resto de Baja California 3.6 10 15.7
Sinaloa 32.1 18.3 3.5
Otros estados 10.8 18.4 28
1-20 años 32.1 43.3 21.6
21-40 años 64.3 41.6 77.6
41+ años 3.6 15.0 -
Media 24.8 años 24.4 años 32.6 años
Fuente: Elaborado con base en la encuesta aplicadas a pescadores ribereños de
San Felipe, B.C., Golfo de Santa Clara y Puerto Peñasco, Sonora, en junio de
2004.
71

III.6.3 Alternativas de trabajo a la pesca de la Reserva

La diversidad de alternativas de empleo indicadas por los pescadores son muy

pocas, las más comunes fueron: el turismo, comercio y/u otra actividad pesquera. En SF un

tercio de los encuestados indicaron que se dedicarían a la actividad turística, 23 por ciento

al comercio; 19 por ciento no dejaría de pescar y un 11 por ciento a alguna actividad

relacionada con la pesca (Tabla XVIII).

Los pescadores de PP consideran como primera alternativa dedicarse al turismo,

seguido de alguna actividad relacionada a la pesca. La acuacultura y el comercio para estos

pescadores no constituyen en una verdadera alternativa productiva aunque si consideran

como una opción viable. Los pescadores del GSC estimaron como opción principal el

comercio, seguido del turismo y por último de alguna actividad relacionada con la pesca.

Finalmente un número importante de pescadores del GSC y PP se dedicarían a actividades

relacionadas con el préstamo de servicios o algún oficio.

Tabla XVIII. Alternativas económicas a la actividad pesquera en el Alto Golfo de


California

Alternativa económica (%) Puerto Peñasco Golfo de Santa Clara San Felipe
Acuacultura 7.1 3.3 -
No dejaría de pescar 3.6 16.7 19.0
Comerciante 7.1 26.7 22.8
Trabajar en empresa
privada 3.6 8.3 -
No lo menciona 21.4 1.7 16.4
Turismo 28.6 16.7 30.4
Otro 14.3 24.9 -
Alguna actividad
relacionada con la pesca 14.3 1.7 11.4
Fuente: Elaborado con base en la encuesta aplicadas a pescadores ribereños de San Felipe,
B.C., Golfo de Santa Clara y Puerto Peñasco, Sonora, en junio de 2004.
72

III.6.3.1 Compensación económica al posible cierre de la pesca

En la tabla XIX, se muestra que aproximadamente un tercio de los pescadores de cada una

de las comunidades solicitaría un permiso para dedicarse a otra actividad pesquera como la

extracción de bivalvos o la pesca deportiva. Un número importante de pescadores en PP y

SF buscaría la manera de seguir pescando como siempre lo han hecho. Un 40 por ciento de

los pescadores en el GSC trataría de obtener una compensación económica o que el

gobierno les reembolse su permiso. Son pocos los que pedirían otras opciones a la

autoridad en la materia para mantener los empleos en la región y otro grupo no exigiría

nada ya que varias de estas personas tienen negocios pequeños, como el pequeño comercio,

que complementan los ingresos.

Tabla XIX. Compensación económica exigida al gobierno por el cierre de la pesca en la


Reserva.

Opciones al cierre de la pesca Golfo de Santa San


(%) Puerto Peñasco Clara Felipe
Compensación económica 7.1 26.7 7.0
Un permiso para otra pesquería 39.3 33.3 29.0
El gobierno le pague lo que costo
3.6 15.0 2.0
el permiso-concesión
Nada 10.7 6.7 -
Segaría pescando de cualquier
21.4 8.3 27.0
manera
Otra 17.9 1.7 -
Generación de otros empleos - 6.7 -
No lo menciono - 1.7 -
Fuente: Elaborado con base en la encuesta aplicadas a pescadores ribereños de San Felipe,
B.C., Golfo de Santa Clara y Puerto Peñasco, Sonora, en junio de 2004.
73

III.7 Conclusiones

El crecimiento de la población de pescadores en las comunidades del Alto Golfo de

California entre 1990 y el 2000 se mantuvo estable, gracias a la diversidad de empleos que

se generaron en ese periodo. El desarrollo de estas comunidades varía según la proyección

económica dentro de los programas de desarrollo por parte de las autoridades locales y

estatales. San Felipe y Puerto Peñasco han evolucionado del sector primario al terciario, y

el Golfo de Santa Clara mantiene su economía de la pesca.

Aunque existe una diversificación importante de las actividades económicas, la

pesca sigue siendo fundamental en la estructura productiva de las tres comunidades: el

Golfo de Santa Clara basa su economía en los ingresos generados por los pescadores

ribereños. En la actividad pesquera subyace una gama amplia de actividades

complementarias mismas que generan una cantidad de fuentes de empleos indirectos que

hacen pensar que la pesca difícilmente desaparecerá (Cudney y Turk, 1998).

El aumento del número de cooperativas y de organizaciones de pescadores, no

especifica un incremento en el número de pescadores, sino una división explicada por

intereses particulares tanto en la diversificación de la actividad productiva como en las

cuotas de participación en las organizaciones. Existe una mayor cantidad de socios en las

comunidades de Puerto Peñasco y San Felipe, ya que existe una variedad de opciones

productivas e incluso dentro de la misma pesca como puede ser la extracción de moluscos o

bien en temporadas de escasa pesca ellos se dedican a la actividad turística (comunicación

personal pescadores).

La Reserva de la Biosfera no ha sido determinante para el desarrollo y crecimiento

de su calidad de vida de los pescadores ribereños. Los gastos en equipo y en cada uno de
74

los viajes son altos durante todo el año y los ingresos captados por individuo no son tan

grandes como para poder solventar todos sus gastos en servicios y bienes materiales. Esta

situación se observa con más claridad con los pescadores del Golfo de Santa Clara, los

cuales realizan más viajes al interior de la parte marina de la Reserva durante el año y sus

costos de viaje son muy altos en comparación de los pescadores de las otras dos

comunidades. Por su parte, los pescadores de Puerto Peñasco y San Felipe, alternan la

pesca con la actividad turística, lo que hace que su solvencia económica sea más relajada

para adquirir bienes y pagar ciertos servicios.

Estas situaciones hacen justificable la negativa de los pescadores hacia que la

Reserva haya sido un detonante en el incremento de sus ingresos y por ende de una mejor

calidad de vida. Más de la mitad de ellos no ven todavía un beneficio directo y creen que ha

limitado su nivel de captura de las especies explotables. Esto ha provocado que muchos de

los pescadores busquen alternativas de trabajo en los tiempos de ocio o cuando no hay

pesca.

Por otra parte, la visión ambiental de los pescadores que tienen sobre la Reserva ha

suscitado opiniones diversas, pero en general ven a esta área natural protegida como una

solución a sus problemas pesqueros, porque han observado una mayor abundancia y

variedad de especies marinas durante el año tanto de escama como de moluscos. La

Reserva ha ayudado a que la pesca ilegal vaya disminuyendo y ha fomentado la actividad

turística en la región, siendo esta una alternativa viable de trabajo para los pescadores como

para sus familiares.

El fortalecimiento de la actividad pesquera de la zona requiere del fomento e

inversión en infraestructura para actividades económicas distintas a la pesca, ello con el fin
75

de disminuir el esfuerzo sobre las especies comerciales e incrementar tanto el valor del

producto como el volumen de captura, y para ofrecer alternativas económicas. Una solución

puede ser la capacitación de los pescadores en nuevas técnicas de pesca y una

concientización para que alterne la pesca con otro trabajo acorde a sus capacidades. Un

cierre a la actividad pesquera no sería una solución, ya que existe un gran número de

pescadores que no dejarían de pescar y buscarían la forma de seguir en ella afectando la

Reserva y sus especies.

En resumen los datos descritos anteriormente no sugieren una mejoría en el

bienestar de las comunidades del Alto Golfo de California después del decreto de la

Reserva y el Refugio. Es necesario establecer canales de negociación más efectivos con los

pescadores pues sin ello es imposible garantizar el éxito de esta ANP; en este sentido

cualquier tipo de compensación económica debe fomentar el nivel de vida de la población y

la recuperación de las especies comerciales en peligro de extinción, tomando en cuenta

elementos ecológicos, sociales, económicos e institucionales para garantizar el éxito de la

conservación (Davis 2005; Harris et al. 2005; Leslie 2005).

Cualquier propuesta que incluya los aspectos anteriores, fomentará un equilibrio

entre la recuperación de los recursos marinos, el incremento de las poblaciones de las

especies en peligro de extinción y una mejor calidad de vida de los pobladores de las

comunidades en la región. Este trabajo puede sentar las bases para implementar políticas de

manejo para la ordenación pesquera y la conservación en el Alto Golfo de California.


76

Capítulo IV

Situación actual de la Reserva y alternativas de manejo para la pesca y conservación

de la vaquita marina

IV.1 Introducción

La legislación mexicana contempla el establecimiento de áreas naturales protegidas

(ANP) para la conservación de porciones terrestres o acuáticas del territorio nacional

representativas de los diversos ecosistemas, en donde el ambiente original no ha sido

esencialmente alterado y que producen beneficios ecológicos cada vez más reconocidos y

valorados (FFE, 1996). Se crean mediante decreto presidencial y se establece su manejo de

acuerdo con la Ley General del Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente y su

Reglamento de ANP. De acuerdo al tipo de protección y aprovechamiento posible, pueden

ser de seis categorías (LGEEPA, 1988). Una de las categorías de ANP es la Reserva de la

Biosfera, en donde pueden quedar representados uno o más ecosistemas no alterados por la

acción del hombre o que requieren ser preservados y restaurados, en los cuales habitan

especies representativas de la biodiversidad nacional, incluyendo a las consideradas

endémicas, amenazadas o en peligro de extinción (LGEEPA, 1988).

El Alto Golfo de California es un ejemplo donde el aprovechamiento de los recursos

naturales afecta directamente el ecosistema marino debido al impacto que realiza la flota

pesquera y el represamiento del Río Colorado (Brusca, 2004; Sala et al. 2002).

La demanda de especies de alto valor comercial en la zona ha motivado el aumento

del esfuerzo pesquero poniendo en peligro a especies con valor ecológico como la totoaba y

la vaquita. La totoaba fue vedada permanentemente en 1975, debido al descenso en las

capturas atribuido a la pesca excesiva de hembras grávidas en época de desove y captura


77

incidental de juveniles en barcos camaroneros (Cudney y Turk, 1998; Blanco, 2002). La

totoaba fue incluida en la lista de especies en peligro de la Convención Internacional sobre

el Tráfico de Especies Silvestres (CITES) en 1976 (Twiss y Reeves, 1999).

Con la entrada en vigor del decreto de la Reserva de la Biosfera del Alto Golfo de

California y Delta del Río Colorado (RBAGCDRC) en 1993, se limita el uso de redes

mayores a 6”de luz, y del esfuerzo pesquero para proteger sobre todo a la totoaba y vaquita

marina (INE 1995; Greenberg 2005). La medida más reciente para proteger a la vaquita

marina y su hábitat fue la promulgación en diciembre del 2005, del Programa de

Protección de la Vaquita dentro de un Área de Refugio. El Refugio se ubica en la porción

occidental del Alto Golfo de California, comprende un área total de 1,263.85 km2 dividido

en dos polígonos: Polígono A, dentro de la RBAGCDRC con una superficie de 897.09 km2,

y el Polígono B, fuera de la RBAGCDRC con 366.76 km2, la cual es el área donde se ha

avistado a dicha marsopa y que permite su protección y recuperación, en la que se limita el

uso de redes de arrastre y agalleras (DOF 2005).

El manejo de la RBAGCDRC y del Refugio implica una serie de esfuerzos para

lograr por un lado la protección de especies en peligro y por otro el aprovechamiento de

varias especies de importancia comercial. La pesca comercial en esa zona se transforma en

una actividad económica con implicaciones ambientales. Las medidas de conservación en

el Alto Golfo plantean un dilema pues fueron diseñadas para minimizar los impactos

negativos de la pesca en las especies en peligro de extinción, y maximizar el bienestar de

las comunidades y de sus pescadores (DOF 2005; Harris et al. 2005). En consecuencia, en

la legislación mexicana se reconoce que sólo mediante la participación de las comunidades

afectadas se podrán lograr acuerdos para el manejo de la RBAGCDRC y del Refugio


78

(Palumbi et al. 2003). Esto implica la definición de metas comunes en la conservación y el

manejo pesquero, expresadas en una política de manejo de los recursos naturales (Davis

2005).

IV.1.2 Estrategias de manejo de Reservas Marinas.

La existencia de programas y mecanismos de manejo que impactan los resucesos

pesqueros y el sistema acuático circundante, son alternativas que se han incrementado de

manera rápida y que se han debatido durante los últimos veinte años (Munro y Sumalia,

2002). Estas políticas tienen en si contrapuntos que no permiten compensar el buen manejo

de una pesquería y la sustentabilidad de la pesca en su conjunto. Existe una aceptación

general, que en muchas ocasiones la aplicación de estos modelos de manejo de las áreas de

pesca subestima el correcto manejo de una pesquería y no contribuye a la sustentabilidad de

los recursos (Munro y Sumalia, 2002; Carter, 2003).

Con la entrada en vigor del Programa de manejo de la Reserva, varias categorías de

modelos económicos se manejan para cuidar la sustentabilidad de los recursos pesqueros y

por consiguiente una estabilidad de las economías regionales o locales. Entre ellas

encontramos los subsidios: en la adquisición de nuevas embarcaciones, artes de pesca,

impuestos, gasolinas y lubricantes y operación de los equipos (Munro y Sumalia, 2002;

Clark et al. 2005); áreas de no pesca: estas pueden potencializar la sustentabilidad de una

pesquería o especie (Mangel, 1998); la misma creación de áreas protegidas: en la que se

deben de priorizar las alternativas en la forma de aprovechar un área marina protegida

(Carter, 2003); las transferencias de cuotas: el gobierno debe de establecer cuotas, duración

y áreas de captura a un usuario o grupos de usuarios para su beneficio (Townsend et al.

2006) y la compra de derechos: la adquisición de los derechos de pesca o permisos por


79

parte del gobierno o particulares a los pescadores, lo cual reduciría el esfuerzo en el área de

captura (Marjit y Chowdhury, 2004; Clark et al. 2005).

Estos modelos en lo individual o una mezcla de ellas representan una alternativa

viable para la sustentabilidad de la RBAGCDRC, en la que de cabida a la conservación del

medio natural del sistema marino y las especies en peligro de extinción y aquellas

pesquerías de especies de alto valor económico, encontrando las ventajas de cada modelo

que beneficien la economía local.

En este capítulo se identifica el valor ambiental que los pobladores de las

comunidades en la región le dan a la RBAGCDRC y el Refugio de la vaquita, ya que esta

afecta de una manera su actividad económica, y que se ven sujetos a cumplir con las

regulaciones que de ella surgen, sobre todo en el cuidado de las especies en peligro de

extinción. En los resultados se interpreta lo que el pescador tiene de conocimiento sobre la

normatividad ambiental dentro estas dos áreas naturales protegidas ANPs. Su conocimiento

sobre lo que es la Reserva y su impacto a su actividad económica. Además, de lo que ellos

buscarían si se aplicara de forma su generis un cierre de las ANPs a la pesca.

Por otro lado, la discusión se desarrolla en dos etapas. La primera parte se hace un

análisis de los resultados de manera que se entienda el porque el pescador manifiesta una

opinión reservada sobre los beneficios y su aportaciones a su actividad económica de la

Reserva y de las limitaciones que esta envuelve al pescador. En la segunda parte, se

proponen varios puntos los cuales puedan ser base para la formulación de un plan de

manejo para el Refugio de la vaquita y la disminución parcial del esfuerzo pesquero en la

zona, como punto de partida a un mejor administración de los recursos naturales,

recuperación de las especies vulnerables y un desarrollo sustentable de las comunidades de


80

la zona (FAO 2000; Brandt 2005).

IV.2 Objetivo

Se darán propuestas de actividades económicas que sean la base para un plan de manejo en

el área de Refugio de la vaquita marina para su protección, conservación y un manejo

sustentable de las pesquerías en la zona.

IV.3 Metodología

Se realizó una encuesta a los pescadores ribereños, donde se pregunto sobre la

funcionalidad de la Reserva como un instrumento para la conservación de especies

comerciales y en peligro de extinción (caso vaquita). Este cuestionario constó de 20

preguntas cerradas de interés ambiental, con dos apartados: la primera parte sobre la reserva

y el cumplimiento de sus objetivos, y la segunda sobre la protección de las especies en

peligro de extinción y el manejo de la Reserva de la Biosfera del Alto Golfo de California y

Delta del Río Colorado RBAGCDRC y el Refugio de la vaquita marina RVM.

IV.4 Resultados

En la figura 13 observamos que de los pescadores entrevistados y que tienen edad para

haber tenido experiencia en la pesca antes de la entrada de la RBAGCDRC. De estos,

tenemos que el grupo con mayor número de pescadores, alrededor del 30%, son los que

están en el rango de los 40 años de edad en las tres comunidades. En Puerto Peñasco hay un

grupo entre los 35 y 40 años similares al primero, y para los de El Golfo de Santa Clara el
81

grupo más grande esta entre los 30 y 35 años. Los pescadores mayores de 50 años en las

tres comunidades son los menos.

SF GSC PP

50

40
Porciento
30

20

10

0
> 30 > 35 > 40 > 50 > 60
Edad

Figura 13. Rango de edades por grupo de los pescadores en las tres comunidades en el Alto
Golfo de California.

El tiempo de residencia de los pescadores en el Alto Golfo de California es un

aspecto importante. El 70% de ellos tienen mas de 19 años viviendo en sus comunidades, y

de estos la mayor parte tiene de 30 a 40 años viviendo ahí sobre todo aquellos que son de El

Golfo de Santa Clara, como se puede ver en la figura 14. En San Felipe los grupos más

importantes son los que están entre los 30-40 y 40-50 con un 35% de la población cada

uno. Los pescadores de Puerto Peñasco son hombres que tienen menos tiempo de

residencia en el lugar ya que la mayoría tienen menos de 30 años de residencia en la

comunidad.
82

SF GSC PP

50

40

Porciento
30

20

10

0
> 19 > 25 > 30 > 40 > 50 > 60
Tiempo de residencia

Figura 14. Rango del tiempo que llevan viviendo los pescadores en las comunidades del
Alto Golfo de California.

IV.4.1 La Reserva y las vedas

Con el establecimiento de la RBAGCDRC entran ciertas medidas restrictivas para su

explotación, entre ellas encontramos a las vedas. Estas tienen cierto efecto sobre la

extracción de ciertos productos.

Los pescadores tienen un punto de vista distinto en cada comunidad. Mientras en El

Golfo de Santa Clara y San Felipe la mayoría de los pescadores ven que las vedas

funcionan, en Puerto Peñasco menos de la mitad de los pescadores opinan que funcionan

las vedas (Tabla XX). Los pescadores que piensan que las vedas no funcionan son los

menos, ya que estos no llegan ser más del 20% de los pescadores como se ve en San Felipe.

Es importante señalar que un 43% de los pescadores del Puerto Peñasco no opinaron al

respecto por que no tienen conocimiento de lo que señalan las vedas en protección de las

especies marinas dentro de la Reserva.


83

Tabla XX. Qué opina el pescador de las vedas

Golfo de
Puerto Peñasco Santa Clara San Felipe
Funcionan 43 68 76
No funcionan 14 8 17
No lo menciono 43 24 7
Fuente: Elaborado con base en la encuesta aplicadas a pescadores ribereños de San Felipe,
B.C., Golfo de Santa Clara y Puerto Peñasco, Sonora.

En la tabla XXII, vemos el conocimiento que tienen los pescadores de las diferentes

vedas que hay en la región. La mayor parte de ellos tienen conocimiento de la veda de una

o dos especies en específico (camarón y/o totoaba y/o caguama, en la mayor de las veces)

pero no conocen mas de tres vedas en su conjunto. La veda que más ubican es el de la

totoaba, seguida de la del camarón. Pero un aspecto importante a observar que un 22% de la

población de los pescadores en el Golfo de Santa Clara no mencionaron o conocen veda

alguna.

Tabla XXI. Conoce las regulaciones sobre vedas

Puerto Golfo de
Peñasco Santa Clara San Felipe
Totoaba y caguama 7 28 0
No lo mencionó 7 20 0
Camarón 21 15 57
Camarón y totoaba 29 10 19
Totoaba 7 7 0
Camarón y caguama 4 5 4
Curvina 0 5 0
No 0 2 4
Vaquita y totoaba 11 2 6
Camarón, vaquita y totoaba 14 2 5
Caguama, vaquita y totoaba 0 2 4
Camarón y curvina 0 2 0
Caguama 0 0 1
caguama y reserva 0 0 1
Fuente: Elaborado con base en la encuesta aplicadas a pescadores ribereños de San Felipe,
B.C., Golfo de Santa Clara y Puerto Peñasco, Sonora.
84

Con respecto a la vigilancia sobre las vedas, los puntos de vista de los pescadores difieren

mucho entre pescadores de cada comunidad. En el Golfo de Santa Clara, cerca del 50% de

ellos tienen una buena impresión sobre la vigilancia y menos del 25 % opina lo contrario,

aunque existe otra cuarta parte de la población en esa comunidad que se le hace insuficiente

la vigilancia, sobre todo en época de la captura del camarón (Tabla XXII).

Para los pescadores de San Felipe, más del 60% tiene una opinión negativa sobre la

eficiencia de la vigilancia de las vedas sobre todo dentro de la Reserva, y menos del 25% de

ellos ve de buena manera el esfuerzo que se hace en el cuidado y cumplimiento de las

normas. En Puerto Peñasco arriba del 40% de los pescadores opinan positivamente de lo

que se realiza en inspección y vigilancia de la Reserva y las vedas, pero hay una gran

mayoría que no dio opinión alguna, ya que se dedican a otra pesquería que no esta normada

adecuadamente y no requiere de un cuidado estricto.

Tabla XXII. Que opina sobre la inspección y vigilancia de las áreas de pesca

Golfo de
Puerto Peñasco Santa Clara San Felipe
Eficiente 36 45 17
Insuficiente 14 27 16
Ineficiente 4 20 57
No sabe 0 5 0
Adecuada 7 3 4
No menciono 39 0 7
Fuente: Elaborado con base en la encuesta aplicadas a pescadores ribereños de San Felipe,
B.C., Golfo de Santa Clara y Puerto Peñasco, Sonora.

Desde el establecimiento de la Reserva la normatividad cambio y nuevas

restricciones se impusieron. Desde entonces los pescadores han cambiado sus hábitos de
85

pesca y ven necesario el cumplimiento de la normatividad para la región y de las normas

pesqueras que a la Reservan afectan. Los pescadores de las tres comunidades concuerdan

en que se debe cumplir en apego a la normatividad con la pesca y cuidado de los recursos

naturales (Tabla XXII). Pocos son, menos del 20%, los que sienten que la Reserva no

influye con su actividad, y menos del 10% opinan que el cumplimiento de la normatividad

ha sido laxa desde la entrada en vigor de la Reserva.

Tabla XXIII. La Reserva de la biosfera influye para que el cumplimiento de la


regulación

Puerto Golfo de
Peñasco Santa Clara San Felipe
Aumente 32 75 76
Disminuye 7 5 7
La reserva no influye 14 17 12
No lo mencionó 46 3 5
Fuente: Elaborado con base en la encuesta aplicadas a pescadores ribereños de San Felipe,
B.C., Golfo de Santa Clara y Puerto Peñasco, Sonora.

IV.4.2 Los pescadores y la Reserva

Un aspecto importante que se debe de entender, es el conocimiento que tienen los

pescadores sobre lo que es la Reserva. Por ello se les hicieron preguntas para saber que

piensan sobre la Reserva y su efecto en la pesca.

Una gran parte de los pescadores del Alto Golfo de California conoce en que

consiste la Reserva y en cuantas partes esta dividida. Los que más conocimiento tienen al

respecto son los de San Felipe y El Golfo de Santa Clara en un 86 y 65% respectivamente.

Pero también, en El Golfo de Santa Clara, están la mayor parte de los pescadores que no

conocen lo que es la reserva (35%), seguidos de los pescadores de Puerto Peñasco (21%)
86

(Tabla XXIV). Un aspecto importante a resaltar es que una gran parte de los pescadores de

Puerto Peñasco no quisieron opinar al respecto.

Tabla XXIV. Conoce las zonas en que se divide la zona de la biosfera

Puerto Peñasco Golfo de Santa Clara San Felipe


si 43 65 86
no 21 35 10
No lo menciono 36 0 5
Fuente: Elaborado con base en la encuesta aplicadas a pescadores ribereños de San Felipe,
B.C., Golfo de Santa Clara y Puerto Peñasco, Sonora.

Igual que en la pregunta anterior, una gran mayoría tiene una opinión positiva de la

Reserva, pero ahora respecto al cumplimiento de los objetivos por la cual fue creada. Más

de la mitad de los pescadores en El Golfo de Santa Clara y San Felipe aseguran que se esta

cumpliendo con estos objetivos, con un 68 y 65% respectivamente. En Puerto Peñasco un

poco menos de la mitad de ellos tiene una opinión positiva (Tabla XXV).

El 30% de la población de pescadores de San Felipe piensa que no se han cumplido

con los objetivos de la Reserva y solamente el 8% de los pescadores de El Golfo de Santa

Clara piensa de la misma manera. Por otro lado, menos del 25% de los pescadores de El

Golfo de Santa Clara no conocen los objetivos de la Reserva, y menos del 5% de los

pescadores en las otras dos comunidades que las ignoran.


87

Tabla XXV. Considera que los objetivos de la Reserva se han cumplido

Puerto Peñasco Golfo de Santa Clara San Felipe


si 43 68 65
no 11 8 30
no los conozco 4 24 1
No lo menciono 43 0 4
Fuente: Elaborado con base en la encuesta aplicadas a pescadores ribereños de San Felipe,
B.C., Golfo de Santa Clara y Puerto Peñasco, Sonora.

IV.5 Discusiones

Desde el establecimiento de la Reserva la normatividad cambio en algunas medidas

y nuevas restricciones se impusieron para proteger a las especies del medio marino. Este

nuevo manejo de esa parte del territorio nacional propicio que el comportamiento de los

pescadores se presentara más a la defensiva y tratara de entender su nueva realidad, y

adecuarse a la nueva normatividad en el cuidado del medio ambiente marino y de las

especies que en ella habitan.

Diversos sucesos se han venido presentando desde trabajos para establecer la

Reserva en junio de 1993 (Greenberg, 1993a), su programa de manejo en diciembre de

1995 (Rojas-Bracho et al. 2006) y aquellos sobre la estimación, protección y

establecimiento del Refugio de la vaquita marina en diciembre del 2005 (Vidal, 1995;

Hohn et al. 1996; Barlow et al. 1997; Jamarillo-Legorreta et al. 1999; D’Agrosa et al.

2002; Bracamonte, 2001; Rojas-Bracho y Jamarillo-Legorreta, 2001; Rojas-Bracho et al.

2006). Desde el 2002, se vienen realizando trabajos en conjunto de los pescadores con las

autoridades, centros de investigación, comercializadoras (Ocean Garden) y organizaciones

ambientalistas se realizan para encontrar nuevas formas y alternativas para explotar de


88

manera racional y sustentable los productos que de el mar se extraen sin dañar el equilibrio

ecológico marino y de aquellas poblaciones de organismos que se encuentran en peligro de

extinción como la vaquita marina, entre otros (Rojas-Bracho et al. 2006).

IV.5.1 El manejo de la Reserva por los pescadores del Alto Golfo de California.

Una situación que se observa en una gran parte de este planeta es el mal manejo de

los recursos naturales marinos. Muchos de estos recursos se encuentran en una situación

crítica, y su escasez debilitan aún más la economía de aquellas regiones pobres o

subdesarrolladas, sobre todo en las zonas costeras de los países en desarrollo (Islam y

Bradem, 2006), por lo cual una de las prioridades más apremiantes de los políticos y grupos

activistas de la esas localidades (v.g. Alto Golfo de California) es la búsqueda de un

estándar elevado en la calidad de vida de sus pobladores (Perrin, 1999).

La administración y buen manejo de una reserva es variable dependiendo de la

magnitud del uso o aprovechamiento que se le pueda hacer, y un mal manejo cae en la

impopular de los que son sus usuarios, por lo que debe de alcanzar objetivos alcanzables

reforzando el fin por el cual fue establecida esa reserva (Rojas-Bracho et al. 2006).

IV.5.2 Alternativas económicas para la protección del sistema marino de la

RBAGCDRC y Refugio de la vaquita marina.

El análisis de la pesca y su efecto sobre las especies en peligro de extinción,

compromete buscar alternativas viables para disminuir ese impacto sobre los organismos y

su medio ambiente. Nuestras propuestas pretenden ser base para implementar un esquema

de compensación económica que ayude a disminuir la pesca artesanal en el Refugio de la


89

vaquita marina a través de mecanismos como la compra de derechos sobre la captura en el

área natural protegida (Clark et al. 2005), o el subsidio a la pesca para un cambio de

actividades, que son políticas pesqueras que recientemente son altamente utilizadas para la

ordenación pesquera (Munro y Sumaila, 2002), y el desarrollo de otras alternativas

económicas relacionadas con la Conservación de los ecosistemas. Estos mecanismos

pueden generar un impacto positivo sobre ecosistemas completos, e influenciar sobre el

desarrollo económico y social de las comunidades en la región (Vail, 2005).

La zona del Alto Golfo de California, es un área con una gran diversidad en

especies y tiene una alta importancia socio económica debido al flujo de los servicios y

bienes ecológicos que se pueden captar en las economías locales (Enriquez-Andrade et al.

2005). Estos servicios pueden tener un impacto positivo, ya que bien manejados son

selectivos, disminuyendo el riesgo de la captura incidental de especies consideradas en

peligro de extinción.

IV.5.2.1 La pesca deportiva y recreacional.

La pesca deportiva es un poderoso atractivo turístico para la región, está actividad

detonó el desarrollo de hoteles, marinas y embarcaciones en varios sitios del Golfo de

California, y es una actividad que se realiza a lo largo de todo el año. Las Áreas Naturales

Protegidas pueden desempeñar un papel importante como promotoras de la pesca deportiva

responsable. En estos productos podemos también incluir a los tiburones de las familias

Carcharhinidae, Sphyrnidae, y Triakidae, que son especies de tiburones grandes atractivos

para su pesca (Lluch-Cota et al. 2006). Otras especies que pueden ser incorporados a la
90

pesca deportiva son la totoaba7 y la curvina golfina, que son organismos de gran tamaño en

su edad adulta (Cisneros-Mata et al. 1995) y que pueden ser considerados atractivos por

aquellos que les gusta esta actividad.

La Ley de Pesca en su Artículo 95 fracción I, nos dice que en relación a la

protección de un ANP la pesca deportivo-recreativa no podrá realizarse dentro de un área

natural protegida. Esto contradice a lo establecido por la LGEEPA (1988) en su Artículo 48

párrafo tercero, que establece “que solo se podrán realizar actividades productivas que sean

estrictamente compatibles con los objetivos, criterios y programas de aprovechamiento

sustentable en los términos del decreto respectivo”. En su Artículo 68, nos indica que

“….se observarán las disposiciones de la LGEEPA, de las leyes en que se fundamenta la

declaratoria de creación correspondiente ….. y los programas de manejo”. El programa de

manejo de la Reserva (1995) en su capítulo 4.1.1 sobre el programa de pesca, inciso e,

“estrategias para la política de aprovechamiento con control”, permite la pesca deportiva

con acuerdo al Programa Nacional de Pesca Deportiva y se elabore un programa específico

para la región.

Esta actividad es un gran detonante de ingresos, además de ser selectiva en las

especies que se van a capturar, la cual no afectaría a las poblaciones de mamíferos marinos

y aquellas de importancia comercial para el pescador. El valor de un trofeo como un pez

vela, dorado y todos aquellos reservados para la pesca deportiva y recreativa dentro de una

7
Esta especie se encuentra en listada dentro de listas internacionales de especies en peligro de extinción, la
cual la sujeta a una veda permanente. Pero en realidad no se sabe cual es el estado actual de su población, ya
que no hay registros recientes de sus capturas. Es conocido por todos que en la actualidad este producto se
sigue explotando de manera ilegal, se sabe de pescadores que han sacado ejemplares de gran tamaño y de
quienes lo han sacado. Por eso el someter a esta especie a una explotación racional a través de la pesca
deportiva podría ser un alternativa para evaluar el estado actual de la población de este organismo y de
incorporar a los totoaberos a explotarla de manera legal.
91

ANP traerían un atractivo adicional, disminuiría el esfuerzo pesquero sobre las especies

tradicionales dentro de la Reserva y propiciaría una diversificación de la actividad

pesquera.

IV.5.2.1 Observación de mamíferos marinos

La observación de mamíferos marinos todavía es una actividad muy nueva en

México. Esta actividad bien manejada atrae un gran número de turistas e incrementa el

desarrollo de un conjunto de beneficios y servicios (Hoyt, 1999), y su potencial todavía no

ha sido alcanzado (Vial, 2005; Figura 19).

La observación de mamíferos marinos puede proporcionar un importante ingreso a

las comunidades del Alto Golfo de California. Esta podría convertirse en un mediano plazo

en una fuente importante de empleos con un beneficio social y ambiental (Vail, 2005). Los

observadores de ballenas y grupos naturalistas contribuyen a menudo económicamente al

sostenimiento de la actividad, y son los que gastan más en las comunidades que otro grupos

de visitantes (Hoyt y Hvenegaard, 2002). Una parte del esfuerzo pesquero puede ser

canalizado hacia el sector educativo, ya que los pescadores pudieran ser regularmente

contratados por institutos de investigación para la observación, investigación y recolección

de evidencia científica para el cuidado de los mamíferos marinos y el de su medio ambiente

(IFAW, 1999).

El buen manejo de esta actividad debe estar basado en lineamientos adecuados en

base a la normatividad existente en la observación de ballenas (NOM-131- SEMARNAT-

1998) y así asegurar una actividad sustentable. Un aspecto importante para poderle dar una

continuidad y permanencia a la actividad, autoridades y pescadores deben delinear


92

políticas y definir estrategias de manejo en conjunto para los visitantes y de las futuras

concesiones a las empresas “ecoturísticas”, tomando en consideración las recomendaciones

que presenten las instituciones académicas al respecto (Vail, 2005).


93

Capitulo V

Interpretación de los conflictos entre conservación de la vaquita marina

y la pesca en el Alto Golfo de California: un caso de estudio

V.1 Introducción

La pérdida de la biodiversidad es la crisis irreversible más importante que pone en

peligro el balance de nuestro medio ambiente con el desarrollo de la especie humana

(Gowdy y McDaniel, 1995). Sin embargo, la conservación de la biodiversidad requiere de

una inyección de recursos como territorio, poder humano y financiamiento (Lu et al. 2006).

Ya que la conservación de la naturaleza y el desarrollo socioeconómico están muy

relacionados en la base de un sistema de recursos común.

En este sentido las políticas para la conservación de la biodiversidad deben tomar en

cuenta los objetivos de desarrollo de cada nación (Seely et al. 2003). Aunque para razones

de índole ecológico y económico, es más efectivo el conservar hábitats que especies

(Simberloff, 1998) siendo un caso de uso de territorio (Lu et al. 2006).

Las oportunidades de los costos de conservación son dejados a un lado en muchas

ocasiones en los países en desarrollo, ya que estos implican limitar las actividades

productivas que en esa zona se realizan a la falta de alternativas que se puedan ofrecer por

falta de infraestructura y en ocasiones a que las mismas personas se restringen a los

cambios, de la forma en como las sociedades deciden el manejo del medio natural

(Schnaiberg y Gould, 1994).

La interacción entre los mamíferos marinos con la pesca comercial ha existido

desde hace tiempo, pero esta se incrementado recientemente y con mayor frecuencia
94

poniendo en peligro la existencia de esas especies (DeMaster et al. 2001). Esta interacción

puede resultar en la mortandad o en heridas de gravedad para los mamíferos marinos

capturados en las redes de las embarcaciones por accidente (Alverson et al. 1994).

La vaquita marina (Phocoena sinus) es un caso de esta complejidad social, donde

por un lado, la actividad pesquera en la región del Alto Golfo de California es vital para el

sostenimiento económico de cientos de pescadores que habitan tres comunidades y que la

mayor parte de su esfuerzo lo realizan dentro de la Reserva de la Biosfera del Alto Golfo de

California y Delta del Río Colorado, y por el otro, es el lugar en que se encuentra éste

cetáceo, único por su tamaño y características ambientales de su hábitat (Brownell, 1986).

Entender esta complejidad nos dará la base para desarrollar un plan para el manejo de la

zona, la cual se mantenga un crecimiento económico de las comunidades ahí presentes y la

supervivencia de la vaquita amenazada principalmente por la actividad pesquera y la

destrucción de su hábitat (ProGolfo, 2006), evitando de esa manera en ser el primer país en

que se permita la desaparición de una especie como esta (VaquitaMarina, 2006; Turk y

Flores, 2001).

V.2 Generalidades de la especie

En el Alto Golfo de California se encuentra la vaquita, especie endémica de

marsopa, la especie más pequeña de cetáceo en aguas del territorio mexicano (Barlow,

1986). Este organismo fue avistado por primera vez cerca de San Felipe, Baja California,

México en 1958 (Norris y McFarland, 1958). Está amenazada principalmente por la pesca

incidental y la alteración de su hábitat (ProGolfo, 2006). El nombre de vaquita marina se le


95

dio por parte de los pescadores de la región, aunque su nombre científico es Phocoena

sinus, que significa marsopa con cavidad (VaquitaMarina, 2006).

La vaquita Phocoena s. es la única especie de marsopa que se encuentra en aguas

tibias costeras de baja profundidad. La mayoría de los phocoenidos habitan aguas por

debajo de los 20 °C. Estas son capaces de tolerar fluctuaciones de temperatura de 14 a 36

(MarineBio, 2006). Se piensa que la aleta dorsal relativamente alta de la vaquita y su

tamaño pequeño sean adaptaciones para soportar las altas temperaturas que alcanza el agua

durante el verano (VaquitaMarina, 2006).

La vaquita marina es el más pequeños de los cetáceos que se encuentran en el Golfo

de California (Enríquez-Andrade et al. 2005), mide al nacer de 67 a 75 cm y pesa de 7 a 10

kg, alcanzando su madurez sexual en las hembras entre 135 y 150 cm, y en los machos de

128 a 145 cm, con un peso aproximado de 55 kg. Las hembras maduran entre los 3 a 5 años

de edad, y tienen una gestación de 11 meses, con un ciclo reproductivo de cada dos años,

dando a luz a una cría (MarineBio, 2006; Gaskin et al. 1984).

Como otras marsopas y delfines, la vaquita usa el sonar como medio de

comunicación y navegación en su medio natural. En esta región la detección visual tanto de

predadores como de presas se dificulta por la turbidez, los científicos piensan que las

señales acústicas producidas por la vaquita, le ayudan a detectar presas cerca del fondo

marino en aguas turbias (VaquitaMarina, 2006).

Su distribución es restringida y se apoya por registros de vaquitas varadas,

recuperadas de redes agalleras y por avistamientos de animales vivos. La vaquita está

restringida al Alto Golfo de California en un área que se define al norte de Puertecitos, que
96

se encuentra al sur de San Felipe, alrededor de islas Rocas Consag - área que posiblemente

acuden para alimentarse - y por Sonora hacia El Golfo de Santa Clara, y norte de Puerto

Peñasco (VaquitaMarina, 2006).

Al tener una posible taza de reproducción baja, la especie se encuentra en crisis,

donde en estudios realizados en la región sobre el tamaño de la población, se estima un

promedio alrededor de 150 individuos (Jaramillo-Legorreta et al. 2007; ProGolfo, 2006).

La especie se encuentra catalogada como especie en peligro de extinción por la

Norma Oficial Mexicana NOM-059-ECOL-1994, 2006 IUCN (International Union for

Conservation of Nature and Natural Resources) Red List of Threatened Species, y por el

CITES (The Convention on International Trade in Endangered Species of Wild Fauna and

Flora) en junio de 1979, y en la U.S. Endangered Species (Barlow, 1986) en la que

determinan al esta acuática en peligro de extinción y sujeta a protección especial. La Norma

como estas organizaciones establecen especificaciones para su protección, a consecuencia

de su captura incidental en redes tipo de enmalle o agalleras y a la alteración de los fondos

marinos del área en donde se alimenta por embarcaciones mayores (Conservation

Internacional, 2006).

El gobierno mexicano decretó el 10 de junio de 1993, la Reserva de la Biosfera Alto

Golfo de California y Delta del Río Colorado con la finalidad de otorgar protección a la

vaquita y su área de distribución. En 1996 se reforzó el cuidado de la Reserva a través de la

implementación del Programa de Manejo de la Reserva, así como de varios ordenamientos

en materia pesquera, vida silvestre, de inspección y vigilancia y de investigación y

monitoreo. Asimismo, al aprobarse la Carta Nacional Pesquera, publicado en el Diario

Oficial de la Federación el 28 de agosto de 2000, donde establece la abundancia de


97

especimenes de vaquita en 567 individuos con un intervalo de confianza de 177 a 1,074

vaquitas, quedando el 40 % del área de la vaquita fuera de la reserva (Jaramillo et al. 1999),

por lo cual, como medida más reciente para proteger a la vaquita marina y su hábitat se

promulgó en diciembre del 2005 el Programa de Protección de la Vaquita dentro de un

Área de Refugio (Figura 6). Dicha zona ha representado, desde la primera descripción de

esta especie - a finales de la década de 1950 -, su único hábitat natural, un lugar frágil y

otrora enriquecido con el flujo de agua dulce del Río Colorado, siendo esta cantidad de

agua dulce que llega al mar mínima (ProGolfo, 2006).

V.3 Mortandad incidental

Un gran porcentaje de los avistamientos de vaquitas se han registrado en aguas entre

los 21 y 35m de profundidad, y con una visibilidad entre 0.9 y 12m. Todos los registros de

vaquitas enmalladas han sido obtenidos en aguas de entre 4 y 36m de profundidad y entre 3

y 33 km de la costa (VaquitaMarina, 2006).

La causa de muerte de las vaquitas marinas puede ser de diverso origen. La vaquita

puede morir por causas naturales, como por el daño provocado por parásitos o por ser

atacada por sus predadores. Sin embargo, la causa principal de su mortalidad se debe a la

actividad humana al ser capturada entre las redes de los pescadores que salen a la captura

de especies como la curvina, chano y tiburón. Las vaquitas juveniles son las que en su

mayor parte son atrapadas poniendo en riesgo la sustentabilidad de la especie, ya que se

reduce el reclutamiento de organismos adultos (MarineBio, 2006). Se estima que un

promedio de 25 a 30 vaquitas son capturadas al año, además de que este organismos es


98

confundido con la totoaba – que su pesca es ilegal - por su similitud en tamaño (MarineBio,

2006).

V.3.1 Mortandad en actividades pesqueras

La vaquita es particularmente vulnerable a la mortalidad incidental debido al alto

uso de redes por parte de los pescadores, ya que se ha comprobado, que una gran cantidad

de mamíferos marinos mueren en este tipo de redes (Read et al. 2006). Existen reportes que

los grandes índices de mortandad están asociadas a la pesquería de la totoaba (Brownell,

1983). Este organismo se enreda en las redes y al no poder salir a respirar a la superficie y

muere ahogada. Aunque la captura de la totoaba fue cerrada en 1975 por el gobierno

mexicano al detectarse una baja en la producción (DOF, 1975), esta se sigue pescando de

manera ilegal provocando la muerte de un numero indeterminado de vaquitas (Robles et al.

1986). Estudios se han realizado con otras pesquerías donde se ha registrado una alta

mortandad de individuos por año en lo que es la Reserva del Alto Golfo de California

afectando a la población de este organismo (Read et al. 2006; Turk y Flores, 2001;

D’Agrosa et al. 1995).

V.3.2 Redes agalleras

En el Alto Golfo, el uso del redes agalleras en la pesca ribereña es el más común y

de mayor preferencia y distribución en esta zona de fuertes corrientes. Se utilizan diferentes

tipos de red para diferentes tipos de pesquería. Es probable que la vaquita haya sido

capturada en redes agalleras desde mediados de 1920 y que con la expansión significativa

de la industria pesquera durante 1940 con la explotación de la totoaba (Norris y Prescott,


99

1961), se haya reducido el tamaño poblacional de la vaquita. Al prohibirse la red de luz de

malla mayor a 25 cm para proteger a la totoaba y a la vaquita, se comenzaron a utilizar otro

tipo de redes (VaquitaMarina, 2006; DOF, 1993).

Actualmente la vaquita queda enmallada principalmente en redes para la captura de

varias especies de tiburones y mantas (Turk y Flores, 2001; D’Agrosa et al. 2000). Sin

embargo, se ha registrado que la vaquita también queda atrapada durante otras actividades

pesqueras que utilizan redes de luz de malla entre 6.25 y 20 pulgadas, tales como las de

chano, sierra, curvina, camarón y otras especies (D’Agrosa et al. 2000, 1995).

En 1988, el Centro Intercultural de Estudios de Desiertos y Océanos (CEDO),

mediante entrevistas con pescadores locales, y con información sobre la distribución de

actividades de pesca y esfuerzo pesquero, estimó que un promedio de 32 vaquitas quedan

atrapadas en redes agalleras anualmente en el Alto Golfo. Posteriormente, entre 1993 y

1995, en un estudio del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey en

Guaymas (ITESM), se observó un incremento en la mortandad de vaquitas por redes

agalleras en 39 organismos por año, solo en el puerto de El Golfo de Santa Clara

(VaquitaMarina, 2006).

V.3.3. Redes de arrastre

La muerte incidental de vaquitas en redes de arrastre de barcos camaroneros fue

reportada por pescadores de las comunidades de El Golfo de Santa Clara y de San Felipe

entre 1985 y 1990. Esto fue un problema a considerar con la gran cantidad de barcos

camaroneros que operaban en el Alto Golfo de California, lo que amenazaba la existencia

de la población de la vaquita, especialmente por atrapar a las crías, que son las más lentas,
100

aunque la muerte incidental en este tipo de redes es mínima a comparación de las redes de

línea (Read et al. 2006).

Aunque se conoce que las vaquitas mueren en todo tipo de redes, ha sido difícil

estimar exactamente la mortalidad en cada uno. Un estudio sobre las pesquerías en el área

realizado por CEDO, determinó que el esfuerzo pesquero es distinto en cada comunidad del

Alto Golfo, y que las pesquerías en la región son dinámicas y responden a cambios de

marea, temporada, factores económicos y ambientales (VaquitaMarina, 2006; Turk y

Flores, 2001).

V.4 Aspectos de su medio ambiente

Debido a lo limitado del área en donde se encuentra la vaquita, su hábitat se ve afectado por

diferentes factores: contaminación por compuestos orgánicos, la baja productividad

primaria que tiene un efecto directo sobre la salud, cantidad de individuos y el ecosistema

marino mismo (López-Martínez et al. 2002; Bagwell, 1998; Pontius, 1997), debido a la

baja del afluente de agua dulce con nutrientes provenientes del Río Colorado (Rodríguez et

al. 2001; Carriquiry y Sanchez, 1999), y además de la reducción del alimento debido a la

pesca comercial en la zona (Barlow, 1986).

Se ha observado que la capacidad reproductiva de algunos mamíferos marinos

disminuye gracias a las altas concentraciones de compuestos orgánicos como los derrames

de aceites, además de policlorinados bifenilos (PCBs) y pesticidas orgánicos como el DDT

(Scott y Parsons, 2005; Barlow, 1986; Gaskin et al. 1983). Las descargas de aguas

residuales son otro determinante de la calidad del hábitat (Grillo et al. 2001), ya que en las

comunidades del Alto Golfo de California no hay plantas de tratamiento para los desechos
101

residenciales, y estas tienen el potencial de afectar a los organismos con los cuales la

vaquita se alimenta provocando infecciones estomacales y deterioro en la salud del animal

provocando asfixia y ahogamiento (Scott y Parsons, 2005; Grillo et al. 2001).

V.4.1 Destrucción de su hábitat

Actualmente existe en todo el Alto Golfo de California un desarrollo costero

creciente e incontrolado. La presión antropogénica que hay sobre esa área es de las más

altas del Golfo de California, solamente siendo muy baja en la zona núcleo de la Reserva

(Enríquez-Andrade et al. 2005). El impacto de este desarrollo modifica y destruye el hábitat

para los diferentes estadíos de especies importantes en la red alimenticia de la región. Los

estuarios son particularmente importantes para el crecimiento de larvas de especies de

importancia pesquera comercial y no comercial, ya que esta zona representa una alta

biodiversidad con una alta importancia socioeconómica a través del flujo de servicios

ambientales y los bienes provenientes del ecosistema marino (Enríquez-Andrade et al.

2005).

En el Golfo de California, la flota camaronera del Pacífico mexicano captura

camarón café y azul en forma intensiva a lo largo de la costa de Sonora, desde Guaymas

hasta el delta del Río Colorado y hasta San Felipe. La redes de arrastre utilizadas para la

captura del camarón provocan la destrucción del fondo marino y su ecología, siendo esto un

tema a ser considerado debido a la sobre pesca o grupos de especies que se colectan en cada

arrastre (Scott y Parsons, 2005). Con la remoción de gran tonelaje de fauna que en muchos

casos contiene estadíos juveniles de varias especies de peces, se han perturbado las redes

alimenticias del ambiente bentónico. Investigaciones realizadas al respecto, sugieren que el


102

efecto que tiene la fauna de acompañamiento del camarón afecta directamente a las

poblaciones de la vaquita y totoaba (Cisneros-Mata et al. 1995), que en su mayoría estas

especies de peces que mueren en las embarcaciones y después son descartadas.

El Refugio de la vaquita es una zona altamente explotada en la actualidad, en donde

la curvina es la especie de mayor de captura en el área con 868 toneladas, seguido del

camarón con 381 toneladas, chano 318 toneladas y las demás especies comerciales con 189

toneladas (Tabla XXVI). El camarón representa casi 80 % de los 5 millones de dólares de

ingresos brutos de la totalidad de la pesca en el Refugio. El grupo que menor ingresos

brutos genera es el tiburón y manta con 11, 500 dólares.

Tabla XXVI. Captura, valor de primera mano y costo operativo de las principales especies
explotadas por las pesquerías artesanales del Alto Golfo de California dentro del Refugio
decretado en diciembre del 2005 para proteger a la vaquita marina.

Camarón Chano Curvina Mantas Sierra Tiburón Total


Total de la captura refugio de la vaquita (Ton) 381.23 318.62 868.34 33.05 148.22 8.64 1758.10
Total del valor de la captura refugio vaquita ($) 41587515 1604567 8329236 304137 1228665 122287 53176407.00
Total de costos de captura refugio vaquita ($) 28286171 1517523 4497106 270852 1206237 84324 35862213.00
Total de la utilidad refugio de la vaquita ($) 13301343 87044 3843131 33285 22428 37963 17325194.00
Rentabilidad de la captura 31.98% 5.43% 46.14% 10.98% 1.83% 31.13% 32.58%

La pesca de chano, manta y sierra representan los costos de producción más altos

para la comunidades. Con la curvina y tiburón los costos disminuyen por la cercanía de las

comunidades a las zonas de pesca. La utilidad económica bruta y el índice de rentabilidad

de la pesca en el área de Refugio es relativamente alta. El camarón capturado en esa zona

generó USD 1’254,843 con una rentabilidad de 32 %, la curvina generó una utilidad de

USD 362,559.53 pero con el rendimiento más alto de 46 %; y el tiburón tuvo una
103

rentabilidad de 32 %. Para el resto de las especies (chano, rayas y sierra) el rendimiento fue

menor al 12 %.

V.5 Medidas y acciones derivadas a la protección de la Vaquita marina

A partir de los años noventa con las negociaciones del Tratado de Libre de

Comercio, se pone en la mesa el interés nacional e internacional por proteger directamente

a la vaquita. La entonces Secretaría de Pesca instituyó un Comité para la Protección de

ciertas especies en peligro de extinción, entre ellas la Totoaba y la Vaquita. De las primeras

acciones tomadas fue el prohibir el uso de redes de malla grande que eran causa principal

de mortalidad de la vaquita. La relevancia del ecosistema del Alto Golfo de California de

donde la vaquita y totoaba, especies endémicas, y otras especies de importancia comercial,

adquirieron mayor importancia cuando la región fue decretada como Reserva de la Biosfera

en 1993 (DOF, 1993).

Desde entonces, se vienen dando diferentes actividades y acciones alrededor de la

implementación de la Reserva y de su manejo para que exista una adecuada protección de

los recursos marinos de las actividades humanas (Crosby et al. 2000). De estas acciones se

han derivado acuerdos entre los distintos grupos de organizaciones de los gobiernos federal,

estatal, local, así como de organizaciones gubernamentales y pescadores organizados. En

ellos ha estado la disposición minimizar los efectos derivados de la pesca comercial sobre

el hábitat de la vaquita, en que se observa una disminución del esfuerzo pesquero al retirar

de la zona de Refugio a las embarcaciones de altura, el numero de embarcaciones menores

y, el tiempo y tamaño de las redes de línea que deben operar en esa zona de Refugio (DOF,

2005). Tanto la Reserva como el Refugio de la vaquita tienen similares objetivos, pero con
104

diferentes niveles de protección y regímenes de protección y manejo para los recursos

marinos a proteger (Baelde, 2005).

V.5.1 Organizaciones No Gubernamentales

Un movimiento coordinado de agentes se organizan y comienzan a trabajar en

asuntos de presión demográfica y económica que se da sobre los recursos naturales en esta

región del Golfo de California (Enriquez-Andrade et al. 2005). En 1996 el gobierno

mexicano estableció el Comité Internacional para la Recuperación de la Vaquita (CIRVA),

la cual está compuesta por científicos mexicanos y extranjeros especializados en la vaquita,

y cuyas observaciones van encaminadas al entendimiento y propuestas para la conservación

de la vaquita marina. También diversas organizaciones han trabajado en pro de esta

especie, tal es el caso de diversos estudios realizados por: Centro Intercultural de Estudios

de Desiertos y Océanos, (CEDO) Centro Regional de Investigación Pesquera (CRIP, en

Guaymas y Ensenada), así como Conservation Internacional y la World Wildlife Fund,

quienes desean proveer las bases para un régimen significativo de manejo de las pesquerías.

Esta iniciativa se enmarca en los esfuerzos de la Coalición por el Alto Golfo de California,

establecida en mayo del 2003, con el objetivo primordial de proponer soluciones

técnicamente viables y legal y socialmente aceptables a la problemática existente en la

Reserva de la Biosfera del Alto Golfo de California y el Delta del Río Colorado, con el fin

de que sus recursos naturales sean aprovechados en forma sustentable. La Coalición por el

Alto Golfo está integrada por WWF; CEDO Intercultural; Centro Mexicano de Derecho

Ambiental (CEMDA); Conservación de Mamíferos Marinos de México (COMARINO);

Conservación Internacional (CI); Defenders of Wildlife; Fondo Internacional para la


105

Protección de los Animales y su Hábitat (IFAW); Música por la Tierra; PRONATURA;

Sierra Madre y Unidos por la Conservación (ProGolfo, 2006).

V.6 Análisis de la situación 2000-2007

La actividad pesquera sigue siendo la principal fuente de ingresos en la economía de

la región del Alto Golfo, su adecuación a las necesidades ambientales para la protección de

la vaquita marina, lo hacen ser un reto de largo plazo. La pesca ribereña es la fuente de

empleos para un sector importante de la población. Este esfuerzo es un riesgo constante que

no permiten la eliminación inmediata de la mortalidad incidental requerida para evitar la

extinción de la vaquita (Barlow, 1986). Esto sugiere la búsqueda de medidas que ayuden a

tener una pesca más responsable con cambios en la conducta de los pescadores y todos

aquellos que tienen un provecho directo de los recursos marinos de la región, de una forma

expedita pero escalonada, el cual no se dañe la economía local y contar con el tiempo

necesario para la búsqueda de otras alternativas productivas.

Organismos como el Comité Internacional para la Recuperación de la Vaquita

(CIRVA), con fundamentos de orden técnico y social, han expresado su opinión sobre el

uso de algunas artes de pesca que afectan a la población de la vaquita en forma negativa y

en las condiciones de los fondos marinos en donde dicha especie se alimenta (Scott y

Parsons, 2005), determinando también la posibilidad de darle un valor al hábitat de la

vaquita y su importancia en biodiversidad que deben ser contemplados por los siguientes

sectores de la sociedad (Enriquez-Andrade et al. 2005) y de esa forma disminuir el impacto

sobre el Refugio de la vaquita y su población.


106

V.6.1 Alto Golfo Sustentable

El grupo Alto Golfo Sustentable (AGS) esta compuesta por un grupo de

organizaciones civiles8 que a partir del año 2005 se juntaron para buscar la forma de

encontrar soluciones a los problemas ambientales y sobre todo a la recuperación del

número de vaquitas marinas en el Alto Golfo de California. Con un ideal común en lograr

una pesca sustentable en la región, así como, en conformidad con los pescadores la

protección del medio ambiente con una visión de largo plazo.

Las primeras acciones tomadas por AGS fueron el de establecer las bases para un

adecuado ordenamiento pesquero y propuestas alternativas con el fin de rescatar a la

vaquita, evaluando el desarrollo de la pesca legal y responsable en la región. Se

determinaron una serie de acciones inmediatas en las que se propone eliminar las redes de 6

pulgadas y mayores, ajustar la pesca a los ciclos naturales según la especie, determinar

zonas de pesca dependiendo del arte de pesca, entre otros.

Durante las reuniones de trabajo se dan forma a acuerdos en las que también se ven

involucradas autoridades de los gobiernos federal, estatal y local de los estados de Baja

California y Sonora, la cual complementan las acciones y medidas que se deben de tomar

para mantener un equilibrio en las decisiones que se toman entre los grupos ambientalistas,

autoridades y pescadores.

Los objetivos y metas que se pretenden alcanzar están enfocados hacia la protección

de la vaquita y su medio ambiente, y al mejoramiento de la calidad de vida de los

pescadores del Alto Golfo de California y la sustentabilidad de las actividades pesqueras,

8
Pescadores del Alto Golfo (San Felipe, El Golfo de Santa Clara y Puerto Peñasco), la comercializadora
Ocean Garden (OG), Natural Resources Defense Council (NRDC), Uniciativa Noroeste (NOS), WWF y
Pronatura.
107

de acuerdo a lo establecido en el párrafo 5.1 del Programa de Protección del Área de

Refugio de la Vaquita Marina, publicado en el Diario Oficial de la Federación el 5 de

diciembre del 2005.

Una de las actividades sobresalientes del grupo de AGS es la evaluación de los

programas ambientales establecidos por las autoridades como lo son el del Fondo

compensatorio que se debiera entregar a los Estados para aplicarlos en obras de

infraestructura complementaria a la actividad pesquera y liquidación de los permisos a los

pescadores que voluntariamente o sean afectados por el programa de protección a la

vaquita, y que entreguen sus embarcaciones y artes de pesca.

Así también, el de proponer propuestas, programas o iniciativas para el

establecimiento de fondos de Desarrollo Sustentable, que sean complementarios a los

establecidos por la autoridad ambiental o pesquera, con el fin de apoyar proyectos en el

área como lo son los programas de observadores en embarcaciones menores, investigación

sobre manejo pesquero y desarrollo de nuevas oportunidades económicas, regulación

pesquera, ubicación de instrumentos de GPS para delimitar el polígono y zona núcleo como

zonas de no pesca, procesos de conservación y manejo de los recursos naturales en el Alto

Golfo de California, compensaciones económicas a los pescadores afectados y nuevos

censos para la vaquita marina.

Además, el AGS es también un facilitador entre los pescadores y las autoridades. A

través de las propuestas del grupo se han llegado a acuerdos donde los pescadores se

comprometen a seguir ciertos lineamientos para el manejo de la pesca en el área de

conflicto, respetando las vedas que hay para las distintas especies apoyando a la vigilancia.

También, al intercambio de sus artes de pesca para escama para apoyar a la conservación de
108

la vaquita marina, entre otras medidas de conservación. Por parte de las autoridades y de

los empresarios que obtienen algún beneficio de la pesca en la región, se ha obtenido del

apoyo en créditos y lubricantes para la vigilancia. De igual manera, algunas Organizaciones

No Gubernamentales (ONG’s) han facilitado apoyos económicos y técnicos a los

pescadores para la sustentabilidad de la pesca en el Alto Golfo de California.

El AGS también a organizado pláticas a todos sus miembros como una forma de

actualizarse en todas las medidas y acciones que se han estado realizando entorno al

cumplimiento de la legislación vigente, de la conservación de la vaquita marina, y la

evaluación de nuevas artes de pesca, que conlleven a un mejor entendimiento al manejo de

la región y cuidado de los recursos naturales. En estas pláticas han participado los

responsables de los proyectos y oficinas de gobiernos de los municipios locales,

dependencias del gobierno federal como lo son de CONAPESCA, CONANP,

SEMARNAT, así también, de las ONG’s nacionales e internacionales y empresas como

Ocean Garden Products.

Actualmente, se viene trabajando con la evaluación de nuevas artes de pesca y

embarcaciones que ayuden a la mitigación de la captura incidental de la vaquita marina y

que sean económicamente viables para el pescador. De igual manera, se trabaja en un

mecanismo de compensación económica para disminuir el esfuerzo pesquero en el Alto

Golfo de California de manera voluntaria en la que el pescador entregue su permiso y/o

haga una reconversión productiva a la pesca, con el objetivo de conocer el número de

pescadores interesados en otras actividades económicas y productivas. En este último

punto, se va de la mano con un nuevo ordenamiento pesquero, donde se pretende conocer el

número de pescadores y de embarcaciones en la región.


109

Todavía faltan actividades por realizarse y metas a corto plazo por realizarse para

redondear el esfuerzo que se ha realizado hasta el momento en la conservación de la

vaquita marina. Es el interés de los que forman parte del AGS y más de los pescadores de

que se continúe con más estudios sobre el comportamiento de las pesquerías en la región y

sobre todo de saber en que condiciones se encuentra la población de la vaquita marina en la

actualidad, ya que desde 1997 no se tiene conocimiento de nuevos estudios sobre este

organismo y su hábitat. Otro punto importante es que se de pronto por terminado el

ordenamiento pesquero, ya que se esta forma se podrán tomar decisiones que lleven a

determinar acciones para establecer nuevas regulaciones, número de permisos, y la

reducción de la flota pesquera a través de una compensación económica.

V.7 Conclusiones

Disminuir la pesca ribereña dentro de la zona de Refugio representa un reto, ya que

la producción total promedio en esa zona es de 1,758 toneladas de productos marinos, que

vienen siendo unos USD 5’016,642 con un valor de primera mano o en playa. Aunque los

gastos de operación de captura oscilan alrededor de los USD 3’383,229, los pescadores

obtienen una utilidad bruta de USD 1’634,452, que representa un rendimiento promedio de

32.6 % (Tabla XXXI). Estas cifras representan el costo de oportunidad de la pesca artesanal

con redes de enmalle que se deben considerar para disminuir la actividad pesquera en la

zona de Refugio hasta llegar a un nivel de cero pesca.

Con la integración de los pescadores en la toma de decisiones se fortalecen la

búsqueda de soluciones para la recuperación de la vaquita (Turk y Flores, 2001), se dieron

avances en medidas de alto impacto en a que en primer orden se ostenta el cuidado a la


110

vaquita y hábitat como el de una pesca responsable. Con la formación del Grupo Alto

Golfo Sustentable a partir del año 2005, los compromisos de los diferentes sectores –

gobierno federal, estatales, locales, ONG´s y federaciones de pescadores - que en ella se

integran han respondido a los criterios en protección de la vaquita, estos dieron su fruto con

la promulgación del Programa para la Protección de la Vaquita dentro del Área de

Refugio ubicada en la porción occidental del Alto Golfo de California en diciembre del

2005. El documento hace referencia a la ubicación de la zona de protección, establece los

lineamientos de manejo y conservación, como las estrategias de protección y recuperación

de la vaquita, y su seguimiento, para la recuperación de la vaquita (DOF, 2005). De esa

manera se han minimizado las diferencias que hay entre lo que es el manejo de un área

protegida y el desarrollo pesquero entre los sectores protagonistas de la región (Baelde,

2005).

Disminuir la mortalidad provocada por causas humanas (pesca incidental,

modificación del hábitat) para la vaquita evitará que sea el primer cetáceo en desaparecer

debido a actividades humanas (VaquitaMarina, 2006; Turk y Flores, 2001). La vaquita

marina es patrimonio de la humanidad y México juega un papel muy importante para

protegerla y conservarla para futuras generaciones. También, no solo a la vaquita marina,

sino también su hábitat, el cual contiene una gran diversidad de flora y fauna marina y

costera y, en especial un alto porcentaje de especies endémicas que no se encuentran en

ningún otro lugar del planeta (ProGolfo, 2006). Permitiendo de manera especial a la

sociedad civil la oportunidad de poder trabajar en conjunto iniciativas sustentables, con el

objeto de mejorar la calidad no sólo del entorno y los ecosistemas marinos, sino de los

habitantes de la región.
111

Resolver el conflicto que existe entre la conservación de la biodiversidad y el

desarrollo socioeconómico es una carrera larga para el bienestar humano. Es momento que

debe buscarse de forma integral alternativas que lleven a un cambio de las actividades

productivas en la región donde se le de énfasis a actividades relacionados con el

ecoturismo, la ecoindustria para el desarrollo del Alto Golfo (Lu et al. 2006). El enlace

entre biodiversidad y el desarrollo económico debe ser tratado de una manera de beneficio

mutuo, y las políticas para conservar la biodiversidad deben de tener este objetivo (Seely et

al. 2003). Los trabajos que se realicen para proteger a la vaquita deben de manifestar un

objetivo de conservación y desarrollo con un manejo local, que es un reto para quienes

quieren intervienen en esa área del Golfo de California.


112

Conclusiones finales

A pesar del alto dinamismo económico y social que hay en el Alto Golfo de California, esta

región del país sigue siendo una de las zonas de mayor producción pesquera del país. El

crecimiento de sus comunidades no solo demanda de un mayor número de servicios, sino

de productos de consumo, y este crecimiento además representa una posible amenaza al

ecosistema marina, situación que debe de atenderse para evitar un posible deterioro de las

condiciones naturales que se presentan en las dos reservas naturales en la zona: La Reserva

de la Biosfera del Alto Golfo de California y Delta del Río Colorado y del Refugio de la

Vaquita Marina.

El Alto Golfo de California es un sistema que crece con gran dinamismo,

evoluciona y ha presentado cambios muy importantes desde que se establecieron sus áreas

naturales protegidas (ANP). En este periodo se ha diversificado la actividad económica en

la región y se han implementado nuevas reglas para el manejo de los recursos naturales,

sobre todo de aquellas especies que han sido vulnerables al desarrollo humano y a toda

actividad relacionada con el hombre.

Lo más sobresaliente en el Alto Golfo de California es lo siguiente:

1) Los volúmenes de pesca desde el establecimiento de la Reserva de la Biosfera se

mantienen constantes a pesar del crecimiento del esfuerzo pesquero en la región.

2) Los pescadores de San Felipe son los que con mayor intensidad utilizan el Refugio

de la vaquita marina para pescar sus productos, así como el mayor volumen del

camarón se pesca dentro de esta área.


113

3) La pesca, a pesar de existir nuevas opciones de trabajo, sigue siendo la actividad

más importante de la región.

4) Con el establecimiento de la Reserva de la Biosfera, la mayoría de los pescadores

observan un aumento de sus capturas y una mayor variedad de especies susceptibles

para su aprovechamiento, es decir, un beneficio directo a su actividad económica.

5) A pesar de que los gastos e inversión que se da año con año por parte de los

pescadores, la pesca sigue siendo la mejor opción económica para ellos, ya que sus

ganancias, hasta ahora, son mayores al 100% si se dedicarán a otra actividad.

6) La actividad pesquera en la región, sobre todo la del camarón, curvina y chano, ha

sido un imán para pescadores de otros sitios del país, además, de que las personas

que se inician en la pesca a partir de los 17 años.

7) Más de un tercio de la población de pescadores del Alto Golfo de California no

dejarían de pescar, ya que es la única actividad que saben realizar.

8) Disminuir el esfuerzo pesquero en la región, no solo es el de ofrecer un apoyo

económico para que los pescadores – ahora de forma individual- entreguen sus

permisos para dedicarse a otra actividad, sino que esto debe estar acompañado de la

capacitación a los pescadores en su nueva actividad para que estos no regresen al

mar.

9) Los permisos deben ser cancelados de forma definitiva y no solo retirados, por que

de no ser así, se corre el riesgo de que no disminuya el esfuerzo pesquero en la

región.
114

10) El retiro de los permisos debe tener un programa bien estructurado dirigido a

pescadores jóvenes y aquellos cercanos a su retiro para que encuentren atractivo el

dedicarse a otra actividad distinta o complementaria a la pesca.

11) Una disminución gradual y a mediano plazo sería la opción adecuada para disminuir

el esfuerzo pesquero en el Alto Golfo de California, de esa manera, la inversión del

gobierno federal en el retiro de los pescadores no sería tan grande, se podría llevar

mayor control para aterrizar los proyectos de inversión presentados por los

pescadores y se aseguraría la recuperación de la población de la vaquita marina en

el largo plazo.

12) El Área de Refugio de la vaquita marina debe ser declarada zona de no pesca para

disminuir el riesgo de la extinción de este cetáceo.


115

LITERATURA CITADA

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SEMARNAT, CETYS-Universidad, Universidad Autónoma de Quintana Roo. pp.

654.
134

Anexos

Artículo publicado, aceptado y sometido en distintas revistas indexadas como

requisito a derecho a examen de grado

1. Gerardo Rodríguez-Quiroz y Álvaro Bracamonte-Sierra. Pertinencia de las

Áreas Naturales Protegidas como política conservación y mejoramiento de la

calidad de vida. Análisis de percepción en la Reserva de la Biosfera del Alto

Golfo de California y Delta del Río Colorado. Publicado en Estudios Sociales,

2008, Vol. XVI, num. 32, Julio - Diciembre

2. Artisanal shrimp fishing in the Biosphere Reserve of the upper gulf of

California. Aceptado en Crustaceana

3. Managing a marine protected area for the conservation of marine

endangered species in the Upper Gulf of California. Sometido en

Hydrobiologia
Anexo 1
Pertinencia de las Áreas Naturales Protegidas como política
conservación y mejoramiento de la calidad de vida. Análisis
de percepción en la Reserva de la Biosfera del Alto Golfo de
California y Delta del Río Colorado.

Publicado en Estudios Sociales, 2008, Vol. XVI, num. 32,


Julio - Diciembre
Estudios

Sociales

Revista de Investigación Científica


Estudios

Sociales
Revista de Investigación Científica
Vol. XVI, número 32, julio-diciembre de 2008

ÍNDICE

ARTÍCULOS

Política social focalizada y construcción de una red social.


Lecciones de la experiencia argentina
Alejandro del Valle
7

Evolución histórica de los rendimientos educativos


en México: 1987-2004
Edna Ma. Villarreal Peralta
59

Imagen corporal en mujeres rurales de la sierra Juárez y la costa de


Oaxaca: una aproximación nutrio-antropo-lógica
Sara Elena Pérez Gil, Gabriela Romero Juárez
79

Tejiendo sueños y tiñendo fracasos en la lucha por el poder:


experiencias de las mujeres artesanas del grupo Ixchel,
en la comunidad maya de Sahcabá, en Yucatán, México
Wilian de Jesús Aguilar, Francisco Gurri García,
Eduardo Bello Baltazar, Esperanza Tuñón Pablos
113

Pertinencia de las ANP como política de conservación y mejoramiento de


la calidad de vida. Análisis de percepción en la Reserva de la Biosfera del
Alto Golfo de California y Delta del Río Colorado
Gerardo Rodríguez, Álvaro Bracamonte
141
Pertinencia de las ANP como
política de conservación y
mejoramiento de la calidad
de vida. Análisis de percep-
ción en la Reserva de la
Biosfera del Alto Golfo de
California y Delta del Río
Colorado
M.C. Gerardo Rodríguez Quiroz*
Dr. Álvaro Bracamonte Sierra**

Fecha de recepción: diciembre 2007.


Fecha de aceptación: mayo 2008.

*Centro Interdisciplinario de Investigaciones para el Desarrollo Integral


Regional Unidad Huasabe, Sin. del IPN. Correo electrónico: grquiroz@ipn.mx
**Profesor-investigador del Centro de Estudios de América del Norte (CEAN) de
El Colegio de Sonora. Correo electrónico: abraca@colson.edu.mx
Resumen / Abstract

La conservación de la biodiversidad Biodiversity conservation counts,


cuenta, entre sus principales meca- among its main intervention mecha-
nismos de intervención, con las nisms, with the existence of Natural
áreas naturales protegidas. En el alto Protected Areas. The Upper Gulf of
Golfo de California (AGC) se ubica la California houses the Biosphere
Reser-va de la Biosfera del Alto Golfo Reserve for the Upper Gulf of
de California y Delta del Río Colo- California and the Colorado River
rado, en la que subsisten especies Delta, where not only highly valuable
de alto valor económico, así como species thrive, and endangered
especies en peligro de extinción. species as well. The later being the
Este último factor justificó el estable- reason for creating this refuge.
cimiento de la reserva. This study analyzes the effectiveness
El estudio analiza la efectividad de la of the Upper Golf Reserve (UGR) as a
Reserva del Alto Golfo como meca- natural resource protective mecha-
nismo de protección de los recursos nism, particularly for species at risk,
naturales, en particular de las que also verifies if fishermen living con-
están en riesgo de desaparecer, así ditions have improved once the
como de comprobar si los pesca- reserve started operations.
dores han mejorado sus condiciones The exploration was carried out
de vida tras la operación de esa área through a survey to fishermen.
natural.

Julio - Diciembre de 2008 143


E S T U D I O S SOCIALES

La exploración se llevó a cabo me- The study also suggests that it is


diante la aplicación de una encuesta indispensable to develop a great
a los pescadores. effort by authorities and organized
Se sugiere que es indispensable un groups to find management solu-
gran esfuerzo, de autoridades y gru- tions for UGR; so that a program can
pos organizados, para encontrar be established to allow endangered
soluciones al manejo de la Reserva, species recovery and increase fish-
a fin fijar un programa que permita ermen living standards, thereby
la recuperación de las especies en ensuring a balance between conser-
peligro de extinción, elevar la calidad vation, fishery sustainability and
de vida de los pescadores y con ello fishermen welfare in the UGR.
garantizar un equilibrio entre la con-
servación y la sustentabilidad de la Key words: Sustainable fishery, eco-
pesca y de los pescadores en el Alto nomic alternatives, economic com-
Golfo de California. pensations, endangered species,
high value species.
Palabras clave: pesca sustentable,
alternativas económicas, compensa-
ciones económicas, especies en
peligro, especies de alto valor
económico.

144 Volumen 16, Número 32


Introducción*

E l Golfo de California (GC) es considerado uno de los sis-


temas marinos más productivos del mundo y una de las regiones con mayor
diversidad de especies de alto valor económico (Greenberg, 1993a; Cisneros,
2001; Aragón-Noriega y Calderón-Aguilera, 2000). Estudiar el GC es un ejerci-
cio complejo dada la coincidencia de un conjunto de problemas socioe-
conómicos y ambientales donde destaca el vínculo entre la rentabilidad de las
pesquerías explotadas y su impacto sobre la sustentabilidad (Cisneros, 2001).
Esto deriva en un conflicto permanente en torno al aprovechamiento de los
recursos y en especial respecto a los efectos que la pesca comercial tiene
sobre las especies de valor ecológico (Vásquez-León, 1993; Soares et al.
2005).
Una zona de especial dinamismo productivo es el Alto Golfo de California
(AGC). Se ubica en el norte de Baja California y en el noroeste de Sonora y está
conformada por tres municipios: San Felipe en el primero; el Golfo de Santa
Clara y Puerto Peñasco en el segundo. En ella confluyen diversas actividades
económicas que van desde la pesca y la agricultura, hasta los servicios turísti-

*
Los autores agradecen a WWF-Región Golfo de California las facilidades proporcionadas para con-
sultar la encuesta en la zona del Alto Golfo de California.

Julio - Diciembre de 2008 145


E S T U D I O S SOCIALES

cos. Esta diversificación económica, la cercanía con la frontera de Estados


Unidos y el eventual arribo de inversiones estresan el uso correcto de los
recursos naturales y acentúan su vulnerabilidad.
Las autoridades responsables del cuidado del medio ambiente aplican
diferentes estrategias para regular la explotación del recurso marino. Este
esfuerzo parte de la premisa de que es indispensable generar una pesca
responsable que eleve la calidad de vida de los pescadores y permita, a su vez,
la recuperación de las especies en peligro de extinción (Alcalá, 2003; Soares
et al. 2005; Hernández, 2004; Bretón, 2001).
La pesca ribereña del AGC es problemática debido a su dispersión espacial
y disparidad social (Doode y Wong, 2001). Con frecuencia los pescadores arte-
sanales operan en sitios restringidos como son las áreas naturales protegidas
(ANP). Precisamente en el Alto Golfo de California se encuentra la Reserva de la
Biosfera del Alto Golfo de California y Delta del Río Colorado (RBAGCDRC),
establecida en 1993 como estrategia de conservación del recurso natural y
protección de especies en peligro de extinción, como la totoaba y la vaquita
marina. El programa de manejo de la reserva enfatiza la preservación de la
biodiversidad, promueve la economía de las comunidades y busca alternativas
productivas que compensen la regulación de la pesca (FFE, 1996). El decreto
que aprobó su establecimiento planteaba que dicha estrategia beneficiaría
económicamente a los pescadores ribereños.
Uno de los propósitos que inspira la elaboración del artículo es el de deter-
minar, tras casi quince años de operación, si el funcionamiento de la Reserva
está elevando la calidad de vida de los pescadores ribereños de la zona.1 Se
pretende, además, indagar en qué medida ha contribuido a superar la condi-
ción de emergencia que tenían las especies en riesgo de desaparición.
Para dar cumplimiento a los objetivos anteriores se aplicó una encuesta a
una muestra representativa de pescadores de las tres localidades; se analizó

1
Los pescadores ribereños no son los únicos usuarios de los recursos naturales de la zona. El
Ordenamiento Ecológico Marino del Golfo de California reconoce también a los que operan en la pesca
industrial y deportiva, a los indígenas, turisteros y grupos conservacionistas. Sin embargo, se considera
en este estudio a los pescadores ribereños por dos razones: por ser el segmento más numeroso y por
ser los más afectados. Dado que el estudio tiene carácter exploratorio valdría la pena, posteriormente,
reformularlo para considerar el universo de usuarios; el indicador considerado en la evaluación de la ca-
lidad de vida es el ingreso percibido por los pescadores.

146 Volumen 16, Número 32


CENTRO DE INVESTIGACIÓN EN ALIMENTACIÓN Y DESARROLLO, A.C.

la evolución de los principales indicadores socioeconómicos asociados a la


actividad pesquera a fin de comparar el desempeño registrado antes y
después del establecimiento del Área Natural Protegida. El trabajo se integra
de cuatro apartados más esta introducción y las conclusiones. En el primero
se discute la importancia de las ANP como estrategia de conservación. En el
siguiente se hace una breve descripción de la Reserva de la Biosfera del Alto
Golfo y Delta del Río Colorado (RBAGCDRC); el tercero se ocupa de caracterizar
a los pescadores artesanales que operan en el Alto Golfo de California; el más
importante es el cuarto apartado dado que en él se describe la metodología
aplicada para cumplir con los objetivos del estudio y se plantean los princi-
pales resultados.
La evolución de la región estudiada no depende exclusivamente del área
protegida, sino de muchos otros factores que aquí no se abordarán. Por lo
tanto considérense estas reflexiones como un primer esfuerzo de evaluación
de la eficacia de la Reserva del Alto Golfo como política conservacionista y
como estrategia para mejorar las condiciones de vida de los pescadores.

I. Importancia de las Áreas Naturales Protegidas


La política ambiental de México contempla, dentro del Programa Nacional para
la Protección del Medio Ambiente, la creación del Sistema Nacional de Áreas
Protegidas (SINAP). El artículo 46 de la Ley General del Equilibrio Ecológico y la
Protección del Ambiente (LGEEPA), define las diferentes categorías de áreas pro-
tegidas de las cuales son las Reservas de la Biosfera las de mayor cobertura y
alcance, puesto que se establece que dichas zonas "se constituirán en áreas
biogeográficas relevantes a nivel nacional, en las cuales habiten especies re-
presentativas de la biodiversidad nacional, incluyendo a las consideradas
endémicas" (DOF, 05-07-2007).2
Las Áreas Naturales Protegidas (ANP) son porciones terrestres o acuáticas
del territorio nacional representativas de los diversos ecosistemas en donde el
2
En el artículo 46 de la LGEEPA se consideran áreas naturales protegidas: reservas de la biosfera, par-
ques nacionales, monumentos naturales, áreas de protección de recursos naturales, áreas de protección
de flora y fauna, santuarios, parques y reservas estatales, así como las demás categorías que establezcan
las legislaciones locales y zonas de preservación ecológica de los centros de población. Para efectos de lo
establecido, son de competencia de la federación todas las áreas naturales protegidas anteriormente
señaladas, excepto zonas de preservación ecológica lo cual es materia de jurisdicción municipal.

Julio - Diciembre de 2008 147


E S T U D I O S SOCIALES

ambiente original no ha sido esencialmente alterado, lo que propicia servicios


ambientales y ecológicos cada vez más reconocidos y valorados. Son impor-
tantes para la subsistencia de aquellos grupos o comunidades que las habitan
pues se promueven proyectos que ayudan a incrementar el nivel de vida de sus
habitantes de manera sustentable, y garantizan un aprovechamiento adecua-
do de los recursos naturales, el respeto a la tenencia de la tierra y la partici-
pación conjunta de las comunidades en el manejo del ANP (FFE, 1996; DOF,
2000).
Las ANP marinas han pasado a ser parte fundamental de los esfuerzos
nacionales de protección ecológica pues con su creación se conserva la biodi-
versidad de las especies acuáticas, se da protección a los sistemas ecológicos
y se tiene un adecuado manejo de las pesquerías. Las reservas son una he-
rramienta para que el manejo correcto de los ecosistemas marinos beneficien
a la pesca y a otras actividades relacionadas: al regularlas se evita un dete-
rioro del medio ambiente. Además, la protección del entorno derivada de las
ANP promueve el desarrollo de los asentamientos humanos y de organismos
que viven dentro de ella y también a las poblaciones que viven a su alrededor
(Fragchetti et al. 2002; Gell y Roberts, 2003; Greenpeace, 2006).
Desde hace treinta años, las ANP se han constituido en la estrategia básica
de las autoridades para la conservación y manejo de las especies marinas en
todo el mundo (Hixon et al. 2001). El concepto de ANP marinas se aplica de
manera indistinta en muchos países y con una gran variedad de esquemas de
manejo. Con esto se trata de mitigar el impacto negativo en el ámbito de la
actividad productiva y aumentar el potencial ecológico y la prosperidad
económica y social entre las localidades vecinas al polígono de la ANP. No
obstante, su efectividad queda en entredicho cuando el establecimiento de un
área natural responde a intereses ajenos a la conservación, situación que
propicia fuertes repercusiones sobre el ecosistema que se quiere proteger
debido a la pobreza de sus objetivos o en ocasiones en lo contradictorio de los
mismos (Carr, 2000; Planes et al. 2000).
En este contexto, el Golfo de California exhibe varios ecosistemas únicos
caracterizados por una gran variedad de especies que van desde peces, inver-
tebrados, aves y mamíferos. Esta diversidad le brinda un formidable potencial

148 Volumen 16, Número 32


CENTRO DE INVESTIGACIÓN EN ALIMENTACIÓN Y DESARROLLO, A.C.

económico para desarrollar distintas actividades que pueden alternarse con la


pesca (Hendricks, 1985).3
La sustentabilidad y conservación del Golfo de California va más allá del
cuidado y manejo de los recursos naturales e incluye la atención a la pro-
blemática social propia de comunidades pesqueras ubicadas dentro de una
ANP. Desde esa perspectiva, el ser humano transforma y rediseña la naturaleza
teniendo un beneficio directo y permanente que ayuda al desarrollo de las
localidades que habita (Danemann, 2005; Greenberg, 2005); las visiones cul-
turales propias de estas poblaciones permiten delinear alternativas de inter-
vención que contemplen acciones y estrategias para el manejo de los recursos
naturales con un arraigo comunitario (Sewell, 1973).

II. Reserva de la Biosfera del Alto Golfo de California


y Delta del Río Colorado
II.I Objetivos del establecimiento
de la Reserva del Alto Golfo de California
Uno de estos casos son las Reservas de la Biosfera, áreas representativas de
uno o más ecosistemas no alterados por la acción del ser humano o que
requieren ser preservados y restaurados. En ellas habitan especies represen-
tativas de la biodiversidad nacional, que incluye las consideradas endémicas,
amenazadas o en peligro de extinción (DOF, 2007).
Con la declaración, el 10 de junio de 1993, de la Reserva de la Biosfera del
Alto Golfo de California y Delta del Río Colorado como área natural protegida,
las comunidades de San Felipe en Baja California y de Puerto Peñasco y Golfo
de Santa Clara en Sonora quedaron incluidas en el polígono bajo protección.
En esas localidades realizan su actividad económica un gran número de
pescadores (figura 1).

4
En esta subregión se ubican las siguientes ANP: Reserva de la Biosfera del Alto Golfo y Delta del Río
Colorado; Islas del Golfo de California y El Vizcaíno. También está la Isla San Pedro Mártir y el Parque
Marino de Loreto.

Julio - Diciembre de 2008 149


E S T U D I O S SOCIALES

Figura 1. Límites de la Reserva de la Biosfera del Alto Golfo de California

A: Reserva de la Biosfera del Alto Golfo de California y Delta del Río Colorado;
B: Zona Núcleo; C) Refugio de la Vaquita Marina.
Fuente: tomado de WWF Programa Golfo de California.

La declaratoria, en teoría, debería facilitar la solución de disputas sobre el


uso y manejo de los recursos naturales, además de establecer las bases para
la conservación de los ecosistemas caracterizados por una biodiversidad de
especies de interés económico y ambiental (SEMARNAP, 1995). Esa riqueza ha
propiciado un incremento sistemático de la explotación de los recursos natu-
rales que ha obligado, en ocasiones, a establecer medidas de protección a fin
de garantizar la reproducción, crianza y desarrollo tanto de especies marinas
como terrestres consideradas endémicas o en peligro de extinción como la
totoaba (Totoaba macdonaldi) y la vaquita marina (Phocoena Sinus).4 De la
misma forma, los humedales e islas del delta proporcionan un refugio y hábi-

4
Algunas referencias al respecto pueden encontrarse en Aragón Noriega y García Juárez, 2002;
Cisneros Mata et al. 1995; Álvarez-Borrego, 1983; D'Ágrosa et al. 2000; Rojas-Jaramillo, 2006.

150 Volumen 16, Número 32


CENTRO DE INVESTIGACIÓN EN ALIMENTACIÓN Y DESARROLLO, A.C.

tat para un gran número de aves migratorias y residentes. La Reserva también


procura la sustentabilidad con una pesca responsable de aquellas especies de
interés comercial por parte de los pescadores de esa región (Cudney y Turk,
1998).

II.2 Refugio de la Vaquita Marina


En diciembre del 2005 se publicó en el Diario Oficial de la Federación el
Programa de Protección de la Vaquita dentro del Área de Refugio ubicada en
la porción occidental del Alto Golfo de California (figura 1).
En ese decreto destaca la corresponsabilidad de la población en cuanto a
la disminución de los factores de riesgo que propician que la vaquita marina
esté considerada una especie en peligro de extinción. Esta participación es
crucial dado que es la misma población la que cuidaría que los programas de
protección no afecten el bienestar de las comunidades donde se desarrollan
actividades productivas, especialmente las ubicadas en el área de refugio.
El área de refugio comprende una superficie de 1,263.85 km2, frente a las
costas del estado de Baja California. En esta área se limitan las actividades
productivas, sobre todo aquéllas relacionadas con la pesca; al mismo tiempo
se regula el esfuerzo pesquero a las embarcaciones de altura de Puerto
Peñasco y San Felipe dentro del polígono, pero no determina el número de
embarcaciones menores que deben participar en la pesca dentro del refugio
(DOF, 2005). El establecimiento de esta ANP buscaba disminuir la tensión entre
la explotación económica de la pesca y la necesidad de proteger el ambiente,
cuestión indispensable para impulsar un desarrollo económico sustentable
(Gamarra, 2002).

III. La pesca artesanal en la RBAGCDRC


Por las características climáticas de la región costera del Alto Golfo de
California, la única actividad primaria es la pesca, aunque cada vez más la
población económicamente activa se dedica al turismo o al comercio
(Greenberg, 2005). La pesca comercial se desarrolla de dos maneras: de
forma artesanal e industrial. La pesca artesanal se realiza con embarca-
ciones pequeñas (pangas) con motor fuera de borda y dos tripulantes
(Cisneros, 2001). Para realizar esta actividad los actores se organizan, en las
Julio - Diciembre de 2008 151
E S T U D I O S SOCIALES

tres comunidades pesqueras, básicamente en cooperativas o bien en forma


particular.
La pesca en la región se expande a principios del siglo XX con la captura de
totoaba y a partir de la década de 1950 con el camarón. Desde entonces había
sido, hasta hace unos pocos años, la fuente más importante de ingresos para
las comunidades ribereñas del Alto Golfo. Con el transcurso del tiempo han
surgido otras pesquerías como las del tiburón, rayas, escama y moluscos,
manteniéndose así la actividad pesquera durante todo el año (Cudney y Turk,
1998).
La mayor parte de las especies capturadas en el Alto Golfo de California se
caracterizan por tener un apreciable valor comercial; desde luego destaca la
pesquería del camarón y, también, aunque en menor proporción, la curvina y
el chano; las tres configuran la base económica de la región (Cudney y Turk,
1998) (cuadro 1).

Cuadro 1. Volumen, precio y valor de las principales especies capturadas


en el AGC (2004). Estimaciones en pesos
Especie Corvina Sierra Chano Camarón Manta Tiburón Otras Total
Volumen 2,365,980 592,957 919,544 516,950 215,257 31,511 219,765 4,862,064
Precio kilo 12.23 9.84 4.25 125.25 8.35 11.08 13.99 Alim
Valor
capture 28,935,935 5,834,697 3,908,062 64,747,988 1,797,396 349,142 3,074,512 108,647,732
Fuente: elaboración propia a partir de los Avisos de Arribo proporcionados por la Oficina de Pesca de SAGARPA.

El auge de la pesca ribereña surgió a finales de los noventa del siglo pasa-
do luego de la quiebra de las cooperativas camaroneras que operaban con
barcos industriales. El descalabro redujo el volumen de captura en alrededor
de 50% entre los años setenta y ochenta (Hoyos, 1991). La sobrevivencia de
los viejos pescadores fue posible gracias a que se volvieron ribereños y
adquirieron embarcaciones menores o pangas.
La crisis provocó una diversificación del esfuerzo pesquero: especies no
aprovechadas antes se comenzaron a explotar. El chano, la curvina y los ron-
cachos se empezaron a capturar para abastecer al mercado oriental. Además,
los pescadores combinaban la pesca deportiva con la comercial, sobre todo en
las comunidades de San Felipe y Puerto Peñasco. En esas condiciones, el

152 Volumen 16, Número 32


CENTRO DE INVESTIGACIÓN EN ALIMENTACIÓN Y DESARROLLO, A.C.

esfuerzo pesquero se elevó sustancialmente en la zona marina del Alto Golfo


de California vulnerando la diversidad biológica del ecosistema, y poniendo en
riesgo a la totoaba y a la vaquita marina (Godínez-Plascencia, 1995; Cudney y
Turk, 1998; CSGC, 2004).
Los pescadores han experimentado sensibles cambios en sus prácticas
productivas. A partir de la entrada en vigor de la Reserva, las modificaciones
mayores se dieron en las artes de pesca, sobre todo en las redes agalleras,
buscando mejorar la sustentabilidad de la pesca; en ello radica la transforma-
ción más visible, aunque no ha sido practicada en todas las pesquerías
(Cudney y Turk, 1998).5
Con los cambios se esperaba que la operación de la reserva desencadenara
beneficios económicos para los pescadores ribereños del AGC mismos que se
reflejarían en un incremento de las remuneraciones y en mejores prácticas
ambientales y, en consecuencia, en una explotación más racional de los recur-
sos naturales.
¿Qué tan efectiva ha sido la RBAGCDRC en cuanto a elevar el nivel de vida de
los pescadores ribereños? ¿Ha contribuido a reducir el deterioro de los recur-
sos naturales? Responderlas es la parte medular de este análisis. Para ello a
continuación se expone la metodología utilizada y posteriormente se plantean
los hallazgos principales.

IV. Impactos de la Reserva sobre los pescadores ribereños


IV.1 Metodología aplicada
El procedimiento seguido combinó dos mecanismos. En el primero se sis-
tematizaron las estadísticas disponibles en fuentes secundarias para el pe-
riodo comprendido entre 1990 y 2005. Para ello se consultaron los Censos
de INEGI y los Anuarios de Pesca publicados por la CONAPESCA. De la misma
forma, se obtuvo información básica en las oficinas de pesca de las tres
comunidades localizadas en la Reserva. Esto fue posible con los Avisos de

5
La mayor parte de la pesca se realiza utilizando chinchorros y cimbras. La forma y el uso de cada
una de estas artes de pesca varían entre pescadores y comunidades, dependiendo de las especies, la
región y la época del año. El chinchorro es el arte de pesca más utilizado y la captura de muchas especies
se basa en las adaptaciones hechas por el pescador y en su modo de empleo (Cudney y Turk, 1998).

Julio - Diciembre de 2008 153


E S T U D I O S SOCIALES

Arribo de las embarcaciones menores (Forma ROP-02).6 Enseguida se revi-


saron los datos y se determinaron tendencias de algunas variables selec-
cionadas.
En el segundo se aplicó a los pescadores ribereños una encuesta de per-
cepción, cuyo propósito era enfatizar la opinión que tenían en torno a si la
Reserva había propiciado cambios significativos en materia económica, social
y ambiental. Entre los temas abordados en la encuesta se subraya la impor-
tancia que le asignan a la pesca (valor de la actividad), la estructura del gasto
de los pescadores y, especialmente, se buscaba conocer la opinión de usua-
rios en relación a si la ANP ha traído beneficios o no.7
Para obtener el tamaño de muestra se utilizó el método propuesto por
Cochran (1989). De esa manera se aplicaron 172 cuestionarios a cooperativis-
tas, grupos solidarios, sociedades y pescadores libres, seleccionados aleato-
riamente. La muestra representa aproximadamente 10% del Registro Nacional
Pesquero de cada comunidad. Las encuestas fueron capturadas y procesadas
en el paquete estadístico SPSS.8
Se consideró que los encuestados debían contar con una residencia de al
menos cinco años previos a la entrada de la declaratoria de la Reserva de la
Biosfera. Se aplicaron 61 encuestas a pescadores ribereños de la comunidad
de Santa Clara, 28 a los de Puerto Peñasco, Sonora y 83 en San Felipe, Baja
California.
Con el levantamiento y con la información obtenida de fuentes secundarias
se buscaba esclarecer qué había pasado con la población pesquera después
de la declaratoria de ANP, tanto en el ámbito económico como social. Para tal
efecto se elaboraron, con la consulta de censos y anuarios, los siguientes indi-
cadores: a) Crecimiento demográfico y distribución de la población ocupada;
b) Valor y volumen de captura (1990 al 2005);9 c) Estructura organizativa de los

6
El Aviso de Arribo reporta los volúmenes de captura obtenidos durante una jornada de trabajo o viaje
de pesca, además de incluir datos sobre el precio de playa, lugar de captura, entre otros.
7
La referencia metodológica para formular este instrumento fue tomada de Greenberg (1993b)
mismo que hizo algo parecido para las tres comunidades ubicadas dentro de la RBAGCDRC.
8
Statistical Package of Social Science (SPSS).
9
Este indicador se construyó a partir de la información de los Avisos de Arribo. Con esta información
es posible determinar el impacto de la Reserva en cuanto a derrama económica en la pesca ribereña.

154 Volumen 16, Número 32


CENTRO DE INVESTIGACIÓN EN ALIMENTACIÓN Y DESARROLLO, A.C.

pescadores ribereños del AGC (1990 al 2005);10 d) Estructura de los ingresos


de los pescadores ribereños del AGC; e) Estructura del gasto productivo e
improductivo.11
Con los resultados de la encuesta se construyeron los indicadores de per-
cepción siguientes: a) Opinión en torno al desempeño de la actividad pes-
quera;12 b) Opinión respecto a la situación económica de los pescadores
ribereños, c) Opinión respecto a la diversificación de las especies explotadas
comercialmente; d) Opinión sobre alternativas económicas, e) opinión sobre
los mecanismos de compensación económicos ante el eventual cierre de la
pesca.13

IV.2 Resultados
1. Crecimiento demográfico y
distribución de la población ocupada
Las comunidades ubicadas en el Alto Golfo de California, son poblaciones
primordialmente pesqueras que se arraigaron con la explotación de especies
comercialmente muy apreciadas como la totoaba, tiburón y camarón. El
crecimiento demográfico en dichas localidades registra ritmos distintos.
Mientras en el Golfo de Santa Clara (GSC) el número de habitantes se duplicó
en los últimos quince años, el incremento en Puerto Peñasco (PP) y San
Felipe (SF) fue menor: 70% y 60% respectivamente en el mismo periodo. De
hecho, en PP, fue en el último quinquenio cuando se experimentó el mayor
dinamismo (cuadro 2).

10
Se construyó a partir de la información proporcionada por la oficina de pesca de cada localidad. Con
este indicador es posible determinar la evolución de las cooperativas, así como la variación en cuanto al
número de socios pertenecientes a esa forma de organización. Adicionalmente se puede visualizar la can-
tidad de embarcaciones con que cuenta cada una de las cooperativas y permisionarios.
11
Ambos se elaboraron con la información obtenida de las encuestas; el gasto productivo se refiere
al que hacen los pescadores en el mantenimiento y adquisición del equipo y artes de pesca para cada una
las pesquerías realizadas durante el año. El improductivo alude al gasto en alimentación y otros servicios
básicos.
12
Este indicador muestra la opinión del pescador sobre el efecto de la Reserva en la productividad y
calidad de la captura desde que se decretó en 1993.
13
Con este indicador se pretende detectar qué actividades o qué opciones estarían dispuestos a
realizar los pescadores si su actividad fuera cerrada por motivos ecológicos.

Julio - Diciembre de 2008 155


Cuadro 2. Crecimiento de la población en las comunidades del Alto Golfo de California
y proporción de ocupadas en el sector primario (1990-2005)
Golfo de Santa Clara Puerto Peñasco San Felipe
1990 % 1995 % 2000 % 2005 % 1990 % 1995 % 2000 % 2005 % 1990 % 1995 % 2000 % 2005 %
PT 1506 100 1830 100 2777 100 3186 100 26141 100 26810 100 30466 100 44647 100 9263 100 11310 100 13123 100 14831 100
PEA 434 29 536 29 829 30 0 7694 29 9342 35 11391 37 0 3075 33 3732 33 4325 33 0
PEI 529 35 929 51 1065 38 0 9666 37 11812 44 10308 34 0 2941 32 3959 35 3993 30 0
PO 434 100 530 99 817 99 0 7468 97 9202 99 11316 99 0 3034 99 3676 99 4296 99 0
PSP 319 74 368 69 400 49 0 1676 22 1356 15 11289 10 0 722 24 567 15 634 15 0
PSS 13 3 57 11 115 14 0 1356 18 2179 24 29513 26 0 500 16 757 21 790 18 0
PST 87 20 105 20 245 30 0 4271 57 5667 627 6672 59 0 1708 56 2352 64 2742 64 0
PT: Población total, PEA: Población económicamente activa, PEI: Población económicamente inactiva, PO: Población ocupada, PSP: Población
en el sector primario, PSS: Población del sector secundario, PST: Población del sector terciario.
Fuente: INEGI. Censos de 1990, 2000 y Conteo 1995.
CENTRO DE INVESTIGACIÓN EN ALIMENTACIÓN Y DESARROLLO, A.C.

La población económicamente activa (PEA) representa, para el año 2005,


aproximadamente una tercera parte de la población total en las tres comu-
nidades; esta situación es similar a la que se tiene a escala estatal y nacional.14
Por otra parte, la población ocupada para ese mismo año fue de 99% en cada
localidad, lo que evidencia bajos índices de desocupación laboral, mismos que
varían según las actividades realizadas por temporadas.
En el 2000, 49% de la población ocupada (PO) en el GSC trabajó en el sec-
tor primario; porcentaje significativamente menor comparado con 1990 cuan-
do ascendió a 76%. En el año 2000 el cien por ciento de la PO se dedicaba a
la pesca, debido a que en esa zona de la reserva no existen campos agrícolas
y ganaderos que permitan la diversificación de las actividades primarias. El
51% restante se empleó en el sector servicios especialmente en el turismo.
La distribución de la PO en SF y PP es más diversificada dado que el total de
la PO se reparte tanto en el sector primario, como en el secundario y terciario.
En particular 10% de la población ocupada de PP y 15% de SF laboraban en el
sector primario, mayoritariamente en la pesca y en menor medida en la agri-
cultura y ganadería. En esas comunidades el empleo generado en el sector
turismo representa más de 50% de la PO.

2. Valor y volumen de captura (1990 al 2005)15


Con el valor y el volumen de captura es posible determinar el impacto que
tuvo el establecimiento de la Reserva sobre la economía de lo pescadores
ribereños. Antes de 1993 el número de embarcaciones menores en el AGC era
menor a 200; la flota pesquera industrial se vio afectada por la presencia de
dos acontecimientos inesperados: por un lado el colapso económico de la
pesca camaronera registrado en la década de los ochenta del siglo pasado y
por otro por la propia operación de la Reserva (1993) y su Plan de Manejo
(1995). En este periodo se registró una disminución de barcos camaroneros
que se compensó con el incremento del número de pangas, sobre todo en las
comunidades de SF y GSC. En estas comunidades fue vendida prácticamente

14
En el año 2000, la PEA en el GSC era de 30%, en PP alcanzó de 37% y en SF 33%.
15
No existen datos oficiales de capturas, valor y número de pescadores en ninguna comunidad del
AGC, para antes de 1995.

Julio - Diciembre de 2008 157


E S T U D I O S SOCIALES

toda la flota industrial; sólo en PP se conservó una cantidad importante de


esas embarcaciones. Entre 1998 y 2002 se advierte un incremento sistemáti-
co de pangas y por tanto del esfuerzo pesquero que implicó una elevación de
los ingresos de los pescadores del GSC y SF (figura 2).

Gráfica 1. Volumen de la pesca y valor de la producción


en el Alto Golfo de California (1995-2005)

SF: San Felipe, PP: Puerto Peñasco, GSC: Golfo de Santa Clara.Valor de la captura: líneas con negro;
Volumen en toneladas: líneas cortadas.
Fuente: elaboración propia con base en los datos proporcionados por la Oficina de Pesca de cada
comunidad.

Los incrementos en el volumen de captura registrados antes del año 2000


se expresaron, como es natural, en mayores ingresos para los pescadores,
sobre todo para los de PP y el GSC, donde las remuneraciones recibidas
aumentaron 250% en cinco años. A partir del 2001 se observa una disminu-
ción en la producción pesquera de SF debido a la reducción de la flota pes-
quera menor, pero aun así el valor del producto se mantiene por arriba de los
30 millones de pesos. El mejor año para los pescadores fue 2005 al obtener
ingresos por 62 millones de pesos debido a que el precio del camarón rebasó

158 Volumen 16, Número 32


CENTRO DE INVESTIGACIÓN EN ALIMENTACIÓN Y DESARROLLO, A.C.

el promedio histórico en esa temporada;16 en cambio, 2002 fue el mejor año


para GSC (72 millones de pesos) al capturarse grandes volúmenes de curvina
y chano. En PP la producción pesquera repunta a partir de 1999 y se mantu-
vo constante hasta el 2005, lo mismo pasa con sus ingresos.

3. Estructura organizativa de los pescadores


ribereños del AGC (1990-2005)
La organización de los pescadores ribereños es compleja: hay legalmente
registradas 62 cooperativas pesqueras (de embarcaciones menores) mismas
que integran un total de 2,418 socios. Existen también los llamados permi-
sionarios, que tienen la concesión para pescar distintas especies acuáticas,
otorgada por la autoridad correspondiente.17
La comunidad con la mayor cantidad de cooperativas es el GSC, seguido
por PP y SF; ello se explica por la estructura de la población ocupada que en
caso del primero se concentra, como se vio en el punto 1, en el sector pri-
mario. En cuanto al número de socios adscritos a una cooperativa, PP cuenta
con la mayor cantidad y los del GSC con el menor número; por otro lado
muchas de ellas existían antes de 1993 como cooperativas de embarcaciones
mayores que no sobrevivieron a la crisis de la deuda. En consecuencia cam-
biaron su adscripción a cooperativas de embarcaciones menores. Además,
con el tiempo se fueron fraccionando aumentando la cantidad de cooperati-
vas, pero no la de socios o pescadores. El GSC cuenta con el mayor número
de esas organizaciones y el menor número de socios pescadores. En cuanto
a permisionarios, en SF se encuentra el mayor número de registros, le sigue
PP, mientras que en el GSC ninguno (ver cuadro 3).
Conviene señalar que no todos los pescadores ribereños están incorpora-
dos a una cooperativa y varios de ellos se encuentran organizados en otros
grupos o simplemente trabaja por su cuenta. En PP, por ejemplo, un número
importante de pescadores labora para permisionarios (21.4%) o para
uniones o ejidos (25%). Tanto en el GSC y PP son pocos los pescadores que no

16
El precio del camarón para aquella temporada estuvo entre los 150 y 180 pesos por kilogramo con
respecto a los años anteriores que fue en promedio menor de los 125 pesos por kilogramo.
17
Cada uno de los permisionarios maneja o renta un número indistinto de embarcaciones menores
(de tres hasta 30 pangas) con un número igual o mayor de pescadores.

Julio - Diciembre de 2008 159


E S T U D I O S SOCIALES

Cuadro 3. Sociedades cooperativas, socios y permisionarios:


distribución de los pescadores en el Alto Golfo de California
Especie Puerto Golfo de San
Peñasco Santa Clara Felipe
Núm de SCPP y A 19 25 18
Núm. de Socios 1120 458 840
Permisionarios 3 - 9
Cooperativa 46.4 90.0 84.3
Permisionario 21.4 3.3 1.2
Ninguna 7.1 5.0 13.3
Unión o Ejido 25.0 1.7 1.2
Fuente: elaboración propia con base en la información proporcionado por la Oficina
de Pesca de cada comunidad y la Oficina Estatal de Información para el Desarrollo
Rural Sustentable del Estado de Sonora (OEIDRUS).

Gráfica 2. Número de embarcaciones de pescadores ribereños


en el Alto Golfo de California (1995-2005)

SF: San Felipe, GSC: Golfo de Santa Clara, PP: Puerto Peñasco
Fuente: elaboración propia con base en la información proporcionada por la Oficina de Pesca de cada comunidad.

160 Volumen 16, Número 32


CENTRO DE INVESTIGACIÓN EN ALIMENTACIÓN Y DESARROLLO, A.C.

pertenecen a una cooperativa, 10% y 15.7% del total de pescadores encues-


tados, respectivamente.
Al revisar el número de embarcaciones, se observa que en el 2005 SF
cuenta con la mayor cantidad de pangas (840), seguido de PP (673). Estas
cantidades son superiores en comparación con 1995 y esta variación es resul-
tado del incremento registrado entre 1996-1997 y 2001-2002 (gráfica 2).
Entre 1995 y 2000 las pangas de GSC ascendieron de 335 a 550; en SF es
notable el aumento durante 1995 y 1997 al pasar de 30 a 300; en el 2003 se
agregaron a esa comunidad 500 para quedar en las 800 que actualmente
tiene (gráfica 2). En resumen, el incremento del esfuerzo pesquero en estas
comunidades ribereñas se aprecia entre los años 1995-1997 y 2000-2003. En
este último periodo, el número de pangas llega a sobrepasar las 2,000 en
todo el AGC, cuando en 1995 existían sólo 635.

4. Estructura de los ingresos de los pescadores ribereños del AGC


En el AGC la producción se está distribuyendo entre un número mayor de
pescadores (4,000) que operan particularmente dentro de la Reserva y
Refugio de la Vaquita. Ante esta situación, el ingreso de los pescadores
durante el año depende de la comunidad a la que pertenezcan. En la gráfica
3 se observa que los pescadores con menores ingresos son los de PP, pues
en esta comunidad se encuentra la mayoría de pescadores y registran el
menor volumen de captura, en comparación con GSC y SF. Por su parte, los
pescadores de SF presentaron altos ingresos durante el periodo de 1997 al
2002, y llegaron a alcanzar ganancias por arriba de 100 mil pesos per cápita
anuales.18 La tendencia de los ingresos para los pescadores del GSC es pare-
cida a los pescadores de SF. El monto máximo de ingresos en 1999 fue supe-
rior a los 80 mil pesos anuales por pescador. A partir de entonces y hasta
ahora sus ganancias están ligeramente por arriba de los 40 mil pesos. Para el
año 2004 se inicia un proceso de crecimiento del ingreso por pescador de
cada una de las comunidades debido, principalmente, a dos situaciones: en
primer lugar, a que el precio alcanzado por el camarón de la región sobrepasa

18
Una situación diferente se presentó durante 1993 con el aumento de personas dedicadas a la pesca;
disminuyeron las ganancias a tal grado que los ingresos posteriores se ubicaron por debajo de los 20 mil
pesos anuales.

Julio - Diciembre de 2008 161


E S T U D I O S SOCIALES

Gráfica 3. Ingreso anual promedio por pescador de cada comunidad

SF: San Felipe, GSC: Golfo de Santa Clara, PP: Puerto Peñasco
Fuente: elaboración propia con base en la información proporcionada por la Oficina de Pesca de cada
comunidad.

el promedio de otras zonas camaronícolas y en segundo lugar, que cada vez


es menor la presencia de embarcaciones mayores dentro de los límites de la
Reserva de la Biosfera y Refugio de la Vaquita.

5. Estructura del gasto de los pescadores ribereños del AGC


5.1. Estructura del gasto productivo
Uno de los gastos principales de la actividad pesquera proviene del mante-
nimiento y renovación del equipo y las artes de pesca en cada temporada,
así como de la compra de combustible (gasolina, lubricantes) y alimento
para cada uno de los viajes realizados por las embarcaciones. Como se
observa en el cuadro 4, los pescadores que más invierten en equipo son los
de SF. Los gastos se registran principalmente durante la captura de camarón,
tiburón y sierra. Las redes que utilizan para capturar tiburón las emplean
también en la época de la curvina. Otra especie en que invierten es en la
jaiba, es una inversión mínima de 750 pesos por pescador. Los pescadores
de PP al igual que los del GSC realizan su mayor inversión en equipos para el
camarón, sierra y manta.
Los costos de viaje de cada pescador varían según la comunidad donde se
encuentra y la distancia a la que debe salir a buscar su producto. Mientras los
162 Volumen 16, Número 32
CENTRO DE INVESTIGACIÓN EN ALIMENTACIÓN Y DESARROLLO, A.C.

Cuadro 4. Costos imputados a la pesca en el Alto Golfo de California (2004)


Promedio por viaje en pesos ($) Redes Costo total
Viajes Combustible Lubricantes Alimento Costo Promedio x temporada en la temporada
GSC 209 881 138 180 1109 54,630.96 $286,411.96
PP 76 624 185 190 999 49,446.08 $125,370.08
SF 279 593 75 150 818 64,869.52 $293,091.52
Promedio 188 752 161 185 1054 56,315.52 $234,957.85
Fuente: elaboración propia con base en la encuesta aplicada a pescadores ribereños de San Felipe, B.C., Golfo de Santa
Clara y Puerto Peñasco, Sonora, en junio de 2004. GSC: Golfo de Santa Clara; PP: Puerto Peñasco; SF: San Felipe.

pescadores del GSC y SF realizan más de 200 viajes al año en promedio, en PP


cada pescador realiza 76 salidas al mar. En lo que se refiere al gasto en com-
bustibles, la inversión para cada pescador del GSC es mucho mayor que los
pescadores de las otras dos comunidades, ya que estos salen más veces al
mar y a distancias más lejanas. La inversión en los alimentos necesarios para
salir a pescar es aproximadamente el doble para los pescadores del GSC y PP
que para los de SF.

5.2 Estructura del gasto improductivo


El gasto promedio de los pescadores se distribuye entre los servicios de luz,
agua, gas, salud y alimentación. En el caso de GSC destinan cerca de 80% de
sus ingresos al consumo de alimentos. Los de PP menos de la mitad; un ter-
cio de ellos gastan menos de 20% en alimento. Los pescadores de SF son los
que mas invierten en este rubro (cuadro 5).
Cuadro 5. Gastos de los pescadores del Alto Golfo de California (2004)
Alimento Servicios Salud
% GSC PP SF GSC PP SF GSC PP SF
0-20 5.0 37.5 0.0 85.0 57.10 100.0 96.6 85.7 100.0
21-40 23.3 16.6 12.5 15.0 190 42.9 1.7 3.6 0.0
41-60 36.7 29.2 50.0 0.0 0.0 0.0 1.7 10.7 0.0
61-80 28.3 8.4 21.3 0.0 0.0 0.0 0.0 0.0 0.0
81-100 6.7 8.3 16.3 0.0 0.0 0.0 0.0 0.0 0.0
Fuente: elaboración propia con base en la encuesta aplicada a pescadores ribereños de San Felipe, B.C., Golfo de Santa
Clara y Puerto Peñasco, Sonora, en junio de 2004.

Julio - Diciembre de 2008 163


E S T U D I O S SOCIALES

Con respecto al pago de servicios, cerca de un tercio de los pescadores en


el GSC y más de la mitad en PP gastan menos de 10% en luz, agua y gas, alrede-
dor de 40% de los pescadores de esa comunidad dedican en promedio un ter-
cio de su ingreso en esos servicios básicos. En lo que respecta al gasto en
salud, menos de 97% de los pescadores GSC y las dos terceras partes en PP
destinan cerca de 20% de sus ingresos en servicios médicos. Solamente 16%
de los pescadores gasta más de 50% de su ingreso en salud.
Para solventar algunos gastos cuando no hay pesca, sobre todo entre los
meses de junio a agosto, gran parte de los pescadores se ocupan en otras
actividades. La mayor parte de ellos trabaja en el sector secundario como
empleados asalariados y sólo unos pocos son contratados en el sector pri-
mario. En el GSC y SF la mayor parte trabaja como ayudantes en la construc-
ción dentro de la misma comunidad, en Mexicali o San Luis Río Colorado; el
resto se ocupa como agricultores o comerciantes. En PP durante la temporada
baja de pesca una tercera parte de los pescadores trabaja como guardia de
seguridad en hoteles y comercios de la ciudad, esto debido al auge turístico
de la ciudad. Por otro lado, cerca de la mitad sigue trabajando dentro de la
actividad pesquera, pero como buzos o cabos de vida. Una menor cantidad tra-
baja en oficios de plomería y carpintería. Los ingresos en estos oficios varían
según la especialidad de cada pescador y la comunidad donde ofrezcan sus
servicios, ya sea en una ciudad o en una zona rural. El promedio de ingresos
por pescador es de alrededor de 1,500 pesos mensuales.

6. La percepción de los pescadores en relación


al impacto de la RBAGCDRC.
Principales resultados de la encuesta
6.1. La opinión en torno al desempeño de la actividad pesquera
Tras la declaración y puesta en operación de la Reserva de la Biosfera en
1993 se preveía una mejora en las condiciones de vida de la población de
las tres comunidades ubicadas dentro del área de protección.
Específicamente, los cambios se reflejarían en el tamaño y variedad de los
organismos y, por tanto, en nuevas especies capturadas, lo que provocaría
efectos directos en los ingresos de los pescadores. Ello ante el supuesto era
que la política de conservación y manejo controlado de la pesca en la

164 Volumen 16, Número 32


CENTRO DE INVESTIGACIÓN EN ALIMENTACIÓN Y DESARROLLO, A.C.

Reserva traería incrementos en los volúmenes de captura y consecuente-


mente una mejora en el poder adquisitivo.
Como se puede observar en el cuadro 6, la visión y reflejo del éxito de esta
política depende del punto de vista de los pescadores en cada una de las
comunidades. Así se observa que cerca de 40% de los pescadores de PP con-
sideran que sus ingresos se han elevado a consecuencia de la mayor variedad
de especies capturadas y también al aumento en el volumen registrado. Otro
grupo de pescadores considera que la Reserva no ha implicado mayores be-
neficios en los ingresos ni tampoco en cuanto a producción. Por otra parte, son
muy pocos los pescadores que observan un impacto negativo en su pesca
(4%).

Cuadro 6. Percepción del impacto de la Reserva de la Biosfera


en la actividad pesquera (Calidad de la pesca)
Impacto Comunidad (%)
SF GSC PP
Positivo 71.1 66.7 39.3
Negativo 20.5 18.3 3.6
La Reserva no influye en la pesca 3.6 15.0 21.4
No lo menciono 4.8 0.0 35.7
Fuente: elaboración propia con base en la encuesta aplicada a pescadores
ribereños de San Felipe, B.C., Golfo de Santa Clara y Puerto Peñasco,
Sonora, en junio de 2004.

La opinión es notablemente distinta en el GSC y SF donde más de 66%


observa un impacto positivo en la actividad pesquera al verse reflejado en el
tamaño y volumen de captura de los organismos marinos. Un poco más de
18% de los pescadores no ha visto un cambio significativo: ni positivo ni ne-
gativo.
Por otra parte, considerando que la efectividad de un área protegida des-
cansa parcialmente en la diversificación de las pesquerías al reducir la presión
sobre las especies en peligro de extinción, la encuesta aplicada permitió deter-
minar que la diversificación pesquera varía en cada comunidad. Los
pescadores de SF señalaron que hay nuevas especies que se explotan comer-
Julio - Diciembre de 2008 165
E S T U D I O S SOCIALES

cialmente, mientras que en GSC hay una disminución; por su parte, en PP no se


identificó cambio alguno en la abundancia de especies.
Los pescadores de SF y GSC conocen un poco más sobre los objetivos de la
Reserva que los de PP; ello se nota cuando señalan que la Reserva ha funciona-
do como una zona de reproducción de especies: más de la mitad piensa que
se ha registrado un mayor número de organismos juveniles en las especies
capturadas, es decir, advierten un cambio positivo.
De los pescadores que opinaron positivamente, los de SF y PP observaron
variaciones en la abundancia de las capturas y un poco más de 20% de los
pescadores del GCS admitió incrementos en la captura general de las especies
con mayor valor económico. Menos de un tercio de los pescadores menciona
que hay un impacto negativo en la pesca del camarón, que es precisamente la
pesquería más importante de la zona. .
Sobre el acceso a la pesca, cerca de un tercio de los pescadores de SF y PP
ha experimentado menos dificultades para desarrollarse en otras pesquerías
desde que se estableció la Reserva. Por el contrario, sólo 15% de los
pescadores del GSC han diversificado su pesca. Es notorio que casi un tercio
de los pescadores de SF respondieron negativamente cuando se les preguntó
si les rechazaron solicitudes para explotar otras pesquerías y menos de 15%
en el GSC y PP presentaron ese problema.
Alrededor de 17% de los pescadores de las comunidades opinaron que la
Reserva no ha impactado la pesca en la región; más de un tercio en el GSC y
PP no sabían sobre el posible beneficio derivado de un mayor volumen de cap-
turas en la Reserva. Lo anterior sugiere un notable desconocimiento de los
impactos de la Reserva entre los pescadores de las comunidades ribereñas.

6.2 La opinión respecto a la situación económica


a) En cuanto a los ingresos y otras remuneraciones
La percepción de los pescadores en este rubro es distinta por comunidad y
varía con respecto a su cercanía y dependencia de la pesca en la Reserva
(cuadro 7). En SF casi 40% de los pescadores señala que la Reserva ha sido
positiva para sus ingresos. Un tercio de ellos manifiesta que la Reserva no
ha traído beneficio alguno o no observa cambio alguno en sus ingresos. En
tanto, entre los pescadores del GSC, un tercio de ellos observa que la Reserva

166 Volumen 16, Número 32


CENTRO DE INVESTIGACIÓN EN ALIMENTACIÓN Y DESARROLLO, A.C.

tiene un impacto positivo en sus ingresos, pero la mitad de ellos siente que
sus ingresos han disminuido. Menos de 20% no ve mejoría alguna. Por otro
lado, la mayor parte de los pescadores de PP manifiesta que no ha percibido
un cambio en sus ingresos o no le ha puesto interés al mismo. Menos de
20% manifiesta un beneficio positivo en el ingreso desde que existe la
Reserva y menos de 4% dice que sus ingresos han ido a menos. Se advierte
que la percepción en relación a los impactos positivos han sido moderados,
mientras que una mayoría encuentra que estos impactos casi impercepti-
bles.

b) En relación al desempeño del turismo y otras actividades


San Felipe y Puerto Peñasco muestran un desarrollo turístico notable. Esto se
observa en la estructura de la PEA: 64% y 59%, respectivamente, de la
población ocupada tiene un empleo vinculado a la llamada industria sin
chimeneas. Por su parte los pescadores en esas comunidades consideran
que la Reserva los ha beneficiado pues les ha brindado la oportunidad de
diversificar sus actividades económicas ofreciendo algún servicio derivado
de la creciente llegada de visitantes.
El GSC exhibe una proporción menor de habitantes dedicados al turismo
(30%) y sólo 22% de los pescadores aprecian efectos positivos de la operación
de la ANP. La mayoría opina que la Reserva ha sido desfavorable al desarrollo
de su actividad y en especial piensan que el turismo no ha crecido y por tanto
no ha propiciado nuevas oportunidades de trabajo.19

6.3 La opinión respecto a la diversificación de las


especies comercialmente explotadas
La opinión de los pescadores cambia dependiendo de si las especies cap-
turadas tienen importancia comercial y si ésta se realiza dentro de la zona
de influencia de su comunidad. Con estas consideraciones los datos de la
encuesta arrojan los siguientes resultados:

19
Por otra parte, respecto a la pesca ilegal, en las tres comunidades la opinión está dividida; en lo que
sí concuerdan es que hace falta mayor vigilancia para evitar el saqueo de especies en las temporadas de
veda, sobre todo en la de camarón.

Julio - Diciembre de 2008 167


Cuadro 7. Impacto de la Reserva de la Biosfera en las distintas actividades por comunidad pesquera
San Felipe Golfo de Santa Clara Puerto Peñasco
Contenido / % Positivo Negativo N. I. No sabe Positivo Negativo N. I. No sabe Positivo Negativo N. I. No sabe
Actividad
pesquera 71.1 20.5 3.6 4.8 66.7 18.3 15.0 0.0 30.3 3.6 21.4 35.7
Ingresos -
sueldos 38.8 35 23.8 2.5 33.3 50.0 10.0 6.7 17.9 3.6 35.7 42.9
Diversidad en la
pesca 52.5 28.8 16.3 2.5 31.7 45.0 20.0 3.3 21.4 10.7 32.1 35.7
Zonas para la
reproducción de
especies 71.3 10 13.8 5 53.3 21.7 13.3 11.7 32.1 7.1 17.9 42.9
Turismo 46.1 14.5 36.8 2.6 21.7 5.0 48.3 25.0 53.6 0.0 10.7 35.7
Pesca ilegal 25.7 47.3 16.2 10.8 28.3 15.0 31.7 25.0 28.6 21.4 10.7 39.3
Acceso
a la pesca 35.8 32.8 19.4 11.9 15.0 13.3 25.0 46.7 32.1 10.7 17.9 39.3
Capturas 50.8 21.5 16.9 10.8 20.0 33.3 15.0 31.6 50.0 7.1 3.6 39.3
Fuente: elaboración propia con base en la encuesta aplicada a pescadores ribereños de San Felipe, B.C., Golfo de Santa Clara y Puerto
Peñasco, Sonora (junio de 2004).
N.I.: No ha impactado.
CENTRO DE INVESTIGACIÓN EN ALIMENTACIÓN Y DESARROLLO, A.C.

Camarón. Un porcentaje importante de los pescadores de PP y SF considera


que el establecimiento de la Reserva ha tenido un impacto positivo, pues más
de 40% señala que obtuvo incrementos en la captura del crustáceo; menos de
30% registró disminuciones y 23% no advierte cambios significativos (cuadro
8). En cuanto al GSC, poco menos de dos tercios señala haber experimentado
disminuciones o han mantenido los promedios históricos, el resto de la mues-
tra dice que ha visto incrementarse los volúmenes de captura.

Cuadro 8. Impacto de la Reserva en las capturas por especie (2004)


Impacto Camarón Chano Curvina Sierra Tiburón
SF GSC PP SF GSC PP SF GSC PP SF GSC PP SF GSC PP
Aumentó 44.6 36.7 50.0 30.1 20.0 17.9 16.9 8.3 25.0 28.9 10.0 25.0 14.5 1.7 17.9
Disminuyó 26.5 31.7 21.4 24.1 16.7 3.6 15.7 38.3 32.1 18.1 25.0 17.9 10.8 25.0 17.9
No influye 22.9 31.7 10.7 18.1 35.0 46.4 13.3 20.0 14.3 14.5 41.7 32.1 13.3 10.0 10.7
No lo mencionó 6.0 0.0 17.9 27.7 28.3 32.1 54.2 33.3 28.6 38.6 23.3 25.0 61.4 63.3 53.6
Fuente: elaboración propia con base en la encuesta aplicada a pescadores ribereños de San Felipe, B.C., Golfo de Santa
Clara y Puerto Peñasco, Sonora, en junio de 2004.

Chano, curvina y sierra. Menos de un tercio de los pescadores en cada una


de las comunidades señaló que tuvo aumentos; el resto disminuciones o, en
el mejor de los casos, sin variaciones importantes. Para las otras especies no
hay un patrón de comportamiento específico pues varía de acuerdo a las
especies.
Tiburón y manta. Son las especies de menor relevancia en cuanto a valor y
volumen de captura. Por lo mismo más de la mitad de los pescadores no pro-
porcionó opinión; de los que si se expresaron sólo 18% experimentó un cam-
bio favorable.

6.4 La opinión sobre alternativas económicas


La diversidad de alternativas de empleo indicadas por los pescadores son
muy pocas, las más comunes fueron: el turismo, comercio y/u otra actividad
pesquera. En SF un tercio de los encuestados indicaron que se dedicarían a
la actividad turística, 23% al comercio; 19% no dejaría de pescar y 11% a
alguna actividad relacionada con la pesca (cuadro 9).

Julio - Diciembre de 2008 169


E S T U D I O S SOCIALES

Los pescadores de PP consideran como primera alternativa dedicarse al tu-


rismo, seguida de alguna actividad relacionada con la pesca. La acuacultura y
el comercio para estos pescadores no constituyen una verdadera alternativa
productiva aunque sí las consideran como una opción viable. Los pescadores
del GSC estimaron como opción principal el comercio, seguido del turismo y
por último de alguna actividad relacionada con la pesca. Finalmente, un
número importante de pescadores del GSC y PP se dedicaría a actividades rela-
cionadas con el préstamo de servicios o algún oficio.

Cuadro 9. Alternativas económicas a la actividad pesquera en el AGC


Alternativa económica (%) Puerto Peñasco Golfo de Santa Clara San Felipe
Acuacultura 7.1 3.3 -
No dejaría de pescar 3.6 16.7 19.0
Comerciante 7.1 26.7 22.8
Trabajar en empresa privada 3.6 8.3 -
No lo menciona 21.4 1.7 16.4
Turismo 28.6 16.7 30.4
Otro 14.3 24.9 -
Alguna actividad relacionada con la pesca 14.3 1.7 11.4
Fuente: elaboración propia con base en la encuesta aplicadas a pescadores ribereños de San Felipe, B.C., Golfo de Santa
Clara y Puerto Peñasco, Sonora, en junio de 2004.

6.5 La opinión sobre los mecanismos de


compensación económica ante el posible cierre de la pesca
En el cuadro 10, se muestra que aproximadamente un tercio de los
pescadores de cada una de las comunidades solicitaría un permiso para
dedicarse a otra actividad pesquera como la extracción de bivalvos o la pesca
deportiva. Un número significativo de pescadores en PP y SF buscaría la ma-
nera de seguir pescando como siempre lo han hecho. Un 40% de los
pescadores en el GSC trataría de obtener una compensación económica o
que el gobierno les reembolse su permiso. Son pocos los que pedirían otras
opciones a la autoridad en la materia para mantener los empleos en la

170 Volumen 16, Número 32


CENTRO DE INVESTIGACIÓN EN ALIMENTACIÓN Y DESARROLLO, A.C.

región y otro grupo no exigiría nada ya que varias de estas personas tienen
negocios pequeños, como el pequeño comercio, que complementan los
ingresos.

Cuadro 10. Compensación económica exigida al gobierno


por el cierre de la pesca en la Reserva (2004)
Opciones al cierre de la pesca (%) Puerto Peñasco Golfo de Santa Clara San Felipe
Compensación económica 7.1 26.7 7.0
Un permiso para otra pesquería 39.3 33.3 29.0
El gobierno le pague lo que costo el
permiso-concesión 3.6 15.0 2.0
Nada 10.7 6.7 -
Seguiría pescando de cualquier manera 21.4 8.3 27.0
Otra 17.9 1.7 -
Generación de otros empleos - 6.7 -
No lo mencionó - 1.7 -
Fuente: elaboración propia con base en la encuesta aplicada a pescadores ribereños de San Felipe, B.C., Golfo de Santa
Clara y Puerto Peñasco, Sonora, en junio de 2004.

Conclusiones
El crecimiento de la población de pescadores en las comunidades en el Alto
Golfo de California en el periodo de 1990 al 2000 se ha mantenido estable, ya
que la diversificación de actividades productivas abre oportunidades para vivir
y progresar. Mientras San Felipe y Puerto Peñasco han evolucionado del sector
primario al terciario, el Golfo de Santa Clara mantiene su economía básica-
mente de la pesca.
Aunque existe una diversificación notable de actividades económicas, la
pesca es fundamental en la estructura productiva de las tres comunidades
pues los ingresos generados por los pescadores ribereños siguen siendo
determinantes, sobre todo en la comunidad del Golfo de Santa Clara. En la
actividad pesquera subyace una gama amplia de actividades complementarias
mismas que generan empleos indirectos que hacen pensar que la pesca difí-
cilmente desaparecerá (Cudney y Turk, 1998).

Julio - Diciembre de 2008 171


E S T U D I O S SOCIALES

El aumento del número de cooperativas y de organizaciones de pescadores


no incrementó la cantidad de pescadores, sino que propició una división que
se explica por intereses particulares tanto en la diversificación de la actividad
productiva como en las cuotas de participación en las organizaciones. Existe
una mayor cantidad de socios en las comunidades de Puerto Peñasco y San
Felipe, ya que cuentan con una variedad de opciones económicas e incluso
dentro de la misma pesca como la extracción de moluscos o bien en tempo-
radas de escasa pesca se dedican a la actividad turística (comunicación per-
sonal pescadores).
La Reserva de la Biosfera no ha sido determinante para el desarrollo y cre-
cimiento de la calidad de vida de los pescadores ribereños.20 Los gastos en
equipo y en cada uno de los viajes son importantes durante todo el año y los
ingresos captados por individuo no son suficientes para solventar sus gastos
en servicios y bienes materiales. Esta situación se observa con más claridad
con los pescadores del Golfo de Santa Clara, quienes realizan más viajes al
interior de la parte marina de la Reserva durante el año y sus costos de viaje
son muy altos en comparación con los pescadores de las otras dos comu-
nidades. Por su parte, los pescadores de Puerto Peñasco y San Felipe, alternan
la pesca con la actividad turística, lo que hace que su solvencia económica sea
más relajada para adquirir bienes y pagar ciertos servicios.
Este entorno justifica la negativa de los pescadores de que la Reserva
influyó en el incremento de sus ingresos y en una mejoría en la calidad de vida.
Más de la mitad de ellos no ven todavía un beneficio directo y creen que ha
limitado su nivel de captura de las especies explotables. Esto ha provocado
que muchos de los pescadores busquen alternativas de trabajo en los tiempos
de ocio o cuando no hay pesca.
Por otra parte, la percepción en materia ambiental de los pescadores no es
homogénea, pero en general ven a esta área natural protegida como una solu-
ción a sus problemas pesqueros porque han observado una mayor abundan-
cia y variedad de especies marinas durante el año tanto de escama como de
moluscos. La Reserva ha ayudado a que la pesca ilegal vaya disminuyendo y

20
Desafortunadamente, no contar con estadísticas confiables dificulta el análisis y la comparación de
los beneficios para los habitantes asentados en las comunidades ubicadas en el polígono de la RBAGCY-
DRC, así como las variaciones registradas en las especies que se explotan comercialmente.

172 Volumen 16, Número 32


CENTRO DE INVESTIGACIÓN EN ALIMENTACIÓN Y DESARROLLO, A.C.

ha fomentado la actividad turística en la región; es esta una alternativa viable


de trabajo para los pescadores como para sus familiares.
El fortalecimiento de la actividad pesquera de la zona requiere del fomen-
to e inversión en infraestructura para actividades económicas distintas a la
pesca, ello con el fin de disminuir el esfuerzo sobre las especies comerciales
e incrementar tanto el valor del producto como el volumen de captura, y para
ofrecer alternativas económicas. Para ello es indispensable la capacitación de
los pescadores en nuevas técnicas de pesca y concientizarlos para que alter-
nen la pesca con otras actividades productivas. El cierre de la pesca no es
viable habida cuenta el número de pescadores que no dejarían de pescar y
buscarían la forma de seguir en ella afectando con esto la Reserva y sus
especies.
En resumen, los resultados obtenidos en el estudio sugieren que no hay
una mejoría en el bienestar de las comunidades del Alto Golfo de California
después del decreto de la Reserva y del Refugio. Es necesario establecer
canales de negociación más efectivos con los pescadores pues sin ello es
imposible garantizar el éxito de esta ANP; cualquier tipo de compensación
económica debe fomentar el nivel de vida de la población y la recuperación de
las especies comerciales en peligro de extinción, tomando en cuenta elemen-
tos ecológicos, sociales, económicos e institucionales para garantizar el éxito
de la conservación (Davis 2005; Leslie 2005).
Toda propuesta que incluya los aspectos anteriores, fomentará un equili-
brio entre la recuperación de los recursos marinos, el incremento de las pobla-
ciones de las especies en peligro de extinción y una mejor calidad de vida de
los pobladores de las comunidades en la región. Este trabajo puede sentar las
bases para implementar políticas de manejo para la ordenación pesquera y la
conservación en el Alto Golfo de California.

Julio - Diciembre de 2008 173


E S T U D I O S SOCIALES

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Gulf of California. Occasional paper number 2. BARA, University of
Arizona. pp. 168.

176 Volumen 16, Número 32


Anexo 2
Artisanal shrimp fishing in the Biosphere Reserve of the
Upper Gulf of California.

Aceptado en Crustaceana, se anexa e-mail de aceptación


por parte del editor.
MS accepted - Message

WebMail - MS accepted

Date
Saturday, August 23, 2008 3:36 AM
Sent:
"Dr. J.C. von Vaupel Klein"
From: Add to Address Book
<jcvvk@xs4all.nl>
To: aaragon04
Subject: MS accepted

Status: Urgent New

Dear Dr. Aragón-Noriega,

Further to my e-mail dated August 3rd, 2008, I am pleased to tell you that your MS
(with G. Rodriguez-Quiroz et al.):

"Artisanal shrimp fishing in the Biosphere Reserve of the Upper Gulf of California."

has now been accepted for publication. I am sending you the acceptance package
coming Tuesday, August 26th by air mail: the forms and the edited review copy for
(slight) additional revision.

Please indicate if you wish to receive the invoice for the reduced page-charges ad
EUR 520.- in this stage already or if you wish to receive that later, after having sent
in your final revision. From the correspondence on the occasion of the earlier
manuscript, in 2007, I understood from Dr. Rodriguez-Quiroz that he wanted to
receive the invoice on his name and at his address. However, since you are
corresponding author now, I rather first discuss this with you. Please advise.

With my best wishes,

Sincerely yours,
J. Carel von Vaupel klein

Dr. J.C. von Vaupel Klein/CRUSTACEANA


Beetslaan 32

http://cibmail.cibnor.mx/MBX/aaragon04/MSG:10/ID=48AF5A09 (1 of 2) [25/08/2008 08:53:36 a.m.]


ARTISANAL SHRIMP FISHING IN THE BIOSPHERE RESERVE OF THE

UPPER GULF OF CALIFORNIA

BY

GERARDO RODRÍGUEZ-QUIROZ1, E. ALBERTO ARAGÓN-NORIEGA2,4, and

ALFREDO ORTEGA RUBIO3

1
) Centro Interdisciplinario de Investigación para el Desarrollo Integral Regional,

Unidad Sinaloa Blvd. Juan de Díos Bátiz 250, San Joachin, Guasave, Sinaloa 81101,

Mexico
2
) Centro de Investigaciones Biológicas del Noroeste, Unidad Sonora Km 2.35

Camino al Tular, Estero de Bacochibampo, Guaymas, Sonora 85454, México


3
) Centro de Investigaciones Biológicas del Noroeste. Mar Bermejo No. 195, Col

Playa Palo de Santa Rita, La Paz, B.C.S. 23090 Mexico

Short title: Shrimp fishing in the Upper Gulf of California

4
) Fax: +52 622 221 2238; E-mail: aaragon04@cibnor.mx

1
ABSTRACT

Shrimp is the most important marine resource for the three communities of the Upper

Gulf of California (UGC): San Felipe in the state of Baja California, and Golfo de

Santa Clara and Puerto Peñasco in the state of Sonora. This fishery generates 80% of

the profits in the region. A fishery tendency analysis was made from 1996 to 2007

within two marine protected areas in the UGC. As shrimp vessels reduce in number,

small boats gradually increase in number and productivity, maintaining high incomes

from the fishery. A detailed interdisciplinary study of the fishing effort in the UGC

must be conducted because of the endangered species found in this area, which

require adequate management for their conservation without compromising the

welfare of fishermen.

2
RESUMEN

El camarón es el recurso pesquero más importante en el Alto Golfo de California

(AGC) para las tres comunidades pesqueras que en ella se encuentran: San Felipe,

Baja California, Golfo de Santa Clara y Puerto Peñasco, Sonora. Esta pesquería por si

sola genera el 80% de los ingresos pesqueros totales en la región. Se hizo un análisis

de la tendencia de la pesca de camarón del periodo 1996 al 2007, y del esfuerzo

aplicado en su pesca, dentro de dos áreas naturales protegidas (ANP´S) que se

encuentran en esa parte del AGC. Al disminuir el esfuerzo de las embarcaciones

mayores dentro las ANP´s, se ha incrementado gradualmente la productividad de las

embarcaciones artesanales, lo que ha propiciado un aumentando en el numero de

embarcaciones y de los ingresos económicos en la región, manteniéndose una alta

rentabilidad de la pesquería. El esfuerzo pesquero realizado por pescadores de las

comunidades en el AGC dentro de las ANP´s requiere de un estudio más complejo e

interdisciplinario, ya que en esta ANP´s se encuentran especies en peligro de

extinción, el cual requieren de un manejo adecuado para su conservación sin que

afecte los intereses individuales de los pescadores.

3
INTRODUCTION

Small-scale marine fisheries provide an important source of food and income

for coastal communities worldwide (FAO, 2002), and Mexico has an important

tradition in small-scale fisheries. The Gulf of California is one of the major marine

fisheries, contributing 20% of national production and including more than 50,000

small vessels (Cisneros, 2001; SAGARPA, 2002). The Gulf has been divided into

four regions based on biological, ecological, and oceanographic characteristics. One

of these regions is the Upper Gulf of California (UGC), which is of great importance

for the production of shrimp and other species that depend on estuarine conditions

(Galindo-Bect et al., 2000, Ramírez-Rojo & Aragón-Noriega, 2006).

The Upper Gulf of California and the Colorado River Delta were together

declared a Biosphere Reserve on June 10, 1993; this reserve covers an area of

934,756 hectares and includes both marine and terrestrial environments (DOF, 1993;

Fig. 1). The Reserve was created to protect species inhabiting the region, some of

which are commercially important, endemic, or under risk of extinction (INE, 1995;

van Jaarsveld et al., 1998). The area is supported by a management program that was

designed to promote sustainable activities by durable and conservational use of

biodiversity (SEMARNAT, 1995; Rojas-Bracho et al., 2006).

Due to the harsh climatic conditions along the Upper Gulf coast, the most

important economic activities in the region are the fisheries. Two types of

commercial shrimp fishing take place in the UGC: artisanal (or small-scale) and

industrial fishing. Artisanal fisheries use 21-foot fiberglass boats (“pangas”) with

4
outboard engines and two fishermen; deployment and retrieval of fishing gear (hook

and line, gillnets, pots, longlines) is performed manually. This type of fishing is

carried out by organizations called cooperatives or by individual fishermen from

three ports of the UGC: Puerto Peñasco and El Golfo de Santa Clara, both in the State

of Sonora, and San Felipe, in Baja California (Cudney & Turk, 1998).

Industrial fishing is conducted using 60- to 70-foot steel ships with minimum

crews of five, and with machinery to operate fishing gear (trawl nets, longlines,

gillnets). Industrial fishing is carried out mainly by fishermen from Puerto Peñasco

and other ports outside the UGC region such as Guaymas and Mazatlán.

The blue shrimp Litopenaeus stylirostris (Stimpson 1871) fishery represents

∼90% of the shrimp capture in the UGC. Based on catch volume and beach economic

value, this fishery is the most important in the UGC. This species is highly priced in

the local and international markets (Cudney & Turk, 1998). Fluctuations in shrimp

capture have occurred as a result of overfishing by commercial trawlers, Colorado

River flows, and illegal fishing (Galindo-Bect et al., 2000).

The potential profit of important species has motivated the fishing effort in the

UGC, which jeopardizes critical species such as the totoaba, Totoaba macdonaldi,

and the rare vaquita Phocoena sinus (Norris, 1958). These fish and marine mammal

are accidentally caught in gillnets used in the UGC (Jaramillo-Legorreta et al., 2007).

These species are also at risk of extinction due to low existent numbers (Morris &

Doak, 2003) and reduced habitat (Rojas-Bracho et al., 2006). A buy-out program of

shrimp trawling vessels was recently implemented in order to reduce the fishing

5
effort and to protect soft bottom biological communities (García-Caudillo & Gómez-

Palafox, 2005). However, the buy-out program lacks fundamental information for

proper regulation of the shrimp fishery.

There are few studies focusing on the shrimp fishery in the Upper Gulf of

California and Colorado River Delta (Galindo-Bect, et al., 2000; Aragón-Noriega &

García Juárez, 2002). These studies primarily concentrated on the relation between

shrimp captures and Colorado River flow; none has provided a description and

analysis of the shrimp fishery in the zone.

In this work, we identify and compute the economic value of shrimp capture

as one of the most important artisanal fisheries of the Upper Gulf of California

Biosphere Reserve and of the recently created Vaquita Refuge, by the three

communities within the protected marine areas. We also analyzed the current

situation of the shrimp fishery in the UGC through primary (interviews) and

secondary (official catch reports) data. We describe the basic variables such as Catch

per Unit of Effort (CPUE), effort, and catch fluctuations. We also identify the fishing

ground for each community. Finally, we assessed the relative sustainability of the

shrimp fishery by means of a sustainability index.

METHODS

A total of 2,554 catch reports by artisanal fishermen of the three fishing

communities of the UGC was compiled and analyzed. Artisanal fishery data spanning

January to December from 1996 to 2007 were collected from official records in the

ports of San Felipe, El Golfo de Santa Clara, and Puerto Peñasco. Further information

6
was gathered from a closed survey based on direct interviews of 146 artisanal

fishermen in those three ports. Questionnaires were designed to compute the direct

cost structure of fishing operations, as well as fishing sites. Following the Cochran

(1989) method, we obtained the fishermen population to interview as follows:

Z 2q
E 2p
n=
1 ⎡ Z 2q − 1⎤
1+ ⎢
N ⎣ E 2 p ⎥⎦

where: n = sample size; Z = CI = 95%; p & q = equation distribution; E = 6%

precision level; N = fishermen community size. Using the Greenberg (1993) method,

local fishermen of each port were randomly selected.

From the landing records of artisanal shrimp fishermen in the local

government fishery offices, we obtained the following data: capture site, species,

weight of landings, and the first-hand or “beach” economic value of those landings.

With this information, we computed a gross income (disregarding investment costs)

for each of the three communities.

Shrimp fishing capture tendency in the UGC from 1996 to 2007 was measured

through the Sustainable Fishery Index, as detailed by Ponce-Díaz et al. (2006), to

estimate growing and decreasing periods of the fishery as follows:

Ic = Ln (Cyear/Cmean),

where: CXi = capture in the i year, CXmean = Capture mean through complete period

analyzed.

7
The artisanal shrimp catch was processed and spatially represented in a

geographic information system (GIS), identifying fishing sites within the Vaquita

Refuge (Fig. 1), and overlapping the Vaquita Refuge area through the use of

ArcView 3.2 software and downloaded via 2002 Conica Lambert projection to maps

of the total shrimp fishery and the shrimp fishery by community. The percentage of

fishing in the Vaquita Refuge was determined from the overall projected fishing sites.

RESULTS

Fishery analysis

The greatest number of authorized small boats (pangas) for shrimp fishing

were registered in San Felipe (SF), followed by Puerto Peñasco (PP) and El Golfo de

Santa Clara (GSC) in that order. The number of pangas officially registered in each

community has changed since 1996. In that year, PP had the highest number of

pangas of the three communities. After 1996, a substantial number of pangas were

authorized to join the fleets of GSC and SF. In 1997, GSC and PP in the state of

Sonora were authorized to increase their fleet by 41% and 98%, respectively (fig. 2).

SF in the state of Baja California had an increase of almost 100% of the fleet. In GSC

the number for pangas raised to 557, for PP raised to 673, and for SF the number for

pangas raised to 840. That number of pangas continuous in our days (fig. 2).

At the beginning of analyzed period, the increased fishing effort correlated

with increased catches in SF and GSC. The general tendency of catches over the

eleven-year period of this study was a general, but fluctuating, increase. For SF and

8
GSC, the highest catches were obtained in 2006 with 400 and 531 metric tons,

respectively, but a great reduction was observed in 2007, dropping to 321 and 265

metric tons, respectively. It is also important to note that the main shrimp catches

were obtained by fishermen of the SF and GSC communities (fig. 2).

Since increased effort also resulted in increased catches, the CPUE exhibited

the same trend as catches. Once again, SF and GSC were the most important

communities, with either community holding the highest position over the course of

this study. Here it is important to note that no one community recorded more than 1

ton/panga/year over the period of analysis (Fig. 2).

After we totaled the three communities’ catches and effort, we analyzed the

tendency of the three communities as one (Fig. 3). The effort jumped from 1996 to

1997 when the number of pangas increased from 848 to 1269. The rate of increase in

panga numbers was then modest until 2002, because in 2003 the number of permitted

pangas increased to 2070. The number of pangas has remain constant since (Fig. 3).

Shrimp catches and CPUE exhibited comparable profiles, with important

peaks in 1998 (502 tons), 2002 (821 tons), and 2006 when production was 1008

metric tons of shrimp. However, production dropped to 611 in 2007. The CPUE

showed the same behavior, and the difference in those years when a peak was

observed was minimal. The CPUE was 0.4, 0.48, and 0.49 ton/panga/year for 1998,

2002, and 2006, respectively (Fig. 3).

The sustainable fishing index calculated for the three communities revealed

that the shrimp fishery has been growing over the past four years. A historical

9
analysis of shrimp capture describes two phases of the fishery within the marine

protected areas (MPA) (Fig. 4). The initial period started before 1996 and lasted until

2001, with low captures between 199 to 502 tons of shrimp, followed by a second

period with a substantial increase in the total capture in the area. The mean capture of

706 ±166 tons was larger than the maximum capture obtained in the previous period

(Fig. 4).

GIS Interpretation

Our survey data and GIS analysis showed that fishing is conducted within the

Vaquita Refuge and in the Biosphere Reserve (Fig. 1). 84.42% of the total shrimp

catch in the UGC occurred in the MPA, and 55.73% of the total surface of the MPA

is used for fishing (Fig. 5). 75.72% of the shrimp artisanal catch is done in the

Biosphere Reserve and in 92.22% of the Vaquita Refuge.

Fishermen from Puerto Peñasco fish close to the Sonoran shoreline. 65% of

capture occurs inside the Biosphere Reserve, but they do not fish in the Vaquita

Refuge. Fishermen from El Golfo de Santa Clara conduct all of their fishing inside

the MPA. Shrimp is captured in 37% of the Vaquita Refuge and in 35% of the marine

surface of the Biosphere Reserve. San Felipe fishermen fish near the Baja California

shoreline in the UGC from the core zone to Puertecitos, dwelling in 85% of the MPA.

They capture shrimp in 80% of the Vaquita Refuge area, and 75% of the shrimp

fishery takes place in the Biosphere Reserve.

Shrimp fishery economic value

10
The economic value of the shrimp fishery from 1996 to 2007 is shown in

Table I. Shrimp capture represents 58% of the total gross incomes in the MPA. The

value of catch during this period was ∼US$ 6.0 million. Operation costs of the

artisanal fishery were relatively high, even though the travel distance from the three

ports to the fishing sites are short. Shrimp captured in the MPA generated an annual

gross profit of ∼US$ 1.9 million with a return rate of 32%. Even fishing effort has

increased, gross profits provide high incomes.

DISCUSSION

This study was motivated by issues of biodiversity conservation in which the

shrimp fishery plays a role; we saw an opportunity to detail the basic aspects of the

UGC fishery. Most of the previous work focused on the relation between shrimp

captures and Colorado River flow. Galindo–Bet et al. (2000) explored the relation

between total shrimp catch and Colorado River Flow, suggesting that the entire UGC

shrimp capture is affected by the Colorado River. Aragón-Noriega and García-Juárez

(2002) were concerned with the use of catch data coming only from the community

of El Golfo de Santa Clara (GSC); their opinion was that GSC is the nearest fishing

community to the Colorado River Delta. In this analysis, we determined that the

fishing area of this community is in the far northern side of the UGC close to the

Colorado River Delta (Fig. 5). Therefore, we conclude that GSC shrimp captures are

affected by Colorado River discharges, which also have an effect on the shrimp

capture by San Felipe (SF) fishermen. To determine the relationship between shrimp

11
captures and Colorado River discharge, the catches from SF and GSC, but not Puerto

Peñasco, should be considered.

Another important issue is the use of data to explore the relationship between

an environmental variable and shrimp production. Aragón-Noriega and García-Juárez

(2002) used the CPUE because they believed that CPUE provides more reliable data

than shrimp abundance. In our analysis, the CPUE and the total catches could be used

to establish any relationship between shrimp population and environmental variables

because the correlation coefficient between CPUE and total catch were very high

(0.85). Therefore, further analysis of shrimp populations and environmental

fluctuations could use either of these variables, as Galindo–Bet et al. (2000) did in

their study. The use of PP shrimp data to relate to Colorado River fluctuations

remains our largest criticism of Galindo–Bet et al. (2000).

Our analysis showed that the Biosphere Reserve and the recently declared

Vaquita Refuge are important grounds for artisanal fishing. Shrimp generates the

greatest income for artisanal fishermen. These results represent an important

challenge to the goals of the Reserve and the Vaquita Refuge, moreover because the

number of registered small boats (pangas) is greater than those recommended when

the refuge was declared (DOF, 2005). Pressure on the fishery will continue as

Mexican authorities reduce the size of industrial fleets in the zone by buying their

fishing permits, thereby forcing fishermen into small-scale fishing.

Operation costs determine to a great extent where fishing is conducted in the

UGC and depend on distances from fishing sites to ports and the seasonal distribution

12
of natural resources. San Felipe is the fishing port nearest to the recently declared

Refuge; fishermen of this port work in that vicinity throughout the year. Although El

Golfo de Santa Clara holds a great number of registered permits and pangas,

fishermen from this port do not fish near the Refuge because of high operation costs

related to travel distance. Fishermen of Puerto Peñasco fish near the Sonoran coast to

reduce operation expenses by saving gasoline and oil.

Shrimp capture in the MPA has maintained a continuous level of production

with economic incentives, making it attractive to fishermen despite recent restrictions

on their activities. But, the persistent recruitment of new fishermen to the area will

not enhancement the overall welfare of fishermen, and there is no guarantee that the

fishery will be sustained over the next years (Ponce-Díaz et al., 2006).

Shrimp production requires adopting strategies that allow for the management

and conservation of the ecosystem (Palumbi et al., 2003), but includes the fishermen’

points of view throughout the negotiation process (Lundquist and Granek, 2005) as

well as the views of law enforcement officials. This entails knowing what fishermen

would be willing to obtain in return for reduced fishing effort in the Vaquita Refuge

(Lundquist et al., 2005). Conservation success in this case must be based on

agreements which dignify inhabitants of the UGC. Governments of all levels and

conservation organizations should promote development of the region. We must

strive to improve the quality of life of fishermen while recovering the shrimp

ecosystem and sustainability in the context of socio-economic, ecological, and

institutional factors (Harris et al., 2005; Leslie, 2005). The success of most fishery

13
management policies to conserve species is contingent upon the vulnerability of the

species and the size of the protected area (Mangel, 1998; Carter, 2003). As a first step

towards instituting a monitoring and management strategy for the area, further

research is needed to assess the ecological impacts of small-scale fisheries employing

so-called “non-destructive” techniques (Lunn & Dearden, 2006).

In conclusion, we believe that a practical policy for management of the shrimp

fishery in the marine protected areas is needed to avoid the perception that marine

protected areas are only suitable for biodiversity conservation, to address

inconsistencies between conservation and fisheries approaches to the regional

management of natural resources. Better collaboration and coordination between

government agencies and society groups (non-governmental organizations and

fishermen) will enhance shrimp fishing programs in the Upper Gulf of California and

would help to reduce conflict in the two marine protected areas.

ACKNOWLEDGMENTS

GRQ thanks CONACYT 112401 and COTEPABE-IPN 347 for his scholarship

during his doctoral studies. EAAN received financial support from CONACYT

contract 48445.

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MANSELL, & C. H. SCHOLTZ, 1998. Biodiversity assessment and

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18
Table I. Catch, first-hand value product, and operation cost in the shrimp artisanal fishery of the Upper Gulf of California inside

the Vaquita Refuge and the Biosphere Reserve from 1996 to 2005.

1996 1997 1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 average
Catch (metric
tons) 184 185 478 431 448 494 842 548 443 731 289 203 440
Value of catch1 1,472,046 2,139,676 6,297,507 5,304,037 5,961,462 5,549,570 9,037,814 5,627,052 5,430,449 9,831,305 5,061,274 7,468,102 5,765,024
Cost of catch1 1,002,757 1,438,718 4,366,062 3,672,515 4,087,178 3,838,638 5,958,631 3,793,758 3,634,056 6,658,743 3,391,053 5,058,146 3,908,355
Gross profit1 469,288 700,958 1,931,445 1,631,522 1,874,284 1,710,932 3,079,183 1,833,293 1,796,393 3,172,562 1,670,220 2,409,957 1,856,670
Return rate (%) 32 33 31 31 31 31 34 33 33 32 33 32 32

1
United States of America dollars.

Source: Fish government offices in the communities of the Upper Gulf of California.

19
Fig. 1. The Biosphere Reserve of the Upper Gulf of California (June 1993) and Vaquita

Refuge area (December 2005), with the location of the three communities along the Upper

Gulf of California.

Fig. 2. Tendency of effort (A), shrimp capture (B), and CPUE (C) in the three communities

of the Upper Gulf of California. SF, San Felipe; GSC, Golfo de Santa Clara; PP, Puerto

Peñasco.

Fig. 3. Tendency of shrimp capture, effort, and CPUE in the Upper Gulf of California.

Fig 4. Sustainable index of shrimp capture in the Upper Gulf of California.

Fig. 5. Spatial distribution of artisanal shrimp fisheries compared with the declared

boundaries of Vaquita Refuge in the Upper Gulf of California by community. A) Puerto

Peñasco, B) Golfo de Santa Clara, C) San Felipe, D) All MPAs.

20
Figure 1.

115º 114º 113º

Co North
BCN USA
lo
32º ra 32º
do
Ri
ve Sonora
r

Gu
Santa Clara

lf o
fC
alif
orn
ia

S
Gore Island

in
BCS

al
oa
Pacific
Ocean

Puerto
Peñasco

Vaquita
Protection
Area

San Felipe
31º 31º
N Latitude

Gulf of
California

115º 114º 113º


W Longitude

21
Figure 2.

SF PP GSC (A)
1000

Effort (number of small boats)


800

600

400

200

600 (B)
500
Catches (metric tons)

400

300

200

100

1.0 (C)
CPUE (ton/boat/year)

0.8

0.6

0.4

0.2

0.0
1996 1997 1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007
Years

22
Figure 3.

Catches Effort CPUE

2500 0.6
Effort (Number of small boat)

0.5

CPUE (ton/boat/year)
2000
Catch (metric tons)

0.4
1500
0.3
1000
0.2
500
0.1

0 0.0
1996 1997 1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007
Years

23
Figure 4.

LN(C year -C mean )

-1.2
-1
-0.8
-0.6
-0.4
-0.2
0
0.2
0.4
0.6
1996 0.8

1997

1998

1999

2000

2001

Year
2002

2003

2004

2005

2006

2007

24
Figure 5.

A B
Sonora
Sonora

Golfo de Golfo de
California California
Baja Baja
California California

C D
Sonora
Sonora

Golfo de Golfo de
California
Baja
todos California
Baja
California
California

25
Anexo 3
Managing a marine protected area for the conservation of
marine endangered species in the Upper Gulf of California.

Sometido en Hydrobiologia, se anexa carta de recepción del


editor.
1

Dear Gerardo,

Thank you for submitting your manuscript,


"Managing a protected marine area for the conservation of endangered Vaquita marina
Phocoena sinus (Norris, 1958) in the Upper Gulf of California.", to Hydrobiologia

During the review process, you can keep track of the status of your manuscript by
accessing the following web site:

http://hydr.edmgr.com/

Your username is: xxxxxxx


Your password is: xxxxxxx

If your manuscript is accepted for publication in Hydrobiologia, you may elect to submit it
to the Open Choice program. For information about the Open Choice program, please
access the following URL: http://www.springer.com/openchoice

Thank you. In case your manuscript is rejected for publication the form will be destroyed.

With kind regards,


Editorial Office
Springer
P.O. Box 990
3300 AZ DORDRECHT
The Netherlands
2

Running head: Managing marine protected areas in the Upper Gulf of California.

Managing a protected marine area for the conservation of endangered Vaquita

marina Phocoena sinus (Norris, 1958) in the Upper Gulf of California.

Gerardo Rodríguez-Quiroz1,2,∗, E. Alberto Aragón-Noriega2, Miguel Cisneros-Mata3,

Álvaro Bracamonte-Sierra4 , L. Felipe Beltrán-Morales5 and Alfredo Ortega-Rubio5


1
Centro Interdisciplinario de Investigación para el Desarrollo Integral Regional, Unidad

Sinaloa. Blvd. Juan de Dios Batiz, San Joachin, Guasave, Sinaloa 81101, Mexico.
2
Centro de Investigaciones Biológicas del Noroeste, Unidad Sonora, Km 2.35 Camino a las

Tinajas, Estero de Bacochibampo, Guaymas, Sonora 85454, Mexico.


3
Instituto Nacional de la Pesca, Pitágoras 1320-8vo piso, Col. Sta Cruz Atoyac, Mexico

D.F. 03310, Mexico.


4
El Colegio de Sonora. Obregón 54, Hermosillo, Sonora 83000, Mexico.
5
Centro de Investigaciones Biológicas del Noroeste. Mar Bermejo No. 195, Col Playa Palo

de Santa Rita, La Paz, B.C.S. 23090, Mexico.



Corresponding author: +Tel: +52 687 872 9625, Fax: +52 687 872 9626, e-mail:

grquiroz@ipn.mx

Keywords: Vaquita, Phocoena sinus, Fisheries, Endangered Species, Gulf of California,

by-catch, artisana
3

"This paper has not been submitted elsewhere in identical or similar form, nor will it be

during the first three months after its submission to Hydrobiologia"


4

Abstract

In this paper, we analyze the status of the vaquita Phocoena sinus and fisheries trends in the

northern region of the Gulf of California, within the Biosphere Reserve of the Upper Gulf

of California and Colorado Delta River and the Vaquita Refuge Area. We compiled and

analyzed catch reports of artisanal fishermen in the three fishing communities of the Upper

Gulf of California (San Felipe in the state of Baja California, and Golfo de Santa Clara and

Puerto Peñasco in the state of Sonora) from 1995 to 2007. This information was

categorized with respect to Geographic Information Systems, and we identified all fishing

sites within two marine protected areas in the region. Additionally, further information was

gathered from a survey based on direct interviews with artisanal fishermen in each of those

three ports. Our results indicate that the growth of the commercial fisheries introduces

increased threats to P. sinus through accidental capture. We suggest several specific courses

of action to decrease the fishing impact to this endangered cetacean, including the

conversion of artisanal fishing activities to sport fishing activities and the reduction of the

artisanal fishing fleet size. However, given the critical situation of this endangered species,

it is very uncertain whether enforcing a no-take zone within the Biosphere Reserve and the

Vaquita Refuge Area or even a wider fishing moratorium will be enough to save this

endangered species from extinction.


5

Introduction

In the past decade, there has been increasing concern regarding the rapid anthropogenic

degradation of marine ecosystems, as likely extinction of the baiji (Lipotes vexillifer) in

China (Turvey et al. 2007). In order to effectively preserve marine ecosystems and

biodiversity, ecologists must identify priority areas for conservation efforts (Tognelli et al.

2005).

Preservation of marine environments and biodiversity has often come in conflict

with human use of natural resources. Loss of biodiversity jeopardizes the balance between

humans and our environment, but conservation and protection of biodiversity requires

research, planning, and considerable territory and financial resources. Conservation and

social development both require initial inputs of common basic resources. Rather than

viewing biological preservation in a policy vacuum, conservationists must consider the

environmental objectives of each nation looking to protect habitats and ecosystems (Seely

et al. 2003).

The financial benefits of conservation remain unrealized in many developing

countries because policy often bans economic activity in protected areas without providing

alternative jobs to the former users of the protected areas (Schnaiberg & Gould 1994).

Exploitation by commercial fisheries has threatened many marine species, and

recently the threat of net capture has increased substantially (DeMaster et al. 2001). In

Mexico, many approaches have been used to protect threatened marine species, including

protection of marine areas and seasonal or permanent fishing bans in certain regions.

Mexico has established protected marine areas in different ecoregions of the

Economic Exclusive Zone. One of these ecoregions is the Upper Gulf of California, where
6

the Reserva de la Biosfera (Biosphere Reserve) del Alto Golfo de California y Delta del

Rio Colorado (Fig. 1) was established in 1993 to protect several endemic and threatened

species. These species include the desert pupfish Cyprinodon macularius macularius, the

Yuma clapper rail Rallus longirostris yumanensis, the totoaba Totoaba macdonaldi, and the

vaquita Phocoena sinus.

This ecoregion is unique in terms of complex social and economic characteristics.

The fishery activity is vital to thousands of fishermen who do all their fishing within the

Biosphere Reserve. These fishermen live in three coastal communities: San Felipe in the

state of Baja California, Puerto Peñasco and Golfo de Santa Clara in the state of Sonora.

The number of fishermen with small boats (artisanal fishermen) continues to increase in

number, further straining the declining marine populations in this unique ecosystem. Many

of the endemic species are specifically adapted to the characteristics of this particular

region, making it impossible to relocate in response to local fishing pressure (Brownell

1986).

Fisheries in the Upper Gulf of California

In the Upper Gulf of California, several commercially valuable species are captured. Based

on catch volume and price, four species and several species of rays and sharks are the most

important to the region. These species include blue shrimp Litopenaus stylirostris

(Stimpson 1874), gulf corvine Cynoscion othonopterus (Jordan and Gilbert 1882), bigeye

croaker Micropogonias megalops (Gilbert 1890), Spanish mackerel Scomberomorus spp.,


7

rays and sharks (several species). The gulf corvine and the blue shrimp are sold at high

prices to local and international markets (Cudney & Turk-Boyer 1998, Table 1).

Between 1995 and 2007, these fisheries were profitable for the three fishing

communities (Table 1). The capture in the region was over ∼5,500 t, translating to an

income of ~8.6 million USD. The operating costs of artisanal fisheries are relatively high,

but their efforts within the marine protected areas generate an average annual gross profit of

about 5,900 million USD, with a return rate of 68% over the last 11 years. Even as fishing

increases in terms of number of vessels, the gross profits remain high for these

communities.

The high profit secured by gulf corvine and shrimp has led to increased fishing

efforts, which are jeopardizing totoaba T. macdonaldi (Gilbert 1890) and the rare vaquita P.

sinus (Norris 1958) These species are not intentionally captured but accidentally caught in

all types of gillnets used in the Upper Gulf of California (Cisneros-Mata et al. 1995;

D’Agrosa et al. 2000; Blanco 2002). These species are at risk of extinction due to their

small population size (Morris & Doak, 2003) and small amount of usable habitat (Fagan et

al. 2005; Rojas-Bracho et al. 2006).

Vaquita marina status

The vaquita population is estimated at 150 individuals, and it ranges between Isla

Montague in the core area of the Biosphere Reserve to Puertecitos in Baja California.
8

Across this range, the population appears to be declining by about 10% each year, as a

result of the number of artisanal boats in the region (Jaramillo-Legorreta et al. 2007).

The primary reasons for these declines are well known, but other factors may be

contributing, including mortality caused by incidental fishing activities, reduction in

nutrient flow from the Colorado River stream, and contamination from organochlorides

used in agriculture. The depressive effects of inbreeding may further contribute to the

declines, although there is little evidence that this factor has substantially reduced

population growth rate (Munguia-Vega et al. 2007).

The smallest porpoise species vaquita is generally found at a depth of 11-50 m

within 11-25 km of the coast. This species prefers habitats with intense tidal mixing and

high productivity of aquatic plant and animal communities. The reduced flow from the

Colorado River does not appear to have affected the productivity or risk level of this

particular community (Alvarez-Borrego 2003; Culik 2003; Jaramillo-Legorreta et al. 2007).

The vaquita population declined after the modernization and popularization of

commercial fishing in the 1940s. The population has since been threatened by incidental

trapping and drowning in gill and trawl nets. In order to protect this species, conservationist

has proposed to eliminate all bycatch of vaquitas in fishing gear (Reeves et al. 2003).

Although there are no historical data from more than a few decades ago, it is clear

that vaquita populations have declined from 1986 to 1997, with more than 300 vaquitas

killed by entanglement with fishing gear (Barlow et al. 1997; Jaramillo-Legorreta et al.

1999). The low population growth rate is largely a result of accidental catches, rather than

reproductive decline or emigration. Other known sources of mortality include shark and

orca whale attacks (Rojas-Bracho et al. 2006). This endangered species is listed under the
9

Endangered Species Act of the USA, the IUCN (CR A4d; CR2a(ii)) and the NOM-059-

ECOL-2001 in Mexico. By understanding the complexity of fishery activity in the Upper

Gulf of California, we propose a management program that may sustain economic

development of communities in the area and enhance the survival of this endangered

species threatened by fishing activity and habitat destruction.

Methods

Catch reports by artisanal fishermen residing in the three fishing communities of the Upper

Gulf of California were compiled and analyzed. The data set included all official port

records for San Felipe in the state of Baja California and El Golfo de Santa Clara and

Puerto Peñasco in the state of Sonora between 1995 and 2007. Using artisanal fishing

records of fishermen from the local government fishery offices, we obtained capture site,

weight of catch, mesh sizes of nets, and the catch price on the beach.

Artisanal catch sites were translated to GIS format, and, using 2002 Conica Lambert

projection maps and ArcView 3.2 software, we identified fishing sites within the two

marine protected areas (Fig. 1). We calculated the percent of each of the protected areas

(the Biosphere Reserve of the Upper Gulf of California and the Vaquita Refuge Area) that

were being actively fished.

Additionally, we gathered further information from a closed survey of direct

interviews of 146 artisanal fishermen, in those three ports. Questionnaires were given only

to fishermen over 17 years old and were designed to determine the direct cost structure of

fishing operations, as well as to ascertain the location of fishing sites. The questions were
10

related to environmental and conservation issues, which provided a basis for understanding

the fishermen’s knowledge and concerns about marine protected areas.

Following the Cochran (1989) method, we obtained the subset of fishermen to

interview as follows:

Z 2q
E 2p
n=
1 ⎡ Z 2q − 1⎤
1+ ⎢
N ⎣ E 2 p ⎥⎦

Where n = sample size; Z = CI = 95%; p & q = equation distribution; E = 6%

precision level; N = fishermen community size. Using the Greenberg (1993) method, local

fishermen of each port were randomly selected.

Results

Analysis of the fishery

Shrimp, gulf corvine and the bigeye croaker are the most important commercial marine

species in the Upper Gulf of California. All of these species fetch high market values for

artisanal fishermen, and shrimp provide the largest portion of gross income. The gulf

corvine and bigeye croaker are the most commercially important fish species in the area

because they are harvested in large volumes and provide a large portion of local income.

Spanish mackerel and several species of rays and sharks are also harvested but are less

commercially dominant.
11

Although the harvesting pressures of local fishing have grown considerably, the

yearly shrimp catch is increasing (Fig. 2A). In the early years of the Biosphere Reserve,

catch efficiency was high because there were few artisanal fishing boats. Over the next two

years, catch efficiency dropped as the number of artisanal fishing boats increased. Since

then, shrimp populations have fluctuated. Other fisheries as Gulf corvine and bigeye

croaker experienced rapid growth before 2000, and they reached an annual production of

~3,000 t (Figures 2B-2C). Following the period of growth, production declined

substantially, especially for the bigeye croaker, which declined to ~500 t in 2003. Since

then, this fishery has largely recovered. The gulf corvine fishery declined a few years after

opening, but this decline was gradual and since shown signs of recovery.

Fishing pressure in the Upper Gulf of California is related to the increase in number

of artisanal fishing boats over the last 12 years. As the value of the shrimp and production

has increased, fishermen from other regions of Mexico have settled in this region. Table 2

lists the number of artisanal fishing boats officially registered in each community. Artisanal

fishing boats are more numerous in El Golfo de Santa Clara, where artisanal fishing is

virtually the only economic activity. Two major categories dominate the authorized fishing

effort: shrimp catchers (606 artisanal fishing boats) and fish catchers (882 artisanal fishing

boats). The largest number of authorized artisanal fishing boats for both shrimp and fish

fishing was registered in San Felipe and El Golfo de Santa Clara in 2003.

Our survey data and GIS analysis showed that the fishing activity of the six fisheries

is conducted within the Biosphere Reserve and all of the Vaquita Refuge Area (Fig. 3), of

which 77% of the marine surface is exploited. Fishing efforts in the Vaquita Refuge Area
12

vary depending on the species. Shrimp are caught in 98% of the refuge area, bigeye croaker

in 94%, Spanish mackerel in 85%, gulf corvine in 78%, and sharks and rays in 69%.

Shrimp are captured in 84% of the marine protected area (Fig. 3A), closely followed

by bigeye croaker at ~83% (Fig. 3B), and gulf corvine at ~80% (Fig. 3C). Spanish

mackerel, rays and sharks are less frequently captured in the marine protected areas. El

Golfo de Santa Clara and San Felipe fishermen intensely exploit the core of the Biosphere

Reserve during the gulf corvine season, which occurs for two months after the shrimp

harvesting season is over.

Since the Biosphere Reserve was established, the number of cooperatives and

artisanal fishing boats has increased. Many fishermen retired from the industrial vessels

join a cooperative or establish their own social organization. Puerto Peñasco and San

Felipe, which have few cooperatives, received most of the influx of fishermen, increasing

the fleet of artisanal fishing boats in a short period of time (Table 2). El Golfo de Santa

Clara has the highest number of cooperatives, but the lowest number of artisanal fishing

boats. The artisanal fleet grew from 635 to 2070 boats from 1995 to 2003, and this trend

continues. Fishing permits for cooperatives now are given to their members as individual

permits.

Fishermen Opinions

Based on the survey, fishermen have little knowledge about the purpose of the

Biosphere Reserve, particularly fishermen from Puerto Peñasco and San Felipe. More than 65%
13

of the fishermen from Golfo de Santa Clara consider the objectives of the reserve to be fulfilled.

They believe that, since they are able to catch a diversity of species in the reserve, the reserve

is fully successful. 63% of the fishermen believe that more enforcement is necessary to prevent

illegal fishing and the use of banned gillnets. Our survey indicated that the majority of fishermen

would like to see even greater efforts to prevent overfishing and ecological collapse.

Discussion

Fishing remains the main economic activity in the Upper Gulf of California. Reconciling

this industry with sustainable environmental goals will prove to be a long term challenge.

Artisanal fishing is the first option of fishermen who are unemployed as a result of the

recently implemented buy-out program of shrimp trawling vessels by Mexican authorities

to reduce fishing effort and protect soft bottom biological communities (Garcia-Caudillo &

Gomez-Palafox 2005). Even with this effort, a high and constant risk of incidental mortality

of endangered species remains. Implementing new sustainable fishing options may help

change fishermen’s behavior. One alternative is to find new, sustainable alternatives with a

viable market in the local economy. Some national and international nongovernmental

organizations with technical and social objectives expressed the desire to evaluate both the

habits of the local community and regional biodiversity (Enriquez-Andrade et al. 2005).

To diminish artisanal fishing activities inside the marine protected areas, a large

number of suitable alternatives would be necessary to compensate for the current

profitability of fishing activity, which is about a 68% rate return each year. In terms of the

number of artisanal fishing boats, fishing effort have grown since 1993, and the number of

vaquitas has diminished; in 1993, 500 artisanal fishing boats were used in the Upper Gulf

of California, and 767 vaquitas were reported. In 1997, 1269 artisanal fishing boats were
14

operating, and 567 vaquitas were reported. In 2007, with 2070 artisanal fishing boats in

operation, only 150 vaquitas are estimated to remain (Jaramillo-Legorreta et al. 2007).

Removing any number of artisanal fishing boats must go beyond restricting fishing activity

in the short term. The artisanal fleet must be gradually removed over an extended period,

starting with young fishermen who have spent the least amount of time in this activity and

helping those fishermen who have used fishing as a livelihood for considerable amounts of

time. Individual fishing licenses are now distributed by the government to control fishing

activity and to prevent over fishing and illegal fishing. Close scrutiny of these distribution

policies may be necessary.

Fishermen must be considered in all government decisions. Perhaps a solution can

support recovery of endangered species while reaching a consensus among fishing

communities (Turk-Boyer & Flores-Skydancer 2001). With integration between different

sectors of society and a government committed to protecting the Biosphere Reserve

ecosystem, a new initiative was established in December of 2005to protect the Vaquita

Refuge Area (Programa para la Protección de la Vaquita dentro del Área de Refugio

ubicada en la porción occidental del Alto Golfo de California). This document established

new management and conservation strategies for vaquita protection and recovery. In the

process of constructing this initiative, differences in management alternatives were

minimized by participating individuals and organizations. During the same year (2005), the

Alto Golfo Sustentable group was established, and it has since promoted direct

communication between fishermen and authorities, including evaluation of new fishing

technology, a new buy-out measure to reduce fishing effort, a census of fishing boats and

gear and some changes to the Biosphere Reserve management program, enforcing
15

protection of endangered species. The last effort is still in revision (Jose Campoy, pers

comm).

This species was declared to be a precious part of the global heritage, and Mexico

has the responsibility to protect them for the new generations (ProGolfo 2007). We must

establish solutions that account for both the interests of biodiversity conservation and those

of local socioeconomic development. It is important to find viable alternatives in this area

with regard to ecotourism, sport fishing, regulated hunting and environmental education.

Linking biodiversity to economic development must be mutually synergistic, and

conservation policy must integrate both interests (Seely et al. 2003).

Population Recovery Strategies

In many locations, population sizes of marine mammal endangered species are still not

improving, and it is not possible to predict whether a threatened species will ever fully

recover. In the case of the vaquita, historic population levels are unknown, and we cannot

determinate the lower limits of a sustainable population. Sea mammals in North America,

most notably the sea otter and the manatee, are faced with similarly uncertain futures

(USFWS 2001; 2003).

Several programs in other countries specifically list factors to be considered in

evaluating the status of a listed or candidate species. Prior to changing their endangered

status, a formal review of all species factors and a summary of that review must be made

available to the public for comment (USFWS 2001; 2003).


16

ENDANGERED: Vaquita will be considered endangered if they remain at the current

population size, distribution, reproductive output, and habitat status. Furthermore, it is

necessary to consider the IUCN categories of Critically Endangered and Endangered.

THREATENED: Vaquita would be considered threatened if the average population does not

grow by 4% of their current level (Jaramillo-Legorreta et al. 2007) within the next 100

years, and if there are extreme fluctuations in the population size of mature individuals

(Vulnerable category in IUCN).

DELISTED: Vaquita would be considered for delisting when the population level extends

beyond the current distribution area and populations do not suffer from genetic diseases

related to inbreeding (Munguia-Vega et al. 2007).

We propose a new criterion to provide guidance for a reclassification of the vaquita.

Needed actions

In order to preserve the native vaquita population, several intensive steps are necessary, and

our recommendations are outlined below.

• Monitor species to determine population size, rate of change, and distribution to

support habitat for changes in types, abundance, distribution, and use for feeding, breeding,

and brooding areas.

• Generate interest among fishermen to change to sport fishing boats to capture

species such as sharks and other species reserved for this activity. To control fishing,
17

permits must be specific and limited so they may not be exchanged or sold. Fishing permits

must be cancelled when fishermen retire and should not be transferred to any relative or

other fishermen.

• Adult totoaba could be available for sport fishing after a serious and positive

evaluation. The National Institute of Ecology (INE) and National Institute of Fisheries

(INP) indicate in paragraph 4.1.1 of the Programa para la Protección de la Vaquita dentro

del Área de Refugio ubicada en la porción occidental del Alto Golfo de California (PPV)

that these species may be safely harvested after evaluation.

• Subsidize the sale of high quality and environmentally friendly fishing gear, such

as suriperas, in exchange for current fishing nets, as indicated in paragraph 4.1.2 of the

PPV. This program must be in conjunction with a high product values in order to motive

fishermen to exchange gillnets, as promoted by Ocean Garden Products, Inc. in San Diego,

USA

• The Vaquita Refuge Area must be declared a no-take zone, and commercial

fishing must be strictly prohibited in this area. The sole exception should be sport fishing,

which is different from the recommendations in the PPV that allows 162 vessels fishing in

the area.

• The buy-out grant provided by regional and federal authorities and

nongovernmental organizations must be used to transform the fishing industry to

commercialize high value products that are economically valuable in regional or

international markets. This will support career fishermen, particularly in El Golfo de Santa

Clara.
18

• Evaluate the failure criteria set out by all implemented actions over a medium-term

period (∼5 years) to reduce jeopardizing this species or hinder recovery.

Many studies have focused on this charismatic species to protect it. Unfortunately,

this area has a well-established fishing tradition. Enforcing a permanently closed season

could produce severe social disturbance. Our study supports a compensation scheme to

discourage artisanal fishing in the marine protected areas through a comprehensive analysis

of alternative measures. However, given the critical situation of this species, it is very

uncertain whether enforcing a no-take zone within the Biosphere Reserve and the Vaquita

Refuge Area or even a wider fishing moratorium will be enough to save this species from

extinction.

Acknowledgements We thank J. Campoy, Director de la Reserva del Alto Golfo de

California y Delta del Rio Colorado (CONANP) and Armando Jaramillo Legorreta for their

earlier comments to this manuscript. Funding was provided by the World Wildlife Fund

(Golfo de California Chapter). GRQ is a recipient of a CONACYT 112421 grant and a

COTEPABE-IPN 180 grant during his doctoral studies. EAAN thanks CONACYT Grant

support 48445
19

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23

Figure 1. Location of the Biosphere Reserve of the Upper Gulf of California and Colorado

Delta River and the Vaquita Protection Area. (A) Code zone, (B) Buffer zone, (C) Vaquita

protection area.

Figure 2. Catch records of the three most important species in the Upper Gulf of California.

(A) Shrimp, (B) Gulf corvine, (C) Bigeye croaker.

Figure 3. Capture area by species in the Upper Gulf of California. (A) Bigeye croaker, (B)

Rays and sharks, (C) Shrimp, (D) Spanish mackerel, (E) Gulf corvine, (F) Combined

fisheries.
24

Figure 1.

115º 114º 113º

Co
BCN USA
North

lo
ra
32º 32º

do
Ri
ve
Sonora
A

Gu
Santa
SantaClara
Clara

lf o
fC
alifo
rnia

S
Gore Island
B

in
BCS

al
oa
Pacific
Ocean

Puerto
Puerto Peñasco
Peñasco

Vaquita
C
Protection
Area

San Felipe
San Felipe 31º
31º

Gulf of California
N Latitude

Gulf of
California

115º 114º 113º


W Longitude
25

Figure 2.

900
A
800
700
Metric tons

600
500
400
300
200
100
0
1994 1996 1998 2000 2002 2004 2006 2008

Years

6000
B
5000
Metric tons

4000
3000

2000
1000
0
1994 1996 1998 2000 2002 2004 2006 2008

Years

C
3500
3000
Metric tons

2500
2000
1500
1000
500
0
1994 1996 1998 2000 2002 2004 2006 2008

Years
26

Figure 3.

A B C
Sonora Sonora
Sonora

Gulf of Gulf of Gulf of


California California California
Baja Baja Baja
California California California

D E F
Sonora Sonora Sonora

Gulf of Gulf of Gulf of


California California California
Baja Baja Baja
California California California
27

Table 1. Catch and value of the fishery within the Biosphere Reserve from 1995 to 2007

1995 1996 1997 1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 Average
Catch (metric tons1) 2,510 2,354 5,466 6,450 7,536 6,786 6,050 7,492 5,029 5,407 5,888 4,525 6,087 5,500
Value of catch2 3,444 2,323 4,327 9,451 9,625 9,907 9,181 12,882 8,755 8,082 12,660 10,356 10,319 8,600
Cost of catch2 569 1,185 1,640 1,945 2,390 2,726 2,994 3,131 3,321 3,493 3,609 3,755 3,897 2,700
2
Gross profits 2,874 1,138 2,688 7,505 7,234 7,181 6,186 9,750 5,435 4,589 9,051 6,601 6,423 5,900
Rate of return (%) 83 49 62 79 75 72 67 76 62 57 71 64 62 68

1
Capture reported to the local fishery offices in the communities
2
In thousands of US dollars
28

Table 2. Number of cooperatives and artisanal boats by community in the Upper Gulf of
California

Community 1995 1996 1997 1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007
Puerto Peñasco
Cooperatives - - - - 7 3 11 5 9 9 7 19 19
Artisanal boats 390 390 550 550 550 550 550 670 673 673 673 673 673
Golfo de Santa Clara
Cooperatives 8 9 9 15 14 19 23 23 34 31 21 25 25
Artisanal boats 215 225 425 405 425 550 550 557 557 557 557 557 557
San Felipe
Cooperatives 3 7 12 6 13 13 13 11 18 18 18 18 18
Artisanal boats 30 233 294 205 333 288 366 238 840 840 840 840 840
Total artisanal boats 635 848 1269 1150 1308 1388 1466 1465 2070 2070 2070 2070 2070

Source: Fishing offices in the three communities

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