“Maestros en la enseñanza”

Objetivo del Programa: Reconocer la importancia de comunicar las buenas nuevas y

tener una profunda necesidad por crecer en el conocimiento de la palabra de Dios.

Sugerencias para el Director: Adorne el templo con láminas o dibujos de Biblias. Empiece
a tiempo y procure presentar cada parte con dinamismo y alegría.

Servicio de Canto:

Pensamiento: "Procura con diligencia presentarte a Dios aprobado, como obrero que no
tiene de qué avergonzarse, que usa bien la palabra de verdad" (2 Timoteo 2:15).

Saludo e Himno de Apertura: ¡Reciban todo un afectuoso saludo! Hemos llegado ante
nuestro Creador con alabanzas, ¿no es cierto? Entonces, dejemos que nuestro gozo se
exprese cantando las palabras del himno Núm. 322, "Con gozo canto al Señor", del
Himnario Adventista.

Oración de Rodillas: Postrémonos y humillémonos, doblando las rodillas delante de

Jehová, nuestro creador. (Nombre del que orará) nos dirigirá en oración.

Bienvenida: Cuando llamamos "nuestro Maestro" a Jesús, nos damos cuenta de nuestra
necesidad de ser enseñados por Él. En Juan 8:31 leemos: "Si vosotros permaneciereis en
mi palabra, seréis verdaderamente mis discípulos". El Señor nos quiere instruir por medio
de su Palabra. De la misma forma como los discípulos le pidieron a Jesús que les
enseñara a orar, digamos también: "Enséñanos a conocerte, a amarte, a seguirte y a ser
semejantes a ti". Ciertamente, hemos venido a este lugar de adoración con el corazón
lleno de estos deseos.

Mientras estamos atentos y sentados a los pies de nuestro divino Maestro, y lo

escuchamos, permitamos que el Padre nos bendiga y nos abra el entendimiento para
comprender su Palabra. ¡Bienvenidos todos los que nos visitan y los que son miembros
de esta iglesia!

Relato Misionero: Hoy vamos a tener noticias del desarrollo de la obra de Dios en la
División (Nombre de la que corresponde a este trimestre), lugar al cual (Nombre del que
presentará el Relato) nos llevará sin tardar.

Canto Especial o poesía:

Actividad sugerente:

Hacer que los hermanos presentes formen un círculo a manera de mesa redonda y
practiquen el juego “el teléfono roto”.

Tema:

Cuando tenemos un mensaje que transmitir, debemos tomar precauciones

ineludiblemente. ¿Cuál es una de estas precauciones? Comprender bien el mensaje para
transmitirlo correctamente.

Si descuidamos esto, el mensaje seguramente se distorsionará. Ésta fue la triste

experiencia de un grupo de empleados de un banco, quienes estaban encargados de
comunicar un mensaje importante del gerente general.

1. El gerente dijo así por teléfono a su asociado principal:

"Mañana, a las nueve exactamente, reuniré el personal en el salón de conferencias para

hablar de las cajas fuertes, de títulos y acciones, y de inversiones de ultramar. Contestaré
las preguntas, pero asegúrese de estar a tiempo."

2. El asociado general informó a los jefes de departamentos, de esta manera:

"Mañana, a las nueve, el jefe reunirá, a todo el mundo, en el sótano de la caja fuerte, para
hablar de los títulos, acciones de las inversiones, y del extranjero. Si tienen preguntas,
podrán hacerlas, pero rápidamente. ¡Estén a la hora acordada!"

3. Un jefe de departamento dijo a su personal:

"Mañana, por la mañana, reunión a las nueve, en el sótano, con sus portafolios. El jefe
quiere hablar de títulos y de su sótano en el extranjero. No hagan preguntas, pues hay
mucho que hacer. ¡Traten de estar a tiempo!"

4. Algunos empleados comentaron entre sí:

"Parece que, mañana por la mañana, tienen que llevar sus billeteras para vaciar la caja
fuerte con el patrón, para su sótano en el extranjero. ¡No debemos preguntar nada,
después de todo él es el que manda!"

¡Veamos esto! El mensaje fue dado correctamente al principio, pero fue interpretado y
nadie se aseguró de haberlo comprendido bien; entonces la confusión fue grande.

Misionero:

Informe Secretarial:

Marcando el Rumbo:

Repaso de la Lección de Escuela Sabática: Queridos hermanos y amigos, Dios nos ha

confiado un mensaje de la más alta importancia, para comunicarlo a la humanidad. Este
mensaje es la palabra de Dios que encontramos en la Biblia. Es importante asegurarse de
que entendemos bien el mensaje para transmitirlo correctamente.

Los consejos que se nos han dado al respecto, son ricos. Los encontramos en la lección
de esta semana. Ahora, podemos reunirnos por grupos para repasarlos y cerciorarnos de
que los hemos entendido.

Conclusión: Hermanos y hermanas, queridos amigos: Debemos interpretar bien las

Escrituras para poder cumplir nuestro ministerio fielmente. Para esto, dejémonos guiar por
los muchos consejos que nos fueron impartidos durante la semana.

Finalmente, no olvidemos esto: Al dedicar tiempo al estudio de la Biblia, con la ayuda del
Espíritu Santo, descubriremos cuál es la voluntad de Dios para nosotros. Entonces
seremos habilitados para transmitir este mensaje a otros, si llegamos a internalizarlo
correctamente.

Que Dios nos ayude a ser siervos estudiosos, hambrientos de comprender su Palabra.
Esforcémonos para presentarnos ante Dios como hombres, mujeres y jóvenes que hemos
pasado la prueba, que no tenemos de qué avergonzarnos, porque hemos enseñado con
rectitud la Palabra de vida. ¡Amén!

Himno Final: Núm. 353, "Centinelas del Maestro", del Himnario Adventista Oración Final: