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Para la tarea en la sala uno puede proponer ciertos objetivos del área de la plástica, ya
sea para trabajarlos desde la tarea cotidiana del aula durante el año, o en un proyecto
anual del área.
Sabemos que el espacio, se quiera o no, transmite un mensaje, y en
especial el espacio escolar, no sólo transmite mensajes, sino enseñanzas, y
esto debe tenerlo presente el docente, ya que los niños y las niñas nunca están
ajenos a esto.
La relación entre espacio y alumno/a puede promover el diálogo; en este caso, a través
del lenguaje plástico se intentará lograr un...”espacio preparado y dispuesto como medio
de comunicación en coherencia con los planes del docente y que puede servir a la
estrategia educativa” (Gutiérrez Pérez, Rosario “La estética del espacio escolar Cáp.1-2
punto 1.33 repercusiones funcionales de la estética como elemento configurador de los
centros. pág. 76).
Pero en los chicos y chicas, no está esa necesidad instalada de por sí, se
debe crear la necesidad de esa expresión, dar las pautas para iniciar ese
diálogo, esa comunicación con el espacio, por ello se comenzará indagando
saberes previos y acercándoles este nuevo lenguaje, sus signos y su práctica.
Comenzar a reunirse ante diversas imágenes, por ejemplo las que ofrece la
naturaleza: el cielo, el árbol que se ve por la ventana de la sala; y luego ante
diversas imágenes de la plástica. La docente será la guía en la lectura de estas
imágenes, primeramente proponiendo sólo mirar durante un tiempo acotado,
pero de manera libre. Luego aparecerán preguntas que guiarán en una primera
etapa la “enumeración” de los elementos: ¿Qué ves? ¿Qué elementos hay?
¿Es un paisaje? ¿Hay gente? Luego se irá tendiendo a la “descripción”:
¿Qué están haciendo? ¿Dónde están? ¿Qué formas y tamaños tienen los
diferentes elementos? Y en un último paso se procederá a la “interpretación”,
tendiendo a que los niños establezcan hipótesis ¿Qué herramientas usó el
pintor?, ¿En qué época se puede situar la obra?, ¿Qué nos cuenta la imagen
sobre esa época?, ¿Qué le sucede a los personajes?, esas hipótesis pueden
referirse a materiales, herramientas, situación geográfica o histórica.
Paralelamente con éstas actividades se realizarán otras de exploración y
apropiación de materiales y herramientas propios de la disciplina, que les permitan a los
niños y niñas manejarse cada vez con mayor seguridad.
También se trabajará en esta etapa la lectura de las obras de cada uno,
y las reproducciones de artistas plásticos, se podrá agregar la percepción de
los sentimientos:-¿Qué sentís ante la obra? ¿Te gusta? Inmediatamente
preguntando ¿por qué? Con esto se intenta desarrollar no sólo una mirada
“utilitaria” o “práctica” de la obra sino también la “Estética”, desarrollando el
gusto personal, ya que si bien se pueden considerar ciertos parámetros
sociales del concepto de estética, el gusto es personal e individual, aunque se
lo relacione al tiempo, espacio y cultura, depende de las experiencias y el
conocimiento, por esto cuanto más variado sea el material y más constante sea
el contacto “organizado” con estímulos visuales, más amplio será el
conocimiento de los niños/as y podrán expresarlo cada vez con mayor fluidez.
Este expresar verbal se irá enriqueciendo a medida que el alumno/a se vea
comprendido y aceptado, cuanto mayor cantidad de obras pueda observar y
criticar, y cuanto más critica logre escuchar tanto de pares como de adultos.
Este trabajo de apreciación permitirá acercarse a los chicos y chicas al
planeamiento, el boceto y la selección de los materiales a utilizar.
Sería beneficioso realizar una entrevista a un artista Plástico al que los
chicos le puedan efectuar preguntas como por ejemplo: ¿Cómo elige qué
pintar? ¿Dónde trabaja? ¿Cuánto tiempo tarda en hacer un cuadro? ¿Qué
pintura usa? ¿Sobre qué pinta? ¿Alguien lo ayuda? ¿Qué hace con el cuadro
cuando lo termina? Y más útil aún si este pinta delante de los pequeños.
Hay actividades anexas que se pueden realizar, como son las invitaciones ya que sería
una manera de involucrar a la comunidad desde un rol más formal dándole a la
exposición un tiempo establecido, y que esta preparación tenga otro valor y se aleje de
la clásica “cartelera de trabajos”. También se puede pedir colaboración a la comunidad
para iluminar y enmarcar con cartón o cartulina para de esta manera agilizar la tarea.