NOTAS DE época

Febrero-marzo 2005

¿Los maestros pedimos la continuidad de la Reforma Educativa?

Confieso mi asombro

El 31 de enero, disfrutando de las vacaciones, hojeaba La República

cuando me enteré que los maestros organizados en la FUM solicitábamos
el cumplimiento y la continuidad de la actual Reforma Educativa.
Una gran foto de Héctor Florit, recientemente designado Consejero del
CODICEN, acompañaba el artículo. Allí el, en ese momento, dirigente
sindical, hoy autoridad del gobierno electo, afirma que “la propuesta de la
FUM es cumplir en 15 años lo que se habían comprometido a hacer en 5
en la ley de Presupuesto de 1995”.
Detengámonos a analizar esta afirmación, significa que la FUM está
proponiendo el nuevo gobierno electo, progresista, cumpla con la
propuesta educativa del gobierno colorado del 95.
Para los que no recuerden ese documento de política educativa, son los 5
tomos que presentara Rama al parlamento para implementar la Reforma
Educativa, con fuerte y mal administrado financiamiento del BID y el
Banco Mundial. Es el que modificó los planes de UTU poniéndola al
servicio de un supuesto mercado laboral al final inexistente, el que cerró
escuelas rurales y de adultos para obtener ordinales para la educación
inicial, desvistiendo un santo para desvestir otro, el que pretendió romper
los círculos de pobreza con medidas asistencialistas y no lo logró. Y
podríamos seguir enumerando los errores de la Reforma pero confiamos en
que nuestros compañeros viven y sufren sus consecuencias.
Además, ríos de tinta se han gastado desde los sindicatos, los gremios de
estudiantes y las ATD de todas las áreas cuestionando este documento de
política educativa encubierto en una ley presupuestal.
Grandes esfuerzos hemos realizado comparando este documento con los de
la CEPAL, el BID, y el Banco Mundial donde plantean para los países de
América Latina recetas educativas que consideran de carácter universal.
Mucho se ha intentado justificar el fundamento neoliberal de tales
documentos y reformas que pretenden poner al sistema educativo al
servicio del mercado de empleo. Por un lado preparando trabajadores
flexibles y adaptados a los cambios y las necesidades de ese sistema y por
otro generando contención social a través del asistencialismo y de la
transmisión de los valores propios de estas sociedades, para asegurar la
subsistencia del sistema capitalista globalizado tal como existe hoy,
amortiguando sus consecuencias de marginación y exclusión para evitar
explosiones sociales.
Sin embargo parece que estos esfuerzos han sido en vano, ya que hoy se
dice tranquilamente, que los maestros queremos que se cumpla con la
reforma educativa.
¿Será eso lo que los maestros quieren?
Esperamos un mensaje claro desde las escuelas sobre lo que esperan para
este nuevo gobierno en materia educativa.
Danae

LA EMERGENCIA EDUCATIVA EN EL MARCO DE

LA EMERGENCIA SOCIAL
EL SISTEMA EDUCATIVO ESTÁ EN EMERGENCIA

 El 70% de la matrícula de la Escuela Pública está constituida

por niños pobres. Sólo 187, de las más de 2 600 escuelas
del país, están categorizadas como de contexto crítico.
 400 000 uruguayos no terminaron la Escuela, por lo que son
considerados analfabetos potenciales.
 Sólo en el 2003 abandonaron la Escuela Pública 1668
alumnos.
 En el año 2003, 60 000 jóvenes entre 14 y 21 años ni
estudiaban ni trabajaban. Hoy hay muchos miles más en esa
situación.
 Los salarios y las condiciones de trabajo eximen de todo
comentario.
 La repetición promedio en primer año alcanza el 21% (con
cifras que llegan a superar el 40% en zonas de pobreza), y
eso a pesar de las presiones que sufren los Maestros para
que promuevan contra viento y marea.
 La autonomía de los desconcentrados no existe. El CODICEN
funciona en forma autocrática e inconsulta.
 No existen ámbitos reales de negociación.
 El presupuesto educativo fue inferior al 3% del PBI en el año
2004.
 Un gobierno progresista alcanzó mayorías parlamentarias.
Soplan vientos de esperanza. Nadie se resigna a que todo quede
como está. En la Educación exigimos que desaparezcan de la escena
los responsables del caos educativo, que se termine la corrupción, la
dedocracia, el nepotismo, el clientelismo (instaurada a través de los
contratos personales y de obra) y la nefasta influencia de los
organismos internacionales de crédito consolidada a través de los
organismos paralelos (MECAEP, MEMFOD etc.). En síntesis, que se
detenga la reforma educativa en curso QUE HA DETERMINADO LOS
RESULTADOS EDUCATIVOS QUE RESEÑÁBAMOS AL COMIENZO.

¿Qué rol le cabe al sindicato ante el cambio de gobierno?

LEVANTAR LAS BANDERAS HISTÓRICAS DEL MAGISTERIO.

MANTENER LOS PRINCIPIOS.
RECUPERAR EL PRESTIGIO DE LA EDUCACIÓN PÚBLICA URUGUAYA.
ESPERAR ACTIVA Y PARTICIPATIVAMENTE, DEMANDANDO SEÑALES
CLARAS DEL CAMBIO DE RUMBO.

¿A qué llamamos señales claras?

• Poner al niño en situación de aprender y al docente en

situación de enseñar, lo que significa atender las necesidades
básicas, crear la infraestructura necesaria, pagar salarios
dignos y elevar los niveles de formación profesional, tanto en
lo que refiere a formación inicial como permanente. Los
docentes debemos colaborar en la coordinación de políticas
sociales sin descentrar el rol de la Escuela Pública que es
EDUCAR.
• Crear cargos que permitan grupos de 20 niños en zonas de
pobreza y 25 como máximo en las demás.
• Crear los equipos multidisciplinarios de apoyo, largamente
demandados.
• Utilizar totalmente los créditos disponibles en el presupuesto
del 2005 (tanto en edificación como materiales, salarios,
cargos etc.)
• Partidas salariales a cuenta del nuevo presupuesto, que
garanticen el inicio de una recuperación salarial
impostergable.
• Instrumentación de ámbitos de negociación que habiliten la
participación real de los trabajadores de la Educación a la hora
de tomar decisiones, en materia presupuestal, escalafonaria y
en lo relacionado con las políticas educativas.
• Cese de contratos personales y de obra en la medida de las
posibilidades legales.
• Desmantelamiento de los organismos paralelos (MECAEP,
MEMFOD ETC), redireccionando los préstamos internacionales
de acuerdo a los nuevos lineamientos de política educativa.
 • Ley de Presupuesto 2006-2010 participativa, que en materia
de Educación permita alcanzar el 6% del PBI recomendado
por UNESCO.
• Dotar a los Consejos desconcentrados de la mayor autonomía
posible en el marco de la actual Ley de Educación, en los
cuatro niveles : técnico, administrativo, financiero y de
gobierno.
• Instrumentar la consulta a los trabajadores de la Educación, a
la hora de elegir las autoridades.
• Promover e instrumentar un Congreso Pedagógico en el año
2005, con participación de toda la sociedad, que definirá los
grandes lineamientos de la política educativa como política de
Estado y elaborará un proyecto de Ley de Educación a ser
aprobada por el Parlamento. Que esta aprobación se produzca
no más allá del año 2006.

Ruth

“Participación es la posibilidad real de decidir.” (Nora Castro)

Mucho tiempo sufriendo. Siglos luchando. Hoy, en

nuestro país, tenemos un gobierno que se compadece de los
problemas y de las miserias de la inmensa mayoría de nuestro
pueblo.
Todo está pronto para cambiar :“la tierra, el sol y el
agua”...

Sin embargo...

Los que estuvimos, los que estamos, los que luchamos

diariamente, los que trabajamos sol a sol, los que ponemos en
marcha al país, no estamos siendo consultados.

.
Pivel Devoto, Gabito, Rama y Bonilla encabezaron las últimas
administraciones que sumergieron a la educación pública en el fondo del pozo. Todos
elegidos por los gobiernos de turno; también los Tornaría, los Corbo, los Nadruz, los
Elutchans, los Operti y tantos otros. Todos responsables de la “situación de emergencia
educativa” como la cataloga el nuevo gobierno.

¡Qué oportunidad! Este podría ser el momento de las decisiones compartidas,

de consultar a los que hacen la educación, a las organizaciones de los docentes, a los
padres, a los estudiantes...

Pero no ha sucedido.
Las autoridades de la enseñanza, nuevamente, son elegidas por el gobierno de
turno, ahora el progresista, sin consulta, sin la participación de los implicados.
 ¿Los maestros, los profesores de Secundaria, de Utu, los estudiantes y los
padres no tienen nada qué decir? ¿No podrían haber elegido a los mejores de entre ellos
para dirigir los órganos de gobierno de la enseñanza? ¿El nuevo gobierno desconfía de
los trabajadores y de los estudiantes? ¿No sabe que en esos sectores está la fuerza que le
permite gobernar hoy?

Sólo exigimos participación (nada más y nada menos). Queremos decir nuestra
palabra respecto a la elección de autoridades, sobre las políticas educativas a poner en
marcha, sobre los gastos y cómo realizarlos, sobre los planes y programas de educación;
queremos ser partícipes.

Cultivamos la esperanza, pero seguimos en el balcón.

Ruben