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Principios prcticos.
El director de alabanza tiene como prioridad adorar a Dios en pblico y luego
dirigir a los dems, el director de alabanza lleva a la gente al lugar donde se
encuentra.
El director de alabanza, msicos y coros. No puede dirigir estando en pecado,
porque lo que uno es, es lo que ministra.
Como directores de alabanza tenemos el deber de ser sinceros y decir si
nuestro hogar no esta bien no debemos ministrar al pueblo, buscar un nivel de
transparencia para Dios.
Un director de alabanza siempre tiene al pueblo a la expectativa, pero es
lamentable ver en el servicio que todo ya es previsible, la duracin de las
canciones las interrupciones anuncios Saludos que convierten al pueblo de
Dios en robots programados de sentarse y pararse, de escuchar y aplaudir el
temor a que el pastor se moleste o el director te reproche por demorarte al
orar o al entrar a la cancin eso no debe ser lo importante, lo importante es ver
si el pueblo de Dios est siendo ministrado podemos seguir segn el espritu
nos dicte a nuestro corazn.
ministramos frente a personas para expresar el amor que tenemos por Dios a
travs de sermones cantos, testimonios y otras formas de arte, ms el lado
opuesto sin Dios se convierte en una presentacin se busca impresionar,
mostrar actividades para que el pblico salga contento y nuestro nombre sea
conocido
Cristo es el lder de adoracin, porque es el por su espritu decide que medios
humanos usar para fluir de su presencia, cisque decide usar alguno
Los ministros cantamos oramos. Deberamos hacerlo como nos dirige nuestro
gran lder, es aqu donde no existe lugar para elevacin humana,
conocimientos, talentos. Aqu en la adoracin solo l es honrado (Richard
Foster)
El director de alabanza debe estar siempre cerca de la gente, debe estar antes
del culto saludando a la gente, saludando a los ancianos, al joven nuevo. A la
hora de terminar el servicio saludar otra vez, tomarse un caf conversar con la
gente nueva.