política sobre las islas Falkland/Malvinas en respuesta a los crecientes esfuerzos de exploración petrolera de las autoridades británicas que carecen de la participación o consentimiento argentino. Según informes de prensa locales, la cancillería creó un plan para presionar por el histórico reclamo de Argentina por las islas, que incluye la expresión de malestar ante el Reino Unido, ante las empresas involucradas y ante los gobiernos de las naciones de esas empresas. Esto podría incluir al USG (gobierno de EEUU), ya que un proveedor norteamericano está enviando una plataforma petrolera a las islas. Estos pasos se dan luego de la resolución de 2007, que amenaza con cortar las operaciones argentinas de toda petrolera que opere en las Malvinas sin permiso del GOA. Los diplomáticos argentinos en Argentina no están seguros qué tan lejos el GOA va a tomar estas amenazas y no descartan una respuesta “irracional”. En la actualidad, ninguna empresa de energía de EEUU que opera en Argentina parece estar considerando actividades en las Malvinas. Fin del resúmen.
Mantengan sus equipos petroleros lejos de nuestras islas
3. (SBU) Informaciones de prensa argentinas del 27 de enero
indican que la cancillería argentina creó un plan para resistir la exploración de petróleo en las islas Malvinas ubicadas al este del sur de Argentina, pero controladas por los británicos. La firma británica Desire Petroleum estaría moviendo una plataforma de perforación a la zona para perforar pozos. El GOA piensa declarar que “cualquier operación de hidrocarburos en la zona de Malvinas relacionada con el Reino Unido es “ilegal” porque, al autorizarla, el gobierno de Reino Unido presume competencia en áreas de la plataforma continental, que están sujetas a la jurisdicción y soberanía argentinas”. El GOA habría planificado tres caminos: una protesta formal ante el Reino Unido; el envío de “notas de desaliento” a cada empresa comprometida con este tipo de actividades, recordándoles que sus acciones son “ilegales” y que podrían ser pasibles por ende de sanciones legales; y, en el caso de empresas no británicas, el envío de notas de protesta a los correspondientes gobierno(s) mencionando la preocupación del GOA por las actividades “ilegales” y mencionando la posibilidad de sanciones. El USG (gobierno de EEUU) podría recibir una nota según la tercera categoría ya que la firma norteamericana Diamond Drilling es dueña de una plataforma de perforación que iría a las islas (y que estaría instalada para mediados de febrero).
4. (SBU) La política del GOA antes mencionada concordaría
con la Resolución de la Secretaría de Energía 407, emitida en 2007, que amenaza con terminar con las actividades argentinas (incluìda la cancelación de todas las concesiones de energía) de toda compañía que opere en la zona Malvinas sin el permiso expreso del GOA. El analista de temas de energía Daniel Gerold ve pocas chances de que haya sanciones del GOA contra empresas, mientras el proceso se mantenga en la etapa de exploración. Sin embargo, en el caso de que haya un descubrimiento de hidrocarburos importante (se trate de petróleo o gas natural, que él ve como más factible), Gerold anticipa que el GOA lo convertirá en “un tema importante” a medida que haya más empresas comprometidas en el proceso de extracción –y tal como lo percibe el GOA se está perdiendo una significativa brecha de dividendos-. ¿Qué pasará después? Los británicos preocupados
de febrero; diplomáticos británicos en Argentina confirmaron a EconOff que el GOA envío una protesta formal a su encargado de negocios esa tarde. Los funcionarios del Reino Unido Lynda St. Cooke y Oliver Moss (este último un ex empleado de Shell Oil) habían dicho anteriormente a EconOff el 28 de enero que, si bien esa protesta se esperaba y era de rutina (reciben varias comunicaciones relacionadas con Malvinas de parte del GOA todos los años) aún así estaban preocupados por la dirección que podrían seguir las acciones del GOA. Su preocupación es por la forma de las acciones futuras contra empresas así como amenazas y protestas contra compañías de energía que operen en las Malvinas por parte de ONGs, incluídos activistas ecologistas.
buscará “sentar el ejemplo” con una compañía de ser posible, y se preguntó qué pasaría si la primera empresa en cruzar la “línea de la arena” fuera una con actividades importantes en Argentina. Citó a Schlumberger como ejemplo de una empresa que podría ofrecer servicios para extracción de petróleo en Malvinas, dadas sus vastas operaciones globales, en Argentina incluso. Y destacó que la detención de las operaciones argentinas sería muy perjudicial para la producción argentina de hidrocarburos. Dijo que si bien una acción de este tipo sería “irracional” para el GOA, “no podemos descartarla”. Agregó que éste es un tema muy tendencioso en Argentina. Como virtualmente no hay nadie que defienda un renunciamiento al reclamo de Argentina sobre las islas, algo que es enseñado como algo sagrado con los chicos argentinos que comienzan la primaria, podría haber una presión política importante sobre el GOA para que tome medidas en caso de un descubrimiento de petróleo. Gerold estuvo de acuerdo en que, luego de un descubrimiento de hidrocarburos, el GOA buscaría rápidamente comenzar operaciones en su Zona Económica de Exclusión (incontestable) lo más cerca posible de la ubicación del descubrimiento.
7. (SBU) Las empresas norteamericanas que operan
actualmente en Argentina no indicaron tener ningún interés en participar de la actuales actividades de exploración cerca de Malvinas; Randy Smith, ExxonMobil’s Public y el gerente de Asuntos de Goberno dijeron el 29 de enero a EconOff que su compañía no está interesada.
presupuesto, no están preparados para ninguna acción que suponga una demostración de poder, el GOA se podría sentir obligado con un descubrimiento de hidrocarburos importante a presionar por los reclamos históricos de Argentina con otros medios posibles. Es posible una estrategia de palabras duras, quejas en los foros internacionales y cartas de protesta, con sanciones económicas contra empresas participantes, tal vez, aún si pudieran perjudicar con ello la propia producción de hidrocarburos de Argentina. MARTINEZ