Estamos ante un texto periodístico por su ámbito de uso, en el que Manuel Vicent realiza una feroz crítica a las ideas que se vierten desde los medios de comunicación, a las que tacha de alimentos intoxicados. En las primeras líneas que vamos a analizar el uso de los adjetivos corresponden a la introducción del texto expositivo-argumentativo, donde el autor presenta el tema que va a tratar: al contrario que la contaminación medioambiental, los mensajes de los medios de comunicación no repercuten en el físico. Los adjetivos que encontramos en esta parte del texto son abundantes: mediática, microscópica, sensible, tóxica, moral, ideológico, rudo y persistente. A continuación vamos a analizar cómo se relacionan con el tipo de texto y la intención del autor. En cuanto a la forma, encontramos adjetivos primitivos o simples, como sensible, tóxica, moral y rudo. Por composición están formados microscópica e ideológico (raíces griegas), mientras que derivadas son mediática, ideológico (sufijo -ico) y persistente. Todos los adjetivos están en grado positivo (como tóxica o microscópica), exceptuando el superlativo relativo “en la mucosa más sensible del cerebro”. Los adjetivos “un ataque tan rudo y persistente” aparecen modificados por el adverbio intensificador “tan”. De este modo, vemos como Manuel Vicent utiliza estos dos procedimientos (el superlativo absoluto y el modificador “tan”) para describir la realidad del cerebro y los mensajes que recibe. La descripción que realiza Manuel Vicent se lleva a cabo también con el uso de series binarias, como “veneno moral e ideológico”, “ataque tan rudo y persistente”, que aportan un ritmo de pensamiento al texto expositivo-argumentativo. Por otra parte, todos los adjetivos aparecen en posición pospuesta: “basura mediática”, “lesión… microscópica”, la mucosa más sensible”, “mierda tóxica”, “veneno moral e ideológico”, “ataque tan rudo y persistente”. Generalmente estos adjetivos pospuestos tienden a ser especificativos, como en este caso, puesto que se suman a la representación de los sustantivos a los que acompañan (altamente connotativos). Hay que destacar el caso de “mierda tóxica”, adjetivo explicativo, con un claro carácter intensificador de la cualidad del sustantivo. Todos los adjetivos cumplen la función sintáctica de adyacentes, por lo que aportan gran expresividad al texto. En cuanto al significado, algunos de los adjetivos son valorativos, como “lesión… microscópica”, “mierda tóxica”, “ataque tan rudo y persistente”, con los que el autor expresa su opinión sobre los mensajes que recibimos desde los medios de comunicación. Por otra parte, encontramos algunos adjetivos de relación, como “basura mediática”, “veneno moral e ideológico”, mientras que “la mucosa más sensible” parece ser descriptivo. Según este análisis, podemos afirmar que el carácter subjetivo del texto parece recaer más sobre los sustantivos (de carácter metafórico), mientras que la función del adjetivo es más clasificar a los sustantivos. Como conclusión, podemos afirmar que, al tratarse de un texto periodístico con un modo de elocución expositivo-argumentativo, predominan los adjetivos especificativos y pospuestos, puesto que delimitan y precisan el significado del sustantivo al que acompañan (es este el que transmite el contenido connotativo, sobre todo), ayudando a construir las metáforas que describen los daños que producen los medios de comunicación (veneno moral e ideológico).