Concepción, veintidós de agosto de dos mil dieciséis.
VISTO: En esta causa RIT T-39-2016 y RUC 1640008921-7 del Juzgado de Letras del Trabajo de Concepción y Rol Corte 193-2016 se ha dictado sentencia definitiva en procedimiento de tutela laboral por don Cristian Rodas Riquelme, Juez Destinado de Letras del Trabajo de Concepción, por la cual se rechazan las excepciones opuestas de incompetencia absoluta del tribunal, caducidad, falta de legitimidad activa de la denunciante y falta de legitimidad pasiva de la denunciada; y se acoge la denuncia de tutela de derechos fundamentales interpuesta por doña Paola Angélica Betancourt Recabal, en contra del Fisco de Chile, representado por el Abogado Procurador Fiscal del Consejo de Defensa del Estado don Georgy Schubert Studer, en representación de Carabineros de Chile, declarándose que el empleador lesionó el derecho fundamental del trabajador de igualdad y no discriminación y, consecuencialmente, su derecho a la libertad del trabajo con ocasión de su despido, al ser éste un acto discriminatorio fundado en razón de los comentarios que habría vertido la actora contrarios al sistema institucional establecido en Carabineros de Chile, debiendo condenarse a la demandada únicamente al pago de la suma de $6.380.000, por concepto de indemnización adicional equivalente a 11 meses de la última remuneración mensual devengada, de acuerdo al artículo 489 inciso 3º del Código del Trabajo, y no se hace lugar a lo demás pedido en la demanda, con los reajustes e intereses que señala el artículo 173 del Código laboral, sin costas. En contra de dicha sentencia interpone recurso de nulidad el Abogado Procurador Fiscal de Concepción don Georgy Schubert Studer, por la demandada Fisco-Carabineros de Chile, el que funda, en forma principal, en la causal prevista en el artículo 478 letra a) del Código del Trabajo, esto es, cuando la sentencia haya sido pronunciada por juez incompetente. En subsidio, lo basa en la causal contemplada en el artículo 477, inciso 1º, parte segunda, del Código del Trabajo, o sea, cuando la sentencia se hubiere dictado con infracción de ley que hubiere influido sustancialmente en lo dispositivo del fallo, en relación con la caducidad de la acción. En subsidio, lo sustenta en la causal consagrada en el artículo 477, inciso 1º, parte segunda del Código del Trabajo, esto es, cuando la sentencia se hubiere dictado con infracción de ley que hubiere influido sustancialmente en lo dispositivo del fallo, en vinculación con la falta de legitimación activa de la demandante y pasiva de la demandada. En subsidio, la apoya en la causal establecida en el artículo 477, inciso 1º, parte segunda del Código del Trabajo, esto es, cuando la sentencia se hubiere dictado con infracción de ley que hubiere influido sustancialmente en lo dispositivo del fallo, en correspondencia con el artículo 7 de la Ley Nº 18.961; 11 del DFL Nº 2, de 1968; artículo 1º de la Directiva del Personal de Carabineros en relación a los artículos 11 y 13 de la Ley Nº 18.834. La defensa solicita, en cuanto a la causal principal, que se anule la sentencia, remitir los autos al tribunal competente y señalar el estado de la causa para su conocimiento; y en relación a las causales subsidiarias, que en cada caso se anule la sentencia y se dicte la correspondiente sentencia de reemplazo, con las declaraciones que señala, con costas. Se procedió a la vista del recurso en la audiencia del día 16 de agosto de 2016, asistiendo el abogado don Carlos Veloso Schlie por la demandada Fisco-Carabineros de Chile y el abogado don Carlos Montanares Jiménez por la demandante, quienes alegaron lo pertinente en defensa de sus pretensiones. CON LO RELACIONADO Y CONSIDERABNDO: 1.- Que el recurso de nulidad es un medio de impugnación, de carácter extraordinario y de derecho estricto, que debe ajustarse cabalmente a la normativa que lo regula, por lo que su procedencia está limitada, en primer término, por la naturaleza de las resoluciones impugnables; en segundo lugar, por las causales expresamente establecidas en la ley; y, finalmente, por las formalidades que debe cumplir el escrito respectivo, en especial, su fundamentación, peticiones concretas y la forma en que se interponen sus causales si son varias las invocadas, todo lo cual fija el alcance de la competencia del tribunal. 2.- Que el reclamante funda el recurso de nulidad, en forma principal, en la causal prevista en el artículo 478 letra a) del Código del Trabajo, esto es, cuando la sentencia haya sido pronunciada por juez incompetente. En subsidio, lo basa en la causal contemplada en el artículo 477, inciso 1º, parte segunda, del Código del Trabajo, o sea, cuando la sentencia se hubiere dictado con infracción de ley que hubiere influido sustancialmente en lo dispositivo del fallo, en relación con la caducidad de la acción. En subsidio, lo sustenta en la causal consagrada en el artículo 477, inciso 1º, parte segunda del Código del Trabajo, esto es, cuando la sentencia se hubiere dictado con infracción de ley que hubiere influido sustancialmente en lo dispositivo del fallo, en vinculación con la falta de legitimación activa de la demandante y pasiva de la demandada. En subsidio, la apoya en la causal establecida en el artículo 477, inciso 1º, parte segunda del Código del Trabajo, esto es, cuando la sentencia se hubiere dictado con infracción de ley que hubiere influido sustancialmente en lo dispositivo del fallo, en correspondencia con el artículo 7 de la Ley Nº 18.961; 11 del DFL Nº 2, de 1968; artículo 1º de la Directiva del Personal de Carabineros en relación a los artículos 11 y 13 de la Ley Nº 18.834. I.- RECURSO DE NULIDAD FUNDADO EN LA CAUSAL PREVISTA EN EL ARTÍCULO 478, LETRA A) DEL CÓDIGO DEL TRABAJO, ESTO ES, CUANDO LA SENTENCIA HAYA SIDO PRONUNCIADA POR JUEZ INCOMPETENTE. 3.- Que el recurrente señala, luego de analizar y transcribir las normas legales que regularon el vínculo que unió a la demandante y demandada, que es improcedente aplicar el procedimiento de tutela laboral a los funcionarios del Estado, resultando indudable que las normas del Código del Trabajo operan sólo y exclusivamente a los trabajadores cuyos servicios se prestan en virtud de un contrato de trabajo, ya que sus disposiciones no se extienden a los funcionarios públicos por cuanto no son trabajadores regidos por el Código del Trabajo, y además, porque están sometidos a un estatuto especial, mediante vínculo de derecho público. El artículo 485 del Código del Trabajo refuerza el argumento de que el tribunal no es competente para conocer del presente litigio, pues dispone que el procedimiento de tutela laboral “se aplicará respecto de las cuestiones suscitadas en la relación laboral por aplicación de las normas laborales, que afectan los derechos fundamentales de los trabajadores….cuando aquellos derechos resulten lesionados en el ejercicio de las facultades del empleador”. La exclusión de los funcionarios públicos del procedimiento de tutela no constituye una discriminación en la esfera de protección de los derechos fundamentales, por cuanto ellos se encuentran resguardados por la normativa especial señalada en su propio estatuto. En efecto, el artículo 58 de la Directiva del Personal contempla un Título especial referido a Aspectos Disciplinarios, sanciones, autoridades facultadas al efecto, la forma y recurso; y de otro lado, todo funcionario tiene la facultad de recurrir a la Contraloría General de la República conforme al procedimiento de reclamo del artículo 160 del Estatuto Administrativo, lo que hizo la actora. Además la Ley Orgánica de la Contraloría preceptúa que el Órgano de Control de los Actos de la Administración está obligado a fiscalizar y resolver los asuntos referidos a derechos de los funcionarios de las instituciones públicas, por lo que el Estatuto Administrativo resguarda perfectamente los derechos de los funcionarios y cualquier acto atentatorio en contra de los mismos, puede ser denunciado en conformidad a dicho Estatuto y la Ley Orgánica Constitucional de la Contraloría General de la República. En consecuencia, la acción de tutela laboral entablada en autos, es una vía judicial que no puede aplicarse al demandante, cuya relación con la Administración del Estado estuvo regida por las normas estatutarias del sector público, resultando en consecuencia incompetente el Juzgado de Letras del Trabajo de Concepción para conocer de la denuncia de tutela de derechos fundamentales intentada por la denunciante. 4.- Que de acuerdo a lo planteado por el reclamante el problema a resolver está referido a determinar si el Juzgado de Letras del Trabajo de Concepción sería incompetente para conocer de las acciones de tutela laboral reguladas en el Código del Trabajo, considerando que quien ejerce la acción es una funcionaria pública que se desempeñaba para un órgano del Estado, y por tanto, sujeta a un estatuto especial. 5.- Que el artículo 485 del Código del Trabajo contiene el procedimiento de tutela laboral, que consiste en un mecanismo procesal que permite al trabajador reclamar de aquellos actos provenientes de una relación laboral que vulnera garantías fundamentales de los trabajadores. El procedimiento de tutela laboral, conforme a los tres incisos del artículo 485 del Código del Trabajo es aplicable en diversos casos, a saber: a) en la cuestiones que se susciten en la relación laboral por aplicación de las normas laborales, cuando las garantías constitucionales del trabajador – que la misma norma enumera- resultaren lesionados como consecuencia del ejercicio de las facultades del empleador; b) en conflictos relacionados con los actos discriminatorios de que trata el artículo 2º del Código del trabajo, acaecidos durante la vigencia de la relación laboral o al término de la misma, con exclusión de las ofertas de trabajo; y c) en situaciones de represalias ejercidas en contra de trabajadores a raíz de la labor fiscalizadora de la Dirección del Trabajo o a causa del ejercicio de acciones judiciales. La norma mencionada se refiere a derechos fundamentales, que según su origen, pueden ser de dos tipos: a) Los de fuente constitucional, previstos todos en el artículo 19 de la Carta Fundamental; y b) Los de fuente legal, como lo es el derecho a no ser objeto de represalias laborales, creado por la ley Nº 20.087, que se encuentra fundado en un derecho fundamental constitucional, como es el de tutela judicial efectiva. 6.- Que en relación a la materia a resolver, cabe tener presente que el artículo 1º del Código del Trabajo establece que las relaciones laborales entre los empleadores y los trabajadores se regularán por dicho Código y sus leyes complementarias En el inciso 2º se establecen excepciones en cuanto a que las normas del Código del trabajo y sus leyes complementarias no se aplicarán a los funcionarios de la Administración del Estado, centralizada y descentralizada, del Congreso Nacional y del Poder Judicial, ni a los trabajadores de las empresas o instituciones del Estado o de aquellas en que éste tenga aportes, participación o representación, siempre que dichos funcionarios o trabajadores se encuentren sometidos por ley a un estatuto especial. En el inciso 3º se consagra una contraexcepción, en cuanto a que, los trabajadores de las entidades señaladas en el inciso 2º se sujetarán a las normas de este Código en los aspectos o materias no regulados en sus respectivos estatutos, siempre que ellas no fueren contrarias con estos últimos. 7.- Que nuestra Carta Fundamental establece diversas normas respecto de la organización y atribuciones de los órganos del Estado, así como la posición institucional que ostentan. La Carta Constitucional distingue entre el Gobierno y la Administración del Estado, como entidades que integran el Poder Ejecutivo. Ahora bien, el Gobierno está compuesto básicamente por el Presidente y los Ministros de Estado, que son los colaboradores directos del Presidente. Por su parte, la Administración del Estado puede ser comprendida como un complejo orgánico que - por regla general- se encuentra bajo la dependencia o bajo la tutela o supervigilancia del Presidente de la República, comprendiendo la Administración todos aquellos que no forman parte del Poder Legislativo o del Poder Judicial. En consecuencia, forman parte de la Administración del Estado todos los órganos que están comprendidos dentro del Poder ejecutivo, tales como el Presidente de la República, Ministerios, Intendencias, gobernaciones, etcétera. 8.- Que surge como hecho no controvertido en la causa que la denunciante Paola Angélica Betancourt Recabal ingresó a Carabineros de Chile con fecha 26 de septiembre de 2006, mediante la modalidad de contrata por resolución CPR en calidad de telefonista grado 16, desempeñándose en la Central de Comunicaciones de Carabineros CENCO Coronel. La institución Carabineros de Chile forma parte de la Administración del Estado, que depende directamente del Ministerio del Interior y Seguridad Pública y se vincula administrativamente con éste a través de la Subsecretaría del Interior. En tal escenario, su situación jurídica encuadra en la hipótesis prevista en el inciso 2º del artículo 1º del Código del Trabajo. 9.- Que no obstante lo anterior, conforme a la contraexcepción establecida en el inciso 3º del artículo 1º del Código laboral son aplicables las normas del Código del trabajo y sus leyes complementarias a los trabajadores “de la Administración del Estado, centralizada y descentralizada”, en los aspectos o materias no reguladas en sus respectivos estatutos, siempre que ellas no fueren contrarias a estos últimos. Entonces, se aplicarán las normas del Código del Trabajo a los trabajadores de la Administración del Estado cuando concurran los siguientes requisitos copulativos: a) Que se trate de materias o aspectos no regulados en sus respectivos estatutos, y b) Que ellas no fueren contrarias a éstos últimos. 10.- Que en cuanto al primer requisito previsto en el inciso 3º del artículo 1º del Código del Trabajo cabe considerar que la relación laboral existente entre doña Paola Betancourt Recabal y Carabineros de Chile aparece regulada en el artículo 7 de la Ley Nº 18.961, Orgánica Constitucional de Carabineros; 2, 10, 36 y 37 del Decreto 412, de 1991 sobre Estatuto del Personal de Carabineros de Chile, y la Directiva del Personal Contratado por Resolución. El examen y análisis de cada una de las disposiciones referidas permite establecer que no contienen normas que regulen un procedimiento jurisdiccional especial para conocer y resolver denuncias de vulneración de derechos fundamentales que afecten a los funcionarios en el ámbito de la relación de trabajo. Lo anterior importa, que la demandante no tiene acceso a la jurisdicción para denunciar cualquier acto ocurrido en la relación laboral que, como consecuencia del ejercicio de las facultades del empleador, implique una lesión en los derechos fundamentales del trabajador, en los capítulos que especifican los incisos 1º y 2º del artículo 485 del Código del Trabajo. En consecuencia, se cumple el primer requisito previsto en el inciso 3º del artículo 1º del Código del Trabajo, por cuanto existe un vacío legal en el estatuto especial, respecto de una materia o aspecto que sí se encuentra regulado en el Código del Trabajo, como es el procedimiento de tutela laboral a través del cual se busca proteger al trabajador, por la vía jurisdiccional, en el goce o disfrute de sus derechos fundamentales en el ámbito del trabajo. 11.- Que en relación al segundo requisito establecido en el inciso 3º del artículo 1º del Código del Trabajo, esto es, que las normas que habrían de aplicarse en forma supletoria no sean contrarias a las disposiciones del estatuto especial, es necesario indicar que tampoco se encuentra en el cuerpo de normas señaladas en el motivo anterior, algún capítulo o precepto que pugne con la protección de los derechos fundamentales de los funcionarios de Carabineros de Chile, y no se advierte de qué forma normas protectoras de dichos derechos podrían ser incompatibles con lo dispuesto en el estatuto especial que rige a aquellos funcionarios, ya que es dable asumir que el Estado, en cuanto empleador, ha de cumplir con el deber de asegurar el pleno respeto de los derechos fundamentales de que también son titulares los funcionarios que trabajan en la Administración del Estado. Entonces, cumplidos los requisitos previstos en el inciso 3º del artículo 1º del Código del Trabajo, no existe inconveniente para la aplicación supletoria de las normas que se contemplan en el párrafo 6º del Título I del Libro V del referido Código, respecto de la tutela de derechos fundamentales, a los funcionarios de la Administración del Estado. 12.- Que en las condiciones anotadas, estos sentenciadores comparten la decisión del juez a quo en cuanto a determinar que corresponde al Juzgado de Letras del Trabajo resolver las contiendas sobre vulneración de derechos fundamentales planteados por los trabajadores de la Administración del Estado, en cuanto no se contiene un procedimiento similar en el régimen estatutario destinado a concretar el derecho a la tutela laboral efectiva de dichos trabajadores. Ello, por cuanto el artículo 420 letra a) del Código del Trabajo habilita a dichos tribunales para conocer “las cuestiones suscitadas entre empleadores y trabajadores por aplicación de las normas laborales” y la acción de tutela laboral, ejercitada por una funcionaria pública que denuncia una conducta de su empleador que, a su juicio, afecta sus derechos fundamentales es, precisamente y a la luz de lo dispuesto en el artículo 485 del Código laboral, una de aquellas “cuestiones suscitadas en la relación laboral por aplicación de las normas laborales”, que debe resolver la judicatura laboral. En tal escenario, el recurso de nulidad deducido por el recurrente basado en la causal contemplada en el artículo 478 letra a) del Código del Trabajo debe ser desestimado. II.- RECURSO DE NULIDAD BASADO EN LA CAUSAL PREVISTA EN EL ARTÍCULO 477, INCISO 1º, PARTE SEGUNDA, DEL CÓDIGO DEL TRABAJO, ESTO ES, CUANDO LA SENTENCIA SE HUBIERE DICTADO CON INFRACCIÓN DE LEY QUE HUBIERE INFLUIDO SUSTANCIALMENTE EN LO DISPOSITIVO DEL FALLO, EN RELACIÓN A LA CADUCIDAD DE LA ACCIÓN. 13.- Que el reclamante, en subsidio, basa el recurso de nulidad en la causal contemplada en el artículo 477, inciso 1º, parte segunda, del Código del Trabajo, esto es, cuando la sentencia “se hubiere dictado con infracción de ley que hubiere influido sustancialmente en lo dispositivo del fallo”. La infracción la acota al artículo 489 del Código del Trabajo. 14.- Que el recurrente sostiene la causal en que la actora denuncia supuestos actos discriminatorios durante el desempeño de sus funciones y con ocasión del término de su contrata, que – temporalmente - están fuera del plazo que otorga la ley para demandar. Existe infracción de ley, dice, desde que la mayoría de los supuestos actos vulneratorios ocurren durante el desarrollo de las funciones de la actora, los que describe, y el término de sus servicios, obedece a las normas legales que regulan el empleo a contrata. En cuanto a la época de la separación señala que más allá del hecho que su desvinculación jurídica se produjo el 31 de diciembre de 2015, constituye un hecho cierto que la actora tomó conocimiento de su desvinculación 4 meses antes, y de la decisión definitiva el 05 de octubre de 2015, siendo separada de sus funciones, en todo caso, el día 30 de noviembre de 2015 En consecuencia, habiendo tomado conocimiento de la decisión de no renovar su contrato el día 05 de octubre de 2015, la acción de tutela caducó el 17 de diciembre de 2015, y si se cuenta desde su separación efectiva, esto es, el 30 de noviembre de 2015, la acción igual está caduca desde el día 11 de febrero de 2016, de modo que se ha infringido el artículo 489 del Código del Trabajo. 15.- Que el autor Arturo Alessandri Rodríguez define la caducidad como “la extinción ipso jure de la facultad de ejercer un derecho o celebrar un acto, por no haberse ejercido o realizado dentro de un plazo de carácter fatal que la ley establece (En Curso de Derecho Civil. Editorial Nascimento. 1941. Tomo III. “De las Obligaciones”. Página 457). Nuestro Máximo Tribunal ha dicho que la caducidad consiste en la extinción de un derecho por el incumplimiento del interesado, dentro del término estipulado, de las obligaciones que se le imponen expresamente por la ley pertinente (Corte Suprema. 16 de noviembre de 2010. Rol 6153-2010). También ha indicado que la caducidad, entendida como sanción, puede ser conceptualizada como la extinción de un derecho por la falta de manifestación de voluntad por el interesado, dentro del término establecido por la ley, en orden a realizar las diligencias necesarias para hacer efectivo el derecho que se le ha conferido” ( Corte Suprema. 25 de mayo de 2004. Motivo Quinto. Rol 2683-2003). Es importante destacar que el legislador laboral ha consagrado la caducidad con el objeto de instar al trabajador a reclamar por vulneración de derechos fundamentales dentro de cierto plazo. 16.- Que de conformidad con lo dispuesto en el inciso 1º y 2º del artículo 489 del Código del Trabajo si la vulneración de derechos fundamentales se hubiere producido con ocasión del despido, la denuncia deberá interponerse dentro del plazo de sesenta días contado desde la separación. El Diccionario de la Lengua Española define la voz “separación” como “Acción y efecto de separar o separarse” y “separar” como “privar de un empleo, cargo o condición al que lo servía u ostentaba”. 17.- Que en la situación en estudio, el plazo para efectuar la denuncia se cuenta “desde la separación” y no desde que se produzca la vulneración de derechos fundamentales alegada. La actora ingresó a Carabineros de Chile con fecha 26 de septiembre de 2006, mediante la modalidad “Contratado por Resolución” (CPR), que conforme al artículo 1º de la Directiva del Personal Contratado por Resolución, se extenderá hasta el 31 de diciembre de cada año. En armonía con lo anterior, el artículo 56 de la Directiva del personal dispone que aquel personal respecto de quien no se renueve su contratación, será notificado de la decisión adoptada a más tardar el día 30 de noviembre de cada año; y el artículo 57 Nº 4 de igual Directiva establece que es causal de término del contrato por resolución el vencimiento del plazo de contratación. 18.- Que consta del acta de notificación de fecha 28 de noviembre de 2015 que se le comunicó a la actora la decisión de no prórroga de su contratación para el año 2016. Empero, en dicha acta de notificación se puntualiza que si bien queda liberada de prestar sus funciones, toma conocimiento que mientras subsista la liberación “y hasta el 31 de diciembre del año en curso, mantendrá dicha condición, y por ende, las remuneraciones inherentes a su contratación”. En vinculación con lo anterior, la actora acompaña liquidación de remuneraciones por la cual consta que se le pagaron sus emolumentos hasta el mes de diciembre de 2015. 19.- Que así las cosas, la separación, o sea, la privación o retiro impuesto de un cargo, empleo o condición, de la actora Paola Betancourt Recabal ocurrió el día 31 de diciembre de 2015. En efecto, de acuerdo con el acta de notificación la telefonista Betancourt Recabal mantendrá dicha condición y sus remuneraciones inherentes a su contratación hasta el día 31 de diciembre de 2015. Así, las fechas de la separación alegadas por el recurrente, esto es, 05 de octubre de 2015 y 30 de noviembre de 2015, corresponden a actos intermedios de procedimiento que culminan con el acto formal y final de la separación que se produce con fecha 31 de diciembre de 2015. 20.- Que en consecuencia, atendido a que la fecha de separación de la actora ocurrió el día 31 de diciembre de 2015 y que la denuncia de tutela laboral por vulneración de derechos fundamentales se produjo el día 29 de febrero de 2016, es dable concluir que la acción deducida por la demandante lo ha sido dentro de plazo legal. Ello, porque como ya se dijo, el plazo de sesenta días para interponer la denuncia no se cuenta desde que se produzca la vulneración de derechos fundamentales alegados sino desde la separación del empleo o cargo. Las razones desarrolladas en los considerandos anteriores resultan suficientes para desestimar el recurso de nulidad deducido por la recurrente basado en la causal contemplada en el artículo 477, inciso 1º, segunda parte, del Código del Trabajo, por no aparecer configurada la infracción de ley reclamada por dicho reclamante. III.- RECURSO DE NULIDAD BASADO EN LA CAUSAL CONTEMPLADA EN EL ARTÍCULO 477, INCISO 1º, PARTE SEGUNDA, DEL CÓDIGO DEL TRABAJO, ESTO ES, CUANDO LA SENTENCIA SE HUBIERE DICTADO CON INFRACCIÓN DE LEY QUE HUBIERE INFLUIDO SUSTANCIALMENTE EN LO DISPOSITIVO DEL FALLO, EN RELACIÓN A LA FALTA DE LEGITIMACIÓN ACTIVA DEL DEMANDANTE Y PASIVA DE LA DEMANDADA. 21.- Que el recurrente, en subsidio, funda el recurso de nulidad en la causal consagrada en el artículo 477, inciso 1º, parte segunda, del Código del Trabajo, esto es, cuando la sentencia “se hubiere dictado con infracción de ley que hubiere influido sustancialmente en lo dispositivo del fallo”. La infracción la acota a los artículos 1, 3 y 485 del Código del Trabajo. 22.- Que el reclamante manifiesta que del artículo 485 del Código del Trabajo se colige que el procedimiento de tutela laboral resulta aplicable para aquellas partes que se encuentran relacionadas por el denominado vínculo de subordinación y dependencia de acuerdo con las definiciones contenidas en las letras a) y b) del artículo 3º del Código laboral, de lo que dan cuenta las referencias normativas a la “relación laboral” y la “aplicación de las normas laborales”. Por otro lado, los derechos se entienden lesionados a partir de conductas efectuadas por el empleador, concepto legal definido en el artículo 3 letra a) del Código mencionado, de modo que, el procedimiento de tutela laboral se conduce como inaplicable respecto de Carabineros de Chile, el que no tiene la calidad de empleador en los términos legales, y tampoco hubo una relación laboral regida por el Código. Correlativamente, un funcionario público regido por un régimen estatutario, en este caso, la Directiva del Personal y el Estatuto del Personal de Carabineros carece de legitimación activa para ejercer una acción de tutela laboral. La inexistencia de una relación laboral regida por el Código del Trabajo entre la demandante y Carabineros de Chile, obsta absolutamente a la aplicación de un procedimiento inspirado básicamente en la protección de derechos laborales lesionados por actos directos del empleador, calidad que no tiene Carabineros de Chile respecto de la actora. Expone que al estimarse que la demandante es legitimada activa para accionar de tutela laboral se ha cometido infracción a los artículos 1º, 3º y 485 del Código del Trabajo pues se han aplicado erróneamente normas que fueron excluidas por el legislador para los funcionarios públicos. En la especie se evidencia una vinculación funcionaria que por expresa disposición de la ley se encuentra sometida a un estatuto especial de lo que se sigue la absoluta improcedencia de aplicar a su respecto las normas del Código del Trabajo, por lo que las normas infringidas no permiten que la actora fuere legitimada activa en una acción de tutela y que el Fisco- Carabineros de Chile, lo sea pasivamente. 23.- Que el artículo 1º inciso 1º del Código del trabajo establece que las relaciones laborales entre los empleadores y los trabajadores se regularán por dicho Código y sus leyes complementarias, y el inciso 2º del Código referido exceptúa de la aplicación de tales normas, entre otros, a los funcionarios de la Administración del Estado, centralizada y descentralizada. Sin embargo, el legislador laboral en el inciso 3º del artículo 1º del Código del Trabajo expresamente dispone que “los trabajadores” de las entidades señaladas, entre ellos los órganos de la Administración del Estado, se sujetarán a las normas del Código laboral en los aspectos o materias no regulados en sus respectivos estatutos, siempre que ellas no fueren contrarias a éstos últimos. 24.- Que es importante consignar que la expresión “trabajadores” que se consigna en el inciso 3º del artículo 1º del Código del Trabajo se utiliza para referirse a todos aquellos que prestan servicios en las entidades mencionadas en el inciso 2º del artículo 1º del Código citado, y al usar la palabra “entidades”, comprende no sólo las empresas del Estado, sino a todas las instituciones señaladas en dicho inciso, en una expresión omnicomprensiva. Entonces, la propia ley entiende que los funcionarios de la Administración del Estado son también trabajadores, y luego, dicha Administración en su empleador, pues ambos forman parte de una relación de trabajo. Por lo demás, debe tenerse en consideración que los elementos de subordinación y dependencia propios de la relación laboral, se dan fuertemente en el contexto de las relaciones del Estado con sus trabajadores siendo éste un espacio en el cual la vigencia real de los derechos fundamentales puede verse afectada a consecuencia del ejercicio de las potestades del Estado empleador. 25.- Que el artículo 485 del Código del Trabajo, establece que el procedimiento de Tutela Laboral “se aplicará respecto de las cuestiones suscitadas en la relación laboral por aplicación de las normas laborales, que afecten los derechos fundamentales de los trabajadores”. “En efecto, el leguaje utilizado en el inciso tercero del artículo 1º del cuerpo legal citado, no deja lugar a dudas en cuanto a que los funcionarios públicos son considerados también trabajadores, toda vez que luego de enunciarse, en el inciso segundo, los órganos a los cuales no se les aplicarán las normas del Código del Trabajo – entre los que se menciona a los funcionarios de la Administración del Estado, del Congreso Nacional, del Poder Judicial y de las empresas del Estado - se indica en el inciso tercero, “Con todo, los trabajadores de las entidades señaladas en el inciso precedente se sujetarán a las normas de este Código”, sin hacer distinción de ninguna especie en cuanto al tipo de entidad a que se refiere el inciso segundo. Lo anterior está en concordancia, además, con la forma en que es concebida la excepción a la regla del inciso primero del artículo 1º del cuerpo legal citado. La regla del inciso primero es una de carácter general, por la que se sujeta las relaciones laborales entre empleadores y trabajadores a las normas del Código del Trabajo y la excepción contenida en el inciso segundo, se refiere a una situación particular, que excluye a determinados trabajadores de la norma general. Así, el inciso segundo establece que “estas normas no se aplicarán, sin embargo, a los funcionarios de la Administración del Estado”, lo que quiere decir que, no obstante ser éstos trabajadores quedarán sometidos en sus relaciones con el Estado, a la ley especial que los regule. La expresión, sin embargo, utilizada en este contexto, es ilustrativa y permite reforzar lo que se viene diciendo, ya que implica que aun cuando la hipótesis es la reseñada en el inciso primero - es una relación laboral entre empleador y trabajador- se establecerá respecto de ella una solución distinta. Entenderlo de otra manera, haría inútil la expresión en comento” (Corte Suprema. 30 de abril de 2014. Rol 10.972-2013). 26.- Que la Excma. Corte Suprema ha señalado que “las reflexiones precedentes permiten descartar la interpretación que del artículo 3º letra a) del Código del Trabajo hace el recurrente, así como la mención al artículo 4º del mismo cuerpo legal. En efecto, una vez entendido que la relación entre funcionario público y el Estado es una relación laboral, aunque sujeta a un estatuto especial, no resulta procedente privar a los primeros de un procedimiento que está llamado a determinar el cumplimiento o la vigencia de derechos fundamentales en la relación de trabajo, por el sólo hecho de que las referidas normas asocien el término empleador a un contrato de trabajo - y no a un decreto de nombramiento- o se refieran al empleador como a un gerente o administrador, olvidando que el Estado, en su relación con los funcionarios que se desempeñan en los órganos de la Administración, ejerce funciones habituales de dirección - términos que utiliza el artículo 4º citado- como lo hace todo empleador, lo que no es incompatible con el hecho de que se trate de órganos destinados a desempeñar una función pública.” “Desde esta perspectiva, entonces, tampoco existe impedimento para aplicar las normas de Tutela a los funcionarios de la Administración del Estado, en la medida que su ámbito de aplicación abarca o comprende a todos los trabajadores sin distinción, calidad que - como se dijo- también poseen los referidos funcionarios” (Corte Suprema. 30 de abril de 2014. Rol 10.972-2013). 27.- Que de conformidad con lo reseñado, es dable concluir que los funcionarios de la Administración del Estado tienen la calidad de trabajadores, por así calificarlos el propio legislador, entre ellos la actora, y los órganos de la Administración del Estado, entre los que figura Carabineros de Chile, tienen la calidad de empleador de la demandante, existiendo entre ambos una relación de carácter laboral con características diferentes por tratarse de un ente público, que supletoriamente se rige por el Código del trabajo, siéndole aplicable el procedimiento de tutela de derechos fundamentales. En tal contexto, la actora como trabajadora de un órgano de la Administración del Estado tiene legitimación activa para deducir demanda de tutela laboral por vulneración de derechos fundamentales, y por ende, Carabineros de Chile, como órgano de la Administración del Estado tiene legitimación pasiva para ser demandado, en tanto en su calidad de empleador lesionó derechos fundamentales de la trabajadora demandante. Lo expuesto en los considerandos anteriores resulta suficiente para rechazar el recurso de nulidad deducido por la reclamante fundado en la causal prevista en el artículo 477, inciso 1º, segunda parte, del Código del Trabajo, por no aparecer configurada la infracción de ley reclamada por dicho recurrente. IV.- RECURSO DE NULIDAD FUNDADO EN LA CAUSAL PREVISTA EN EL ARTÍCULO 477, INCISO 1º, PARTE SEGUNDA, DEL CÓDIGO DEL TRABAJO, ESTO ES, CUANDO LA SENTENCIA SE HUBIERE DICTADO CON INFRACCIÓN DE LEY QUE HUBIERE INFLUIDO SUSTANCIALMENTE EN LO DISPOSITIVO DEL FALLO, 28.- Que el reclamante, en subsidio, basa el recurso de nulidad en la causal contemplada en el artículo 477, inciso 1º, parte segunda, del Código del Trabajo, esto es, cuando la sentencia “se hubiere dictado con infracción de ley que hubiere influido sustancialmente en lo dispositivo del fallo”. La infracción la acota a los artículos 7 de la Ley Nº 18.961; 11 del DFL Nº 2, de 1968; artículo 1º de la Directiva del Personal de Carabineros en relación a los artículos 11 y 13 de la Ley Nº 18.834. 29.- Que el recurrente procede a transcribir el artículo 7º de la Ley Nº 18.961; los artículos 11º y 13º del D.F.L. Nº 2, de 1968 sobre Estatuto del Personal de Carabineros de Chile señalando que tal normativa se complementa con el artículo 1º de la Directiva del Personal Contratado por Resolución, que también transcribe, expresando que por lo anterior al Contrato por Resolución le son aplicable las normas del Estatuto Administrativo, reproduciendo el artículo 3, letra c) y el artículo 10 inciso 1º de dicho estatuto. En la sentencia, dice, no se aplican las normas legales citadas, de modo que según ella, los empleos a contrata en carabineros no expiran por el solo ministerio de la ley, exigiendo para su término la dictación de un acto administrativo que sea suficientemente fundado. La normativa aludida en ningún caso obliga a la renovación de la contrata. Esta forma de vinculación en el sector público, su transitoriedad y precariedad tienen fecha de término por el sólo ministerio de la ley, extinguiéndose el 31 de diciembre del año respectivo. Es un error hablar de desvinculación de la contrata, atendido que la contrata se termina por el solo ministerio de la ley. El término de la contrata de la demandante se produjo por el sólo ministerio de la ley. Señala que los empleos a contrata están sujetos a una duración legal acotada, luego de la cual se extinguen, y al desaparecer el cargo o empleo, la persona que lo servía, en calidad de funcionario, también expira en sus funciones, en igual fecha, sin necesidad de un acto administrativo fundado que así lo señale o establezca, sino por el solo ministerio de la ley. De aplicarse correctamente las normas infringidas la sentencia debió declarar que el término de la contrata de la denunciante, se ajustaba a la legalidad vigente, de manera que no hay conducta antijurídica, por lo que no puede constituir vulneración de derecho que resguardar en el procedimiento de tutela laboral. 30.- Que el artículo 7º de la Ley Nº 18.961, Orgánica Constitucional de Carabineros de Chile establece que la Dirección General podrá contratar en forma temporal, cuando las necesidades del servicio lo requieran, a profesionales, técnicos, administrativos y trabajadores a jornal o a trato, quienes quedarán sometidos a la jerarquía y disciplina de Carabineros de Chile y demás materias que determinen las leyes, en lo que sea pertinente. El artículo 11 del DFL Nº 2, de 1968 sobre Estatuto del Personal de Carabineros de Chile establece la clasificación del personal de Carabineros de Chile en personal de nombramiento supremo y personal de nombramiento institucional, y el artículo 1º de la Directiva del Personal Contratado por Resolución establece que el personal contratado desempeñara funciones en forma transitoria, sin constituir escalafones ni ocupar plazas de la planta institucional, por el lapso que la resolución determine o mientras sean necesarias sus funciones, pudiendo durar como máximo hasta el 31 de diciembre de cada año; y el artículo 57º de la misma Directiva dice que es causal de término del contrato por resolución el vencimiento del plazo de la contratación. 31.- Que en el motivo segundo, numeral uno, de la sentencia impugnada, el tribunal a quo fija como hecho no controvertido que la denunciante Paola Betancourt Recabal ingresó a Carabineros de Chile con fecha 26 de septiembre de 2006, mediante la modalidad de personal Contratado por Resolución (CPR); que ingresó en calidad de telefonista grado 16, desempeñándose en la Central de Comunicaciones de carabineros CENCO Coronel; y que el término de la relación se verifica el 31 de diciembre de 2015, con ocasión del término de su contrata. En el raciocinio noveno el sentenciador señala que la relación contractual se extendió hasta el día 31 de diciembre de 2016 y que por acta de notificación de 28 de noviembre de 2015 se le comunicó a la actora la decisión de no prórroga de su contratación para el año 2016, dando clara cuenta dicha acta “de la terminación de la contratación de la CPR Betancourt por vencimiento del plazo”. En el razonamiento décimo cuarto indica que las partes están contestes en que “a la actora se le puso término a su contrato a contar del 31 de diciembre de 2015, por vencimiento del plazo”. 32.- Que en su libelo el recurrente sostiene que el sentenciador no aplica las normas legales, de modo que, según ésta sentencia, los empleos a contrata en Carabineros ya no expiran por el solo ministerio de la ley, y que el “sentenciador exige para su término la dictación de un acto administrativo que sea suficientemente fundado”, lo que constituye una infracción formal del texto legal. Una atenta lectura del considerando vigésimo octavo de la sentencia en cuestión, en su globalidad, no permite sustentar la apreciación que hace el recurrente, por cuanto, en modo alguno el sentenciador refiere que sea necesario para la desvinculación de la actora la dictación de un acto administrativo suficientemente fundado, pues si bien emplea la expresión “fundamentar” no está aludiendo a la resolución por la cual se puso término a los servicios de la demandante sino a los hechos de la tutela laboral. 33.- Que cabe consignar que el procedimiento de tutela laboral tiene por objeto la defensa de los derechos fundamentales del trabajador en el ámbito laboral y, en ningún caso, modificar u obviar el estatuto laboral que rige a los funcionarios públicos, respecto de quienes lo que se pretende es aplicar- cualesquiera que sean las características del régimen de trabajo- un mismo estándar en cuanto al respecto de los derechos fundamentales por parte del empleador. 34.- Que, en consecuencia, en la forma expresada en los motivos precedentes, forzoso es concluir que en ningún caso es posible sostener que el fallo impugnado haya incurrido en las causales de nulidad invocadas por el recurrente, razón por la cual no queda sino rechazar el recurso deducido por el abogado Georgy Schubert Studer por el Fisco-Carabineros de Chile. Por estas consideraciones y lo dispuesto en los artículos 1, 3, 420, 456, 474, 477, 478 letra a), 479, 480, 482, 485, y 489 del Código del Trabajo; 7 de la Ley Nº 18.961,Orgánica Constitucional de Carabineros de Chile; 1, 11 y 13 del D.F.L. Nº 2, de 1968, sobre Estatuto del Personal de Carabineros de Chile, y 1, 56 y 57 de la Directiva del Personal Contratado por Resolución, se declara: Que SE RECHAZA, sin costas, el recurso de nulidad interpuesto por el abogado Procurador Fiscal de Concepción don Georgy Schubert Studer, por el Fisco-Carabineros de Chile, en contra de la sentencia definitiva de catorce de junio de dos mil dieciséis, pronunciada por don Cristian Rodas Riquelme, Juez Destinado del Juzgado de Letras del Trabajo de Concepción, y en consecuencia, se declara que la misma no es nula. Regístrese, notifíquese y devuélvase. Redacción del Ministro señor Juan Clodomiro Villa Sanhueza. Rol 193-2016. Reforma Laboral. RIT T-39-2016. RUC 1640008921-7. Juzgado Letras Trabajo Concepción. Pronunciada por los miembros de la Cuarta Sala de la Corte de Apelaciones de Concepción, integrada por los Ministros señor Juan Villa Sanhueza, señora Vivian Toloza Fernández y el Abogado Integrante señor Gonzalo Montory Barriga.
Indra Yáñez Fernández
Secretaria Subrogante
En Concepción, veintidós de agosto de dos mil dieciséis, notifiqué por el