Ana Marcela Ojeda Triana

INTRODUCCIÓN

El Estado colombiano dentro de sus programas de gobierno tiene contemplado como

política de objetivo la solución de vivienda para la población menos favorecida y que requiere de

carácter urgente un lugar donde vivir dignamente. Ante esta problemática y en cabeza de la

vicepresidencia de la República se formulan y ejecutan proyectos de vivienda de interés social en

terrenos baldíos adquiridos por el gobierno.

Lo importante y que de acuerdo a los estudios realizados para el desarrollo de este informe

es que el gobierno determine el perfil de vivienda que realmente solucione las necesidades de la

población que se beneficiará con ellas. De acuerdo a los hallazgos de este informe se ha podido

determinar deficiencias en todos los niveles del proceso, ubicación de terrenos, diseño, calidad de

los materiales, acabados y la aplicación de las normas de sismoresistencias mínimas para hacer de

la vivienda una construcción.

Con este informe se pretende dar a conocer estos factores y hacer un llamado a la reflexión

y la conveniencia de que estos proyectos se sigan ejecutando sin un control efectivo por las partes

que deben garantizar la ejecución del presupuesto adecuadamente y la seguridad de la personas

que van hacer uso de la vivienda.

La Universidad Uniminuto como Institución de formación profesional busca con este tipo

de informes generar en los estudiantes ética, capacidad de análisis y criterio que le permitan

desarrollar informes de evaluación que puedan ser utilizados como material de consulta por la

comunidad educativa y los sectores involucrados en la ejecución de proyectos de vivienda de

interés social.
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CARACTERIZACIÓN DE LAS VIVIENDAS DE INTERES SOCIAL

El Estado colombiano como galante de los derechos económicos, sociales y culturales de

todos sus ciudadanos establece en la Constitución Política:

“Articulo 51. Todos los colombianos tienen derecho a vivienda digna. El Estado

fijará las condiciones necesarias para hacer efectivo este derecho y promoverá planes de

vivienda de interés social, sistemas adecuados de financiación a largo plazo y formas

asociativas de ejecución de estos programas de vivienda.”, (C.P. de Colombia, 1991)

Así, a través de la ley 9 de 1989 deroga por la ley 388 de 1997, establece que los

municipios deben implementar en el Plan de desarrollo e identificar en el PBOT como parte de la

Función Pública del urbanismo, el acceso a la vivienda cumpliendo las necesidades básicas y a

su vez que sea sostenible y sobre todos los casos se promueva la protección al medio ambiente y

la prevención de desastres, dando paso como prioridad a los proyectos de viviendas de interés

social.

La vivienda de interés social en Colombia tradicionalmente es fomentada por las Cajas

De Compensación Familiar y por Fonvivienda1, sin embargo a partir de las políticas

gubernamentales nacionales del año 2003 se generó el Boom del “Impulso a la vivienda y a la

construcción” (Uribe Vélez, Hacia un Estado Comunitario, 2002-2006), pasando hacer un

punto principal en el Plan Nacional De Desarrollo Nacional, fortaleciendo la descentralización y

1 Fondo Nacional de Vivienda (Fonvivienda), es una entidad pública, adscrita al Ministerio de Ambiente, Vivienda
y Desarrollo Territorial, creado en ejercicio de las facultades extraordinarias conferidas por artículo 16, literal f) de
la Ley 790 de 2002, y reglamentado mediante Decreto No. 555 del 10 de marzo de 2003.
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la responsabilidad municipal por medio de subsidios para las comunidades más vulneradas y se

puede decir que antecede en la actualidad a la maratónica actividad de entrega directa de

viviendas a nivel nacional a través de la vicepresidencia en el Plan de Gobierno del Actual

Presidente Juan Manuel Santos “Crecimiento Sostenible y Competitividad” (Santos Calderon,

Prosperidad para Todos, 2010-2014) y “Colombia Equitativa y sin Pobreza Extrema” (Santos

Calderon, Todos por un Nuevo País, Paz, Equidad, Educación, 2014-2018).

Ahora bien, para hablar de viviendas de interés social, se debe conceptualizar sobre el

tema de la vivienda digna, argumentando que son inmuebles donde se garantiza la seguridad,

paz y dignidad de las personas2, en entornos de desarrollo social que permitan la inclusión y

actividades económicas para su sustento, siendo así y en cumplimiento con las leyes y la

Constitución Política, en Colombia se deben salvaguardar la necesidad de infraestructura que

cuubra las competencias de generación de vivienda de interés social y la mejora de las viviendas

construidas de forma: formal e informal, de aquí la importancia de estudiar del vuelco total que

se le ha dado al concepto de vivienda digna a través de los proyectos de interés social que

buscan a todo modo cumplir amplios márgenes de habitacionalidad versus a los costos y

requerimiento mínimos para una vivienda digna.

Como se había mencionado anteriormente a partir del año 2003, Colombia se centra más

en la generación de vivienda para los sectores más vulnerables, ya sea parte de la población

desplazada por la violencia o de extrema pobreza, para esto genera proyectos de interés social de

forma masiva en todo el territorio nacional transformado totalmente el diseño de la unidad

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Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales (CESCR) ONU
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residencial, en algunos casos de forma gratuita y otras subsidias, contemplando que deben ser

casas de bajo costo tanto para el material como del terreno M2 a utilizar.

Por consiguiente no solo se debe estudiar la población a beneficiar, ya dentro del ámbito

profesional de la construcción corresponde considerar aspectos que den una verdadera solución

de forma sostenible al déficit habitacional, de tal manera que se permee las óptimas condiciones

para el ser humano tanto en lo particular como en núcleo familiar. Por consiguiente se definen

lineamientos para el diseño de estos proyectos, los cuales van desde la bioclimática, geografía,

acceso a servicios públicos y el ciclo de vida de los materiales, siempre acompañados de las

buenas prácticas constructivas y a su vez que sea amigable con el medio ambiente.

De acuerdo al clima, en las regiones calurosas como bien lo menciona el artículo

Análisis y caracterización de la vivienda de interés social (Rengifo , 2011)., se debe jugar con los

ejes eólicos con el fin de mitigar las altas temperaturas y la ventilación y siempre establecer

zonas de jardín y patios para efectos de sombra en el enfriamiento de la construcción.

Del diseño en general son dos habitaciones, un baño, zona de sala – comedor, cocina,

patio y jardín todas en función al buen ambiente para la prolongación de la salud física y mental.

Morfología tipo damero que permite la ubicación por cuadras o manzanas para máximo

aprovechamiento del M2 por unidad residencial, adicional que también proporciona ventilación y

mejor posición frente a la exposición solar. Estructuralmente por costos se busca la

implementación de materiales que cumplan las mismas resistencias y que su vez sean cubiertas a
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diferencia de los materiales comunes, aplicando propuestas arquitectónicas autoportantes3 que

den buen aspecto a la vivienda.

Dentro del orden urbanístico estos proyectos se ubican como propuestas urbanas para la

rehabilitación de zonas deprimidas como tendencia de desarrollo, ampliando la productividad y

por ende entornos sociales estables.

Todo lo anterior bajo las buenas prácticas constructivas y apegadas a ley en función a la

vivienda digna como solución a largo plazo para el déficit habitacional por falta de capacidades

económicas, sin embargo de esta buen voluntad política, emana una problemática que salta todos

los principios ya antes expuesto y convierte la solución de vivienda a largo plazo a corto plazo

más la consecuencias sociales, las deficiencias constructivas y de saneamiento básico.

Las Deficiencias Constructivas y de Saneamiento Básico

No ajenos al siempre debate de lo barato sale caro, la forma masiva en la que se

construyen los proyectos de interés social, los costos bajos de la vivienda y si le sumamos las

situaciones de corrupción que rodean estos proyectos, es fácil obtener un problema más: la

deficiencia constructiva y el cumplimiento a los mínimos requerimientos de saneamiento básico.

Como bien se aclaraba, los proyectos de interés social tienen como objetivo cubrir el

déficit habitacional a largo plazo por medio de políticas económicas que faciliten el acceso a

vivienda para las comunidades más vulneradas; caracterizadas por el bajo costo define una línea

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Las cubiertas autoportantes son una alternativa en el mundo de la construcción. Está basado en el principio de que
está cubierta debe funcionar también como elemento resistente.
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muy delgada entre la ética profesional y las buenas prácticas constructivas por parte de los

contratista.

Pero ¿Que son las buena prácticas constructivas?, como bien lo mencionaba el estudio

(Buenas Prácticas Constructivas), las Buenas Practicas Constructivas son aquellas viviendas que

cumplen los mínimos de sismoresistencia contemplados en la normatividad del NSR -104.

Estos fenómenos de construcción no solo preceden a las viviendas de interés social, pues

como se analizaba en el estudio también se debe al informalismo de la construcción, la cual hace

aún más precarias su existencia constructiva y convierte una solución de vivienda de largo plazo

a una solución temporal, pasando hacer esta una problemática para el Departamento De

Planeación Nacional, al atentar a las condiciones de vida en esta viviendas más la

implementación de estrategias ante los desastres que se puedan generar.

A modo que las principales fallas que se pueden observar son:

Primero: la deficiencia estructural de las cargas en columnas y vigas sin su

confinamiento, abren paso a las grandes grietas que se pueden evidenciar fácilmente, para lo cual

se arremete a la falta de cálculos por parte de profesionales, a raíz de estos, los correctivos

sugeridos van desde la construcción de nuevas vigas y columnas hasta el punto de demoler y

construir un sistema adecuado de contención que cumpla la norma sismoresistente.

Segundo: psicológicamente el concreto da la perspectiva de seguridad, fuerza y duración,

por eso es relevante en todo tipo de construcción, sin embargo para estas construcciones y de

forma antiética (reducción de materiales y/o de mala calidad) las segregaciones del concreto no

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Diseño y reglamento colombiano de construcción sismoresistente
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es las requerida en concepto de resistencia lo que hace que se tenga un concreto poroso y por

ende la perdida constitutiva de sus propiedades físicas.

Tercero: las vigas presentan una flexión excesiva, lo cual acude a su deformación y/o

desplazamientos y a su vez al daño de cubiertas, mampostería y acabados, es de fácil

observación y por ende de alto riesgo para los habitantes de la vivienda.

Cuarto: EL uso inadecuado de los materiales respecto a las resistencias esperadas,

ejemplo del bloquelon cerámico para escaleras y la construcción de pie d amigos para el soporte

de voladizos.

Quinto: el acero expuesto en estas construcciones da vía libre a la corrosión, lo que

amerita primero al daño estructural lo que podría llevar a la perdida de vida y en segundo a la

desvalorización de la vivienda por grietas y desprendimiento del concreto.

Sexto: la mala planeación de las zonas húmedas, tuberías eléctricas y demás del

saneamiento básico aceleran el deterioro de los materiales usados a su alrededor, sin dejar de

lado las condiciones de salubridad que se deben mantener para el óptimo desarrollo y confort de

las personas que la habitan.

Todas estas observaciones, con llevan al análisis de la falta de intervención de las

políticas nacionales para el cumplimiento a cabalidad de calidad en las construcciones, teniendo

en cuenta que a la fecha se encuentra ciento de denuncias frente a uniones temporales

contratadas por el gobierno y que presentan tanto daño estructurales como problemas de licencia

de construcción, generando así deterioro patrimonial, por el mal uso de los recursos públicos

destinados a proyectos de vivienda los cuales no cumplen los requisitos especificados en la ficha

técnica o no fueron entregados, dando incumpliendo al Art. 51 de la C.P. de Colombia de 1991.

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A lo que acude, la tercerización del Estado al proporcionar estos proyectos por licitación o actos

públicos, que ameritan la mala planeación y la reducción de costos a todo dar, generando

proyectos que pasan de ser soluciones a problemas sociales.

Conclusiones

Como futuros profesionales en el campo constructivo, es importante recalcar y hacer uso

de la ética profesional como lineamiento para las buenas prácticas constructivas, como

conocedores de temas estructurales y de resistencia basados en las normativas colombianas,

tenemos toda la responsabilidad de las consecuencias en las pérdidas materiales como humanas,

adicional somos parte del desarrollo del país y por ende se debe contribuir de forma socialmente

responsable, por encima de cualquier premisa de bajo costo, ganancia y sobre todo al quiebre de

la corrupción que en su mayoría es la que incide en los proyectos de vivienda de interés social al

estar de por medio recursos públicos.

 Ana Marcela Ojeda Triana

Bibliografía

Buenas Prácticas Constructivas. (s.f.). En Información recopilada por La Universidad Distrital.

Rengifo , C. (2011). En Analisis y Caracterización de la Vivienda de Interés Social.
Santos Calderon, J. M. (2010-2014). Prosperidad para Todos. En J. Santos Calderon, Plan
Nacional de Desarrollo.
Santos Calderon, J. M. (2014-2018). Todos por un Nuevo País, Paz, Equidad, Educación. En J.
Santos Calderon, Plan Nacional de Desarrollo.
Uribe Vélez, Á. (2002-2006). Hacia un Estado Comunitario. En Á. Uribe Vélez, Plan Nacional
de Desarrollo.
Uribe Vélez, Á. (2002-2006). Hacia un Estado Comunitario. En Á. Uribe Vélez, Plan de
Desarrollo Nacional.
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