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En este trabajo se da un vistazo al origen de la palabra “coach”, así como también, una
reseña sobre las principales ideas de los pensadores antiguos que forman las bases de
lo que hoy en día es el coaching.
Por otro lado, también se abordan las aportaciones que ha realizado la filosofía al
coaching a través del tiempo.
1
1. Origen de la palabra Coach
La historia apunta hacia los siglos XV y XVI, cuando empezó a hacerse muy
popular la ciudad húngara de Kocs, situada a unos 70 kilómetros de Budapest,
(entre Viena y Pest) y convertida en parada obligada para todos los viajes entre
las dos capitales. En esta ciudad de Kocs empezó a hacerse muy común el uso
de un carruaje caracterizado por ser el único provisto de un sistema de
suspensión. Además, destacaba por su comodidad frente a los carruajes
tradicionales. En este punto empezó a hablarse del kocsi szekér, o sea el ‘carruaje
de Kocs’, símbolo de la excelencia. De esta forma, el término kocsi pasó al alemán
como kutsche, al italiano como cocchio y al español como coche. En serbocroata,
se dice kocsikázik para designar la acción de dar un paseo en coche.1
De la ciudad Kocs, se formó la palabra kocsi. En una obra de Fonseca de 1549, coche
aparece integrada en el léxico español, según atestigua el Diccionario de Autoridades
(1729, s.v.).
1
http://www.esespasa.com/esespasanw/esp/3/5/15_05_02.htm
2
De Ávila, Luis y Zúñiga, Comentario de la Guerra de Alemania: hecha por Carlos V, máximo emperador romano,
rey de España, en el año del MDXLVI y MDXLVII, Impr. de F. Xavier García, 1767, pág. 146.
3
Zeus, Perry y Skiffington, Suzanne, Coaching práctico en el trabajo, Editorial Mc. Graw Hill, 2002, pág. 8.
2
1500 (Inglaterra):
o Se acuña el término coach en Inglaterra (significaba carruaje que
transportaba gente de un lugar a otro)
1850 (Inglaterra):
o El término coach se emplea en las universidades inglesas para designar a
un tutor o persona que ayudaba a los estudiantes a preparar exámenes.
1930 y 1940:
o Individuos asistidos por una especie de mentor para convertirse en otro
mentor.
1960 (New York):
o El coaching personal comenzó siendo un programa educativo para
individuos desaventajados.
1960 y 1980 (Canadá):
o Se fusiona el coaching personal y el coaching empresarial. Por primera vez
se considera al coaching como una profesión con formación y credenciales
para coaches.
1980:
o Surge el concepto de coaching ejecutivo como una nueva y poderosa
disciplina.
2004:
o Hoy en día, las organizaciones e instituciones educativas, tales como
Harvard School of Business, reconocen las relaciones entre el coaching y
la eficacia del líder.4
2. Influencia de Sócrates
4
Ravier (2005, pp. 80-82).
3
1. Ironía: A través de la ironía Sócrates lograba que su interlocutor reconociese su
ignorancia a partir de la cual estaría preparado para la búsqueda de la Verdad.
2. Mayéutica. A través de la cual se busca la Verdad. La búsqueda consiste en un
progreso en la exactitud de las definiciones elaboradas. Mientras más correcta la
definición más cerca de la Verdad (definición Universal) se encontrarán.
La idea básica de la filosofía socrática que tiene gran correspondencia con el coaching,
podemos leerla en una de sus citas: “No existe el enseñar, sino sólo el aprender”.
Este es quizá, el primer paso, dentro del proceso del coaching: que nuestros clientes
sean conscientes de su incompetencia, paso necesario y anterior al desarrollo de las
competencias en busca de sus objetivos.
Lo que se busca en estos procesos se puede resumir en una “paradoja” basada en dos
premisas:
No podemos confiar en nuestro propio conocimiento dado que muchos de ellos no tienen
base racional (fundamento o razón de ser).
Esta “paradoja”, es fundamental como base metodológica del coaching: todos tenemos
conocimiento en nuestro interior, la cuestión está en descubrir ese conocimiento bajo las
pautas del “autoconocimiento”, pudiendo ser potenciado con la ayuda de un coach, así
como lo hacía Sócrates con sus discípulos, “dando a luz bellas ideas” como comadrona
4
de almas, a través de lo que él llamaba “método de la partera”. Más aún, Sócrates
pensaba que, cuanto más nos aproximamos a las definiciones exactas, más cerca
estaríamos de la verdad.5
3. Influencia de Platón
Resulta muy difícil reconocer dónde termina la filosofía de Sócrates y donde comienza la
de Platón.
Es sabido que Platón no fue influido sólo por los pensamientos y métodos de Sócrates,
sino también por Pitágoras, entre otros.
Las obras filosóficas de otros autores de la época de Platón, no estaban escritas en forma
de diálogo, sino que predominaban el lenguaje técnico y el uso impersonal en tercera
persona. Platón decide escribir en forma de diálogo evidentemente como tributo a su
maestro Sócrates, y este tributo es una muestra de que Platón compartía y reconocía la
solidez y valor de este método.
5
Ravier (2005, pp. 30-34).
5
El coaching no plantea la necesidad de tomar las posturas ideológicas de Sócrates o de
los sofistas, ni de ningún otro filósofo o pensador, sino más bien de reconocer el potencial
y la fuerza del método socrático.
Resulta importante aclarar que el coaching no sostiene una ideología o forma de ver el
mundo en particular, sino que se asemeja a un “recipiente vacío” que trabaja con el
conocimiento del cliente. El coaching es un proceso, una metodología particular que
hace de catalizadora del potencial del cliente, a través de su propio conocimiento.
Entre Sócrates y Platón la idea de que el conocimiento existe dentro del hombre y su
preocupación por aflorarla a través de la conciencia hacia el exterior, tiene como
fundamento dos creencias distintas e incluso contrapuestas una de otra.
Sócrates cree en la verdad absoluta, de origen divino, y la metodología de dar a luz esta
“Verdad” es a través del diálogo.
Sin embargo, Platón utiliza la misma metodología debido a la aceptación de las teorías
de la preexistencia del alma y de la reminiscencia (reencarnación), motivo por el cual
explica que el alma posee conocimiento dentro de sí misma (producto de las vidas
pasadas), doctrina aprendida en la escuela de Pitágoras en muchos aspectos contrarios
a las de su maestro Sócrates.
Sócrates pensaba que nada podía enseñarse, sino tan sólo en caminar a los demás en
la buena dirección, y esta idea es la que Platón propone y desarrolla. No se puede obligar
a nadie a aprender, ni podemos abrir las cabezas de las personas para meter los
conocimientos en ellas. Sólo se puede mostrar el camino, para que cada cual piense por
sí mismo.
Platón se vio influenciado por algunos postulados sofistas del relativismo, a saber:
“Todas las sensaciones dependen del estado del observador”.
6
Para Platón, pues, habría un mundo de la verdad abstracta y un mundo de las
apariencias, accediendo al primero por la razón y al segundo por la engañosa vía
sensorial, de la que había que apartarse, asumiendo la dialéctica filosófica: sin la filosofía
el hombre no tendría conocimiento y sin éste no existiría orientación de cómo vivir y cómo
organizar la vida social.
1. La idea de que hay algo “oculto” y “esencial” para el hombre que debe ser
descubierto.
2. Su alegoría consigue que coexista la “idea del cambio” y lo “absoluto”. El hombre
está en permanente cambio. No somos lo que somos, sino lo que vamos siendo
día a día.
Peldaños o estados del entendimiento según Platón:
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y/u objetivo a conseguir, pero aún no tiene el “conocimiento” pleno y la
“inteligencia” para desarrollarlo y llevarlo a cabo.
4. El cuarto y último peldaño se definen dos términos: Episteme y Noesis (gr.
conocimiento, inteligencia). Para Platón es el estado verdaderamente filosófico.
Cuando participas del mundo de las formas. Aquí no sólo razonas sino que
percibes las formas. En nuestra comparativa podríamos decir que nuestro cliente
ve claramente su objetivo, tiene las razones y métodos para conseguirlo. 6
4. Influencia de Aristóteles
Aristóteles creía en la existencia de una sola realidad material que tiene dos aspectos, el
fisiológico y el mental. El alma es la forma del cuerpo, inseparable de él, aunque sea
posible analizar por separado cuerpo y alma.
Aristóteles procede del estudio de los objetos al estudio de los actos, de la consideración
de éstos al estudio de las funciones y desde este conocimiento al principio del alma.
El proceso cognitivo,
La motivación y
El aprendizaje que él mismo ha desarrollado en su filosofía.
Para Aristóteles el proceso cognitivo se puede determinar en tres etapas:
1. Sensación (esta sensación es verídica, dado que los sentidos cumplen una
función pasiva y receptora de información).
6
Ravier (2005, pp. 35-44).
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2. Fantasía y Memoria. La fantasía percibe y conserva las imágenes sensoriales (no
son necesariamente verídicas). La memoria sitúa y ordena las imágenes en el
tiempo pasado (sin imágenes no puede haber memoria).
3. Pensamiento o Entendimiento. Partiendo de las imágenes, elimina lo accidental y
conserva lo esencial por medio de la abstracción, es decir establece un juicio
sobre las imágenes para llegar al pensamiento o entendimiento.
En las sesiones de coaching cada detalle, palabra, gesto o pensamiento tienen un valor
exponencial. Cualquiera de estos componentes (de carácter sensible y particular) puede
ser el “catalizador”, o referente, del asunto en cuestión (de carácter genérico y universal).
7
Ravier (2005, pp. 70-73).
9
Sócrates Platón Aristóteles
Creó un método que Se reconoce la Aristóteles, como
promovía el empleo del estructura de sus realista, se contrapone
diálogo para llegar al diálogos, como si diametralmente a la
conocimiento y que fueran sesiones de filosofía idealista de
solía utilizar con sus coaching primitivas. Platón.
discípulos. Se sentaba Una de las Su principal aporte fue
a conversar con ellos y, conclusiones más la idea de que el
a punta de hacerles evidentes del análisis hombre puede llegar a
preguntas, al final de sus diálogos es la ser quien desee ser,
lograba que sacaran a importancia de las mediante la acción
relucir los preguntas como positiva, pasando de
conocimientos que herramienta de trabajo una situación presente,
tenían dentro. Lo que potencia las “el ser”, a una situación
bautizó como conversaciones deseada “el deber ser”.
mayéutica. (diálogos), y que sirven Aristóteles creía en la
Otra influencia propia de método para la existencia de una sola
de la filosofía socrática adquisición del realidad material que
es que se ayuda a que conocimiento en tiene dos aspectos, el
el cliente, en ciertos nuestros clientes. fisiológico y el mental.
momentos, sea Platón disentía en El alma es la forma del
consciente de sus algunos aspectos cuerpo, inseparable de
incompetencias, para ideológicos con su él, aunque sea posible
luego estar en mejor maestro Sócrates, y sin analizar por separado
posición frente a la embargo entendía el cuerpo y alma.
consecución de sus valor de las
objetivos. conversaciones tal
como le enseñó su
maestro.
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5. Influencia de la Filosofía Existencialista
8
Ravier (2005, pp. 84-85).
11
objeto bajo una apariencia concreta, y afirmó que la direccionalidad, que él llamaba
“intencionalidad”, era la esencia del conocimiento. La fenomenología trascendental,
según Husserl, era el estudio de los componentes básicos de los significados que hacen
posible la intencionalidad. Posteriormente, en Meditaciones cartesianas (1931), introdujo
la fenomenología genética, a la que definió como el estudio de la formación de esos
significados en el curso de la experiencia.
La fenomenología rechaza toda absolutización del mundo. El mundo debe percibirse tal
como se presenta a cada uno de nosotros, según nuestras propias percepciones y
experiencias individuales. Descubriendo lo que el mundo es para mí, descubro quién y
qué soy yo.
9
Ravier (2005, pp. 88-91).
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El coaching valora la “peculiaridad de la persona”, en el sentido que reconoce que cada
ser humano es diferente, y cada objetivo/problema debe ser tratado siempre de manera
particular y nunca general.
Por otro lado, el coaching trabaja con la “conciencia” y deja a un lado el aspecto
“inconsciente” del ser humano. Es a través de ella y gracias a ella que los clientes
consiguen determinar quiénes son, qué quieren y cómo conseguirlo. Por lo tanto es la
conciencia la que otorga libertad y capacidad de elección en todos los asuntos de la vida
humana.
Una teoría del conocimiento es un conjunto de ideas que tratan de explicar lo que es el
conocimiento y cómo se desarrolla en las mentes de las personas. Por ejemplo, una de
esas teorías afirma que el conocimiento es innato. Otra teoría afirma que el conocimiento
es un mero reflejo de la experiencia. La teoría de Piaget establece que las personas
construyen el conocimiento de forma activa –es decir, construyen sistemas de creencias
robustos– a partir de sus experiencias con el mundo. Por esta razón él llamó a su teoría
constructivismo. Si uno piensa que el conocimiento es simplemente un reflejo de la
experiencia externa, entonces la educación consiste en suministrar las experiencias
“correctas”, mostrándoles a los niños la manera de hacer las cosas, y decirles las
respuestas “correctas”. La educación convencional se encuentra largamente basada en
estos tipos de teorías. Pero si usted piensa, como Piaget y Papert lo hace, que la
educación es activamente construida por el niño, entonces la educación consiste en
proporcionar oportunidades para que los niños se enfrasquen en actividades creativas
10
Ravier (2005, pp. 92-93).
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que alimentes este proceso constructivo. Tal como Papert ha establecido, “El mejor
aprendizaje no vendrá de encontrar las mejores formas para que el profesor instruya,
sino de darle al estudiante las mejores oportunidades para que construya”. Esta visión
de la educación es lo Papert llama constructivismo.
En los últimos veinte años, Gallwey ha introducido el concepto de “The Inner Game” en
corporaciones que buscan nuevas técnicas para manejar el cambio. A través de
conferencias, consultoría, y seminarios, su enfoque se ha dirigido a tres objetivos:
11
Ravier (2005, pp. 110-111).
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Su influencia en el coaching se manifestó gracias a la divulgación que John Whitmore,
socio de The Inner Game en Inglaterra, ha realizado del coaching en el mundo entero,
donde menciona como fuente principal de su estilo de coaching al propio Gallwey.
Bibliografía consultada
Ravier, L. (2005). Arte y ciencia del coaching. Su historia, filosofía y esencia. Buenos
Aires: Editorial Dunken.
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