You are on page 1of 18
ALTRUISMO: UNA PERSPECTIVA NATURALISTA DARWINIANA* sea sangre de los méstires ex la semi dela iglesias Con ee escalate litado, Tertulono, teélgo del siglo Il, confesé la fala fundamental del clio bum, sna insinuarin de gue el propésit del secifaeselvar wt _g7ip0 bmn por enc debra, La generoidad sin reiprocidad sla ais rara “y apreciada dels condusas buona, sui fl de afr dsribnida en un “painén aamente selective, rdeada por rtwale y circunsiania,y brad par ‘medallonesy dscrtos eneionaes. Santicames el werdader atrizma co finde rcempensare ast bacerodfiimente verdadero, pore medio prowover “ae ocurrancia entra, El aliraisovo humane, para decile brevemente, etd setuado bata fundaonentos con la ambivalenia manera que es desperate. EO. Wuso: Sabre la nataralege humana (1978, 149) Incluso antes de que Charles Darwin publicara su Origen de las Espeies en 1859, los evolucionistas —en particular Herbert Spencet— estaban usando su teoria como base para la ética. Ellos sintieron que en una era moderna, donde se observaba una rapida urbanizacién e industrializacién asi como el surgimiento de una clase media educada que vivia de sus habilidades mas que de su herencia, la ética del pasado — particularmente la ética de cristiandad— ya no era adecuada, Debfa ser reemplazada por una nueva y visionaria ética cientifica apropinda para la época. La evolucién era Ia clave, (Véase Spencer 1851, 1892: Ruse 1994, 1996, 2000.) ‘Como es bien sabido, la ética evolucionista —o, como ha sido llamada, el «cdarwinismo socialp— fue una poderosa y abarcadora doctrina 0 conjunto de creencias. Como es igualmente conocido, ésta fue severamente citicada desde su apaticién: no sélo por tedlogos y pensadores del mismo corte, sino también por filésofos seculares. En particular, G. B. Moore en sus Prindpia Ezhiea (1903) trat6 muy severamente las propias ideas de Spencer. Yo mismo he criticado en muchas ocasiones el darwinismo social, tanto la versin tradicional como Ie actualizada (Ruse 1985, 1998). No es mi propésito aqui referieme nuevamente a esa doctrina; no obstante, diré para ser justo que hay mucho més para decis a su favor que lo que ha sido frecuentemente permitido porla critica tradicional. En este articulo, enfocado més bien en la importante nocién de altrdimmo —acerca de cuyo significado diré més en un momento—, quiero proponer una ética evolucionista alternativa: una que preste tanta atencién al evolucionismo, particularmente al evolucionismo contemporéneo, como Ja que le presta el darwinismo social. Especificamente, quiero ofrecer una ética evolucionista que u el evolucionismo darwiniano contemporineo, que versa sobre el comportamiento social y leva el nombre de esociobiologfan. Ademés, quiero argumentar que ésta nos ofrece una posicién plausible, que deberfa recomendarse por si misma a la linea ms, dura de pensadores de le ética, No estoy seguro de qué tan original es mi pensamiento. Sospecho que hay al menos pistas de la posiciéa que tomaré incluso en los propios escritos de Darwin, especificamente en el Origen de! Hombre. Pero mi objetivo aqui tiene menos que ver con origenes y créditos, y mucho mds con exposicién. Deberia deci, sin embargo, que pienso que mi posicién esti muy en linea con Ia tradicién saga — revista de estudiantes de filosofia. N® 10. Marzo de 2005. 95-110. Micuas. Ruse Florida State University Traduccién de Maxinstano ‘Martinez & FerNanpo Msto Universidad Nacional de Colombia * La trvcin de ee eto se publics aqui con el male permiso del avtor. Low teaductoresquieeen agradecer 4 Manuela Fernindex y Javier Guillot por su gens evision dela tadoesin abe acinar que lot radue tores doptaron Ie politica de ‘mantener literal del sto inglés en la medida de lo posible 96 saga ‘Niimezo 10 - 1/2005 Siloséfica de David Hume. Si un critico objeta que tengo muy poco que decir que no se encuentre en el Thetado sobre la naturale bureane, lo tomaré més como un elogio que como una condena. ‘Como siempre en las discusiones filoséficas acerca de ética y motal, ¢s til hacer ‘una doble distincién entee «ética sustantiva» 0 anormativan y «netaéticay, Porla primera entiendo aquel dominio en el que se pregunia acerca de lo que uno debe hacer, como en «ama atu vecino como a ti mismo 0 «trata 2 los demés como fines més que como medios», Por la segunda entiendo en el dominio en el que se pregunta acerca de por qué uno debe hacer lo que debe hacer, como en «sigue el Sermén de la ‘Montatia porque es el deseo de Dios» 0 «acta tinicamente de manera que evites contmadicciones sociales». Yo soy consciente de que hay quienes cuestionan la distincién sustantivo/metaético, pero para los més bien amplios propésitos que tengo en este acticulo, esta distincién nos servira bastante. ‘BIOLOGIA EVOLUGIONISTA MODERNA Mi posicién es realmente una posicién naturalizada. Debo explicar que por coaturalismon entiendo en este contexto usar los métodos de las ciencias empiticas 0 Jas conchusiones de ellas en nuestras inquisiciones floséficas (Ruse 1994, 1999). Distingo caaturalismon de «cientificismo», entendiendo por este iltimo la cteencia de que la ciencia puede resolver todos los problemss. No estoy seguro de que esto sea verdad. Sin duda alguna, socialmente dudo bastante de su verdad, peto es algo que aqui no me conciemne. Soy un naturalists flos6fico y este acticulo es un ejercicio en naturalism filoséfico, pues estoy intentando trabajar al modo del cientifico, usando las conclusiones del cientifico, Ya que en este articulo quiero presentar una versién moderna de la ética cevolucionista, iniciaré por ello con una discusién acerca de las bases cientificas sobre las cuales estoy fundamentando mis argumentos. No argumentaré en favor de esta posicién cientifica: otros y yo lo hemos hecho ya muchas veces en otros lados (Ruse 1982). Simplemente la estoy exponiendo, Especificamente, voy a exponer los argumentos bisicos de a teorfa evolucionista darwiniana acerca del comportamiento social, particularmente aquellos pertinentes a nuestra propia especie hom sapiens. Comienzo con et argumento central de que todos los organismos, incluyendo nosotros mismos, somos productos de la evolucién, es decir, un largo y lento proceso natural (imitado por leyes) de desarrollo a partir de, como Darwin dijo, «una o unas cuantas formas». Concedo aqui que el principal método de cambio evolutivo es aquel que es alimentado por el proceso caustl conocido como seleccién natural. Darwin mismo llamé la atencién sobre el hecho de que nacen més orgenismos de los que posiblemente puedan sobrevivir y reproducirse, y esto leva alo que él (Giguiendo a Robert Maltin) llamé una qlucha por la existencian. Ciertamente, como Darwin lo reconocié, lo que es aun mis importante es que se trata de una lucha por 1a reproduc. Los oxganismos vienen en muy diversas clases y hay una fuente constante de neva variacién heredable. El éxito en la lucha es una funcién de esta variacion heredable, y aquéllos que de hecho sobreviven y se reproducen tienden a ser diferentes en promedio de aquéllos que no lo hacen. Bsto es lo que Darwin llamé «seleccién natura: dado un tiempo suficiente ella conduce a una evolucién completamente desarzollada. Un hecho absolutamente central para el darwinista es que la evolucin no es sélo un proceso aleatorio, sino que més bien promueve caracteristicas que ayudan a quienes las poseen en la batalla para sobrevivir y reproducirse. La evolucin Michael Ruse —_Altruismo: Una perspectitiva naturalista darwiniana a través de la selecciéa natural produce cosas como manos, ojos, dientes, narices, penes y vaginas: cosas conocidas como «adaptaciones», Darwin reconocié que el comportemiento es tan impostante en la hucha como lo son las caracteristicas fisicas. Por ello, el comportamiento animal debe en s{ mismo ester sujeto a la seleccién natural. Darwin también advirtié que el comportamiento, incluso en la lucha por la existencia, no necesariamente implica un combate al que se dediquen todas las fuerzas. A menudo puede haber muy buenas razones para la cooperacién, es decir, para el comportamiento social. Los bidlogos evolucionistas se refieren a esta cooperaciéa como «altruismos, yes importante de una ver aclarar al sentido en el cual este término ha sido utilizado. Altruismo, cuando es usado en el lenguaje comiin —como en «el altruismo de la Madre Teresa hacia los pobres de Caleta fue verdaderamente una cosa de santos, significa dary cuidar sin pensaz en recompensa alguna, actuando y pensando de ciesta manera simplemente porque es buena y correcta. Si bien yo dudo que cualquier evolucionista quiera negar la plenitud de significado y valide de este término (aunque uno pueda cuestionar su ‘uso en una situacién particular), éste no es el sentido del término uiilizado en biclogla. Aqui el uso es metaférico: significa actuar 0 favorecer otro porque ello promovert mis propios fines de supervivencia y/o reproduccién. En lo absoluto existe aqui alguna implicacién de conciencia o intencionalidad, y a menudo, por supuesto, es completamente aceptado que el «altruista» biolégico es cualquier cosa menos un pensados o ua agente moral libre. Debido a que se trabsja aqui con una mevéfora, cuando hable literalmente del tipo de altruismo de la Madre Teresa, me referieé 2 &l simplemente sin comillas, y cuando hable del «altruismo» biolégico usaré comillas. Hago esto para mantener las dos nociones separadas y en ningtin sentido implico (como lo han sostenido algunos filésofos) que el senstido biolégico es ilegitimo © de segunda categoria. Usamos metiforas todo el tiempo en nuestro pensamiento y habla —no podemos funciona: sin la metifore— y particularmente en biologia evolucionista la metéfora juega un papel muy importante y crucial. Piénsese en seleccién natural, paisaje adaptativo, carrera armamentista, para tomar sélo tres. Veo el altruismo» como paste de una compleja red de metéforas de intencionalidad o disefio que estin asociadas con In teleologia o fancionalidad de la seleccién natural productora de adaptaciones — como en «el ojo esti disefiado para la visién» o alos dientes existen para masticar comida 0 ela calvicie masculina no tiene fancién directa», No tengo ningin problema con la nocién de «altruisto» biolégico, solamente en tanto sea entendida tal y como debe set, nada més ni nada menos, Entre paréntesis, y como ayuda para una mejor comprensién, debo admitir que, al igual que en In mayorla de las metiforas nuevas, hay cierta ambigiedad en la literatura para precisar el significado de saltruismo» biolégico. Muchos, como por ejemplo Edward O. Wilson en su clisico Sociobialeta, la nucua sinters (1975), sugieren que caltruismo» biolégico simplemente significa favorecer a los otros a expensas de Jas propias oportunidades o habilidades reproductivas. Taly como Wilson lo reconoce, l problema con una nocién de esta clase es que tal «altruisman munca podeia existir —nunca podria persistis— en la naturaleza. ste seria eliminado de inmediato por la seleccién natural. Uno debe aiiadir que el «altruismoy biolégico repercute hacia el beneficio del «altruistas, como por ejemplo en una simacién que envuelve lo que acertadamente se ha llamado «altruismo reciproco» en donde yo lo ayudo a usted como retribucién a una ayuda que usted me presté. Debido a la necesidad de esta adicién, encuentro mucho mas fécil simplemente introducir en mi comprensién del 7 98 saga Nrimero 10 - 1/2005 caltruismo» biologico esta expectativa de reciprocidad —este retorno de beneficio biolégico—, como quiera que sea causado y cualquiera que sea la forma que tome, 7 es por ello que uso en este sentido amplio el téemino ealtruismon en el presente acticulo, Darwin y los posteriores darwinistas sostuvieron con vehemencia que el comportamiento social —lo que aq se ha llamado ealtruismon (en el sentido amplio que acabamos de especificar y clatificar)— debe ser una funcién de la evolucién través de la seleccién natural no menos que lo son los dientes, ojos, manos, penes © vaginas. Bn los pasados treinia 0 cuarenta aiios ha habido grandes adelantos en nuestra comprensién de la evoluciéa del comportamiento social, considerado dentro del contexto danwiniano, En particular, se ha sostenido que los animales —desde las hormigas hasta los simios— trabajan juntos socialmente con el fin de promover su propio bienestar biolégico (Wilson 1975). Traduciendo esto al lenguaje de la biologi ‘moderna: los animales trabajan de manera «altruista» y asi aseguran que sus unidades de herencia (los «genes») pasen a Jas futuras generaciones en porcentajes més altos que siotro frera el caso, Yo disla que el darwinismo contemporineo sostiene también que la seleccién natural no trabaja para el grupo, o al menos sélo muy raramente. En este sentido, Ia seleccién promueve lo que Richard Dawkins (1976) ha llamado el sagen egoiste»: el comportamiento social o «altruismo» debe, en algiin sentido, ser considerado como un interés propio ilustrado, Uno nunca encontrard organismos actuando simplemente de manera altruista, de una forma desinteresada 2 favor del grupo. Trabsjar socialmente debe siempre tener alguna retribucién para el individuo, cualquiera que pueda ser el costo. Como dije, no voy a defender esta posicién aqui. Ciertamente voy a evadir las, afirmaciones de que la selecci6n puede operar sobre el geupo més que sobre el individu, siendo ésta una popular y permanente alternativa para aquélles emocionalmente incapaces de enfrentar la cruda naturaleza del proceso darwiniano. (El sabor que infunde, incluso, el pasaje citado al comienzo de la discusién —un pasaje que introduce el capitulo acerca del altruismo en Sobre la naturaleza bumana, de E. O. Wilson, Sin embargo, recalearé que la posicién que acepto ha sido teéricamente articulada en gran detalle en las décadas pasadas, y que hay una enorme cantidad de evidencia experimental apoyando sus argumentos. Mucho més controversial resulta, Ja extensién del darwinismo ala especie humana. Bl mismo Charles Darwin siempre pensé que nosotros los humanos deberiamos ser parte y porcién del mundo animal. De hecho, las primeras especulaciones que tenemos de Darwin (en notas privadas) acerca del funcionamiento dela seleccién estin situadas en el contesto dela inteligencia, humana. En E/ origen del hombre (1871), Darwin nos ubicé firmemente dentro de la esfera natutaly ésta a sido le posicién constante delos evolucionistas desde entonces. Hoy en dia, los estudiantes que abordan Ia investigacién del comportamiento social desde una perspectiva darwiniana, esto es, los sociobidlogos, sostienen fuertemente gue el Homa sapiens debe ser considerado un producto de la seleccién nacural Especificamente, debido que ha sido reconocido por todos que los humanos son una especie altamente social, se ha sostenido que el comportamiento social debe ser visto como un producto de Ia seleccién natural. Sobrevivimos como especie porque trabajamos juntos. Pero recuerden que la supervivencia no es para el beneficio de la especie: sobrevivimos como individuos porque trabajando juntos de manera cooperativa nos va mejor como individuos de lo que nos resultaria silo hiciéramos de cualquier otea forma, Nosotros los humanos no somos particularmente répidos, Michael Ruse Altruismo: Una perspectitiva naturalista darwiniana ni particularmente fuertes, ni particularmente feroces ni cualquier otra cosa de éstas; pero, debido a que trabajamos juntos, nos va bastante bien. En otras palabras, la scleccién natural ba hecho a los humanos los maestros del «altruismo» biolégico. (Desde inego, lo que un evolucionista darwiniano sostiene es que ha habido un proceso circular o de retzoalimentacién en muestra evolucién hacia una naturaleza valtraistay. Hemos desarrollado adaptaciones sociales y, al mismo tiempo, rasgos como el comportamiento agresivo han declinado porque son incompatibles con ser sociales. Pero porque somos tan sociales ya no necesitamos de Ia velocidad o del comportamiento agresivo que poseen predadores de primer rango como los leones) No se deje engafiar por afirmaciones que sostienen que los lnumanos son realmente simios violentos, con avidez de sangre lacia sus congéneres. Incluso si se tiene en cuenta todos los asesinatos del siglo pasado, nos enconteamos muy abajo en Ia escala.. Comparados con animales como los leones © los lemmings, incluso los limpiadores zaciales resultan ser simples debiluchos. La cuestin se resulta ser ahora averiguar ccémo es que los humanos actuzmos tan bien juntos de manera social. Por qué somos tan buenos «altruistasy biolégicos, en el sentido de cémo es que Ia seleccién natural ha hecho de nuesizo «altruismon biolégico un fendmeno tan exitoso? Pienso que hay al menos tres posibles respuestas a esta pregunta y que, en varios aspectos, los humanos hemos tomado las tres. Permitanme explicar La primera forma en la cual el «altruismo» humano podria haber sido producido y podria haber funcionado —en la cual los humans podeian interactuar socialmente— es de manera puramente innata, es decis, puramente por instinto. Tomo ésta como la manera en que sucede mucho, si no Ia mayor parte, del comportamiento social «altruista» en el teino animal. Nadie piensa, por ejemplo, que las hotmigas son seres pensantes y, sin embargo, cooperan de las manezas més maravillosas (Wilson 1971). Ellas hacen todo enteramente por instinto. Tienen, para usar una metéfora moderna, el comportamiento progeamado [hard-wired] en su cerebro. Como es apenas obvi, los humanos siguen también este patrén hasta cierto punto, Padres ¢ hijos a menudo interactiian sobre bases instintivas: el amor que una madre siente por su pequefio no tiene nada que ver, de ninguna manera, con la mzzén ola racionalidad. Es algo que surge naturalmente, o como silo fuera. Bs parte de la nnaturaleza humans, lo que quiere decir que es parte de la naturaleza humana biol6gica co instintiva Sin embargo, ésta no es la nica manera en la cual los bumanos interactuamos socialmente, y hay una buena razén porla cual nosoiros debimos haber tomado una ruta evolutiva diferente de a de organismos inferiores como las hormigas, Elinstinto de estas tltimas tiene tanto fortilezas como debilidades. La fortaleza es que uno puede iniciar una accién inmediatamente. No hay necesidad de entrenamiento 0 educacién © algo similar, por lo cual las hormigas pueden tcabajar con cerebros relativamente simples y no necesitan ninguna instraccién en cuanto a aquello que deben hacer. Sin embargo, hay serios impedimentos para dicho «altruismo. En particular, esti el gran problema de que si algo resulta mal, el comportamiento instintivo es (genetalmente hablando) incapaz de responder y organizar correctamente las cosas, de forma inmediata. Si, por ejemplo, una hilere de hormigas esté afuera del aido recolectando provisiones —haciendo todo esto instintivamente— y entonces empieza a lover, es més que probable que muchas de estas hormigas fracasen intentando encontrar él camino de regreso a su nido. Hasta este punto, las hormigas ban sido guiadas en su salida y regreso por rastros quimicos (feromonas). La luvia borra 99 100 saga ‘Naimero 10 - 1/2005 estos rastros j, consecuentemente, debido a le separacién, se pierden muchos de los miembros de la colonia. Una hormiga reina puede permitirse perder muchos descendientes, pues esté produciendo literalmente millones de ellos. Los humanos no nos podemos dar este ujo. Hemos evolucionado de una manera tal que producimos Gnicamente unos pocos descendientes, y simplemente no podemos permitienos perderlos si algo zesulta mal, (La diferencia ala que me estoy refiriendo es conocida técnicamente como la distincién entre seleccién r y seleccién K. Con la primera usted produce gran cantidad de descendientes, pero no les dedica mucho cuidado parental. Con la segunda usted produce muy pocos descendientes, pero si les dedica mucho cuidado parental. Los hhumanos somos en buena medida orgenismos K-seleccionados; aunque, por suptesto, una ver més uno tiene uno de esos bucles selectivos autorregulados. Como hemos desaxrollado nuestras adaptaciones sociales de Ia forma en que lo hemos hecho, nos hemos vuelto K-seleccionados, y ala inversa.) Mi punto es que el instinto simplemente no seri la causa exclusiva de las interacciones sociales —del ealtruismo»— de organismos como los humanos. ¢Cudl serfa entonces una segunda opcién? La més obvia consiste en tomar In direccién ‘puesta, En lugar de ser puramente instintivos, podtiamos ser escasamente instintivos caso, calculando para siempre el resultado en las interacciones sociales (Axelrod 1984). Dos humanos se encuentran y (por alguna razén) el asunto que emerge es el de si ellos deberfan o no interactuar socialmente. Recordando ahora que en el contexto biolégico modemo todo es realizado desde una perspectiva individual, lo que estos dos individuos harin es razonar juntos o aparte, decidiendo si la cooperacién les conviene o no. Siles conviene, entonces cooperarin;y sino, entonces no lo harén. (A menudo se piensa que seres puramente racionales, esto es, humanos con siiper- cerebros, serian necesariamente seres malvados como Darth Vader antes de su reformaciéa. De hecho, esto no es necesariamente asl, Debido 2 que cada uno es un ssiper-ser, usted reconoceri que va a ser imposible ser universalmente malvado, pues todos los dentis estin en la misina condicién, y que, pot lo tanto, usted teadra que cooperar. Debe notasse sin embargo que este tipo de ealtruismo» biolégico no implica altruismo literal. De hecho, implica lo opuesto. Hacer costs con la esperanza de beneficiarse no es algo necesarlamente inmoral, pero en si mismo no es algo desinteresadamente bueno) En algunos aspectos, como con Ie primera opcién (instinto), los humanos hen tomado este camino causal hacia le sociabilidad, hacia el «altruismos, Muchas de -muestras negociaciones con nuestros semejantes son hechas de una manera puramente sazonable o racional. Yo voy a comprasle una camiseta a L. L. Bean. Le doy dinero por la camiseta; &l me da la camiseta. Yo no hago esto porque me agrade L. L. Bean, ni él actta reciprocamente porque yo le agrade. Mis bien, en esta situacién favorece nuestro interés propio interactuar juntos socialmente. Sin embargo, de nuevo hay limites a este modo de interaccién. Hay buenas razones biolégicas pot las cuales no nos hemos convertido tinicamente en calculadores racionales siiper-cerebros, aunque esto fuera biolégicamente posible. La gran desventaja al ser un siper-calculador es que toma tiempo, y en el mundo evolutivo el tiempo es dinero, A menudo, uno simplemente no se da el Injo de tener tiempo disponible para hacer los céleulos perfectos. Suponga que usted y yo estamos afuera en una sabana y un leén se nos acerca, Siyo tardo mucho tiempo decidiendo si me conviene avisarle a usted que un len se esti acercando y que los dos deberlamos cooperar para escapar, antes de que Michael Ruse Altruismo: Una perspectitiva naturalista darwiniana I decisién sea tomada estaremos ambos en cl estSmago del leén. Por ello, lo que necesitamos es alin tipo de solucién ripida y sucia para cooperarjantos ripidamente, un método que usualmente fancione de manera ripida en la cotidianidad, incluso aunque no esté exento de fallas. Laanalogia que viene ala mente aqui es aquella de la miquina jugadora de ajedrez. Las primeras maquinas de este tipo caloulaban ceda jugada. Eran como los sipes- ‘cerebros de la segunda opcién. Pero, por supuesto, como todos sabemos, las primeras miquinas jugadoras de ajedrez eran vietualmente inttiles. Ellas tardaban demasiado tiempo después de dos o tres jugadas para realizar la siguiente, nadie legaba a ninguna parte..Lo que sucedié entonces fue que los disefiadores de tales miquinas empezaron 1 cedificar ciertas estrategias: cuando cierta configuracién de piezas aparecia en el tablero, la miquina podia repasar sus varias opciones ¢ ingeniar una solucién répida, Tnicialmente, las primeras miquinas no fueron muy buenas y podian eventualmente ser derrotadas con facilidad por los seres humanos. Pero, como todos sabemos por Iahistoria de Deep Blue, no pasé mucho tiempo para que las maquinas se volvieran tan sofisticadas que, si bien podian ser en efecto derrotadas, generalmente no lo fueron. Yo pienso que los humanos de hecho han tomado esta tercera opcién. Estamos en alggin sentido progeamados [bard-uired) para actwar juntos socialmente, pero no de una forms tal que nunca cometemos errores. El punto es que usamos ‘esta programacién [Aardwirig] con el fin de actuar diligentemente en situaciones particulares cotidianas. Menos metaféticamente, lo que estoy sugitiendo es que los humanos tenemos incorporada de manera innata, o instintiva si usted prefiere, una capacidad para trabajar juntos socialmente. Y lo que quiero sugerires que esta capacidad se manifesta ‘lla misma en el nivel fisico como un sentido moral. {Como un altruismo genuino, tipo Madre Teresa! De aqui que lo que estoy sosteniendo sobre bases puramente naturalistas, dacwinianas, ¢§ que Ix moral, o més bien, un sentido moral —un reconocimiento del llamado del altruismo y una propensién a obedeces— es algo que esté programado en los humanos. Ha sido puesto all por la seleccién natural para que trabajemos juntos socialmente o cooperemos. Esto no quieze decir que no tengarnos libertad en ningiin sentido. No estoy diciendo que nunca desconocemos nuestro sentido moral, sino més bien que realmente tenemos el sentido moral, y que lo tenemos sl impulso hacia ol altruismo—no por eleccién o decisién, sino porque somos humanos. (Por supuesto, habri psicépates sin un sentido moral, pero en biologia usted sabe que habré excepciones para cada regia) Por elo, lo que sostengo aqui es que, cuando los bumanos se encuentran 2 si mismos en un posicién en la cual la cooperacién podria remunerar, la moral toma lugar. Con el fin de hacemos buenos «altruistasy biolégicos, la naturaleza nos ha hecho altruistasliterales. No quiere decir esto que siempre cooperaremos o seremos, morales. Podemos sentir el jal6n del alteuismo de la Madre Teress; pocos de nosotros somos Madres Teresas. Estamos influenciados por muchos factores, incluyendo deseos egoistas y de otro tipo. Pero la moral es uno de estos factores y, de hecho, en general los humanos usualmente trabajamos juntos. A veces la moral se vuelve en contea. Yo podria correr para ayudar al nfo que se ahoga y ahogarme yo mismo. ‘Bsto dificilmente favorece mi interés propio. Pero, en balance, me conviene tener el sentimiento de que debo ayudar 2 las personas en apuros, particularmente a los nifios en apuros. Bsto 3 asi tanto porque yo mismo fui en una etapa de mi vide un 101, 102 saga ‘Numero 10 - 1/2005 aifio, y también porque yo mismo probablemente tengo o tendré nifios. Quiero que otros estén preparados para tomar un riesgo en mi favor o en el de mis nifios Permitanme enfatizar que el argumento biolégico (no hablo ain filoséficamente) es que Jos humanos tenemos un sentido genvino de la moral. Esto realmente es altruismo verdadero, de veinticuatro kilates. Este es el tipo de moral 0 altruismo det que habla alguien como Immanuel Kant (KpV/). No es ésta una posicién cientifica de egoismo ético puto, en el sentido de que todos somos personas egoistas simplemente calculando pars nuestros propios fines. Esta es la segunda opeidn mencionada arriba. Somos més bien personas con un real sentido mozal, un sentimiento de lo coxrecto cincorrecto y dela obligaci6n. lay que admitir que: en cl nivel causal esto resulta de la seleccién individual que maximiza nuestros propios fines reproductivos. Pero el punto es que, si bien los humanos son producidos por genes egoistas, los genes egolstas no necesariamente producen gente egofsta. De hecho, las personas egoistas en el sentido literal tienden a ser segregadas del grupo 0 excluidas de muy sipidamente. Ellos simplemente no estén jugando el juego. Por tanto, de cierta manera, nosotros tenemos un tipo de contrato social. Pero ndtese que no es un contrato social originado en el pasado distante por un grupo de ancianos de barba gris sentados alrededor de una hoguera. Fste es mas bien un contrato social causado por nuestra biologia, es decis, por nuestros genes, tal como estos han sido formados y seleccionados porla seleccién natural, (Hstrictamente, usando el estilo de esta discusién, debesiamos decir que genes «egoistam no necesariamente producen personas egoistas; ellos, producen personas altmustas porque el ealtruismon puede ser una buena estrategia wegoistay). ‘Bsa es, entonces, la perspectiva Darwiniana sobre la evolucién y naturaleza actual de Ie moral; acerca de la forma en que trata la nocién central de altruismo, Veamos ahora cémo esto encaja en una via naturalizada, buscando con ello encontrar cémo elpensamiento moral y el conocimiento se manifiestan sobre tal trasfondo biolgico. nica sustanrrva Estoy sosteniendo que los humanos cooperan para fines biolégicos, es decir, son «altrvistas» para sus propios fines biolégicos. Estoy sosteniendo que el comportamiento moral humano, ealtruismo que esté al servicio del fin delaltruismon, tiene que ser tal que vaya a servirle al individuo, Esto no quiere decir que va a servitle al individuo en cada ocasién, ni quiere decir que el humano estar pensando acerca de la ganancia personal cada vez que actiie moralmente. Como ya lo he sugerido, el punto central acerca de la moral es, de hecho, que uno tiende a no pensar de tal modo. Tal vez por definicién la moral excluye tal pensamiento, Pero ello quiere decie que la moralidad debe ser tal que sea de beneficio personal. He hablado justo arviba de un contrato social y, mientras estoy negando un contrato social en ef sentido tradicional, es bastante claro que el tipo de ética sustantiva al que conduce la biologia darwiniana es una ética muy similar a lo que uno esperatia encontrar en un contrato social, ‘Mis an, yo sostendila que este es el tipo de ética que tenemos en la vide real. Asi, recordando que estoy ofzeciendo una posicién naturalizada (aguella que esta conscientemente basada en los métodos y zesultados delas ciencias fisicas), tenemos gut el tipo de justificacién empfrica (que no debe ser confundida con justificacién mozal) que es exigida por el ipo de posicién que estoy proponiendo y respaldando. Michael Ruse —_—_Altruismo: Una perspectitiva naturalista darwiniana El altruismo (0 el impulso hacia el altruismo) que realmente experimentamos fenomenoldgicamente y que los filésofos morales adoptan, es precisemente aquel que daria apoyo (producixa) al «altruismoy biolégico requerido por animales tales como nosotros. Mas particularmente, yo dirfa que la més conocida exposiciéa contemporinea de Ja teoria del contrato social, In oftecida pot John Rawls en su libro de 1971 Una Teoria de Justicia, es muy del tipo de moralidad —produce justamente ese tipo de altruismo— que uno esperaria desde una perspective darwinians. Es incidentalmente interesante y significative que el propio Rawis reconozca este hecho. El esté de acuerdo con que el contrato social dificilmente fue un evento real y que mis bien fue algo producido por la Incha por la existencia actuando sobre nuestra biologia innata. Exploremos este punto, Como es bien sebido, Rawls argumenta a favor de una posicién que él lama justicia como equidad>. El sostiene que para ser justo no debe ser equitativo. Para avs, ser justo no necesasiamente significa darlea cada uno cantidades absolutamente iguales de todo. Mis bien, nos invita a ubicarnos a nosotros mismos detrés de lo que lama un «velo de ignorancia», sin saber qué posicién podriamos encontraros ‘ocupando en la sociedad: ya sea uno hombre o mujer, rico 0 pobre, blanco 0 negro, sano o enfermo o cualquiera de estas cosas. Entonces pregunta qué posicién dicta el interés propio como el mejor tipo de sociedad en la cual puede uno encontrarse, 7 la respuesta de Rawls es que es una sociedad en lz que en algin sentido a todo el mundo le va tan bien como le iria por fuera de la sociedad, tan bien como uno puede espera, dados nuestros varios talentos. Puede ser que vayamos a nacer varones ysicos y poderosos y saludables y lo demés. Si supiéramos que nos flbamos a encontrar nosotros mismos en esa posicién, entonces nos gustaria recompensar al maximo a ls personas en dicha posicién, Pero, por supuesto, podemos ser mujeres y pobres y desvalidos, caso en el cual nos levariamos un chasco. Asi que, hay una clase de presuncién inicial de igoaldad. No obstante, ella es eliminada tan pronto uno reconoce que algo como l disponibilidad de buenos servicios médicos va a ser de beneficio para todos. ¥ si, de hecho, la inca manera por la cual se puede conseguir que las personas més talentosas se vuelvan médicos es pagdndoles el doble de lo que se le paga a los profesores univessitarios, entonces la qjusticia como equidad> dicta el caricter correcto de esta clase de desigualdad. Asi, con lo que termina Rawls es con una sociedad con desigualdades, pero en algin sentido una sociedad donde las desigualdades benofician 2 todos y cada uno de los individuos del grupo. ‘Yo sugeriia que este es por mucho el tipo de sociedad que uno espera que la biologia evolucionista haya producido. En otras palabras, un grupo de personas que piensan que uno debe ser justo, quetiendo decir que uno debe ser cquitative. Un ‘grupo que reconoceré que habri desigualdades, pero que a su vez reconoceri que sas desigualdades en algin sentido sera de beneficio para todos. No estoy sugitiendo aque toda sociedad actual haya resultado ser de esta manera, pero ese no es realmente el punto. Uno zeconoce que habri toda clase de maneras en las cuales la biologia fallasé en estar al dia con cizcunstancias individuales. Puede haber desigualdades provocadas por cizcunstancias particulares o porla fortuna o por lo que sea. Pero el punto es cémo pensamos que una sociedad debe ser, incluso si ésta no es necesariamente siempre de esa manera. Ello quiere decir, cémo pensamos _moralmente que una sociedad debe ser, incluso sino siempre funciona de esa manera. Permitanme extenderme un poco mis sobre esta distincidn entre lo’ que uno podria moralmente pensar que debe ser ylo que de hecho sucede. La manera en que 103 104 saga Niimero 10 - 1/2005 las cosas de hecho resultan se debe a los individuos, pero nadie esti de ninguna ‘manera diciendo que la gente siempre acti moralmente o sigue los dictados de su conciencia. Recuerden a Wilson: «El altruismo humano, en pocas palabras, esti saturado hasta sus fandamentos con la ambivalencia mamifera que es de especarse» Moralmente, es una cuestién de cémo debe usted comportarse, no de cémo se comporta. Si, por ejemplo, me encuentro a mi mismo rico y poderoso, entonces desde un punto de vista puramente egoista yo podria simplemente ignorar el llamado de la moralidad 0 suprimirlo o educarme a mi mismo o a mis hijos para ignorar auestea biologia. Ni yo ni ningiin otro darwinista estamos diciendo que este tipo de cosas munca podria pasar: En tiempos de gran tensi6n social a causa de un desastre como una plaga, uno bien podria encontrar a los ricos y poderosos cuidando s6lo de sf mismos. Esto no es para negar que, a la postre, cosas como Ia educacién pueden tener un efecto duradero para bien o para mal, o a Ia inversa, tampoco es para afirmar que la biologia puede ser simplemente echada a un lado cuando se nos antoje. El llamado de las feministas hacia ciertos cursos de accién puede, en realidad, cen estos tiempos modemos de ahorro de mano de obra y de reducidos indices de natalidad, ser completamente admizable. Si nuestra biologfa, que fue forjada en el pleistoceno, cuando las cosas eran muy diferentes, puede seguir tan ficil y sipidamente es una cuestién completamente distinta. (Por favor no confunda aqui mi realism con sarcasmo o cinismo). Hay muchos otzos sistemas morales diferentes a la perspectiva neokantiana, de contzato social, de John Rawls. Mas ain, soy muy consciente de que la nocién de justicia no coin la cuestion de la misericordia, por ejemplo. Uno podria hablar verdadetamente de un j de realmente con la nocién de alteuismo. Esta ado justo, pero lamentarse de que él o ella no afronten esto con compasién 0 perdén. Sin embargo, como darwinista, yo sugerisfa que estos sistemas alternativos y estas necesidades de expandir totalmente para capturar el sentido completo del altruismo no necesariamente refutan 0 repudian aquello que ha sido dicho a favor de Ja teoria del contrato social. El simple hecho es que la mayoria de los sistemas morales concuerdan en lo fundamental —concuerdan acerca de lo que constituye un persona completa y verdaderamente altruista— y tienden a enfocarse ‘inicamente en algunos aspectos de la totalidad del asunto, apartindose tinicamente con respecto a los tipos de ejemplos esotéricos y artificales que deleitan a los filésofos. Todo el mundo, ya sea kantiano, utlitarista, cristiano o lo que sea, piensa que uno debe ser amable con los nifios pequeiios, que una injustificada ceneldad hacia los ancianos es incosrecta y que hay algo que decir a favor de la honestidad y Ia decencia en los negocios y las zelaciones, y asi sucesivamente. De hecho, Ia moral en su mayor parte es justamente ‘una moral de sentido comiin, mis que un sistema bien articulado tal como es producido por ildsofos (Mackie 197). ¥ es precisamente en este punto en el que insistiia el darwinista, Los seres humsnos reales tienen una moral de sentido comin que los guia en su vida cotidiana. Los seres bumanos reales pueden distinguir el alteuismo real, Deje la filosofia a los filésofos. Ciertamente, hay casos reales donde es menos que obvio saber Jo que uno debe hhacer en un caso particular, 0 donde uno cae en contradicciones cuando intenta poner las cosas en orden. Si uno esti a favor del aborto, gsignifica esto que uno también debe estar a favor de la pena capital? Si uno estéa favor del libre expresién,

You might also like