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Instituto nacional candelaria de la frontera

Tema:

Teoría de la evolución de Darwin y wallacc

Nombre del profesor:

Douglas Vladimir Cisneros

INTEGRANTES:
DARWIN WALBERTO RODRIGUEZ LINARES.

KARLA MILENA JIMENEZ LIMA.

JONATHAN ALEXIS ALVARES JACOBO.

NELSON ANTONIO ESTRADA

Roberto Carlos Jiménez flores

Jaime Eduardo Vanegas

Marvin Dagoberto lima

Grado:
2° año “a” técnico
Turno:
mañana.
Materia:
CIENCIAS NATURALES.
INTRODUCCION
En el trabajo que le presentamos a continuación habla sobre las teorías de la
evolución de charles Darwin, los viajes alrededor del mundo de charles
Darwin, evoluciones y mutación en los seres vivos, mecanismos de la
evolución etc.
Evolución biológica
«Evolución» redirige aquí. Para otras acepciones, véase Evolución (desambiguación).
«Evolucionismo» redirige aquí. Para otras acepciones, véase Evolucionismo (desambiguación).

Parte de la serie de

Evolución biológica

Temas clave
Historia de la idea
Historia
Procesos y Resultado
Implicaciones Sociales
Campos y aplicacione

Portal de biología
Categoría

La evolución biológica es el cambio en herencia genética fenotípica de las


poblaciones biológicas a través de las generaciones y que ha originado la
diversidad de formas de vida que existen sobre la Tierra a partir de un antepasado
común.1 2 Los procesos evolutivos han causado la biodiversidad en cada nivel de
la organización biológica, incluyendo los de especie, población, organismos
individuales y molecular (evolución molecular).3 Toda la vida en la Tierra procede
de un último antepasado común universal que existió entre hace 3800 y 3500
millones de años.4 5
La palabra evolución para describir tales cambios fue aplicada por primera vez en
el siglo XVIII por el biólogo suizo Charles Bonnet en su obra Consideration sur les
corps organisés.6 7 No obstante, el concepto de que la vida en la Tierra evolucionó
a partir de un ancestro común ya había sido formulado por varios filósofos
griegos,8 y la hipótesis de que las especies se transforman continuamente fue
postulada por numerosos científicos de los siglos XVIII y XIX, a los cuales Charles
Darwin citó en el primer capítulo de su libro El origen de las especies.9 Sin
embargo, fue el propio Darwin, en 1859,10 quien sintetizó un cuerpo coherente de
observaciones que consolidaron el concepto de la evolución biológica en una
verdadera teoría científica.2
La evolución como una propiedad inherente a los seres vivos, actualmente no es
materia de debate entre la comunidad científica relacionada con su estudio.2 Los
mecanismos que explican la transformación y diversificación de las especies, en
cambio, se hallan todavía bajo intensa investigación científica. Dos naturalistas,
Charles Darwin y Alfred Russel Wallace, propusieron en forma independiente en
1858 que la selección natural es el mecanismo básico responsable del origen de
nuevas variantes genotípicas y, en última instancia, de nuevas especies.11 12
Actualmente, la teoría de la evolución combina las propuestas de Darwin y
Wallace con las leyes de Mendel y otros avances posteriores en la genética; por
eso se la denomina síntesis moderna o «teoría sintética».2 Según esta teoría, la
evolución se define como un cambio en la frecuencia de los alelos de una
población a lo largo de las generaciones. Este cambio puede ser causado por
diferentes mecanismos, tales como la selección natural, la deriva genética, la
mutación y la migración o flujo genético. La teoría sintética recibe en la actualidad
una aceptación general de la comunidad científica, aunque también algunas
críticas. Ha sido enriquecida desde su formulación, en torno a 1940, gracias a los
avances de otras disciplinas relacionadas, como la biología molecular, la genética
del desarrollo o la paleontología.13 Actualmente se continúan elaborando hipótesis
sobre los mecanismos del cambio evolutivo basándose en datos empíricos
tomados de organismos vivos.

El origen de la vida

Artículo principal: Abiogénesis

El origen de la vida, aunque atañe al estudio de los seres vivos, es un tema que no
es abordado por la teoría de la evolución; pues esta última sólo se ocupa del
cambio en los seres vivos, y no del origen, cambios e interacciones de las
moléculas orgánicas de las que éstos proceden.25 No se sabe mucho sobre las
etapas más tempranas y previas al desarrollo de la vida, y los intentos realizados
para tratar de desvelar la historia más temprana del origen de la vida
generalmente se enfocan en el comportamiento de las macromoléculas, debido a
que el consenso científico actual es que la compleja bioquímica que constituye la
vida provino de reacciones químicas simples, si bien persisten las controversias
acerca de cómo ocurrieron las mismas.26 Tampoco está claro cuáles fueron los
primeros desarrollos de la vida (protobiontes), la estructura de los primeros seres
vivos o la identidad y la naturaleza del último antepasado común universal.27 28 En
consecuencia, no hay consenso científico sobre cómo comenzó la vida, si bien se
ha propuesto que el inicio de la vida pueden haber sido moléculas autorreplicantes
como el ARN,29 o ensamblajes de células simples denominadas nanocélulas.30 Sin
embargo, los científicos están de acuerdo en que todos los organismos existentes
comparten ciertas características ―incluyendo la presencia de estructura celular y
de código genético― que estarían relacionadas con el origen de la vida.31

La razón biológica por la que todos los organismos vivos en la Tierra deben
compartir un único y último antepasado común universal, es porque sería
prácticamente imposible que dos o más linajes separados pudieran haber
desarrollado de manera independiente los muchos complejos mecanismos
bioquímicos comunes a todos los organismos vivos.22 32 Se ha mencionado
anteriormente que las bacterias son los primeros organismos en los que la
evidencia fósil está disponible, las células son demasiado complejas para haber
surgido directamente de los materiales no vivos.33 La falta de evidencia
geoquímica o fósil de organismos anteriores ha dejado un amplio campo libre para
las hipótesis, que se dividen en dos ideas principales: 1) Que la vida surgió
espontáneamente en la Tierra. 2) Que esta fue «sembrada» de otras partes del
universo.

La evolución de la vida en la Tierra


Árbol filogenético mostrando la divergencia de las especies modernas de su
ancestro común en el centro.34 Los tres dominios están coloreados de la siguiente
forma; las bacterias en azul, las arqueas en verde y las eucariotas de color rojo.

Artículo principal: Historia de la vida

Detallados estudios químicos basados en isótopos de carbono de rocas del eón


Arcaico sugieren que las primeras formas de vida emergieron en la Tierra
probablemente hace más de 3800 millones de años, en la era Eoarcaica, y hay
claras evidencias geoquímicas ―tales como la reducción microbiana de sulfatos―
que la atestiguan en la era Paleo arcaica, hace 3470 millones de años.35 Los
estromatolitos ―capas de roca producidas por comunidades de
microorganismos― más antiguos se conocen en estratos de 3450 millones de
años, mientras que los microfósiles filiformes más antiguos, morfológicamente
similares a cianobacterias, se encuentran en estratos de sílex de 3450 millones de
años hallados en Australia.36 37 38

Asimismo, los fósiles moleculares derivados de los lípidos de la membrana


plasmática y del resto de la célula ―denominados «biomarcadores»― confirman
que ciertos organismos similares a cianobacterias habitaron los océanos arcaicos
hace más de 2700 millones de años. Estos microbios foto autótrofos liberaron
oxígeno a la atmósfera, el que comenzó a acumularse hace aproximadamente
2200 millones de años y subsecuentemente transformó definitivamente la
atmósfera terrestre.39 38 La aparición de la fotosíntesis y el posterior surgimiento
de una atmósfera rica en oxígeno y no reductora, puede también rastrearse a
través de los depósitos laminares de hierro y bandas rojas posteriores, producto
de los óxidos de hierro. Éste fue un requisito necesario para el desarrollo de la
respiración celular aeróbica, la cual se estima que emergió hace aproximadamente
2000 millones de años.40

Los procariotas, entonces, habitaron la Tierra desde hace 3000 a 4000 millones de
años.41 42 Durante los siguientes miles de millones de años no ocurrió ningún
cambio significativo en la morfología u organización celular en estos organismos. 43

El siguiente cambio sustancial en la estructura celular lo constituyen los


eucariotas, los cuales surgieron a partir de bacterias antiguas envueltas, incluidas,
en la estructura de los ancestros de las células eucariotas, formando una
asociación cooperativa denominada endosimbiosis.44 Las bacterias envueltas y su
célula hospedante iniciaron un proceso de coevolución, por el cual las bacterias
originaron las mitocondrias o hidrogenosomas.45 Un segundo evento
independiente de endosimbiosis con organismos similares a cianobacterias llevó a
la formación de los cloroplastos en las algas y plantas. La evidencia tanto
bioquímica como paleontológica indica que las primeras células eucarióticas
surgieron hace unos 2000 a 1500 millones de años, a pesar de que los atributos
clave de la fisiología de los eucariotas probablemente evolucionaron
previamente.46 38 47
La historia de la vida sobre la Tierra fue la de los eucariotas unicelulares,
procariotas y arqueas hasta hace aproximadamente 610 millones de años,
momento en el que los primeros organismos multicelulares aparecieron en los
océanos en el período denominado Ediacárico.41 48 49 Algunos organismos
ediacáricos podrían haber estado estrechamente relacionados con grupos que
más adelante se convertirían en prominentes; tales como los poríferos o los
cnidarios.50 No obstante, debido a la dificultad a la hora de deducir las relaciones
evolutivas en estos organismos, algunos paleontólogos han sugerido que la biota
de Educara representa una rama completamente extinta, un «experimento fallido»
de la vida multicelular, que supuso que la vida multicelular posterior volviera a
evolucionar más adelante a partir de organismos unicelulares no relacionados. 49
La evolución de los organismos pluricelulares ocurrió entonces en múltiples
eventos independientes, en organismos tan diversos como las esponjas, algas
pardas, cianobacterias, hongos mucosos y mixe bacterias.

Poco después de la aparición de estos primeros organismos multicelulares, una


gran diversidad biológica apareció en un período de diez millones de años, en un
evento denominado explosión cámbrica, un lapso breve en términos geológicos
pero que implicó una diversificación animal sin paralelo y el cual está
documentado en los fósiles encontrados en los sedimentos de Burgess Shale,
Canadá. Durante este período, la mayoría de los filos animales aparecieron en los
registros fósiles, como así también una gran cantidad de linajes únicos que
ulteriormente se extinguieron. La mayoría de los planes corporales de los animales
modernos se originaron durante este período.52 Varios desencadenantes de la
explosión cámbrica han sido propuestos, incluyendo la acumulación de oxígeno en
la atmósfera debido a la fotosíntesis.53 54 Aproximadamente hace 500 millones de
años, las plantas y los hongos colonizaron la tierra y fueron rápidamente seguidos
por los artrópodos y otros animales.55 Los anfibios aparecieron en la historia de la
Tierra hace alrededor de 300 millones de años, seguidos por los primeros
amniotas, luego los mamíferos hace unos 200 millones de años y las aves hace
100 millones de años. Sin embargo, a pesar de la evolución de estos filos, los
organismos microscópicos, similares a aquellos que evolucionaron
tempranamente en el proceso, continúan siendo altamente exitosos y dominan la
Tierra ya que la mayor parte de las especies y la biomasa terrestre está
constituida por procariotas.
Charles Darwin (Shreswsbury 1809-Down 1882):
Creador, en colaboración con Alfred Russel Wallace, de la teoría de la selección
natural. Era nieto de Erasmus Darwin, notable escritor científico, e hijo del Dr.
Robert Waring Darwin. Perdió a su madre, hija del famoso ceramista Josiah
Wedgewood, cuando sólo contaba 8 años. Estudió en Edinburgo y, en los años
1827 a 1831, en el Christ Collage de Cambridge. En 1831 embarcó como
naturalista en la expedición científica a bordo del Beagle. Tardó casi veinte años
en acabar El origen de las especies por selección natural, puesto a la venta en
1859. Constituyó una verdadera revolución científica. Contradecir las sagradas
escrituras le valió numerosas y encendidas críticas por parte del clero y de la
mayoría de biólogos de la época, que defendían que las especies eran grupos fijos
y eternos ordenados por Dios. Su otras investigaciones entre las que figura la
formación de arrecifes de coral, quedaron eclipsadas ante sus aportaciones a la
ideas evolucionistas.
El viaje a bordo del Beagle (1831-1836):
En 1831 fue nombrado naturalista a bordo del hermoso
bergantín Beagle en un viaje que duró cinco años por
ambas costas de Sudamérica, Galápagos, Tahití, Nueva
Zelanda, Australia, Tasmania, isla de Keeling, Mauricio,
Brasil y las Azores. Obtuvo el puesto gracias a las
gestiones de su profesor de botánica en Cambridge, el
reverendo John Stevens Henslow, quien le había hecho ver la importancia de las
observaciones científicas detalladas, minuciosas e ininterrumpidas.
“Le he señalado que eres la persona más indicada de cuantas pueden estar
dispuestas a aceptar tal cosa. No se lo he dicho porque te considere un
naturalista consumado, sino por el hecho de que estás perfectamente
capacitado para recoger, observar y anotar todo lo que merezca la pena en el
campo de la Historia Natural. No tengas dudas ni temores sobre tu capacidad,
pues te aseguro que, en mi opinión, eres la persona que están buscando”.
(Henslow. Carta a Darwin)

El HMS Beagle zarpó de Plymouth al mando del capitán FitzRoy el 27 de


diciembre de 1831. Una fuerte tempestad les obligó a regresar y refugiarse en el
mismo puerto. La misión consistía en completar el estudio de las costas de la
Patagonia y la Tierra del Fuego que el capitán King había iniciado entre 1826 y
1830. Debía cartografiar las costas de Chile, Perú y algunas islas del Pacífico y
llevar a cabo un serie de observaciones cronométricas. El 19 de agosto de 1836
partió hacia el Este desde Brasil. Después de hacer escala en Cabo Verde y las
Azores, el Beagle arribó a las costas de Inglaterra el 2 de octubre de 1836.
Las islas Galápagos:
En esta inhabitadas islas del Pacífico, muy distantes de las costas de Sudamérica,
se sorprendió al descubrir lagartos gigantescos, supuestamente extinguidos,
desmesuradas tortugas, cangrejos descomunales, gavilanes sin malicia que se
dejaban derribar de un árbol con una vara y tórtolas amistosas que se posaban
sobre el hombro del perplejo Charles. Al cambiar de una isla a otra, aunque el
clima y la geología no variaban, la fauna era inexplicablemente distinta. Parecía
que el Creador había actuado con caprichosa e inútil versatilidad en cada uno de
aquellos pequeños territorios. Sospechaba que el medio en el que se desenvuelve
la vida permite, de forma implacable, sobrevivir solamente a los más aptos.
Sus observaciones geológicas sobre los arrecifes de coral fueron recogidas en
varios libros. El viaje fue decisivo porque orientó definitivamente su vida y su
actividad por el camino de la ciencia. Diez años después de su viaje publicó sus
experiencias del mismo. En 1839 aparecía su Journal, que, al igual que su obra
anterior A Naturalist’s Voyage Round the World in H.M.S. Beagle se haría clásica
como libro de viajes. Su capacidad de trabajo fue considerable a pesar de los
daños que causaron a su salud los rigores de su largo viaje. Fue superior al resto
de sus contemporáneos en observar cosas que se escapan generalmente a la
atención.
“Ha sido el acontecimiento más importante de mi existencia. A este viaje le
debo la primera educación de mi carácter. Un verdadero entrenamiento porque
tenía que dedicar la atención a diversas ramas de la historia natural y esto me
obligó a mejorar y a intensificar mis facultades de observación”. (Darwin)

Acalorada reacción ante sus ideas sobre la evolución:


Su doctrina sobre la selección natural, una de las varias teorías de la evolución, es
quizá la más grande generalización científica del siglo XIX. En 1858, junto con
Alfred Russell Wallace, presenta ante la Sociedad Linean de Londres, la
conclusión de que las especies no son inmutables. Se hacía forzoso revisar
divinas razones que justifican la dignidad del hombre y su pureza originaria; la
interpretación literal de la Biblia; y teorías científicas unánimemente aceptadas. La
disputa adquirió caracteres épicos cuando se enfrentaron el obispo Samuel
Wilbeforce y el joven biólogo Thomas Huxley en la Universidad de Oxford. El
primero, en una concurrida reunión, preguntó insolentemente al científico:
“¿Sostiene usted acaso que desciende de un mono por línea materna o paterna?”
A lo que Huxley respondió impertérrito: “Preferiría descender de monos, tanto por
línea paterna como materna, a descender de un hombre que abusa de sus
brillantes dotes intelectuales para traer prejuicios religiosos a la discusión de
asuntos acerca de los cuales no sabe absolutamente nada.”
Deseos de visitar Tenerife:
Los paseos se complementaron con las excursiones. En
una de ellas, Charles leyó en voz alta a sus venerables
compañeros unas notas que había tomado del libro
Narrativa personal de Alexander Humboldt. Mencionó
con entusiasmo las maravillas de Tenerife. Henslow y
sus amigos le replicaron bromeando que un día no muy
lejano intentarían verlo con sus propios ojos. Al interés por la obra de Humboldt le
siguió el de la Introducción al estudio de la Filosofía Natural de Herschel. Pero la
idea de viajar a Tenerife no se le quitó de la cabeza. Llegó a contactar con un
marino mercante de Londres para recibir información sobre la salida de barcos
hacia aquella isla de sus sueños.
El paso por el golfo de Vizcaya y el cabo de Finisterre fue infernal y el pobre
Darwin se mareó sin poder hacer nada por evitarlo. Una terrible desazón que le
acompañaría durante todo el viaje. El 6 de enero de 1832 avistó su Tenerife de las
maravillas. “¡Oh, desgracia!, estábamos preparándonos para largar el ancla a
media milla de Santa Cruz cuando se acercó un barco y nos trajo una mala noticia.
El cónsul ordenó que debíamos someternos a una cuarentena de doce días” El
gozo en un pozo. El temor de las autoridades a que la tripulación del Beagle
portara el cólera impidió uno de sus sueños más queridos: visitar Tenerife. A la
mañana siguiente, la isla parecía haber desaparecido como por ensalmo. Hasta
que por encima de la bruma apareció el sol iluminando el pico del Teide: un rayo
de consuelo.
Escala en las islas de Cabo Verde:
La palidez de Darwin se acentuaba cada día más. Poner el pie a tierra no era
simplemente un deseo sino una absoluta necesidad. La cabeza le daba vueltas y
se sentía francamente mal. Corría el 16 de enero y el Beagle ancló en Porto
Praya, un puerto de la isla de Sao Tiago, que pasaba por ser la mayor del
archipiélago africano de Cabo Verde. Un día feliz. Tenía grandes deseos de que
llegara aquel momento. Aunque había leído las descripciones de Humboldt y
temía llevarme una desilusión”. Sus temores resultaron infundados. Tocar suelo
tropical fue un bálsamo y una experiencia inolvidable.
Darwin recuperó el color al salir disparado del barco. Sin pensárselo dos veces, se
fue andando a Ribeira Grande en compañía de dos oficiales. Un castillo en ruinas
y una catedral dominaban el pueblo. Pronto se hicieron con los servicios de un
cura negro y un español para que les guiaran por los alrededores. Darwin quedó
encantado ante la grandiosidad de aquellas inmensas llanuras de lava. Tampoco
perdió ocasión de observar las costumbres de algunos animales marinos y, sobre
todo, del pulpo. (Alberto Cañagueral)
“Ha sido un día grandioso. Algo así como si un ciego recobrara la vista de
golpe. Al principio, se quedaría sorprendido ante lo que viera y le costaría
entenderlo. Esto es lo que yo siento y seguiré sintiendo”.

En Sao Tiago, Darwin apreció que la geología de la isla era la parte más
interesante de su historia natural. La línea de roca dura y blanda que se extendía
de forma horizontal a una altura de alrededor de trece metros sobre la misma base
de los acantilados fue lo primero que le llamó poderosamente la atención al tocar
puerto. Aquella formación era calcárea y contenía numerosas conchas, la mayoría
de las cuáles se podía encontrar en la costa. Darwin dedujo que en tiempos
lejanos la corriente de lava de los antiguos volcanes se precipitó encima del
anterior lecho del mar de conchas y corales, ayudando gradualmente a formar
aquella línea de roca dura y blanca. En parte alguna descubrió signos de reciente
actividad volcánica. Ni siquiera formas de cráter en las colinas de ceniza roja.
También llegó a la conclusión de que la superficie de la isla se había tenido que
formar por una sucesión de actividades volcánicas, y no solamente como
consecuencia de una de ellas. (Alberto Cañagueral)
Llegada a Valparaíso (23 de julio). Charles Darwin:
Durante la noche el Beagle echa el ancla en la bahía de
Valparaíso, principal puerto de Chile. Al amanecer nos
encontramos en cubierta. Acabamos de abandonar Tierra
del Fuego; ¡qué cambio!, ¡que delicioso nos parece todo
esto aquí: tan transparente es la atmósfera, tan puro y
azul es el cielo, tanto brilla el sol, tanta vida parece rebosar la naturaleza! Desde el
lugar en que hemos anclado, la vista es preciosa. La ciudad se alza al pie de una
cadena de colinas bastante escarpadas y que tienen cerca de 1.600 pies (480
metros) de altitud. Debido a esa situación, Valparaíso no es sino una larga calle
paralela a la costa: pero cada vez que un barranco abre el flanco de las montañas,
las casas se amontonan a uno y otro lado. Una vegetación muy escasa cubre esas
colinas redondeadas y los lados rojo vivo de los numerosos barranquillos que las
separan brillan al sol. El color del terreno, las casas bajas blanqueadas con cal y
cubiertas de tejas, me recordaban mucho a Santa Cruz de Tenerife. Hacia el
nordeste hay una vista espléndida de los Andes, pero desde lo alto de las colinas
vecinas se les ve mucho mejor; se puede apreciar la gran distancia a que se
hallan situados y el panorama es magnífico. El volcán Aconcagua ofrece un
aspecto particularmente imponente. Esa inmensa masa irregular alcanza una
altitud más considerable que el Chimborazo, porque, según las triangulaciones
hechas por los oficiales del Beagle, llegan a una altitud de 23.000 pies (6.900
metros). Sin embargo, vista desde donde nos hallamos, la Cordillera debe una
gran parte de su belleza a la atmósfera a través de la que se divisa.
Equilibrio puntuado

La teoría del equilibrio puntuado,1 también denominado equilibrio


interrumpido, es una teoría del campo de la evolución biológica propuesta por
Niles Eldredge y Stephen Jay Gould en 1972.2
Lo específico de la teoría del equilibrio puntuado tiene que ver con el ritmo al que
evolucionan las especies. Según Adrede y Gould, durante la mayor parte del
tiempo de existencia de una especie ésta permanecería estable o con cambios
menores (periodos de estasis), acumulándose cambio evolutivo durante el proceso
de especiación (formación de una especie nueva), que sería una especie de
revolución genética breve en términos geológicos. No se discute el carácter
gradual del cambio evolutivo, sino que se niega la uniformidad de su ritmo. Las
diferencias entre la “teoría sintética” y la “teoría del equilibrio puntuado” se refieren
no solo al tiempo (rápido o lento) de la evolución, sino también al modo en que
ésta se despliega. Así, los neo darwinistas defienden que la evolución se
desarrolla en el tiempo, básicamente, según un patrón lineal o filogenético,
mientras que los puntuacioncitas son partidarios de una evolución en mosaico, es
decir: ramificada. La idea de aquellos es la sucesión lineal de una especie a otra;
para estos, en cambio, una especie ancestral da lugar a múltiples especies
descendientes que, a su vez, o se extinguen o continúan ramificándose.3
En el registro fósil se observa a menudo que las especies permanecen estables
durante un tiempo para luego desaparecer o transformarse de forma
aparentemente brusca. El gradual ismo explica este hecho por las imperfecciones
del registro geológico, mientras que según la hipótesis del equilibrio puntuado este
hecho sería una consecuencia directa del modo en que las especies evolucionan,
haciendo relativamente improbable la fosilización de las formas de transición. Esa
improbabilidad aumenta si, como la teoría supone, la especiación se produce
sobre todo en situaciones de crisis, en poblaciones de distribución localizada y
efectivo reducido.
Niles Eldredge,[…] estudió con ahínco colecciones enteras de trilobites cámbricos
primorosamente conservados, en busca de transiciones graduales de una especie
a sus especies descendientes. Tanto en Marruecos como en el estado de Nueva
York, peinó cuidadosamente los sedimentos en secuencias estratigráficas. Halló,
de capa en capa, algunas variaciones en el tamaño y en la forma del caparazón,
pero en ningún caso encontró alguna tendencia clara que indicara una lenta
transición entre una especie y otra. Más bien parecía que la presencia de la misma
especie proseguía, con pequeñas variaciones aleatorias, a lo largo de 800.000
años. De repente aparecía otra, que superaba a la anterior en 1,3 millones de
años. La búsqueda de formas intermedias y de cambio evolutivo gradual entre
ambas demostró ser siempre fútil. Las rocas sedimentarias en las que duermen
los gloriosos registros fósiles no mienten ni engañan. El registro era puntuado, las
diferencias entre especies de animales extintos atrapadas en el tiempo eran claras
y perfectamente distinguibles. Las pequeñas variaciones dentro de una misma
especie, indicativas de cambios en la frecuencia de sus genes, oscilaban arriba y
abajo sin dirección aparente («equilibrio» dentro del «equilibrio puntuado»). La
aparición de especies y géneros nuevos, así como la pérdida de otros por
extinción demostraban ser siempre discontinuas (ahí reside la «puntuación»).

Mutación

Una mutación se define como cualquier cambio en la secuencia de un nucleótido


o en la organización del ADN (genotipo) de un ser vivo, que produce una variación
en las características de este y que no necesariamente se transmite a la
descendencia. Se presenta de manera espontánea y súbita o por la acción de
mutágenos. Este cambio estará presente en una pequeña proporción de la
población (variante) o del organismo (mutación). La unidad genética capaz de
mutar es el gen, la unidad de información hereditaria que forma parte del ADN.

En los seres pluricelulares, las mutaciones solo pueden ser heredadas cuando
afectan a las células reproductivas. Una consecuencia de las mutaciones puede
ser, por ejemplo, una enfermedad genética. Sin embargo, aunque a corto plazo
pueden parecer perjudiciales, las mutaciones son esenciales para nuestra
existencia a largo plazo. Sin mutación no habría cambio, y sin cambio la vida no
podría evolucionar.
Tipos de mutación según sus consecuencias

Las consecuencias fenotípicas de las mutaciones son muy variadas, desde


grandes cambios hasta pequeñas diferencias tan sutiles que es necesario emplear
técnicas muy desarrolladas para su detección.2 3

Mutaciones morfológicas

Afectan a la morfología del individuo, a su distribución corporal. Modifican el color


o la forma de cualquier órgano de un animal o de una planta. Suelen producir
malformaciones. Un ejemplo de una mutación que produce malformaciones en
humanos es aquella que determina la neurofibromatosis. Esta es una enfermedad
hereditaria, relativamente frecuente (1 en 3.000 individuos), producida por una
mutación en el cromosoma 17 y que tiene una penetrantica del 100 % y
expresividad variable. Sus manifestaciones principales son la presencia de
neurofibromas, glioma del nervio óptico, manchas cutáneas de color café con
leche, hamartomas del iris, alteraciones óseas (displasia del esfenoide,
adelgazamiento de la cortical de huesos largos). Con frecuencia hay retardo
mental y macrocefalia.4

Mutaciones letales y deletéreas

Son las que afectan la supervivencia de los individuos, ocasionándoles la muerte


antes de alcanzar la madurez sexual. Cuando la mutación no produce la muerte,
sino una disminución de la capacidad del individuo para sobrevivir y/o
reproducirse, se dice que la mutación es deletérea. Este tipo de mutaciones
suelen producirse por cambios inesperados en genes que son esenciales o
imprescindibles para la supervivencia del individuo. En general las mutaciones
letales son recesivas, es decir, se manifiestan solamente en homocigosis o bien,
en hemicigosis para aquellos genes ligados al cromosoma X en humanos, por
ejemplo.2 5

Mutaciones condicionales

Las mutaciones condicionales (incluidas las condicionalmente letales) son muy


útiles para estudiar aquellos genes esenciales para la bacteria. En estos mutantes
hay que distinguir dos tipos de condiciones:

condiciones restrictivas (también llamadas no-permisivas): son aquellas


condiciones ambientales bajo las cuales el individuo pierde la viabilidad, o su
fenotipo se ve alterado, debido a que el producto afectado por la mutación pierde
su actividad biológica.

Condiciones permisivas: son aquellas bajo las cuales el producto del gen
mutado es aún funcional.
Mutaciones bioquímicas o nutritivas

Son los cambios que generan una pérdida o un cambio de alguna función
bioquímica como, por ejemplo, la actividad de una determinada enzima. Se
detectan ya que el organismo que presenta esta mutación no puede crecer o
proliferar en un medio de cultivo por ejemplo, a no ser que se le suministre un
compuesto determinado. Los microorganismos constituyen un material de elección
para estudiar este tipo de mutaciones ya que las cepas silvestres solo necesitan
para crecer un medio compuesto por sales inorgánicas y una fuente de energía
como la glucosa. Ese tipo de medio se denomina mínimo y las cepas que crecen
en él se dicen prototróficas. Cualquier cepa mutante para un gen que produce una
enzima perteneciente a una vía metabólica determinada, requerirá que se
suplemente el medio de cultivo mínimo con el producto final de la vía o ruta
metabólica que se encuentra alterada. Esa cepa se llama autotrófica y presenta
una mutación bioquímica o nutritiva.6

Mutaciones de pérdida de función

Las mutaciones suelen determinar que la función del gen en cuestión no se pueda
llevar a cabo correctamente, por lo que desaparece alguna función del organismo
que la presenta. Este tipo de mutaciones, las que suelen ser recesivas, se
denominan mutaciones de pérdida de función. Un ejemplo es la mutación del gen
hTPH2 que produce la enzima triptófano hidroxilos en humanos. Esta enzima está
involucrada en la producción de serotonina en el cerebro. Una mutación (G1463A)
de hTPH2 determina aproximadamente un 80 % de pérdida de función de la
enzima, lo que se traduce en una disminución en la producción de serotonina y se
manifiesta en un tipo de depresión llamada depresión unipolar.7

Mutaciones de ganancia de función

Cuando ocurre un cambio en el ADN, lo más normal es que corrompa algún


proceso normal del ser vivo. Sin embargo, existen raras ocasiones donde una
mutación puede producir una nueva función al gen, generando un fenotipo nuevo.
Si ese gen mantiene la función original, o si se trata de un gen duplicado, puede
dar lugar a un primer paso en la evolución. Un caso es la resistencia a antibióticos
desarrollada por algunas bacterias (por eso no es recomendable hacer un uso
abusivo de algunos antibióticos ya que finalmente el organismo patógeno irá
evolucionando y el antibiótico no le hará ningún efecto).

Síndrome de Klinefelter

El síndrome de Klinefelter se considera la anomalía gonosómica más común en


los humanos. Los afectados presentan un cromosoma “X” supernumerario lo que
conduce a fallo testicular primario con infertilidad e hipoandrogenismo. A pesar de
la relativa frecuencia del padecimiento en recién nacidos vivos, se estima que la
mitad de los productos 47, XXY se abortan de manera espontánea.

Síndrome de Turner

El síndrome de Turner o Monofonía X es una enfermedad genética caracterizada


por presencia de un solo ‘cromosoma X’. La falta de cromosoma Y determina el
sexo femenino de todos los individuos afectados, y la ausencia de todo o parte del
segundo cromosoma X determina la falta de desarrollo de los caracteres sexuales
primarios y secundarios. Esto confiere a las mujeres que padecen el síndrome de
Turner un aspecto infantil e infertilidad de por vida.

Tipos de mutación según el mecanismo causal

Según el mecanismo que ha provocado el cambio en el material genético, se suele


hablar de tres tipos de mutaciones: mutaciones cariotípicas o genómicas,
mutaciones cromosómicas y mutaciones génicas o moleculares. En el
siguiente cuadro se describen los diferentes tipos de mutaciones y los
mecanismos causales de cada una de ellas.2 3
Mutación y evolución

Las mutaciones son la materia prima de la evolución biológica. La evolución tiene


lugar cuando una nueva versión de un gen, que originalmente surge por una
mutación, aumenta su frecuencia y se extiende a la especie gracias a la selección
natural o a tendencias genéticas aleatorias (fluctuaciones casuales en la
frecuencia de los genes). Antes se pensaba que las mutaciones dirigían la
evolución, pero en la actualidad se cree que la principal fuerza directora de la
evolución es la selección natural, no las mutaciones. No obstante, sin mutaciones
las especies no evolucionarían.

La selección natural actúa para incrementar la frecuencia de las mutaciones


ventajosas, que es como se produce el cambio evolutivo, ya que esos organismos
con mutaciones ventajosas tienen más posibilidades de sobrevivir, reproducirse y
transmitir las mutaciones a su descendencia.

La selección natural actúa para eliminar las mutaciones desventajosas; por tanto,
está actuando continuamente para proteger a la especie de la decadencia
mutacional. Sin embargo, la mutación desventajosa surge a la misma velocidad a
la que la selección natural la elimina, por lo que las poblaciones nunca están
completamente limpias de formas mutantes desventajosas de los genes. Esas
mutaciones que no resultan ventajosas pueden ser el origen de enfermedades
genéticas que pueden transmitirse a la siguiente generación.

La selección natural no actúa sobre las mutaciones neutrales, pero las mutaciones
neutrales pueden cambiar de frecuencia por procesos aleatorios. Existen
controversias sobre el porcentaje de mutaciones que son neutrales, pero
generalmente se acepta que, dentro de las mutaciones no neutras, las mutaciones
desventajosas son mucho más frecuentes que las mutaciones ventajosas. Por
tanto, la selección natural suele actuar para reducir el porcentaje de mutaciones al
mínimo posible; de hecho, el porcentaje de mutaciones observado es bastante
bajo.
Jean-Batiste Lamarck
Jean-Batiste Pierre Antoine de Monet Chevalier de Lamarck (Bazentin, 1 de
agosto de 1744 – París, 18 de diciembre de 1829) fue un naturalista francés, uno
de los grandes hombres de la época de la sistematización de la Historia Natural,
cercano en su influencia a Linneo, Leclerc y Cuvier.

Lamarck formuló la primera teoría de la evolución biológica,1 en 1802 acuñó el


término «biología» para designar la ciencia de los seres vivos y fue el fundador de
la paleontología de los invertebrados.

La biología como ciencia

Lamarck reclama para la biología la necesidad de una filosofía propia:

Sabemos que cualquier ciencia debe tener su filosofía y que sólo por ese camino
hace progresos reales. Los naturalistas gastarán vanamente su tiempo
describiendo nuevas especies, captando nuevos matices, todas las pequeñas
particularidades de sus variaciones para agrandar la inmensa lista de las especies
inscritas [...] Si la filosofía de la ciencia se descuida, sus progresos no serán reales
y la obra entera quedará imperfecta

Philosophia Zoologica, pp. 69-70

Lamarck distingue entre universo (conjunto de la materia) y naturaleza (orden de


cosas particular y constante). Esta distinción general es paralela a la establecida
entre hechos y relaciones: para Lamarck no sólo es necesaria la observación y
estudio de los hechos y objetos, sino también de sus partes, las relaciones entre
estas y las relaciones de los objetos con los demás y de todos ellos con su
entorno. El naturalista ha de estar siempre atento para que las leyes que postula
no procedan de la imaginación, sino de la realidad empírica. Su trabajo ha de
consistir en observar y recopilar los hechos y, por vía de sucesivas inducciones,
abstraer con rigor lógico las leyes que los expliquen del modo más amplio y
consistente.

Clasificación de los seres vivos

La clasificación lamarckiana se basa en criterios funcionales. El sistema nervioso


central es el punto de partida, pues a partir de su centralización y complejidad
progresiva puede construirse la cadena de los seres. Así, Lamarck clasifica a los
animales en tres grandes grupos: aquellos dotados de irritabilidad (invertebrados
inferiores), aquellos que poseen además el «sentimiento interior» (invertebrados
superiores) y aquellos que revelan inteligencia y voluntad (vertebrados).

Naturaleza y origen de la vida

Para Lamarck, la vida es un fenómeno natural consistente en un modo peculiar de


organización de la materia. En este sentido, considera que los organismos vivos
están formados por los mismos elementos y las mismas fuerzas físicas que
componen la materia inanimada; los reinos animal y vegetal sólo difieren, por
tanto, del reino mineral por el modo de organización interna de los mismos
elementos (HNASV).

A partir de su concepto de vida, Lamarck radica en la generación espontánea,


todavía en debate en aquella época, el mecanismo de su origen: el movimiento de
la materia provocado por la acción de las fuerzas de la naturaleza es capaz de
generar de manera espontánea a los organismos vivos más sencillos. A partir de
ellos, la naturaleza continúa su tendencia al progresivo incremento de complejidad
a medida que cada organismo va siendo sustituido por otros dotados de más
órganos y facultades. Valiéndose también de la generación espontánea para
explicar la coexistencia temporal de organismos de distinto grado de complejidad.
Teoría de la evolución de Lamarck (lamarckismo o
transformismo)

Artículo principal: Lamarckismo

Lamarck formuló la primera teoría de la evolución. Propuso que la gran variedad


de organismos, que en aquel tiempo se aceptaba que eran formas estáticas
creadas por Dios, habían evolucionado desde formas simples; postulando que los
protagonistas de esa evolución habían sido los propios organismos por su
capacidad de adaptarse al ambiente: los cambios en ese ambiente generaban
nuevas necesidades en los organismos, y esas nuevas necesidades conllevarían
una modificación de los mismos que sería heredable.

Se apoyó para la formulación de su teoría en la existencia de restos de formas


intermedias extintas. Con su teoría se enfrentó a la creencia general por la que
todas las especies habían sido creadas y permanecían inmutables desde su
creación. También se enfrentó al influyente Cuvier5 que justificó la desaparición de
especies, no porque fueran formas intermedias entre las primigenias y las
actuales, sino porque se trataba de formas de vida diferentes, extinguidas en los
diferentes cataclismos geológicos sufridos por la Tierra.

La teoría de Lamarck es una teoría sobre la evolución de la vida, no sobre su


origen, que, en aquel entonces, se aceptaba, surgía espontáneamente en sus
formas más simples. Sería 50 años después cuando Pasteur demostrara que todo
proceso de fermentación y descomposición orgánica se debe a la acción de
organismos vivos y que el crecimiento de los microorganismos en caldos nutritivos
no era debido a la generación espontánea. Lamarck tuvo que esbozar su teoría en
un tiempo en el que el estado de las ciencias naturales era “caótico”, “formuladas
en una época en que ni siquiera se podía entrever la posibilidad lejana de
fundarlas sobre hechos evidentes”.6

El estado caótico del conocimiento en torno a los fósiles, la anatomía y la


taxonomía antes del evolucionismo, la pregunta: «¿Cómo es que a nadie se le
ocurrió antes pensar en el evolucionismo?» se convierte en «¿Cómo es posible
que a alguien se le ocurriera pensar en el evolucionismo?».

León Harris.

Para Lamarck, la observación de la naturaleza, donde los organismos se


encuentran perfectamente adaptados al ambiente en el que se desarrollan, llevaba
a la siguiente alternativa: o los organismos fueron creados con todas las
adaptaciones a todos los ambientes existentes en la Tierra y estos ambientes no
habían cambiado desde sus orígenes, como se aceptaba entonces; o los
organismos se adaptaban a estos ambientes y por consiguiente iban modificando
su estructura conforme el ambiente iba cambiando, como él proponía. 7

Lamarck, al tiempo que formuló la evolución de la vida, formuló un mecanismo por


el que ésta evolucionaría. Para Lamarck la naturaleza habría obrado mediante
“tanteos”: “Con relación a los cuerpos vivientes, la Naturaleza ha procedido por
tanteos y sucesivamente”,8 y su teoría podría sintetizarse en: las circunstancias
crean la necesidad, esa necesidad crea los hábitos, los hábitos producen las
modificaciones como resultado del uso o desuso de determinado órgano y los
medios de la Naturaleza se encargan de fijar esas modificaciones. Describió esta
evolución como consecuencia de seis puntos:

1. Todos los cuerpos organizados (organismos) de la Tierra han sido


producidos por la naturaleza sucesivamente y después de una enorme
sucesión de tiempo.
2. En su marcha constante, la Naturaleza ha comenzado, y recomienza aún
todos los días, por formar los cuerpos organizados más simples, y que no
forma directamente más que éstos. Es decir, que estos primeros bosquejos
de organismos son los que se ha designado con el nombre de
generaciones espontáneas.
3. Estando formados los primeros bosquejos del animal y del vegetal han
desarrollado poco a poco los órganos y con el tiempo se han diversificado.
4. La facultad de reproducción inherente en cada organismo ha dado lugar a
los diferentes modos de multiplicación y de regeneración de los individuos.
Por ello los progresos adquiridos se han conservado.
5. Con la ayuda de un tiempo suficiente, de las circunstancias, de los cambios
surgidos en la Tierra, de los diferentes hábitos que ante nuevas situaciones
los organismos han tenido que mantener, surge la diversidad de éstos.
6. Los cambios en su organización y de sus partes, lo que se llama especie,
han sido sucesiva é insensiblemente formados. Por lo que la especie no
tiene más que una constancia relativa en su estado y no puede ser tan
antigua como la Naturaleza.9

Formulando dos leyes:

Así, para llegar a conocer las verdaderas causas de tantas formas diversas y de
tantos hábitos diferentes como nos ofrecen los animales, es preciso considerar
que las circunstancias infinitamente diversificadas, en las cuales se han
encontrado los seres de cada raza, han producido para cada uno de ellos
necesidades nuevas y cambios en sus hábitos necesariamente. Reconocida esta
verdad, que nadie podrá negar, será fácil percibir cómo las nuevas necesidades
han podido ser satisfechas y los nuevos hábitos adquiridos, si se presta alguna
atención a las dos siguientes leyes de la Naturaleza, que siempre ha comprobado
la observación:

Primera ley: en todo animal que no ha traspasado el término de sus desarrollos,


el uso frecuente y sostenido de un órgano cualquiera lo fortifica poco a poco,
dándole una potencia proporcionada a la duración de este uso, mientras que el
desuso constante de tal órgano le debilita y hasta lo hace desaparecer.

Segunda ley: todo lo que la Naturaleza hizo adquirir o perder a los individuos por
la influencia de las circunstancias en que su raza se ha encontrado colocada
durante largo tiempo, y consecuentemente por la influencia del empleo
predominante de tal órgano, o por la de su desuso, la Naturaleza lo conserva por
la generación en los nuevos individuos, con tal de que los cambios adquiridos
sean comunes a los dos sexos, o a los que han producido estos nuevos
individuos.

Lamarck, Filosofía zoológica. P. 175-176.

Lamarck, con estas leyes, sostuvo que si una “raza” (esto es, un grupo de
organismos) estaba sometida a las mismas condiciones ambientales y estas
condiciones se prolongaran durante mucho tiempo, se transformarían
adaptándose a ese ambiente. Como mecanismo, propuso que las trasformaciones
que los organismos sufrimos en vida sometidos a los diferentes ambientes, con el
tiempo se fijarían en su descendencia, lo que hoy conocemos como transferencia
horizontal. Advirtió que ese proceso es un proceso tan lento que desde nuestra
capacidad de observación pasaría inadvertido. Según estas leyes los cambios se
producen no en el individuo sino en la población (no en uno o varios individuos,
sino en el conjunto de individuos del grupo) y no son cambios inmediatos sino que
se fijarían a lo largo de un prolongado proceso.

las variaciones en las circunstancias para los seres vivientes, y sobre todo para los
animales, producen cambios en sus necesidades, en sus hábitos y en el modo de
existir, y si estos cambios dan lugar a modificaciones o desarrollos en los órganos
o en la forma de sus partes, se debe inducir que insensiblemente todo cuerpo
viviente cualquiera debe variar en sus formas o sus caracteres exteriores, aunque
semejantes variaciones no llegasen a ser sensibles más que después de un
tiempo considerable. […] En cada lugar donde los seres pueden habitar, las
circunstancias que establecen en él un orden de cosas permanecen largo tiempo
siendo las mismas y no cambian en realidad más que con una lentitud tan grande,
que el hombre no puede advertirlas directamente. Está obligado a consultar los
monumentos para reconocer que en cada uno de aquellos lugares el orden de
cosas establecido no ha sido siempre el mismo. Las razas de animales que viven
en cada uno de ellos deben conservar en él largo tiempo sus hábitos. De aquí
para nosotros la aparente constancia de las razas que llamamos especies,
constancia que hizo nacer en nuestro pensamiento la idea de que las razas son
tan antiguas como la Naturaleza.

Lamarck, Filosofía zoológica, pp. 69, 174.

Las ideas de Lamarck no fueron tomadas en cuenta en su época, aunque su libro


filosofía zoológica, donde plasmó su teoría, circuló por Francia y también por
Inglaterra, obra a la que tuvo acceso el propio Darwin.10

Fue después de formulada la teoría de la selección natural cuando los


evolucionistas retomaron el pensamiento de Lamarck intentando suplir el vacío
que la selección natural dejaba al no explicar la fuente de la variabilidad sobre la
que tal selección actuaba. El propio Darwin, al tiempo que denostaba la teoría de
Lamarck, intentó cubrir ese vacío postulando la “pan génesis”, un mecanismo de
transferencia horizontal lamarkiano.11 Y sería a principios del siglo XX cuando
Weismann lo refutara con la formulación de la conocida como “barrera Weismann”
por la que se consideraba que existiendo dos líneas, la germinal y la somática, no
cabría la posibilidad de transferencia de información entre la una y la otra.
Malinterpretando a Lamarck desarrolló un experimento que supuestamente
refutaba su teoría: cortó el rabo a sucesivas generaciones de ratones para
demostrar que sus descendientes no nacían con el rabo cortado. 12

Desde entonces, el Lamarckismo se ha simplificado con argumentos que vienen a


caricaturizarlo: “En pueblos donde el herrero hereda el oficio de su padre, su
abuelo y su abuelo, se pensaba que heredaba también unos músculos bien
desarrollados. sólo los heredaba sino que los desarrollaba más con el ejercicio, y
pasaba estas mejoras a su hijo”.13 14 15 Ya en vida, Lamarck se tendría que
defender de argumentos parecidos:
No obstante, se objeta todavía que todo lo que se ve anuncia, relativamente al
estado de los cuerpos vivientes, una constancia inalterable en la conservación de
su forma, y se piensa que todos los animales cuyo recuerdo nos ha transmitido la
historia resaltan siempre los mismos y no han perdido ni adquirido nada en el
perfeccionamiento de sus órganos y en la forma de sus partes. [...]

“No se puede por menos —dicen los autores— contener los vuelos de la
imaginación, cuando todavía se ve conservado con sus menores huesos, sus
menores pelos y sus menores detalles tal animal que antes tenía en Tobas o en
Menfis sacerdotes y altares. Pero sin extraviarnos en todas las ideas que hacen
nacer semejantes aproximaciones, limítense a exponer que estos animales son
perfectamente semejantes a los actuales” (Anales del Museo de Historia Natural.)
[...]

Nada existe, por tanto, en la observación que acaba de ser citada que resulte
contrario a las consideraciones que llevo expuestas sobre este asunto, ni que
pruebe que los animales de que se trata hayan existido en todo tiempo en la
Naturaleza, pues demuestra solamente que vivían en Egipto hace dos o tres mil
años. Y todo hombre que posee el hábito de reflexionar y de observar al propio
tiempo los documentos de la enorme antigüedad que muestra la Naturaleza,
aprecia en su verdadero valor la insignificante cifra de tres mil años con relación a
las épocas geológicas.

Lamarck, Filosofía zoológica.

Durante el siglo XX el lamarckismo ha sido defendido por diferentes


evolucionistas,16 y el conocido como “efecto Baldwin” (enunciado por James Marck
Baldwin y C. Loyd Morgan a finales del siglo XIX), una versión edulcorada de
lamarckismo según la cual los hábitos sostenidos de las especies, por selección
natural, se fijarían en la herencia, se mantiene como plausible para resolver
algunas dificultades del neodarwinismo.17 18

Avanzado el siglo XX, la “barrera Weismann” se ha mostrado franqueable, sin


poderse probar que los caracteres adquiridos no puedan llegar a ser heredables. 19
20 La transferencia horizontal se ha demostrado en casos, y se ve en los virus, con

su capacidad de intercambio genético, a los posibles actores de tales


transferencias. También, en la simbiosis, se ha demostrado la existencia de
transferencia genética, y en su grado de máxima integración, la simbiogénesis, ha
demostrado la eclosión de nuevas individualidades, quimeras que integran a sus
simbiontes. El paso de procariotas a eucariotas, descrito en la endosimbiosis
seriada, fue consecuencia de estos procesos si biogenéticos; aunque Mayr y
Maynard Smith en los años 90 opinaban que estos procesos nada tienen que ver
con el Lamarckismo. Gould (1977) diría: “Dudo que el lamarckismo pueda volver a
experimentar un resurgimiento como teoría viable de la evolución” Al día de hoy,
en mayoría, la comunidad científica considera el paradigma neodarwinista
satisfactorio para explicar la evolución biológica
Selección natural

La selección natural es un fenómeno de la evolución que se define como la


reproducción diferencial de los genotipos de una población biológica. La
formulación clásica de la selección natural establece que las condiciones de un
medio ambiente favorecen o dificultan, es decir, seleccionan la reproducción de los
organismos vivos según sean sus peculiaridades. La selección natural fue
propuesta por Darwin como medio para explicar la evolución biológica. Esta
explicación parte de tres premisas; la primera de ellas el rasgo sujeto a selección
debe ser heredable. La segunda sostiene que debe existir variabilidad del rasgo
entre los individuos de una población. La tercera premisa aduce que la variabilidad
del rasgo debe dar lugar a diferencias en la supervivencia o éxito reproductor,
haciendo que algunas características de nueva aparición se puedan extender en la
población. La acumulación de estos cambios a lo largo de las generaciones
produciría todos los fenómenos evolutivos.

En su forma no inicial, la teoría de la evolución por selección natural constituye el


gran aporte1 de Charles Darwin (e, independientemente, por Alfred Russel
Wallace), fue posteriormente reformulada en la actual teoría de la evolución, la
síntesis moderna. En biología evolutiva se la suele considerar la principal causa
del origen de las especies y de su adaptación al medio.

La selección natural puede ser expresada como la siguiente ley general, tomada
de la conclusión de El origen de las especies:

Existen organismos que se reproducen y la progenie hereda características de sus


progenitores, existen variaciones de características si el medio ambiente no
admite a todos los miembros de una población en crecimiento. Entonces aquellos
miembros de la población con características menos adaptadas (según lo
determine su medio ambiente) morirán con mayor probabilidad. Entonces aquellos
miembros con características mejor adaptadas sobrevivirán más probablemente.
En la teoría moderna

Gráfico demostrando la resistencia de una población a un cambio en el ambiente y


su población antes y después del mismo. Nótese que mientras los rojos oscuros
fueron favorecidos por este cambio ambiental, una variación distinta puede
favorecer a los amarillos o intermedios.

En la teoría sintética la selección natural no es la única causa de evolución,


aunque sí la que tiene un papel más destacado. El concepto de selección natural
se define ahora de un modo más preciso: como la reproducción diferencial de los
genotipos en una población. Desde el momento en que existen diferencias en
éxito reproductivo de las distintas variantes genéticas, existe selección natural. Por
ejemplo: si los individuos más verdosos en una población de insectos-hoja aportan
unos tres descendientes a la siguiente generación, y los individuos marrones
aportan como media 1,5 descendientes, está habiendo selección a favor de los
verdes. Las diferencias en éxito reproductivo pueden ocurrir por diversas causas
(diferente fertilidad, riesgo de muerte por depredadores, atractivo sexual,
capacidad para explotar los recursos alimenticios, etc.).

Figuras importantes del síntesis, y los tres fundadores de la genética de las


poblaciones, fueron Ronald Fisher, quién escribió The Genetical Theory of Natural
Selection en 1930, J.B.S. Haldane, quién introdujo el concepto del «costo» de la
selección natural,2 , y Sewall Wright, quién elucidó sobre la selección y la
adaptación,3

Generalmente, existe una correlación entre la eficacia reproductiva de los


portadores de un genotipo y la adaptación al medio que éste les otorga. Por tanto,
los rasgos que confieren ventajas adaptativas comúnmente son seleccionados a
favor y propagados en las poblaciones (en algunos casos, un genotipo podría
otorgar éxito reproductivo sin aportar mayor adaptación al medio, y sería
seleccionado igualmente). La teoría de la selección natural aportó por primera vez
una explicación científica satisfactoria para múltiples enigmas científicos del
mundo biológico, especialmente el de la “apariencia de diseño” que existe en los
seres vivos. Permitió, por tanto, que la Biología pudiera prescindir de los
elementos divinos y sobrenaturales y se convirtiera así en una auténtica ciencia.

Hoy en día, la evolución por selección natural se estudia en diversos tipos de


organismos, mediante experimentos de laboratorio y de campo, y se desarrollan
métodos para averiguar qué genes han estado recientemente sometidos a la
acción de la selección natural y con qué intensidad.

Aptitud

Artículo principal: Aptitud biológica

El concepto de aptitud es clave en la selección natural. A grandes rasgos, los


individuos que son más aptos tienen mayor potencial de supervivencia, similar a la
popular frase «supervivencia del más apto». Sin embargo, y como ocurre con el
término selección natural, el significado preciso es más sutil. Richard Dawkins lo
evita totalmente en sus últimos libros, aunque dedica un capítulo de su libro El
fenotipo extendido a discutir sobre los distintos sentidos en que el término se usa.
La teoría evolutiva moderna define la aptitud no sobre la base de cuánto vive el
organismo, sino sobre la base de cuánto se reproduce. Si un organismo vive la
mitad que otros de su especie, pero en comparación con el resto, el doble de sus
descendientes llegan a la edad adulta; entonces sus genes sobrevivirán y se
propagarán a la siguiente generación.

Aunque la selección natural opera sobre los individuos, los efectos del azar hacen
que la aptitud sólo pueda ser definida en promedio para los individuos de una
población. La aptitud de un determinado genotipo corresponde al efecto medio
sobre todos los individuos con ese genotipo. Los genotipos de muy baja aptitud
causan que sus portadores tenga muy poca —o ninguna— descendencia en
promedio. Se pueden citar como ejemplos muchas enfermedades genéticas
humanas, como la fibrosis quística.

Como la aptitud es una cantidad promediada, es también posible que una


mutación favorable que se dé en un individuo no llega a propagarse al grupo si el
individuo fallece antes de la edad adulta por otros motivos. La aptitud depende
totalmente del entorno. Condiciones como la anemia de células falciformes son
muy inaptas en la población humana general. Sin embargo, la anemia de células
falciformes confiere al portador inmunidad a la malaria por lo que su aptitud en
entornos con altas tasas de infección de malaria es muy alta.

Tipos de selección natural

La selección natural puede actuar sobre cualquier rasgo fenotípico heredable y


cualquier aspecto del entorno puede producir presión selectiva, esto incluye la
selección sexual y la competición con miembros tanto de la misma como de otra
especie. Sin embargo, esto no implica que la selección natural siga siempre una
dirección y que resulte en evolución adaptativa. La selección natural produce a
menudo el mantenimiento del statu quo mediante la eliminación de las variantes
menos aptas.

La unidad de selección puede ser el individuo u otro nivel dentro de la jerarquía de


organización biológica como los genes, las células y los grupos familiares. La
cuestión sobre si la selección natural actual a nivel de grupo (o especie) para
producir adaptaciones que benefician a un grupo mayor, sin vínculos familiares,
suscita aún un tenue debate. Así mismo, existe un cierto debate sobre si la
selección a nivel molecular anterior a mutaciones genéticas y a la fertilización del
zigoto debe considerarse selección natural convencional puesto que
tradicionalmente se ha llamado selección natural a una fuerza exterior y ambiental
que actúa sobre un fenotipo después del nacimiento. Algunas revistas científicas
distinguen entre selección natural y selección genética llamando informalmente a
la selección de mutaciones como preselección.4

La selección a otros niveles, como el gen, puede resultar en una mejora para el
gen y al mismo tiempo en un perjuicio para el individuo portador del gen. Este
proceso se denomina conflicto intragenómico. En conjunto, el efecto combinado de
todas las presiones a los distintos niveles (gen, individuo, grupo) es lo que
determina la aptitud de un individuo y por tanto el resultado de la selección natural.

La selección natural ocurre en cada etapa de la vida de un individuo. Un


organismo ha de sobrevivir hasta la edad adulta para poder reproducirse. La
selección de aquellos que alcanzan la etapa adulta es llamada selección de
viabilidad. En muchas especies los adultos han de competir entre sí para
conseguir parejas sexuales. Este mecanismo se denomina selección sexual y el
éxito en la misma determina quienes serán los padres de la siguiente generación.
Cuando los individuos pueden reproducirse en más de una ocasión, la
supervivencia en la edad adulta aumenta la descendencia. A este proceso se le
llama selección de supervivencia.

La fecundidad, tanto de machos como de hembras, puede verse limitada por la


“selección de fecundidad”. Así, la viabilidad de los gametos producidos variara.
Los conflictos intragenómicos derivan en selección genética. Finalmente, la unión
de algunas combinaciones de óvulos y esperma será estadísticamente más
compatible que otras. A esto se le llama selección por compatibilidad.

Existen 4 Tipos a veces considerados 3 de selección natural, clasificados según


los individuos que sobreviven en cada tipo de selección, es decir, según cuántos
sobrevivan:

 Selección estabilizadora
 Selección direccional
 Selección disruptiva o Selección balanceada
 Selección sexual

Selección estabilizadora

La selección estabilizadora, también llamada selección negativa o selección


purificadora,1 es un tipo de selección natural en el que la diversidad genética
decae según un valor particular de carácter. Puesto de otra manera, los extremos
de una característica son seleccionados en contra, por lo que los organismos con
características del rango “promedio” son los que más sobreviven. Éste es
probablemente el mecanismo de acción más común de la selección natural.
Un ejemplo clásico de esto es el peso prenatal humano. Los bebés de bajo peso
pierden calor de manera más rápida y son más sensibles a las enfermedades por
infección, mas los bebés de alto peso son más difíciles de parir por la pelvis. Así
se demuestra que el peso óptimo (el que da una mayor probabilidad de
supervivencia) es una medida que se encuentra en un rango medio, ni
extremadamente alto, ni extremadamente bajo.
La selección estabilizadora no opera la mayoría de las veces en la mayoría de las
poblaciones. Este tipo de selección actúa para prevenir la divergencia de forma y
función. De esta manera, la anatomía de algunos organismos, como los tiburones
y helechos, ha permanecido sin cambios por millones de años.
La selección estabilizadora puede ser detectada a veces midiendo la idoneidad del
rango de diferentes fenotipos por medio de varias medidas directas, pero también
puede ser detectada con una gran variedad de pruebas de data de secuencias
moleculares, cambios en distribución de frecuencia alélica y la prueba McDonald-
Kreitman.

Selección direccional

La selección direccional, también llamada selección positiva, es un tipo de


selección natural que favorece un solo alelo, y por esto la frecuencia alélica de una
población continuamente va en una dirección. Es opuesta a la selección
balanceada, donde se favorecen varios alelos, o a la selección estabilizadora, que
elimina mutaciones malignas de una población. La selección direccional es un tipo
particular de mecanismo de selección natural.

Selección equilibradora

La selección equilibradora es un tipo de selección natural que simultáneamente


favorece a los individuos de los dos extremos de la distribución de un carácter
biológico. Cuando opera, los individuos de ambos extremos contribuyen con la
mayoría de la prole que aquellos con el carácter en el rango medio, produciendo
así dos elevaciones en la distribución de un carácter particular.

Selección sexual
Dimorfismo sexual entre leones (Panthera leo), resultado de la selección sexual.
La selección sexual es un concepto clave de la teoría de la evolución acuñado
por Charles Darwin en su libro El origen de las especies para explicar el desarrollo
de caracteres sexuales secundarios en los seres vivos que parecían no responder
a la selección natural, es decir, a la supervivencia del mejor adaptado.1 En líneas
generales, postula que ciertos rasgos presentes son el resultado de la
competencia entre individuos de un mismo sexo por el acceso a la cópula
(selección intrasexual) y de la selección por parte de uno de los sexos, usualmente
las hembras, de individuos del sexo opuesto (selección intersexual) .2
Se relaciona directamente a este mecanismo evolutivo con el dimorfismo sexual y
con la presencia de rasgos morfológicos exagerados. Muchos de estos rasgos
morfológicos llegan a suponer una merma en las capacidades adaptativas y de
supervivencia de los animales que los poseen. Para explicar su desarrollo, dentro
de la selección sexual, se postulan dos hipótesis denominadas «de Fisher» y «del
hándicap», concebidas por Ronald Fisher y Amotz Zahavi respectivamente. La
primera de ellas explica este desarrollo exagerado de estructuras fisiológicas en
un sexo por la identificación directa de éstas con genomas superiores por parte de
sus parejas sexuales. La segunda de las hipótesis indica que la presencia de
rasgos morfológicos exagerados lastran la supervivencia de los organismos que
los manifiestan; sus parejas sexuales sentirían preferencia por ellos por ser
capaces de sobrevivir a pesar del hándicap que les suponen estos rasgos.
Los mecanismos de la evolución
Hay dos mecanismos básicos de cambio evolutivo: la selección natural y la deriva
genética. La selección natural favorece a los genes que mejoran la capacidad de
supervivencia y reproducción del organismo. La deriva genética es el cambio
aleatorio en la frecuencia de los alelos, provocado por muestreo aleatorio de los
genes de una generación a la siguiente. El flujo genético es la transferencia de
genes dentro de una población o entre poblaciones. La importancia relativa de la
selección natural y de la deriva genética en una población varía dependiendo de la
fuerza de la selección y del tamaño poblacional efectivo, que es el número de
ejemplares de esa población capaces de reproducirse.159 La selección natural
suele predominar en las poblaciones grandes, mientras que la deriva genética
predomina en las pequeñas. El predominio de la deriva genética en poblaciones
pequeñas puede llevar incluso a la fijación de mutaciones ligeramente
deletéreas.160 Como resultado de ello, los cambios en el tamaño de una población
pueden influir significativamente en el curso de la evolución. Los cuellos de botella
en las poblaciones ―situaciones que llevan a un drástico descenso temporario del
tamaño efectivo― determinan una pérdida o erosión de la variabilidad genética y
conllevan, por lo tanto, a la formación de poblaciones genéticamente más
uniformes. Los cuellos de botella también pueden ser el resultado de alteraciones
en el flujo genético, como una migración reducida, la expansión a nuevos hábitats,
o una subdivisión de la población.

Deriva genética

Artículo principal: Deriva genética

Simulación de la deriva genética de veinte alelos no enlazados en poblaciones de


10 (arriba) y 100 (abajo). La deriva hacia la fijación es más rápida en la población
pequeña.

La deriva genética es el cambio en la frecuencia de los alelos entre una


generación y la siguiente, y tiene lugar porque los alelos de la descendencia son
una muestra aleatoria de los padres, y por el papel que juega el azar en la hora de
determinar si un ejemplar determinado sobrevivirá y se reproducirá.100 En términos
matemáticos, los alelos están sujetos a errores de muestreo. Como resultado de
ello, cuando las fuerzas selectivas están ausentes o son relativamente débiles, la
frecuencia de los alelos tiende a «derivar» hacia arriba o hacia abajo
aleatoriamente (en un paseo aleatorio). Esta deriva se detiene cuando un alelo se
convierte finalmente fijado, es decir, o bien desaparece de la población, o bien
sustituye totalmente el resto de genes. Así pues, la deriva genética puede eliminar
algunos alelos de una población simplemente debido al azar. Incluso en la
ausencia de fuerzas selectivas, la deriva genética puede hacer que dos
poblaciones separadas que empiezan con la misma estructura genética se
separen en dos poblaciones divergentes con un conjunto de alelos diferentes. 181
Selección artificial

La selección “artificial” es la técnica de control reproductivo mediante el cual, el


hombre puede seleccionar los fenotipos de organismos domésticos o cultivados.
Esta técnica usa las características heredables de los organismos, aumentando la
frecuencia con la que aparecen ciertas variaciones genéticas en las siguientes
generaciones; lo cual produce una evolución dirigida, en la que las preferencias
humanas determinan cuales son los rasgos que permiten la supervivencia, y el
traspaso de esas características a la siguiente generación.

La selección artificial es un proceso por el que el hombre separa para distinto uso
reproductivo los ejemplares de una especie vegetal o animal dependiendo de sus
características. Esta actuación, llevada a cabo a lo largo de varias generaciones,
consigue la aparición de variedades razonablemente estables, que son empleadas
posteriormente con fines agrícolas, ganaderos o tipos de género masivo.

Usos de selección artificial

Evolución del teocinte al maíz moderno.

Mediante este tipo de selección surgieron -por ejemplo- todas las variedades de
perros modernos, como el xoloitzcuintle, que están orientados a tareas específicas
como la vigilancia y la compañía, así como a satisfacer preferencias estéticas, por
la expresión facial y la apariencia del pelo, entre otros.
Las características de los productos agrícolas también están determinados en
gran medida por efectos de la selección artificial, proceso mediante el cual se han
logrado variedades vegetales que se pueden aprovechar fácilmente para usos
alimenticios del ser humano, como es el caso del maíz y el plátano, cuyos frutos
tienen un rendimiento comestible para el hombre mayor que las variedades
silvestres de las que proceden; también en las plantas ornamentales se han
llegado a desarrollar variedades de impresionante belleza gracias a la selección
artificial de las características deseadas

El concepto de selección artificial se emplea en el marco de una técnica de control


y de manejo de la reproducción. Esta selección consiste en elegir los fenotipos de
los organismos que se cultivan o se crían.

Tipos de selección artificial

Dependiendo del tipo de planificación empleada, se pueden considerar dos tipos


de selección artificial: consciente, cuando el plan de selección está determinado
claramente de antemano, e inconsciente, cuando dicho plan no está claramente
predeterminado, sino que surge por preferencias humanas no formalizadas.

Aunque sus resultados pueden ser iguales, pueden distinguirse dos tipos de
selección artificial según la metodología empleada: cuando se favorece que se
reproduzcan los ejemplares con características buscadas (selección positiva) o
cuando se impide que se reproduzcan los ejemplares con características
indeseables.

Ética del proceso de selección

Como todos los procesos de selección biológica, este tipo de selección opera
sobre las variaciones heredables de los organismos y produce adaptación a las
condiciones de vida, que en este caso vienen determinadas por el criador de
animales o por el agricultor. Según el biólogo Sudamericano Aldair Mangones:

Las variaciones se seleccionan para obtener algún beneficio para el


hombre, quien establece el criterio de selección con ese fin. Sin embargo, este
no puede ser arbitrario sino que debe respetar los fines intrínsecos de los seres
seleccionados (tipo de nutrición, ámbito vital, etc.). Por este motivo, hay que
actuar de modo ético en el trato con los animales y se les debe respetar en los
procesos de selección artificial.

Como el maíz que se ha modificado su generación biológica, ya que la población


mundial va en aumento y cada vez hay más personas en el mundo que necesitan
más alimentos y más rápidamente.
Darwinismo social
El darwinismo social es una teoría social1 que defiende que la teoría de la
evolución de Charles Darwin tiene aplicaciones sociales en instituciones humanas.
Está basado en la idea de la supervivencia del más apto2 concebido como
mecanismo de evolución social3 y la creencia de que el concepto darwiniano de la
selección natural puede ser usado para el manejo de la sociedad humana,
insistiendo en la competición4 (étnica, nacional, de clase, etc.) por recursos
naturales o diversos puestos sociales. En general, defiende la eugenesia como
argumento para aplicar métodos de “depuración” o “mejora” de la especie sociales
o políticas en un plano de lucha entre individuos o grupos humanos, concebidas
como una forma de progreso social y biológico.5

El darwinismo social está basado en interpretaciones sobre los escritos de Darwin,


que fueron planteados teóricamente por Herbert Spencer en un inicio, y
posteriormente usadas para fines políticos, recibiendo numerosos adherentes. 6 El
darwinismo social gozó de una gran aceptación en círculos académicos7 y fue una
gran influencia en países imperialistas a finales del siglo XIX y en la primera mitad
del siglo XX.

El paleontólogo Stephen Jay Gould denunció duramente las bases del darwinismo
social, considerando que la “falsedad científica” de sus argumentos condujeron a
la matanza de millones de seres humanos que perpetuaron las injusticias sociales
con el argumento de la supuesta inferioridad innata de algunos seres humanos. 8

Los “darwinistas sociales” se han percibido a sí mismos como actores que aplican
las bases biológicas darwinianas a la sociedad.

Origen y evolución del término

A pesar de que el origen del proyecto se plantea formalmente en la obra de


Herbert Spencer, el término fue utilizado por primera vez por Joseph Fisher en
1877, quien lo utiliza en el contexto de expresar dudas, que la propuesta de otro
autor demuestre que haya existido evolución en el campo del sistema de
propiedad en la legislación anglosajona a partir de antecedentes célticos: “No
puedo encontrar nada en la leyes Brehon que avale esta teoría de darwinismo
social”9

Herbert Spencer afirma que la idea básica del «Darwinismo social» (que la teoría
de la evolución biológica tiene aplicaciones sociales) no había sido iniciada
originalmente por Charles Darwin, sino que su origen se encuentra en la obra de
Spencer mismo.10 Consecuentemente se considera que el darwinismo social llegó
a incorporar algunas percepciones que anteceden al darwinismo. Spencer resalta
la influencia de Malthus, pero también visiones que provienen del lamarckismo.
Por ejemplo. en sus “Principios de biología”, Spencer sugiere que “No podemos en
el caso del hombre, más que en el caso de cualquier otro ser, presumir que la
evolución ya ha tomado o tomará lugar en forma espontánea... todas las
modificaciones, funcionales y orgánicas, han sido, son y deben ser ya sea
inmediata o remotamente consecuencia de las condiciones que prevalecen”.
(Número 373, p 497). Adicionalmente Spencer basaba sus propuestas -
avanzadas en su La estática social, escrito en 1851- acerca de la libertad humana
y derechos individuales en la teoría evolutiva de Lamarck.11

Los partidarios y defensores de Charles Darwin argumentan que él mismo se


declaró dudoso de la propuesta, oponiéndose a la aplicación del mecanismo de
selección natural a las sociedades humanas,12 debido a la consideración de que la
política social no puede guiarse por los conceptos de lucha por la supervivencia y
selección natural.13 No obstante, diversos críticos exactamente opinan lo contrario,
y argumentan que Darwin nunca diferenció entre “evolución biológica” y “evolución
social”.14 De hecho, en su libro El Origen del hombre, Darwin mismo cita cinco
veces a Herbert Spencer, a quien refiere como “nuestro gran filósofo”, a la vez que
habla constantemente de las implicaciones sociales de la teoría evolutiva, e
incorpora el concepto de “sobrevivencia del más fuerte”. Darwin también titula el
capítulo 5 “La selección natural en acción en las naciones civilizadas”, en donde
mantuvo que “los miembros débiles de las sociedades civilizadas propagan su
especie,” y con esto, se degenera la especie humana:

Algunos comentarios con respecto a la selección natural actuando en las naciones


civilizadas deben añadirse. Este asunto ha sido muy bien discutido por W. R.
Greg, y anteriormente por Wallace y Galton. La mayor parte de mis observaciones
son tomadas de estos autores.
Entre los salvajes, los individuos débiles en cuerpo y mente desaparecen muy
pronto, y los que sobreviven se distinguen comúnmente por su vigorosa salud.
Nosotros, los hombres civilizados, en cambio, nos esforzamos por frenar el
proceso de eliminación; construimos asilos para los imbéciles, los mutilados y los
enfermos; legislamos leyes pobres, y nuestros médicos apelan a toda su habilidad
para conservar el mayor tiempo posible la vida de cada individuo. Hay muchísimas
razones para creer que la vacuna ha salvado la vida a millares de personas que,
por la debilidad de su constitución, hubieran sucumbido a los ataques de la viruela.
En consecuencia, los miembros débiles de las sociedades civilizadas propagan su
especie.
Nadie que haya asistido a la cría de animales domésticos dudará que esto debe
ser muy perjudicial para la raza humana. Es sorprendente ver la rapidez con la
que la falta de cuidado o el cuidado mal llevado a cabo conduce a la degeneración
de una raza doméstica, pero exceptuando el caso del hombre mismo, casi nadie
sería tan ignorante como para permitir que sus peores animales se reproduzcan.

Elementos teóricos del darwinismo social


El darwinismo social no es solamente un proyecto político, sino más bien una
visión del mundo, lo que ha sido llamado una “metateoria”48 49 50 en la cual
encontramos elementos tanto individuales como sociales, desde lo psicológico a lo
social y lo económico. La característica central del proyecto es la actualización del
proyecto positivista -de explicar la sociedad sobre bases de leyes naturales- “con
la asimilación del concepto de evolución, reconvirtiendo la “Física social” en una
“Biología social”. Se trata de (...) fundar la praxis política en criterios científicos. 51
Sería difícil entonces entenderlo sin una comprensión por lo menos general de
cuales son las sugerencias básicas de esa “biología social”.

Darwinismo social como teoría


El darwinismo social comienza con la crianza y selección del ganado en Gran
Bretaña. Después de los postulados de Darwin se empieza a pensar en que si es
posible realizar selección de determinados comportamientos en animales también
es posible hacer una selección en los hombres. El propio Darwin dejó escrito en su
libro “El origen del hombre y la selección en relación con el sexo”:
Así, los miembros más débiles de las sociedades civilizadas propagan su estirpe.
Nadie que se haya dedicado a la cría de ganado doméstico dudará de que esto ha
de ser gravemente perjudicial para la raza humana. Es sorprendente qué pronto
una falta de cuidado, o un cuidado erróneamente dirigido, lleva a la degeneración
de una raza doméstica; pero, exceptuando al propio hombre, apenas nadie es lo
bastante ignorante como para dejar que se reproduzcan sus peores animales.
Esta selección en los animales no se restringía a mejores aspectos fisiológicos
sino también de comportamiento. Ambas podían afectarse mutuamente. Así una
población que se dedica al pastoreo y consumo de leche animal prioritariamente
puede tener menor índice de alergias a productos lácteos que otra en el que el
consumo de leche no es prioritario. Una sociedad que incentiva la pertenencia a
un grupo religioso podrá tener más individuos pre-dispuestos a creer. Más tarde,
esta idea fue aprovechada por los totalitarismos para implantar sus ideas con la
idea de mejorar y justificar sus comportamientos. Se hablaba de que el hombre
blanco era un hombre guerrero pues en diferentes momentos históricos siempre
ha habido guerras. Sin embargo, el hecho de señalar que una cultura somete a
una mayor presión a sus individuos y selecciona de una forma más eficiente a los
más aptos en un determinado comportamiento no implica que directamente estos
sean más aptos inherentemente o fisiológicamente.
Hay varias razones para esto:
 Primero el cerebro es plástico y puede que este cambio sea solo cultural y
no fisiológico.
 Los cambios fisiológicos se producen por mutaciones no predecibles y estas
no son tan frecuentes y atañen a las costumbres exactas que se quieren
moldear. Es posible que una mutación en un sentido venga acompañada de
una desadaptación en otras áreas. Se necesitan miles de años y
generaciones para moldear diferencias.
 Si la selección se produce por la restricción de la reproducción a
determinados individuos que ya poseen las características deseadas, el
moldeado de la sociedad en una dirección es mucho más rápido, sin
embargo, esto producirá una inestabilidad social demostrable empíricamente
e históricamente. El totalitarismo provoca una infelicidad y frustración en los
ciudadanos afectados que tratarán de luchar contra el agente opresor así
como también lo hacen cuando el agente moldeador es el ambiente natural.
 Las diferencias entre las civilizaciones se pueden justificar de forma clara
con motivos históricos y culturales y no con motivos inherentemente
fisiológicos. Prueba de ello es que muchas civilizaciones que han
progresado han estado sometidas durante miles de años a otras
civilizaciones que ahora no poseen tanta relevancia. El estancamiento de
una sociedad puede ser explicado completamente con el transcurso de los
acontecimientos culturales y progresos en el desarrollo de ideas y no con
aspectos fisiológicos relacionados a los genes.

Incluso si se pudiera seleccionar comportamientos, ¿es la cultura o el hombre


capaz de dirigir la sociedad sin cerrar oportunidades en caso de que las
condiciones ambientales cambien?. No es la pluralidad aunque cueste pérdidas en
eficiencia un mecanismo natural eficiente para conseguir mejores soluciones. O lo
que es lo mismo quien selecciona al seleccionador cuando este ya ha perdido su
pluralidad. Este modo de comportamiento no gradual produce inestabilidad en el
sistema que tenderá a regularse. Este punto es independiente de si se reconoce
que la selección de comportamientos produce cambios fisiológicos o no.
 La selección de comportamientos no quiere decir que haya una traducción
directa en un cambio positivo fisiológico. Son las mutaciones las que
producen este efecto. Las mutaciones no pueden ser predichas. Por otro
lado aunque las mutaciones pueden aparecer en grupos que no han
producido una presión en los comportamientos antes que los que lo han
hecho, solo en los segundos serán favorecidos. No obstante, dicha mutación
no tiene que estar relacionada con el comportamiento a fomentar puesto que
puede estar relacionada con la capacidad de engañar, convencer u otros
aspectos que pueden ser obviados por el seleccionador. Un ejemplo con la
crianza animal sería. Si una vaca se cría para la maximizar la producción de
leche, puede que esta de más leche pero sacrificando sabor y propiedades,
dejando de ser lo que inicialmente se consideraba leche. Asimismo la vaca
puede haber reducido otras cualidades genéticas o mutaciones que han sido
pasadas por alto por la necesidad de potenciar un único factor en relación a
muchos otros de un individuo.
 Las relaciones sociales son muy complejas y las formas de elección y
reproducción de humanos en libertad se autorregulan para maximizar la
estabilidad de las sociedades. Así si hay comportamientos altruistas también
debe haber comportamientos egoístas.
 La cultura se traspasa entre generaciones con cambios con lo que no se
produce una estabilidad de traspaso cultural de memes que provoque una
ventaja reproductiva en varias generaciones. La familia y las instituciones se
encargan de esta labor. Desarrollar el individualismo y un método para
aprender las razones de los valores culturales del momento y asegurarlos es
una forma de evitar los problemas de decadencia de la familia. Dicho
método debe ser capaz de distinguir y falsar comportamientos que lleven a
malos hábitos para cambiarlos de forma gradual.
 La única forma de controlar la presión reproductiva es con un mecanismo de
poder comunitario en una gran zona. Sin embargo, la desventaja
reproductiva provoca malestar en los individuos afectados que atacarán al
sistema. Existen formas graduales que deben dejar puertas abiertas para
que los afectados evolucionen conjuntamente. Además los sistemas
totalitarios pretenden estar aislados si quieren ejercer control sobre la
sociedad.
 La misma orientación a una determinada dirección no implica una ventaja
evolutiva atemporal, las condiciones ambientales y culturales cambian con el
tiempo.
 Varios genetistas acuden a la descripción misma de la evolución natural en
la que dos aspectos son fundamentales. El primero es el azar en la
reproducción y el segundo el número de reproducciones (paralelismo). Estos
dos factores son fundamentales para la adaptabilidad. Son fundamentales
porque aseguran variabilidad y velocidad de adaptación respectivamente.

o El azar es necesario porque no existe una dirección clara o


inteligente en la evolución. La única regla es transmitir y mantener la
información genética durante el tiempo. La transmisión de
información debe hacerse con las limitaciones y reglas físicas en el
entorno, teniendo en cuenta que el entorno cambia. El azar es
fundamental para encontrar nuevas soluciones que no estén
limitadas más que por las leyes físicas. El dirigir la evolución limita la
evolución a aspectos culturales, sensoriales y a la capacidad misma
del selector. ¿Cómo se puede asegurar que la selección se produce
efectivamente para asegurar la supervivencia al entorno y no para
satisfacer necesidades culturales?. Por otro lado la evolución dirigida
es mucho más rápida y permite eliminar las modificaciones
evidentemente limitadoras en el entorno actual. La evolución se basa

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