Ann Nutr Metab 2012;60(suppl 2):22-29 DOI: 10.1159/000335335
Tiempo de la introducción de gluten
y riesgo de enfermedad celíaca Jonas F. Ludvigssona Alessio Fasanob a Unidad de Epidemiología Clínica, Departamento de Medicina, Hospital Universitario de Karolinska e Instituto Karolinska, Estocolomo, y Departamento de Pediatría, Hospital Universitario de Örebro, Suecia; bCentro de In- vestigación de Biología de Mucosas y Centro para la Investigación de Enfermedad Celíaca, Escuela de Medicina de la Universidad de Maryland, Baltimore, Md., EU
temprana en la vida puede incrementar el riesgo de EC
0250–6807/12/0606-0022$38.00/0 Department of Pediatrics Fax +41 61 306 12 34 Örebro University Hospital E-Mail karger@karger.ch SE-70185 Örebro (Suecia) www.karger.com Tel. +46 19 6021 000, E-Mail jonasludvigsson@yahoo.com Normal 0 Atrofia parcial 3a Atrofia subtotal 3b Atrofia total 3c Figura 1. Histopatología del intestino normal.
DQA1*03-DQB1*0302 (DQ8) en la predisposición a la en-
fermedad.19 El mecanismo más probable que apoya la asocia- 250
Casos por 100 000 personas-año
ción de la patogénesis de EC con los genes HLA clase II es que 0–1.9 años 200 2–4.9 años estas moléculas unen péptidos de gliadina para presentarlos a 5–14.9 años las células T. Delinear esta unión ha aclarado la importancia 150 del espaciamiento de prolina y la desaminación de los pépti- dos de gliadina en este proceso.20 Sin embargo, el complejo 100 HLA por sí solo no explica la susceptibilidad genética debido a que la tasa de concordancia entre gemelos idénticos (alrede- 50 dor de 70%) es más elevada que la del HLA de los hermanos idénticos (30%),21 lo que sugiere que factores genéticos adi- 0 1975 1980 1985 1990 1995 cionales tienen una influencia directa sobre la propensión a la Año del diagnóstico enfermedad. Estudios genéticos recientes han identificado 39 genes no-HLA de riesgo, la mayoría de ellos relacionados con la respuesta inmune (tanto de las respuestas inmunes innata Figura 2. La “epidemia sueca” de EC. Diferencias en las inciden- y adaptativa), la inflamación y la función de la barrera intes- cias de EC en Suecia en el transcurso del tiempo [reimpreso con tinal.22 Varios genes presentados en el complejo extendido de permiso de ref. 17]. HLA han sido implicados en la predisposición para EC. Aso- ciaciones con el alelo del factor de necrosis tumoral (TNF)-2 también han sido reportadas, polimorfismos con los cuales involucrada en los procesos basados en actina y, por tanto, en se ha asociado la expresión aumentada de TNF-α.23 Una serie la regulación de la barrera intestinal.26 Al tomar estos genes en de estudios de tamizaje del genoma completo ha sido llevada conjunto, es posible que los genes no-HLA de forma conjunta a cabo en pacientes con EC. La información concerniente a puedan contribuir más a la susceptibilidad genética para EC genes específicos o áreas genómicas posiblemente involucra- que los genotipos HLA identificados, pero la contribución de das no ha sido replicada de forma consistente en diferentes cada uno de los genes de predisposición no-HLA parece ser grupos de poblaciones, lo que sugiere la existencia de una modesta. variación interpoblacional de genes extra-HLA asociados Factores no dietéticos con EC. La región que ha sido La información concerniente a para EC ligada de forma más consis- genes específicos o áreas genómicas Varios reportes han mostrado tente a EC está localizada en el brazo largo del cromosoma posiblemente involucradas no ha sido que las condiciones intrauteri- replicada de forma consistente en nas y perinatales influyen so- 5 (5q31–33).24 También existe evidencia para factores de sus- diferentes grupos de poblaciones, lo que bre el riesgo para EC. En 2002, ceptiblidad en el cromosoma Sandberg-Bennich y colabora- 19. El mapeo fino de la úl- 25 sugiere la existencia de una variación dores,27 reportaron que tanto tima región ha identificado el interpoblacional de genes extra-HLA las zón infecciones neonatales [ra- de momios (OR) = 1.52; gen MYO9b, que codifica para una miosina probablemente asociados con EC. intervalo de confianza (IC) de
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Ann Nutr Metab 2012;60(suppl 2):22–29 95%= 1.19 a 1.95] como el hecho de ser pequeño para la edad tada = 1.8; IC 95% = 0.9 a 3.6; p = 0.111).39 Para gastroenteritis al gestacional (OR = 1.45; IC 95% = 1.20 a 1.75) incrementan el tiempo de la introducción de gluten, la razón de momios ajus- riesgo para EC. tada fue mayor (2.6) pero los IC de 95% fueron muy amplios Aunque varios estudios han mostrado que el tabaquismo debido a poder insuficiente (0.2 a 30.8)39. Un estudio estadouni- está asociado con bajo riesgo para EC, el tabaquismo materno dense encontró que los niños con al menos dos infecciones por podría de hecho incrementar el riesgo para EC en la descen- rotavirus tuvieron un riesgo incrementado para EC pero sólo dencia.26 Los efectos deletéreos del tabaquismo materno con cuando la información fue analizada al utilizar pruebas de ten- respecto al riesgo de EC han sido confirmados en dos estudios dencia (p = 0.037).38 La razón no ajustada para el desarrollo de más recientes,28, 29 que alcanzaron significancia estadística en el EC después de al menos dos infecciones por rotavirus fue 3.76 estudio más grande,27 mas no en el segundo.28 (IC 95% = 0.76 a 18.7; p = 0.244 cuando la volvimos a calcular Hasta la fecha no está claro si realizar cesárea incrementa30 mediante la prueba exacta de Fisher).38 o disminuye28 el riesgo para EC en la descendencia. La hipótesis tras la cesárea recae en el mayor riesgo para EC que tienen los Lactancia lactantes que no se exponen a la flora vaginal materna (que po- Varios estudios sobre lactancia materna y EC sugieren que la dría establecer un microbioma intestinal “tolerogénico”), puesto lactancia reduce el riesgo para EC futura.40 Sin embargo, hacen que ellos no atraviesan el canal de nacimiento. falta estudios aleatorizados y, con pocas excepciones,28, 39, 41 los estudios existentes se han basado en información recolectada de forma retrospectiva.42–47 El estudio más grande de casos y Varios reportes han mostrado que las controles hasta la fecha es el realizado por Ivarsson y colabora- condiciones intrauterinas y perinatales dores,46 en el que los autores encontraron un riesgo reducido para EC futura en niños con edades de 0 a 1.9 años al momen- influyen sobre el riesgo para EC. to del diagnóstico, pero no en niños con edades de 2.0 a 14.9 años al momento del diagnóstico. El efecto protector en los niños < 2 años fue mayor en aquellos que fueron amaman- Desde que Kagnoff y colaboradores31 reportaron en su des- tados de forma posterior a la introducción del gluten (OR = tacado artículo que los adenovirus pueden estar involucrados 0.36; IC 95% = 0.26 a 0.51). Otros dos estudios44, 46 encontra- en la patogénesis de la EC, los investigadores han tratado de ron resultados similares, mientras que un estudio de casos y identificar el papel de las enfermedades infecciosas en su pa- controles, controlado para estado HLA, no halló asociación togénesis. Los hallazgos paralelos de un papel potencial de las entre la lactancia al tiempo de la introducción del gluten y el infecciones virales en la diabetes tipo 1, otra enfermedad au- riesgo para EC; sin embargo, este estudio sólo estuvo basado toinmune que también confiere un riesgo incrementado para en ocho casos con EC silenciosa.45 EC,32–34 ha surgido este interés. Al menos cuatro estudios han Por otra parte, el estudio más reciente de casos y contro- evaluado la temporada de nacimiento y EC,35–38 con los dos más les realizado por Decker y colaboradores30 reportó resultados grandes estudios36, 37 que sugieren que nacer durante la primave- opuestos. En su estudio, la lactancia se asoció con un incre- ra-verano podría estar asociado con riesgo incrementado para mento estadísticamente significativo para EC (OR = 1.99, IC EC en niños. La evidencia es menos clara cuando se evalúan 95% = 1.12 a 3.51).29 No obstante, debe subrayarse que éste fue las infecciones reales. Un estudio alemán encontró que los ni- un análisis secundario, puesto que el objetivo primario del es- ños con EC habían experimentado enfermedad gastrointestinal tudio de Decker y colaboradores29 fue el evaluar el riesgo para más temprana (GI) de manera más frecuente (tanto infecciosa enfermedad pediátrica gastrointestinal en la descendencia de como no infecciosa) previo al desarrollo del diagnóstico de EC madres a quienes se les practicó cesárea. (OR ajustada = 2.97; IC 95% = 1.08 a 8.14).30 Sin embargo, este El estudio estadounidense realizado por Norris y colabo- estudio se basó en información retrospectiva; el sesgo de recor- radores41 realizó el seguimiento de 1 560 niños con HLA-DR3 dar mezclado con los síntomas actuales de EC que precedieron o DR4 a través de exámenes sanguíneos rutinarios y cues- al diagnóstico de EC no pueden ser descartados como una ex- tionarios. El principal resultado fue EC autoinmune, que plicación probable.30 Por otra parte, Welander y colaboradores39 requiere dos pruebas serológicas positivas o un estudio san- utilizaron de forma prospectiva información recolectada para guíneo positivo y una biopsia de intestino delgado concor- examinar el papel de las enfermedades infecciosas previo al dante con EC. Algunos de los niños (49%, 25/51) con EC diagnóstico de EC. Aunque 40.9% de los niños con EC tuvo una autoinmune fueron amamantados cuando se les introdujo infección al tiempo de la introducción del gluten comparados en la dieta trigo, cebada o centeno por primera vez, en com- con 26.8% de los niños sin diagnóstico de EC (p = 0.035), la paración con 44% (660/1 509) de los controles (p > 0.05). La diferencia disminuyó después de realizar ajustes para la edad de duración actual de la lactancia fue mayor en los lactantes con la introducción del gluten y la duración de la lactancia (OR ajus- EC autoinmune (duración media: 8.8 meses) que en los con-
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Ann Nutr Metab 2012;60(suppl 2):22–29 Tiempo de la introducción del gluten Pero la exposición en el estudio británico Dos grandes estudios suecos han fallado en demostrar alguna fue “haber sido alguna vez amamantado” asociación entre el tiempo de la introducción del gluten en la y por lo tanto añadió poca información dieta y el riesgo para EC.39,18 Introducir gluten a la edad de cin- co a seis meses no incrementó el riesgo para EC en el estudio al hecho de si la lactancia al tiempo de de Ivarsson y colaboradores18 (OR = 1.4; IC 95% = 0.87 a 2.4). la introducción del gluten es un factor Además, esta tendencia desapareció en el análisis multivaria- do como factor de riesgo independiente. Al utilizar la edad de protector contra EC o no. cinco a seis meses como referencia cuando se estiman razones de riesgo para EC futura, Welander y colaboradores39 mostra- troles (6.8 meses).41 Una de las mayores fortalezas del estudio ron que no hubo diferencia en el riesgo para EC en lactantes en este artículo es que los autores analizaron su población para con edad de tres a cuatro meses o siete a ocho meses al tiempo EC.40 Muchos otros estudios se han enfocado en el diagnóstico de la introducción del gluten. Otros estudios confirmaron la sintomático de la EC para llegar al diagnóstico médico18, 28, 39 y falta de una asociación entre el tiempo de la introducción del pudo argumentarse en ese momento que sus hallazgos sólo gluten y el desarrollo posterior de EC.42–44,46,48 se aplicaban a los síntomas de EC, o que la lactancia podría El único estudio que mostró una asociación entre la edad retardar el inicio de los síntomas18 y llevar a menos casos al tiempo de la introducción del gluten y la EC es el que rea- diagnosticados con EC de forma temprana. lizaron Norris y colaboradores.40 Al utilizar la edad de cuatro En un estudio sueco, Welander y colaboradores39 uti- a seis meses como la categoría de referencia para la introduc- lizaron información recolectada de forma prospectiva del ción del gluten, los lactantes que lo consumieron a la edad de estudio ABIS (All Babies in South-east Sweden) y no detec- uno a tres meses tuvieron un riesgo 23 veces incrementado taron alguna asociación entre la duración de la lactancia y el desarrollo subsecuente de EC. Los autores tampoco en- contraron algún vínculo entre la duración de la lactancia y Sin embargo, debe enfatizarse que el el desarrollo de EC tardía cuando se consideró la edad de la introducción del gluten y de forma prospectiva regis- número de niños que desarrollaron EC traron las infecciones en el momento de la introducción de aquellos expuestos a gluten antes de del gluten. De hecho, los autores reportaron una tenden- los cuatro meses de edad fue pequeño. cia hacia la terminación temprana de la lactancia como factor protector contra EC (p. ej., riesgo de EC tardía en la descendencia de madres que terminaron la lactancia a los 0 a 2 meses de la edad del lactante: OR = 0.7; a los 3 para EC; aquellos que consumieron gluten después de la edad a 4 meses: 0.7, y a los 4 a 5 meses: 0.3). Sin embargo, debe de seis meses tuvieron un riesgo cuatro veces incrementado recalcarse que ninguno de estos riesgos estimados alcan- para EC.41 Sin embargo, debe enfatizarse que el número de zaron la significancia estadística.39 niños que desarrollaron EC de aquellos expuestos a gluten En un estudio británico de Roberts y colaboradores,28 antes de los cuatro meses de edad fue pequeño (tres niños los autores utilizaron información del estudio del registro de desarrollaron EC en esta categoría, de forma opuesta a lo es- uniones de Oxford. Este estudio no encontró diferencia en la perado “0.13 niños”).41 incidencia acumulada de EC entre los lactantes amamantados (32.4/100 000) y no amamantados (43.2/100 000; p = 0.28). Cantidad de gluten Pero la exposición en el estudio británico fue “haber sido algu- El promedio del consumo de gluten en una población pe- na vez amamantado” y por lo tanto añadió poca información diátrica en Los Países Bajos fue de alrededor de 1 g a los seis al hecho de si la lactancia al tiempo de la introducción del glu- meses de edad, con un aumento rápido a 6 g/día a la edad ten es un factor protector contra EC o no. de ocho meses y permanencia en ese nivel hasta los 12 me- En resumen, la mayoría de los estudios apunta hacia un ses de edad.49 De esta forma parece probable que la cantidad efecto protector de la lactancia contra la EC, pero no está de gluten tiene una influencia sobre el riesgo para EC.18 En claro si este efecto protector es persistente o sólo representa un estudio sueco, los niños con EC tuvieron de forma más un retraso en el diagnóstico de EC.48 Uno de los mecanismos frecuente cantidades grandes (en oposición a “pequeñas- que potencialmente explican una relación inversa entre la lac- medias” cantidades) diarias de gluten dos semanas después tancia y la EC es que continuar la lactancia podría reducir la de su introducción en la dieta en comparación con controles cantidad de gluten administrado.18 Los anticuerpos IgA de la pareados por edad y sexo. Pero esta asociación sólo se obser- leche humana podrían también disminuir la respuesta inmu- vó en los lactantes diagnosticados antes de los dos años de ne contra el gluten. edad.18 No hubo diferencia en la cantidad de harinas intro-
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Ann Nutr Metab 2012;60(suppl 2):22–29 ducidas en la primera parte entre los casos con EC y los con- troles sanos.18 Varios autores han implicado también el con- Además es sabido que la cantidad de sumo divergente de harinas como una explicación para las gluten en la dieta correlaciona con diferencias geográficas en la incidencia de EC en Europa.50–52 el daño en la mucosa,52,53 y por ello Además, es sabido que la cantidad de gluten en la dieta corre- laciona con el daño en la mucosa,53, 54 y por ello especulamos especulamos que grandes cantidades que grandes cantidades de gluten en la dieta temprana sin de gluten en la dieta temprana sin leche materna podría detonar más síntomas en niños con EC y así, el diagnóstico de EC. También hemos demostrado leche materna podría detonar más que los adultos con EC podrían tolerar mas de 50 mg/día de síntomas en niños con EC y así, el gluten sin daño de la mucosa.55 diagnóstico de EC. Estudios en curso Como se ha resumido previamente, varios estudios retros- toinmunes relacionados con EC en una gran cohorte de lac- pectivos han sugerido que la edad al tiempo de la introduc- tantes en riesgo (familiares de primer grado con EC); b) otros ción de gluten en la dieta de los lactantes en riesgo de EC factores ambientales, en particular el papel de la lactancia; c) podría afectar la incidencia de la enfermedad. Sin embargo, diferentes genotipos HLA DQ2/DQ8 (bajo riesgo vs. alto ries- la información que apoya esta hipótesis es circunstancial, go) para la predisposición para EC y su interacción con los limitada por su diseño retrospectivo, y a menudo critica- patrones de nutrición infantil. Entre octubre de 2004 y junio da por interpretaciones alternativas, lo que sugiere que el de 2007, 729 lactantes (51% hombres) con riesgo incremen- retraso en la exposición a gluten sólo retrasa el comienzo tado para EC fueron enrolados en este estudio multicéntrico de los síntomas más que prevenir la enfermedad. Debido de intervención conducido en Italia. Al destete, los lactantes al diseño seccional cruzado de estos estudios, no queda fueron asignados a la introducción de gluten en su dieta entre claro si las asociaciones microbianas reportadas (ver más el cuarto y sexto mes (grupo A) o después del mes 12 (grupo adelante) son patogénicas o meramente la consecuencia B); posteriormente entraron a un periodo de seguimiento de de la inflamación intestinal. Con objeto de aclarar el papel de cinco años. La dieta (duración de la lactancia, tipo de fórmula, la nutrición del lactante en el riesgo de desarrollo de EC, adherencia al plan de dieta y cantidad de gluten ingerida) y al menos dos estudios prospectivos de intervención se han la información clínica fueron colectados vía telefónica o con iniciado en fecha reciente. Los resultados de estos estudios entrevistas personales a los cuatro, siete, nueve y 12 meses de a largo plazo estarán disponibles en pocos años. edad. La serología para EC (anticuerpos IgA antitransgluta- minasa) fue desarrollada a los 15 (más genotipo HLA-DQ), El estudio PreventCD Family 24, 36 y 60 meses de edad. La biopsia de intestino delgado fue Este estudio prospectivo, doble ciego, controlado por placebo recomendada para todos los lactantes que mostraron positivi- está en curso en la actualidad en 10 países europeos, con un dad para las pruebas serológicas para EC. En la última actuali- total de 1 000 niños incluidos.56 Los niños participantes y sus zación del estudio (septiembre de 2011), 100% de los lactantes madres serán seguidos por un periodo de uno a tres años. El había completado el seguimiento de 36 meses. El 52% de los proyecto estudiará la influencia de la dieta temprana en la pre- lactantes fue enrolado en el grupo A y 48% en el grupo B. La vención de EC. El concepto general es que pequeñas cantida- prevalencia de biopsias positivas para EC a los 24 meses fue des de sustancias alimenticias sean administradas de manera de 8% para el grupo A y 2% para el grupo B (p < 0.01). Sin gradual para “enseñar” al sistema inmune a no responder a embargo, esta diferencia disminuyó a los 36 meses de segui- estos alimentos. A esto también se le llama “desensibilización” miento, cuando la prevalencia de EC llegó a ser similar en los o “inducción a la tolerancia oral”. Después de la tipificación de dos grupos (alrededor de 10%). Combinados, estos resultados HLA, los recién nacidos DQ2+ y/o DQ8+ de familias en ries- sugieren que la introducción retardada de gluten sólo retrasa go de EC son aleatorizados y colocados de forma ciega para el comienzo de EC más que prevenirla. Sin embargo, no hubo intervención con 100 mg de gluten o placebo (lactosa). Des- incremento en el riesgo de desarrollar EC como se había re- pués de los seis meses de edad el gluten es gradualmente in- portado con anterioridad40. troducido en su dieta. Los anticuerpos EC son monitorizados cada tres a seis meses para revelar la sensibilización al gluten. Microbiota intestinal y comienzo de EC Un estudio de seguimiento de los procesos de colonización El estudio Italian Baby intestinal de la miocrobiota del intestino fue conducido en 20 Esta es otra iniciativa enfocada a evaluar el papel de: a) la edad niños suecos estratificados por riesgo bajo, medio y alto para al tiempo de la introducción sobre los cambios serológicos au- desarrollar EC. Las proporciones totales de bacterias fueron
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Ann Nutr Metab 2012;60(suppl 2):22–29 mucho más altas en los grupos genéticos de medio y alto ries- go para EC que en grupos de bajo riesgo. Las bacterias gram- A pesar de que algunos estudios negativas y las proporciones de Bacteroides-Prevotella fueron recientes no muestran una asociación mayores en el grupo genético de alto riesgo en comparación (incluso positiva) entre la lactancia y la con los grupos de medio y bajo riesgo. En este estudio, el aná- lisis de la microbiota fecal fue conducido por hibridización de EC tardía, la mayoría de la información fluorescencia in situ y citometría de flujo.57 Ambos métodos sugiere que la lactancia al tiempo de fenotípicos presentaron una tasa sustancial de variabilidad y podrían justificarse en la interpretación individual subjetiva, la introducción del gluten en la dieta mientras que la secuenciación del DNAr 16S, con base en la reduce el riesgo de desarrollar EC. variabilidad especie-específica de las pequeñas subunidades ribosomales, se ha vuelto la técnica cualitativa de referencia para la taxonomía bacteriana y la identificación.58 ciones con probióticos podrían potencialmente estabilizar la En lactantes sanos, como los describió Palmer y colabora- microbiota intestinal de estos niños en riesgo para prevenir y/o dores,58 los bacteroidetes colonizan y se establecen en el trac- retrasar el comienzo de EC. to GI. Aunque varían de niño a niño al tiempo de su primera Conclusiones La lactancia materna es la alimentación natural de los lac- Contrario a nuestros estudios tantes, pero alrededor de los seis meses de edad éstos nece- prospectivos recientes de la microbioma sitan alimentación complementaria. La intrincada interac- ción entre la lactancia y la introducción del gluten (cantidad intestinal de lactantes en riesgo de EC y tiempo) ha sido tema de varios estudios. A pesar de que sugieren que sus ecosistemas microbianos algunos reportes recientes no muestran una asociación (in- cluso positiva) entre la lactancia y la EC tardía, la mayoría son diferentes que los de aquellos de la información sugiere que la lactancia al tiempo de la lactantes no predispuestos a EC. introducción del gluten reduce el riesgo de desarrollar EC. También es posible que alcanzar de forma rápida una ingesta diaria comparativamente grande de gluten después de iniciar aparición, están presentes de forma consistente en casi todos la alimentación complementaria pueda incrementar el riesgo los lactantes a los 24 meses. La microbiota saludable evolucio- de EC. En el futuro, cuando seamos capaces de analizar con na durante los diferentes estadios de la vida y en los lactantes mayor cuidado los resultados de algunos de los estudios en muestra una tasa más baja de Firmicutes a Bacteroidetes en curso, podremos emitir refinadas conclusiones, al considerar comparación con los adultos. En general, los ecosistemas mi- también la predisposición genética. Esto podría resultar en crobianos en cada niño sano mantienen estabilidad mediante recomendaciones basadas en evidencia sobre la introduc- la convergencia hacia un perfil característico del tracto GI del adulto en el primer año de vida.59 De forma contraria, nues- ción del gluten en la dieta de los lactantes. tros estudios prospectivos recientes de la microbioma intesti- nal de lactantes en riesgo de EC sugieren que sus ecosistemas Agradecimientos J.F.L fue apoyado por el Consejo Sueco de Investigación (522-2A09- microbianos son diferentes que los de aquellos lactantes no 195) y la Sociedad Sueca de Medicina. Este proyecto fue apoyado por predispuestos a EC [Ravel y Fasano, pers. commun.]. Nuestros fondos proporcionados por la Sociedad Sueca de Medicina y por el estudios revelaron que el proceso de colonización es muy diná- Consejo Sueco de Investigación en Medicina (522-2A09-195). mico, con un alto grado de variación intersujeto en el tiempo. A diferencia de los niños no predispuestos para EC, la micro- Declaración de conflictos de interés biota de los lactantes en riesgo de EC no se estabiliza hacia la Los autores declaran no tener conflictos de interés. Ninguno de los microbiota del adulto. Miembros del filum Bacteroidetes están contribuyentes tuvo algún papel en el diseño o conducción del estudio; ausentes de la microbiota GI hasta los 24 meses, mientras que recolección, manejo, análisis e interpretación de los datos; así como en éstos predominan en los lactantes no predispuestos para EC. la preparación, revisión o aprobación del manuscrito. La escritura de Esta información sugiere que la dieta temprana y/o interven- este artículo fue apoyada por el Nestlé Nutrition Institute.
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