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Derecho del mar: concepto : hacemos referencia a la delimitación delos espacios marítimos y
su utilización por parte de los Estados.
Podemos definir al derecho del mar como la rama del derecho internacional público que regula los
derechos y obligaciones de les Estados en los distintos espacios marítimos. Se ocupa de definir
cada espacio marítimo, de establecer sus límites máximos y los derechos y obliga-ciones de los
Estados ribereños —costeros— y terceros Estados (en algunos supuestos también en el espacio
aéreo suprayacente), así como de fijar reglas o criterios para la delimitación de dichos espacios —
en casos de Estados con costas enfrentadas o adyacentes—.
En un sentido estricto, el derecho del mar se puede diferenciar del derecho marítimo', que es una
rama del derecho privado que regula las relaciones entre particulares derivadas de la realización
de actividades en el mar y en otros espacios acuáticos, como; por ejemplo, contra-tos por
transporte de mercaderías, seguro marítimo, apunta a relaciones de carácter privado reguladas
especiicamente para el ámbito de navegación, tipos de contrato, abordaje y convenciones
internacionales de navegación como aeronavegación que hacen una regulación de perspectiva
privada.
Se trata de dos ramas del derecho diferentes, aunque algunos autores han utilizado los términos
"derecho del mar" y "derecho marítimo" indistintamente, lo que creemos puede generar
confusión.. Estamos frente a criterios que vinculan la autorización de utilidad para el hombre de
los espacios marítimos en función de la utilización no solamente por parte de los estados sino…
que tienen su espacio en el marco normativo del derecho internacional publico. ¿?
2. Evolución histórica Los espacios marítimos que conocemos en la actualidad (aguas interiores,
mar territorial, zona contigua, zona económica exclusiva, alta mar, aguas archipelágicas,
plataforma conti-nental, zona internacional de los fondos marinos) no surgieron todos de golpe,
sino que fueron producto de un desarrollo paulatino en el que los Estados costeros avanzaban con
sus reclamos de soberanía o jurisdicción cada vez más lejos de la costa'. Por muchos siglos, los
mares y océanos fueron libres, es decir, cualquiera podía usarlos a los efectos de la navegación o
de la pesca, ya que no pertenecían a nadie.
Durante el Imperio Romano, el mar Mediterráneo se consideró comprendido dentro de los límites
del Imperio, era el mare nostrum4, por lo que los pueblos ajenos a Roma no podían hacer uso de
él. En el siglo xvi se generó una discusión doctrinaria en cuanto a si el mar era libre o podía ser
objeto de apropiación. Se enfrentaron las teorías del holandés Hugo Grocio —considerado como el
padre del derecho internacional— y del inglés John Selden. Por lo tanto, Ya desde una perspectiva
jurídicamente mas sofisticada, la modernidad, laodiscusión acerca de la naturaleza jurídica del
mar, se vio entre estos dos doctrinarios:
Grocio proclamaba la liber-tad de loa mares (concepto plasmado en su obra Mare liberum)
—aunque reconocía que ello no impedía el dominio sobre una pequeña franja de mar
adyacente al territorio—, sostiene libertad de navegación para cualquier ser humano
en cualquiera de los Mares existentes mientras que
A) Selden era partidario del principio de que el mar era susceptible de dominio privado
(plasmado en su obra Mare clausum). Sostenia que el Mar es de pertenencia de quien
puede apropiarse de él y defenderlo, considerándolo una “res nulius”, es decir una cosa
sin dueño, que puede ser apropiada por aquel que pueda ejercer sobre esa “cosa” su
poder y hegemonía. Su obra responde a la conciencia colectiva de la potencia marítima
de esa época, es decir a la conciencia colectiva de Gran Bretaña.
En principio, lo que encontramos a apartir de allí es una evolución q tiene q ver con
acontecimientos que van marcando las principales potencias navales sobretodo a apartir de la
difusión de las grandes rutas coemrciales inauguradas en la modernidad a través de grandes viajes
continentales y que se fueron diversificando y creciendo de la mano de la consolidación de las
estructuras pre capitalistas y capitalistas que hacen incapie y centran su eje político económico en
el intercambio de bienes, en la ampliación de mercado a los efectos también de la apropiación de
materias primas y no solo de manufacturados. En ese contexto, lo que cobra un valor crucial para
las potencias es el concepto de la libertad para zurcar los mares. Esa necesidad de zurcar con
libertad los mares, tiene su correlato en esa época en la posibilidad de zurcar con libertad todas
las aguas sinrestricciones que en función de la potencialidad de esas potencias, restringida de
alguna manera la posibilidad de imponer sus condiciones sobre naciones menos poderosas, de
menor capacidad, de injerencia en los asuntos internacionales en un escenario de juego de
potencias.
Las principales potencias no reconocían la posibilidad de restringir la libre navegación de lso mares
desde ninguna perspectiva, en ningún caso. El debate de las 3 millas era sostenido y resguardado
por una gran cantidad de naciones.
De hecho, el código de Vélez, menciona explícitamente ese espacio como mar territorial en una
denominación que es equivalente a tres millas llamada legua marina como un mar patrimonial de
utilización exclusiva a todos los efectos defensivos o de preservación del territorio.
Ese concepto al que aludimos, fue complementado a inicios del siglo XX con un decreto que
estableció una zona pesquera, de aprovechamiento pesquero, con una utilización terminológica
bastante confusa, inexacta, cuando avancemos sobre las consideraciones de lo q es territorio y
aquello que no lo es.
La regla de las tres millas marinas, que fuera adoptada por algunos Estados', convenía a las
grandes potencias, ya que permitía a sus flotas la libertad de navegación en la mayor parte de los
mares; en cambio, perjudicaba a los Estados que pretendían ejercer una soberanía en un espacio
más amplio de su territorio marítimo por razones de seguridad, o para ejercer derechos exclusivos
sobre sus pesquerías en distancias más extensas, dado que la preocupación sobre la pesca
comenzaba a perfilarse°. Esta diferencia de criterios impidió que se generara una práctica
uniforme respecto del límite máximo del mar territorial, por lo que la regla de las tres millas no
podía ser considerada como norma consuetudinaria°. A partir del siglo 18 se fue generando una
práctica respecto de un nuevo espacio marí-timo: la zona contigua10, una franja de mar adyacente
al mar territorial que permite al Estado ribereño ejercer ciertas competencias para controlar los
buques que van a ingresar o salir de su mar territorial".
En el siglo XX es cuando se produjeron los mayores cambios en el derecho del mar. En 1930 se
celebró la Conferencia de La Haya, bajo los auspicios de la Sociedad de las Naciones, con el. fin de
codificar varias materias del derecho internacional, incluso el derecho del mar, pero no se llego a
acudrdo sobre anchura de mar territorial.
La declaración de prevalecer el d externo sobre el interno fue por preservar el indudable potencial
existente desde muchas perspectivas, del aproveschamiento de la pesca, del mar como generador
de energía, potenciales del subsuelo, esa percepción hizo que los estados a expandir
normativamente sobre todo desde el inicio a a partir de declaraciones su interés en preservar la
exclusividad del ejercicio por parte de los estados rivereños de la explotación y el
aprovechamiento de dichos espacios.
Paradójicamente uno de los estados que con más ainco defendían el concepto de la apertura
absoluta de los mares sin ninguna restricción en función de su gran potencial naviero, por otras
razones estratégicas realizo declaraciones fundacionales.
Declaraciones en las cuales, Truman, hizo una declaración unilateral contundente respecto a la
utilización por parte de EE.UU. con carácter exclusivo de otra nación del distinto potencial
económico o sustancial con el lecho y subsuelo de sus espacios marítimos tomando en
consideración la plataforma continental (la continuación por debajo del nivel del mar, las masas
continentales. Esto es respecto a la declaración submarina.
tenia q ver con espacios de explotación, la pesca. “e condede dcho de cualq edo a
establecer zonas de conservacion fuera de sus costas de acuerdo con principio
de conservacion, mientras se conceda corresp reconocimiento a cualquier
interes pesquero de nacionaeles de euu q pueda exisitr en esas áreas”.
Hay varias razones porque estas declaraciones tienen un peso específico que indudablemente
repercutió en todo el ámbito internacional q tiene q ver con el carácter de gran potencia (al final
de la 2da guerra mundial) y provenir una declaración de ese tipo de un estado que pre comisaba la
libre autorización de espacios marítimos.
A partir de allí, los demás estados se apresuraron a hacer declaraciones a título individual o a
través de bilaterales a los efectos del aprovechamiento potencial y económico pero tomando en
consideración el potencial existente en lechos y subsuelos submarinos. Independientemente de
eso, también hay una idea de preservación proyectando a futuro la posibilidad de utilizar las
posibilidades económicas que brindan esos espacios.