x REJTONES SEPPEVTRIOWALES DE.LA PATAGONIA, ’ 1862— 1868, SANTIAGO DE CHILE, MONAL, CALLE DE LA MONEDA, NUM. 46. — Noviembre de 1863.— 463,SAY355,.62 Harvard College Library Gift of Archibald Cary Coolldge and Clarence Leonard Hay April 7, 1909,wei ADVERTENCIA. * EW LoS MOMENTOS DE DARSE A LUZ ESTE LIBRO, HE RECIBIDO DE BUENOS-AIRES LA SIGUIENTE CARTA QUE PUBLICO POR REFE~ RIRSE ESCLUSIVAMENTE A LA OBRA. Buenos-Aires, octubre 13 de 1863. Seffor don Guillermo E. Cox, Santiago de Chile. Mui sefior mio: Con la lectura de su viaje en las rejiones septentrionales de la Pa- tagonia que publica el Araucano, me ocupo de seguirlo en la intere- sante descripcion detallada con que Ud. presenta todos sus accidentes. Admirando la perseverancia de su dedicacion en esas investigacio— nes, comprendo sus azares para superar las dificultades de la natura- leza i de los hombres habitintes en el espacio que Ud. ha recorrido. ‘Me faltaba, para apreciar debidamente el mérito de su relato, la confrontacion que hice con una persona de aquellos Iugares que ha conocido a Ud. en ellos i confirmado hasta los nombres rropios con que Ud. los designa: habiendo conseguido este hallazgo providencial- mente, me permito avisar a Ud. lo que he inquirido para la prosecu- sion de sus esploraciones dignas del feliz éxito que tanto interesa al progreso de la civilizacion i del comercio. En una comitiva de indios de la tribu del cacique (hagayo pro— cedentes del Carmen de Patagones, llegé aqui su buen amigo Juan Antonio Negron (Alias Suan el Chileno).—Desde que me relacioné con este, recordundo las repetidas veces que Ud. Io menciouia en sus viajes, lo examiné con detencion; despues de algunas conversacio- nes relativas a Ud., asu naufrajio en el Limai, su refujio a las tolde- rias Paillacan i Huincahual, emprendi la lectura de sus escritos que escuchaba Negron con el mas decidido interes, satisfaciéndome a toda las preguntas que le hice sobre lasdistancias i nombres dle los parajes, de las sittaciones de las tribus, sus caciques, familins i costumbres, entrando Ud. con su comitiva i el perro “Tigre” en el conjunto del cuadro recorrido i perfectamente esplicado por Negron. Facil es comprender el interes que ofrece la escena comparativa de sus veraces escritos, con los informes dados por el testigo indijena conocedor de Ia mayor parte de sus acontecimientos, de los sitios i personas donde ocurrieron. Para que nada faltara al interes que tomé Negron por oir la lectura de sus viajes, le referi con detencion los pasajes en que Ud. lo men- ciona agradablemente como a su buen amigo, causindole mucho gozo el episodio de Manuela i pendencia con Melipan. Desde que entablamos tina comunidad de interes con Negron i sus compafieros, entre ellos el hijo del cacique Chagayo, por la lectura de sus vinjes, procurabun saber todos los dias si recibia mas noticias iescritos del ingles, los que les hacia conocer segun Ilegaban en el Araucano hasta el nam. 2573. Puestas las cosas en esta sazon he aconsejado a Negron i sus com- Ppaiieros, empefien todo su influencia desde las tribus de Huincahual hasta las proximas al Carmen en Patagones, para que sus caciques