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ACLARACIÓN SOBRE NACIONALISMO, IZQUIERDA, PROGRESISMO E IZQUIERDA MODERNA

Cuando escribía sobre las alianzas, me percaté que hay aún bastante de intolerancia y sectarismo
en aquellos que pregonan representar las opciones de cambio, incluidas amistades cercanas. En
entrevistas y artículos dados en medios, Carlos Tapia habla de un gran frente político y social,
basándose en la victoria de propuestas nacionalistas, progresistas y de izquierda, no sólo en Lima,
sino en varias regiones. Marco Arana como siempre, responde equivocadamente a Ollanta Humala
en vez de a Carlos Tapia, sobre que debe cambiar su discurso, pues no ubica el nacionalismo en la
izquierda progresista y moderna.

Aquí nuestras críticas. Para empezar, Tapia desde el nacionalismo, fue, junto a varios líderes en la
izquierda, quienes planteando la unidad, dieron paso a la CPS o la ANP, que no se concretaron
electoralmente, debido a errores internos y externos. Ahora, relanza la propuesta pero con tintes
electorales debido a la coyuntura de derrota de la derecha en todo el país. Nos hubiese gustado
un mayor trabajo político y que las alianzas regionales hubieran tenido más amplitud; y que a
pesar de solo presentarnos en alianza en 6 regiones y ganar 2, el balance hubiera sido más exitoso
si hubiésemos presentado candidaturas en más regiones y con más aliados. Obviamente las
victorias de Vladimir Cerrón en Junín o de Gregorio Santos en Cajamarca, etc., con propuestas
medioambientales y progresistas auguran un bloque nacional fuerte para enfrentar el modelo.
Pero la victoria no es solamente de la izquierda como sostiene Tapia emocionadamente ante
Althaus. Fue una combinación nacionalista, progresista y de izquierda en forma aleatoria para
cada región.

Marco Arana es más radical y menos político. Sugiere que sólo el nacionalismo puede ser parte de
una alianza "izquierda y progresista" si deja de tener un discurso con identidad propia. Que
seamos de izquierda y no neguemos serlo, en otras palabras. Que los de la izquierda tradicional
perderían su oportunidad si se reciclan en nuevos rostros, dejando de lado la justicia social y el
respeto a los derechos humanos y ecológicos. Bajo esa lógica sectaria, intolerante y poco
democrática, el proyecto APHU de Pizango de corte indigenista estaría en las mismas por no ser de
izquierda, o la propuesta liberal, progresista o de "izquierda moderna" de Villarán no debería
tener gente de la izquierda tradicional que se valgan de ella para llegar al poder, fin de todo
partido político que se precie de serlo. Finalmente, que sólo la "izquierda moderna" levanta las
banderas de la justicia social, los DDHH y la protección del medio ambiente. Increíble es saber que
nuestro enfrentamiento al TLC con EEUU, la condena de Bagua y la lucha por la derogación de los
decretos de la selva, el enfrentamiento a la criminalización de la protesta o las propuestas contra
la minería y las petroleras que destruyen el medio ambiente y sacrifican el ecosistema por la
extracción de materias primas, sean ignoradas por Arana y por quienes lo secundan. Los pretextos
son fáciles y útiles para ser anti Ollanta.

Finalmente los métodos. Sabida es mi posición de la democracia interna y que la formación de un


partido real dura varios años. El PNP, con cerca de 5 años de formación, ha realizado 4 congresos
nacionales (2005, 2006, 2009 y 2010), 3 elecciones internas para delegados nacionales (2006, 2009
y 2010), 3 elecciones internas para secretarios en Lima y provincias (2 en el 2008 y 1 el 2010), 3
plenarios macrorregionales norte, centro y sur (2009) y 2 plenarios en Lima (2009 y 2010).
Quisiéramos saber si su propuesta TyL del 2009, ó la propia FS de Villarán del 2007, de la que dice
representa el cambio, han realizado algún congreso aparte del fundacional, algún plenario aparte
del que eligió a su cúpula y candidatos, o alguna elección interna que democratice a los
democráticos de la "izquierda moderna y progresista". Nosotros vamos por ese camino y a pesar
de querer ubicarnos, como dicen en la derecha, en los extramuros de la democracia y el
autoritarismo, tratamos de madurar políticamente, tanto, que seguimos apostando por la unidad
junto a sectores progresistas y de la verdadera izquierda, a pesar de los exabruptos, criticas,
intolerancia, desplantes y posiciones ambiguas de y en la "izquierda moderna".

René Galarreta

Lima, viernes 15 de octubre de 2010

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