Inversión en Vivienda VIS, un negocio rentable para los hogares

En Colombia continúa el aumento del número de estos proyectos. En Bogotá, Novo Molinos Family
Club promete ser una gran inversión.

Cerca de cinco millones de hogares Colombianos viven en arriendo y la construcción de vivienda es

la solución al déficit habitacional del país y a la idea de todas las personas de tener casa propia.
Precisamente, la Vivienda de Interés Social (VIS) es una de las grandes apuestas del sector
constructor para ayudar a las familias a materializar ese sueño.

Son muchas las ventajas que tienen las personas o los hogares interesados en adquirir un
inmueble calificado como VIS, pues estos se caracterizan por sus buenos precios, amplio plazo
para el pago de la cuota inicial, la posibilidad de solicitar el subsidio de vivienda y el beneficio
sobre la tasa de interés del crédito hipotecario, sin contar que el dinero que se gasta en alquiler
ahora será destinado a la construcción de un capital que crece todos los días gracias a la
valorización.

Para los dispuestos a hacer realidad tener casa propia, la inversión en la vivienda VIS hecha sobre
planos significa que esta se puede alcanzar a menor precio y a futuro se traduce en mayor
rentabilidad.

En Bogotá, de acuerdo con el más reciente reporte entregado por la Secretaría Distrital de
Planeación, hasta marzo se habían licenciado 9.233 unidades de vivienda, de las cuales 5.295
correspondieron a vivienda VIS.

Martha Moreno Mesa, gerente de Camacol Bogotá y Cundinamarca, señala que el gremio
proyecta en el corto y en el mediano plazo un “fortalecimiento importante de la oferta de vivienda
social, que en el primer trimestre de 2019 mostró un incremento de 18,4% anual en el área
licenciada, que impulsaría en lo que resta del año la dinámica de las construcciones”.

“El nuevo POT y los planes parciales nos da esperanzas de contar con suelo para desarrollo de
vivienda social”, precisa.

En la ciudad, una de las localidades donde los bogotanos buscan más soluciones de vivienda es la
de Rafael Uribe Uribe, donde el gobierno local planea inversiones en vías, infraestructura, parques
públicos, cultura y deporte antes de finalizar el año.

Apalancada por 4.369 establecimientos comerciales, la economía de la localidad se caracteriza por

brindar oportunidades a sus más de 350.000 habitantes, quienes también se benefician de una
amplia cobertura educativa conformada por 137 colegios y una red de 10 centros de salud y
hospitales.

En este sector se levantará uno de los proyectos de vivienda VIS más modernos, ambiciosos y
mejor ubicados de Bogotá: Novo Molinos Family Club, de la firma Ecoinsa Ingeniería, el cual se
encuentra situado en el Barrio Molinos y que contará con amplias zonas verdes, múltiples zonas
comunes y excelente ubicación en un sector completamente consolidado.

Novo Molinos Family Club está rodeado de excelentes alternativas de transporte público que
conectan al proyecto con el centro de la ciudad en 15 minutos y a puntos de interés cultural y
religioso como la Iglesia del 20 de Julio y centros comerciales, entre ellos, los centros comerciales
Ciudad Tunal y Centro Mayor.

Sobre lo anterior, Juan Daniel Flórez, gerente general de Ecoinsa Ingeniería, anota que en el caso
de los hogares que compran VIS por inversión, deben tener en cuenta que el proyecto esté
ubicado en sectores ya establecidos, cerca de vías principales, colegios, portales o estaciones de
Transmilenio, zonas cuyo desarrollo genere valorización a futuro. “Lo anterior teniendo en cuenta
que la compra de vivienda nueva más que un nuevo negocio, es su mejor inversión”, dice Flórez.

Por su parte, Moreno Mesa indica que proyectos como Lagos del Tunjuelo, Lagos de Torca, POZ
Usme y Ciudad Norte ayudarán a “suplir gran parte de la demanda de VIS en la ciudad, pues se
proyecta la construcción de aproximadamente más de 200.000 unidades de vivienda de este
segmento”.

La directiva también resaltó que desde Camacol Bogotá y Cundinamarca se han identificado tres
factores que determinan el impulso a este segmento: “bajas tasas de interés en los créditos
hipotecarios, disponibilidad de subsidios tanto del Gobierno Nacional como el de “Mi Casa Ya
Bogotá” y los amplios plazos para pagar la cuota inicial, pues cerca del 80 de la viviendas de este
segmento disponen de más de 2 años”.

En ese orden de ideas, Flórez resalta que “al tener una vivienda propia, el dinero antes destinado
al pago del canon de arrendamiento, tiene una nueva destinación y es el pago de la cuota del
crédito hipotecario, la cual en muchos casos puede llegar a ser menor que el mismo arriendo. El
pago del arrendamiento es considerado un gasto dentro del grupo familiar, mientras que el pago
de la cuota de vivienda es una inversión”.

Hoy, materializar el sueño de tener casa propia es muy fácil, dado a que los requisitos cada vez son
más simples. Para los interesados en adquirir la vivienda con subsidio, los ingresos mensuales del
hogar deben ser de hasta cuatro salarios mínimos legales mensuales vigentes, además no deben
haber sido beneficiarios de subsidios familiares de vivienda y algún miembro del hogar debe estar
afiliado a un Caja de Compensación Familiar.

Vale la pena aclarar que ningún miembro del hogar debe ser propietario de otra vivienda y que
también se pueden aportar para la compra cesantías o ahorros. La ecuación es fácil, separa su
vivienda, entrega la cuota la cual se puede realizar en cómodas cuotas de 25 meses, que ofrecen
proyectos como Novo Molinos, se aplican los subsidios y se desembolsa el crédito.