MASCARAS POR AMOR

MIENTO PORQUE TE AMO…Oscar Wilde…

El objetivo de este ensayo es dar a conocer los postulados de Oscar Wilde en su

libro la importancia de llamarse Ernesto, donde nos relata como dos hombres
llegan al extremo de llevar una doble vida, al ponerse nombres y ocupaciones
ficticias solo por cubrir las apariencias ante un círculo social burgués del siglo XIX.

Históricamente la mentira a formado parte del hombre y parte de su evolución, se

dice que el hombre empezó a mentir desde la época de las cavernas, cuando
como cazador engañaba a su presa para poder comer, para poder vivir, entonces
se podría decir, que el hombre mentía para sobrevivir. Y en la actualidad también
se diría lo mismo, solo que ahora, las personas asumen la mentira más
ligeramente y como algo más común. Se miente por diversión, nunca por
necesidad, porque por más dolorosa que sea una verdad, jamás será preferible
una mentira. No hay nada más triste que vivir engañado, ni nada más cruel, ya
que, una mentira jamás será eterna, y cuando se descubre la verdad es un millón
de veces más doloroso. La verdad es una forma de vida, es una actitud mental,
por eso quien asume la verdad como su Dios absoluto será siempre consiente de
su realidad y las circunstancias no le cogerán por sorpresa. Se podrá preparar
para todo, para los tiempos fáciles y los difíciles, inclusive para el dolor. Entonces
su alma enfrentara valiente la adversidad y fortalecerá su carácter. Mientras que
un alma engañada, al descubrir tal engaño, no se encuentra preparada y se siente
abrumada, cobarde para tal dolor, por eso se derrumbara fácilmente y le será un
millón de veces más difícil sobreponerse.

“Una mentira es una declaración realizada por alguien que cree o sospecha que
es falsa o parcial, esperando que los oyentes le crean, ocultando siempre la
realidad en forma parcial o total”1. En función de la definición, una mentira puede
ser una falsedad genuina o una verdad selectiva, exagerar una verdad o incluso la
verdad, si la intención es engañar o causar una acción en contra de los intereses
del oyente. Las ficciones, aunque falsas, no se consideran mentiras. Mentir es
decir una mentira. A las personas que dicen una mentira, especialmente a
aquellas que las dicen frecuentemente, se las califica de mentirosas. Mentir
implica un engaño intencionado, consciente, y estudios demuestran que el ser
humano tarda más mintiendo que diciendo la verdad. []

Se miente por apariencia, por odio, por amor, por envidia. Existen cantidad de
motivaciones para una mentira. La época actual ha influido bastante para que el
ser humano se haya convertido en un mentiroso nato, las exigencias sociales,
personales, económicas y profesionales, han hecho que los que no llenen esos

1
Wikipedia.
cánones se los inventen, solo para pertenecer a un circulo, ya que el hombre es
asociativo por naturaleza y su máximo deseo es sentirse amado y aceptado. En
ese orden de ideas, se podría decir, que el hombre miente de acuerdo a su
necesidad. Pero lo malo es que se ha asumido la mentira de forma olímpica, se ha
minimizado el impacto que una mentira puede tener y el efecto que pueda causar
un determinada situación o en una vida. Por eso, ya se considera prácticamente
igual mentir por piedad, o mentir por herir. Se puede mentir a alguien para ocultar
que sufre una penosa enfermedad y así que pueda vivir sus últimos días sin
aflicción, o se puede inventarle a alguien sano que tiene una penosa enfermedad,
solo para amargarle su existencia por envidia o por odio.

El engaño es la forma más avanzada de la mentira. Es hacer creer algo cuando en

realidad es mentira, o causando una impresión equivocada en los sentidos. Es la
evolución de un mitómano. Es falta de compromiso, de seguridad, de confianza
pero sobre todo de respeto para con la pareja y para con uno mismo. “ El engaño
es el mayor asesino del amor”2. El engaño es la hipocresía encarnada en su
versión más álgida. La hipocresía es la parte invisible de este, es el arte de fingir y
de ostentar constante o esporádicamente virtudes, cualidades o sentimientos que
uno en realidad no tiene pero que exigen los estándares cuando se tiene una
relación. Más puntualmente estándares que exigen la pareja, tales como; el
respeto, la fidelidad, el amor, la sinceridad, la monogamia. Pero dichos estándares
son difíciles de seguir para algunas personas y como no los adoptan en su
comportamiento, los fingen y de forma hipócrita le hacen creer a su pareja que son
todo lo anterior y mucho más. Aparentan ser lo que no son para conservar el amor
y su relación. “El arte de agradar es el arte de engañar”3.
Gracias a tamaño engaño sus parejas les idealizan y se acostumbran al estado de
placer y bienestar que les causa la estabilidad que da una relación solida. Por eso
cuando descubren su penosa realidad muchas veces se obligan a si mismos a
engañarse y a mantenerse con esa otra persona, a pesar de la infidelidad o de la
mentira, con tal de no perder supuestamente dicho estado de plenitud. Pero no se
dan cuenta que no conservan nada, porque no es algo real el amor que están
viviendo y solo crean una ilusión basada en un sentimiento nulo, que a la larga se
convierte en su perdición, en su tormento, en su pequeño infierno emocional. Por
eso cuando comprenden su error se dan cuenta que más valdría haber alejado
aquel mezquino a tiempo, porque para este momento ya la herida de su corazón
estaría sanada y se encontrarían listos para empezar de nuevo la búsqueda de
aquel ser que si le diera valor a sus sentimientos y que le pudiera hacer
verdaderamente feliz.

El engaño es parte de la mentira, pero también existen las llamadas mentiras por
amor. O en mejores palabras, existen las mentiras motivadas por las más bajas
2
Oscar Wilde.
3
John Fitzgerald Kennedy
pasiones o las más altruistas virtudes. “Somos fácilmente engañados por aquellos
a quienes amamos”4. El amor, es una de las motivaciones más constantes de los
mentirosos. Estos lo usan de excusa para justificar sus engaños bajo el lema de
“el amor todo lo justifica”5, pero el amor en su estado natural es puro, sin mancha
de mentira, si se altera, se altera el sentimiento, tal vez se trasgrede en su esencia
y eso lo convierte en una ilusión, en un apego, y hasta en una obsesión. El amor
es confundido fácilmente con cualquiera de los sentimientos anteriores ya que
estos, articulados por la pasión pueden ser tan intensos y reales como el más
grande de los amores, y pueden llevar al hombre a realizar actos impensados,
magnánimos o rastreros, pueden ser capaces de llevarlo a la locura a sus
extremos y límites.

Pero el amor no engaña, ni miente, ni lastima, el amor propende el bien del otro,
es la forma más sincera de afecto, de compromiso, de lealtad, de fidelidad, de
respeto. Por ende se puede decir que alguien que quebranta lo anterior no puede
decir que conoce este sentimiento. El amor es algo sublime y solo pueden
disfrutarle y conocerle aquellos que son puros de corazón, aquellos que no tienen
mancha en su conducta. Entonces aquellos que engañan o mienten en realidad no
aman.

“La primera vez que me engañes, será culpa tuya; la segunda vez, la culpa será
mía”6. Quien acepta el engaño como parte de su relación, se resigna a vivir una
vida en pareja sin respeto, le permite la entrada a terceros, minimiza su imagen
ante su compañero, se convierte en una opción segura para su contrario aun
cuando este tenga más opciones. 7“Amarse a sí mismo es el comienzo de una
aventura que dura toda la vida”. Quien permite esta situación en su vida no se
quiere ni se valora lo suficiente, es decir no posee una autoestima alta, ya que no
posee valía personal, no se considera lo suficientemente digno, valioso y grande
como para merecer todo el respeto, el amor y la fidelidad de otro. Se lo ha
entregado todo a ese otro ser y considera que sin él no es completo, que sin él no
es nada y que solo estando juntos vale algo. Que error comete, porque nunca se
debe amar a otro a tal extremo como para dejar de amarse a uno mismo. Lo
primero que se debe cultivar es la autoestima que no es más que la cantidad de
amor propio que cada uno posee. Es la percepción evaluativa de uno mismo. Por
lo tanto, no puede menos de afectar a nuestra manera de estar y actuar en el
mundo y de relacionarnos con los demás. Nada en nuestra manera de pensar, de
sentir, de decidir y de actuar escapa a la influencia de la autoestima. “La expresión

4
Moliere
5
Voltaire
6
Anaxagoras.
7
Oscar Wilde.
de afecto más sana es la autoestima” 8 Por eso quien posee una baja autoestima
genera una necesidad de aprecio tan grande que no le importa nada, solo sentir
que alguien le ama, aunque ese amor sea falso. Entonces es cuando se dice que
se deja de vivir, de disfrutar de los placeres del amor, del respeto, de la confianza,
que encierran en si la esencia y el valor de la vida, para pasar a existir, a
resignarse a una vida sin sentido, de dolor, de apego, de continuo miedo a la
perdida. “Lo menos frecuente en este mundo es vivir. La mayoría de la gente
existe, eso es todo”9.

Cuando se pierde el valor de la verdad, se expresa la mentira y el engaño en

todas las facetas de la vida. Se aparenta ser lo que no se es, y tener lo que no se
tiene, con tal de vivir como se desea y obtener un nivel de vida ficticio. “En
asuntos de vital importancia el estilo, y no la sinceridad, es lo que cuenta” 10.

La vida de un mentiroso es vana, porque se puede mentir a todo mundo menos a

uno mismo, y en ese camino de engaños, se lastima y se pierden seres valiosos
que profesan sentimientos auténticos, sentimientos que se pagan con dolor. Un
mentiroso puede disfrutar de riquezas, de posición, de poder, pero jamás de amor,
porque no lo consideran parte de sus prioridades. Y dejan ir la vida, disfrutando de
todo lo mundano, pero cuando se les cae su teatro y pierden la fe de quienes
engañan, ya son reconocidos como mentirosos y no les queda nada más que su
existencia solitaria. Nadie les dará terceras oportunidades porque no les tendrán
confianza. No los consideraran capaces de amar, de trabajar o de tener un acto
sincero. Se les termina considerando parásitos sociales. Por todo lo anterior se
podría concluir que la mentira es el camino seguro a la soledad.

Andrés Camilo Bedoya zuluaga

8
Abraham Maslow
9
Oscar Wilde
10
Oscar Wilde.