You are on page 1of 3

NOMBRE: Rocio del Carmen Huaman Hurtado

CÓDIGO: 124430

LA AGRICULTURA DE RIEGO EN LA SIERRA CENTRAL DE LOS ANDES

En la Sierra, numerosos autores, entre antropólogos (Murra, Mayer, Earls, Lumbreras,


etc.) y agrónomos (Blanco, Tapia, Valladolid, etc.), han estudiado detalladamente los
conocimientos y tecnologías tradicionales que han usado las culturas quechuas, aymaras,
huancas, waris, chankas, para manejar sustentablemente el agua en las tierras secas y en las
montañas semiáridas tropicales andinas. Es cierto que estos conocimientos han sufrido una
erosión cultural en los últimos siglos; sin embargo, aún quedan muchos y son de mucha
importancia en el uso sustentable del agua en el Perú.

Las tierras secas, entre hiperbáricas, áridas y semiáridas, constituyen el 40% de la


superficie del Perú. Estos espacios han sido habitados por más de cinco mil años y en ellos
se desarrollaron culturas en las que el accesibilidad al agua se constituyó en un factor
dominante. El control del agua fue parte del poderío de cada una de las culturas que habitaron
los valles, verdaderos oasis del desierto costero, en especial. Sistemas de irrigación en
llanuras desérticas y en condiciones de montaña semiárida, sistemas de aprovechamiento del
agua de la napa freática, técnicas de riego en pendiente, protección de fuentes de agua,
sistemas de retención y distribución lenta del agua, terrazas, son parte de los saberes,
conocimientos y tecnologías tradicionales precolombinas. Muchas de estas tecnologías
siguen siendo utilizadas combinadas con otras contemporáneas, tales como el riego
presurizado dentro de concepciones tales como el manejo de microcuencas. Ambas vertientes
culturales son hoy parte de las tecnologías apropiadas de uso sustentable del agua en las
tierras secas costeras y de montaña andinas peruanas que bien podrían ser parte de una
estrategia eficiente de lucha contra la desertificación.

Los conocimientos y tecnologías tradicionales en el uso sustentable del agua tienen


un gran valor en la medida que constituye una forma concreta de garantizar la participación
de la población, de la comunidad, en este proceso. Si hiciéramos una escala de valoración de
los conocimientos y tecnologías tradicionales en el uso sustentable del agua serían los
primeros, estos no son nuevos, son el resultado de miles de años de validación y han
demostrado su adaptación a las condiciones de aridez costera y semiaridez andina.

Sin embargo en el Perú aún no se le ha dado el valor y la importancia debida a los


conocimientos y tecnologías tradicionales, aún son considerados marginales, no son parte de
las carreras profesionales del agro y las ingenierías, en general; no cuentan con un
reconocimiento de parte del Estado peruano, además de otras consideraciones, como las que
se han explicado anteriormente.

En los Andes Centrales los investigadores tienen diferentes puntos de vista respecto
al uso de los términos ‘andenes’ y terrazas’, los andenes son plataformas casi horizontales
con muros de soporte, excelentes para la agricultura de maíz con regadío. Las terrazas
agrícolas de labranza se encuentran en laderas de gran altura y pendientes con el objeto de
reducir la erosión con un mínimo de intervención. Los tipos de andenes corresponden a un
ordenamiento cronológico, funcional y de distribución altitudinal en las zonas agroecológicas
presentes en la sierra. Los andenes están reunidos en sectores que forman parte de sistemas
de andenería, especialmente en la sierra central y sur del Perú. Además de la construcción de
sus partes, se examina su función, conveniencia y uso para determinados cultivos. Las
diferencias estructurales y usos de estos andenes y terrazas se discuten relacionándolos con
la producción agrícola.

Los andenes y terrazas en los Andes constituyen una muestra de procesos de paisajes
antropogénicos a escala grande para manejar los riesgos climáticos y geológicos, y extender
la frontera agrícola. Los andenes forman sistemas de andenería que incluyen sectores con
obras de irrigación, almacenamiento de agua y accesos entre los andenes. En la medida del
aumento de área y su sofisticación interior, los diferentes tipos de andenes y la terraza, ayudan
a reducir la erosión del suelo y aumentan la eficiencia del recurso agua, incrementando las
posibilidades de producción en los Andes. Para su construcción las culturas prehispánicas
tardías eligieron las características más apropiadas de los recursos disponibles, es decir lo
que hoy se conoce como tecnología tradicional. La actividad sísmica, como también los
derrumbes y huaicos, que pueden dañar y/o destruir los andenes y canales, determinan la
elección de los materiales de construcción y de las soluciones de ingeniería apropiadas para
la construcción de andenes y obras de riego y drenaje.
El manejo del conocimiento de la tecnología de construcción de andenes y obras de
riego prehispánico y su rehabilitación para fines de conservación y uso de los mismos, para
lo cual fueron construidos; es decir, patrimonio vivo. Esto se discute conjuntamente con las
consideraciones de la antropología y de la arqueología aplicada. Así también, con las
consideraciones oficiales de restauración del patrimonio cultural. El manejo de esta relación,
es decir entre la conservación y el uso de estas estructuras, implica un conocimiento de la
infraestructura agrícola, de las prácticas y de los materiales de la tecnología tradicional de
construcción, la sostenibilidad de esta y de su función, de la organización social y de los
costos requeridos para la restauración y el mantenimiento. El conjunto dinámico de estos
factores constituye el patrimonio vivo, el cual requiere ser considerado en el futuro desarrollo
rural de la sierra andina.

En la sierra central se tiene una agricultura de riego por inundación o sumersión,


generalmente, en bancales o tablones aplanados entre dos caballones por terrazas y andenes
como también por drenaje, por aspersión: el riego por aspersión rocía el agua en gotas por
la superficie deseada, consiguiendo un efecto similar al de la lluvia. Por infiltración o
canales, Por arroyamiento o surcos y Por inundación o sumersión.

De los métodos anteriores, el de riego por inundación o surco es el más habitual,


siendo usado en más de un 80% de los proyectos de agricultura de regadío. En la actualidad,
las técnicas comentadas del riego por aspersores o por goteo, a pesar de necesitar una
inversión mayor, cada vez están siendo más utilizadas debido al ahorro futuro que conllevan
por una eficiencia mayor del uso del agua.

Se propone considerar y analizar un factor en el incremento de la producción de los


cultivos andinos, que no ha sido suficientemente estudiado y del que depende su fomento. La
propuesta es de reconocer los diferentes sistemas de cultivos andinos y ubicarlos
apropiadamente en el espacio, en el tiempo y en relación a la tecnología empleada en el uso
del recurso tierra. Conocer en mayor detalle estos arreglos espaciales y temporales así como
la tecnología que aplican las poblaciones campesinas, permitirá estimar el real potencial de
los cultivos andinos a la alimentación en su propia zona de origen. De la misma manera
permitirá valorar adecuadamente la tecnología agrícola tradicional y los aportes que se
pueden lograr, con la inclusión de los avances modernos de la ciencia agrícola.

You might also like