FILIPENSES 4.11-13: “No digo esto porque necesite ayuda, pues he aprendido a estar contento con lo que tengo. Se vivir con casi nada o con todo lo necesario. He aprendido el secreto de vivir en cualquier situación, sea con el estómago lleno o vacío, con mucho o con poco. Pues todo lo puedo hacer por medio de Cristo quien me da las fuerzas. ” Cuando escuchamos la palabra contentamiento ¿Con que lo asociamos?
¿Podemos tener contentamiento en medio
de una aflicción? ¿Qué oración no contestada nos tiene enojados? – ¿Que llamado de parte de Dios tenemos que no estamos desarrollando? ¿Qué sueño, que área de nuestra vida no está siendo fructífera y nos frustra? “El estar celosos equivale a decir que no estamos satisfechos con lo que Dios nos ha dado” ¿Cómo vivimos, como nos sentimos y como nos relacionamos con Dios- cuando no se nos da lo que queremos cuando lo queremos? Cuando los deseos se transforman en demandas o exigencias para Dios viene el descontento
Santiago 4.3: “Aun cuando le piden a Dios,
tampoco reciben porque piden con malas intenciones: desean solamente lo que les dará placer” Hoy en Venezuela todos queremos progreso, pedimos por un mejor futuro - ¿Estamos comprometidos de la misma medida en orar y cambiar nuestra actitud para honrar a Dios en todo momento en nuestra familia, iglesia y sociedad?