5 J-K. HUYSMANS.
5/648
164 Cop. Al revés
11 de Rodrigo Escudero
me Rest
¥
EDICIONES LIBRERIAS FAUSTO.
BUENOS AIRESugysaadwy vis orad ‘oo1yp119 ojueureaysaoxe vozozed
pein sojnotion sopeounyM ap o8se] Of B oajana
Mrosop 95 dnb & sopouosied esorsrar uotsednooasd
ey & oulspoose ]9 vIsey JOOS sisTyUE opeyTau
"oop ]2 apsep BA ond oNeIoUR! UN “se[BIOU! vp
“rout vp & owstaLoju09 Jp serqenb ap puprsooet PI
v orpuodsax vpesed vrnqudp vf op svjrouttysod sey
ue Ugrdna eAno ‘oeuneyy slosuery ayueupeury A
souviiog sodsoag ‘Knog sojzeyg ‘addyryd SMOTS9|
rey) 009 vsreBuojord 28 oon anb uolorpen v| vo
soygreo wmyesoy] Ban yap saxosinood so] op
oun us —Kojg, uo] oD ortinf— 9yZIAUED os ‘ape
seui ‘K owustueqes Jo £ owssypnoo fe wet] QALOP TIE
Sq "wisnuepeosp vjaaou v[ 9p upedureo us 93810
ds K vitesail] UOIUIUSLIO vySO vIqnyXe onb souor9
“edngosad set ap oBysop a8 eAnIuyep uo enb wise
‘ouistpemyem Jap SeMTBAdTaX SpUL SesnSyy sey ama
asreseisep & O8aI K vjOZ, of |p ousoy vo opm
SuoD vIqeY 2 onb saxome op o[nayp [9 ws osa18
“tr qmosuog op puowpg ep A axreppneg sore
gp seorispixe sauofodasuoo sep e ofdiouad un Uo op
DomouyA “XIX [StS Jap ovAEND ouMTM yo de Lo
cubry dp woresado onb soorrodeyue soyuonuraour &
Spjpnoso ap vyexeut ve] op OY UO “vsIO w DYUaLLIOD
bun ap ozejdsop os onb Woo pepypse vj so suowsAnEL
ap euiesoiy wiloysoxert vl wo epuozdzos spur anb of
Obese “viqo vl ap oiuIefUIDoUODA JoUNIT UN UE,
voypive vjosott vy v vista anv jo "T
NOIDONGOWLNI
}
i
euguaay uy pormag - eupuaBay ey uo osoidiut
Li6l ‘samy soueng - OLSAVA S¥FAAUAIT SaNOI9Ida O
ELUTE a1 vf ouodsrp anb owsodop 19 ONPOET
Lug} 2p oxaxgay :uoRTp? eT
zer 1e0sQ “vader LT op ODS!
sunogos ¥
spoue] [eU}BYO oP OME8 Introoucciés.
superficial se desvanece al comprobar la vitalidad
poética y la trabazén intima con que fue recorrido
al periplo. El autor de Al revds dejé en sus ficcio-
es el dramitico testimonio autobiografico de un
hombre que, en los dificiles comienzos de la Tercera
Reptiblica, buscaba una respuesta para sus propiss
incertidumbres y que a través de una sucesién de
sen apariencia, si se las t0-
ma ais wente— traz6é una linea de honda cohe-
rencia y de singular ejemplaridad, la que por afia-
didura permite obtener reveladores indicios acerca
de ciertos vinculos subyacentes en las diversas fuer-
zas artisticas ¢ intelectuales que rivalizaron entre
si durante los treinta afios en que elaboré su pro-
duccién novelistica. Al menos, no resulta en modo
alguno arbitraria la serie de impulsos que lo’ con-
dujo de un estadio al siguiente, hasta culminar en
una de las manifestaciones de fe mas entrafiables
de la literatura moderna, icidamente caracteriza-
da por Rémy de Gourmont: “En lugar de seguir Ja
tendencia de los cristianos negligentes, quienes poco
fa poco reducen sus creencias a una moral de po-
bres diablos que desdefia los milagros, desecha Jos
aspectos misticos 0 demoniacos y, a la sombra del
consentimiento racionalista, instaura una religién
simple y prudente, calcada sobre el reglamento de
un taller; en lugar de mezclarse con estos modes
tos devotos, Huysmans reivindica una suerte de ca-
tolicismo integral en el que volvemos a encontrar
toda la fe, toda la inquictud, todas las contradic
ciones, todos los matices de una prolongada prac-
tica réligiosa que en el curso de los siglos se vio
exaltada, embellecida, trastornada, desgarrada e in-
flamada”.
Georges-Marie-Charles Huysmans nacié en Paris
cl 5 de febrero de 1848. Su madre era francesa y
su padre procedia de Holanda; esta iltima circuns-
IxrRooucerN 9
tancia lo indujo més tarde a adoptar el nombre de
Joris-Karl, en la aparente creencia de que tal eva la
jraduccién holandesa de Georges-Chatles. Completé
su bachillerato en 1866 y durante breve lapso cur-
sé estudios de jurisprudencia, que abandond para
ingresar en 1868 como empleado en el Ministerio
del Interior, Salvo un corto perfodo en que sirvis
on le Guardia Mévil del Sena, durante Ios sucesos
de 1870, prosiguié la carrera como funcionario pt-
blico hasta su retiro en 1898, cuando se desempe-
faba como subjefe de reparticién. Le drageoir a
‘pices, primer libro que escribié, lo hizo publicar
en 1874 con su propio dinero; era un reducido con-
junto de textos que calificé de “poemas en prasa”,
segin el modelo que habia impuesto Baudelaire
Por espacio de varios afios se conté entre los disci-
pulos de Emile Zola, y en 1880 contribuyé al volu-
men colectivo de Les soirées de Médan que reunia
sendos cuentos del jefe de la escuela naturalista y
de cinco de sus adeptos; se trataba de un grupo di
narraciones sobre la guerra francoprusiana, al qu
Guy de Maupassant aporté su célebre "Boule ¢
Suif”; Huysmans, por su parte, incluys una version
revisada de “Sac au dos", picza en que un recluta
refiere las vicisitudes de una retirada confusa du-
rante [a cual su enfermedad lo obligé a trasladarse
Gificultosamente de un hospital a otro; si bien en
conjunto no es un relato de construccién rigurosa,
en cambio ya se destaca por la precisién descriptiv:
que habria de caracterizar al escritor en su plena
madurez artistica. Con la aparicién de Al revés, on
1884, se distancié del naturalismo y consolidé el em-
puje de la corriente decadentista, cuyo programa
postulaba que el arte es superior a la naturaleza y
que la existencia humana sdlo merece vivirse como
una obra de arte, doctrinas que tuvieron amplia re-
percusiéa en Ia gpoca y cuya influencia sc mani-