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extremauncin con las manos atadas, acaricio a la nena, que se expone cubierta de cienpies en la fiesta de mi padre; l acaba de morir

de cncer, pero fue amado por todos nosotros

algo negro no puedo nombrar algo negro que, como una piel, se disfraza de otra cosa en la mesa y se instala como la maldad. pensamos en abrir el armario, exponer esa cosa ante el crucifijo, pero los tos se alejan; ahora, desean criticar nuestra posicin en el incidente es fcil ser as, ocultarse en la ortodoxia es discernir la realidad de una forma cmoda no es tampoco un momento dramtico ni se ha realizado un sacrificio; la instancia se repite, en mi casa, pero la maldad se desteje; an as no desaparece

plegaria jess, sera fcil corregir, con un poco de luz, las manchas que a pesar tuyo destruyen tu imagen, cuando estoy sentado enfrente de tu rostro, mirando tus ojos, plido e inquieto, en el instante de la plegaria sin duda, un poco de maquillaje podra sustituir las amarguras que en la boca yacen, las tinieblas que en tus ojos se alzan con misterio

una rosa una rosa se esconde entre los muebles de mi cuarto; hay que hacer poco ruido para poder buscarla. lo ms probable es que se haya escondido en algn rincn; que a pesar de su hermosura, haya sido seducida por el aislamiento.

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