Lnes 24 de enero de 2005 | Dossier Masacre de Cromagnon Asesina industria de rock Nos movemos en un sistema que no slo mercantiliza

la cultura sino que adems se adj udica el derecho de sectorizarla, de segmentarla, de disear productos vendibles p ara diferentes pblicos, moldeados para el consumo. Ser joven, dentro este entramado de relaciones de compra-venta cultural, es una condicin que atraviesa transversalmente toda situacin de clase. Un mismo mercado c on una nica dinmica de funcionamiento, parcelado a la medida de las limitaciones q ue la realidad imponga. Espectadores pasivos buceando entre ofertas mltiples de o cio escapista. Todas y todos adecundonos a un terreno edificado y en apariencia i namovible en el cual no somos sujetos colectivos creadores de cultura o individu os capaces de compartirla, de desesquematizarla. Hbitos que nos son dados, pasatiempos que quien no compra es porque no puede. Por que hay otras necesidades insatisfechas que llenar antes de pensar en darse el l ujo del ocio. Porque en estos trminos la creatividad, el arte, la capacidad de pl asmar culturalmente nuestros proyectos, no son ms que un lujo para pocas y pocos. La industria musical es quizs el ncleo en el cual se visibilizan con ms claridad la s reglas del juego. Y es adems el mbito del arte que est en mayor contacto con los y las jvenes.Teniendo todos estos factores en cuenta, el anlisis que puede darse a cerca de lo que pas en Croman abre todo un espectro de relaciones que subyacen por debajo de las figuras concretas, los responsables evidentes, los riesgos y las i mplicancias de una habilitacin corrupta. Chabn preso, posibles indemnizaciones par a las vctimas, una gestin de gobierno ibarrista puesta en tela de juicio... muerto el perro, se acab la rabia? Bueno, igual,relativicemos la cuestin: Ibarra sigue d onde est y un escrache no lo hace tambalear, ni le tiembla el pulso a la hora de designar a un personaje con el prontuario asesino de Alvarez. La justicia que se le debe a cientos de pibes y pibas muertxs no es una minucia, por ms que no vaya a dar por tierra con todo un mercado que mueve millones. Quizs sea hora de abrir el debate, de intentar ir por ms.Vislumbrar la autogestin d el arte y de la cultura en un medio regulado por la obligacin de consumo.