El documento resume el libro "Los nazis en México" que describe la amplia infiltración de los servicios de espionaje nazis en México durante la Segunda Guerra Mundial, incluyendo el espionaje industrial, el tráfico de drogas y recursos naturales para apoyar el esfuerzo de guerra alemán, y los intentos de influir en la política mexicana. La información proviene principalmente de informes de inteligencia estadounidenses. Aunque las revelaciones son sorprendentes, se cuestiona qué tan verosímil es
El documento resume el libro "Los nazis en México" que describe la amplia infiltración de los servicios de espionaje nazis en México durante la Segunda Guerra Mundial, incluyendo el espionaje industrial, el tráfico de drogas y recursos naturales para apoyar el esfuerzo de guerra alemán, y los intentos de influir en la política mexicana. La información proviene principalmente de informes de inteligencia estadounidenses. Aunque las revelaciones son sorprendentes, se cuestiona qué tan verosímil es
El documento resume el libro "Los nazis en México" que describe la amplia infiltración de los servicios de espionaje nazis en México durante la Segunda Guerra Mundial, incluyendo el espionaje industrial, el tráfico de drogas y recursos naturales para apoyar el esfuerzo de guerra alemán, y los intentos de influir en la política mexicana. La información proviene principalmente de informes de inteligencia estadounidenses. Aunque las revelaciones son sorprendentes, se cuestiona qué tan verosímil es
JUAN ALBERTO CEDILLO, Mxico: Editorial Debate, 2007.
Mxico fue objeto de particular inters para Alemania durante la Primera Guerra Mundial. De hecho, en la primavera de 1917 el conocido "telegrama Zimmermann" fue la excusa que sirvi al gobierno norteamericano para justificar su ingreso a la contienda. Nada indicara que aquel inters desapareci cuando el estallido de la Segunda Guerra, sobre todo tomando en cuenta que el petrleo mexicano tuvo en la Alemania de Hitler su principal mercado consumidor, una vez que, a consecuencia de la nacionalizacin de 1938, norteamericanos e ingleses declararon un boicot a las compras de hidrocarburos mexicanos. En la historia de los intereses alemanes en Mxico destaca la vasta obra de Friedrich Katz, y de manera especial su libro La guerra secreta en Mxico, en cuyas pginas se estudia en profundidad la presencia y ambiciones del imperialismo alemn en el pas antes y durante la Primera Guerra Mundial. Las preocupaciones de Katz en torno a la poltica exterior alemana se remontan a los aos cincuenta del pasado siglo, cuando, desde un horizonte ms acotado, incursion en ciertos aspectos del comportamiento de la Alemania nazi en Mxico y Amrica Latina. En base a documentacin alemana, explic las principales etapas de la poltica nazi en Latinoamrica, dio cuenta de sus acciones y lmites a la luz del desenvolvimiento de la Segunda Guerra Mundial y, sobre todo, examin las respuestas de Estados Unidos e Inglaterra al avance alemn en Europa. En su largo ensayo, Katz apunta las dificultades que todo historiador enfrenta al trabajar con fuentes de informacin provenientes de archivos de los servicios secretos. A continuacin, y a partir de los documentos entonces disponibles, reflexiona acerca de la produccin historiogrfica, en torno a las interpretaciones que historiadores y periodistas, sobre todo norteamericanos, dieron a las acciones emprendidas por la Alemania nazi en Estados Unidos pero tambin en Amrica Latina. Ha trascurrido medio siglo desde la edicin alemana de su ensayo y casi cuarenta aos desde la primera edicin en espaol; sin embargo, la investigacin no ha avanzado mucho ms de donde Katz la dej, al punto que aquel texto constituye una referencia obligada tanto por la informacin que aporta, como por el horizonte analtico desde donde reconstruye segmentos de la poltica nazi en Amrica Latina. En este panorama destaca la reciente publicacin de Los nazis en Mxico, que el periodista Juan Alberto Cedillo public a finales de 2007, obra que fue galardonada con el primer premio Libro de Reportaje que otorga la editorial Random House Mondadori. El contenido de este libro resulta sorprendente por exhibir los niveles de infiltracin de los servicios de espionaje nazis en las altas esferas de la poltica mexicana, sobre todo durante los primeros aos de la presidencia de Manuel vila Camacho. A lo largo de seis captulos se entrecruzan seis historias por donde desfilan espas alemanes y empresarios estadounidenses, junto a militares, diplomticos y polticos mexicanos de una corrupcin tan mayscula como las supuestas simpatas que profesaban por el Fhrer. Las asombrosas revelaciones que Cedillo ha puesto en circulacin provienen casi en su totalidad de informes de los servicios de inteligencia del gobierno de Estados Unidos, bsicamente del FBI y del Departamento de Inteligencia Naval. Es decir, se trata de informes de agentes norteamericanos que registran las actividades en Mxico de agentes de la inteligencia militar alemana, la Abwehr, y de la polica secreta de Hitler, la Gestapo, pero tambin dando cuenta de la amplia red de contactos y actividades que los espas nazis tenan en los crculos de la poltica mexicana. El libro escudria acciones verdaderamente espectaculares, partiendo del supuesto de que las mismas confirmaran la importancia que tuvo Mxico en la estrategia hitleriana en Amrica Latina. En este sentido, la documentacin consultada muestra a Mxico como una importante base de operaciones que persegua un doble propsito: por un lado, apoderarse del petrleo junto con una buena cantidad de materias primas minerales indispensables para la industria blica nazi; y por el otro, poner en marcha actos de sabotaje contra el ejrcito estadounidense. Respecto al primer asunto, sorprende la informacin en torno a las actividades del empresario petrolero estadounidense Jean Paul Getty y el magnate sueco Axel Wenner-Green, quienes, segn la inteligencia norteamericana, trabajaron para el gobierno alemn a los fines de garantizar un permanente flujo de materias primas e hidrocarburos mexicanos, incluso an despus de que Estados Unidos declar la guerra la Eje. El autor de Los nazis en Mxico afirma que la figura central del espionaje alemn fue la actriz alemana Hilda Krueger, a cuya belleza pocos pudieron resistir. Desde 1941, la alcoba de "la espa ms hermosa de la Segunda Guerra Mundial" (p. 41) era con frecuencia visitada por Miguel Alemn, Secretario de Gobernacin; Ezequiel Padilla, Secretario de Relaciones Exteriores, y Mario Ramn Beteta, Subsecretario de Hacienda, entre otros funcionarios, polticos y militares cercanos al presidente vila Camacho. Segn los agentes norteamericanos, Hilda Krueger, a quien tambin le endilgaron amoros con el todopoderoso Joseph Gbbels y con el mismo Fhrer, se convirti en el centro de una enorme conspiracin nazi en Mxico que involucr a secretarios de Estado, jefes militares y diplomticos mexicanos, pero tambin a importantes firmas industriales de Alemania y de Japn, a empresarios cafetaleros de origen alemn avecindados en Chiapas y a pescadores japoneses en Baja California. La penetracin del espionaje alemn incluy, segn Cedillo, a la trasnacional sueca Ericsson, que en Mxico, como duea de la Compaa de Telfonos, "intercept todos los aparatos telefnicos de polticos y militares, entregando informes puntuales a los hombres del Fhrer" (p. 27). Los resultados de este gran emprendimiento no fueron desdeables, toda vez que, segn se desprende de la documentacin que consult Cedillo, Mxico continu aprovisionando de petrleo a la industria alemana, a travs de operaciones comerciales encubiertas realizadas desde Panam y las Antillas, en barcos de propiedad del empresario norteamericano Jean Paul Getty. Pero tambin embarcaciones japonesas e inclusive submarinos alemanes visitaron con frecuencia puertos mexicanos para hacerse de cargamentos de mercurio, zinc, cobre y aluminio, entre otros minerales indispensables para sostener la guerra. En materia de sabotaje, la operacin ms espectacular que relata Cedillo es el montaje de uno de los primeros carteles de la droga en Mxico. Alemanes y japoneses, en complicidad con polticos mexicanos, fueron los responsables de articular una red de trfico de narcticos con el objetivo de penetrar las bases militares en el sur de los Estados Unidos. Figuras como Maximino vila Camacho, Gonzalo N. Santos, Miguel Alemn, Ezequiel Padilla, bajo la jefatura del militar y diplomtico mexicano Francisco Javier Aguilar Gonzlez, aparecen como los responsables de un monumental negocio que tena el propsito de "debilitar la moral del ejrcito norteamericano" (p. 48). En esta red de intrigas polticas y de negocios privados habra participado el astro de Hollywood Errol Flynn, quien, a bordo de su yate Sirocco, introduca a Estados Unidos herona embarcada en puertos del Pacfico mexicano. Dos captulos del libro aportan datos notables alrededor de asuntos sobre los que ya se tenan referencias. Se trata de las estrategias nazis para influir en la poltica nacional a travs del apoyo y financiamiento de grupos y candidatos opositores. Fue el caso, entre otros, de la rebelin de Saturnino Cedillo en 1939, del apoyo a Maximino vila Camacho cuando pretendi competir por la candidatura presidencial, ms tarde el apoyo a Juan A. Almazn como candidato opositor en las elecciones de 1940 y, por ltimo, los vnculos entre el nazismo y el movimiento sinarquista durante los primeros aos cuarenta. Los dos captulos finales asombran por sus revelaciones. En uno se da cuenta de los nexos del empresario radial Emilio Azcrraga con los servicios de informacin de la Alemania nazi. La XEW, la estacin ms potente del continente americano, por lo menos hasta 1942, trasmita las noticias de la guerra europea a partir de boletines de la agencia alemana Trasocean, agencia que estaba bajo la directa supervisin de Gbbels (p. 116). El ltimo captulo se encarga de introducir datos acerca de supuesta complicidad entre los servicios de inteligencia rusos y alemanes en Mxico. El muralista Diego Rivera aparece como "informante" de la embajada norteamericana, que denuncia a funcionarios mexicanos como agentes del gobierno sovitico (p. 122), a lo largo de una trama donde los nexos ruso- germanos se materializaron en la colaboracin que dieron agentes de Hitler a la logstica que hizo posible el asesinato de Len Trotsky. Qu tan verosmil resulta el conjunto de la informacin que presenta este libro? Alcanzaron las redes de espionaje nazi las dimensiones descritas, o es posible inferir exageraciones o sobreestimaciones en las fuentes consultadas? En todo caso, de ser cierta la magnitud de la presencia nazi, cmo, quines y cundo desarticularon estas operaciones? El libro no explica estos asuntos, slo indica que, a partir de 1942, "el gobierno norteamericano utiliz toda su fuerza para sacar la quintacolumna nazi de nuestro pas". Como producto de esta presin, se habra desarmado la red de agentes alemanes y "poco a poco los militares, empresarios y polticos que tenan simpatas por los nazis las ocultaron y comenzaron a colaborar con los aliados" (p. 41). Es posible pensar que la presin estadounidense dobleg una maraa tan compleja de intereses alemanes en Mxico? Y de ser cierto, cmo explicar que los mexicanos involucrados en esta red de espionaje y de negocios mudaran de bando por la sola presin norteamericana, convirtindose en fieles aliados de Estados Unidos? El libro evidencia la magnitud de las redes nazis en Mxico, pero estas redes se comenzaron a tejer mucho antes del estallido de la Segunda Guerra, y adems estuvieron bajo estrecha vigilancia de los servicios de inteligencia de Mxico. El autor subestima las tareas de estos servicios, cuyos trabajos pueden rastrearse en los millares de fojas de la Direccin de Investigaciones Polticas y Sociales que resguarda el Archivo General de la Nacin en Mxico. Reconstruir una historia no es hilvanar una serie de hallazgos documentales, sino un esfuerzo por articular esas novedades en un universo mayor, a los fines de ponderar la naturaleza, el sentido y la verosimilitud de los hallazgos. Ese universo mayor se despliega tanto sobre otras fuentes de informacin asequibles, como fundamentalmente sobre un conocimiento profundo de los procesos y las coyunturas histricas en que se gener toda la documentacin consultada. La informacin que presenta Cedillo es impresionante, pero merecera ser cotejada y analizada con mayor rigor. El libro ha contemplado muy poco de lo ya estudiado sobre estos asuntos; llama la atencin que en la bibliografa citada no se encuentre la investigacin pionera de Friedrich Katz, as como otros trabajos clsicos que, al igual que el de Katz, se fundan sobre bases documentales alemanas, tales como los de Hugo Fernndez Artucio, Louis de Jong, Klaus Kannapin o el ms reciente de Max Paul Friedman. De haber consultado esas investigaciones, Cedillo habra advertido que sus descubrimientos, de por s meritorios, se integran en un horizonte de alcance continental y mundial. Pero tambin habra podido contrapuntear las informaciones generadas por el espionaje alemn con las que encontr en los archivos norteamericanos. Una parte de estos descubrimientos confirman hiptesis ya transitadas por distintos historiadores, mientras que otra parte, y esto es lo verdaderamente trascendente, amplan informaciones que mereceran una crtica acuciosa, atenta a reconstruir una historia que merece ser contada. Pablo Yankelevich Instituto Nacional de Antropologa e Historia