Flor entre espinas

Médico, arquitecto, abogado, profesor, técnico, algunas profesiones y oficios

directamente relacionado y con un marcado lenguaje masculino, ¿Es acaso
imposible la utilización de sus alternativas enfocadas a lo femenino?

El lenguaje es sexista cuando mediante sus mensajes discrimina a un sexo,

para este caso es a la mujer en todos sus aspectos, la posterga, minimiza,
es indiferente y en algunos casos es invisible.

El lenguaje sexista excluye a la mujer, no respeta valores, sentimientos y

valores. En el ámbito laboral también se utiliza un lenguaje discriminatorio,
existe para la mujer que quiere ingresar al campo laboral debe realizarse
exámenes para demostrar que no está embarazada, es realmente
discriminatorio, esta no es una situación que se vea en el ingreso a los
hombres en el ámbito laboral, para observar consumo de algún tipo de
drogas u otro.

Me pregunto si es una herencia cultural que se arraigó en nuestra sociedad,

que sigue aún observando a la mujer como un objeto secundario, relegada
solo a espacios y labores específicos, en que su rol consistía en labores
domésticas, a la crianza de hijos, una mujer sumisa que debía mantenerse
al margen de todas las decisiones de la casa, pues estas solo las tomaba el
hombre de la casa.

Pero a pesar de estas practicas discriminatorias y excluyentes, hemos

podido como mujeres caminar a paso rápido abriendo espacios que solo
eran ocupados por hombres, recordemos que la presidencia de nuestro país
está a cargo de una mujer, cargos ministeriales, políticos, académicos, por
mencionar algunos.

Para finalizar es importante mencionar que los espacios están y debemos

hacernos cargo de ser generadoras de cambios y en nuestro ámbito, la
información y la educación son el inicio de estos cambios, si no educamos
para un lenguaje no sexista seguiremos con dificultad abriendo caminos que
solo están para ser utilizados por los hombres.