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Capitulo segundo 7ENOMENOLOG{A DE LA PERSONA HUMANA omenzamos ahora por Ia presentacién fehomenolsg la persona humana, > decir, por una ceseripcion ¢ limensiones funciamentales del compertamiont 1 LA CONCIENCTA HUMANA dato primario y fundamental de Ja persona human fe sw autoconciencia que el hombre vive en todo act psar, decidir y obrar EI hombre toma conciencia d dsten realidades en torno a é1 y, al mismo tiempo. © ce ser que se hace autopresente, es deci; que paced sobre si mismo diciendo: «vo» Geditio tr se ipsresnt) s fenainenologes os tin renomenc tan exiense y variado-que na iorasunala sot ia biblioeratia peiticipal Ap elenmecone Po sce" Sor Barcelona 1992) A. om WAELIENS. Dr pleifosopite de Md ee, Louvain 1949. 0. PBvinag. emt tecteevrue fection ao Jisidspat Snener Mahoane-wteny Reva Paes: See Ee wee filswofie: Mimlthd Toes" on 2 vars ANTROPOLOGIA Y MORAL Es lo que algunos filésofos han dado en Hlanaar ensimis- ‘mamiento?, La subjetividad humana aparece vinculada a la objett- Vidad que pone al hombre en relacion con las realidad: distintas de la suya, Esta dimensién de la conciencia humana le hace al hombre un ser de realidades, bien en cuanto que conoce todo Io. que le roxiea en cuanto realida- des distintas de st yo, bien en cuanto que conoce su pro- pio yo como ura reali. Por ésta su conciencia, el hombre es el tinico ser de este mundo que puede aunar en siel pasado y el futuro por medio de su memoria y su imaginacton, También los animales tience memoria, pero la tienen como mero alma- cenamienio de imagenes sin que puedan voluntariamente hacerlas presents El hombre, por el coritrario, puede hacer presente el pasado como vivid y hacerlo asf vivo en su memoria, Asi deseubre st historia vivida, y al traerla al hoy de su vida, puede descubrir en ella potencialidades de futuro. en ‘Guanto que son potencialidades arin no realizadas. ‘Se ha distinguido acertadamente entre el tiempo como mera sticesién de instamtes, en el que solo se da el presente (puesto que el pasado ya fue y el futuro todavia no es), del tiempo vivido porel hombre, pues el hombre puede reviuie cl pasado en su memoria y presentir el futuro, ‘De este modo, el pasado aparece asi no s6l0 como alo almacenado en el recuerdo, sino como virtualidad del pre- sente, de modo que el pasado y el futuro se viven camo en funci6n del futtro. El future, propiciado cada ver més por la técnica moderna que abre posibilidades nuevas, aparece como una posibilidad misma para el hombre, el cual tien- dea su perfecciin en cuanto que, siendo consciente de su 2Gfr PLAIN Exmalco, Abme, chery, perso, Barcelona 1998, PD. 213s AX. Bum, BI howtbvey Dios, Madrid 1984; fneligeneiasetdente, Madi (930, 38 FENOMENOLOGIA DE LA PERSONA HUMANA finitud, busca la plena autorrealizacién de sf mismo. & es la dimension histérica del hombre, el tiempo vivi desde la concien: El hombre ¢s asi un ser de esperanza, que es distit do la espera’. La espera se reliere a a consecucién de ‘objeto de facil alcance: yo espero que venga ahora el tt segtin cl horario previsio. La esperanza, en cambio, tefiere més bien alo que es de dificil consecucién, alo. © ‘escapa al control del hombre, a aquello que tiene que + ‘con el sentido de la vida humana y cuya pérdida conduc Ia desesperacién, de modo- que sin ese sentido pleno, + ‘esa esperanza de salvacién definitiva, las esperas corrie ,, tes de la vida pierden su razén de ser y se convierten, | absurdo. EL hombre realiza su historia por medio de la liberte posibilitada por el hecho de que st autoconciencia le d fancia de las cosas conocidas como realidades distintas ‘Su yoy que, por tanto, puede elegir en orden a sus fines. hombre es capaz de decidir por si mismo y aparece con duefio de sus actos. En esta se diferencia de las dem crlataras terrestres: en que su vida no le ¢s dada con hecha, sino que se le da como taren y quehacer; como pr \yecto que tiene que realizar personalmente. Ahora bien, e] quehacer del hombre ¢s un quchac ue no acaba, Ocurre que haee provectos con los que co seguir la felicidad auténtica, y una vez que los alcanz tiene que comenzar de mucyo. Todo lo que alcanza, ps noble y bello que sea, se le aparece como provisional y 1 definitive. Siempre es mas el hombre parlo que desea qi ppor lo que posee. Por eso el hombre tiene una sed radic ‘de mas, lene seal de infinto, pies comprueba que todo que alcania en este mundo no puede ser su todo, En esa conciencia de finitud se abre al hombre ur pf Lab Btranco, Antropologte de a esperansa, Barcelons 199 pp.2133 ANTROPOLOGIA ¥ MORAL tendeneia Inacia el futuro, como tensién hacia una crecker te plenitud®. Cada hombre vive y proyecta en cuanto que espera. El hombre esta, pues, esencialmente proyectado hacia el futuro, TL LARELACION CON EL MUNDO Pero el hombre no vive su autoconciencia en una des- nuda realidad de puro espirity. El hombre, en todo caso, es un espiritu encarnado, un espiritu hecho cuerpo. ¥ el cuerpo no es simplemente la posesién de wn espacio de ‘materia, sino una relacién con el muncio y con los demés, E] hombre toma conciencia de las cosas en cuanto nea lidades. comenzando el contacto con ellas por medio de los sentidos corporales, al tiempo que las capta con st. cconciencia espiritual como realidades distintas de sf. Todo conocimiento htmano comienza por la relacion sensorial Su espiritts se mantiene, pues, aqui, por una relacién con ‘el mundo por su condicién misma de espirit encarnados. El ctierpo aparece asf como plasmacién y lenguaje del espiritu, el cual lo utiliza como expresién de si mismo, como lengttaje de comunicacién con los otras y con el ‘mundo. Nace ast la escritura, el arte yla simbologfa, como expresiéa de los sentimientas interiores que el hombre quiere plasmar con su cuerpo. Asi cl hombre viene a ser un ser de simbotos, porque tiende siempre a materializar sus penssiinientos y sus sentimientos. Toda. ss relacion es corporal, vivida en el cuerpo y a través del cuerpo, El len aguaje del cuerpo es asf el Lenguaje dle Ia persona y, el rostro hhunano, el vivo retrato de la persona. Ha sido sabre wodo Bloch ol que de sna forma poramente iam ‘neat e ha expicado eta tesa de fate ene hombre. Cit ML: Uso, Slocum aston six Dae?, Madi 1988 ‘Clr ML Men tau-Powty, La photmbologie dele perception, Paris 1945; K: Raunen, Bapiriin en ef mado, Baseetona 1963; Oyente de a labre,Barecona 1967, i ANTROPOLOGIA Y MORAL Pero es ol caso que ef hornbre io puedes indtfecente ante la muerte, pris sient que algo eau er se sebele eo su Interior cuanclo piensa en clia sele hace presente sn Ia desaparicion de un ser queride. Decis yor alle Unaznuno: «No quiero morirme, no, wo quiere, ti auiors auerero: utero vivir sempre, siempre. y vivir yo, eate Pobre yo que me soy y me tonto scr ahora y ual, pone ello me tortura el problema dela duracion ee nial de Ini pron De ahr qu el Paimie modrno, gu Ia satisfaccin inmestiniay haclend de esta side a niog teatro de su existencia, no quicra pensar en Ia muerte ues st solo pensamiento turharia el placer vel bienestay de cada dia. Yat lo habia dicho hace muchos aBox crocs asa sn habiendo pod ls hombres cara muerte, la miseria y la ignorancia, han Emuginadd para volte, tichosos, no pensar em ellas»?, = ar rf MILLA RELACION CON BL OTRO Otra dimension inequivoca de la existencla humana e Arelacién com el otro. El Homabre es un yo, paticularmen, ©, eu Folacion con un td dentro del horizonte del amon El ste se le presenta al hombre no como pedaso del meacis Daterial que puede tastrusnernalizar, sino como nner de dignidad que la ns, de tal modo que te debe un roe, ‘to incondicional sin que pueda jamas reducelo a con jon de medio o insinimento de sit fines : En que se basa esi exigencia de respeto incondiciona- © que el otro tiene para mi? Una mera aproximacion ros ace caer en la cuenta de que el otro posee un valor times ancente que supera ln pura materia como lnstrarmenli Ceri UBittna. Belconnen ripe de vid, Barca “Fo Pen, rensamienas, Barcelona 1977, .21 Chr Mh Bite feat: Bare aR 277 21 FENOMENOLOGIA DE LA PERSONA HUMANA No es, pues, el cuerpo, puro material bioldgice q hombre pudiera instrumentalizar como pura cosa, N ‘cuerpo es la persona misma en cuanto manifesiac ‘exterior, encarnacién misma de la persona, de mode cada tno de los gestos humanos es el Lenguaje de la pr ha misma. Dicho de otra forma, el euerpo no es alge se tiene, sino alo que se es. Vive asi el hombre la dimension sexual. La sexual es una dimensién que configura al cuerpo y, por mismo, a la totalidad de la persona humana, de mode proporciona al hombre y a la mujer una forma de s¢ de imaginar, de amar, distinta em uno y otro caso. Tox personalidad cel hombre se manifiesta en el sexo. F ‘amor conyugal se entrega no s6lo el cuerpo sino la tc dad de la persona en su complementariedad no slot 10 psivol6gica y afectiva que, como tal, esté abierta bién a la vida mediante la procreacion. Pero deciamos también que el mundo se le hace sente al hombre por medio del cuerpo. Por ello misn ‘mundo se le presenta como tarea para transformatlo, + medida en que puede encarnar en él su propio espiit virtud del trabajo, Transformando el mundo, el homib) perfecciona a sf mismo y desarrolla su propia respon lida. ‘Ahora bien, preeisamente por ser cuerpo y mund hombre es un ser mortal, un ser para la muerie?, en © to que, si algo tiene cierto, es que un dfa ha de mori trdgico del hombre, a diferencia de los animales, es sabe que un dfa ha de morir, de modo que la muert algo que est continuamente presente en su conciet Ademis, la muerte no se le presenta como una mera r dad farura, sino que se le anticipa de algdin modo en experiencia de limitacién 0 de enfermedad. TE Hiabacoen, A ery el emp 274.275; 1. P Sata, 8 mada, pp. S68 8. FENOMENOLOGIA DE LA PERSONA zable. Pero ¢donde se basa ese valor trascendente? , ‘qué me esté prohibide servirme del otro para ils Ante el valor del hombre, la libertad humana enue limite que es preciso justificar y explicar IV. LA REEACION CON DIOS Pero el hambre, en la mayorfa de los casos al me slente que su tendencia a un futuro ilimitado, st tende al infinito, es en el fondo sna tendencia y una basqued. Dios mismo, de modo que no pucde prescindir nunca interrogante Sobre sti existencia, Para que el hombre pudiera prescindir del proble de Dios, seria necesario anular en él toda coneiencit finitud, todo atisbo de Iimitacién, toda experiencis muerte, pties mientras el hombre experimente la lim ion y Ia finttud, seguira hablande de Dios, crea ona e1 Pero ocurre que el hombre no se instala facilmente € Finitud, pues leva dentro de sf una sed continua de + gue le hace ser un ser inquioto, un corazén intrangu como decia San Agustin Ocurre, por otro lado, qué la conciencia moral imp ‘una responsabilidad continua. ¢Ante quién siente el he bre la responsabilidad de sus actos? ?Solamente ant sociedad? Ciertamente no, pues se dan casos en los + siemte su responsabilidad por sus actos aun cuando ne Jos conoce. Entonces ¢e9 ante su propia conclencia ant que siente la responsabilidad? Tampoco, porque, si fuera, ficilmente podeia matar el remordimiente y Ta bacién. Entonces, zd6nde radica el misterio de la conc ia hurmana? CONCLUSION Hasta aquf hemos hablado de las dimensiones qu hombre presenta y que fenomenolégicamente poden ANTROPOLOGIA V MORAL, sseribin Que el hombre tiene autoconciencia, que se ‘pres en su cuerpo, que pereibe en el otro un ser de ual dignidad y que, experimentando su finitud, se pre- tnta por la existencia de Dios, es algo que nadie puede Pero la fenomenologia no explica al hombre en su con: idn ontolégica, en suis elementos esenciales. Con la ira fenomenologia no podemos saber si Dios existe de schoo si el alma humana es también una realidad. Para ‘gar ala verdad Gltima del hombre, se impone pus la elafisica, como decfa Juan Pablo I en el congreso de oral de 1986. No nos basta saber qué es el hombre en aa consideracién descriptiva de su obrar, sino que nos teresa también conocer si ser su esencia misma, Slo £ podremos hablar de lo que el hombre es. cuado de persona en aras @ encuadrar la unidad personal de cuerpo y alma en el hombre. 1. SOBRE LA EXISTENCIA DEL ALMA Es claro que no vemos la existencia de nucstra alma, por lo que, al igual que en el tema de la existencia de Dios, tenemos que recurrir a una prueba de tipo filoséfico, pai fenclo del hecho de que hay en eI hombre a uales que, por ser irreductibles a la mater >rincipio espiriiual que las cause. Son espirituales las manifestaciones del hombre que {enen los atributos distinios de la materia y la traseienden. nntrinsecamente. La materia es extensa, tlene paries y se mneuuentia en el espacio. Si exisien en el hombre manites- aciones que no sean extensas, que no tengan partes, que 4 sean senstbles, que superen el espacio, diremos queson sspirituales y, como tales, solo podran venir cle un princi dio espiriual, que es ef alma, Ahora bien, si existe el alma rel alma no puede derivarse de la materia. sélo puede -xplicarse por creact6n directa de Dios. Esta es la prueba, Todo el peso de la argumentacién descansa, por lo tanto, "a demostrar que existen en el hombre dimensiones espl- ‘ituales que proceden, en consecuencia, de um alma espiti- ual. Exponemos siete pruebas que son: el conocimiento rtelectual, el lenguaje simbélico, la libertad, el progreso, arte, la ética y Ia religi6n; siete actividades del hombre ue cl animal no posce en absolut ‘las actividades del aba. {) Bl conocimiento intelectual EI hombre tiene un conocimiento por el que percibe as manifestaciones semsibles cle las cosas pero, al: mismo impo, traseiende dicho conocimiento, en cuanto que vercilse con su inteligencia la realidad en cuanto tal y dice: 6 Capitulo tercero ONTOLOGIA DE LA PERSONA HUMANA. Entramos ahora a estudiar la ontologia de la pe humana, es decir, al estudio de str esencia, de los fae ltimos que componen su esencia. Slo asi sabreme es el hombre y no slo odmo actia, cémo se relacion Es necesario conocer la naturaleza del hombre si p demas decir gue es un valor trascendente quer puede ser utilizado como medio de nuestras accic fundar asi la moral em él. Pues bien, de las acciones que hemos visto deseri el capitulo anterior, alguzas son claramente corpe como puede ser la relacién sexual. Otras, en ambi de claro signo espiritual. Para nosotros es evidente hombre es v tiene cuerpo, puesto atte es algo que poe ver y constatar con los sentidos. En cambio, noes ev {que tenga alma. Y por ello, a la existencia de la mism podemas llegar por la vfa de la demostracion. Es a el {que vamos a dedicar la primera parte del presente ca que nos aclarara también, desde un punto de vista mente filoséfico, cudl es el origen dltimo del alma. Posteriormente, trataremos de exponer el modo cional de entender la relacidn del cuerpo y del alms Filosofia tomista: el hilemorfismo, sefialando sus as ives y también negativos, para terminar con uy lan awe conoinaed de bien ip concent ahi hay una realidad. Este tipo de conecimiento va alld de lo sensible y lo traseiende. Cuande el hombre ma que pereibe uta realidad, fo hace con una intui luc prescind en este momento de (oda sensible que configure dicha realidad Es un conocin abstracto (abstrae de la materia) o espiritual. Es la bar tode conocimiento intelectual y es a partir de la capts dle lo real en cuanto real como el hombre forma los de conceptos abstractos. Conceptos como ser, bondad, dad. belleza, persona y vida no tienen nada de mate Pero al mismo tiempo-que el hornbre es capaz.da capt realidad a €l externa en cuanto realidad, es asimi capac de captarse a af mismo camo realidad, de vecoy sabre sf misino (rediio i se ipsum), es capar de ensi mamiento; algo que la materia o incluso el anims puede hacer: decir «yo>. Ahora bien, si el hombre p: decir «yo» es porque puede decir: «yo soy una re porque se capta a si mismo como realidad disitinta « que Fe cireunda. B1 ensimismamiento de la persona ht faa no serfa posible sin la captacién de Io real eh cu real, si no fuera capaz de captar conceptualmente Io r Debe haber, por lo tanto, en el hombre, un pring que sea capnz de formar tales conceptes. Son conce gue no tienen nada de extension, de mensurable. En no se puede distinguir una parte denecha de ofra izq da, prescinden de cualquier medida y esta mds all. tiompo y ol espacio. La bondad como virtud no es de dc hoy, ni de aquini de alla. Otra cosa ocurre, sin embargo, con la imagen, qu una representacion sensible de las cosas material posee, al menos, alguno de los atributos dela materi: Imagen que tengo hoy de la flor que vi ayer: la veo co! ‘ojos de mi fantasia, con el color propio de su mater ‘esta flor la distingo de otra flor, La representacién de Imagen la (iene también un animal. el cual puede ine ‘experimentar atociaciones de imagenes v de sensac’ de a el adiestramiento que hacemos con ellos. Pero los ‘nimales no Hlegan al aprendizaje como tal, pues es wn echo espivitual que se realiza mediante la abstraccion, ‘or ello ocuirre que todo 16 que el hombre aprende, no lo ransmtite a suis hijos en la generacion, mo va encerrado naterialmente en sus gones. En eambio, todo lo que el unimal conoce por instinto, se camunien en Ia goneracién naterial. No asf lo que haya aprendido por adiesirat 6, es verdad: pero la prueba de que lo aprendido por dliestramiento se basa slo en asociacién de imagenes y ensaictones es que no lo podra transmitir consciente ¥ ‘oluntariamente sts deseendientes, Ha sido stn apren- lizaie» pasivo, un adfestramiento (por avoctacton de Wn renes y sensaciones), no win aprendizaie por el camino de Ninteligencia de la que carece.. 9) Lenguaje simbolico Una consecuencia clara de este conocimiento intelec- ales el Lenguaje simbolico, es decir, el utilizar el simbolo fe una palabra para designar con ella a una realidad cor rela: yo amo =lfpizs alo que tengo en Ia mane ahora, imeste lenguaje. la palabra es simbolo de la cosa signi ‘ada. La palabra es material, peto su significado es espiri- tal: un animal no captard nunea el significado de una alabra como «verdade. El lenguaje simbolico nace del echo de que el hombre conoce las cosis en su realidad y tusca un simbolo (nombre) que las represents. Si el hom re no tuviera la experiencia de las realidades en enantes les, no buscaria esa palabra denominativa y solo posee- ‘a un lenguaje que. como en el caso de los animales, seria 1 lenguaje emotive, resultado instintivo de la emocién © la angustia, del hambre o del frio. Los animales no han ssarrollade un lenguaje simbdlico, no han puesto nom- rea todas y cada wna de las cosas, porque no las conocen, smo tales, Los animales no tienen diccionarios. Acello podriamos responder diciendo que uno puede considerar algo come Jo mejor desde el punto de vista sso bi ec ne erm me tl: Se pees be asin eter teil trt ot Ripe veherenmen Perd la religion no se funda sélo en Ia tendencia al inf. nto, pes tmbien el hombre puede lees eo {ml de Dim como creators. it consents uablenente exept oes Dao ne a a eepeceumee jetipcrajenm ees contencin uc of hmtre let ela mere oma aro sco do vir Eric anil asus es stn haberlo constatado aun empiticamente de a mam Ue pr dcctn deus une Se al hombre un deco de mrad ge ncaa 2 El principio de cousalidad Soy consciente de que no pocos, al leer todas estas ‘eflexiones, habran pensado que son acertadas e incluso. bhgentosnis, pero que todo falla por la sencilla razdn de que, 1 principio se causalidad que hemos tisado para llegar al «dena, no cabe usarlo, scxvin decla Kant, en el campo extra: 0, Fl principio de causalidad solo valdrta para 15 walidades experimentables de este mundo! Kant, al establecer los juicios sintéticos a priori camo, ’s unicamente valicos para el campo de la filosofia, exisla fe tuvieran un elemento racional y otto experimental ‘emo la iden de Dios no es experimental, no podernos dlicarle a Fl el principio de cousalidad, validly solamente tira las causas experimentables ' Pues bien, habria que contestar a Kan algo muy senci- 2+ ¥es que el principio esolo para lo experimentable vale {principio de causalidad» no es en sf misino experimen. 4dr sino que es mas bien un principia metafisico. Esta es MRA Crt de eran pn Bn Ate 1970, ONTOLOGIA DE TA PERSONA HUMANA ©) Libertad El hecho de la libertad es algo espizitual en el hor En ofeoto, libertad significa autoceterminacién, asst por lo tanto de determinacién tanto interna como ext Es éste um concepto muy querido de la cultura actus yo me autodetermino, eso quiere decir que no estoy d minado materialmente por los genes que he recibie mis padres. Los genes mie pueden condicionatr, sin & me dan una mayor 6 menor capacidad craneal, per me pueden determina, en el sentido de que soy yo e! determina hacer esto 0 aquello. Hay en mf, por le ts algo radicalmente irrepetible y singular, algo que no viene do mis padres y donde radica ef santuario sag de toda persona humana. Tengo la exper rif hay un yo inrepetible e inédito, con Mientras los animales son capias de seis pa: 10 lo somes, Hay en nosotros algo inédito inacion de los genes, Pere tampoco me determina el influjo que reelb fnera_ Estoy determinaco on lo que vp refiere al cor miento sensible, pero el hombre no solo tiene una rela mecénica con lo sensible, no slo experimenta el int delo sensible y material por los sentidos, sino que tien conocimniento intelectual de las cosas, en virkid del lstinguc de sf, so sults y distancia de ellas, dem que las convierte en objetos (obieenne, Gegensears puede clegirlos para sus fines. El animal no se distanci las cosas materiales en cuanto cosas y no-puedle en co ‘cuencia elegitlas. Sus movimentos Son siempre los mos, Su historia no es historia, sino vida vegetativa, animal ‘A veces se ha tratado de neyar la libertad, diciendo cen realidad el hombre hace lo que en cada circunstanc. parece lo mejor por el motivo que fuere, de modo que « ria determinado por ello, Nadle elige lo malo ni lo mi. ON TOLOGIA DE-LA PERSONA HUMANA, genes de bisontes. Inmediatamente concluimes la pre ‘GNTOLOGIA DIE LA PERSONA HUMANA luna més de las contradicciones de Kant que minan su sistema filos6fico?. Por el contrario, el principio de causalidad es vé Universalmente, pues se basa en una enigencla metatt cuya negacién conduce al absureo: iodo lo que te tien sila causa. o bien de su sero bien de st configura externa, Ia tiene en otro. Si este mundo no tiene Ja ci de su ser en sf mismo, la tiene en otro. Es algo que s) el principio de razon sulci 3. Alina-y eveacién No entramos todavia en el problema de come se f de entender cl tomna dle la telacidn eel cuerpo y del al De momento, nos basta con saber que hay en el hor lun principio espiritual que trasciende la materia. Al bien, ttn principio espiritual que, como tal, es simpk decir, que carece de partes, de extension y de todas manifestaciones propias de la materia, no puede prow de la materia misma, sino de In oreacion directa de Dic Se fia apelado frecuentemente ala posibilidad de el alma humana haya surgido en el curso «le la evoluc ‘mediante la potenciacién que Dios hiciera cle la materi no como creacion directa y exclusiva de Dios, Se trat de una potenciacién de Dios sobre la rmaceria qu impulsaria a autoreanscenderse por sf mena Personialmente pensamos que esto es posible en vi 4 que la materia se vaya complejizando progresivame De la maicria pueden venir, bajo la acciGn potenciadors Dios, formas mas complejas, como es la vida misma de pimales. La vida animal, al fin y al cabo, tlene como mento esencial la quimica del carbone, Pero de la mats silo puede surpir materia. De lo que tiene las propieds CIEE. Savts, Cancion fe en Dies, Banas, Pomp 1 Gir Gvunsace-K, Ravine, Das Problem der Homtnisat Freiburg in be 101 pp Ss ues bien, siel alma no puede provenir de la materia, y ampoce de la nada, es preciso apelar a una causa: Dios. Y } justamente ello lo que explica que ef hombre tenga una siginalisdad Gnica e irrepetible, que sea un misterio que Severs (CEFR, Lay esi, Alm ererp, persone, Bareciome 1295, 139) La psiché no ese alims: no es na. stancia interior sl cuerpo, do of confunte de notas integrantes del piquism humane ¥ que, fmho dectamon, esuin refer alas nolzu somsticas, componiende va undad estructural qus pervce complesamete eb la verte, Zab, ‘tna confiesa 1, de Ellacut, tcrmino aceprando que a psicé ex mortal 1 nal, Su creencla ct clei all se basal et a cis test Seca del hombre (efra: 140}. ‘La posiclsn de Lain Eniiles inten ser, come dl mismo dice, la de ‘ mopismo dinémico (ere. p. 199) ita especie de tertirm guid ‘reel hllernetivino (que él entiends comma una forma de dsl) ¥ ‘aterm rasa Su posure pretend set wna aia de ‘iim En elect, rocharao hilemorfisme pore wo deja de ser, segain dl | dusimo atrapalegico que ro expla el concierto (pues nose sna tending dan ey nao Pirtal como son la species ineligible, po ho due halia que ape Fon allie tennino nie stetvenclon de Dis, com hace Descartes epi ‘or-otr lado aa reacién del alma por par do Dios Hun exten tsi Co, 6p 148), aden le uae no se pede pla a penibidad dels exsiencha dl sla separada. Partiondo, uc, dsl logic del tiki Zubin, brs que basarse co tealdad empitica det hombre. La materia ea wh coajunto de nots ructuiadas ue, posse un diamisme evolve, a te "dead denim sim Factores extern, esirctues ucts ‘eve el eato del hambre, aparecen datadas de motss psfquieas. EL Ia tke ugar or leva op 181) fg sale ae ‘xplioady solo por las etisas segunda, de modo que el agente del ismoes el to dela estructira dinanic. Es cierto qc. Un enigma Ger que consist ese todo Unitaro y unileante Coe. pp. 197-198), ‘osaberos qi enn momento determinado sla rageria sient, hee '8y quiere humanarnente por af miss sn Deeesidad de un principio. Whapertor alla foe p.190), ‘Sogn Lain Eniralgo, no se puede hablar propiamente de concien- 1 sit dle actos sicoorgnicos que. ent clert modo. se Gan ye ta reba, rmyprmnic ene aninaldesro,y qu on el babe se ‘actervan, fundamentalmente, por la conciencta del yo (ensimisms- alo} del ealidad dl aurdo‘en cuanto taf. pp 213 20) En el Ine dade fora propia ycualaneamente distin una concen (de su pia voy de la realidad dl mundo, Esto es lo propio de Hos oo plore at borne, ‘sla realldnd del hombre terrenal mueye del todo (Garrod), la _rvetace dindenica que os la sustanividnd humana se deshace y sus sélo se comprende como imagen y semejanza de Dio persona humana es asf lo mas sagrado que existe er mundo después de fa ericarnacién de Dios, el nie que ha siclo amaco por Bios por sf mismo (GS 24). Es precisamente esta simpliel que posee el alma lo que garan puede descomponerse Io que carece de partes. La mi puede afectar y afecta al elemento material del hon pero no al alma, la cual no puede desintegrarse en p le las gute carece, De esta naturaleza inmortal na deseo del mds alld que posce el hombre; deseo qt signo claro de la paradoja que vive: mientras que ex menta que su cuerpo envejece, se descompone y mt hay en él un principio espiritual ¢ inmortal que pregor sed de inmortalidae! como wna prerrogativa que emat ‘4 propia esencia, La inmortalidad es Una propiedad « ial del alma humana. ‘Terminamos pties este apartado, habiendo consts que en el hombre existe un prineipio material (el cuc que conocemos por experiencia directa y otro espir {el alma) que hemos probado a partir de las manifest: lies que tiene en Ta existencia humana, Ahora entrame cl problema de explicar la unién de estos dos princi sin caer en el dualismo. El modelo mas habitual en le dicion eristiana ha sido el hilemérfico. Hablemos | ded, ep 15) Bins aslo oases nL problema gue mayormente aos ial vel aes cad ca cont coon es el cercbm Vien coneisncia de It oo se detondorta que Iy materia realizn aes expires 1c eniendlamnos que Ia Lntelecetin fa conckensia sen puran ‘con lo cual caeriatnox cryin materiaisno em. t= qe iy de defender una reall dad intermedia entre to espiiuo l-que sea ouno y toottaa la vez eat condensda

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