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MEDIO AMBIENTE, NOTAS TECNICA 10 (1): 84 — 91 (1989) s USO DE LA TECNICA DE TARJETAS AHUMADAS PARA EVALUAR LA EFECTIVIDAD DE CEBOS PARA MICROMAMIFEROS SILVESTRES, CON ENFASIS EN Chinchilla lanigera Jaime E, Jiménez* Corporacién Nacional Forestal, IV Regién, Chile, Casilla 114—D, Santiago, Chile, RESUMEN Se estudi6 el consumo de cebos por un ensamble de sicte micromamiferos en la localidad de Aucd, IV Regidn, Chile, mediante la técnica de las tarjetas ahumadas, En total se probaron 23 cebos diferentes, incluyendo alimentos silvestres y exdticos para los animales. Los micromamiferos respondieron en forma especie-especifica a los ccbos usados y mostraron altas preferencias por los cebos ex6ticos, especialmente Ja avena machacada, Se discute la utilidad de 1a motodologia para evaluar asociaciones espaciales entre micromaméferos, con énfasis en Chinchilla lanigera ABSTRACT TIMENEZ J (1989) Use of the smoked-cards technique to assess baits efficiency for small mammals, with emphasis on Chinchilla lanigera. Medio Ambiente 10 (1): 84-91 A study of bait consumption by an assemblage of seven small mammals at Aucé (IV Region of Chile) by means of the smoked-cards technique was made. Twenty-three baits including both native and exotic foods were tested. The small mammals responded in a species-specific fashion but all showed high prefe- rence for exotic foods, especially rolled oats, The utility of the technique for evaluation of the spatial associations of small mammals is discussed, with emphasis on Chinchilla lanigera. INTRODUCCION En estudios de micromamfferos, con mucha fre- cueneia es necesario capturar especimenes, Tradi- cionalmente se han utilizado diferentes técnicas, Ja mayosfa de las cuales consisten en el uso de trampas que atraen 4 los animales mediante un cebo (ver Smith er al, 1975). Es conocido que el alimento que se haya utilizado para atracr a los animales a las trampas juega un papel importante en el resultado de un trampeo (Smith er al, 1975; Day et al, 1980). Sin embargo, y por tradicién, més que a base de evidencias, se han utilizado unos pocos tipos de cebo (e.g., avena machacada, man- tequilla de mani), solos 0 combinados, Mas ain, si el interés se contra en una 0 pocas especies con hé- bitos similares, es posible “seleccionarias” con un + Dirigir correspondencia a: Departamento de Ecologi Universidad Catélica de Chile. 84 cebo apropiado, de un conjunto de especies sim- pétridas (Manville, 1949). Es por esto que se hace necesario conocer la respuesta de los animales a diferentes tipos de cebos. Para el caso de los micromamfferos de Chile central se han hecho pruebas de cafeterfa para algunas especies en el laboratorio (Rodriguez y Trevizén, 1984; Brandenberg y Silva, 1987), pero esta informacion presenta una serie de inconve- nientes (ambiente artificial, animal estresado, dise- iio empleado, ete.) si se la quiere extrapolar a lo que sucede con los animales en si estado silvestre. En el presente trabajo se pretende superar las des- ventajas de las pruebas de cafeteria en el laborato- rio al hacer el muestreo en terreno, evaluando las referencias de consumo de 23 tipos de cebos por un ensamble de micromamsfetos, del cual, Chin- chilla lanigera es un componente importante por su valor de conservacion. MATERIALES Y METODOS Mediante una modificacion de 1a técnica de las tarjetas ahumadas (Justice, 1961), se procedié a muestrear e] uso de cebos durante mayo de 1987 en la Reserva Nacional Las Chinchillas, ubicada en Ja IV rogion (71° 06" S; 31° 31° W). Una descrip- cién detallada del area hace Mohlis (1983). Se eli- gid un sitio con presencia conocida del rocdor Chinchilla lanigera, la que fue confirmada in situ por fecas frescas y madrigueras de la especie. La unidad de muestreo consistfa en una tarjeta de cartulina satinada de 21x21 em, con hollin de humo en una de sus caras. Las tarjetas fueron ahu- madas en el laboratorio, burbujeando kerosene con gas propano comercial. El gas combustionado en un quemador producfa abundante humo, sobre el cual se exponian las cartulinas. Posteriormente eran trasladadas hasta el lugar de muestreo en una caja de madera provista de separadores para evitar el contacto entre las unidades. En el centro de ca- da tarjeta se ubicaba una cajita de papel de 3,5 cm de lado, en la que se dopositaba un cebo. Una espi- na de cactus servia para fijar la cajita a la cartulina y el conjunto al suelo, Los cebos utilizados debian cumplir con 2 lo menos dos requisitos: que estuvieran disponibles para ser utilizados en cualesquiera época del afto y que fueran aplicables fécilmente en trampas para capturar micromamiferos. Se emplearon semillas, de especies que se encuentran en el area y que por lo tanto estan potencialmente disponibles para los animales y frutos secos, semillas exéticas (cultive das) y dos alimentos de origen animal (ver Cuadro ». Las cartulinas ahumadas se dispusieron en torno a 8 chaguales (Puya berteroniana), ya que esta planta es usada como refugio por las chinchillas y por los otros micromamfferos del érea (Moblis, 1983). Se instalaban por las maflanas y eran revisa- das 24 h después, Aquellas tarjetas que presenta ban impresiones digitales de algin animal eran fi das con Jaca en aerosol y reemplazadas por tarjetas, virgenes. En el reverso de cada tarjeta se anotaba la cantidad de cebo consumido, Ja que fue catego- rizada en 5 niveles respecto del total conocido: 0 (nada), 0,25 , 0,5 ,0,75 y 1 (todo), Se eligio esta metodologfa para cuantificar los consumos, debido a las condiciones de trabajo en el terreno y a que Ja naturaleza de Jos diferentes cebos hacfa diffcil cuantificar el consumo considerando la masa (81) © el volumen (em?). Se muestre6 durante 6 dias y 7 noches, cambiando en cada ocasion la secuencia de los cebos, con el objeto de evitar el sesgo de la informacion en las réplicas a los micromam{feros que habitaban Ia vecindad. Cada tipo de cebo fue replicado 15 veces (e} equivalente al nimero de tarjetas/noche con cada cebo particular). Inmediatamente terminado el muestreo, me- diante trampas National y Sherman, se colectd un individuo de cada especie de _micromam{fero presente en el drea. Estos fueron liberados (separe- dos entre sf) en una picza con tarjetas ahumadas en el suclo, Las impresiones asi recogidas sirvieron como patron para compararlas con las unidades experimentales. El consumo del cebo se computd para cada es- pecie, sumando Ios consumos parciales de las ré- licas de cada tipo de cebo. Debido a que en la mayorfa de las tarjetas habfa mas de un tipo de huella, se hizo la suposicion arbitraria que si ha- bia algo consumido, cada una de las especies que Piso la tarjeta debié consumir una fraccion idénti- ca de cebo La informacion obtenida se analizb estadistica- mente mediante pruebas de bondad de ajuste (prueba de Ji cuadrado y prueba de G), tablas de contingencia (para probar homogencidad ¢ inde- pendencia de distribuciones de frecuencias) y pruc- bas no paramétricas para comparar dos muestras (U de Mann-Whitney) y para docimar concordan- cia entre varias distribuciones (W de Kendall; Co- nover, 1980; Sokal y Rohif, 1981). A menos que se indique expresamente, todas les pruebas son bi- Jaterales. RESULTADOS De un total de 345 tarjetasnoche, aparecieron impresas 9 tipos de huella reconocibles, de las cua- Jes 4 fueron determinadas hasta el nivel de especie (Chinchilla lanigera: chinchilla; Octodon degus: degu; Abrocoma bennetti: raton chinchilla y Mar- mosa elegans: yaca), 2 hasta el nivel de género (Dusicyon: zorros y Liolaemus: lagartijas), 2 hasta el nivel de familia (Cricetidae: roedores pequefios y Rhinocryptidae: aves Passeriformes) y una hasta clase (Insecta). Es probable que se hayan confun- dido algunas huellas de Octodon por Abrocoma y viceversa, ya que son muy similares entre si (ver fotografia 13 en Rodriguez, 1984), No fue posibie discriminar entre las especies de Cricetidae (ver Muria, 1982), pero parecian comprender mayori- tariamente a Phyllotis darwin (lauchén orejudo de Darwin) y a unos pocos individuos de Akodon oli- vaceus (ratoncito olivaceo) y Oryzomys longicau- datus (lauchita de los espinos; Jiménez, datos no publicados). Las pisadas de zorro correspondfan a Dusicyon culpaeus (culpeo) y a D. griseus (chilla), observados en el rea. Las huellas de Rhinocrypti- dae eran de Preroptochos megapodius (turca) y Scelorchilus albicollis (tapaculo), habiendo posi- 85 seas = 6 se'set ort ot sUop ost ot ozs stay men (IZ) FO OLE) Of G's) OO G61) oO (SID OO (S81) GO (s'0z) OO WIZ) O19 slurse noeoy oud (ID 0 OLD OO CSN Oo G6 oO (IDO (SB OO (SOD) OO (IZ) oo (21104 emunyos) otra (12) Of O'LE) Of G'SI) o'0 Gs'61) OO IZOD (SRL OD (S'0z) O'O GTZ) o'0 (ture ustag) eusedeoqy (SI 070 'LE) Of W'S) of G61) O' (SIZ) OO (s'81) O'O (S'0z) OO (SIZ) 0 ‘(euouodes sin) od) (S9SLT OLD 0 GSD oO (S61) O'O COTISLT Get) O19 G's!) set G81) sto a(mofommow aysotprig ows (o'6Nst'0 WLI) O'0 SI) O' (61) O'O W'SNSe'0 EL) sto (07) OD RD sv'o ‘[o2pr01819 . puouiovy)tnoeg (sensz’r St) OO (S61) OO Gensty GRD oo O's) se ORD) sto BUOY (onset GP) OT GEN OO OLDs'O GID sc’0 Gov oO (SSD 0 (onsen ooayiy7) 30977 en) so (O'S) OO (S61) O10 'B1) $0 GS'BL) O' GODT) S'0 (S'S) S'0. «(109 sruoriny) SHEN (SUSE WLI OO CSI OO (S61) OO 'SHISe'T GS'91) O' (O'LI) Sz’0 (STI) OF «/tspuavep mpucy) omnwo9se 2D O's GE) OT OSD oO O21) so OTL) O's (se) 06) set (St) Ot sedeg (o's) oor Se) oF Ge) of WLdOe we) SL) OF TD oF 19nd (ousz'c (SL) oT (or) oF Wiss Ge) yt (St) ot @IDses Gy) set €1) sz’o @oDs's Ge) (oor) oz Gen str Ox Oo (ID set (SEDstr RD a) st 6) oO GP) set (oO!) svt WR) OL G9) is) st os ) dor (or) OF isp) o's ol) OL) sz W's STI LD OO (o'r) o's 9 ste (9) se (I) STL WE) oF L) se We) sor Ge) ws) oF sony, LOI WE) OF SE) Of Gr) 0% (se) OF) O's Rows euerae WS STH SLD OT 9) SE (6 STI OS) te) sts yur op einmboiueyy (st) stl wu so 2 Ot We) O11 WH) OF WZ) O% 59999, WI) st Wr) oF TD OSE (RL) OO ISL) Oe GT) OF AproeYorU euDKy (s0n) 38a mouog sntop niodiuny mor -4Gnoun Sepnooisy —puorauqy —wopoing —_mm4>urc> (0499 9p oat “(numnsuod op oqisod ounxew [9) ¢1 # fenBt ang oqa0 epED op euayo ey “(efoususjord PuMUFUN = Ez BEY “BIOUDIOJoId PUEXPLA = }) oqo SOIUTISIP Sot Jod UOXe} epeo ap Piotasojo3d ap Sopes# soy UeDIpUT souNyTN soysY “(s'soIUOIEd Ud) safeUTpIO soxoTeA SoaToadsar sof £ (0189) 49a) soumsuod Sof ap seuInS se] UByuasasdar SeUUINIOD SET “DuasIUD] MINYOULY w aAn{oUE onb sopeiqo1iaa 2p o[qwestia tn sod $0qo9 op ouMsuod [op ‘SepeUINYe se}0{F"} op osn [9 aUeIpour “uorOBUNT IS, 1 o¥avna 86 biemente algunas de] Furnariidae Chilia melanura (chiricoca) entre ellas, Estas aves fueron observa- das con frecuencia en el lugar, Las especies de la- gartijas observadas con frecuencia cerca de las tar Jetas fueron Liolaemus fuscus, L. lemniscatus y L. ntonticola, que probablemente fueron las especies que pisaron las tarjetas. Las impresiones de insec- tos eran con alta probabilidad de vinchucas (Tria- toma spinolai: Hemiptera) abundantes durante cl dia y no de hormigas, que por su bajo peso no im- primen sus hueilas en las tarjetas (obs. pers.). En el anilisis se supone que las hormigas, as vinchucas y los reptiles no comicron cebo. Incluyendo a todos los consumidores (vertebra- dos no reptiles) en el anilisis, se encontré que los. 23 tipos de cebos no fueron comidos en igual pro- porcion (G = 116,7, gl = 22, P < 0,001), siendo preferida la avena machacada frente a los demas (Cuadro 1), Los cinco taxa de micromamfferos fueron altamente concordantes en sus proferencias por los cebos (W = 0.811, gl= 22, P < 0,001), Jo que indica que ellos consumen mas o menos los mismos tipos de cebos en proporciones similares. Individualmente Chinchilla lanigera y los cricetidae muestran el mismo patron anterior, mientras que Octodon degus ademas parece preferir la mante- quilla de man. Adrocoma bennetti comid més el mant y Marmosa elegans las nueces, Las huellas de zorro fueron mas frecuentes en las tarjetas donde hubo consumo de queso y las de ave en las con avena machacada, manzana scca ¢ higos (Cuadro 1). Es interesante destacar que, en general, las pre- ferencias de consumo fueron para aquellos tipos de alimento que Ios animales no encuentran on su hi- bitat, como son Jas frutas secas, semillas exdticas y algo menos para los alimentos de origen animal (todos ellos “alimentos ex6ticos”), Las semillas de plantas silvestres fueron muy poco consumidas (“alimentos silvestres”); cuatro de clas no fueron comidas en absoluto. Combinando todos los con- sumidores, se encontr6 que estos comen significa- tivamente mas los alimentos exéticos que los sil vestres (U = 0; nl = 9; 2 = 14;P-< 0,001; doci- ma unilateral). Al computar el niimero de tarjetas que presen- taban algin nivel en el consumo del cebo, hubo diferencias significativas entre los dos grupos de alimentos: nuevamente los cebos exéticos eran proferidos a los silvestres (U = 0; nl = 9; n2 = 14; P < 0,001; docima unilateral; ver Cuadro 2). En general la informacién del Cuadro 2 se correspon- de muy bien con aquella del Cuadro 1, especial- mente en el caso de Chinchilla: el cebo preferido es Ja avena machacada, luego las mueces y la man- tequilla de mani, CUADRO 2, Huellas de vertebrados endotermos reconocidas en tarjetas ahumadas que ofrecfan diferentes tipos de cebos. Para cada taxn se comput6 el mimero de tarjetas con huellas y el namero de Jas mismas en las que se detect6 algiin nivel de consumo del cebo (en paréntesis). Los nombres son los mismos que en el Cuadro 1. ‘Tipo decobo Chinchilla Ocrodon Abrocoma Gricetiue Marmosz Duricyon Rhinocrypiline Total lenigere— degus “Bennett tleqans 5. ‘ven 8) 7 OCH SCA) CORO) One) htm) TO) 46H CD 1801) 66H) OF) TED 188), 166 70D 2CH WED 4048 LED BCH SCHR sO) 40) 10D 909) 309 CD ED BRED reo aint eeu nieeaeictat lolove et 2iefavere 091013) 4() 30D 10D C9) 69 26D 0M 1302) ey ee) ONDE rcs OGM). ne foteiny 5() 4€] 200 B01) 40H 000 20) Atal au Cive al Glml aesiciahe oltre (olla erlte|can) SC) $09 -2CD BEM 2M TED 20 BCD mn 402) 20) 70) BCH CD OC 1D C920 90M ACH SCH) TEN 12¢ 10) 1M 3(3) 00) BC 2CM ICM © 2EH BED 1OD 20D 200 120-320 Of 2 HC) $C) 30M BE 2H OD 1 oD i OC) Ones Oy ON) i It by 20 6C) 100) 12( 6 —2€0) Of) 90) 18 BO oe CE Meld Obes ti i@ silos aioe enon) 2( 4€3) 0) 10 OC) OC = 2 1(0 30 06 130) «10 00) ©) ta HC) 30) («C26 OLD = 8) ato 3t8) to fe 2m of O19 WED Co) 2C0) 1) 6 26) OL) = OK) Total TOY _92.(60) 3323) MH AT) 70047) GA)__—32US)_308 170) 87 A pesar de las diferencias encontradas en los consumos de los grupos de cebos, no se encontré diferencias en los nimeros de tarjetas totales que presentaban alguna huella impresa (con o sin con- sumo de ccbo) al comparar aquellas que tienen ce- bos silvestres con las con cebos cxéticos (U = 49; nl = 9;n2 = 14; P> 0,1; dOcima unilateral), Es mas, las tarietas con los diferentes tipos de cebos fueron pisadas en proporciones homogéneas por cl conjunto de los animales (G = 3,592; gl = 22; P > 0.99). Estos resultados indican que los anima- les pisan las tarjetas independientemente de si ellos van a comer el cebo de ta tarjeta o no (X? = 3,115: gl = 1; P> 0,05). Conociendo to ante- rior, es posible entonces, tener una idea de Ja abun- dancia relativa de las especies empleando como indice cl nimero de tarjetas con hucllas de la espe- cie en cuestion, No obstante, hay que tener pre- sente que tanto la respuesta de las diferentes espe- cies a Jas tarjetas, como la movilidad de cada w de cllas (y por consiguiente sus frecuencias de pi sadas) pueden ser muy distintas, de manera que la proporcién de las huellas en cl total de tarjetas puede que no se corresponda exactamente con la proporcién de las densidades de los animales en cl lugar. En todo caso, el método permite tener una aproximacion a Ia realidad, Asi, del total de 345 tarjetas noche instaladas, 295 (85,5%) de ellas ro- gistraron huellas de por lo menos un taxon y fue posible distinguir 9 tipos de huella (Cuadro 3), las que no aparecieron en iguales _proporciones (xX? = 638,5; gl = 8; P < 0,001). Al ordenar las frecuencias de mayor a menor, se encontré lo siguiente: crieétidos > Octodon > Chinchilla > Marmosa > Abrocoma > aves > Liolaemus > Du- sicyon > insectos, La respuesta de los animales a las tarjetas ahu- madas en el tiempo (7 noches) tampoco fue ho- mogénea (X? = 26,121; gl = 6; P < 0,001). Este fenémeno también se manifiesta a nivel espo- effico y no todos los taxa respondicron de igual forma (Cuadro 3), Esto sugiere que la conducta de los animales podrfa depender de factores climsti- 0s, interacciones conductuales entre ellos 0 de otras variables, Las menores frecuencias de pisadas se produjeron en los perfodos con viento 0 despe- CUADRO 3. Nameros de tarjetas ahumadas con huellas de los diferentes taxa registrados durante el mes de mayo. Fechas(noches del mes de mayo de 1987) Taxon 23 3/4 415 516 8/9 9/10 23/24 Total Cricetidae 34 45 45 31 32 34 23 244 0. degus 8 7 29 8 12 19 9 92 C.lanigera 15 14 20 3 1 8 10 n M, elegans 15 15 6 nn 1 13 9 70 A. bennetti 5 4 ira 2 5 3 2 33 Rhinocryptidae 5 13 10 0 1 3 0 32 Liolaemus 1 1 0 0 rt 9 0 22 Dusicyon 6 6 1 0 4 o 0 7 Insectos 2 6 2 1 0 o 0 i Total huellas a1 mM 125 56 67 89 53 592 Frecuencia espera- da si Ho=homoge- neidad 858 96,1944 84,1 85,4 92,8 53,5 592 Tarjetas instaladas 50 56 55 49 50 54 31 345 Tarjetas con huellas 44 54 53 37 38 42 27 295 Condicién climatica® cujne cu/me cu cuvi_ Se de cu/ne * cu = cubierto, ne = neblina; vi= viento; de = despejado, 88 jados y la mayor frecuencia se registr6 con ciclo cubierto y sin neblina. Como era esperable, los reptiles pisaron mayor cantidad de tarjetas durante los dfas despejados (asoleados). La hipOtesis de las interacciones conductuales se puede poner a pruc- ba al analizar la presencia-ausencia de huellas de pares de taxa en las mismas tarjetas, 1o que indica asociacién, repulsion 0 independencia en co-ocu- rrencia 0 uso del espacio por los dos taxa estudia- dos, No obstante Io anterior, es probable que aun- que las dos especies co-ocurrieran en el espacio, no Jo hicieran en el tiempo, fenémeno que no se puc- de evaluar en este caso. Debido a que el muestreo esta sesgado para Chinchilla, solo se hizo el andlisis para esta especie y su relacion con los otros seis taxa (Cuadro 4), Se encontré que las huellas de Chinchilla lanigera aparecen asociadas significativa- mente s6lo con las de los ericétidos y no con las de os otros taxa, con respecto a los cuales parece comportarse independientemente, DISCUSION Llama Ia atenci6n que la mantequilla de manf, a pesar de utilizarse universalmente como cebo para micromamiferos, no tuyo una aceptacién muy buena por ios animales, Solamente Octodon la co- mio en abundancia. Es importante tener presente que este es el nico rocdor con actividad diurna (Rosenmann et al., 1981) y por Jo tanto seria el primero que podria clegir el mejor eebo ofrecido, con Io que podria estar enmascarando los resul dos encontrado para las demas especivs. Los resultados indican que las diferentes espe- cies no se comportan frente a los ecbos como seria de esperar al conocer sus dictas, Serra (1979) y Mohlis (1983) sefialan que las chinchillas silvestres se alimentan preferentemente de hojas y tallos y que también consumen semillas, tales como las de rumpiato y carbonillo, Aunque se les ofrecié estas semillas, précticamente no las comieron. La con- CUADRO 4, Pruebas de asociacién entre Chinchila lanigera y otros vertebrados sintopicos. La informacion se obtuvo sobre la base de las impresiones sobre tarjetas ahumadas. Se presentan las frecuenci observadas de un total de 345 tarjotas ahumadas y las correspondientes esperadas (en paréntesis). Ademas se indica cl esta- digrafo y 1a significacin de la prueba de homogeneidad para cada par de especies, Los signos denotan presencia (+) 0 ausencia (—) del tax6n en las tarjetas. Las filas corresponden al taxon (X) con el cual se relaciona a Chinchilla (Ch). SiX= 4+Ch +X +Ch -X —Ch +X —Ch —X x P Cricetidae $9 (50,21) 12.(20,79) 185 (193,79) 89( 80,21) 6,82 < 0,01 Octodon 24 (18,93) 47 (52,07) 68 ( 73,07) 206 (200,93) 2,23 > 01 Marmosa 1701441) 54(56,59) 53 ( 55,59) 221 (218,41) 0,66 > 0,1 Abrocoma 8( 6,79) 63 (64,21) 25 ( 26,21) 249 (247,79) 0,23 > 0,1 Rhinocryp. 96,59) 62(64,41) 23( 25,41) 251 (248,59) 1,03 > 0,1 Dusicyon 5( 3,50) 66 (67,50) 12( 13,50) 262 (260,50) 0,65 > 0.1 ducta de Octodon y de Abrocoma fue semejante. Estos dos roedores son folivoros (Meserve et al., 1983), pero también prefirieron los alimentos ex6- ticos, Con los roedores cricétidos, que se alimentan principalmente de semillas (Meserve, 1981), suce- 4i6 lo mismo: mostraron altas preferencias por los, alimentos exéticos, Es conocido que el marsupial Marmosa elgans es principalmente insect{voro (Mann, 1978; Meserve, 1981), Sin embargo, res- pondié con una alta preferencia por las nueces. El tocino usado como cebo, era esperable que fuese consumido por los zorros (ver Jaksic’et al., 1980) y por Marmosa, lo que no ocurri6. El que las espe- cies estudiadas consuman preferentemente alimen- tos que no les son familiares, pero que al mismo tiempo son altamente energéticos y fécilmente ob- tenibles, podrfa deberse a una conducta oportunis- ta de parte de estos animales, Esto adquiere mayor importancia al considerar Ja oferta ambiental de Jos alimentos. En otoio (mayo), la abundancia de semillas y de tejidos vegetales verdes es muy esca- sa cn el lugar (obs, pers.). ‘Aunque los resultados obtenidos sugieren que os micromamiferos responden en forma diferen- cial y especifica a una variedad de cebos los que potencialmente se pueden usar en el trampeo de estas especies— hay que tener presente que debido a las condiciones locales de alimento, puede haber variaciones temporales (en diferentes estaciones del afio y/o en diferentes afios) y espaciales (en términos de microhdbitat y/o a nivel regional) en la preferencia por los cebos que muestran las dife- rentes especies, Cabe hacer notar que la técnica de las tarjetas ahumadas, utilizada originalmente por Justice (1961) y sus aplicaciones derivadas, presenta nu- 89 ‘merosas ventajas si se las compara con otras me- todologias de uso tradicional: 1) es de muy bajo costo: 2) es de facil uso en terreno; 3) debido a que no es necesario capturar a los animales, no Produce el sesgo y las complicaciones que introdu- ec ¢] muestreo con trampas y 4) pucde ser usada on una gran variedad de organismos, Aun no sicn- do una técnica sclectiva, si es combinada con el marcaje por mutilacién de dedos, permite recono- cer a Jos animales en forma individual (Justice, 1961), La mayor limitacion de la técnica est im- puesta por las condiciones climéticas del lugar de muestreo; ya que la técnica opera con mayor efi- ciencia cuando hay baja humedad relativa y poco viento, A pesar de que esta metodologia de mues- treo ha sido utilizada por varios autores (Justice, 1961; Meserve, 1977; Rodriguez y Trevizan, 1984), no se Ie ha destacado lo suficiente como herra- mienta de muestreo y parece ser una técnica pro- 90 misoria, que deberian tenerla presente los investi- gadores en vida silvestre, AGRADECIMIENTOS El autor agradece a: Ja Corporaci6n Nacional Forestal (CONAF), por permitirle e} acceso a la Reserva Nacional Las Chinchillas y por el apoyo y facilidades otorgadas para la realizacion del tra- bajo en terreno; al Fondo Mundial para la Natura- leza (WWF Intemaciona}), institucién que finan- cid el estudio; a Fabién M. Jaksié, por sus valiosos comentarios y aportes durante la preparacion del manuscrito; a un revisor anonimo, quien mejor6 Ja redaccién y comprensi6n del manuscrito, El presente trabajo forma parte del proyecto “*Con- servacion de 1a Chinchilla Chilena” CONAF/WWF. 1297 REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS BRANDENBERG J y F SILVA (1987) Parémetros cnergéticos y eficiencia de digestion, en cuatro espe- cies de roedores del matorral precordillerano andino, Tesis Departamento de Biologia, Universidad Metropolitana de Ciencias de la Eaucacibn, Santiago. 71 p. CONOVER W J (1980) Practical Nonparamettic Statistics. Second Edition. John Wiley & Sons, Inc., New York. 493 p. DAY GI, $ D SCHEMNITZ & R D TABER (1980) Capturing and marking wild animals. En: Wildlife Management Techniques Manual, cuarta edicion, S.D, Schemnitz (Ed,). The Wildlife Society, Was- higton D.C. Pp. 61-88. JAKSIC F M, R P SCHLATTER & J L YANEZ (1980) Feeding ecology of central Chilean foxes, Dusi- cyon culpaeus and Dusicyon griseus. 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