"La fe, la religión, si no van acompañadas de las obras, son inútiles, estériles, jamás producirán frutos de vida eterna.
Es preciso agudizar la mirada interna y mirar, y mirar muy hondo, debajo y detrás del espejismo de lo que representan las cosas y los hombres. Esto, lo descuidamos de hacer con mucha frecuencia.
El Señor nos invita a mí, a ti, a todos, a esta reflexión." Padre CÉSAR A. DÁVILA G.
Del Tesoro espiritual dejado no sólo en el material audiovisual y escrito, por nuestro amadísimo Fundador y Guía Espiritual, el Padrecito César A. Dávila G., y legado no sólo a través de Testamento a su Asociación Escuela de Auto-Realización (conocida así en el fuero civil hace 42 años) y como Asociación E. de Meditación (dentro de la Iglesia hace 31 años), se ha seleccionado para esta semana:"Las obras y la fe".
"La fe, la religión, si no van acompañadas de las obras, son inútiles, estériles, jamás producirán frutos de vida eterna.
Es preciso agudizar la mirada interna y mirar, y mirar muy hondo, debajo y detrás del espejismo de lo que representan las cosas y los hombres. Esto, lo descuidamos de hacer con mucha frecuencia.
El Señor nos invita a mí, a ti, a todos, a esta reflexión." Padre CÉSAR A. DÁVILA G.
Del Tesoro espiritual dejado no sólo en el material audiovisual y escrito, por nuestro amadísimo Fundador y Guía Espiritual, el Padrecito César A. Dávila G., y legado no sólo a través de Testamento a su Asociación Escuela de Auto-Realización (conocida así en el fuero civil hace 42 años) y como Asociación E. de Meditación (dentro de la Iglesia hace 31 años), se ha seleccionado para esta semana:"Las obras y la fe".
"La fe, la religión, si no van acompañadas de las obras, son inútiles, estériles, jamás producirán frutos de vida eterna.
Es preciso agudizar la mirada interna y mirar, y mirar muy hondo, debajo y detrás del espejismo de lo que representan las cosas y los hombres. Esto, lo descuidamos de hacer con mucha frecuencia.
El Señor nos invita a mí, a ti, a todos, a esta reflexión." Padre CÉSAR A. DÁVILA G.
Del Tesoro espiritual dejado no sólo en el material audiovisual y escrito, por nuestro amadísimo Fundador y Guía Espiritual, el Padrecito César A. Dávila G., y legado no sólo a través de Testamento a su Asociación Escuela de Auto-Realización (conocida así en el fuero civil hace 42 años) y como Asociación E. de Meditación (dentro de la Iglesia hace 31 años), se ha seleccionado para esta semana:"Las obras y la fe".
La fe, la religin, si no van acompaadas de las obras, son
intiles, estriles, jams producirn frutos de vida eterna. Es preciso agudizar la mirada interna y mirar, y mirar muy hondo, debajo y detrs del espejismo de lo que representan las cosas y los hombres. Esto, lo descuidamos de hacer con mucha frecuencia. El Seor nos invita a m, a ti, a todos, a esta reflexin. l est en todo. Est singularmente en cada hermano nuestro. Cuando un hermano extiende su mano para pedir una limosna por amor de Dios: El Seor est en ese limosnero. Cuando un hermano tiene hambre y nos pide de comer, el Seor est en ese hermano hambriento. Cuando un hermano tiene sed y nos pide de beber, el Seor est en ese hermano sediento. Cuando un hermano toca a nuestra puerta para pedirnos hospedaje, el Seor est en este hermano peregrino. Cuando vemos a un hermano harapiento, desnudo, el Seor est en ese hermano harapiento y desnudo. Cuando pasamos delante del lecho de un hermano enfermo, el Seor est en ese hermano que se encuentra enfermo. Cuando miramos el rostro lloroso de un hermano, el Seor est en ese hermano que llora. Si, L, el Seor est en todos, absolutamente en todos: En el santo y en el pecador, en el justo y en el blasfemo, en el pobre y en el rico, en el ignorante y en el letrado, en el noble y en el plebeyo, en el proletario y en el patrn. El Seor est en la santa y en la prostituta; el Seor est en fin, en el bueno y en el malo. Para muchos resulta difcil descubrir el rostro del Seor debajo de la montaa de basura, de lodo, de pecado, de negatividad, de miseria, de desgracia, de bajeza de un hermano. Pero esto no destruye, ni siquiera obscurece la luz de la palabra del Seor: En verdad os digo que, cuanto lo hicisteis a uno de los ms pequeos de estos mis hermanos, a mi me lo hicisteis (Mt. XXV, 40). Padre CSAR AUGUSTO DVILA GAVILANES Gua Espiritual y Fundador de la Asociacin Escuela de Auto-Realizacin
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