Lean alternadamente cada parrafo del siguiente articulo.
identifiquen y subrayen enunciados en los que se evidencien uno o varios estdndares intelec.
tuales. Indiquen cudles son.
Sefialen enunciados 0 partes del articulo donde no se cumplen los esténdares intelectuales y
Por qué no lo hacen. Recordemos que éstos son: claridad, exactitud, precision, pertinencia,
profundidad, amplitud, logica,
DROGAS Y EL AFAN PROHIBIDOR. (JORDI CEBRIAN)*
“Los drogadictos no son capaces de decidir libremente debido a su adiccién. La prohibicién,
lejos de recortar las libertades, intenta impedir la esclavitua a la que las drogas someten
a sus usuarios”,
Este es un argumento muy importante como para no ser tenido en cuenta. Vayamos por
partes. De entrada, el argumento de la adiccién esclavizadora est en entredicho porque,
or una parte, no todas las drogas prohibidas generan adiccién, y, por otra, que los pro
blemas generados por la adicci6n son, en su mayor aparte, debidos a los efectos colate.
rales de la prohibicion. De la misma manera que la dependencia fisica del alcohol de un
gran ndmero de personas no resulta problemética debido a la facilidad con que pueden
conseguir bebidas alcohélicas, la disponibilidad de las drogas para sus adictos conseguirfa
que desaparecieran las imagenes mas negativas a las que se asocia hoy: atracos, SIDA,
adulteraciones, sobredosis,
Pero lo que se debate en el fondo de esta cuestién es el concepto mismo de libertad. Se
debate cémo establecer que alguien ‘no es duefio de sus actos’ para poder imponerle
nuestra voluntad mediante la fuerza de la ley. Este argumento nos dice que los usuarios de
drogas son seres privados de voluntad y raciocinio, a los que se debe ayudar aun cuando
no quieran.
Savater comenta al respecto: "La libertad no es algo que sblo esta bien para que la ejerzan
sabios impasibles, perfectamente informados y con autocontrol y madurez envidiables.
Poner tales requisitos a la libertad es un idealismo que s6lo lleva a negar finalmente la
libertad... Es caracteristico de la libertad que puede emplearse mal: y que una vez mal
empleada uno no puede borrar lo sucedido simplemente arrepintiéndose, ni echando la
culpa al vecino o ‘al sistema”
Finalmente, no deja de ser paradéjico que muchos de los que defienden esta tesis sean
al mismo tiempo partidarios de penalizar el consumo y encarcelar a los usuarios, sin que
Parezca importar entonces que su delito haya sido cometido debido a que tenian, supues-
tamente, la voluntad robada por la droga.
* Cebrin J. Drogas y el atén prohibidor.
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