MATERIA FAMILIARTRIBUNAL SUPERIOR DE JUSTICIA DEL DISTRITO FEDERAL
PRIMERA SALA FAMILIAR
MAGISTRADOS:
Lics. Cleotilde Susana Schettino Pym, Jorge
Sayeg Held y Lazaro Tenorio Godinez.
PONENTE:
Mag. Lic. Jorge Sayeg Heli.
Recurso de apelacién interpuesto por el
representante de la parte actora, en contra
de la sentencia definitiva dictada en juicio
ordinario civil, nulidad de reconocimiento
de hijo.
SUMARIO
RECONOCIMIENTO DE HIJO, NULIDAD DE. RESUL-
TAN INAPLICABLES LAS DISPOSICIONES
Materia Familiar 43ANALES DE JURISPRUDENCIA
QUE SE REFIEREN A LA NULIDAD DE CON-
TRATOS 0 A LA DECLARACION DE ESTADO
DE INTERDICCION, PARA QUE OPERE LA
PRESCRIPCION.- Si en nuestra ley sustantiva
no se especifica con absoluta claridad algun térmi-
no para que el actor reclame la nulidad del recono-
cimiento de hijo, es incuestionable el estado de
indefensién que genera la aplicacién por analogia
de los preceptos 2236, en relacién al 638, ambos
dispositivos del Codigo Civil, en tanto que de su
simple andlisis se advierte que en ellos no se
determina que el término que se concede para
reclamar la nulidad que regulan sea aplicable ala
accién de nulidad de reconocimiento de hijo, y si
por el contrario se refieren a la nulidad de contra-
tos y de la declaracién de estado de interdiccién
que, obviamente, no guardan ninguna relacién.
México, Distrito Federal, a veintiuno de agosto del dos
mil tres.
Visto, el toca ntimero 1777/2003 para resolver el recur-
so de apelacién interpuesto por EDUARDO R. 0., repre-
sentante de la parte actora, en contra de la sentencia
definitiva de fecha doce de mayo del afio dos mil tres dic-
tada por el C. Juez Vigésimo Sexto de lo Familiar del
Distrito Federal, en los autos del juicio ordinario civil,
nulidad de reconocimiento de hijo, seguido por el apelan-
te en contra de MANUEL FERNANDO Z. F., ANA
PAULA I. B. y SANTIAGO Z. Ly
44 Materia FamiliarTRIBUNAL SUPERIOR DE JUSTICIA DEL DISTRITO FEDERAL
RESULTANDO
1—En los autos del juicio de nulidad de reconocimien-
to de hijo en mencién, el C. Juez Vigésimo Sexto de lo
Familiar del Distrito Federal, el doce de mayo del afio en
curso, dieté sentencia definitiva al tenor de los puntos
resolutivos siguientes:
PRIMERO.- Ha procedido la via ordinaria civil,
en la que el actor no cumplié los requisitos de proce-
dibilidad precisados en el considerando unico de esta
resolucién.
SEGUNDO.- Se dejan expeditos los derechos y las
acciones que jas partes estimen tener a su favor, res-
pecto de la paternidad biolégica del menor registrado
con el nombre de SANTIAGO Z. I. para que los pue-
dan hacer valer en la via y forma legales procedentes.
TERCERO.-~ Notifiquese.
2.- Inconforme con dicho fallo el actor, por medio de su
representante, interpuso en su contra recurso de apela-
cién expresando agravios, el cual el a quo admitié a tra-
mite en ambos efectos, y con los agravios dio vista a los
codemandados para que los contestaran, lo que sélo hizo
MANUEL FERNANDO Z. F. y JUAN PABLO DE W. C.,
en su caracter de tutor del menor SANTIAGO Z. F:; por lo
que se ordené la remisién de las constancias conducentes
a esta Alzada para la substanciacién del recurso.
3.— Recibidas las actuaciones originales de referencia,
se ordené la formacién del toca, confirmandose la califi-
Materia Familiar 45ANALES DE JURISPRUDENCIA
cacién de grado decretado por el juzgador, y se cité a los
interesados para oir resolucién, la que se pronuncia al
tenor de los siguientes
CONSIDERANDOS
I. La apelante expresé los agravios que obran a fojas 1
a 16 del toca, los que aquf se reproducen integramente
por economfa procesal.
Il. En atencién a la intima relacién que guardan entre
si los conceptos de inconformidad del demandado, se ana-
lizan en forma conjunta en el presente considerando, de
cuyo estudio se advierte que son fundados y suficientes
para revocar la sentencia combatida, atentos a los razo-
namientos légico-juridicos siguientes:
El enjuiciado tiene raz6n cuando considera que el a quo
violenta en su perjuicio lo dispuesto por los articulos 51,
360, 367, 368, 369, 375, 382 y 389 del Cédigo Civil, y 1, 2,
24, 25, 81, 286, 296 y 402 del Cédigo de Procedimientos
Civiles, asf como el criterio jurisprudencial que transcri-
be en agravios, al abstenerse de resolver el fondo del
asunto planteado ante su competencia. Lo anterior es asi,
porque del estudio de las constancias remitidas a esta
Sala, las cuales gozan de valor convictivo pleno en térmi-
nos de la fraccién VIII, del artfculo 327 de la Ley del
Enjuiciamiento Civil, se desprende que si bien es cierto
que ninguno de los contendientes dio cumplimiento a la
inscripcién del acta del Registro Civil a que se refiere el
46 Materia FamiliarTRIBUNAL SUPERIOR DE JUSTICIA DEL DISTRITO FEDERAL
articulo 51 del Cédigo sustantivo de la materia, no es
menos verdad que ello no constituye -en criterio de esta
Alzada- elemento de procedibilidad que condicione la
posibilidad de analizar el fondo de las prestaciones plan-
teadas en la especie por el quejoso, tomando en conside-
racién que de las propias piezas de autos, y como acerta-
damente se indica en agravios, se colige que la pretensién
del recurrente es la de que se declare la nulidad del reco-
nocimiento de hijo que hizo ante las autoridades del esta-
do de Pennsylvania, Estados Unidos de América, el sefior
MANUEL FERNANDO Z. F. a favor del menor SANTIA-
GO Z. I. y no la de su acta de nacimiento; luego entonces,
si el precepto en mencién se refiere al registro de atesta-
dos en los que se establezca el estado civil adquirido por
los habitantes del Distrito Federal, fuera de la Republica,
ello constituye, desde luego, un supuesto diverso al que
aqui se plantea, puesto que -como se insiste—- en forma
alguna se pretende la nulidad del acta de nacimiento del
infante en la que la madre lo reconocié como hijo natural,
y en cambio se reclama sdlo la nulidad del reconocimien-
to en comento, para posteriormente sefialar en dicho
atestado que el enjuiciante es el padre biolégico del infan-
te y éste puede llevar su apellido paterno y se generen los
derechos y obligaciones conducentes del ejercicio de la
patria potestad. Por consiguiente, resulta carente de todo
sustento juridico la pretensién del Juez primario para
que con el fin de analizar la procedencia de las prestacio-
nes reclamadas, previamente se hubiera inscrito en el
Registro Civil de esta ciudad de México el acta de registro
de] menor cuyo reconocimiento se cuestiona, méxime si se
Materia Familiar 47ANALES DE JURISPRUDENCIA
pondera que ello, en todo caso, debié ser cumplimentado
por los codemandados y no por el actor si éste no intervi-
no en dicho acto juridico, de tal forma que seria contrario
al principio de justicia y equidad que los demandados se
beneficiaran de su propia omisi6n, inclusive si se pondera
que en asuntos de materia familiar, sobre todo donde se
ventilan derechos de menores, el Organo Jurisdiccional
se encuentra facultado -en términos de los articulos 940
y 941 del Cédigo de Procedimientos Civiles— para adoptar
todas las medidas necesarias para privilegiar su interés
superior, lo que en el caso se surte si se pretende que el
infante cuente con el apellido de su verdadero padre y
entre ellos se establezca formalmente la relacién juridica
que de su filiacién emana; criterio que también resulta
aplicable en relacién al argumento que vierte el juzgador
en el sentido de que la accién ejercitada en la especie ha
prescrito, habida cuenta que de la simple lectura de los
preceptos que el inferior cita al respecto como lo son el
2236, en relacién al 638 del Codigo Civil, éstos resultan
notoriamente inaplicables al caso concreto, en tanto que
de su simple andlisis se advierte que en ellos no se espe-
cifica que el término que se concede para reclamar la
nulidad que regulan, también sea aplicable a las acciones
de la naturaleza de la que aqui se promueve, y sf por el
contrario se refieren —bdsicamente- a la nulidad de con-
tratos y de la declaracién de estado de interdiccién, que
obviamente no guardan ninguna relacion con la presta-
cién que aqui se planteé; de tal forma que si en nuestra
ley sustantiva no se especifica con absoluta claridad
algan término para que el actor reclame la nulidad del
48 Materia FamiliarTRIBUNAL SUPERIOR DE JUSTICIA DEL DISTRITO FEDERAL
reconocimiento de hijo llevado a cabo por MANUEL
FERNANDO Z. F., es incuestionable el estado de inde-
fensién que genera a dicha persona la aplicacién por ana-
logia de los preceptos en comento.
Lo anterior, determina la necesidad de que esta
Alzada se avoque, en plenitud de jurisdiccién, al estudio
y resolucién de las prestaciones reclamadas por el enjui-
ciante, visto que nuestra legislacién procesal no contem-
pla el reenvio de autos de esta instancia al Juez natural,
lo que se hace en los siguientes términos;
£n la especie, el sefior ADOLFO J. C. B. reclama, como
prestacién esencial de los codemandadbos, la nulidad del
reconocimiento llevado a cabo por el sefior MANUEL
FERNANDO Z. F., respecto del menor SANTIAGO Z. L.,
con la conformidad de su sefiora madre ANA PAULA I.
B., prestacién que desde luego resulta procedente, pues-
to que una vez valoradas las probanzas desahogadas en
actuaciones, de conformidad con las reglas de la légica y
la experiencia que preceptta el articulo 402 del Cédigo
de Procedimientos Civiles, se advierte que, efectivamen-
te, el referido infante es hijo bioldgico del actor, en razon
de que por una parte todos los codemandados se allana-
ron lisa y llanamente a tal aseveracién, aceptacién que
reviste especial importancia si se pondera que el allana-
miento de los enjuiciados es mds amplio y genérico que la
propia confesién, la cual inclusive también es ponderada
por esta Alzada en relacién a lo manifestado por el pro-
pio codemandado MANUEL FERNANDO Z. F,, al pro-
mover la diversa controversia del orden familiar ante la
C. Juez Sexto de lo Familiar del Distrito Federal, en
Materia Familiar 49ANALES DE JURISPRUDENCIA
cuya demanda, concretamente, en su hecho octavo, reco-
noce expresamente que SANTIAGO Z. 1. no es su hijo
natural y si en cambio del sefior ADOLFO J.; asevera-
cién que también es susceptible de robustecerse con el
resultado de la prueba pericial en genética molecular
(deido desoxirribonucleico) practicado por el doctor JOSE
T. C. G., y en el cual concluyé una vez practicados los
estudios conducentes que el infante SANTIAGO Z, I.,
efectivamente es hijo del sefior ADOLFO J. C. B.
En este contexto de ideas, si en el caso la contradiccién.
del reconocimiento se encuentra plenamente acreditada,
lo conducente es declarar la nulidad del reconocimiento
llevado a cabo por MANUEL FERNANDO Z. F., maxime
que de la pericial en psicologia practicada por orden del
propio juzgador y por la doctora LETICIA A. G., se colige
que dicha profesionista concluye que el infante tantas
veces mencionado, reconoce como su padre al actor,
excluyendo de tal calidad al codemandado; declaracién
desde luego util, pues al ser deber del érgano jurisdiccio-
nal privilegiar el interés superior del menor, es obvio que
Ja nulidad del reconocimiento que aqui se decreta no
genera perjuicio alguno a los intereses del hijo procrea-
do por el demandante con la coenjuiciada, situacién que
también se robustece con la platica sostenida por el
Juez de origen con el infante, en la cual éste acepté, de
viva voz, saber que su padre bioldgico lo es el deman-
dante y tener una relacién afectiva emocional con su
progenitor.
Por lo anterior, se decreta la nulidad del plurimencio-
nado reconocimiento, asi como de la segunda acta de
50 Materia FamiliarTRIBUNAL SUPERIOR DE JUSTICIA DEL DISTRITO FEDERAL
nacimiento del menor que se llevé a cabo en contraven-
cién a la ley, con base en ello se reconoce como padre del
menor SANTIAGO Z. L. al sefior ADOLFO J. C. B., a tra-
vés del levantamiento de una acta de nacimiento en la
que se inscriba el reconocimiento que el actor hace en
favor del menor, por lo cual el padre tendra el correspon-
diente ejercicio de la patria potestad con el cimulo de
derechos y obligaciones que regulan los articulos 413 y
414 y demas aplicables del Cédigo Civil, en el entendido
de que el menor de referencia tiene derecho a llevar como
su apellido paterno el de su progenitor, esto es el de J. C.,
para quedar su nombre integro como SANTIAGO J. C.
resultando inclusive de especial trascendencia conside-
rar que a pesar de la gravedad e importancia de las pres-
taciones que en el caso fueron reclamadas por el recu-
rrente, los propios codemandados reiteraron de nueva
cuenta su conformidad con ellas ante esta Alzada, en
tanto que al contestar los agravios de su contendiente,
manifestaron su absoluta conformidad con los argumen-
tos que éste vierte para efecto de que la sentencia comba-
tida sea revocada.
En este orden de ideas, habremos de revocar la senten-
cia combatida, para en su lugar dictar otra que se ajuste
a los lineamientos de este considerando.
IIL. Por no estar el presente asunto en alguna de las
hipdtesis normativas que preceptua el articulo 140 del
Cédigo de Procedimientos Civiles, no ha lugar a hacer
especial condena en costas.
Por lo expuesto y fundadao, se
Materia Familiar 51ANALES DE JURISPRUDENCIA
RESUELVE
PRIMERO.-— Siendo fundados los agravios del apelan-
te, en consecuencia, se revoca la sentencia definitiva de
fecha doce de mayo del afio dos mil tres, dictada por el C.
Juez Vigésimo Sexto de lo Familiar del Distrito Federal,
en los autos del juicio ordinario civil, nulidad de reconoci-
miento de hijo, seguido por ADOLFO J. B. en contra de
MANUEL FERNANDO Z. F., ANA PAULA I. B. y SAN-
TIAGO Z. I.; cuyos puntos resolutivos deben quedar en
los términos siguientes:
52
PRIMERO.- Ha sido procedente la via ordi-
naria civil ejercitada, en la que el actor acredité
los extremos de su accién con el allanamiento de
los codemandados.
SEGUNDO.— En consecuencia, se decreta la
nulidad del acta de nacimiento y del reconoci-
miento Ilevado a cabo por MANUEL FERNAN-
DO Z. F., con la conformidad de la sefiora ANA
PAULA I. B., en relacién al menor SANTIAGO
Z. 1. llevada a cabo el veintiuno de enero de mil
novecientos noventa y ocho, en el estado de
Pennsylvania, Estados Unidos de América, de
conformidad con la Ley 66 P. L. 304 aprobada
durante la Asamblea General del veintinueve de
junio de mil novecientos sesenta y tres.
TERCERO.- Se condena al C. Director del
Registro Civil del Distrito Federal, a levantar
acta de nacimiento a favor del menor SANTIA-
Materia FamiliarTRIBUNAL SUPERIOR DE JUSTICIA DEL DISTRITO FEDERAL
GO J.C. 1, en la que se asiente que ADOLFO J.
C. B. es el padre biolégico del menor SANTIA-
GOZ. I.
CUARTO.- Se declara que ADOLFO J. C. B.
es titular del ejercicio de la patria potestad
sobre su menor hijo SANTIAGO J. C. I.
QUINTO.- Una vez que cause estado esta
resolucién, girese atenta carta rogatoria al esta-
do de Pennsylvania, Estados Unidos de
América, para que mediante los conductos lega-
les correspondientes, se dicte la nulidad del acta
de nacimiento de SANTIAGO Z. I.
SEXTO.— No es el caso hacer especial condena
en costas.
SEPTIMO.—Notifiquese.
SEGUNDO.- No se hace especial condena en costas.
TERCERO.-~ Notifiquese y remitase testimonio de la
presente resolucién, junto con sus autos originales y
constancias de sus notificaciones, al Juzgado de origen y,
en su oportunidad, archivese el toca.
Ast, por unanimidad de votos, lo resolvieron y firman
los CC. Magistrados que integran la Primera Sala Fami-
liar del H. Tribunal Superior de Justicia del Distrito -
Federal, licenciados Jorge Sayeg Held, Cleotilde Susana
Schettino Pym y Lazaro Tenorio Godinez, siendo ponente
en este asunto el primero de los mencionados, ante el C.
Secretario de Acuerdos de la Sala, quien autoriza y da fe.
Materia Familiar 53TRIBUNAL SUPERIOR DE JUSTICIA DEL DISTRITO FEDERAL
TERCERA SALA FAMILIAR
MAGISTRADAS:
Lics. Yolanda de la Cruz Mondragén, Rebeca
Florentina Pujol Rosas y Adriana Canales Pérez.
PONENTE:
Mag. Lic. Rebeca Florentina Pujol Rosas.
Recurso de apelacién interpuesto por la
parte demandada, en contra de la sentencia
definitiva dictada en juicio ordinario civil,
divorcio necesario.
SUMARIOS
GUARDA Y CUSTODIA DE MENORES. EL ALLANA-
MIENTO DE LA PARTE DEMANDADA NO ES
MOTIVO SUFICIENTE PARA CONCEDERLA
Materia Familiar 55ANALES DE JURISPRUDENCIA
A FAVOR DE LA PARTE QUE RESULTE VEN-
CEDORA.— Si la demandada comparece a juicio
confesando todos y cada uno de los hechos de la
demanda, tal situacién implica una aceptacién y
reconocimiento de las pretensiones del accionante;
asi, es evidente que de acuerdo a lo dispuesto por
el articulo 274 del Cédigo de Procedimientos
Civiles, el juzgador debe, sin mas tramite, pronun-
ciar la sentencia correspondiente, sin embargo,
aun y cuando exista allanamiento a la causal de
divorcio invocada por la actora, no es motivo sufi-
ciente para decretar la guarda y custodia a la
parte que resulta vencedora, pues, este instituto
~guarda y custodia-, debe atender siempre al inte-
rés superior de los menores, tomando en cuenta
Jas circunstancias particulares, a saber: el peligro
que puedan correr al lado de alguno de sus proge-
nitores, la edad de los hijos, las costumbres del
medio en que se han desenvuelto, la convivencia
con ciertos familiares, etc., para poder determinar
con quién de sus padres estaran mejor, en térmi-
nos del precepto 282, fraccién V, parrafo segundo,
del Cédigo Civil para el Distrito Federal.
MENORES DE EDAD, EN PROCEDIMIENTOS JUDI-
56
CIALES. OPINION DE LOS.- El derecho de los
menores de edad a expresar su opinién en proce-
dimientos judiciales, implica que se les tome su
parecer en los asuntos que los afecten y que se
escuchen y tomen en cuenta sus opiniones y pro-
Materia FamiliarTRIBUNAL SUPERIOR DE JUSTICIA DEL DISTRITO FEDERAL
puestas respecto a los asuntos de su familia,
empero, para resolver las contiendas judiciales
en las que se encuentren involucrados, el juzga-
dor debera tomar en cuenta su edad y la capaci-
dad del menor para entender la problematica que
se suscita en su nucleo familiar y ademas la
madurez suficiente para poder determinar qué es
lo que le conviene, en términos de los articulos 5,
inciso D), fracciones I y II de la Ley de los Dere-
chos de las Nifias y Nifos en el Distrito Federal;
41 de la Ley para la Proteccién de los Derechos de
Ninas, Nifios y Adolescentes; y, 12 de la Conven-
cién de los Derechos del Niiio.
México, Distrito Federal, a quince de diciembre de dos
mil tres.
Vistos los autos del toca ntimero 1243/2003, para resol-
ver el recurso de apelacién interpuesto por la parte
demandada, sefiora G. G. PATRICIA en contra de la sen-
tencia definitiva de fecha quince de abril de dos mil tres,
dictada por el C. Juez Vigésimo Cuarto de lo Familiar en
el Distrito Federal, en los autos del juicio ordinario civil,
divorcio necesario, promovido por R. G. RUBEN en con-
tra de PATRICIA G. G., expediente 1084/2002; y
RESULTANDO
1—La sentencia definitiva materia de este recurso con-
tiene los siguientes puntos resolutivos:
Materia Familiar 57ANALES DE JURISPRUDENCIA
PRIMERO.- Ha procedido la via intentada por la
parte actora, en la cual acredité los hechos constitu-
tivos de su demanda con el allanamiento liso y llano
de su contraria; habiendo manifestado su conformi-
dad con dicho allanamiento y ratificado en todas y
cada una de sus partes su escrito inicial de demanda,
acreditando con ello su accién; en consecuencia.
SEGUNDO.- Se decreta la disolucién del vinculo
matrimonial que une a los dos sefiores RUBEN R. G.
(sic) celebrado el dia veinte de enero de mil nove-
cientos setenta y tres, en esta ciudad, bajo el régi-
men de sociedad conyugal e inscrito en la delegacién
07, numero de acta ..., Juzgado 22.
TERCERO.— Se declara terminada la sociedad
conyugal, régimen bajo el cual se contrajo el matri-
monio, la cual, en caso de existir bienes, se liquidaré
en ejecucién de sentencia.
CUARTO.- Ambas partes recobran su entera
capacidad para contraer nuevas nupcias.
QUINTO.- Se decreta la Guarda (sic) y Custodia
(sic) definitiva de los menores hijos de las partes
ADRIANA y SAMUEL ambos de apellidos R. G. a
favor del actor en el principal RUBEN R. G.
SEXTO.— No se hace especial condena en costas.
SEPTIMO.- Una vez que cause ejecutoria la pre-
sente resolucion, procédase a dar cumplimiento a lo
dispuesto por el articulo 291 del Codigo Civil para el
Distrito Federal.
58 Materia FamiliarTRIBUNAL SUPERIOR DE JUSTICIA DEL DISTRITO FEDERAL
OCTAVO.— Guardese en el legajo de sentencias de
este Juzgado, copia autorizada de la presente resolu-
cién.
NOVENO.— Notifiquese personalmente.
2.- Inconforme con la anterior resolucién, la parte
demandada, sefiora PATRICIA G. G. interpuso recurso
de apelacién, el que le fue admitido en ambos efectos y
tramitada que fue la Alzada, se cit6 a las partes para oir
sentencia, la que ahora se pronuncia.
CONSIDERANDO
I. La apelante expresé como agravios de su parte, los
contenidos en su escrito de fecha de presentacidn veintio-
cho de abril de dos mil tres, mismo que corre agregado a
fojas de la siete a la doce del toca que se analiza, el cual
deberd tenerse aqui por reproducido, formando parte
integrante de esta sentencia.
II. Los agravios primero, segundo y tercero expresados
por la apelante, se estudian en su conjunto debido a la
estrecha relacién que guardan entre si, en los cuales
esencialmente aduce, que Je causa agravio el hecho de
que el a quo viola en su perjuicio lo establecido en los
articulos a que hace referencia en su escrito de expresién
de agravios, porque dice la inconforme, que si de autos
consta el desahogo de la prueba, consistente en la inspec-
cién judicial, con la que se acredita fehacientemente que
nunca existié domicilio conyugal, pues las partes siempre
Materia Familiar 59ANALES DE JURISPRUDENCIA
vivieron en calidad de arrimados en el domicilio de los
padres del actor y no habja libre disposicién de los bienes,
ni autonomia en sendo domicilio, el allanamiento hecho
no puede estar por encima, dice la recurrente, de lo que
ya era una verdad juridica, como lo es la inexistencia del
domicilio conyugal, por lo que no se debié haber declara-
do procedente la causal de divorcio invocada por su con-
trario, ademas de que el accionante no estaba legitimado
para ejercer Ja accién, pues no exhibié documento que lo
legitimara, toda vez que la fecha de registro del acta de
matrimonio que exhibe como base de la accién, se puede
advertir que la demandada al contraer nupcias sélo tenia
siete afios de edad y si hubiese sido en la fecha que men-
ciona su contraparte en su escrito inicial, entonces hubie-
se tenido catorce afios, sin que se haya acreditado el con-
sentimiento por parte de sus padres para contraer nup-
cias, de ahi que, dice la impetrante, el actor carece de
legitimacién para ejercer la accién intentada, por lo que
solicita sea revocado el fallo recurrido.
Los agravios expresados por la apelante son infunda-
dos para provocar la modificacién 0 revocacién al fallo
recurrido, toda vez que si bien es cierto a fojas sesenta y
cinco del cuaderno principal, corre agregada la inspec-
cién judicial, realizada en fecha nueve de enero de dos
mil tres, en el domicilio ubicado en la avenida ... nimero
.., unidad Habitacional San Juan de Aragén, segunda
seccién, delegacién Gustavo A. Madero en esta ciudad,
inmueble que es propietaria MARIA G. S., quien es
madre del actor, no menos cierto es que no se advierte
que en efecto, las partes hayan vivido en calidad de arri-
60 Materia FamiliarTRIBUNAL SUPERIOR DE JUSTICIA DEL DISTRITO FEDERAL
mados en dicho inmueble, ya que de la inspeccién judi-
cial, no se infiere que en efecto, los padres del actor vivan
en ese inmueble, pues sélo se hace constar que es propie-
dad de la progenitora del actor, mds no que viven ahi
junto con las partes o que vivieron ahi con los conten-
dientes, por lo que dicha prueba no es suficiente para
tener por acreditado que las partes contendientes hayan
vivido en calidad de arrimados; ademas aun y cuando si
hubiesen vivido las partes en calidad de arrimados, tal
situacin no es motivo suficiente para no decretar la diso-
luci6n del vinculo matrimonial, ya que también se advier-
te de los autos, que la sefiora PATRICIA G. G., se allané
lisa y Ilanamente a la causal de divorcio invocada por su
contraria, tal y como se advierte a fojas setenta y siete del
cuaderno principal, en la cual corre agregado el escrito de
fecha siete de marzo de dos mil tres, presentado por la
inconforme en la cual sefialaba literalmente que:
En términos de este escrito vengo a hacer del
conocimiento de su Sefioria que la suscrita se
allana a la causal de divorcio opuesta por la
parte actora en este juicio, y de ser necesario la
suscrita se compromete a presentarse al local de
este H. Juzgado a ratificar el contenido y firma
del presente escrito el dia (sic) y hora que al
efecto se determine.
De lo anterior, se infiere que la demandada en el pre-
sente juicio se allané a la causal de divorcio invocada por
la actora, allanamiento que fue ratificado ante la presen-
cia judicial el dia ocho de abril de dos mil tres, mismo que
corre agregado a fojas ochenta y cinco de] cuaderno prin-
Materia Familiar 61ANALES DE JURISPRUDENCIA
cipal, luego entonces, si el allanamiento constituye una
forma procesal autocompositiva para resolver los conflic-
tos, el cual se caracteriza porque el demandado somete su
propio interés al del actor, a fin de dar solucién a la con-
troversia, es por ello que el Juez del conocimiento declaré
procedente la accién ejercitada. Por lo tanto, si consta
que la demandada comparece a juicio confesando todos y
cada uno de los hechos de la demanda y se allana a la
misma, tal situacién implica una aceptacién y reconoci-
miento de Jas pretensiones del accionante. Asi, es eviden-
te que de acuerdo a lo dispuesto por el articulo 274 del
Cédigo de Procedimientos Civiles, el juzgador debe sin
més tramite pronunciar la sentencia correspondiente,
tomando en cuenta dicho allanamiento efectuado por la
parte demandada, sin que se pueda alegar en esta via,
que no existia domicilio conyugal o bien que la demanda-
da se haya separado del domicilio conyugal, debido a que
el actor no proporcionaba alimentos y que por ello es que
se ausenté del domicilio conyugal, ya que tales alegacio-
nes son insuficientes para no declarar procedente la diso-
lucién del vinculo matrimonial, pues como se dijo en li-
neas anteriores, el allanamiento constituye una forma
procesal autocompositiva para resolver los conflictos, el
cual se caracteriza porque el demandado somete su pro-
pio interés al del actor, a fin de dar solucién a la contro-
versia, de ahi que sean infundados los agravios hechos
valer.
Ahora bien, sobre la manifestacién hecha por la ape-
lante, en el sentido de que el accionante no estaba legiti-
mado para ejercer la accién, pues no exhibié documento
62 Materia FamiliarTRIBUNAL SUPERIOR DE JUSTICIA DEL DISTRITO FEDERAL
que lo legitimara, toda vez que la fecha de registro del
acta de matrimonio que exhibe como base de la accién, se
puede advertir que la demandada al contraer nupcias
s6lo tenia siete afios de edad y si hubiese sido en la fecha
que menciona su contraparte en su escrito inicial, enton-
ces hubiese tenido catorce afios, sin que se haya acredita-
do el consentimiento por parte de sus padres para con-
traer nupcias; sobre el particular, cabe indicdrsele a la
apelante que si bien es cierto existe un error en el acta de
matrimonio exhibida por el actor en cuanto a la fecha de
registro del matrimonio, también lo es que de dicha acta
se advierte en el renglén correspondiente a la edad de la
contrayente, que aparece la edad de veinte aiios, por lo
que no se puede alegar que la demandada hubiese tenido
siete afios o catorce, tomando en cuenta la fecha que se
establecié en el escrito inicial, ademas la propia recu-
rrente esta reconociendo la legitimacién del actor para
demandar el divorcio necesario, ya que como se dijo en
lineas anteriores, la propia demandada se allané a la
causal de divorcio invocada por la apelante, luego enton-
ces, no es dable decir que la parte actora carezca de legi-
timacién para ejercer la accién intentada, de ahi lo infun-
dado de los agravios expresados por la apelante, sin que
tal situacién le cause algtin agravio que esta Alzada deba
reparar.
III. En el cuarto agravio hecho valer por la apelante,
esencialmente aduce que le causa agravio el hecho de que
el a quo haya declarado procedente la accién ejercida por
su contraria, con el simple allanamiento, ya que dice la
inconforme, que aun y cuando la demandada hubiese
Materia Familiar 63ANALES DE JURISPRUDENCIA
abandonado el domicilio conyugal, fue debido a que el
actor se abstuvo de proporcionar alimentos, tal y como se
acredité con las copias certificadas del juicio de contro-
versia del orden familiar, alimentos, por lo que nunca
debié el Juez natural, dice la impetrante, haber declara-
do la disoluci6n del vinculo matrimonial, ni mucho menos
haber otorgado la guardia y custodia de sus menores
hijos a la parte apelada; ademas, dice la recurrente, que
se hizo del conocimiento en forma oportuna al Juez del
conocimiento, que el actor estuvo privado de su libertad
por el delito de homicidio y procesado a! mismo tiempo
por el delito de robo con violencia, por lo que el a quo
debié actuar de oficio en beneficio de los hijos de las par-
tes y no otorgar la guarda y custodia de los mismos a su
contraria, por lo que solicita se modifique la sentencia
combatida y se tome en consideracién todo lo sefialado
con anterioridad.
El agravio expresado por la apelante es fundado para
provocar la modificacién al fallo recurrido, toda vez que
en efecto, le asiste la razén a Ja inconforme en el sentido
de que el a gue no debié haber decretado la guarda y cus-
tedia de los menores hijos de las partes, de nombres
ADRIANA R. G. y SAMUEL R. G., ya que aun y cuando
exista allanamiento por parte de la demandada a la cau-
sal de divorcio invocada por la actora, tal situacién no es
motivo suficiente para decretar la guarda y custodia a la
parte que resulta vencedora, pues la guarda y custodia de
los hijos de las partes, debe atender siempre al interés
superior de éstos, tomando en cuenta las circunstancias
particulares en cada caso, como son el peligro que puedan
64 Materia FamiliarTRIBUNAL SUPERIOR DE JUSTICIA DEL DISTRITO FEDERAL
correr al lado de alguno de sus progenitores, la edad de
los hijos, las costumbres de! medio en que se han desen-
vuelto, la convivencia con ciertos familiares, etcétera,
para poder determinar con quién de sus padres estaran
mejor los hijos de las partes, sin que sea suficiente un
allanamiento a una causal de divorcio, para conceder la
guarda y custodia de los hijos de los contendientes a su
contrario, de ahi que le asista la razén a la apelante en el
sentido de que no se debié otorgar la guarda y custodia de
sus hijos al actor, en atencién al allanamiento.
En efecto, de las constancias procesales a las cuales se
les concede valor probatorio pleno, en términos de lo dis-
puesto por los articulos 327 fraccién VIII y 423 del Cédigo
de Procedimientos Civiles para el Distrito Federal, se
advierte que el Juez no debié decretar la guarda y custo-
dia de los menores hijos de las partes, de nombres
ADRIANA R. G. y SAMUEL R. G., al actor, ya que el ulti-
mo de los nombrados cuenta con la edad de escasos dos
afios, tal y como se acredita con su acta de nacimiento,
misma que corre agregada a fojas doce del cuaderno prin-
cipal, edad en la que necesita de los cuidados especiales,
que sdlo su madre le puede brindar, como son su alimen-
tacion la cual debe ser a horas determinadas, su aseo per-
sonal, que duerma a su horas debidas, etcétera, cuidados
que son mds del conocimiento de su madre que de cual-
quier persona, por lo que resulta la mas apta para su cui-
dado, a menos que corriera peligro el menor al permane-
cer a su lado, situacién esta ultima que no qued6 acredi-
tada en autos, luego entonces, al no correr peligro el
menor al lado de su madre y siendo que ésta tiene a su
Materia Familiar 65ANALES DE JURISPRUDENCIA
favor la presuncién de ser la mds apta para su cuidado,
es por ello que se debié haber decretado la guarda y cus-
todia de dicho menor a su madre, lo anterior de conformi-
dad con lo dispuesto por el articulo 282, fraccién V, parra-
fo segundo, del Cédigo Civil para el Distrito Federal.
Articulo 282.- Desde que se presenta la
demanda de divorcio, y sélo mientras dure el jui-
cio, se dictaran las medidas provisionales perti-
nentes conforme a las disposiciones siguientes:
V. Poner a los hijos al cuidado de la persona
que de comtn acuerdo hubieren designado los
cényuges, pudiendo ser uno de éstos. En defecto
de ese acuerdo, el cényuge que pida el divorcio
propondra la persona en cuyo poder deben que-
dar provisionalmente los hijos. El Juez de lo
Familiar, previo el procedimiento que fije el
Cédigo respectivo y tomando en cuenta la opi-
nién del menor, resolverd lo conducente.
Salvo peligro grave para el normal desarrollo
de los hijos, los menores de doce afios deberan
quedar al cuidado de la madre.
Del precepto legal transcrito, se infiere que dicho ar-
ticulo establece un principio general, rector de la decisién
de guarda y custodia de los menores de doce afios, consis-
tente en que éstos deben permanecer al lado de su madre,
salvo peligro grave para el normal desarrollo de los hijos.
El espiritu de este principio, evidentemente, tuvo como
sustento que el legislador atendiera a la realidad social y
a las costumbres imperantes dentro del micleo social
66 Materia FamiliarTRIBUNAL SUPERIOR DE JUSTICIA DEL DISTRITO FEDERAL
nacional, en el que en términos generales, corresponde a
la madre la atencién y cuidado de los menores; conse-
cuentemente, legalmente la madre tiene a su favor la
presuncién de ser la mas apta para cuidar a los hijos pro-
creados, a menos que el padre demuestre que la conducta
de aquélla puede ser dafiina a la salud e integridad de los
hijos. Es pertinente destacar que si bien el articulo 4 de
Ja Constitucién General de la Republica, estatuye que el
hombre y la mujer son iguales ante la ley, lo cierto es que
Ja norma constitucional reconoce un régimen propio en lo
que se refiere a las cuestiones familiares, dado que al res-
pecto puntualiza que la ley ordinaria protegera la orga-
nizacién y el desarrollo de la familia, de lo cual se des-
prende claramente, que en este aspecto en particular,
debe atenderse fundamentalmente a las circunstancias
especificas que se encaminen a proteger el desarrollo de
la familia, y, dentro de este concepto, por consiguiente, a
proteger el desarrollo de los menores, de ahi que existe
interés social en que los menores estén en poder de su
madre hasta la edad que fija el Codigo Civil aplicable,
porque es ella quien se encuentra més capacitada para
atenderlos con eficacia, esmero y cuidado necesarios; de
tal suerte, que si no se esta en los casos de excepcién que
marca la ley para que deba ser separado el menor de
edad del cuidado de la madre, éste no podra pasar a la
custodia del padre que asi lo solicita, de ahi que aun y
cuando el actor haya solicitado la guarda y custodia de
sus menores hijos y la demandada se haya allanado a la
demanda incoada en su contra, no es procedente que al
demandado se le conceda la guarda y custodia de su
Materia Familiar 67ANALES DE JURISPRUDENCIA
menor hijo, pues no se acredité en autos que el menor
corriera riesgo alguno al lado de su madre y dada su
menor edad, debe permanecer bajo la guarda y custodia
de ella.
Por lo que hace a la menor ADRIANA R. G., ésta aun y
cuando sea mayor de doce afios, la guarda y custodia
debe quedar a cargo de su progenitora, pues al estar el
hermano menor de esa edad bajo la custodia y guarda de
la citada madre, es evidente que dada la minoridad men-
cionada es conveniente que ambos hermanos permanez-
can al lado de su madre, pues es ésta quien puede pro-
porcionarles los cuidados necesarios para su salud y bie-
nestar, aunado al hecho de que esta Alzada, con las
amplias facultades que je confieren los articulos 940 y
941 del Cédigo de Procedimientos Civiles para el Distrito
Federal, mediante auto de fecha treinta de mayo de dos
mil tres, mismo que corre agregado a fojas veintiuno del
toca de apelacidn, ordend sostener una platica con la
menor hija de las partes, de nombre ADRIANA R. G., sin
asistencia de las partes, platica en la cual deberia estar
presente el Ministerio Puiblico de la adscripcién, asi como
una psicéloga; asi las cosas, en audiencia de fecha dieci-
siete de junio de dos mil tres, la cual corre agregada a
fojas veintisiete del toca de apelacién, esta ponente sos-
tuvo la platica con 1a menor ADRIANA R. G., quien
manifesté:
..-Que no sabe el motivo de su presencia en
esta Sala, que vive con su mamé, que es bueno
estar con ella porque es como su hermana, que
su papa les habla telefénicamente para verse,
68 Materia FamiliarTRIBUNAL SUPERIOR DE JUSTICIA DEL DISTRITO FEDERAL
pero sus abuelitos no quieren ver a su papd, que
su papa los lleva a donde ella quiere y le pre-
gunta si tiene novio, pero que a ella no le gusta
salir con él y que cuando lo hace, también los
acompaiia su hermanito, que le guarda rencor a
su papé por lo que le hizo a su mama, que su
papé piensa que la maneja su mamé, pero que en
realidad ella quiere quedarse a vivir con su
mamé, que su papa no sabe muchas cosas de ella,
pero si le gustaria convivir con él, pero no vivir
con su papa, porque como mujer tiene mds comu-
nicacién con su mama, que con la novia de su
papa no se habla, pero tampoco quisiera tratarla,
pero si le gustaria ver a su papé un fin de semana
con él y otro con su mama y entre semana cada
vez que ella quisiera o se pusiera de acuerdo con
su papa y de las vacaciones no habia problema
pues no va a la escuela ahorita, e inclusive se
quedarda (sic) los fines de semana a dormir con
su papa. Que es todo lo que tiene que decir...
De lo anterior, se infiere que la hija de las partes sélo
quiere convivir con su papé pero no vivir con él, por lo
que se debe de tomar en consideracién su opinién y decre-
tarse la guarda y custodia de la menor hija de las partes
de nombre ADRIANA R. G. a favor de su sefiora madre
PATRICIA G. G.
En efecto, el articulo 5, inciso D), fracciones I y II de la
Ley de los Derechos de las Nifias y Nifios en el Distrito
Federal, establece:
Materia Familiar 69ANALES DE JURISPRUDENCIA
De manera enunciativa, mds no limitativa,
conforme a la presente Ley las Nifias y Nifios en
el Distrito Federal tienen los siguientes dere-
chos: D) A la educacién, recreacién, informacién
y participacién: I. A expresar su opinién libre-
mente, conocer sus derechos y a ser escuchados
en el Ambito familiar y comunitario, asi como en
todo procedimiento administrativo o judicial,
que afecte sus esferas personal, familiar y
social,
Asimismo, el articulo 41 de la Ley para ia Proteccién
de los Derechos de Nifias, Nifios y Adolescentes, dispone:
E] derecho a expresar opinién implica que se
les tome su parecer respecto de:
A. Los asuntos que los afecten y el contenido
de las resoluciones que les conciernen.
B. Que se escuchen y tomen en cuenta sus opi-
niones y propuestas respecto a los asuntos de su
familia 0 comunidad.
Igualmente, el precepto legal 12 de la Convencién de
los Derechos del Nifio, sefiala:
“Las nifias y nifios podemos decir le que pensamos”,
Bajo ese tenor, para resolver las contiendas en las que
se encuentren involucrados menores, debe tomarse en
consideracién su opinién y tomande en cuenta la edad de
dicha menor, que es la de dieciséis afios, edad en la que
ya tiene la capacidad para entender la problematica que
se suscita en su nucleo familiar y ademas de tener la
70 Materia FamiliarTRIBUNAL SUPERIOR DE JUSTICIA DEL DISTRITO FEDERAL
madurez suficiente para poder determinar qué es lo que
le conviene, es por ello que se debe de otorgar la guarda y
custodia de dicha menor a su progenitora, aunado al
hecho de que el Representante Social, mediante escrito
de fecha quince de agosto de dos mil tres, mismo que
corre agregado a fojas cincuenta y ocho del toca de apela-
cién, sefialé ser de la opinién que ambos hijos de las par-
tes debian de quedar bajo la guarda y custodia de la
madre de éstos, por lo tanto, al no haberse acreditado en
autos que los menores hijos de las partes corran algun
peligro al lado de su madre, sino por el contrario, se
advierte que la madre es la mds apta para el buen desa-
rrollo de los hijos, es por ello que sea fundado el agravio
expresado por la apelante, siendo lo procedente modificar
ja sentencia recurrida, en la cual se determine que la
guarda y custodia de los menores ADRIANA y SAMUEL,
ambos de apellidos R. G., quedaran a favor de la sefiora
PATRICIA G. G., fijdndose como régimen de visitas y con-
vivencias de los hijos de las partes con su progenitor, los
dias domingos de cada ocho dias, en un horario compren-
dido de las diez a las dieciséis horas, para lo cual podra el
sefior RUBEN R. G., pasara a recoger a dichos menores
al lugar en el cual habitan con su progenitora, pudiéndo-
los sacar a pasear, debiéndolos reintegrar a dicho domici-
lio en la hora sefialada, régimen de visitas y convivencias
que se llevard a cabo a partir de que la presente resolu-
cidn cause ejecutoria, exhortando a las partes a propor-
cionar las facilidades que sean necesarias, a fin de que se
lleven a cabo las convivencias de la mejor manera, aper-
cibidos que en caso de no cumplir con lo antes sefialado,
Materia Familiar 71ANALES DE JURISPRUDENCIA
se hard acreedora la parte que incumpla a una multa
consistente en ciento veinte dias de salario minimo gene-
ral vigente en el Distrito Federal, Jo anterior de confor-
midad con lo dispuesto por los articulos 62 y 73 del
Cédigo de Procedimientos Civiles para el Distrito
Federal.
Por todo lo anterior y al resultar infundados los agra-
vios primero, segundo y tercero y fundado el cuarto de los
agravios expresados por la apelante, lo procedente es
modificar el fallo recurrido, el cual debera de quedar en
los términos precisados en el resolutivo segundo de este
fallo.
IV. No encontrandose el presente asunto en alguno de
los supuestos del articulo 140 del Cédigo de
Procedimientos Civiles, no se hace especial condena en
costas.
Por lo expuesto y fundado, es de resolverse y se
RESUELVE
PRIMERO.-— Son infundados los agravios primero,
segundo y tercero y fundado el cuarto agravio expresado
por la apelante, en consecuencia;
SEGUNDO.- Se modifica la sentencia definitiva de
fecha quince de abril de dos mil tres, dictada por el C.
Juez Vigésimo Cuarto de lo Familiar en el Distrito
Federal, en los autos del juicio ordinario civil, divorcio
necesario, promovido por R. G. RUBEN en contra de
72 Materia FamiliarTRIBUNAL SUPERIOR DE JUSTICIA DEL DISTRITO FEDERAL
PATRICIA G. G., expediente 1084/2002, la cual debera
quedar en los siguientes términos:
PRIMERO.— Ha procedido la via intentada
por la parte actora, en la cual acredité los
hechos constitutivos de su demanda con el alla-
namiento liso y llano de su contraria; habiendo
manifestado su conformidad con dicho allana-
miento y ratificado en todas y cada una de sus
partes su escrito inicial de demanda, acreditan-
do con ello su accién; en consecuencia.
SEGUNDO.- Se decreta la disolucién del vin-
culo matrimonial que une a los sefiores RUBEN
R. G., y PATRICIA G. G., celebrado el dia veinte
de enero de mil novecientos setenta y tres, en
esta ciudad, bajo el régimen de sociedad conyu-
gal e inscrito en la delegacién 07, nimero de
acta ..., Juzgado 22.
TERCERO.- Se declara terminada la socie-
dad conyugal, régimen bajo la cual se contrajo el
matrimonio, la cual en caso de existir bienes, se
liquidaré en ejecucién de sentencia.
CUARTO.— Ambas partes recobran su entera
capacidad para contraer nuevas nupcias.
QUINTO.-— Se decreta la guarda y custodia
definitiva de los menores hijos de las partes,
ADRIANA y SAMUEL ambos de apellidos R. G.
en favor de la sefiora PATRICIA G. G., fijandose
como régimen de visitas y convivencias de los hi-
jos de las partes con su progenitor, sefior RUBEN
Materia Familiar 73ANALES DE JURISPRUDENCIA
R. G., los dias domingos de cada ocho dias, en un
horario comprendido de las diez a las dieciséis
horas, para lo cual podré el sefior RUBEN R. G.,
pasar a recoger a dichos menores al lugar en el
cual habitan con su progenitora, pudiéndolos
sacar a pasear, debiéndolos reintegrar a dicho
domicilio en la hora sefialada, régimen de visitas
y convivencias que se llevara a cabo a partir de
que la presente resolucién cause ejecutoria,
exhortando a las partes a proporcionar las facili-
dades que sean necesarias, a fin de que se lleven
a cabo las convivencias de la mejor manera, aper-
cibidos que en caso de no cumplir con lo antes
sefialado, se hard acreedora la parte que incum-
pla a una multa consistente en ciento veinte dias
de salario minimo general vigente en el Distrito
Federal, lo anterior de conformidad con lo dis-
puesto por los articulos 62 y 73 del Cédigo de
Procedimientos Civiles para el Distrito Federal.
SEXTO.-— No se hace especial condena en cos-
tas.
SEPTIMO.- Una vez que cause ejecutoria la
presente resolucién, procédase a dar cumpli-
miento a lo dispuesto por el articulo 291 del
Cédigo Civil para el Distrito Federal.
OCTAVO.— Guardese en el legajo de senten-
cias de este Juzgado copia autorizada de la pre-
sente resolucién.
NOVENO.- Notifiquese personalmente.
74 Materia FamiliarTRIBUNAL SUPERIOR DE JUSTICIA DEL DISTRITO FEDERAL
TERCERO.~ No se hace especial condena en costas en
esta instancia.
CUARTO.— Notifiquese y remftase testimonio de esta
resolucién debidamente autorizada al Juzgado de prime-
ra instancia y, en su oportunidad, archivese el presente
toca como asunto total y definitivamente concluido.
Asi, por unanimidad de votos lo resolvieron las ciuda-
danas Magistradas que integran la Tercera Sala Familiar
del H. Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal,
licenciadas Yolanda de la Cruz Mondragén, Rebeca Flo-
rentina Pujol Rosas y Adriana Canales Pérez, siendo po-
nente la segunda de las nombradas, en términos de lo
dispuesto por el articulo 45 de la Ley Organica del H.
Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal, quie-
nes firman ante el C. Secretario de Acuerdos, licenciado
Mario Alberto Villegas Cruz, quien autoriza y da fe.
Materia Familiar 15