“Dios ha curado la herida que me provoqué con el aborto” Beatrice Fazi es una popular actriz italiana con una impactante historia de conversion. Conveinteaftos aborts y cayé en unaespiralautodestructiva que la condujoalaanorexia, la bulimia y el consumo de drogas. Hoy es una feliz madre de cuatro hijos que no pierdela oportunidad de proclamar que Dios ha hecho y hace de su vida una “obra de arte”. “QUIEN ES Beatrice Fazi?™"Es una hija de Dios’, contesta con emocién. Pero zquién era antes de conocer a Dios? Mision conversé con ella y advirio, durante la charla, que se trataba de una persona que se creyd autosuficiente y que buscd el amor en los lugares equivocados. "Siempre aspiré al amor con a mayiscula’, asegura. Sin embargo, en realidad estaba sola, tanto que no cont6 con una mano amiga que le adviriera de que abortar no seria la solucién a sus problemas, sino la causa de otros muchos, ‘La raiz de todos mis males fue el aborto’, asegura. Pero la tristeza ya no domina su vida. Tampoco la rabia, el rencor o la desesperanza. “Otro me ha liberado de mi culpa y ha curado mis , heridas", comenta con convic~ cién, aunque pasaron varios afios hasta que los nuubarrones desaparecieron de su horizonte. Parte de este camino lo cuenta en su libro Un cuore ‘nuovo. Dal male di vivere alia gioia detta fede (en espafiol, ‘Un corazén nuevo. Del dolor de vivir a la alegria de la fe’) Un volumen que -reconoce con tuna sonrisa- ha tenido el mejor amanuense: el Espiritu Santo. No por casualidad, lo escribié en la Cuaresma del afio pasado. Se decidié a escribir su renacimiento ues, a quienes relataba su conversion, le pedian que contara mas El escéndalo por confesar su secreto Fazi alcanz6 notoriedad gracias a su papel de Melina en la serie Un medico in famiglia, la version italiana de la popular serie espafiola Médico de familia, Cuando comenzé a gonceder entrevistas y a relatar cémo pasé del vacio ala plenitud de un corazén lleno de la mmisericordia de Dios, not6 que, para muchos, “era casi un escéndalo que una actriz quisiera vivir ef Evangelio’ Hasta que el libro vio la luz en 2015, nunca habia hecho publico que, en 1993, a los veinte afos, se sometid a un aborto. En ese momento, la actriz mantenia una relacién intermitente con un hombre mayor que ella, divorciado y cocainémano, Fazi estaba sola en Roma, era estudiante y comenzaba a trabajar esporddicamente como actriz. Sin dinero, sin el apoyo del padre del hijo que Hlevaba en su vientre, sin poder contarselo @ sus padres y aconsejada por unas amigas, se acogid a la ley 194 que, en mayo de 1978, despenalizé el aborto en Italia, "Me sorprendié la cantidad de mujeres que estaban esperando para abortar. Para muchas, no era la primera vez que se acogian a esta ley, porque usaban el aboro como método contraceptivo Con este amargo recuerdo comienza su libro; en Conereto, con la pregunta de la enfermera del consultorio que grits: “¢Quiénes son las de la 194?" Una ley de la que, paraddjicamente, Fazi habia sido firme defensora, ya que milié en grupos feministas durante sus afios Universitarios. “Por esta razon, nunca pensé que levara dent a un nifo, Estabe Convencida de que solo se trataba de un conjunto de Para la joven Beatrice era necesario luchar por este “derecho sacrosanto de las mujeres", Es mas, acusaba a la ‘huella de la cultura catblica’ de la culpa que arastrd después de arrancar de su seno al hijo no nacido. Cuenta, con el rostro desencajado, que ain siente, como a elsi fuera hoy, el dolor fisico que sintié al despertar de la anestesia. "Pedi a la enfermera que me diera algo para el dolor, Me miré y, con su expresién, parecia que me dijeraHaberlo pensado antes”, recuerda El mundo artisticd no contribuy6 a mejorar su vida, y su pasado familiar tampoco era halagador: después de Veinte afios de matrimonio, su padre traicioné a su madre y la abandoné. Todos estos elementos generaron una espiral de auto- destruccién a la que se sumaron los trastomos alimentarios y el consumo esporadico de drogas. “Estaba obsesionada con mi peso y con mi cuerpo, queria que fueran perfectos’, relata en su libro “Ademés, mis relaciones con los demas eran fingidas e interesadas. [..] Ese vacio existencial me lev a desear caprichos: compré una casa, tuve un novio formal.., pero eso no me dio estabilidad. Es mas, él también me traicioné Pese a todo, en su interior seguia gritando una sed insactable de amor. Y, mientras que continuaba negando a Dios, comenz6 a practicar el budismo ‘para limpiar mi karma’, porque la culpa por el aborto continuaba lastrando su existencia. En esa circunstancia, Dios se le present6 ‘de puntilas’, comenta. Un corazén de carne Volviendo la vista atrés, reconoce que Cristo la liberd del peso que la atenazaba:*Me ha hecho sentir libre de mi pecado, capaz de enfrentarme a mi culpa, de plantarle cara a mi error, sin sentime hundida, porque El ha venido a hacerse cargo. Curé las heridas de mi vida Curé la herida que me provoqué con el aborto” Dios llamé a su puerta de forma inesperada, pero tiema y cuidadosa. Un dia, paseando por el centro de Roma, se sintio cangada y decidid entrar a una iglesia para sentarse. El Santisimo estaba expuesto, algo a lo que ella, atea y anticlerical, no daba importancia. Pero, como el que esta al sol sin notar que se broncea, Dios empez6 a transformar su corazon de piedra en uno de came. “Cristo vivo se comuniod conmigo. Comencé a ora, aunque todavia era pronto para darte un si'definitvo", En ese tiempo, conocié a su actual marido, Pierpaolo, que estaba divorciado. En el verano del afio 2000, en una Roma invadida por miles de jévenes que acudian a la JMJ con san Juan Pablo ll, sucedié de nuevo algo decisivo: “Estébamos en la moto y, en un seméforo, mi mirada se cruz6 con la de uno de esos papaboys Vi en sus ojos una alegria que no era la mia. Yo lo tenia todo, ero no esa frescura en los ojos" un ano después, una antigua amiga la invité a una catequesis a la que no fue. Ya convivia con Pierpaolo, y esperaba su primera hija. Su amiga, Laura, continio habléndole “de un Padre Celeste que me queria como era’, hasta que, por fin, la gota que horadaba la roca vencié y Fazi se deshizo de su coraza, En 2002 se Confes6. Con los ojos inundados en lagrimas, cuenta que ese dia se sintio amada, liberada y perdonada. “Supe que el mayor error que cometi fue el de separarme de Dios y no reconocerme como su hij. Inicié entonces un camino de conversién en soledad, sin Pierpaol me decian que si el Sefior llama a uno de la fami acaba llamandolos a todos”, Y asi fue ‘Aunque todavia no podian casarse por la Iglesia, Pierpaolo habia solictado la nulidad. Otro paso que afianzé su amor mutuo fue la decision de vivir castamente tras una peregrinacién a Medjugoje: “Vivimos un noviazgo casto, aunque ya teniamos dos hijos, porque El te permite vivirlo asi, ste fias”, En la primavera de 2008, llegé la sentencia de nuldad y, el7 de julio de 2008, se casaron. Fazi es hoy madre de Cuatro hijos; la pequefia, Maddalena, tiene apenas ocho meses. Cuando conversamos con ella, nos cuenta que acaba de darle el pecho y que la ha dejado a cargo de su madre. Explica que Dios sigue actuando en su vida Porque, asegura, era una madre de cardcter duro: “Tenia rabia. Creo que queria hacerles pagar a mis hijos mi eleccién, porque ellos tuvieron el derecho de nacer y su hemano, No. Esto lo he entendido después", afima liberada, “Beatrice, en este Jubileo de la Misericordia, zqué significa esta palabra para ti?" le prequntamos “Significa ‘sigueme tal y como eres’. Signitica que Dios es fiel y sigue cumpliendo sus promesas Nos despedimos de ambos, de Beatrice y Pierpaolo, con la certeza de que Dios hace nuevas todas las cosas, Nos cuentan que tienen que marcharse a una parroquia para impartir catequesis. Cuatro hijos y una vida en la que no dejan de testimoniarla obra maestra’-como afirma Beatrice- que Dios ha hecho con ellos."Pero gcémo Podeis con todo?". Se miran con complicidad y Beatrice sentencia: “Al que mucho se le da, se le exigira mucho, y al que mucho se le confia, se le exigiré mucho mas" eS BEATRICE FAZI ACTRIZ ITALIANA, Misi6n + 47 leer, releer, orar y difundir