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An hoy, nombres como Francisco de Miranda, Jos de San Martn, Bernardo OHiggins y
Simn Bolvar resuenan en la memoria colectiva de la diversidad de pueblos presentes en
Latinoamrica. Vemos su existencia trascender el plano material, siendo sus gestas
enseadas y transmitidas de generacin en generacin, fijadas como smbolo de la tradicin
republicana del continente Americano. Nos disponemos a analizar las figuras de Simn
Bolvar y Jos de San Martn, dos individuos sumamente interesantes y problemticos de
definir.
Las turbulentas aguas del Mediterrneo a inicios del siglo XIX Europeo, comprueban una
dinmica geopoltica altamente activa, donde la doble revolucin (Industrial y Francesa) y
las sucesivas guerras Europeas resultaron en cambios estructurales. El mapa de Europa se
rehzo sin tener en cuenta las aspiraciones de los pueblos o los derechos de los numerosos
prncipes despojados en una u otra poca por los franceses, sino atendiendo ante todo el
equilibrio de las cinco grandes potencias surgidas de las guerras: Rusia, Gran Bretaa,
Francia, Austria y Prusia.1
As, este nuevo paisaje Europeo influy en el panorama Americano, debilitando an ms la
relacin entre la metrpoli Hispnica y sus colonias. Son las lites criollas quienes,
1 Hobsbawm, Eric. La era de la revolucin 1789-1848, Editorial Crtica, 2013,
Espaa, p.108.
A su vez, Simn Bolvar fue criticado por Karl Marx, expresando que hubiera sido pasarse
de la raya querer presentar como Napolen I al canalla ms cobarde, brutal y miserable.4
En otro pasaje, escribi
Como la mayora de sus compatriotas, era incapaz de todo esfuerzo de largo aliento y su dictadura
degener pronto en una anarqua militar, en la cual los asuntos ms importantes quedaban en manos
de favoritos que arruinaban las finanzas pblicas y luego recurran a medios odiosos para
reorganizarlas.5
Pero esta relacin dialctica vuelve a complicarse cuando se argumenta que Marx podra
haber estado mal informado al escribir tan airadas opiniones en contra de Bolvar por
basarse en una fuente inglesa. A modo de reflexin final, ms que una pregunta
concluyente, es en nuestra libertad de pensamiento donde radica la decisin de nuestra
percepcin para con los constructores del republicanismo latinoamericano.
Lucas Zapata Alegra, 20/IV/2016.