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‘Arch Inst Nac Neurol Neurocir (MEX) 1995;10:74-81. Revisisn Histérica Los Tratamientos Psiquidtricos en México Durante el Siglo XIX Ignacio Ruiz Lépez!, Diana Morales Heinen? Bx jefe de ta Clinica de Trastomos del Estado de Animo, INNN, Profesora Titular de Psiquiatréa de Posgrado, Universidad La Salle. 'RESUMEN: El presente trabajo preseata un panorama general de los diferentes tratamientos usados principalmente en los dos Hospitales més importantes en México durante el siglo XIX; San HipGlito (hospital slo para varones) y El Divino ‘Salvador w Hospital de la Canoa (exclusivamente para mujeres dementes). Se Jescribe fa influencia del tratamiento moral en México, la minimizacién de la estigmatizaciéa de los enfermos, la creciente sensibilizaci6n por mejores condiciones de vida € higiene, el interés por que los enfermos realizarén actividades constantes y creativas as{ como los diferentes ‘watamientos que se tenfan a disposiciOn en esa época (por ejemplo: aislamiento, restricci6n fisica, alimentaci6n forzada, hhidroterapia, aplicacién de corrientes asoendentes y descendentesy la farmacoterapia). Pese alas méltiples deficicncias que ‘pueden constalarse es importante destacar que durante este perfodo predomin6 el interés por mejorar en su conjunto, todas [as situaciones de los enfermos mentales. Palabras clave: Hospitales psiqulétricus; México siglo XIX, Tratamientos psiquistricos. ABSTRACT: The present article describes the therapy use inthe most important Psychiatric hospitals in Mexico during the 19% century, such as San Hip6lito Hospital (for male patients), El Divino Salvador Hospital or Hospital de la Canoa (for ‘demented women only). The influence of moral treatment, tbe minimization of stigmatism, the growing sensitivity towards ‘the improvement of hygienic conditions, are described. Other influences and treatments that existed in that era, such as ‘requiring that patients be involved in creative actvitiesor be submitted to treatment regimens including solitary confinement, physical restraint, forced feeding, hydrotherapy, electrotherapy with ascending anddescending currents and pharmacotherapy are also presented. Although the theories of treatment and regimens themselves were quite deficient in eliciting positive ‘esults, itis important to point out that during this period the predominant underlying factor was the desire to improve the situation ofthe mentally il. Key Words: Psychiatric hospitals, Mexico 19th century, Psychiatric therapy. ‘ctualmentelapsicofarmacologia nos brindauna vision muy diferente de los trastomos psiquiiricos y sus consecuencias, haciéndonos olvidar Jos grandes sufrimientos por los que atravesaron los enfermos menales, ‘en laantgiedad y de la dificultad de su manéjo. ‘Ademés, poco se menciona hoy en da respecto a los ‘ratamientos. psiquidtricas efectuados en el siglo pasado, ‘ocasionalmente se habla de tratamiento moral, del uso de la hipnosis o del magnetismo animal, permaneciendo sin ‘uestionar la manera de enfrentarse de los médicos a la enfermedad mental en esa época. Adn con dificultad el esnudiante de psiquiatra conoce la historia de los tratamientos ‘mplementados en este siglo como son la malarioterapia de ‘Yon Jauregg, y se defiende penosamente al hablar de 1a insutinoterapia de Sakel, del Cardiazol 0 Ia terapia clectroconvalsiva y dela psicocirugia, asta entrar alaera de Jos primeros psicotérmaces, base principal de su actual arsenal terapéutico médico!, Siees dificil conocer los tratamientos realizades hace un siglo por la psiquiatfa mundial, més lo es conocer tos Dr. Ignacio Raa Lope ‘Correspandendas Departamentade Genética, ‘tls NacinaldeNeraloglay Neuere Invrpteur 387, Cal La Fama México DP, CP, 1” tratamientos propios de los médicos mexicanos enesaépoca. tratamiento Moralen Europaseiniciacasisimuliimeamente cn Italia, Francia e Inglaterra. Vicenzio Chiarugi en I publicasu obra “De Iaenfermedad mental” en losaos 1793- 1794, enel cual seftala que se debe honrar al enfermo mental ‘como un ser bumano igual a todos y consolario tanto como sea posible desde el punto de vista médico, ademas de tener ‘una historia clinica detaliada del paciente y de su familia. Phillipe Pine elimin6 el uso de cadenas para controlar a tos ‘enfermosmentales publicandosu valiosa obra Traité médico- hilosophiquede 'lienation mentale en 801, ibeotradcido en 1804 en Madrid? y que fuera le{do posteriormente por los édicos mexicanos segén constaporlosex libris olasfirmas, de sus poseedores durante esos afi, encontrados en ciertos ‘volimenes en Méxi Los elementos clavesenel Tratamiento Moral fueron: El final de la restricci6n fisica, probibiéndose explicitamente el uso de cadenas. La minimizaci6n del estigma. El énfasis sobre la actividad constante y creativa, camo era el cuidado 4e ls jardines, método que se iniid en el hospital de San Hipolito en el afio de 1879; también tejer, escribir, dibujar y leer. Acopio de condiciones saludables y de limpieza. La inspecein constant, abiera y pica de os hospitals con laff de mejorar el servicio4, Ruiz Ll, Morales HD, Los Tratamientos Psiquisiricos... 1 Tratamiento Moral fue conocido y comprendido pparcialmente en nuestro pats aumentando la compasin y el fespeto humano en el tratamiento de la enfermedad mental, aunque eventualmente tenia que haber Hamados de atencién alasociedad -como el efectuado por Ramén Alfaroen Mayo de 1866 al publicar una breve noticia sobre el hospital San Hipdiito en la Gaceta MédicaS, o el hecho por el Monitor epublicano en 1878 denunciando los abusos que cometia el prefecto del hospital y un ao mas tarde, e19 de agosto otra nolaenel Trait D’union. En 1890e1 Universal_mencionala \eficiente alimentacién de los enfermos y en 1897 La Patria refiere Ja mala atencién a las enfermas del Hospital de la Canoa®, Los dos principales Hospitals Psiquidtricos que habia ‘en México eran el San Hipélito y El del Divino Salvador, también conocido como el Hospital de ta Canoa 0 de las mujeres dementes. El Hospital de San Hip6lito -exclusivo para varones- fue fundado en 1567 en la ciudad de México, dedicado al cuidado de los enfermos mentales. Su fondador Bernardino Alvarez, sevillano, que iis a la Nueva Espatia, desempetio el oficio de soldado y posteriormente se dodic6 a ‘una vida licenciasa, hasta que lajusticia cay6 sobre dl, escape ‘asu sentencia y huy6 al Perd. Regreso 10 afios despuss, rico, ‘Afios mds tarde sufri6 una crisis de arrepentimiento, deci ‘fundar una institucién donde sedieraamparoa todosaquellos ‘que no podian valerse por si mismos y creé una orden Dospitalaria-los Hip6lits- para atender su fundacisn, EnelsigloX Vise considerabaunhospitalespecializado en las enfermedades mentales. La orden de los Hip6litos fue suprimida el 1° de octubre de 1821 por deereto de las Cortes Espafolas, pasando a manos del ayuntamiento, pero los religiosos siguieron cuidando a los enfermos hasta 1843, pasando a manos de los auministradores. Fue convertido sucesivamente en cuartel -posteriormente se vendieroa los Dajosdel hospital y las accesorias de tos costa de laiglesia en 1842-; en 1846 fue Hospital Militar, luego fue Hospital ‘Municipal de 1847 a 1850, y més tarde fue la Escuela de ‘Medicina hasta 1853, volviendoa ser cuartel y luego fabrica de tabacos. Fin 1861 se efectuaron varias reformas, estanJo dentrode ella lade levara él unaiio despuésa los sacerdotes dementes que se enconiraban asilados en et Hospital de ka Santisima, En julio de 1864 José Maria Andrade informa a Maximiiano 1 de las coniviones deplorables en que se cencontraba la instiucién? y posteriomente los periGdicos informaban con frecuencia de la serie de problemas que cexistian en este hospital, ereando en 1877 una junta de beneficencia, lacual desaparceio posteriormente, puraguedar dos médicos y dos practicantes y era consi "uno de kos menos malos con que cuenta la Capit Por otra parte, et Hospital del Divino Salvador estaba destinado a las mujeres dementes; fue fundado en 1680 por José Sayago, carpintero, el cual acogiéeen su casa aunapriana ‘de su mujer que habia enfermado, despertando en & la ‘Preocupacién por otras mujeres en las mismas condiciones ‘comenzando.arecogerlas en su casa, recibiendo el apoyo del Arzobispo Francisco de Aguilar y Seijas al comprometerse a sostener un edificio nuevo para estas enfermas; se dice que lleg6 a ser una institucién modelo. En 1800 se reformé et ‘hospital déndosele mayor amplitud. E113 de junio de 1824 se Jes dio laconcesién de las utilidades de ma loterfa,concesin ‘que persistié hasta 1861 en que se les suspendié, perdiendo ademns todossus bienes por decreto, suffiendo desde entonces ‘carencias econémicas muy graves durante varios afios9; pero a pesar de esto, el nivel de tratamiento de las enfermas era ‘bueno; una de las causas fue que las plazas det personal médico eran obtenidas por oposicién desde mediados det XIX. Dentro de los grandes alienistas mexicanos de ese siglo ‘que se distinguieron por mejorar las condiciones de los enfermos de San Hipdlito podemos citar a: Jesés Alfaro, ‘Manuel Alfaro, Miguel Alvarado, Garrone y Navarro, Juan N. Govantes, José Ped Contreras y Romén Ramirez. En ‘cuanto al Hospital dela Canoahay que resaltar los trabajos de ‘Miguel Alvarado principalmente, a Francisco P. Echeverria, Angel S. iglesias y a Manuel Alfaro!0,7.6, Por desgracia, en amas instituciones rein la idea de {queel Hospitaleraunlugaparuel ratamientoexclusivanente, \cjando olvidada la investigacion y por consecuencia ta censefianza, siendo principalmente méiicos uidadores de Joos, hata que por vez primera Miguel Alvarado -que tenfa més de 30 afios watando enfermos mentales- inicio con el. ‘curso de Enfermedades Mentaes en 1890, el cual du slo ‘ese ato, pues fue sorprendidopor lamuerte3peronuevamente el 22 de mayo de 1897 el Dr. José Pesn Contreras dio la ‘htedrade enfermedades mentalesenun curs teérico-prictico en los Hospitales de San Hipdlito y del Divino Salvador, siendo esta la cuna de los psiquiatras mexicanos del siglo xx Un error profundo que debemos evitar es el de tratar de ideotificar las patologias descritas durante ese siglo -pues muchasdeellasson exclusivamente sintomdticas-connuestras ‘entidades actuales, ya que los términos y las descripciones utilizadas podrian inducimos al error, aunque es obvio que bobservaron casitodas las patologiasexistentesen aactualidad excepto el SIDA- pero no con nuestra mentalidad de finales de siglo vein La primera forma de tratamiento que se recomendaba a los enferinos mentales era el aislamiento en el hospital, excepto aquellos que tenian una afeccién ligera de las facultades mentales o cuando el trastomno mental era de poca 75 ‘Arch Inst Nac Neurol Neurocir (MEX), Vol. 10, No. Mayo-Agosto, 1995. ‘duraci6n; Jevolviendoal pacienteal centro familiarhastaque Ja convalecencia fuera franca. Las visitas, mientras tanto, se Permitfan al inicio de ésta, exclusivamente los domingos hasta el afio de 1865, pero posteriormente se permitan dos veces por semana, teniendo el cuidado de observarelefecto ‘que es produciaa los enfermos,rtirindose tan pronto como lasideas delirantes reaparecierano ante elmenorreisoceso en <1 padecimniento que se tratara, La restricciGn fisica estaba indicada cuando el enfermo se servia de las manos para herirse asf mismo oa los demés, destrozar los objetos que encontrabaa su paso odesgamrar sus vestidos, fo que ocasioné que en San Hipélito algunos cestuvieran con camisa de fuerza todo el tiempo 0 de 10 ‘contraro permanectan desnudos, pues siempre destrufan sus ropas a pesar de la vigilancia, la cual era muy limitada © incompetente:no pudiendo dedicarse al cuidadoexclusivode algén enfermo ya que se abandonaban a todos los dems. La hidroterapia, se practicaba bajo diversas formas, siendoel baiioel medio terapéuticoal que se recurria com ms frecuencia; podian ser de dos tipas: los tibies y los frios. Dentro de lo tibios se encontraban los ordinarios, que tenfan tuna duracién de una a dos horas, rocomendados en especial ‘paralamantaincurable. Los prolongados tenfan unaduracion ‘decinco a doce horas yrara vez hasta dieciocho. Se intentaba, que la temperatura estuviera entre 25 a 30 °C, recomendao éstos como sedantes en las personas j6venes y vigorosas, con ‘man‘a reciente y agitackin corporal. Se menciona que se les hhacfa llegar un chorro de agua fra continuo sobre la cabeza, mientras que el enfermo permanecfa en el baflo, aunque en San Hipdlito se les ponfa una compresa que envolvia la cabeza y 5 les vertfapor medio de una regadera cada cuarto ‘o media hora- agua frfaen cantidad suficiente para mantener hndimeda la compresa, esto por la idea de impedir a afluencia ‘de una cantidad mayor de sangre hacia el cerebro. Estas tinas tenfan en ta parte interior argollas por donde sepasabanlazos para sujetaralenfermo,elcual generalmente «estaba muy agitado. En la parte donde descanzaba la cabeza tenfa una escotadura para recibir la nuca y poder aplicar afusiones frias sin mezclar las aguas; este tipo de bafos eran ‘poco aplicados por los cuidados especiales propios de los y Jos escasos fondos con que contaba San Hipolito. Los bafios frfos se dividfan en: afusién, inmersi6n y resign, Lositamados de afusin, también conocidos como allos ‘decubos, seaplicaban acostando al enfermosobre una tarima, en posicién supina, sujeto de los pies y manos, arrojando ‘desde una distancia cubos de agua sobre la parte posterior a la cabeza, cuello y dorso, variando el mémero desde unos ‘cuantos a cien 6 més en algunos casos, pudiendo repautirios por la mafiana y por la tarde segin menester. Sus 6 ‘contraindicaciones eran cl agotamiento severo y la epilepsia. ‘Aunque fueron descritos como un medio para lograr ta ‘mejorfa o la curacién, su uso desapareci6 antes de iniciar el ‘siglo XX, gracias al feliz. correctivo de los médicos de esa ‘época que decfan “la locura no se disuelve en el agua”! Los bai de inmersiGn se daban en San Hipélito mis bien como higiénicos no con el fin curativo, una vez por semana, se hacia entrar a una pila poco profunda a los ‘maniacos, dementes y alos iditas, dejindolos de ocho a ‘quince minvios, vigilados por enfermeros. A los gatisias y ‘araltcos se les ponta después de estos bafios em las partes del cuerpo que estuvieron en contacto con la orina y las materia fecales un polvo de licopodio 0 de arroz (como bsorbente) con una boria suave 0 un soplete para prevenir itvitaciones. Losbaiios de presin eran aplicados mediante un aparato dedosatmésferas delsistemaFleury, estandoconstituido por ‘unaduchaascendente,otraborizontal y unaregadera,pudiendo dirigira a diversos puntos del cuerpo, ademés de poder regular la presiGn mediante tubos de diferente calibre; eran ‘ndicados para la mania, la “locura’ epiléptica, al inicio de la locura paraiitica mejor conocida como pardlsis general Drogresiva, en lamelancotia reciente y en la locura histérica, ‘Su tiempo de aplicacién era de 8a 15", para laregadera y de 10.230" para la ducha horizontal con el tubo mas delgado. La mejor hora para la apticacién de la hidroterapia se consideraba que era en las mafianas de 69 en ayunas, yen ‘aso de no ser posible podta sera otra hora siempre y cuando no fuera después de una comida. En muchos casoss¢ buscaba ‘una reacci6n de rubicundez.en la piel coneste método, por lo ‘que terminando los bafos se friccionaba con una toatla ida, para favorecer este tipo de reacciéa y si no se producta se ‘empleaba un cepillo especial, posteriormente se le ponta a hacer algtin ejercicioo que efectuara un paseo para mantener esta reaccion, ‘Dentro de los juegos como elementos de distraccién se ‘menciona que en San Hip6lito se reducfan a un juego de bbolos, depelota algunas obras de lecturamisticasincompletas yy a1 solar de hortaliza a los que no se pola Nevar a todos Jos enfermos que les convendsa, porla escasa vigitancia que cexistia, Carecfan de los tiles mas insignificantes para poder \iujar, aunque existia interés de efectuar esta habilidad por prrte de Ios enfermos. Haba algumos aparatos de gimnasia, ‘en muy mal estado, por lo que fueron retirados antes del fio 1880, a pesar de la gran distraccién que a muchos les proporcionaba, en especial alosde ckasesacomodadas yaque Tasotraslabores eran consideradas serviles. Cieriondimerode cenfermos sabia tocar algin instrumento de miisica, 1o cual provocaba gran distracci6n tanto al que la ejecutaba como al ue escuchata, sin embargo, sdlo se les proveta de los mas simples insizumenios, ante el temor que los dafaran 0 destruyeran!2, se menciona ademés la influencia poderosa ‘de ka misica suave, principalment el piano, para guarda el ‘orden y mantener tranquilosa Tos asilados. Las prcticasreligiosas estaban suprimidias y nose les permit salir apascar. Enel hospital para locos de Puebla se ‘umaba a algunos enfermos para salir a pasear euando su «stadolo permit, siemprebgjotavigilanciade Joscetadors. Sedecfa ademés que las familias reclanabaninmediatamente ‘su parente cuando notaban en 61 algén alvio, el cual era auchas veces por desgracia aparente © pasajero, Para las prdcticas religiosas se seguian los principios de Guistain!3 sendoconsideradas“entedichas” al nicio de odaenfermedkal mental, pero se consideraba stil en los enfermos que observatan sus deberes religiosos regularmente y sin xageracin, sin Jevocién desmedia. En los casos erinicos servian como un medio de diseiplina y moralizacica. La coufesién se consideraba eficaz en la declinaci6n de la ‘enfermedad, haciendo conocer muchas veces los progresos de la curacisn, Los viajes se decia que eran tiles en especial en la convalecencia, pero era una recomendacidn de la que se abusaba, estando principalmente al alcance de las personas acomodadas. Por otra parte, siguiendo los principios de Rabuteau se aplicaron los revulsivos cuténeds, entendiendo bajo este ‘nombre “alos agentes por medio de lascuales se provoca una itsitacién local con el objeto de desalojar na irvtacion :morbosaencontrandoen este grupo los medios terapéuticos Jos vejigatorios, también conocidas como productores de vejigasen la pel, ls moxasosustancias combustibles que se

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