Los grandes cambios en la historia de la humanidad, generalmente son el

producto de pequeños esfuerzos y grandes compromisos, hechos por

hombres y mujeres que, en muchos casos, pasarían desapercibidos por la
vida de no ser por la firmeza de sus creencias e ideales. La historia
venezolana está repleta de personas que contribuyeron de una y de otra
manera en la construcción de la Patria que hoy tenemos.

Los más destacados personajes de nuestra historia provienen, en su

mayoría, de las más altas clases sociales o la clase media. Su lucha siempre
se ha desarrollado en base al mejoramiento de sus condiciones y a la
igualdad de privilegios. Es el caso de los bancos criollos, que lucharon
incansablemente por obtener el poder político y la igualdad de derechos con
respecto a los blancos peninsulares, que eran los provenientes de España,
quienes por ser designados por el Rey tenían mayores privilegios, a pesar de
no haber nacido en esta tierra. Entre estos luchadores se puede mencionar a
Simón Bolívar, Manuel Gual y José María España, José Antonio Páez, entre
otros.

Pero no sólo las altas clases sociales lucharon por la independencia, también
los marginados y excluidos de la sociedad lucharon por obtener la libertad y
lograr la igualdad.

El Estado Falcón tiene una lista de personajes que se encargaron de dejar

sus nombres esculpidos en la historia de nuestro país, marcando una huella
profunda, con la organización de levantamientos y protestas que
trascendieron, marcando un precedente y resquebrajando de a poco la
estructura colonialista y desigual que se imponía en Venezuela, hasta lograr
la libertad de nuestro país. Pero esto no se trato de una lucha de días ni de
meses. Fue un gran esfuerzo que demoró años para ver los resultados, del
cual muchos de sus precursores no pudieron observar su concreción. Desde
la Eternidad quizás hoy verán si valió o no la pena convertirse en mártires
por un sueño.

Uno de los personajes más destacados en nuestro estado fue José Leonardo
Chirino, un negro, o mejor dicho un zambo libre nacido en Curimagua el 25
de abril de 1754. Su padre, un negro esclavo al servicio de la familia de
blancos criollos Chirino (de aquí su apellido), y su madre una aborigen, por
esta razón nace libre.

Se casó con una esclava de nombre María Dolores, propiedad de José

Tellerías, rico comerciante y síndico procurador de Coro, además de dueño
de la tierra que trabajaba a jornal. Tuvo tres hijos: María Bibiana, Rafael
María y José Hilario. Por ser hijos de una esclava, estos nacieron esclavos.
Motivo más que suficiente para procurar la libertad de los esclavos. A pesar
de haber nacido libre, no puede disfrutar su libertad a plenitud; toda su
familia es esclava.

Pese a esta situación José Leonardo supo ganarse la confianza de su patrón

quien le permitió acompañarle en uno de sus viajes a Haití, que para aquel
entonces era conocida como el Santo Domingo francés.

En este viaje, se pone al corriente de las luchas sociales que se emprenden

en otros países, de lo que es la Revolución Francesa y sus ideales: igualdad,
libertad y fraternidad; de todo esto tiene conocimiento al escuchar las
conversaciones de su patrón con otros comerciantes. Además de esto,
conoce de la situación política de la isla donde los negros esclavos se habían
levantado contra los blancos y estaban luchando con éxito para obtener su
libertad.
Debido a todo lo observado durante el viaje, Chirino regresa a Venezuela con
la mente llena de ideas de libertad e igualdad, esperanzas de un futuro mejor
para su familia y sus parientes. Empieza a planificar la forma de lograr la
libertad de los negros.

Por tal motivo empieza a reunirse con José Caridad González, un negro que
lideraba a un grupo de negros fugitivos de Curazao, y que eran considerados
libres al llegar a Coro. Además de esto González ganó un litigio de tierras a
favor de los negros, con lo cual aumentó su popularidad. Este personaje era
un hombre culto, que hablaba tres idiomas: francés, africano y castellano.

Además de todas las ideas de lucha por los derechos y la libertad de los
esclavos, que se manejaban, la gota que rebosó el vaso fue la llegada de un
nuevo recaudador de rentas: Juan Manuel Iturbe. Éste se empeñó en cobrar
con el mayor rigor todas las contribuciones que ordenaba el derecho fiscal
español, pero que en Coro hacía mucho que no se empleaban. Iturbe
cometió muchos atropellos, que exasperaron especialmente a las clases
labradoras. De modo que esta situación, aunada a las nuevas libertarias
importadas de las islas y oídas en las conversaciones de los señores, así
como el natural resentimiento de los esclavos hacia sus amos, hicieron que
hubiera un ambiente propicio para una revuelta.

Es entonces que Chirino, aprovechando toda la situación a su favor consigue

partidarios de entre las mismas filas de los seguidores de González. José
Leonardo aprovechó todas las potencialidades de González en su favor,
convenciendo a los negros que le seguían de unirse a su proyecto de lucha
social. La noche del 10 de mayo de 1795 se concreta en una revuelta
armada desde una hacienda llamada Macanillas, en un baile que habían
organizado como pretexto.
Negros y mulatos, encabezados por Chirino, se declaran alzados,
proclamando la libertad de los esclavos, el establecimiento de lo que
llamaban la Ley de los Franceses, es decir la República; eliminación de la
esclavitud e igualdad de las clases sociales; supresión de los privilegios y
derogación de los impuestos de alcabala. En términos generales, el objetivo
de los insurrectos era tomar todas las haciendas de la zona, reclutar
hombres, asegurar el paso hacia Coro y después hacer entrada a esa
ciudad. Chirino animaba a su gente con la prédica de que González se
alzaría en la ciudad en cuanto ellos se acercaran.

Ejecutan a José Tellería; a Pedro Francisco Rosillo; a José María

Manzanares y a muchos otros potentados y siervos de éstos, que les
salieron al paso. Luego de perpetrar tales asesinatos y saquear sus
propiedades, se entregaron a la celebración demorando la toma de Coro, con
lo cual dieron tiempo a las autoridades de organizar la defensa.

Cuando intentan tomar la ciudad de Coro, son repelidos y derrocados por el

Teniente de Justicia Mariano Ramírez Valderraín. Las autoridades dieron
muerte a González en Coro, sin haberse probado su intervención en la
revuelta. Las autoridades criollas, ante tal situación, organizaron la defensa y
la represión de los conjurados.

La persecución y los crímenes realizados, fueron las acciones para

atemorizar a los esclavos y a los grupos en servidumbre, para evitar nuevos
motines tanto en la región coriana como en otras zonas de la provincia de
Venezuela.

Entre los días 10 y 12 de mayo, más de 100 negros fueron prisioneros, 86

fusilados sin previo juicio. El mismo 12 de mayo siete esclavos fueron
degollados y nueve más al día siguiente. El día 18 de mayo se ajusticiaron a
23 esclavos y cinco días después, 25 esclavos contaron con la misma suerte.

De toda esta situación, José Leonardo Chirino logra huir de la persecución y

esconderse de la autoridad criolla en la sierra falconiana. Tres meses
después es traicionado por un conocido, quien da declaración de su
paradero a las autoridades. Es apresado en Baragua en agosto de 1975.

Después de ser sometido a juicio en Caracas, es condenado a morir en la

horca por la Real Audiencia. La sentencia fue ejecutada el 10 de mayo de
1796. Su cabeza y sus manos se exhibieron en jaulas de acero, como una
forma de infundir temor en la población.

Las autoridades de aquella época no imaginaron quizás la tremenda

repercusión que esta insurrección tendría en el acontecer político, económico
y social del país. No se trató de una lucha estéril. Nadie pudo pasar la página
y simplemente olvidar lo que un personaje de tan poco valor para la sociedad
de la época había logrado. Porque aunque muerto él y muchos de los que le
acompañaron, la semilla de la libertad había sido sembrada, la lucha por la
igualdad apenas había dado un paso, pero un gran paso.

Desde ese entonces fueron numerosas las luchas por los mismos objetivos:
establecimiento de la república, igualdad social, libertad de los oprimidos.
Hoy por hoy los libros de historia lo mencionan como cosa del pasado, pero
de un pasado que hizo posible lo que somos hoy. Esta insurrección es
considerada como el primer movimiento pre-independentista de nuestro país,
como la primera piedra que constituye las bases de la República libre e
independiente que hoy disfrutamos.
Este movimiento, de hondas raíces sociales, llamó la atención de las
autoridades coloniales sobre las diferencias existentes y las injusticias,
particularmente en lo tocante al cobro de impuestos a las clases humildes.
Aunque fracasó, no fue estéril, porque luego de ella se redujeron los
impuestos y se cobraron con sentido más humano.

No fue una simple locura de un “nadie” que quiso hacerse de un nombre, fue
el esfuerzo de un hombre que no se conformó con pensar que las cosas
quizás se pueden cambiar si alguien hiciera algo, sino de un hombre que se
armó de valor y decidió cambiar las cosas aún a riesgo de perderlo todo,
porque eso hacen las personas exitosas.

Nadie logra el éxito esperando a que todas las condiciones sean ideales, o
deteniéndose a pensar que quizás alguien haga algo por resolver eso que
todos sabemos que esta mal. El éxito lo alcanzan aquellos que saben qué
hay que cambiar, cómo se puede cambiar, y se esfuerzan por cambiarlo.

Nuestras raíces no determinan lo que seremos, lo determina nuestra

voluntad y nuestro esfuerzo, si estamos dispuestos a entregarlo todo por
nuestros sueños y estos son loables, la historia nos premiará con un nombre,
y tendremos la satisfacción de bajar al sepulcro convencidos de que en
verdad vivimos. Seamos ejemplo de lucha y de gallardía, como lo fue José
Leonardo Chirino.
 REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA
I. U. T. JOSÉ LEONARDO CHIRINO
HIGIENE Y SEGURIDAD INDUSTRIAL
PROFESOR: LIC. JUSTO BARRAEZ
TERCER SEMESTRE

VALENTÍA Y GALLARDÍA CON SANGRE FALCONIANA

JOSÉ LEONARDO CHIRINO

AUTOR:
ELIER REVILLA
C.I. 15.593.659

PUNTO FIJO, JUNIO DE 2009

 FUENTES CONSULTADAS

 Centro Nacional de Historia. La insurrección de José Leonardo

Chirino en la Serranía de Coro. (Disponible en:
http://www.cenhisto.gob.ve)
 Wikimedia Foundation, Inc. José Leonardo Chirino. (Disponible en:
http://es.wikipedia.org/wiki/Jos%C3%A9_Leonardo_Chirino)
 Saab, Layla. La Rebelión de José Leonardo Chirino. (Disponible en:
http://www.minci.gob.ve/reportajes/2/5566/la_rebelion_de.html)