You are on page 1of 19

EL MATE ASESINO

Sandro Centurión

©2009 by Sandro Centurión


Formosa. Argentina
Todos los derechos reservados
sandrocenturión@yahoo.com.ar

Página | 1
http://cuentossinsalida.blogspot.com
Entonces le pregunto dónde estuvo usted a la hora en que mataron a la
víctima, y Rosendo me responde que estaba en su casa tomando mate con
unos amigos. Ésa es su mejor coartada, y a mí me pica todo el cuerpo,
porque cómo alguien puede estar tomando mate tranquilamente en su
casa y al mismo tiempo asesinar sin piedad a su vecino. Porque el muerto
es nada menos que su vecino y se conocen de toda la vida y en el barrio
todos saben que no solo no se querían sino que habían jurado matarse.
Se sabía que Rosendo le echaba la culpa a Artemio López, el occiso, de que
Mónica, su mujer, lo haya abandonado, según Rosendo alguien le había

Página | 2
http://cuentossinsalida.blogspot.com
llenado la cabeza para que lo dejara. Vaya uno a saber por qué pero
Rosendo apuntó hacia su vecino como el autor de aquella injuria, esa
sospecha, acaso, condenaría para siempre la suerte de la víctima. El caso
es que aunque no se pudo demostrar la veracidad del chisme un día la
mujer dio un portazo y se fue a vivir con la hermana que vive a unas pocas
cuadras.
Al tiempo los tres aparecieron por la comisaría: Rosendo para denunciar a
Artemio López, su vecino, por calumnias e injurias, Artemio para
denunciar a Rosendo por lo mismo más daño moral, decía que él no era

Página | 3
http://cuentossinsalida.blogspot.com
un chismoso y que si la mujer lo abandonó habrá sido porque se dio
cuenta de que era un inútil, seguramente encontró algo mejor. Y Mónica
para denunciar que ya no vivía en esa casa pero que le pertenecía y quería
que Rosendo la desalojara lo antes posible. Rosendo se empacó y no
estaba dispuesto a irse. La feliz pareja no tenía hijos asi que el tire y afloje
fue por la casa, como suele ocurrir en estos casos.
Así fue que Rosendo y Artemio se prodigaron un profundo odio. Sin
embargo no basta con que dos personas se odien para que alguien
termine muerto. En el mundo no habría tanta gente si así fuera. El caso es

Página | 4
http://cuentossinsalida.blogspot.com
que para todos y sobre todo para mi, Inspector Arístides Rojas,
representante exclusivo de la ley en la localidad, el principal sospechoso
de la muerte de Artemio López, era Rosendo, lo decían sus ojos, su media
sonrisa que aparecía al terminar cada frase, un leve temblor en la mano
diestra y su forma de moverse en la silla. Todo su cuerpo lo delataba, sin
embargo tenía una coartada efectiva por lo simple que resultaba ser. A las
cinco de la tarde, la hora en que mataron a su vecino con un golpe en la
cabeza, había estado tomando mate en su casa; Aquello desviaba la
investigación hacia otros lados y yo no estaba dispuesto a permitirlo. Si

Página | 5
http://cuentossinsalida.blogspot.com
acaso el sospechoso hubiera estado sólo podría considerarse una mentira
pero tenía testigos que afirmaban bajo juramento haber estado tomando
mate con él. Uno, el más convencido de la inocencia del sospechoso era un
oficial de mi seccional, un recién llegado de la Escuela de cadetes; había
sido convidado con unos mates a la hora en cuestión, cuando llegó al
domicilio a ofrecerle una rifa que estábamos organizando en la comisaría
y Rosendo de buena voluntad y como siempre lo hacía compró dos
números, el 17 y el 48, la desgracia y el muerto que habla, casualidad
¿no? Otro testigo era una prima del concejal Fernández, que estaba

Página | 6
http://cuentossinsalida.blogspot.com
ofuscada y quería escaparse por la ventana para que nadie la viera en
medio de aquel escándalo. Ella se había acercado a la casa del sospechoso
como parte de una reunión de la Asociación Cooperadora de la escuela
que justamente era presidida por Rosendo. De eso se trataba la cuestión, a
la hora del crimen el sospechoso y otras cinco personas integrantes de la
comisión directiva de la cooperadora de la escuela del barrio se reunían
en la casa de Rosendo, que resulta ser el presidente de la comisión, para
deliberar acerca de las acciones a realizar para recaudar fondos y así
poder comprar ventiladores nuevos para las aulas.

Página | 7
http://cuentossinsalida.blogspot.com
Entonces mi sospechoso tenía testigos que juraban haber estado con él
esa tarde en su casa tomando mates; hasta había un acta confeccionado
acerca de lo que se había tratado en la reunión y al pie firmaban los
asistentes. Entre ellos Rosendo quien incluso se había asegurado de que
se lo nombrara permanentemente en el acta y a la hora de la firma la
había aclarado con imprenta mayúscula y había agregado su DNI.
Me pasé horas leyendo y releyendo esa acta en busca de algún indicio que
me revelara algo inusual. "En la ciudad de Buena Esperanza siendo las
17,00hs del 25 de abril de 2009 se reúnen los Sres. miembros de la

Página | 8
http://cuentossinsalida.blogspot.com
comisión directiva de la Asociación Cooperadora de la Escuela N°519 con
el objetivo de analizar las acciones pertinentes a llevarse a cabo para la
compra de seis ventiladores de techo...bla, bla, bla" nada me decía aquel
papel que no me hubieran dicho ya el sospechoso o algunos de los
testigos.
Me dediqué entonces a analizar a la víctima. Acá no tenemos equipo
científico que analice el cadáver. Todo se hace con voluntad pero con el
mínimo de recursos técnicos. A primera vista el muerto había recibido un
fuerte golpe en la cabeza con un objeto contundente, de tal magnitud que

Página | 9
http://cuentossinsalida.blogspot.com
había muerto en el acto. Fue encontrado en el patio trasero de su casa
tirado en el piso, de lado, como si se hubiera caído del sillón plegable en el
que momentos antes había estado sentado, también, tomando mate. El
termo había caído al suelo y estaba roto por dentro pero el mate apenas si
se había deslizado de la mano del difunto. Artemio era un solterón y vivía
solo. Fue Doña Juana, una vecina, que solía ayudarlo en la casa, la que lo
encontró muerto.
El hombre se habría levantado de su siesta, tomó su sillón plegable y lo
acomodó en la única sombra que había en el patio, bajo una planta de

Página | 10
http://cuentossinsalida.blogspot.com
mango cerca del tejido lindante con la casa de Rosendo.
Luego de alguna manera alguien se introdujo a la casa, tomó por sorpresa
a la víctima y le dio un golpe certero que acabó con su existencia antes de
que terminara de despertarse del todo. Sin embargo nadie vio nada
extraño. Doña Juana, es corta de vista, y vive frente a la casa de Artemio.
Ella dijo que regaba sus plantas a esa hora y que alguien la saludó desde la
vereda pero recuerda solo un bulto gordo y algo azul.
Vuelvo entonces a mi único sospechoso que según declaró estaba
tomando mate en su casa mientras a unos metros alguien mataba a su

Página | 11
http://cuentossinsalida.blogspot.com
vecino. Y les pregunto a los testigos: ¿qué tal estuvo el mate?
_ ¿Cómo? me dicen.
_ ¿Si este hombre seba buenos mates? y todos se distienden del
interrogatorio policial.
_ Es un perfeccionista dice una de las damas.
Al parecer Rosendo tenía un mate que era único, lo había traído de la
selva misionera y había sido hecho por los aborígenes, la bombilla era de
alpaca grabada con su nombre y apellido. Además tenía su propio ritual
de preparación, no tomaba un mate si lo preparaba otra persona. Era muy

Página | 12
http://cuentossinsalida.blogspot.com
exigente, no le ponía nada al mate solo yerba y de la mejor, y era muy
atento; nunca un mate frío ni viejo, cambiaba la yerba cada cinco mates. Y
entonces me pica el bichito de la inteligencia y les pregunto cuántas veces
cambió la yerba esa tarde y todos me miran raro pero me responden que
al menos tres veces. Y entonces reviso la casa y el cesto de la cocina está
vacío y voy al patio trasero y veo el montoncito de yerba junto a una
planta cerca del tejido. O sea que el sospechoso fue a ese lugar que
casualmente no está a más de tres metros de la víctima al menos tres
veces a la hora en que ocurrió el crimen; un tejido de no más de 1,5

Página | 13
http://cuentossinsalida.blogspot.com
metros de alto lo separaba de la víctima.
Me rasco la cabeza para pensar un poco mejor y examino ese pequeño
patio de vivienda urbana, apenas tres metros de fondo para hacer un
asadito o mirar la puesta de sol y extender la ropa y hacer todo lo demás.
Chico pero lindo. Algo no me cerraba. Si no tuvo nada que ver tuvo que
haber visto o escuchado algo pero sostiene que no vio ni oyó nada
anormal y que además no es de estar prestando atención a lo que pasa en
la casa del vecino, mucho menos de ese vecino. Pero yo no le creo, y me
pica la nariz cuando me acerco a él y eso es porque me miente porque

Página | 14
http://cuentossinsalida.blogspot.com
cuando alguien me miente, a mi me pica la nariz, es algo que heredé de mi
abuelo y siempre me sirvió en este oficio. Entonces recorro el patio y
pienso en un rompecabezas, no sé porqué justo en ese momento se me
ocurrió pensar en un rompecabezas y empiezo a jugar en mi cabeza con
las cosas que hay en el patio. Intento ver la escena del crimen desde ese
lado. Quiero pasar sobre el tejido pero no es tarea fácil, mi pansa y mis
años me lo impiden. Sin embargo Rosendo es un hombre atlético siempre
ha cuidado su salud. Solía salir a caminar todas las tardes. Nunca se lo vio
fumar o tomar. Un hombre recto en todo sentido. Por otra parte si acaso el

Página | 15
http://cuentossinsalida.blogspot.com
sospechoso hubiera podido trepar de seguro que el ataque no hubiera
sido sorpresivo.
Entonces encuentro unos restos de yerba en la medianera. Y la guardo en
una bolsita de plástico. Luego voy a ver cómo hago para examinarla.
Entonces creo entender lo que pasó y llamo a todos, incluido Rosendo.
_Decime Rosendo ¿qué yerba tomás?
Y él me lo dice.
_ Convidáme un mate Rosendo_ le pido.
Y él me lo convida, porque un mate no se le niega a nadie, menos a la

Página | 16
http://cuentossinsalida.blogspot.com
Policía. Y enseguida me doy cuenta que es un mate de calidad. Es pesado y
se puede sentir la tibieza del agua caliente en la mano y el aroma de la
yerba se mezcla con la madera del mate, una madera dura que nunca
antes había visto. El primer sorbo lo disfruto de manera especial porque
desde la mañana no había tomado mate aún y ya me estaba doliendo la
cabeza. Entonces cuando le estoy por devolver el mate a Rosendo me doy
cuenta que mi mano está húmeda. Tu mate está filtrando, le digo a
Rosendo y él parece sorprendido, y entonces reviso el mate y descubro
una pequeña rajadura, apenas visible. Vos lo mataste Rosendo, le digo y él

Página | 17
http://cuentossinsalida.blogspot.com
me mira serio. Lo planeaste todo desde el principio, la reunión de la
cooperadora y el acta que según me dicen ahora es la primera vez que se
hace. Todo era parte de tu coartada. Y en esa coartada la parte esencial
era el mate, como ya lo dije antes. Como siempre preparaste el mate y en
el primer cambio de yerba examinaste el lugar, enseguida te diste cuenta
de que tu víctima estaba del otro lado tan cerca e indefenso. Quizás no
haya sido la intención matarlo pero lo hiciste. Lo llamaste y cuando se
acercó al tejido le diste un matazo en la cabeza. Artemio trastabillo unos
pasos, se llevó por delante el sillón y cayó tendido, muerto.

Página | 18
http://cuentossinsalida.blogspot.com
Todos se quedaron con la boca abierta hasta el mismo sospechoso, que ya
no era sospechoso sino asesino. No le quedó más remedio que putearme y
resistirse al arresto, lo que no hizo más que jugarle en su contra. Los
agentes lo esposaron y se lo llevaron derechito al calabozo.
Al tiempo se lo llevaron a una cárcel de la ciudad y yo saqué de la caja de
evidencias aquel bonito mate asesino. Ahora que Rosendo fue condenado
lo llevo conmigo a todas partes sobre todo cuando visito a Mónica en su
casa, aunque ella no quiere que, todavía, nos vean juntos, es muy pronto,
dice, pueden sospechar.

Página | 19
http://cuentossinsalida.blogspot.com

You might also like