El pobre como revelación de Dios en el caminar catequético
Octubre, 2008-Fr. ALC-Convocatoria Catequesis
A nivel personal
¿Qué concepto tenemos del “pobre”?
¿Qué concepto tenemos de la pobreza? ¿Por qué “el pobre” modificaría nuestras propuestas catequéticas? ¿En qué medida “el pobre” es sujeto de referencia de nuestras catequesis? ¿Cómo asumo yo el “ser pobre”? Aparecida 405
Dentro de esta amplia preocupación por la dignidad
humana, se sitúa nuestra angustia por los millones de latinoamericanos y latinoamericanas que no pueden llevar una vida que responda a esa dignidad. La opción preferencial por los pobres es uno de los rasgos que marca la fisonomía de la Iglesia Latinoamericana y Caribeña. De hecho, Juan Pablo II, dirigiéndose a nuestro Continente, sostuvo que “convertirse al Evangelio para el pueblo cristiano que vive en América, significa revisar todos los ambientes y dimensiones de su vida, especialmente todo lo que pertenece al orden social y a la obtención del bien común”. Aparecida 406 Nuestra fe proclama que “Jesucristo es el rostro humano de Dios y el rostro divino del hombre”. Por eso “la opción preferencial por los pobres está implícita en la fe cristológica en aquel Dios que se ha hecho pobre por nosotros, para enriquecernos con su pobreza . Esta opción nace de nuestra fe en Jesucristo, el Dios hecho hombre, que se ha hecho nuestro hermano (cf. Hb 2, 11-12). Aparecida 407 Si esta opción está implícita en la fe cristológica, los cristianos como discípulos y misioneros estamos llamados a contemplar en los rostros sufrientes de nuestros hermanos, el rostro de Cristo que nos llama a servirlo en ellos: “Los rostros sufrientes de los pobres son rostros sufrientes de Cristo”. Ellos interpelan el núcleo del obrar de la Iglesia, de la pastoral y de nuestras actitudes cristianas. Todo lo que tenga que ver con Cristo, tiene que ver con los pobres y todo lo relacionado con los pobres reclama a Jesucristo: “Cuanto lo hicieron con uno de estos mis hermanos más pequeños, conmigo lo hicieron” (Mt 25, 40). Juan Pablo II destacó que este texto bíblico “ilumina el misterio de Cristo”. Porque en Cristo el Grande se hizo pequeño, el Fuerte se hizo frágil, el Rico se hizo pobre. “La centralidad de los pobres es inherente a la fe en el Cristo de Dios, que el el Crucificado y no otro, -el que se hizo pobre-. Mirar al Cristo puesto en la cruz nos lleva a percibirlo en el rostro de los pobres, abatidos y ninguneados. La centralidad de los pobres no es una moda, ni una ocurrencia, ni un asunto de los años 60-70….” “En efecto, aquí estamos todas las naciones geográficas, pero quizá existen otras naciones, otras comunidades no geográficas, sino humanas, que reclaman nuestra asistencia: los pobres, los marginados, los excluidos. En este mundo globalizado aumenta el número de los que son excluidos por todos. De los que son disminuidos, porque en la sociedad sólo tienen cabida los grandes, no los pequeños. Todos los desaventajados, los manipulados, …, todos estos son quizá para nosotros estas “naciones”: las naciones que tienen necesidad del profeta, del mensaje de Dios.” P. Adolfo Nicolás, s.j. Prepósito General de la Compañía de Jesús Ahora hablemos desde la Biblia
La pobreza en el Antiguo Testamento
Un mal social, un estado escandaloso que de ninguna manera debe existir en Israel (fundamentado en la religión mosaica) Como retribución: el pobre como pecador Como forma de piedad Estos conceptos nos abren la puerta para considerar a la pobreza “medio” para estar cercano a Dios, apertura interior a Dios, disponibilidad de espíritu y humildad ante Dios. La pobreze desde Sofonías hasta los Salmistas (Los pobres de Yahveh) Ayudar al pobre y luchar contra la pobreza es un acto de justicia electiva De ahí, toda injusticia es signo de ausencia de Dios, de pecado Por tanto, la pobreza es ausencia de Dios, es signo de pecado social Ante el sinsentido de la pobreza, Sofonías indica que el verdadero seguidor de Yahveh es y debe ser pobre (inicio del término “pobreza espiritual”) La pobreza en los Salmos (la espiritualidad de los “pobres”) Los pobres representan para Israel el corazón de la tradición mosaica Utilización de un vocabulario “orgánico”, más organizado, para designar tanto a la persona pobre como la espiritualidad del pobre y, por ende, el modelo de espiritualidad de todo judío piadoso Actitud existencialista: palabras como ANÍ, EBIÓN, DAL, expresan la condición de miseria de la persona y que debe estar en un estado de dependencia profunda a Dios Actitud contemplativa: palabras como ANAU expresa una actitud espiritual, del hombre que está siempre delante de Dios Actitud sociológica: palabras como PENES, PTOJOS, TAPEÍNOS, expresan una actitud de desposeimiento total, de ausencia, de estar desprovisto Actitud personal: palabras como ANAUAH expresa a la humildad entendida como mansedumbre, confianza, complacencia. Así, fe significa fidelidad; la humildad significa docilidad y aceptación Prototipos de pobre en el AT: Abraham, Moisés, Elías La iglesia de los “pobres” en los últimos siglos del judaísmo El modelo de pobre paulatinamente va cambiando de Moisés y Elías al Mesías esperado Los pobres como los predilectos de Dios (Baruc) Del sentido sociológico al espiritual. El paso ha sido a través de la reconstrucción de las condiciones materiales de la pobreza: no existe pobreza espiritual sin pobreza real El Mesías de los ANAUIM Pobreza y humildad son el centro de la fe después del Exilio Los pobres son promovidos al primer lugar en el Reino que el Mesías instaurará María y su canto de pobreza María situada con respecto a Israel: Una confederación de tribus reunidas en torno a l santuario Reino centralizado en torno a una capital y una dinastía Sociedad eclesiástica a la sombra del Templo Los profetas como los portadores de la Buena Nueva: el Resto, como expresión exclusiva para el pueblo de Yahveh Los pobres, como concretización del Resto de Israel María portadora del grito de los ANAUIM ¿Cómo resituar nuestras catequesis desde el lugar de los pobres? De los objetivos al contenido De la memoria a la experiencia De la doctrina a la espiritualidad Del mensaje desde afuera al mensaje desde adentro De la catequesis empobrecida a una catequesis de pobres