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INFORME NACIONAL
Coordinación
Apoyo
Centro de Investigaciones para el Desarrollo Internacional (IDRC)
Institución responsable
Base Investigaciones Sociales
Investigadores
Diego Segovia
Luis Caputo (coordinación)
Regina Kretschmer
La publicación no fue editada, se respetó la forma en que cada informe fue producido.
ÍNDICE
I. INTRODUCCIÓN 6
1.1 PRESENTACIÓN 6
1.2 EL ESTUDIO DE LAS DEMANDAS 6
1.3 ASPECTOS METODOLÓGICOS 7
2. PANORAMA GENERAL DEL PARAGUAY 12
2.1 LA DÉBIL INSTITUCIONALIDAD EN POLÍTICAS DE JUVENTUD EN EL PARAGUAY 15
2.2 LA VASTEDAD DE LOS CAMBIOS DE LA RURALIDAD 17
2.3 AVANCE DE LA URBANIZACIÓN Y DETERIORO DE LAS CIUDADES 21
2.4 EL ESPACIO PÚBLICO COMO VARIABLE DEPENDIENTE 25
3. ANÁLISIS DE LAS MÚLTIPLES “DEMANDAS JUVENILES” DESDE LAS SUBJETIVIDADES JUVENILES 28
3.1 LAS DEMANDAS DE LA JUVENTUD DE ASAGRAPA 28
3.2 DEMANDAS DE LA FENAES 34
4. LAS SITUACIONES TIPO DESDE LA PERSPECTIVA DEL ESPACIO PÚBLICO 38
4.1 LA JUVENTUD COMO CAJA DE RESONANCIA DE LA CRISIS DE REPRESENTATIVIDAD 39
4.2 LA PROYECCIÓN PÚBLICA DE LAS DEMANDAS 40
4.3 LA CONQUISTA JUVENIL DE ESPACIOS COMUNITARIOS 49
4.4 ALGUNAS DUALIDADES ENTRE JÓVENES Y ADULTOS 54
4.5 LA PROYECCIÓN A NIVEL DE LO “PÚBLICO-ASOCIATIVO” 57
5. LA JUVENTUD COMO REFLEJO DE LA GLOBALIZACIÓN Y LA SOCIEDAD 58
5.1 RESISTENCIAS Y TRASFORMACIONES 58
5.2 LA JUVENTUD COMO VÍCTIMA Y A LA VEZ BENEFICIARIA DE LA GLOBALIZACIÓN 61
5.3 DERECHOS DESPAREJOS Y DEMANDAS DE LA JUVENTUD 69
5.4 JUVENTUD Y CONTEMPORANEIDAD: ANÁLISIS DE PARECERES Y PERCEPCIONES JUVENILES 71
5.5 PERSPECTIVAS DE CAMBIO EN EL CAMPO DE LA JUVENTUD 73
ANEXO 77
BIBLIOGRAFÍA 79
Tabla 1 8
6 Base IS/Ibase/Pólis
el caso paraguayo con una problemática res que acuerdan (mediadores), etc. Para
histórica todavía no resuelta. De esta ma- las dos Situaciones Tipo seleccionadas, la
nera, el estudio explora la forma que los fase exploratoria comenzó con entrevistas
sujetos juveniles involucrados en las dos individuales a líderes juveniles, para luego
Situaciones Tipo, condensan, reproducen tener información acerca de la administra-
o se resisten, a través de sus demandas y ción de los Grupos Focales (entrevistas co-
la lucha por las mismas, a las transforma- lectivas) con jóvenes de base.
ciones globales y sus consecuencias. Fase de profundización: en este segundo
Otro elemento central que atraviesa la momento, se evaluó siempre en términos
indagación, es la incorporación de la per- cualitativos y desde la perspectiva de cada
cepción de adultos e instituciones que actor, las dinámicas internas y las percep-
rodean a las organizaciones de juven- ciones de sus demandas en el espacio
tud, que pueden funcionar como apoyos público. En el caso de la Fenaes se com-
o condicionar los comportamientos y la plementó con una encuesta a 450 estu-
efectividad de las demandas juveniles. diantes de quince colegios de Asunción.
GRUPO ESTUDIADO ORGANIZACIÓN SEGMENTO JUVENIL DEMANDA/S ALCANCE TERRITORIAL COMPOSICIÓN POR GÉNERO
ASAGRAPA Jóvenes del Consejo Jóvenes campesi- Acceso a la tierra Departamental Mixto
Juvenil Regional nos de 18 a Educación Trabajo (regional)
(CJR) de la Asocia- 29 años Esparcimiento
ción de Agricultores
de Alto Paraná
8 Base IS/Ibase/Pólis
Téngase presente que si bien tangen- a un proceso de escolarización y que
cialmente se habían dado contactos es- todavía no tienen garantizadas la ple-
porádicos en espacios públicos, BASE-IS na vigencia de sus derechos juveniles
no ha tenido ningún trabajo previo con di- (políticos, económicos, sociales y cul-
chas organizaciones. turales).
Para la elección de dichas Situacio- Estudiar las demandas de la Fenaes,
nes Tipo se tuvieron en cuenta los si- permite incluir la problemática de
guientes criterios principales: la “ciudad” (Area Metropolitana de
Asunción y Ciudad del Este), en vin-
Por un lado, son actores colectivos culación con la juventud y los fenó-
estratégicos de los movimientos so- menos de exclusión social, política y
ciales en el Paraguay, además de cultural.
asumirse como tales. En tanto, la adopción de Asagrapa,
La juventud nucleada en Asagra- radica también en que es un seg-
pa representa a la juventud rural de mento de la generación joven rural
un importante peso demográfico en que representa un “sedimento” di-
el país, y a la vez está muy ligada a námico de la historia social del país,
las históricas luchas del movimiento considerándola un tipo singular y va-
campesino. lioso de juventud, aunque dramática-
La Fenaes, también es muy repre- mente golpeada en sus derechos.
sentativa porque se constituye en la En este caso, el CJR de Asagrapa
heredera del movimiento estudian- es una organización juvenil que tie-
til que comenzó a gestarse en la dé- ne sus bases organizadas en más de
cada de 1930 -lucha estudiantil que veinte comunidades campesinas a lo
se reflejó en la masacre de 1931 en largo y ancho del Departamento de
las puertas del Palacio de Gobierno- y Alto Paraná.
perseguido por más de tres décadas En ambos Tipos, sobre todo en cuan-
durante la dictadura de Stroessner to a la juventud rural, se incluyó la
(1954-1989); luego del legado del realidad espacial de la “frontera”
Movimiento Independiente (MI) entre (Alto Paraná) por conjugarse allí los
1967-1977, y durante los ochenta, la procesos más globales y de integra-
lucha de la Federación Universitaria ción empírica y cotidiana de los pue-
Paraguaya (FEUP, no oficialista). En blos del Paraguay, Brasil y Argentina.
este proceso histórico, el movimien-
to estudiantil secundario reaparece 1.3.2 Caracterización de las Si-
como una enorme fuerza democráti- tuaciones Tipo
ca y con nuevas características con En cuanto a la extracción familiar de los
la caída del régimen autoritario y la hijos e hijas jóvenes miembros de Asagra-
emergencia de un régimen mixto au- pa, en su mayoría, los padres son proce-
toritario-democrático: Movimiento de dentes de los Departamentos que tradi-
la Organización Secundaria (Mos), el cionalmente habían sido expulsores de
Frente de Estudiantes Secundarios población hasta la década de los ochen-
(Fes), el Movimiento por la Obten- ta (Caazapá, Paraguarí, Guairá, Cordille-
ción del Bienestar Estudiantil (Mobe), ra), que mediante la migración rural-rural
retomado en el tercer milenio por la de esos años y la organización combativa,
Fenaes, además de los movimientos lograron “ocupar tierras privadas de ori-
universitarios. gen fiscal”. En la actualidad, la propiedad
Específicamente se seleccionó a la de la tierra es comunitaria, el lote pue-
Fenaes, pues son jóvenes estudian- de ser de propiedad individual, colecti-
tes secundarios, que están adscritos va, o en proceso de regulación. El tipo de
10 Base IS/Ibase/Pólis
Se pone de relieve, que durante el
proceso de captación de datos de la in-
vestigación en el Paraguay, se logró in-
tensificar el clima de “diálogos partici-
pativos” tanto hacia adentro de cada
organización juvenil, como hacia los acto-
res con los cuales están en contacto (alia-
dos, padres, autoridades, mediadores y
opositores). Asimismo, la experiencia per-
mitió generar mayor atención por parte
de los actores, sobre un análisis más es-
pecífico de sus demandas y dificultades
de concreción, además de haber ayuda-
do a valorizar en perspectiva, los avances
logrados. Finalmente se identificó la aspi-
ración tanto en la Fenaes como Asagra-
pa, de contar con una red que facilite o
sirva de apoyo para emprender acciones
nacionales y regionales de construcción
de políticas públicas.
12 Base IS/Ibase/Pólis
En lo político, desde 1989 desta- Actualmente, se exalta aún más el
ca una transición democrática -renova- mismo rumbo neoliberal. Así, una de las
ción constitucional, elecciones, y cierta decisiones al asumir la presidencia Duar-
ampliación de la participación popular- te Frutos fue la de firmar por primera vez,
aunque sin recambio de partido, pues el acuerdo stand by con el FMI, además
se deja como herencia del régimen stro- de otras políticas de corte liberal.
nista, al mismo partido político (Colora- Con dichos patrones, en las últimas
do o ANR) ocupante del gobierno (1940- décadas se produce un acelerado proce-
2007), ahora definido por la competencia so de exclusión social y económica, pro-
electoral.5 También deja intacta la estruc- vocado por las políticas neoliberales de
tura de los actores económicos, con efec- bancos multilaterales, que en el país no
tivos poderes fácticos en la cúpula de las tuvieron un carácter de “retiro del Es-
instituciones del Estado. tado” o de reducción de su burocracia
Las políticas del régimen de Strossner como en otros países latinoamericanos.
y las de la transición, no se diferencian Primero, porque históricamente los servi-
en torno a que ambas sirven a los intere- cios públicos fueron restrictivos, y segun-
ses de la burguesía orientada al mercado do, porque el Paraguay no conoció hasta
externo. En la actualidad, los beneficios el momento la aplicación de políticas uni-
de las políticas se dirigen a las multina- versales (ya sea bajo la fórmula de un Es-
cionales dedicadas a importar insumos tado social, desarrollista o populista).
para la agricultura, importar y distribuir En este marco, si bien la juventud es
petróleo, a los bancos, a productores ga- demográficamente cada vez más rele-
naderos y exportadores sojeros, mientras vante, hasta ahora no pudo diferenciar-
que van el aumento los desequilibrios y se como sujeto de políticas públicas, de
desigualdades económicas y sociales. otros grupos sociales. En la última Encues-
Por el lado de las políticas económi- ta Permanente de Hogares (2006), la ju-
cas, históricamente Paraguay ha mante- ventud de 15 a 29 años llega a 1.568.582
nido una apertura indiscriminada de sus personas, representando el 26,4% de
fronteras a todo tipo de importaciones, los 5.946.471 habitantes (sin conside-
hasta para introducir o hacer pasar pro- rar los Departamentos de Alto Paraguay
ductos como drogas y armas, o permitir el y Boquerón, muy escasamente pobla-
tráfico de su propia madera. Antes y aho- dos y 1,2 millones de paraguayos residen-
ra, el Estado paraguayo se caracteriza por tes en el extranjero), de los cuales el 58%
un estilo cesarista en materia de políticas (3.455.333) habitan espacios urbanos y el
públicas, cuyos sucesivos gobiernos se restante 42% (2.491.138) lo hace en es-
muestran pro-estatistas, pero efectivamen- pacios rurales. Respecto a la variable sexo,
te en sus políticas públicas han otorgado en las áreas rurales con el 52%, la mayo- 5
Luego de la tragedia de la guerra
“permisos para legalizar lo ilegal”, y tie- ría es femenina, y el 48% masculina. de la Triple Alianza, para el pueblo
paraguayo la nueva guerra del Chaco
nen siempre abiertas las fronteras comer- Paraguay, con dicho considerable con Bolivia volvió a tener profundas
implicancias. En una época de crisis
ciales. En lo económico, las políticas de bono demográfico, se ubica en plena del liberalismo a nivel mundial, la he-
gemonía de tres décadas del Partido
las últimas décadas se han caracterizado transición poblacional. Por tanto, la po- Liberal en el poder, fue golpeada en
por garantizar la apertura indiscriminada blación sigue creciendo, implicando “más 1940 por un movimiento político-
militar embebido de un discurso
del mercado interno al mercado global. demandas”, laborales y de servicios. nacionalista y autoritario.
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Respecto a la situación social, se- de juventud ronda la ínfima suma de USD
gún un estudio nacional, se encontró 833 mensuales, se puede concluir que las
que las personas jóvenes entre 15 y 24 políticas de juventud no existen.
años de edad son casi un 10% más po- Se debe tener presente que en estos
bres que la población en general. Se en- últimos tres años, mediante un proceso de
contró un dramático nivel de pobreza en consulta apoyado por el Fondo de Pobla-
un contexto de ausencia de oportunida- ción de las Naciones Unidas (FNUAP), el
des: el 43% estaba en situación de po- Banco Interamericano de Desarrollo y la
breza, mientras la proporción de jóvenes Organización Interamericana de Juventud
rurales pobres, prácticamente se duplica (OIJ), se ha intentado la construcción de
(Caputo y Palau, 2004). una propuesta de Ley de Juventud, que
Finalmente, se halló una nítida con- hace un año se encuentra paralizada en la
centración territorial de la pobreza, al Comisión de Equidad Social y de Género
comprobar que la pobreza se eleva al de la Cámara de Diputados, pues es cues-
50% de la juventud de los Departamen- tionada en varios puntos por las organiza-
tos de Caazapá y San Pedro. El mismo ciones juveniles de mayor trayectoria.
patrón se intensifica para la situación de En estas circunstancias de preocu-
jóvenes “indigentes”, donde en cuatro pante debilidad de la institucionalidad del
Departamentos, reside la mitad de la ju- VMJ, se deja ver como retrato del Para-
ventud en situación de pobreza extrema: guay, un vacío en el campo de las polí-
Alto Paraná, Itapúa (ambos fronterizos), ticas públicas de juventud, que coloca a
San Pedro y Caaguazú. las personas jóvenes como “no sujetos”
Otro dato complementario da una de políticas.
idea de la precaria situación de la salud Históricamente, la juventud paragua-
de las mujeres jóvenes. La proporción de ya ha contado por parte del aparato esta-
mujeres jóvenes embarazadas que pade- tal prácticamente con una sola política -
cen desnutrición registra el 30%, o sea además del servicio militar obligatorio- la
más de 45.000 embarazadas. de los servicios educativos, aunque en
la actualidad con las buenas intenciones
de la Reforma Educativa, apenas sola-
2.1 LA DÉBIL INSTITUCIONALIDAD mente cuatro de cada diez jóvenes (hasta
EN POLÍTICAS DE JUVENTUD EN EL aproximadamente los 17 años de edad)
PARAGUAY están en el nivel medio. Ya en los años
noventa se habían impulsado algunos
El organismo gubernamental encarga- fragmentados programas para jóvenes.
do de orientar las políticas de juventud es Si bien hasta ahora no existe una po-
el Viceministerio de la Juventud (VMJ), lítica integral hacia la juventud paraguaya,
que depende del Ministerio de Educación se constatan algunos programas sectoria-
y Cultura (MEC), creado en 1994. Desde les, por ejemplo, en el ámbito de la salud
entonces es muy fragmentado -y cuestio- adolescente impulsado por el Ministerio
nado- lo que se ha realizado en materia de de Salud Pública y Bienestar Social (MS-
programas y proyectos para la juventud. PyBS), con importante apoyo de agencias
En la actualidad, además de contar con internacionales. Se pueden identificar al-
un escasísimo capital técnico y de legitimi- gunas unidades dentro del Estado, tales
dad, su presupuesto anual apenas llega a como la Dirección de Género y Juventud
50 millones de guaraníes (USD 10 mil)7. Rural o la Dirección de Educación Agríco-
Es decir, sin considerar la voluntad políti- la del Ministerio de Agricultura (MAG), que
7
La cifra no es un dato menor, si se
ca y el enfoque que prima hacia la juven- emprenden distintas acciones, aunque considera que el peso de los recursos
tud, si la cifra asignada en el presupuesto con enormes dificultades presupuestarias asignados para las políticas de juven-
tud es ínfimo dentro del Presupuesto
oficial del organismo rector de las políticas y sin enfoques específicos en juventud. General de Gastos de la Nación.
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Con estas consideraciones generales, rras. Hacia 1930 las primeras organiza-
se pueden repasar con más detalle algu- ciones campesinas se enfrentaron con
nas de las transformaciones que operan poderosas empresas cañeras. En tanto,
en el mundo rural y urbano, y su influen- más contemporáneamente, resultan nue-
cia en la población joven. vamente relevantes las acciones de lucha
por la tierra.
Antes de la turbulencia política ge-
2.2 LA VASTEDAD DE LOS CAMBIOS nerada por la guerra civil de 1947, la ju-
DE LA RURALIDAD ventud rural estaba muy constreñida a los
márgenes de colonias minifundiarias ubi-
Cabe recordar en la formación sociohis- cadas en la región Central del país, los
tórica del Paraguay, el relevante lega- Departamentos de colonización antigua
do demográfico, cultural y económico del próximos a Asunción, donde la diversifi-
campesinado criollo. A pesar de las gue- cación de los cultivos por parte de la fa-
rras (1864-1870 y 1932-1935) y la fuer- milia, les permitía a algunos de los hijos
te dualidad rural, ya sea en el formato del jóvenes -ya que el resto migraba- cierta
clásico latifundio-campesinado o en el de reproducción social mediante la autosufi-
capitalismo agrario-economía campesi- ciencia alimentaria.
na de la nueva era, el campo casi no ha Un patrón típico era que una vez que
conocido la presencia de un estrato de el joven varón salía del servicio militar, se
“medianos productores” (tipo chacareros unía a una pareja, y generalmente inten-
o granjeros). Desde la época de la colonia taba emanciparse mediante la cesión por
hasta la actualidad, el campesinado pa- parte del progenitor o suegro, de una par-
raguayo ha quedado al margen de la mo- te de la chacra, dinámica de reproduc-
dernidad y de varias esferas de derechos, ción que tiene un techo estructural, al
aunque le ha impreso su fuerte impronta darse solamente mediante la acentuación
cultural y social al país, además de influir de la minifundización campesina. El difi-
significativamente en el plano político. cultoso proceso de traspaso o herencia,
podía cubrir a duras penas a una sola ge-
2.2.1 La tierra como derecho neración, y solo a una parte de los hijos.
denegado y las luchas campesinas Al respecto, Dirven (2002) ha aborda-
A nivel de las generaciones jóvenes, en el do la problemática del “rejuvenecimiento
Paraguay, hay juventudes que nunca fue- de los territorios rurales” de América La-
ron incorporadas a la modernidad y a las tina, como contracara del envejecimien-
instituciones como buena parte de la ju- to de los mismos, recordando entre otros
ventud campesina y la totalidad de las ju- factores, que la emigración se focaliza en
ventudes de las etnias indígenas que ha- el período juvenil. Una conocida razón
bitan el territorio. Si bien las pérdidas de de Dirven, es el tardío relevo generacional
vida indígena en los siglos de coloniza- en la finca, por aquella marcada costum-
ción son incalculables, en la actualidad bre de retardar, por parte del agricultor, el
los diecisiete pueblos que pertenecen a acceso de sus hijos a sus tierras, inclusi-
cinco troncos lingüísticos (Guaraní, Mas- ve tal traspaso se suele efectuar ya en la
koy, Mataco-Mataguayo, Guaicurú y Za- ancianidad y una vez se produce el falle-
muco), ascienden a un total cercano a cimiento del padre. En tanto, cuando el
noventa mil personas, representando el padre decide adelantar la herencia de la
1,8% de la población nacional. finca, ganan los varones o el hijo mayor.
Durante la década de 1880-1890, el Es evidente entonces que el repar-
campesinado se destacó por fuertes con- to de la poca tierra, es imposible que lle-
flictos con los propietarios latifundistas gue de la generación de los abuelos a la
a causa del desplazamiento de sus tie- de los nietos. El desfasaje abuelos-padres-
18 Base IS/Ibase/Pólis
res suelos de los Departamentos de Alto den global no tener regulaciones o, que
Paraná, Itapúa, Canindeyu y Caagua- al estar “librados a su propia dinámica,
zú (1970-1980), logrando cada vez más sólo pueden desarticular un espacio na-
una fuerte incidencia en el poder político cional y estructurarlo en torno a centros
autoritario. Como resultado ilustrativo de de decisión extranacionales y, por tan-
este proceso de concentración, se pue- to, frustrar los procesos de acumulación,
de recordar que hacia 1991, el 1% de vale decir, el desarrollo” (432-3).
los propietarios en el Paraguay acaparan En las dos Situaciones Tipo inclui-
el 77% de la tierra. das en este trabajo, toda la población
Por consiguiente, el repliegue cam- joven paraguaya, es reflejo de la ma-
pesino ante el acceso a la tierra, significó triz histórica política, pero mucho más
que desde 1983 se produzca un nuevo del presente de las transformaciones
incremento de “demanda por la tierra”, del orden global. Algunos de los princi-
iniciándose una ola de acciones campe- pales componentes de la globalización
sinas de lucha y ocupaciones que se ve que repercuten con fuerza en la socie-
luego facilitada por el derrocamiento de dad paraguaya y, especialmente, en sus
la dictadura. nuevas generaciones, son descritos a
continuación.
2.2.2 Implicancias de la globali- A nivel externo, la tendencia de los
zación en la juventud rural mercados agrícolas internacionales está
En tanto, en las dos últimas décadas, la teniendo un fuerte impacto en la deman-
juventud de origen rural ha sufrido una da fundamentalmente de cereales y ole-
serie de cambios estructurales importan- aginosas, que contrasta con la pérdida
tes, que se podría graficar en la menor interna de productos alimentarios diver-
ocupación del territorio rural y la mayor sificados. Estos cambios en el modo de
marginalidad en las ciudades. producción agrícola, centrado en la pro-
Es incomprensible abordar las de- ducción de monocultivos de renta, están
mandas de la juventud, sin abordar di- signados por el uso intensivo de la tierra,
chas transformaciones y sin abordar el la importación de bioteconología -semi-
juego de procesos económicos y cultu- llas transgénicas, herbicidas basados en
rales que contiene la problemática de la glifosato y otros agrotóxicos- y de gran-
globalización. En un reciente trabajo, el des maquinarias. Así, Paraguay se en-
economista Ferrer (2007) define la glo- cuentra frente al poderoso mercado de
balización como “…un sistema de re- los agronegocios demandante de mo-
des en las cuales se organizan el comer- nocultivos, y que a la vez presiona fuer-
cio, las inversiones de las corporaciones temente con la oferta de productos ali-
transnacionales, las corrientes financie- menticios importados.
ras, el movimiento de personas y la cir- En este marco, el Estado, se inclina
culación de información que vincula las decididamente al mercado externo y a las
diversas civilizaciones. Es, asimismo, el inversiones del capitalismo agroexporta-
espacio del ejercicio del poder dentro dor sobre la base de los grandes propie-
del cual las potencias dominantes esta- tarios sojeros, adoptándose una política
blecen, en cada período histórico, las re- agrícola que privilegia un modelo de ex-
glas de juego que articulan el sistema plotación de gran tamaño haciendo que
global” (431). Sin caer en visiones fun- la economía campesina quede relegada
damentalistas de la globalización, el au- en los planes de desarrollo del país. Otro
tor explica lo decisivo que resulta para aspecto de importancia ambiental y so-
provocar el empobrecimiento económi- cial, es el impulso de políticas de canje
co de una sociedad, un escenario que que van desde naturaleza y salud, hasta
permita a los grupos dominantes del or- educación, por deuda externa.
20 Base IS/Ibase/Pólis
Este cuadro de jefes y familias que en- (Durston, 1998: 8) del ciclo de vida fami-
grosan las corrientes migratorias al exterior, liar, la cantidad de tierra que tiene la fa-
se completa con la fuerte feminización y ju- milia paterna ya no alcanza para provocar
venilización de la migración. Hoy por hoy es el tan ansiado recambio generacional, se
el tema nacional. El drama de niños y ado- presenta el escenario de una alta proba-
lescentes sin la presencia de sus padres está bilidad de convertirse en Jóvenes Sin Tie-
causando estragos en términos de desinte- rra. En esa “identidad”, para el caso del
gración familiar y afectiva: problemas psico- campesinado paraguayo que en su mo-
sociales, en el rendimiento escolar, consumo mento ha luchado por el derecho a un
de drogas, hasta suicidios. Oficialmente se lote, extrañan el relativo éxito que sus pa-
reconoce que son 48 mil paraguayos y pa- dres tuvieron como generación, al acce-
raguayas que residen en España, aunque la der a la tenencia mediante la organiza-
prensa registra cerca de 100 mil personas. ción y la resistencia.
Jóvenes descampesinizados: Sin embar-
2.2.3 Juventud y déficit de la tierra go, existe una gran mayoría de campe-
Es importante destacar la alta participación sinos en proceso de pérdida de su con-
y coraje de las personas jóvenes del campo dición de agricultor y precarización, en
en las ocupaciones de las tierras que toda- cuyos hijos jóvenes se refleja de manera
vía estaban disponibles hacia 1983, y tras intensa el proceso de franca “descampe-
la caída del gobierno de Stroessner. sinización”, esto es, desde la migración y
Sin embargo, entrado el siglo XXI, se la misma pérdida de la vocación de agri-
intensifica una presión contraria por par- cultor, hasta los efectos disgregantes en
te de las agroempresas ligadas a la pro- el sistema cultural campesino: historia,
ducción y exportación de commodities, tierra, naturaleza, familia, comunidad, va-
para lograr la venta de esas tierras. Cuan- lores, prácticas y sentidos.
do esto no es posible, se apela al intimi-
datorio recurso de la fuerza parapolicial,
o directamente a la saturación de los te- 2. 3 AVANCE DE LA URBANIZACIÓN
rritorios campesinos con glifosato, hasta Y DETERIORO DE LAS CIUDADES
lograr el desalojo de los agricultores de
sus fincas. Pero con la expulsión de las Resulta pertinente realizar una aproxi-
“familias”, se produce dentro de éstas, la mación a los notables cambios que es-
expulsión de los “hijos e hijas jóvenes”. tán experimentando las personas jóve-
Si bien hay situaciones disímiles, se nes en las áreas urbanas, que tienen
podría encontrar dos situaciones tipo de efectos directos en el grado de bienestar
la gente joven frente a la ruralidad en si- y en la posibilidad de gozar de calidad
tios como Alto Paraná: de vida para desplegar sus proyectos.
Jóvenes Sin Tierra: Los campesinos y A continuación, a partir del reciente
campesinas jóvenes-adultos entre 18 y trabajo de Causarano (2006) se presen-
35 años de edad que lograron ocupar y tan algunos datos que marcan las tras-
permanecer en un pedazo de tierra entre formaciones de los “espacios” metropo-
los años 1983 e inicios de los noventa, en litanos y rurales donde se desarrollan las
su mayoría tenían hijos pequeños. Esos Situaciones Tipo estudiadas.
niños campesinos, hoy por hoy son jóve-
nes entre 14 y 24 años de edad aproxi- Sistema Metropolitano de Asunción
madamente. Teniendo en cuenta que al Asunción, como capital del país “ac-
convertirse en adolescentes, los hijos co- túa como polo metropolitano central” de
mienzan a plantear sus propias deman- otros once municipios limítrofes que con-
das económicas y al ingresar a la “fase forman el Area Metropolitana de Asun-
de parcial independización económica” ción (AMA) donde reside casi el 30% de
22 Base IS/Ibase/Pólis
grados demandando habitación, salud, los derechos de las nuevas generaciones.
educación y empleo, cuyas capacida- Así la juventud rural no solo no puede
des disponibles son sobrepasadas. incorporarse a la economía campesina,
Téngase en cuenta que en todos los sino que tampoco lo puede hacer a la so-
rubros de inversión social, el Paraguay ciedad metropolitana. Mientras, la mayo-
exhibe los peores índices de la región. ría de la juventud urbana ve suspendidas,
Hacia 1999, las estimaciones compara- en tiempos de teórica moratoria, el disfru-
tivas de la CEPAL encontraron que Para- te de sus derechos.
guay destinaba solo USD 140 per cápita Otra, de las cuestiones críticas que
para cubrir los componentes de los dere- afecta a las ciudades, es la enorme bre-
chos sociales, mientras que el monto pro- cha que imposibilita la vigencia de la
medio destinado de América Latina pro- igualdad de oportunidades en el acceso
mediaba USD 696. a los lugares de empleo, a los centros de
A su vez, la problemática de los ali- salud o a las escuelas. Esto implica anali-
mentos se expresa en el encarecimiento zar con cierto detenimiento el sistema de
de los precios (harinas, hortalizas, car- transporte público.
nes, frutas, lácteos, gas licuado y servi-
cios), por la constante inflación (en lo 2.3.2 El lugar del boleto para
que va hasta agosto del 2007 con una los estudiantes y el sistema
tasa del 3,4%), con lo cual sube el costo de transporte
de la canasta familiar. Subsiguientemen- Los ómnibus son servicios esenciales para
te, se ensanchan los niveles de pobreza toda la población, pero sobre todo para los
e indigencia. trabajadores y estudiantes que diariamen-
Por su parte, el Estado como medi- te deben trasladarse a sus ocupaciones.
da para combatir la inseguridad, orga- A diferencia de otras zonas urbanas
niza guardias privadas urbanas, propo- de América Latina, el Área Metropolitana
ne endurecer el Código Penal, además de Asunción no cuenta con una red ferro-
de impulsar durante el 2007 una ley an- viaria o subtes (metros) que puedan fa-
titerrorista que, entre otras cosas, pena- cilitar el traslado de pasajeros. Tampoco
liza duramente las habituales acciones existen taxis de tipo comunitario o remis
de protesta de los campesinos (cortes de como en otras ciudades de la región. Asi-
ruta, ocupaciones y otras). mismo, el uso de la bicicleta aún no está
Como resultado de esta problemáti- extendido, sobre todo porque no existen
ca de marginalidad urbana, se vienen pro- sendas seguras para los ciclistas.
duciendo variados fenómenos: i. aparecen Lo único que prácticamente resta a
como figura los “sin techo”; ii. se acrecien- las familias modestas que residen en ba-
tan los niños y adolescentes de la calle; iii. rrios dormitorios, son los autobuses que
niños y niñas de origen rural son colocados recorren complicados trayectos (en-
como criaditos en familias urbanas, quie- tre muchos vaivenes serpenteados entre
nes deben trabajar como personal domés- destinos), en geografías urbanas signa-
tico a cambio de techo, comida y la posi- das por la pésima infraestructura y per-
bilidad de estudiar; iv. las mujeres jóvenes manentes puntos de congestión en las
se constituyen en uno de los principales avenidas. A este cuadro, se suma la pro-
objeto-víctimas de “redes de trata de per- blemática de la calidad de los servicios
sonas”, con fines de explotación sexual a que junto a las caducas y enmarañadas
nivel internacional; v. aparecen en las ciu- licitaciones, obliga a los usuarios a su-
dades las llamadas enfermedades de la po- bir a buses cuya circulación se realiza al
breza (dengue, leishmaniasis, meningitis, margen de las normas. Buena parte de
etc.) y un sinnúmeros de aberrantes fenó- los propietarios tienen seudoempresas
menos sociales que terminan paralizando que promueven la explotación laboral de
24 Base IS/Ibase/Pólis
edad joven las movilizaciones persona- quiso lograr que la sociedad paraguaya se
les. Más aún si se considera que áreas debilite por la falta de relacionamiento y el
metropolitanas como Asunción y Ciu- aislamiento de lo público.
dad del Este vienen experimentando En la actualidad, para el caso de jó-
una rápida urbanización que expulsa a venes que participan de organizaciones
los segmentos poblacionales demográfi- campesinas que demandan tierra o lu-
camente mayoritarios hacia la periferia, chan contra el poder de los enclaves so-
con una altísima proporción de jóvenes jeros, así como estudiantes de la Fenaes
en edad de estudiar, se puede tener en- o del movimiento universitario cuando
tonces una idea que para el acceso a la bloquean el paso de autoridades o repre-
educación como bien fundamental, es sentantes del Estado, son víctimas de las
preciso encontrar mecanismos de Esta- concepciones de criminalización de la
do compatibles con su plena realización. protesta social. Especialmente cuando se
Además de otras políticas para “perma- trata de reclamar el derecho a la tierra,
necer” (como las becas, casi desconoci- en estos últimos cuatro años los campesi-
das todavía en el Paraguay), una iniciati- nos han sido brutalmente reprimidos. Por
va válida para que los jóvenes “lleguen”, su parte, buena parte de jóvenes en si-
sería que el Estado subsidie las tarifas tuación de marginalidad que residen a las
públicas para los pasajeros de sectores orillas de las ciudades, reciben tratos in-
modestos, en particular para sus hijos justos y violencia de la policía.
en edad de estudiar. Sin embargo, reiterando la importan-
cia social del campesinado y la juventud,
pero con menos derechos reconocidos en
2.4 EL ESPACIO PÚBLICO COMO la práctica, tanto el movimiento campe-
VARIABLE DEPENDIENTE sino9 como el movimiento estudiantil fue-
Si bien para la conquista de los derechos ron y continúan siendo actores sumamen-
son importantes las normas de un régi- te significativos en sus pequeñas escenas
men político, las directivas del gobierno, y en diferentes momentos -con auges y
los cambios de legislación, autores como descensos- durante la dictadura y el pos-
Arendt (1996) y Habermas (2001) sostie- stronismo, en el escenario político nacio-
nen que la ciudadanía tiene una escena nal. Así, luego del período autoritario, des-
en la que se promueve la inserción ple- de 1989, más allá de la efectividad de sus
na a la sociedad, consistente en el “es- peticiones, ambos actores forman parte de 9
Algunas de las principales
pacio público” distinto al poder ejecutivo, la ineludible realidad política actual. organizaciones campesinas son: la
Federación Nacional Campesina
en donde se trama el sentido de lo que Ciertamente, luego de la época auto- (Fnc) que peticiona apoyo para el
cultivo e industrialización del algodón;
sucede en esa sociedad. En este sentido, ritaria, en un contexto de libertades po- la Mesa Coordinadora Nacional de
Organizaciones Campesinas (Mcnoc),
lo “público” es cada vez más un espacio líticas, las organizaciones campesinas y cuyas demandas son tierra, empren-
de la pluralidad de las voces de los acto- las juveniles con una dinámica más ines- dimientos productivos, educación
y salud; la Coordinadora Nacional
res urbanos, rurales, de las generaciones table, se relanzan como actores sociales de Organizaciones Campesinas,
Indígenas y Populares (Cnocip) de
de ciudadanos jóvenes que comparten o de fundamental importancia en el con- la cual forma parte Asagrapa, la
Organización Nacional Campesina
disputan con otros, y así se insertan en la texto sociopolítico del Paraguay. Por un (Onac); la Coordinadora Nacional
constelación de la política. lado, tanto los campesinos como los jó- de Mujeres Trabajadoras Rurales e
Indígenas (Conamuri), centrada en el
Como antecedente, cabe recordar que venes, fueron baluartes de la democra- combate a los agrotóxicos, y políticas
de salud y educación. Todas tienen en
la larga dictadura paraguaya pretendió ha- cia durante el Marzo Paraguayo10. Por el común la demanda de una reforma
agraria integral.
cer desaparecer por completo al espacio otro, también han sido protagonistas de 10
Hito histórico del 23 al 28 de marzo
público. La sociedad civil estaba compri- importantes reclamos por sus derechos de 1999, tras el asesinato del Vicepre-
sidente Luis María Argaña, en el cual
mida a su máxima expresión, privándola ciudadanos, ejercieron una influencia de- el ex general Lino Oviedo desató una
crisis cívico-militar. Como respuesta
a la fuerza y por el miedo, de espacios de cisiva para frenar la tentativa de privati- espontánea, diez mil personas, en
libertad para el pensamiento y los juicios zación de las empresas del Estado (en el su mayoría campesinos y “jóvenes”,
irrumpen en el espacio público para
reflexivos y críticos. El régimen autoritario año 2002) y durante el bloqueo popular defender a la democracia.
26 Base IS/Ibase/Pólis
ficada en noviembre de 2004 con el nue-
vo gobierno, el cual produce un retroce-
so en materia de libertades y violación de
los DESC: crea una veintena de destaca-
mentos de control militar, decide sacar
al ejército a las zonas de protesta y ocu-
pación campesina11, recurriendo así a la
mano dura contra los movimientos socia-
les, intentando desmantelarlos, o al me-
nos desalentarlos en la explosión de sus
demandas. Con esto, además de denegar
los derechos exigidos, la forma de regular
las desigualdades por parte del gobierno,
es lograr que la población movilizada tras
sus derechos retorne nuevamente a los
niveles de tolerancia máxima posibles.
11
Para conocer las serias consecuen-
cias de la violencia desatada hacia
las organizaciones campesinas y las
violaciones a los derechos humanos
más esenciales, vasta consultar los
informes anuales de la Coordinadora
de Derechos Humanos del Paraguay
(CODEHUPY).
Este apartado analiza algunas de las principales ca- de comunidad campesina, dentro de las
racterísticas y vinculaciones de las demandas de las cuales talla con fuerte visibilidad la gen-
organizaciones juveniles (Asagrapa y Fenaes) desde las te joven.
percepciones que tienen sus integrantes, concernientes Por otro lado, varias demandas de la
al modo como realzan determinados problemas-desa- juventud campesina de Asagrapa coinci-
fíos, según la denegación del tipo de derecho que está den con los requerimientos de sus aso-
afectando, con la intención de arribar así a algunas ciados adultos, fundamentalmente, el ac-
semejanzas y diferencias dignas de atención. ceso a la tierra en su vinculación con la
Reforma Agraria Integral, las preocupa-
ciones por la migración y la reconstitu-
3.1 LAS DEMANDAS DE LA ción de las comunidades campesinas.
JUVENTUD DE ASAGRAPA No obstante, como se pudo constatar en
Antes de interpretar las “reivindicacio- la investigación hay elementos peculia-
nes”, como los activistas jóvenes de res en las percepciones de la juventud en
Asagrapa gustan llamar a sus demandas, esos dominios, además de dinámicas es-
es preciso realizar dos consideraciones. pecíficamente juveniles.
Por un lado, el surgimiento de la or-
ganización juvenil de Asagrapa se da en 3.1.1 Los derechos vinculados
medio de la profunda crisis agraria y el a las demandas de la juventud
impacto de las políticas neoliberales en campesina
la nueva ruralidad, que va consolidando Seguidamente, se analizan algunos tipos
cada vez más el sistema agroindustrial- de demandas, según las percepciones de
transnacional, destacándose por la ex- la juventud consultada de Asagrapa.
pansión de los monocultivos, que genera
una fuerte expulsión de campesinos e in- Derechos económico-sociales
tensos flujos de migración juvenil. Como se adelantara (Kretschmer, 2007)
En forma simultánea, en las últimas la reivindicación por la tierra constitu-
décadas se viene dando en las zonas ru- ye una demanda “histórica y a la vez in-
rales del país, un proceso de consolida- tergeneracional” por excelencia. La mis-
ción de movimientos como Asagrapa. De ma cumple una función esencial en la
la marcada y creciente conflictividad en- reproducción social e intergeneracional
tre la agricultura industrial y la agricultu- del campesinado. De allí que se enarbo-
ra campesina de subsistencia, surge la le el acceso a la tierra como la principal
lucha social de Asagrapa en “defensa” bandera de lucha. Ahora bien, en la óp-
de los pequeños productores familiares tica juvenil, el derecho a la tierra y a vi-
y la promoción de sus derechos. En esta vir en comunidad, le otorgan sinergia al
Situación Tipo de la muestra abordada, resto de los derechos. El acceso o no a
se trata de una organización campesi- una parcela propia tiene una enorme re-
na importante como actor político a nivel levancia en las manifestaciones juveni-
regional (Alto Paraná) y nacional, cu- les, como soporte para la incorporación a
yos jóvenes y adultos asociados promue- los procesos productivos, es decir, para
ven colectivamente modelos alternativos lograr “trabajar”. De no ser así, incide
28 Base IS/Ibase/Pólis
fuertemente en la redefinición de los pla- tica al “sesgo urbano” de la educación,
nes de vida y en la activación de las moti- aludiendo a lo impostergable que resulta
vaciones para migrar. contar con metodologías de enseñanza-
Este engarzamiento se puede consta- aprendizaje más “ruralizadas hacia la cul-
tar en las percepciones de la juventud de tura campesina”, incorporando la reali-
Asagrapa con la demanda de trabajo al dad y el ambiente de las comunidades en
que aspira, vinculada al modelo de agri- su pedagogía12.
cultura sustentable y la soberanía alimen-
taria, sin contaminantes tanto para el sue- Derechos culturales como demandas
lo, el aire, como para los alimentos que se identitarias
consumen. Lo cual, según su visión, se Tradicionalmente, al analizar y tratar la ju-
enlaza con las condiciones de salud de las ventud, ha primado el enfoque de “recam-
comunidades, y de la población urbana, bio generacional”, el cual imagina que los
que también debe consumir alimentos. hijos pasarán a reemplazar el lugar ocu-
La juventud de Asagrapa está fuerte- pado por los padres, en la misma unidad
mente convencida que la tierra no lo so- productiva o mediante el acceso a su pro-
luciona todo, pero concibe que la lucha y pia finca13. Por un lado, entonces, dado
el consecuente acceso a la tierra está in- el fuerte proceso migratorio y de desinte-
terconectado con otros derechos. Sus de- gración de comunidades campesinas, los
mandas más específicas son insepara- adultos de Asagrapa al parecer también 12
Lo anterior supone que la peda-
gogía rural implica una concepción
bles del “acceso a la tierra” y el sentido tienen incorporada la idea del necesario crítica de la educación, vinculada a
la cultura popular, cuyo campo está
de “comunidad”. recambio generacional, como un modo de constituido por la compleja unidad de
La no tenencia de la tierra en la ju- proseguir con la consolidación de las co- todas aquellas prácticas cuya función
principal es la significación, las insti-
ventud, insisten las y los entrevistados, munidades que han sido erigidas gracias a tuciones y los agentes que lo dirigen.
Siguiendo lo planteado por Giroux
paraliza cualquier proyecto de vida en el las ocupaciones y luchas del movimiento. (1994), “la verdadera naturaleza del
currículo (…) el desarrollo de ese
campo, y trastoca el resto de sus metas. Más allá de lo adecuado o no del en- conocimiento, pensamiento y práctica
Es que si no se posee un pedazo de tie- foque “generación de reemplazo”, esta que precisan los jóvenes para que
puedan participar en la producción y
rra para trabajar, como un efecto dominó, valoración es compartida por la mayoría reproducción de la vida social y llegar
a conocer además el carácter de tales
caen todos los demás derechos: empleo, de hijos e hijas de los asociados, quienes procesos. La escuela, son esferas
ideológicas y políticas, en las que en
alimentación, salud, educación, recrea- también han incorporado como una es- general constituyen una imagen como
ción, identidad, afectando así a la misma trategia colectiva la “recampesinización” vivo reflejo de la sociedad dominan-
te”. La pedagogía rural implica una
condición juvenil. comprendida en términos socioculturales. construcción inscrita en los procesos
culturales en los cuales se reconocen
En efecto, el no poseer un lote en for- Las presiones exógenas del mundo extra- las prácticas sociales y las represen-
taciones que ordenan la vida de lo
ma individual (o comunitaria) donde cul- campesino y de la migración, supone una rural. Esto supone, según Giroux, no
tivar o desarrollar un emprendimiento defensa de aquello que de alguna mane- limitarse a un discurso de pluralismo
ni de la tan nombrada diversidad,
productivo, impacta negativamente en los ra es propio del mundo campesino. implica una irrupción de “la denomi-
nada pedagogía en la política de la
derechos al trabajo y a “la educación”. A su vez, la “construcción de la co- diferencia” (1994: 6).
Además de los problemas típicos de in- munidad” tiene la misma importancia 13
Dicho tradicional enfoque ha sido
sensiblemente criticado para concebir
equidad y calidad que exhiben las es- que la “tierra” como demanda. En esta y formular políticas de desarrollo rural,
pues al adoptarlo se tiende a: i. poster-
cuelas rurales, ingreso tardío, sobreedad, línea, las demandas de tierra, empleo y gar hacia el futuro los derechos de las
personas jóvenes del campo, y con-
gradual desgranamiento, vaciamiento de una educación apropiada, tienen en con- juntamente ii. se envía la posibilidad
los contenidos, bajo rendimiento, la ju- trapartida otra faz: “la exaltación de la de inclusión en la comunidad hacia
delante, y iii. también sus aspiraciones
ventud consultada muestra su fuerte crí- identidad campesina”. y capacidades como ciudadanos.
30 Base IS/Ibase/Pólis
La lucha por los derechos sociales-ma- do acceso a algunos medios de las nue-
teriales, incluida la demanda por el acceso vas tecnologías (celulares, DVD, espo-
a la educación y una “pedagogía rural”, se rádicamente a una PC e Internet en los
complementan con demandas y conductas locales de los gremios). La desventaja en
de reciente data, de tipo simbólica: cuanto al lugar de residencia y clase so-
cial de pertenencia, como lo adelanta la
Se pudo constatar que la juventud, CEPAL (2004) “… no contradice el hecho
sobre todo las mujeres jóvenes, tie- de que, en general, se ensancha la bre-
nen obstáculos para salir de paseo o cha entre jóvenes y adultos, dada la ma-
para acudir a reuniones, empero ma- yor ductilidad de los primeros en el uso
nifiestan con fuerza un afán de “liber- de las nuevas tecnologías (…) Brecha ge-
tad y autonomía”. neracional que podría ser mucho más ra-
Se levantaron algunas quejas acerca dical que en generaciones precedentes,
de que los niños y adolescentes rura- dado que el uso de nuevas tecnologías
les de menor edad, suelen tener me- de comunicación supone el desarrollo de
nos derechos en el grupo familiar; mapas cognitivos inéditos” (184).
además de no tener derecho a opi- Aunque al mostrar sus gustos y levan-
nar en la vida del hogar, están siem- tar dicho novedoso cúmulo de demandas
pre subsumidos al mando y voluntad conjuntamente con el derecho a “ser jo-
del hermano mayor, o incluso usan la ven”, a “la igualdad de género”, se criti-
ropa usada del hermano/a mayor. can fuertemente los remanentes existentes
Si se tiene en cuenta que la exigibili- en sus propias comunidades, de autorita-
dad del acceso a posibilidades de en- rismo, adultismos y machismo aplastantes
tretenimiento es prácticamente desco- de derechos básicos (hasta ahora insufi-
nocida en las reivindicaciones clásicas cientes), como la libertad, la autoestima y
de la juventud campesina paraguaya, la autonomía de la persona joven.
en estos nuevos tiempos de globaliza- Se reitera, que cualquier violación a los
ción, la juventud de Asagrapa visuali- derechos -tierra, acceso a la educación, li-
za claramente el derecho a contar con bertad de expresión, recreación o hasta
“espacios de recreación netamente ju- participar en las decisiones productivas-
veniles”, concebidos como parte de son concebidas como serias amenazas a la
los servicios básicos. vocación de agricultor, que al provocar una
A la par que la juventud urbana, violación combinada (por ejemplo de dos
cuestiona al entretenimiento y recrea- derechos), da lugar a la decisión de pasar
ción como mercados alienantes, que a ser migrante. A manera de lecciones que
exigen dinero y consideran a la juven- arrojan estos significados, se hace necesa-
tud como “objeto”14. rio pues profundizar su comprensión.
Además del uso de equipos de radio
y música, un “signo” de la inclinación 3.1.2 La percepción de la com- 14
Al respecto cabe recordar la crítica
por las tecnologías de la información plementariedad e integralidad de de Reguillo (2000) “…mientras el
Estado, la familia, la escuela suelen
y la comunicación, es la generaliza- las demandas pensar en los jóvenes como categoría
ción del uso de teléfonos celulares La juventud rural organizada de Asagra- en tránsito, donde lo que vale es el
futuro, el mercado entendió que para
para las “comunicaciones entre los pa, promueve un innovador modelo de los jóvenes el mundo está anclado en
el presente” (27).
propios jóvenes y la familia.” comunidad campesina cuyos ejes estra- 15
Según datos recientes de la
tégicos son la “reconstrucción de las co- Comisión Nacional de Telecomunica-
ciones, a nivel nacional se registran
Si bien todavía las juventudes campe- munidades” y la “territorialización de las 80.000 cuentas de Internet (lo que
representaría menos del 1.3% de la
sinas en el Paraguay se encuentran muy luchas sociales”. Estas últimas dieron lu- población), de las cuales 40.000 son
cuentas de banda ancha. La tele-
lejos de la cultura virtual y mucho más gar al ejercicio de la autonomía y la prác- densidad de líneas fijas es del 4,4%,
cerca de la cultura tradicional campesina15, tica de la autogestión, que pone de mani- 4.000.000 de usuarios de celulares
y 70.000 hogares tienen acceso a TV
en forma gradual y puntual están tenien- fiesto varias innovaciones. Primero, otorga por cable (Conatel, setiembre 2007).
ESPACIO
TRABAJO JUVENIL
Y ORGANIZACIÓN
CAMPESINA
TERRITORIO - PRODUCCION
M
IG
RA
CI
ON
ES
32 Base IS/Ibase/Pólis
De este modo, al expresar la Situa- nómicos, sociales y culturales, pues cada
ción Tipo estudiada, en un doble eje de dimensión incide sobre el resto, condicio-
coordenadas “espacio y tiempo” permi- nándose en más o en menos. Todos jue-
te mostrar que, en definitiva, la constitu- gan una interacción con una dinámica si-
ción e interacción de varios factores de nérgica creciente.
las demandas juveniles confluyen y ge- Como queda contrastado en la inves-
neran un “camino” hacia la reconstruc- tigación, dada la relevancia del fenómeno
ción de las comunidades campesinas, de las constantes migraciones en el Para-
en cuya arquitectura los y las jóvenes guay, se lo puede entender como ocupan-
son sujetos fundamentales. do plenamente el arco que atraviesa el
La tierra, en el vértice indica un pun- campo de las coordenadas. Todas las pro-
to casi central de los reclamos. Como las puestas planteadas para materializar sus
y los jóvenes consultados dicen, la tie- derechos, por parte de la juventud orga-
rra es “la madre”, dado que el espacio es nizada bajo estudio, se desarrolla de cara
visto por la gente joven como aquello que al contexto de una permanente movilidad
les da oportunidades de vida, de llevar poblacional. La particularidad de la expan-
adelante sus proyectos de vivir en comu- sión del agronegocio es que al perder el
nidad, de viabilizar la producción agrícola campesinado su funcionalidad como sec-
en nuevas comunidades rurales. Desde tor económico, provoca fuertes procesos
ese vértice, el eje articula el tiempo con de descampenización. En esa medida, la
el espacio, dando un amplio campo en el presión ejercida por los diferentes eslabo-
cual se mueven factores de la demanda, nes de los agronegocios se encadena con
que enfatizan la ocupación y tenencia le- la migración, que prácticamente destierra
gal de las tierras, así como la importan- a las familias campesinas.
cia de las organizaciones sociales, y fuer- Sin dudas, para el universo juvenil
zas comunitarias. Asimismo, desde dicho campesino entrevistado, cada componen-
vértice se despliegan dos componentes: te de las demandas a su vez está teñido
i. el que generan equidad en el acceso y por imaginarios y representaciones socia-
distribución del conocimiento, es decir, la les que van configurando -en pleno pro-
educación; y ii. el referido a todas las ex- ceso de globalización- un estilo propio de
presiones libres que mediante la recrea- ser y actuar, volcado hacia el sentido de
ción y la sociabilidad manifiestan como comunidad y la cultura juvenil impregna-
estado de vida joven. da de universalidad.
En este sentido, entonces, tanto el En síntesis, el Gráfico 1 representa las
eje horizontal como el vertical, organi- facetas de la demanda juvenil campesina
zan el conjunto de factores de las de- de Asagrapa y la imagen juvenil, proyec-
mandas juveniles. tada en una combinación interaccionista
Las tendencias que marcan las op- que rompe con las posturas sesgadas y de
ciones 1 y 2 representan la visualización falta de cumplimiento de derechos.
y actuación sobre uno o más de los dere- Si en el enfoque de derechos y en
chos económicos y sociales, aunque con los estudios más recientes es claro que
respuestas inequitativas, pues son consi- en la construcción del desarrollo juvenil
deradas por los jóvenes asociados, como sostenible el conjunto de “derechos ejer-
parciales e insuficientes. cen influencia unos sobre los otros…”
Sin embargo, la opción 3, expresaría (IBASE, 2007), el Gráfico también inten-
la interacción del conjunto de factores se- ta dar cuenta de una acción combinada
ñalados que se combinan, y al hacerlo se y convergente que surge de la misma vi-
refuerzan mutuamente produciendo nue- sión juvenil campesina analizada. La Si-
vas alternativas que, a su vez, permiten tuación Tipo en su movimiento, promue-
el ejercicio de los derechos políticos, eco- ve modos de vida campesinos, formas
2
Motivaciones,
necesidades,
1 ideales
Historia
personal 5
del/la joven Ambiente
3 económico
9 Restricciones
Solidariedad de acceso y
entre pares permanencia
para estudiar
4
8 Boleto
10 Estímulo de
Indiferencia Estudiantil
los padres
del Estado
7 6
Intereses de Brecha entre
empresarios lo público
y privado
34 Base IS/Ibase/Pólis
El Gráfico de arriba hace referencia a presarios y sectores públicos institucio-
la trayectoria (de la instancia 1 a la 10) de nales, quienes intentan desmotivarlos, o
la juventud asociada a la Fenaes. La circu- directamente correr el foco de atención
laridad re-significa el ciclo de vida duran- de modo a debilitar las fuerzas del movi-
te el cual las diferentes generaciones de miento estudiantil. En el “medio” boleto
estudiantes de nivel medio “transitan” por quizá se vea la racionalidad del actor po-
el movimiento estudiantil y el espacio pú- lítico gubernamental que, por un lado, es
blico. Todos ellos con un mismo punto de un resultado como respuesta a la Fenaes,
partida común: la propia construcción de aunque con poca prisa para aplicarlo, y
la “identidad juvenil” y la trama de relacio- por el otro, responde a las presiones pro-
nes entre pares, aunque en cada biografía venientes de la cámara empresarial que
personal podrá tener rumbos y direcciones asiste a las negociaciones apreciable-
con sellos diferentes. mente organizada para defender sus in-
Indudablemente, una vez más se con- tereses. Son dos lógicas, valores y hasta
firma con esta Situación Tipo que las rela- lenguajes contrapuestos, el del movi-
ciones de las personas jóvenes son cícli- miento estudiantil y, el de la rigidez de
cas, dado el corto tiempo de permanencia las normas y procesos, todo lo cual lle-
(en el colegio, el club, el empleo, etc.) va al incumplimiento o al freno de la ma-
pero al mismo tiempo “construyen un yor parte de las demandas, pero además
continuo de capacidades y predisposicio- cierta solución y estabilidad del poder bu-
nes ciudadanas” que refuerza e integra los rocrático. Entre dichas racionalidades,
aportes de unos y otros. La memoria histó- como no se efectiviza subsidio alguno, la
rica personal y los aprendizajes dentro del asignación de los recursos gravita en un
movimiento traman las bases estudianti- tercero: el pasajero de todos los días.
les y alimentan el corpus de la Fenaes. Una cuestión no menos importante,
En la Fase 1, se indica la situación que se encuentra en medio de las fases
personal de la persona joven, su historia de los estudiantes, es la crisis que enfren-
de vida; y motivaciones, intereses, expec- ta la Fenaes con relación a la Ong Deci-
tativas y necesidades (en la Fase 2). Al damos, organización que compartió los
querer ejercer su derecho a la educación, impulsos y protestas. Hoy, las distancias
encuentra serias restricciones (Fase 3) marcan una serie de interjuegos de com-
que le impiden, en muchos casos, finali- promisos, intereses y posturas políticas.
zar sus estudios de nivel medio o alcan- Precisamente el esquema represen-
zar un buen rendimiento para proseguir ta ese continuo personal y del movimien-
otros o poder trabajar. to estudiantil, a través del cual transcurre,
Tanto las exigencias formales del sis- desde los deseos de estudiar, hasta de
tema educativo como las condiciones protagonismo de cada joven. Cada joven
socioeconómicas familiares, hacen del tiene sus biografías e intereses, pero en
Boleto Estudiantil (Fase 4), un requeri- un momento determinado los “une el de-
miento que tiene varias aristas. rechos del boleto estudiantil”, los une el
Así también, el conjunto de motiva- ejercicio del derecho a estudiar.
ciones y necesidades, ha gestado este Pero seguidamente, en dicho mo-
movimiento estudiantil como Situación vimiento se anteponen “barreras y res-
Tipo, que se encuentra “frente” a una tricciones” para el acceso y, sobre todo,
trama de intereses y relaciones que se la permanencia en el sistema educati-
oponen o al menos no les prestan la de- vo. Dichos obstáculos son de dos tipos.
bida atención. Entre ellos se destaca, Primeramente, de tipo económico so-
además del relativo apoyo de los padres ciofamiliar. Muchos consideran que no
y la disposición al acompañamiento de hay nada más desalentador para un jo-
los reclamos de los estudiantes, a los em- ven de estratos populares urbanos,
36 Base IS/Ibase/Pólis
teracción con otros espacios públicos, y de participación y formación ciudadana,
en contrapartida, más aislamiento social esos espacios públicos, que motivan fuer-
y generacional. temente a formar parte de movimientos
Con el derecho al Boleto Estudian- donde cada cual tiene diferentes deman-
til libre, no hay desacuerdos, es el motivo das, pero en síntesis, tanto en Asagrapa
por excelencia que une a la mayoría de como en la Fenaes se acentúan la auto-
los estudiantes de las ciudades del centro nomía y la relevancia del conocimien-
e interior del país, incluida buena parte to como herramienta y el trabajo como la
de los que concurren a establecimientos posibilidad de realización.
privados, quienes también sienten el de- Al mimo tiempo, los espacios de re-
recho a estar con los otros. Se unen tam- creación y expresión son expuestos por
bién a esta demanda, los pocos estudian- ambas organizaciones, así como la rele-
tes de origen rural. vancia y equidad en las relaciones de gé-
Es importante resaltar que tanto los nero y las intergeneracionales.
padres, la misma escuela, sus pares, Para terminar, los gráficos 1 y 2 po-
como los mismos empresarios, van pro- nen de relieve la presencia permanen-
yectando y sumando múltiples preguntas te de una cuestión transversal para
y respuestas, como actitudes de acepta- cada una de las Situaciones Tipo. Para
ción o rechazo hacia las causas enarbola- Asagrapa, el fenómeno del desarraigo-
das por el movimiento estudiantil, que en migración, en tanto, para la Fenaes, las
definitiva incentiva la predisposición a la significativas limitantes de acceso y res-
militancia y las luchas. tricciones educativas.
En resumen, como el Boleto Estu-
diantil es algo tangible y significa dinero,
lleva por detrás una serie de inquietudes
y exigencias. En este sentido, todos están
a favor también de más apertura de las
aulas, y los colegios, del logro de más es-
pacios para la expresión y producción ju-
venil. Entonces, junto a este reclamo que
a la vez es un derecho económico y so-
cial, se repliegan novedosas exigencias
de derechos ligados al acceso a la cultu-
ra, la libre organización, participación y
expresión juvenil.
Como en buena parte de America La-
tina, el movimiento estudiantil en Para-
guay es histórico, sobre todo si se consi-
dera a la juventud universitaria, con sus
demandas de transformaciones políticas,
sociales y en el campo de las políticas
educativas. Lo más reciente para el Pa-
raguay es que ahora, el movimiento estu-
diantil incorpora nuevas reivindicaciones,
relacionadas con derechos específica-
mente juveniles.
Desde una perspectiva comparativa,
ambas Situaciones Tipo tienen una cues-
tión común, que es la condición joven, y
lo más importante, los nuevos espacios
Este capítulo está dedicado exclusivamente a estudiar ten en diferentes ámbitos de la sociedad.
el ingreso de la Fenaes y Asagrapa al espacio público. Visto así, en el espacio público se
Luego se describirá la direccionalidad de sus deman- producen intercambios, se trama el senti-
das, el influjo que tienen en la arena pública -consi- do de lo que sucede en la sociedad, y es
derando los nexos, respaldos o disputas- así como la el lugar donde las demandas son suscep-
efectividad según el grado de materialidad-inmateria- tibles de convertirse en cuestiones sus-
lidad de las mismas, todo esto conjuntamente con las tantivas para el sistema político.
subjetividades de los actores juveniles. Siguiendo a Habermas, entonces, el
espacio público es “una estructura de
comunicación” de la sociedad civil que
La direccionalidad de las demandas de actúa como “un sistema de avisos con
las dos Situaciones Tipo analizadas en el sensores no especializados, pero que
apartado precedente, se las puede inter- despliegan su capacidad perceptiva a lo
pretar como activándose y desplegándo- largo y ancho de toda la sociedad”16.
se en una especie de zoom en el espacio En este sentido, el mundo exterior y los
público, que como una cámara, capta el escenarios ajenos a cada sector o clase so-
movimiento general de la sociedad. Pero cial, impactan sobre los diferentes segmen-
además en sus distintos recorridos, es tos poblacionales y actores. En particular,
dable detenerse en ciertos niveles y su- las libertades comunicativas se expresan
perficies para captar la trama de las den- en configuraciones bajo la forma de movi-
sidades particulares que pueblan la reali- mientos y organizaciones sociales. O hasta
dad de cada Situación Tipo. También con de manera más laxa, en la opinión pública,
este zoom, es posible realizar una com- la cual se asienta en una red comunicativa
prensión de los rasgos más singulares del de una producción discursiva que siempre
desarrollo de las demandas en movimien- resulta móvil, empero, en cierta medida or-
to, así como un análisis más pausado en dena las subjetividades y la acción.
16
Asimismo, Habermas aclara el
concepto de espacio de la opinión cuestiones político-institucionales y cultu- Por su parte, para la pensadora alema-
pública como “un fenómeno social
tan elemental como la acción, el rales, específicas de cada entorno. na Arendt, la sociedad tiene una escena
actor, el grupo o el colectivo; pero Tanto para Habermas como para
escapa a los conceptos tradicionales
que es el espacio público, distinto al gobier-
del orden social (…) no puede enten- Arendt, como se adelantara en el ítem no, en donde se trama el sentido de lo que
derse como institución y, ciertamente,
tampoco como organización; no 2.4, lo común del espacio público son las sucede en la misma. En el espacio público
es un entramado de normas con
diferenciación de competencias y acciones que allí se producen, y una vez se libran múltiples disputas de intereses y
de roles (…); tampoco representa habilitadas, son procesadas, pasando se-
un sistema; permite, ciertamente,
hasta necesidades de diferentes esferas del
trazados internos de límites, pero se guidamente a regir en la política. sistema político, en especial de la sociedad
caracteriza por horizontes abiertos,
porosos y desplazables hacia el exte- Partiendo del aporte de Habermas, civil. De allí los modos de exhibición en la
rior. El espacio de la opinión pública,
como mejor puede describirse es quien se aleja de la institucionalidad de escena pública, de aparición de los movi-
como una red para la comunicación las normas y preceptos, lo común y cen-
de contenidos y tomas de postura, es
mientos sociales, recreando sus discursos
decir de opiniones, y en él los flujos tral del espacio público reside en lo que y significaciones, el tipo de exigibilidad de
de comunicación quedan filtrados
y sintetizados de tal suerte que se denomina acción comunicativa, aquella sus derechos y hasta su sociabilidad.
condensan en las opiniones públicas
agavilladas en torno a temas específi- acción orientada al entendimiento. De manera complementaria a la con-
cos. Al igual que el mundo de la vida Pero ante todo, en el espacio o esfe-
en su totalidad, también el espacio
cepción arendtiana del espacio públi-
de la opinión pública se reproduce a ra pública, aparecen realidades sociológi- co que alude a la vida en “común” que
través de la acción comunicativa… “
(2001: 439-440). cas, necesidades e intereses que ya exis- permite la “libertad política”, también re-
38 Base IS/Ibase/Pólis
sulta clave incluir en lo común, lo plan- sus necesidades y expectativas las expre-
teado por Tocqueville, aquellos aspectos sen en ámbitos casi familiares, bebiendo,
contemporáneos más sociológicos de la compartiendo en ronda de amigos el típi-
diversidad, a saber: la situación de po- co tereré, en aquellos espacios más aco-
breza, el desempleo, las desigualdades tados de su vida cotidiana.
en el acceso a la educación, el avasalla- Sucesivamente, la intensidad de las
miento de la cultura y las identidades. En necesidades e intereses de las juventu-
este sentido, más allá de las hegemonías, des permite que, en ciertos momentos y
las exclusiones y la tendencia a la forza- bajo ciertas circunstancias, se vayan con-
da supervivencia del pueblo paraguayo, figurando organizaciones de juventud,
lo “público” es cada vez más un espacio para luego salir en búsqueda de espacios
de la pluralidad de las voces de la socie- más públicos donde cobrarán efectivo
dad civil. Ciertamente, el espacio público auge sus demandas, mediante determi-
está allí como un terreno apto para que nadas acciones y posicionamientos ante
también las juventudes busquen, y lu- la sociedad adulta.
chen con otras fuerzas para dar sentido a El espacio público a su vez, se ar-
sus proyectos, en definitiva, para lograr la ticula con el estilo propio de cada ge-
efectivización de sus sueños e intereses. neración joven17 , y dentro de esta di-
Teniendo en cuenta los lineamientos versidad de juventudes, con el tipo
señalados, será interesante ver seguida- sociocultural específico de ser joven, de
mente en qué medida la Fenaes y Asagra- vivir la juventud: joven campesino sin
pa se constituyen en el espacio publico, tierra, joven rural asalariado, mujer jo-
observando con detenimiento los diferen- ven migrante, estudiante mujer, estu-
tes zócalos de la vida publica en que ac- diante de sectores desfavorecidos, es-
túan, cuáles son las disputas que se libran tudiante de clases privilegiadas, joven
en estos lugares, qué sentidos y nuevas que no estudia ni trabaja, etc.
historias se generan a partir de sus múlti- En el Paraguay, las manifestaciones
ples acciones y expresiones juveniles. y demandas juveniles en estos nuevos
17
Como asegura Margulis y Urresti
tiempos saltan a la palestra, ahora por (1996) “La generación, más que
vías no convencionales. En efecto, las ju- una coincidencia en la época de
nacimiento remite a la historia, al
4. 1. LA JUVENTUD COMO CAJA DE ventudes viven un momento de la historia momento histórico en el que se ha
socializado. Aquí es donde debe
RESONANCIA DE LA CRISIS DE en que sienten que los partidos políticos inscribirse a las cronologías como ge-
REPRESENTATIVIDAD y el Estado son inútiles en sus vidas. Es nealogías, es decir, como parentesco
en la cultura y en la historia y no en
más, algunas personas jóvenes piensan la simple categoría estadística (…)
una verdadera humanidad frente a los
Desde la perspectiva del espacio público, que los perjudican fuertemente y estiman estímulos de una época (…) que im-
plica una cadena de acontecimientos
las Situaciones Tipo, en especial el compor- que no hay mucho sentido en la vida de de los que se puede dar fe en primera
persona, como actor directo, como
tamiento de las organizaciones como acto- las corporaciones. testigo al menos como contemporá-
res en sus entornos, actúan algo así como Para el caso de la juventud paraguaya neo (…) y, justamente por ello, no
es lo mismo estar en una edad o en
un parlamento de autoexpresión juvenil al- en general, es posible situar parte de la in- la otra, aun compartiendo el mismo
momento presente, el sentido que
rededor del motor de sus demandas. conformidad juvenil y -de la sociedad- en se le otorga a lo que acontece, en la
medida que se remite a una profundi-
En un primer momento, la juventud el raquítico papel del Estado a la hora de dad temporal diferente, no coincide.
paraguaya poco conocedora de cuestio- abrir condiciones para viabilizar sus pro- Y esto puede suceder con relativa
independencia de la clase a la que se
nes público-políticas, hace quizás que yectos de vida, fundamentalmente, inser- pertenezca” (26).
EXPRESIONES/ACCIONES DIRECTAS
18
Al tratar el abstencionismo electoral
IMPACTO MEDIÁTICO/
en Paraguay, conviene recordar el es-
tudio realizado por Morínigo y Lacchi COMUNICACIONAL
(2006), acerca de la problemática
del bajo empadronamiento de la JOVEN/ACTUACIÓN
ciudadanía joven, que destaca: “De
los 1.059.007 jóvenes con edad para
votar en el 2003, solamente 728.899 PROYECCIÓN/PÚBLICO-ESTATAL
se habían registrado en el padrón
electoral, el 68,8% del total de dicha
franja etaria; de éstos, siempre en el
2003, solamente 404.205 han parti- PARTICIPACIÓN SOCIAL:
cipado en las elecciones generales,
dato que constituye el 55,5% sobre
COMUNIDADES/COLEGIO
el total de empadronados y el 38,2%
del total de la población joven del
país…” (16).
40 Base IS/Ibase/Pólis
El Gráfico 3 expresa lo multidimen- nerse en sí mismas al entrar en la inte-
sional del espacio público. Como se verá racción de las redes y las alianzas; como
seguidamente, el espacio significa para existen en ambos casos.
las Situaciones Tipo, extensión indefini- Por su parte, la superposición de los
da y también porción de tiempo. En tan- planos intenta poner de manifiesto la con-
to, lo público, todo aquello que alcanza tigüidad en la actuación de los jóvenes,
un carácter notorio, manifiesto, donde que es más que una suma de partes.
las personas jóvenes actúan y sienten, y
se integran en una escala de relaciones 4. 2.1 El advenimiento de la
recíprocas, dinámicas y sinérgicas, su- democracia directa
perpuestas. Luego de la larga y amarga experiencia
Aunque esta dinámica cobre mayor o del régimen autoritario paraguayo, y casi
menor intensidad en cada una de las Si- con dos décadas de democracia electoral
tuaciones Tipo se evidencia en realidad cuyos resultados se hallan visiblemente
el tránsito, pues son lugares de paso por cuestionados, con severos niveles de in-
donde caminan innumerables actores, y cumplimiento de los derechos económi-
en ese tránsito es donde definitivamente cos, sociales y culturales, parecería que
“construyen” comunidad y contrasabe- emergen señales que deberían preocu-
res; cada uno se apropia de una mane- par a analistas y representantes políticos,
ra diferencial de un territorio, de un lugar, lo que según la expresión de Schnapper
sin dejar de ser influenciado por las re- (2004) sería una democracia inmediata19.
glas del lugar y el tránsito de otros (Del- La fuerza de la democracia direc-
gado, 2003). ta no es patrimonio exclusivo de la histo-
En este estudio se puede consta- ria política de la Atenas antigua, o de al-
tar que la comunicación es vertebrado- guna forma de aspiración de los nuevos
ra en cuanto al diálogo, la reciprocidad y movimientos sociales. En este sentido, in-
la alteridad, y junto con ella, surgen dife- teresa reconocer la adopción de formas
rentes tensiones en la construcción del de acción colectivas también por parte
espacio público. Una es la cuestión iden- de las personas jóvenes que militan en
titaria, aquello del ser joven y pertenecer Asagrapa y Fenaes. En sus respectivas
(como estudiante o campesino) que per- historias recientes, aún en un estado de
mite una expresión singular, que combi- apremiantes necesidades materiales, se
na el espacio con el cuerpo, que ocupa puede advertir que las prácticas partici-
un lugar, que toma posición, que está en pativas de estas Situaciones Tipo estarían 19
Si bien la autora se refiere a
Francia y a los países desarrollados,
una plataforma de relaciones sociales. corridas hacia el polo del ejercicio directo Schnapper, además de analizar
el debilitamiento de la crisis de la
El Gráfico en síntesis, representa la de la ciudadanía juvenil, apegadas a for- representación electoral, la volatilidad
del voto, la desafección de los
escala de relaciones que se van dando, mas de democracia más inmediata. partidos, sobre todo de la juventud,
tanto para Fenaes como para Asagrapa, reconoce como otra característica de
los nuevos tiempos, la emergencia de
cada una de estas organizaciones con a. La democratización construida por la Fenaes ciudadanos más autorreflexivos que
tienden al ejercicio directo de la par-
sus rasgos propios, pero en una misma Así, entre las principales acciones direc- ticipación, permitiendo la igualdad en
acto: “La multiplicación de formas de
fuerza direccional que es moverse y ac- tas de la Fenaes, sobresalen marchas de acción directa e inmediata también
tuar con algún sentido, hacia un objetivo, exigibilidad y formas de repudio estudian- se traduce en la reticencia creciente
hacia lo legal y lo representativo, juz-
solos o con otros. En esa escala, se te- til para lograr concretizar el derecho al gados ambos demasiado abstractos y
mediatos” (2004: 173).
jen historias de grupos que van contribu- Boleto Estudiantil, acciones como la toma 20
Durante el gobierno del presidente
yendo al continuo y, a la vez, conforman del edificio del Ministerio de Educación o González Macchi, la presión estudian-
til del Mobe fue tal durante todo el
un conjunto de acuerdos, desacuerdos y de paradas de trasporte público, senta- año 2000 para que se implementara
el medio Boleto Estudiantil, que el
contradicciones. das en las calles donde circulan los óm- haber obtenido la firma del decreto
Cobra importancia aquí el tema de nibus, incluso hasta los festejos de sus que promulgaba y ponía en vigencia
la Ley 2507, no logró desmovilizar a
las organizaciones, éstas al conectarse, logros políticos20. Las marchas se reali- la Fenaes, por el contrario, en dicha
ocasión, catorce mil estudiantes sa-
pasan por otra tensión, tal como mante- zan para apresurar la tramitación de los lieron a festejar al centro de Asunción.
42 Base IS/Ibase/Pólis
Recuérdese que esta estrategia no batucada y los carteles portados por la
es nueva para Asagrapa; arrancó hacia gente joven, como señales de búsqueda
mediados de la década del ochenta y se de protagonismo.
aceleró con la coyuntura política abier- En definitiva, aunque pueden ser más
ta luego de la caída del régimen autori- o menos perceptibles en el espacio públi-
tario en 1989. Se insiste, lo nuevo en es- co nacional, el conjunto de acciones de
tos últimos años es que se torna cada vez las Situaciones Tipo suponen una renova-
más difícil por dos motivos: el avance del ción de la política. Conviene en este mo-
enclave sojero y por la reacción de mano mento recordar lo encontrado en Asagrapa
dura de las fuerzas de seguridad del Es- por Kretschmer, que la juventud campe-
tado y de los mismos latifundistas. Por sina organizada incipientemente, estaría
tanto, si bien cada vez hay más desiertos transformando los hábitos tradicionales
de verdes sojales, las ocupaciones siguen de la cultura política, con nuevos valores y
estando en los proyectos de vida de la ju- prácticas centradas en la autogestión aso-
ventud campesina22. El motivo es claro: ciativa y la democratización de las relacio-
“Los jóvenes de ahora no tenemos tierra, nes de poder. Otro rasgo notable es que,
entonces tenemos que recurrir a la ocu- a diferencia de la generación adulta, la ju-
pación de tierra para tener un lugar como ventud de Asagrapa se vincula a un es-
jóvenes.” Aunque sea en un lugar extre- cenario político de redes de organizacio-
madamente alejado y casi inaccesible, nes campesinas y, lo más innovador, se
cuando se produce una ocupación, los vincula a diferentes plataformas y campa-
22
Durante el proceso de investigación,
campesinos saben muy bien que los es- ñas con organizaciones urbanas y sindica- se pudo conocer en Alto Paraná, una
muy reciente ocupación por parte
tán observando y la criminalización de la les. Esa es precisamente, una de las ca- de campesinos sin tierra asociados a
lucha está a un paso23. racterísticas de la actual configuración de Asagrapa, de unas pocas hectáreas
en el paraje de Chino-Cué, en manos
las luchas sociales que se plantean ante el de un latifundista. Los campesinos
aseguran que las mismas cuentan
c. La euforia juvenil como activadora de neoliberalismo. con problemas de regularización. La
ocupación está constituida por una
las identidades veintena de improvisadas viviendas,
Aún más, según Arendt, el espacio públi- 4.2.2 La proyección público- con fuerte presencia de jóvenes
acompañados de sus padres-asocia-
co es un lugar de constitución de identi- mediática dos quienes poseen experiencia en
este tipo de demanda; la mayoría de
dades sociales y políticas. Pasan días qui- Wolton (2000) sostiene que los medios los lotes son proyectados para jóvenes
hijos de asociados.
zá, en que las personas jóvenes pueden de comunicación de masas, además de 23
Las principales prácticas violentas
estar lidiando con las privaciones eco- la irrupción comunicativa de Internet, son hacia las organizaciones campesinas
son la intimidación y ataques por
nómicas, sin reunirse, casi en condición a la vez un símbolo y una de las princi- parte de militares, policías y privados
prepolítica, pero lo anterior no les quita el pales vías de entrada al espacio público, armados (guardias civiles). Desde la
transición democrática y hasta lo que
sentimiento y capacidad de participación, en el que residen una diversidad de uni- va del 2007, los asesinatos de cam-
pesinos ascenderían a un centenar;
pues llega el momento de juntarse y bus- versos sociales y culturales separados.24 buena parte de ellos se produjeron en
el nuevo siglo.
car espacios de expresión. Como se sabe, los medios de comuni- 24
Dejando de lado las críticas a
En lo que respecta a las dos Situacio- cación otorgan visibilidad a los aconteci- los medios, Wolton, señala que la
comunicación está en el centro de la
nes Tipo, los estudiantes y jóvenes cam- mientos y tienen la capacidad de proble- libertad y los valores de la democra-
cia. Por ejemplo, “la televisión es
pesinos se movilizan y comunican en di- matizar las demandas y a sus portadores. probablemente también un medio
ferentes espacios abiertos, donde fluye Pero además, pueden crear un entorno para soportar la prueba de la aper-
tura al mundo, extraordinariamente
la expresión juvenil, permitiendo que las social-público y político más propicio para desestabilizante, ya que olvidamos
con demasiada frecuencia que esta
identidades cobren vida y sentido. la efectividad de sus reivindicaciones. apertura hace tambalear los reparos,
las convicciones y las certezas…”
Si bien son largas las horas que im- Asagrapa es una asociación depar- En tanto, más adelante estima que:
plican las marchas o las sentadas, és- tamental (provincial/estadual), por tanto, “Para formular una demanda, es ne-
cesario organizar el acceso al mundo;
tas tienen un tremendo significado polí- el papel de la prensa es también más lo- y todo el sentido del lento movimiento
de emancipación política y cultural,
tico en cuanto al contenido estratégico, cal, circunscripto a la poderosa región de desde hace un siglo, consiste, por
intermedio de una oferta lo más
así como para dramatizar las demandas, Ciudad del Este y los pueblos de Alto Pa- extensa posible, en la capacidad de
en términos simbólicos. En las marchas raná. Sus acciones públicas no logran - comprensión del mundo (…) permite,
en un segundo momento, formular
se mezclan los cantos, la música de la aunque tampoco lo pretendan- producir una demanda” (2000: 71-72 y 74).
44 Base IS/Ibase/Pólis
impactante de estudiantes que cerramos interesan a los medios en estos últimos
el cruce de dos avenidas (…); o tuvimos años se relacionan a fenómenos tales
espacios en un programa de discusión como: suicidio juvenil, episodios de vio-
política de televisión con empresarios y lencia, experiencias paranormales de es-
con el ministerio, ¡en ese momento cree- tudiantes y otra serie de preocupaciones
mos que nos consideran como un actor adultas. De allí que uno de los dirigen-
importante!” En este sentido, el potencial tes de la Fenaes, cuenta que el periodis-
democrático y simbólico de los medios de mo acude a ellos: “…para preguntarnos
comunicación, puede hacer posible re- cuál era nuestra postura con respecto a
troalimentar las fuerzas juveniles y aflojar las drogas en colegios y cómo lo encara
las estructuras gerontocráticas o elitistas. el gobierno.”
Los entrevistados de la Fenaes tam-
bién manifiestan que la difusión por los 4.2.3 Las pujas y respuestas en
medios de comunicación de sus reclamos el nivel público-estatal
en diversas acciones directas, les ayuda Las demandas por la vigencia de los de-
muchísimo a tener una imagen positiva en rechos que plantea la ciudadanía, para
la “opinión pública”, tanto hacia la socie- que trasciendan la sociedad civil y pue-
dad en general como ante muchos de los dan modificar posiciones de privilegio o
titubeantes padres26, quienes comienzan a asimetrías en los derechos, indefectible-
comprender, valorar y terminan aceptan- mente necesitan que las mismas sean re-
do la causa de la lucha de sus hijos. cepcionadas por parte de distintos acto-
Así, el hecho de que la demanda sea res político-estatales e incorporadas en la
incluida en las portadas de los más im- agenda de las políticas públicas.
portantes periódicos del país (o de su
ciudad más próxima), o que los protago- a. Las reivindicaciones de Asagrapa
nistas sean reporteados por el periodismo Como se señaló antes, los jóvenes de
radial y televisivo, permite: Asagrapa también participan del espa-
cio público como fuerza movilizadora,
i. aunque quizá no se logre agavillar la en sus campamentos juveniles y en las
atención de la opinión pública alrede- acciones de protesta y de exigibilidad al
dor de las demandas de la juventud, Estado. En esta fuerza, hay un claro con-
al menos es posible sensibilizarla so- vencimiento en cada joven campesino,
bre lo justo de sus exigencias, que se que si no se logra una reforma integral
comience a hablar de los estudiantes de la tierra, todas las demás demandas
y desplazar algunas posturas perimi- no podrán concretarse.
das hacia la juventud; y Uno de los máximos lideres adultos
ii. a los movimientos juveniles penetrar de Asagrapa hace un balance favorable de
con más facilidad en la familia y gra- los resultados que ha obtenido el gremio
dualmente en los estamentos de sus campesino: “…creo que Asagrapa a través
centros educativos o comunidad, su- de la lucha, se ganó un espacio y recono-
biendo así a los peldaños del espa- cimiento importante por parte de institu-
cio público, y proyectarse fuera de las ciones del Estado, en este caso, del Indert.
fronteras nacionales. Han existido casos muy conflictivos, que
sin necesidad de viajar para hablar con el
Una conducta cada vez más usual de presidente, se solucionó por vía telefónica
la prensa paraguaya que suele tratar te- (...); pero en los trámites administrativos
mas de juventud, es no solo consultar a aún existe mucha burocracia y hay mucha
los especialistas, sino cada vez más, a las corrupción en el Indert y dificulta mucho 26
Según la gente joven de Asagrapa
propias organizaciones juveniles para que el aceleramiento del proceso de legaliza- y la Fenaes, los padres tienen una
autoridad mayúscula sobre los hijos a
den sus pareceres. Las crónicas que más ción de nuestra tierra.” lo largo de la juventud.
46 Base IS/Ibase/Pólis
De alguna manera, a través de ac- Mobe, y más recientemente la Fenaes),
ciones directas de exigibilidad del bole- lo hacen prometiendo, inclusive apoyan-
to libre o el acceso a la tierra mediante la do la aprobación de una ley pero sin que
ocupación, que busca la Reforma Agra- rija lo dispuesto en sus articulados. Lue-
ria, hacen vibrar de tanto en tanto a las go, como lo indica la experiencia reciente,
estructuras de autoridad. Ya sea para los en el acuerdo final se termina admitiendo
poderes del Estado y más aún para los solo la gratuidad del medio boleto.
empresarios del transporte y latifundis-
tas-agroempresarios, las demandas de la Negociación y después… qué?
Fenaes y Asagrapa son consideradas res- Pero como se adelantara en el subapar-
pectivamente como temas controversia- tado 2.4, la historia de las demandas so-
les. De hecho, tanto las ocupaciones por ciales en el Paraguay, salvo hitos históri-
parte de campesinos sin tierra, como las cos -en los casos analizados, reconocer
movilizaciones de protesta de los estu- el medio boleto, los centros de estu-
diantes provocan, a todas luces, la hostili- diantes o una ocupación- lo más típi-
dad de sectores empresariales, y gran in- co es que la atención oficial y las nego-
comodidad en el Estado. ciaciones prosigan con un interminable
Empero, resulta importante destacar período de rodeos en la definición de
que el recurso de la ocupación campe- respuestas, hasta que cede una parte,
sina de tierras así como las movilizacio- generalmente el sector más débil. O la
nes estudiantiles, obligan a las autorida- respuesta se produce, inclusive se obtie-
des, primero a escuchar los reclamos de ne la ley que garantiza el derecho, pero
cada organización, segundo, a sentarse lejos de cumplirlo, se “dilata su efectivi-
a negociar, y tercero a tomar alguna po- zación”: los carnets y bonos no llegan en
sición. Quizá la Fenaes – aprovechando los primeros largos meses del año lecti-
las ventajas de los centros urbanos y los vo, mientras que los estudiantes se las
medios de comunicación – es la que tie- deben arreglar para sufragar dicha obli-
ne más éxito en lograr dramatizar y sen- gación estatal.
sibilizar a la opinión pública, por lo cual, Pero más allá de dichas barreras, la
inmediatamente, parece producirse una demanda del Boleto Estudiantil ha logra-
modificación en las relaciones de fuerzas do penetrar en la agenda pública y éste
y preocupar al poder político, quien abre es el mayor logro de la Situación Tipo.
sus despachos a la negociación e induce Desde la percepción del Estado, una de
la asistencia de los transportistas28. las máximas autoridades del Ministerio
Cuando la organización juvenil y sus de Educación consultada en el estudio
aliados inciden de tal forma en el espa- sostiene que los vínculos han sido po-
cio público, las autoridades se ven ante la sitivos con la Fenaes. Resulta muy sig-
disyuntiva de dejar exacerbar las protes- nificativo el tono amable con el cual se
tas o tratar de manera formal las deman- refieren desde el Ministerio, a la organi-
das, a través de los representantes de zación y el alto reconocimiento hacia el
cada parte. Es cuando se escucha la uti- movimiento estudiantil.
lización del término “negociación”. Según Además de exponer las buenas inten-
los testimonios, a veces los responsables ciones del gobierno hacia los reclamos es-
del gobierno (y los propietarios de buses) tudiantiles, la alta funcionaria enfatiza varias
prometen, aunque sin solución; en otras, cualidades de la federación: se trata de una
cumplen tarde y sólo parte de lo exigido. de las más destacadas organizaciones ju-
Así por ejemplo, si bien los gobiernos veniles del país, sus virtudes democráticas 28
Recuérdese que el principal
opositor de la Fenaes, según sus
en varias oportunidades acaban por al me- y la excelencia en la formación de dirigen- protagonistas, es el empresariado
nos atender los reclamos del movimien- tes, la alta capacidad técnico-política a la de transporte públicos de pasajeros
y, dentro de éste, algunas empresas
to estudiantil (primero el Fes, luego con el hora de presentar sus reclamos, el esfuerzo más que otras.
48 Base IS/Ibase/Pólis
Según los estudiantes, más allá de lo- dad asociativa crea oposición en sec-
gros valiosos y a la vez parciales, buena tores de la política tradicional, quie-
parte de las demandas no se han resuel- nes despliegan distintas artimañas de
to satisfactoriamente, por ejemplo, varias desprestigio de Asagrapa y sus inte-
aristas de la reforma educativa. Este pesi- grantes: desde clientelismo y acusa-
mismo o desconfianza parcial de la Fenaes ciones hasta chismes de entre casa.
hacia el Estado sufrió una profundización iv. los dirigentes jóvenes y adultos son sen-
durante el 2007, con la denuncia por parte tidos como amenazantes para los intere-
del periodismo de corrupción en torno a la ses de los grandes vecinos propietarios.
gestión del Programa Vaso de Leche, bajo v. en todos estos casos, hay una tenden-
la órbita de la cartera educativa. cia a concebir a los asociados como
En definitiva, para la Fenaes, los trans- “comunistas”.
portistas y los intereses políticos particula-
res, enmarcan y restringen las posibilidades Por su parte, la Fenaes, a nivel de sus
de efectivizar las demandas del boleto, per- dirigentes y los Centros de Estudiantes, tam-
mitiendo que el Estado se subordine más a bién soporta a grupos detractores. Algunos
los empresarios que al capital humano con- delegados de cursos cuentan que la visión
tenido en la población juvenil. de algunos docentes y autoridades escolares
acerca de la organización juvenil “es para
pelearse con los profesores…Una visión de
4.2.5 Xenofobia en algunos dictadura aún y de que les van a sacar au-
adversarios toridad a ellos”; “…dicen que la Fenaes es
En pleno inicio del tercer milenio, la ju- manipulada por la gente de la oposición.”
ventud paraguaya aún es sojuzgada por Máxime, como se verá a continuación, al
incomprensiones y estereotipos desde momento de salir de los establecimientos es-
ciertos sectores del imaginario social, colares para participar de alguna marcha.
que ameritan su atención, pues pueden
convertirse en ingeniería política, es de-
cir, en modos de actuar desde las esfe- 4.3 LA CONQUISTA JUVENIL DE
ras de poder. ESPACIOS COMUNITARIOS
Del análisis de las narraciones de la
juventud de Asagrapa y algunos actores En el abanico de presencias ciudadanas y
claves, se pude detectar que circula en expresiones juveniles, se puede describir
cierta parte del imaginario local y nacio- la aparición de las Situaciones Tipo en es-
nal, una percepción y actitud de natura- pacios específicos. La juventud de Asagra-
leza “macartista” hacia todo lo que sea pa, acotada a las compañías rurales, y la
Asagrapa, por ejemplo en: Fenaes en las comunidades educativas.
50 Base IS/Ibase/Pólis
construir comunidad, ya que no se pue- (promedian los 16 años de edad), tienen
de construir con cinco o diez personas, la capacidad de prolongar la nueva expe-
sino con el trabajo de toda la gente (…) riencia de agricultura más allá del cerco
hay compañeras y compañeros dentro de de la finca o colonia, junto con la filosofía
la comisión del colegio, de la iglesia, ca- y las ideas en que la propuesta ecológica
tequistas, intervienen en todo, y aprove- se asienta.
chamos los espacios para la juventud de Finalmente, estas conquistas juveni-
Asagrapa.” les en los espacios públicos locales de la
Situación Tipo, se refuerzan con la asun-
El papel innovador de la juventud y el ción de dichos actores jóvenes a roles
efecto demostración como promotores, educadores populares
Si bien las prácticas productivas agroeco- y ambientalistas dentro de las comuni-
lógicas -que se basan en conocimientos dades campesinas en las que residen. Y
campesinos y prácticas campesinas tradi- tienen una repercusión favorable para el
cionales- se están desarrollando por ahora crecimiento y la identidad positiva como
a nivel de pocas chacras, es preciso recor- sujetos jóvenes.
dar lo demostrado por la sociología rural.
En los contextos de unidades campesinas 4.3.2 La crucial relación de Fenaes
prima fuertemente la preocupación por la con las instituciones escolares
seguridad alimentaria, siendo alta la incer- Como se infiriera antes, al analizar el es-
tidumbre del comportamiento de los mer- quema de circularidad de las demandas
cados, los precios o el clima, lo que hace de la Fenaes en el corazón de la Situa-
que en la percepción campesina existan ción Tipo y sus derechos exigidos, se ha-
fundados temores a tomar riesgos median- lla la institución educativa, es decir, los
te la incorporación de nuevos procesos colegios; y en su interior están sus Cen-
productivos, como puede ser el caso de la tros de Estudiantes.
agroecología. Sin embargo, para los miem- Como lo expresa Gentili (2007), de la
bros de Asagrapa, a diferencia de aquellas escuela no se espera nada y a la vez, se
unidades de productores que no tienen espera todo; son dos posiciones contra-
fuerza de trabajo joven, son precisamen- dictorias que reflejan una tarea que aun-
te los hijos quienes mejor aprenden, así que insostenible, es la única real, dado
como adoptan más veloz y adecuadamen- que la escuela es el único espacio pú-
te la agroecología en la finca. A partir de blico y humano que sobrevive, la últi-
los positivos resultados obtenidos en un ma frontera de lo público, y en la cual se
puñado de experiencias con jóvenes, es- pueden arriesgar prácticas igualitarias
tán comenzando a ser atendidos por todas que atenúen las desigualdades sociales.
las miradas y oídos de la comunidad y de Esto también se evidencia en las dife-
Asagrapa, a veces incluso reciben visitas rentes manifestaciones que surgen ante
del país y el extranjero. las actuaciones de la Fenaes. La calidad
Lo anterior es altamente positivo en de la educación se traduce en asegurar la
el campo del extensionismo agrario, des- igualdad ante el acceso al conocimiento,
de donde se visualizan dichos emprendi- motivo por el cual, las luchas estudianti-
mientos y a sus líderes innovadores, que les se asocian con la promoción de sus
obtienen resultados favorables como “ex- propios derechos, y el mismo Boleto Es-
periencias testigos”, logrando demostrar tudiantil es el símbolo de la disparidad en
al resto de la comunidad de pequeños cuanto a posibilidades.
agricultores, que es factible introducir in- La educación, como la política, no
novaciones o combinar los saberes perdi- existe sin la acción de algunos que in-
dos con nuevas relaciones tecnológicas. terpretan y dan sentido a otros, el riesgo
En definitiva, sus jóvenes innovadores del malentendido, el riesgo del fracaso,
52 Base IS/Ibase/Pólis
Algunas apreciaciones de estudian- En este aspecto, cabe resaltar la me-
tes apuntan a señalar que dicho ejerci- ritoria eficacia de la Fenaes para poder
cio del poder en los colegios se debe a articular lo público con lo privado, algo
que existiría un vínculo directo entre las tan difícil de lograr inclusive por los mis-
órdenes impartidas por el Ministerio de mos adultos, más aún cuando allí inciden
Educación, la cadena de supervisores, y fuertemente las diferencias de clase y las
la manipulación de las decisiones del di- discriminaciones. Dejando de lado algu-
rector respecto al proceder escolar ante nas diferencias de estilo, en lo concreto,
las acciones directas de la Fenaes. Tam- la Fenaes tiene entre sus filas a estudian-
bién los entrevistados de la Fenaes ha- tes de colegios públicos y privados, lo-
cen notar actitudes infantiles por par- grando enriquecerse de esta diversidad.
te de directores que tratan como niños Por otro lado, el buen papel en los
a los estudiantes, les prometen autoriza- colegios por parte de la Fenaes, puede
ciones, y que luego los engañan con di- ir estableciendo vínculos con sus esta-
ferentes recursos. mentos. En algunos, se ha logrado una
Frente a estos testimonios, se puede alianza estratégica, que permite que
inferir que en el subsuelo de las prácti- los mismos medien favorablemente ha-
cas escolares en el Paraguay, aún perma- cia el tratamiento de las reivindicaciones
nece una cultura que promueve la esca- por parte del Ministerio de Educación.
sa preocupación hacia la participación en Destaca también la eficacia que pue-
la lucha por los bienes públicos, mientras de tener el equipo de gestión de un es-
estimula en el alumnado, conductas indi- tablecimiento, a la hora de relevar la in-
vidualistas, acríticas y competitivas. formación exigida por el ministerio para
Como parte de esta crítica, la juven- tramitar los apreciados carné y bonos
tud de Asagrapa también denuncia el del medio pasaje.
estado de descomposición de la actual Otro nivel de lucha por la expresión
educación: no fomenta el diálogo, for- juvenil es el trabajo y la militancia en los
ma mentalidades pasivas, no ofrece co- Centros de Estudiantes, verdaderas usi-
nocimientos para la emancipación de los nas de receptividad y procesamiento de
alumnos, los docentes son autoritarios, demandas estudiantiles. Allí se recep-
dispersa la realidad de las familias cam- cionan inquietudes sobre la cotidianei-
pesinas y, hasta fomenta el desarraigo. dad escolar, acerca de la aceptación o
Sin embargo, según los estudiantes no por parte de los conductores, del Bo-
de la Fenaes, cuando se instalan nuevas leto Estudiantil, se intercambian opinio-
capacidades de gestión y enseñanza, los nes sobre el trato de los docentes, las
colegios gradualmente van adoptando po- condiciones de enseñanza-aprendiza-
siciones más democráticas con relación a je y los pareceres acerca de las acciones
la participación estudiantil y la cultura ju- que han de emprenderse durante el ci-
venil. De hecho, también los estudiantes clo lectivo.
manifiestan que hay un grupo importante A pesar de los obstáculos institu-
de colegios y docentes con actitudes de- cionales y culturales, desde el punto de
mocráticas hacia el movimiento. vista de la efectividad de la lucha de la
Ciertamente, los simpatizantes de la Fenaes, uno de sus logros a nivel de ins-
Fenaes, no desconocen el fuerte apoyo tituciones, es haber permitido la aper-
que tienen en algunos colegios, ligera- tura de los Centros de Estudiantes. Otro
mente más palpable en los colegios pri- resultado es que los colegios gradual-
vados, por ejemplo, de aquellos dirigidos mente se han tornado más tolerables o
por jesuitas, con una reconocida trayec- flexibles a la participación estudiantil y a
toria en promoción de la juventud en el considerar en la cultura escolar las liber-
Paraguay. tades básicas y la libre expresión.
54 Base IS/Ibase/Pólis
Muchas demandas que quizá se con- “Veo que hay un cambio en la evolu-
ceptualizan como simbólicas, de ninguna ción de las generaciones, anterior-
manera son inmateriales, ya que en prin- mente los de nuestro tiempo éramos
cipio las demandas simbólicas aluden a más ignorantes, pero la generación
cuestiones totalmente inmateriales: per- de ahora, yo puedo ver eso en mis hi-
misos para salir de la casa, para partici- jos y nietos, tienen muchas habilida-
par en reuniones juveniles y en diversas des, es muy grande la diferencia.”
tareas colectivas, o la libertad para en- “En aquel tiempo había diferencias
contrarse con amigos y la pareja. de cómo nos vestíamos entre el va-
Pero hay demandas, como las liga- rón y la mujer, las mujeres cada una
das a varias de las reivindicadas por la teníamos un chancho y gallinas, y
Situación Tipo que no son integralmente cuando uno se hacía joven uno tenía
simbólicas, pues para que se efectivicen que vender eso para poder comprar
como tales, requieren materializarse en ropa, y solamente cada año uno se
cosas concretas: un salón de juegos, di- compraba ropa nueva.”
nero para una entrada, un playón recrea- “Tiene mucha importancia la organi-
tivo, elementos deportivos, etc. zación juvenil, porque nosotros que-
remos reconstruir la comunidad, ¡y
Sobre las relaciones intergeneracionales una comunidad sin juventud qué cla-
A diferencia de algunas experiencias de se de construcción vamos a hacer! Y
organización en juventud “antiadultista” nuestros líderes tanto adultos como
que tienden a conformar gettos, en las jóvenes están procurando mucho
instancias de la juventud integrante de para que la juventud se quede en la
Asagrapa -no exentas de divergencias y comunidad, porque solo con ellos va-
hasta choques generacionales- se relacio- mos a realizar la reconstrucción.”
na y despliega una fuerte vida asociativa
tanto intergeneracional con la asociación Junto a lo anterior, cabe destacar que
campesina, como en las comunidades. si bien los varones y mujeres jóvenes ha-
Por otro lado, es durante el traba- cen notar en su entorno fuertes posicio-
jo juvenil en las comunidades y la serie- nes verticales entre generaciones, sin em-
dad del tratamiento de sus demandas, bargo, cuando el padre del joven es socio
que la comunicación intergeneracional de una organización campesina muestra
mejora, lo cual le permite aparecer po- una clara estrategia participativa hacia la
sitivamente a la juventud como suje- juventud. Tal como el caso de Asagrapa,
to: “…pero demostramos en la práctica donde las discusiones en torno a la situa-
que existe, vamos consiguiendo espa- ción y rol de la juventud en el desarrollo
cios, así el grupo va siendo aceptado.” rural permite un gradual descongelamien-
Para ambas generaciones no hay du- to de las posiciones adultistas.
das que en el campesinado, la juventud La reflexión de los dirigentes jóvenes
también existe. sobre la falsa dicotomía viejos-jóvenes es
Por su parte los mismos padres, so- contundente: “como juventud pensamos
bre todos las mamás, desde la perspec- que la unidad productiva se debe basar
tiva de la reconstrucción de las comu- en el diálogo, porque nosotros somos un
nidades campesinas, reconocen dos sector importante de la unidad producti-
cuestiones positivas hacia la juventud; va, es la mayor parte, es el actor que tie-
primero, que no sólo la juventud existe ne más energía, que tiene pensamiento
sino que en realidad: “Asagrapa no tiene más allá de todas las cosas (…) porque
futuro sin la juventud.” Además, valoran nosotros como juventud también depen-
las ventajas y estéticas que exhiben las demos de la producción para que poda-
nuevas generaciones del campo: mos desarrollar un modo de vida dentro
56 Base IS/Ibase/Pólis
la Ong, en tanto el otro grupo -en bue- De esta manera, nuevamente siguiendo a
na parte conformado por los lideres más Giddens (1999), los colectivos son capa-
históricos- se define como a-ideológico - ces de apartarse de las tradiciones y ru-
aunque no lo sean en su vida ciudada- tinas, generando “reflexividad.” O como
na- dentro de la Fenaes, y defienden la diría Arendt, más allá de las relevantes
alianza estratégica con Decidamos, y una acciones instrumentales, las personas
autonomía mas gradual. construyen nuevas experiencias y aportan
invenciones, con la posibilidad que se ge-
nere el juicio reflexionante, o mejor aún el
4.5 LA PROYECCIÓN A NIVEL DE LO juicio político que según la pensadora es
“PÚBLICO-ASOCIATIVO” el juicio por excelencia.
En cierta medida, se puede ver que
Finalmente, como parte del espacio pú- las acciones en el tiempo cobraron una
blico es dable incluir la participación y efectividad en cuanto al sostén tem-
accionar de los respectivos colectivos ju- poral, la presencia real en las comuni-
veniles. La misma organización juvenil es dades y el impacto en los grupos. Otro
un lugar (público) donde la gente joven rasgo importante en términos cualita-
de similares condiciones y necesidades tivos en ambas Situaciones Tipo es la
se reúne para tratar sus asuntos comu- relevancia de la actuación; pues existe
nes, sus inquietudes, y así van constru- un progreso favorable en sus dos am-
yendo y fortaleciendo vínculos. Cierta- bientes, es decir, ciudades y comunida-
mente, la participación en la respectiva des campesinas en cuanto a la apropia-
organización es uno de los primeros pel- ción de las personas jóvenes de lo que
daños donde las personas jóvenes como significa inclusión con derechos.
parte de la sociedad civil se organizan y, Así, en la medida que las juventu-
como se vio anteriormente, salen a la are- des de la Fenaes y Asagrapa van adqui-
na pública más amplia. riendo mayor visibilidad en el espacio
En las pequeñas reuniones o en las público, van siendo reconocidas por or-
respectivas asambleas cada joven tiene la ganizaciones fraternas, ingresando así a
oportunidad de tomar la palabra. diferentes plataformas y relaciones con
Cada organización juvenil, inclusi- actores que trabajan en el campo so-
ve cada uno de sus espacios -por zona, cial o juvenil. Propios y extraños a cada
comunidad, responsabilidad- organi- una de las Situaciones Tipo, coinciden
za eventos formativos, talleres, campa- en que el principal rasgo de las organi-
mentos y articulaciones del tiempo libre. zaciones es la alta contribución que ha-
A su vez, la organización juvenil funge cen para democratizar los soportes en
como contenedora de los problemas fa- los que están insertos. De este modo,
miliares, lo cual es una desventaja para los grupos de juventud, sean campesi-
aquellos muchachos y muchachas que nos o estudiantes, metidos en los confi-
no están organizados. nes de las murallas de sus colegios o en
En la dinámica de la organización, las los cercos de sus chacras, están pasan-
personas jóvenes vuelcan sus esperan- do de la invisibilidad e impotencia, a la
zas y dudas, escuchan nuevos concep- visibilidad.
tos, tienen la oportunidad de aprender y En un arco apreciable de espacios,
amplían sus referencias para compren- muestran sus demandas y hasta se reve-
der más al mundo, adquieren fundamen- lan contra aquellos que subestiman sus
tos políticos, miden sus capacidades y exigencias o los oprime. Pero sobre todo,
posibilidades, actúan y hacen sus pri- muestran “signos” de que se están ani-
meras apariciones públicas. En definiti- mando a desarrollar no solo planes de lu-
va, deliberan y amplían su capital social. cha, sino también políticas (policy).
58 Base IS/Ibase/Pólis
teorías políticas, por la peculiaridad y di- otros factores políticos como emergencia
ficultad para comprender sus procesos de necesidades y demandas posterga-
sociopolíticos. das. Sobre todo, desde el año 1989, con
Así, salvo coyunturas especiales, tan- el renovado escenario de libertades polí-
to en la historia pasada como presente ticas se despliegan las fuerzas sociales y
de la sociedad paraguaya, el ejercicio de populares que buscan de distinto modo
los derechos de ciudadanía por parte de romper con la matriz autoritaria, empren-
las mayorías populares volcadas a satis- der saltos cualitativos de diferente or-
facer sus necesidades de sobrevivencia, den y dirección. Este nuevo aparecer de
ha dado paso a la despolitización bajo di- las identidades de la sociedad civil supo-
ferentes formas, ya sea: obediencia y te- ne, precisamente, un movimiento de re-
mor a sectores dominantes, o simple re- sistencia. En efecto, en más de un senti-
ticencia, como indicativos de distintos do, esta matriz político-estatal, representa
niveles de dependencia -político, laboral, uno de los principales “dilemas” del Pa-
económico-, lo cual explica el por qué de raguay, y la razón de ciertos rasgos y acti-
la debilidad de las identidades políticas tudes que llegan a comprenderse a través
democráticas. No es extraño entonces del tiempo.
advertir, por qué Paraguay es uno de los Desde allí entonces se siente en la ju-
países social y democráticamente más re- ventud activista y adherente a los movi-
zagados de toda la región. mientos juveniles, que el pasado del Pa-
La inscripción de la sociedad paragua- raguay se puede resignificar, cobrando
ya del siglo XXI en dicha trama histórica una dimensión cualitativa diferente para
explica el sentido y sin sentido de actitu- dar lugar a tiempos de prácticas demo-
des, mensajes, disposiciones, que pare- cráticas en las cuales la juventud ocupa
cen contradictorias en el Paraguay, pero un lugar estratégico.
que se comprenden mediante los años Las transformaciones desde la ju-
de una educación autoritaria, muy selec- ventud, como las estudiadas en las dos
tiva, no gratuita, y con grandes porciones Situaciones Tipo y desde el foco de sus
de generaciones para las cuales la educa- demandas, vienen a poner en cuestión
ción no se efectivizaba como un bien pú- las resistencias histórico-estructurales
blico. La reciente masificación de la edu- del país, en un movimiento de “destra-
cación media es quizá el fenómeno social dicionalización” de la cultura política.
más fuerte de la ultima década, aunque Detrás de estos desafíos, la juventud va
permanecen los índices de abandono de abriendo -inclusive ante la hegemonía
muchos jóvenes por razones socio-econó- del mercado publicitario- sus propios ca-
micas y, como se verá a continuación, por nales de reclamos, trascendiendo sus di-
desmotivaciones hacia las propuestas que mensiones corporativas. En este sentido,
le ofrece la cultura escolar. la juventud es portadora de una renova-
Al mismo tiempo, sin desconocer di- ción política y cultural, antagonizando
cha matriz centralista-autoritaria que obli- con las herencias perimidas, generando
gaba a que los ciudadanos entraran a más libertad de acción y nuevos regis-
la categoría de sujetos pasivos, hacia fi- tros emancipatorios en la cultura políti-
nes de la década del ochenta aparecen ca: contenidos, valores, deseos,
60 Base IS/Ibase/Pólis
5.2 LA JUVENTUD COMO VÍCTIMA Por el otro, la visión más optimista de
Y A LA VEZ BENEFICIARIA DE LA la juventud actora-creadora como fuen-
GLOBALIZACIÓN te abierta al despliegue de sus caracte-
rísticas más positivas, que aprovecha al
Ferrer (2007) recuerda que “La glo- máximo la globalización y, a la vez, toma
balización no es en sí misma buena o la delantera. En esta representación, la
mala” (433), pues su incidencia depen- persona joven es un ciudadano cosmopo-
de de las decisiones endógenas relativas lita por excelencia, portador de una dis-
al tipo de movilización de sus recursos, posición a todo aquello universable, al
la distribución de riquezas, el grado de reino de la libertad. Aquí se puede en-
participación e integración de la pobla- contrar a la juventud como sector de sen-
ción y del modelo de cada país. En este sible afinidad a la globalización y como
sentido, también depende de la peculia- centro de gravedad de la modernidad.
ridad de la matriz político-histórica del Esta visión resalta el potencial del capital
país, sí efectivamente cuenta con un sis- humano y productivo de la juventud, su
tema político y un ethos político que mo- alta predisposición hacia las tecnologías.
viliza la participación de sus ciudadanos, En definitiva, desde este vínculo positivo
si distribuye la riqueza y permite la inte- globalización-juventud, se visualiza a la
gración social de sus habitantes, o a la gente joven como sujeto de derechos y/
inversa, inmoviliza. o como un sector con ventajas estratégi-
En esta línea, la globalización tampo- cas que se constituye en un grupo social
co sería en principio buena o mala para inigualable, como promotor de procesos
la juventud, su aprovechamiento y los de participación, renovación de la cultura
efectos sobre la condición juvenil depen- política y la sociedad en general, prefigu-
derían del modelo contextual del desa- rando así nuevas sociedades y formas de
rrollo/subdesarrollo del país, y del tipo de integración de los pueblos.
políticas públicas que emprenda. De lo visto en la Situación Tipo de
Un joven reflexionó de manera ejem- Asagrapa, también se pueden sintetizar
plar el “dilema” actual de la juventud dos signos encontrados en una misma ju-
frente a la globalización: ”el joven de hoy ventud. Si bien de parte de la juventud
es comunicación: es una esponja y a la campesina organizada existe una clara crí-
vez una fuente.” tica al impacto que provoca la globaliza-
En esta metáfora recogida en el ción en sus territorios, deja entrever una
Informe de la Fenaes hay un carác- permeabilidad a mayores ideas de univer-
ter dialéctico en la gente joven con- salidad; ésta es una de las notables dife-
temporánea, que indica que se mueve rencias con los asociados adultos.
constantemente entre dos fuerzas con- Es que la juventud de Asagrapa per-
trapuestas. Por un lado, la versión pe- cibe como legítimo, variados consumos
simista del joven-esponja, simboliza el simbólicos como el uso de celulares, es-
carácter desestructurante y destructivo cuchar música urbana, adquirir indu-
de la globalización, especialmente ha- mentaria de las tiendas de las ciudades,
cia las nuevas generaciones. Aquí la ju- vincularse con jóvenes urbanos, descu-
ventud se presenta como una fuerza brir información. Todo esto no está mal
consumista y alienante casi incontrola- para la juventud campesina de condicio-
ble. En esta versión, la juventud acep- nes modestas, pues ya forma parte de su
ta ciegamente los productos y mensajes vida cotidiana y de su cultura juvenil.
que le vienen de la economía y la cultu- En efecto, la juventud rural altopa-
ra mundializada, y como consecuencia, ranaense no renuncia a nuevas pro-
esta situación alimenta la consolidación puestas como la agroecología, los apa-
del establishment. ratos de comunicación, la posibilidad
62 Base IS/Ibase/Pólis
Otros fenómenos que ven a diario Asagrapa se asocia al proceso de des-
son, el permanente desmonte, la des- campesinización. Según sus experien-
aparición de árboles y la diversidad cias, los riesgos de la migración castigan
de los sistemas naturales. Se sienten más intensamente a aquellos jóvenes no
altamente preocupados como jóvenes organizados o cuyos padres no están aso-
y campesinos, del fuerte desequili- ciados a organizaciones como Asagrapa.
brio provocado por los agrotóxicos, La juventud de la Asociación expresa que
al afectar el hábitat y el ecosistema en su espacio organizativo, precisamente,
y poner en jaque la satisfacción de se registra el nivel más bajo de migración.
sus necesidades vitales: contamina-
ción de sus cultivos de subsistencia y d. La debilidad de la educación rural
agua, intoxicación humana, disminu- Otro fenómeno resultante de la combina-
ción de los cultivos y alimentos cam- ción de globalización y ausencia del Es-
pesinos, etc. Todo ello -expresan- tras- tado, es el ajuste cultural-educativo que
toca el derecho a la alimentación, a la cae sobre las comunidades campesinas:
tierra y cambia los roles productivos. pésima infraestructura educativa, falta de
Finalmente, en relación a la infor- bibliotecas y materiales educativos, traba-
mación internacional, los jóvenes de jo ad honorem de miles de docentes a la
Asagrapa están muy concientes de espera de nombramiento, choque de la
los desastres ecológicos que se pro- lengua materna guaraní de los alumnos
ducen en el mundo, las pruebas son, con la lengua castellana de la escuela, y
día a día, las consecuencias destruc- otras ineficiencias.
tivas de los cultivos de transgénicos Si bien en principio la situación de la
sobre el territorio que los rodea. educación rural no está directamente vin-
En este sentido, podría evaluarse culada a la globalización, sí lo está en la
como una ventaja, que la juventud medida que las escuelas son práctica-
de Asagrapa tenga una mayor sen- mente las únicas y permanentes institu-
sibilidad para la percepción e identi- ciones modernas existentes en el mundo
ficación de nuevos problemas, tales campesino.
como las implicancias de los mono- Más allá de las críticas expuestas por
cultivos, casi desconocidos por la so- la juventud campesina, es preciso reco-
ciedad urbana. nocer y destacar la importancia comuni-
taria que representa la escuela rural para
c. El drama de la migración la escolaridad básica de niños y niñas
Parte de la academia y varios organismos campesinos, que prácticamente sin re-
internacionales vienen sosteniendo el cursos y como pueden gestionan saberes
“derecho a la migración.” En contrapar- escolares, hasta en improvisadas aulas
tida, en Asagrapa, tanto adultos como jó- debajo de los árboles.
venes tienen una visión opuesta: “es pre- En principio, si se toman los indicado-
ciso organizar a la juventud para que no res de inversión o la primacía de un enfo-
migre del campo.” que descontextualizado de la educación
Esta preocupación es decisiva en las rural predominantemente racionalista, en
percepciones juveniles, que a su vez se el que se omiten los saberes culturales y
asocia a la problemática cultural del des- la vida familiar, y se hace un simulacro de
arraigo. En efecto, la juventud campesina lo rural, es tanta la simulación, que favore-
consultada hace referencia continua a los ce el desarraigo al plantear de una manera
intensos cambios poblacionales que pro- apocalíptica la realidad y el destino.
voca la faz extensiva de la globalización. Por otro lado, las representaciones
En este sentido, cabe recordar que el que distribuye la escuela rural no favore-
surgimiento de agrupaciones juveniles en cen la democratización de los saberes.
64 Base IS/Ibase/Pólis
niendo un papel cada vez más relevante f. El desconocimiento de la realidad rural 35
En efecto, sin considerar el tráfico
en la producción y en el abastecimiento Si bien no es privativo de la juventud pa- de cocaína colombiana, es notable la
expansión de la narcoeconomía en
de esta droga al sur de Brasil, Argentina, raguaya, un aspecto que al parecer sería el extenso territorio rural paraguayo,
controlada por grupos extracampesi-
Uruguay, e incluso Chile, y además para común en todas las organizaciones juve- nos de corte mafioso presentes en por
lo menos ocho de los diecisiete de-
su re-exportación. niles urbanas, a pesar de que tienen una partamentos, incluyendo en muchos
Como se vio también en la Situa- alta sensibilidad ante sus congéneres ru- casos, preparación clandestina. Para
tener una idea de su importancia se
ción Tipo de la juventud rural, los jóve- rales, en el caso de la juventud de la Fe- pueden mencionar algunos datos
oficiales de la Secretaría Nacional
nes campesinos altoparanaenses, corren naes, prácticamente dejan entrever que Antidroga. Cada kg de marihuana
rondaría los 10 US$, en tanto en cada
el riesgo de caer en actividades ilegales no conocen la problemática de la tierra y hectárea, la capacidad de producción
o el contrabando. Los jóvenes describen la migración campo-ciudad, menos aún es de 3.000 kg., lo que equivale a
30.000 US$. Por tanto, solamente en
el siguiente fenómeno en una comunidad las causas de las desigualdades, o el fun- una hectárea -sin requerir cuidados
como el caso del tabaco- se pueden
identificada: cionamiento básico del modelo agrícola obtener en dos cosechas anuales
60.000 US$ (SENAD, 2004). Según
y sus consecuencias sociales o ambien- declaraciones de imputados de tráfico
“…los contrabandistas y en gran par- tales. Es decir, son jóvenes críticos pero en territorio argentino, a medida que
más cerca se llega con la droga a la
te los narcotraficantes utilizan a los jóve- con muy escaso conocimiento del mundo Ciudad de Buenos Aires, su precio
es más alto. Por ejemplo, en Chile,
nes para pasar las drogas hacia el lado agrario y la relevancia de la cultura cam- en la actualidad el kg de marihuana
pagada al narcotráfico es 600 US$,
argentino, es una zona muy problemáti- pesina en la cultura paraguaya. En cam- es decir 60 veces más; cifra muy
ca, le pagan a los jóvenes y hacen pasar bio, la juventud organizada del campo, por arriba de cualquier otro rubro de
cultivo, incluso de la polémica soja
también cigarrillos y las drogas…” Ade- parecería conocer mucho más la realidad trasgénica. Dependiendo de las con-
diciones y el grado de tecnificación,
más, es imposible poder contactar con de las ciudades y se siente interesada por se pueden obtener por hectárea de
2 a 3 toneladas de soja por cosecha,
éstos jóvenes para proponerles otra alter- conocer lo que pasa en el mundo. y en dos cosechas anuales de 4 a
nativa: “es difícil porque duermen todo el 6 toneladas. En un rápido ejercicio,
si la soja se cotiza a US$ 362 por
día y de noche se van a trabajar a pasar 5.2.2 Globalización y la capacidad tonelada, con una hectárea se puede
obtener cerca de 3.000 US$, cifra por
contrabando…” trasformadora de la juventud debajo del 10% que se obtiene con la
plantación de marihuana.
Si se mira a la juventud desde otro án- 36
Es de significativa importancia
Por cierto, en un contexto de precarie- gulo, además de los embates de la glo- diferenciar, el tráfico, del consumo.
Obviamente, la globalización de las
dad laboral, ruptura de lazos comunitarios balización, este significativo grupo etáreo redes del delito como el narcotráfico,
puede verse beneficiado por algunas aris- sin duda representa uno de los fe-
y desamparo del Estado, el caso del trá- nómenos más nefastos de los nuevos
fico de marihuana representa una atrac- tas de la globalización que sintonizan con tiempos. Respecto al uso de drogas,
abarca por igual todas las condiciones
tiva actividad35, donde si bien el riesgo las aspiraciones y potencialidades de la sociales, no tiene fronteras nacio-
nales, y atraviesa todas las franjas
puede ser alto, los ingresos que se obtie- juventud. sociales. Sin embargo, se observan
las siguientes diferencias: i. En el tipo
nen superan con creces cualquier salario y calidad de la droga consumida. Los
como trabajador agrícola, posibilidad que a. La juventud contra el fuerte peso de la pobres usan drogas de baja calidad,
mientras las clases adineradas
se acrecienta cuanto más inactiva es la si- tradición autoritaria consuman drogas sofisticadas; ii.
existe mucha hipocresía social, pues
tuación de la gente joven. Además de los Durston (1998), ha planteado que más tanto las clases altas, como el mundo
allá de los efectos dañinos de los me- de la farándula y a individuos ligados
abultados dividendos de la facilitación de al poder, exhiben también, como en
la comercialización con el dejar pasar, de- dios de comunicación de la globalización los sectores pobres, altos niveles de
consumo; iii. otra diferencia radica
jar hacer, el poder hegemónico local sigue para la vida rural “…también incluyen un en que las personas de estratos
acomodados tienen más libertad
de cerca los niveles de expresión de la ju- aumento en la exposición de principios para no mostrarse públicamente, en
como: democracia, derechos humanos y cambio, la juventud de los sectores
ventud para que no pueda llegar al um- pobres que consume drogas es más
bral máximo de insatisfacción pública de justicia social. Ver imágenes de mujeres propensa a quedar al descubierto, a
exhibirse abatidos en las esquinas,
sus necesidades vitales y pongan en cues- en papeles más libres y más activos por las calles, las plazas, bailes, o en
las puertas de los recitales; iv. la
tión el orden establecido. De allí que al ejemplo, irrumpe casi todas las culturas diferencia más sustantiva radica en
tradicionales, pero irrumpe fundamental- que los consumidores de las clases
parecer, se estaría permitiendo subrepti- altas no experimentan las mismas
ciamente que por responsabilidad de los mente de manera positiva” (29). Se pre- necesidades vitales que la juventud
en situación de pobreza; v. en contra-
aparatos del poder se acceda al consumo sume que éste es uno de los lados positi- posición, el joven pobre consumidor
de drogas, suele ser una persona que
de drogas sin límites en la población jo- vos de la globalización, al constituirse en usa drogas de manera desordenada a
precondición para provocar rupturas o al causa de la depresión que le genera
ven, provocando que buena parte de ella, no tener un lugar en el mundo, por
perteneciente a los sectores populares, menos cuestionar las raíces de la matriz no estar integrado a las diferentes es-
feras de la sociedad: trabajo, estudio,
esté adormecida36. autoritaria del Paraguay. cultura y participación ciudadana;
66 Base IS/Ibase/Pólis
estudiantado, al verse unificado en varios c. La organización y la lucha por el
Departamentos como “una fuerza social arraigo a los localismos territoriales
con intereses heterogéneos” (2007:10). Como se vio en el Informe de la Situación
En ambas juventudes, se puede Tipo, a pesar de los cambios provocados
percibir cómo reaccionan con sus pro- por la globalización y la revolución biotec-
pias fuerzas mediante una tendencia nológica en el mundo campesino, la ju-
a la autorepresentación, y autoexpre- ventud organizada de Asagrapa, al hacer
sión. Tanto la Fenaes como Asagrapa, un balance entre quedarse o migrar, pone
denotan “acción pública” y constru- en la balanza la cuestión de la “identidad
yen ciudadanía en la esfera pública. En campesina”, la seguridad alimentaria que
este sentido, todas las manifestaciones es más alta en el campo, y los posibles
positivas descritas de la juventud, au- riesgos de la ciudad: explotación, adiccio-
mentan la autoestima y efectivizan los nes, violencia y frustraciones. Es que la ju-
anhelos de protagonismo y transfor- ventud de Asagrapa tiene la experiencia
mación social. Reconociendo nueva- y el convencimiento que aquellos jóvenes
mente la perspectiva de Arendt, la “ac- campesinos no vinculados a una organi-
ción” siempre despliega una capacidad zación social, son más proclives a adop-
que es propiamente humana de traer a tar conductas extralegales o de desintegra-
la existencia aquello que es inexisten- ción social, ya sea en el campo, pero muy
te, vale decir, una producción de senti- especialmente en las ciudades.
dos que permite generar razonamientos Es notable como la posición de
críticos y juicios políticos con funda- Asagrapa y sus nucleaciones juveniles, de
mentos convincentes, en este caso, de interrumpir la propensión hacia la migra-
parte del Consejo Juvenil Regional de ción y hacer frente a las fuerzas del mer-
Asagrapa y la Fenaes en las comunida- cado agropecuario, se traduce en el re-
des donde se insertan. pliegue a los localismos territoriales y
Está también claro que la praxis po- culturales. Se expresa además en alter-
lítica de los colectivos juveniles, es más nativas colectivas para acceder a tierras
que reactiva a sus contextos, al permi- (mediante la protesta y/o la ocupación),
tirles construir respuestas a las amena- capacitación en pequeña agricultura sus-
zas, modificar prácticas tradicionales que tentable, y en la promoción de espacios de
no comparten y hacer reconceptualiza- participación juvenil en las respectivas co-
ciones, por ejemplo, de la democracia, la munidades de los asociados de Asagrapa.
participación y lo público. Como lo expre- El otro factor se refleja desde “aba-
san, Segovia y Kretschmer, la juventud va jo”, como un movimiento de resisten-
recreando valores que podrían prefigurar cia de la organización campesina y de su
una nueva sociedad: “hacerse el aguan- estrato etáreo joven hacia la economía
te”, el vínculo por la condición joven y las globalizada, con el “resurgimiento o re-
similares demandas, el diálogo, la plani- construcción de las comunidades campe-
ficación compartida, la experimentación sinas”, en la que para el gremio adulto la
de hábitos democráticos, la desmercanti- juventud tiene un lugar central.
lización de las relaciones sociales, y otros. Además de los dilemas de la globa-
Como se sabe, más allá del régimen lización y el drama histórico-político del
político y del conservadurismo de la ideo- Paraguay de falta de conciencia de ciu-
logía oficial, no hay gobierno que se sus- dadanía autónoma, lo nuevo que aporta
traiga de la opinión pública, sobre todo la organización juvenil es la afirmación de
aquella que más visibilidad tiene, o sea, la identidad “campesina” y ahora “juve-
el gobierno negocia, intenta diferir hacia nil”, como una forma de contrarrestar los
delante las demandas o reprime a los ac- efectos negativos de los condicionantes a
tores que la reivindican. los que sus integrantes se ven sometidos.
68 Base IS/Ibase/Pólis
5.3 DERECHOS DESPAREJOS Y En cuanto al sistema, también debe
DEMANDAS DE LA JUVENTUD reconocerse que la extensión de más es-
cuelas, más aulas, más alumnos y do-
Ser estudiantes bachilleres de la educa- centes, suma una serie de tensiones aso-
ción media frente a la progresiva masifi- ciadas a las expectativas y frustraciones
cación de este nivel, se asocia en el Para- para los hijos de las familias ubicadas en
guay de hoy a ciertas diferenciaciones en el extremo inferior de la pirámide social
cuanto a cobertura, permanencia, cali- que intentan “cuesta arriba” que sus hi-
dad y serias dificultades para hacer dialo- jos, como nueva generación, lleguen por
gar la cultura escolar con la juvenil. primera vez a las aulas secundarias. Las
Al expandirse la educación secun- frustraciones residen en el hecho de que
daria, se ha generado una primera con- “no hay para el pasaje”, para las foto-
secuencia social: la gente joven que no copias o por la misma devaluación de la
está integrada al sistema escolar o que escolaridad, entonces por más que for-
por abandono, ha dejado de ser estu- malmente existe el acceso a un edificio
diante secundario, se siente en falta, lle- escolar, los enormes esfuerzos familiares
va consigo la carga de no poder tener el no se ven compensados.
título, o en términos de Bourdieu (1989) Por otro lado, una vez que la persona
la carencia de un capital cultural expre- logra acceder al nivel medio, las políticas
sado en una credencial que diferencia educativas y la capacidad del sistema
jerárquicamente a los sujetos. Esta fal- educativo -aún con los esfuerzos de la
ta se acrecienta cuando se intenta entrar Reforma Educativa- no van a la par de las
en relación con otros jóvenes, ex com- demandas de los estudiantes. El derecho
pañeros de la primaria, familiares que a la educación como derecho inclusivo a
sí tienen su título, y funge como un ele- la sociedad, siempre está en riesgo para
mento de distinción. la juventud de condiciones económicas
En esas condiciones, mientras van modestas, dada la débil posibilidad de “re-
creciendo como jóvenes, van experimen- tención y recuperación que tiene el colegio
tando y “sintiendo” las diferentes pautas secundario”, tanto en términos pedagógi-
de relaciones desiguales que los expul- cos como socioculturales. Las derivacio-
san de otras plataformas de integración nes del abandono de las aulas generan en
social. En rigor, para muchos jóvenes que la persona que lo padece, un sentimiento
están dentro o fuera del sistema educa- de polarización social y de pérdida, dado
tivo, la exclusión educativa se percibe el fuerte reconocimiento que tiene “ser es-
como una situación que imposibilita que tudiante” durante la juventud, para afirmar
como personas jóvenes, puedan acceder una identidad positiva.
a gozar de otros bienes públicos.
b. Dime a qué colegio vas y te diré de
a. Crecimiento de la escolarización pero dónde provienes!
desparejo Los estudiantes, a medida que avanzan
Si bien en el país avanza la escolariza- en escolaridad se van haciendo concien-
ción secundaria, también la realidad ex- tes que la misma elección del tipo de es-
hibe que esa masificación no avanza níti- tablecimiento y la admisión como alum-
damente en todos los grupos sociales de nos, ya es motivo de diferencias.
idéntica forma, pues los adolescentes, su- Si bien la masificación del colegio
midos en los quintiles de ingreso per cápi- secundario es progresiva en Paraguay,
ta más bajos, principalmente, campesinos, aún va lenta, y esta situación trae otra
indígenas y sectores urbanos con pocos consecuencia, hace que todavía sea al-
recursos económicos, no logran ser favo- tamente significativa la brecha entre la
recidos por los avances del sistema. educación pública respecto a la privada.
70 Base IS/Ibase/Pólis
lizan las precariedades y los déficit entre a “desalentarse” con el estudio, sus motiva-
uno y otro colegio, fundamentalmente, en- ciones bajan bruscamente, y todo se com-
tre la educación de gestión pública versus bina con un sentimiento de resignación de
gestión privada. Incluso en el Paraguay obtener credenciales de bajísima calidad.
existe un enaltecimiento de la educación Así pues, mientras que para algunos
privada y, a la vez, una excesiva competi- jóvenes la razón que explica ir al cole-
tividad entre diferentes colegios privados. gio secundario reside en una obligatorie-
Así lo expresa un joven entrevistado de la dad social, otros lo hacen por una razón
Fenaes que estudia en un colegio privado: instrumental, y un tercer grupo, concurre
por deseos y motivos de aprender.
“Muchos, porque son de colegios gran-
des se creen mbarete (fuertes), se creen
los mejores y por ello nadie les tiene que 5.4 JUVENTUD Y
sobrepasar ‘eliminemos a los que no son CONTEMPORANEIDAD: ANÁLISIS
nuestros’ más o menos así. Como tienen DE PARECERES Y PERCEPCIONES
todo servido y papi siempre les va ayudar, JUVENILES
entonces quieren demostrar su poderío.”
El interés de esta sección es captar la
Ciertamente, las rivalidades son muy perspectiva de las y los entrevistados en
notorias, basadas en el presumir diferen- este momento determinado de sus his-
tes “posicionamientos y jerarquías socia- torias, como jóvenes integrantes de las
les”, en asociar el nombre del colegio pri- asociaciones juveniles, tratando de com-
vado con el prestigio social del alumno. prender el sentido que les atribuyen a
En este sentido, la Fenaes también las diferencias y a la situación del entor-
es conciente y organiza dispositivos para no medioambiental, y las consideraciones
prevenir probables enfrentamientos entre que hacen de la integración regional.
colegios rivales. De allí que en las asam- En general, al proponer abordar es-
bleas y momentos de organización de ac- tos temas (véase tabla en Anexo), en las
ciones directas, los dirigentes montan dos organizaciones, como primera reac-
dispositivos para evitar roces entre estu- ción se crea un clima de bloqueo, de lar-
diantes pertenecientes a colegios con ri- gos silencios, o de explícita no-opinión de
validades históricas, pues los medios de lo que serían temas tabúes.
comunicación y las fuerzas de seguridad Por ejemplo, en los grupos focales,
podrían reforzar la idea de “juventud vio- quienes más responden son siempre dos
lenta” en la opinión pública. o tres líderes, que manifiestan una opi-
En rigor, la comentada toma de con- nión relativamente más formada.
ciencia por parte de los estudiantes, en Es preciso reconocer que las cues-
cuanto a la calidad, conduce a su vez a la tiones de identidad primordial se ejerci-
generación de expectativas diferentes, y tan en medio de conductas, comporta-
con ello a una forma de relacionarse con el mientos, modas y juicios de valor, que
establecimiento por lo que el logro de sus recorren el vasto muestrario de mutacio-
metas se desdibuja. Se van debilitando las nes, que concuerda con la gestión con-
iniciativas del principio y las energías gru- flictiva de vivir entre su mundo y el de
pales. Los estudiantes, aún de colegios y los adultos. El campo del aula, donde se
condiciones desfavorecidas, perciben una cumplen ciertas convenciones, los hace
falta de esfuerzos, y una experiencia esco- actuar: como estudiantes en clase; y
lar con pocos estímulos. Esto suele com- este rol compromete gestos controlados,
plicar aún más las posibilidades de la pro- mesurados, indumentaria, uniforme, len-
moción educativa de los estudiantes que guaje restringido, y hasta circunspecto,
están dentro del sistema, pues comienzan todo en función de ciertas obligaciones.
72 Base IS/Ibase/Pólis
Además de la problemática de la enlaza el uso y la tenencia de la tierra y
educación en la familia y la escuela, una modelos de producción. Existen eviden-
de las principales razones de la falta de cias en ambas organizaciones, de nuevas
criterios más seguros sobre estos cam- identidades sociopolíticas.
pos es que en el Paraguay, a diferencia Así, ambos movimientos de juventu-
de otros países de la región, los medios des constituyen espacios que promueven
de comunicación no suelen abordar es- nuevos valores, formas, acciones, conjun-
tos temas, y cuando lo hacen, lo presen- tamente con nuevas aspiraciones de sa-
tan con estereotipos y sin un enfoque de tisfacción de demandas, donde algunas
derechos. La población en general y la ju- logran efectividad y otras no, pero como
ventud en particular, no tienen informa- rasgo central, las organizaciones juveniles
ción adecuada, y como se sabe, si no se logran “avances”.
posee información, no se puede contar La Fenaes y Asagrapa a través de sus
con los criterios pertinentes que merecen experiencias, registran una serie de ele-
estos temas. mentos comunes que son contrarios y
De allí que hoy día se requiere de la antagónicos a las prácticas de los profe-
aportación mediadora de la prensa y de sionales de la política y de la sociedad en
la escuela, para avanzar en la democra- general, que se ha cristalizado en las ins-
tización de la sociedad, precisamente tituciones, de construcción de bienes pú-
en un sector abierto a nuevos paradig- blicos y sentidos de comunidad.
mas. El superar los prejuicios presupo- Como elementos centrales, ambas Si-
ne programas y métodos que favorez- tuaciones Tipo ponen el acento en la pos-
can un acercamiento al conocimiento tergación de satisfacciones o en la espera
más completo posible, a cada derecho, de un futuro, que entran en franca oposi-
y en su globalidad. ción con las ansias de resolver situacio-
nes concretas, que son expuestas de una
manera más directa o en un espacio de
5.5 PERSPECTIVAS DE CAMBIO EN conversación.
EL CAMPO DE LA JUVENTUD Ambas Situaciones Tipo en el Para-
guay, muestran con sus inquietudes y de-
A la luz de las pruebas concernientes a mandas juveniles, “signos” en un país
las demandas de los colectivos juveniles que ha cegado la importancia que tiene
y a sus prácticas en el espacio público, el la juventud para viabilizar un desarrollo
Estado y la sociedad pueden comprender sustentable y democrático. Hay abundan-
y enriquecerse de las inquietudes y reno- tes evidencias empíricas de nuevos “indi-
vadas formas de ver el mundo de la ju- cios” que señalan cuál sería el camino de
ventud a través de sus organizaciones. las políticas públicas.
La sociedad y el Estado paraguayo Según los resultados del movimien-
exhiben mucha dificultad para mirarse en to secundario paraguayo y de la juventud
los jóvenes, pues la incomprensión que rural como Situaciones Tipo, la lucha por
les provoca su cultura juvenil, sus reno- el Boleto Estudiantil, por la Reforma Agra-
vados valores y prácticas, se asientan en ria Integral y los DESC, implica espacios
percepciones erradas, como si tuvieran para hacer valer las opiniones juveniles,
ante sí un espejo roto en múltiples peda- como oportunidad para que trasciendan
zos y no lograran ver los diversos tipos de a la opinión pública.
juventudes, sus dinámicas y talentos. Como se vio, entre los rasgos co-
El estudio de la Fenaes puso en evi- munes de las dos organizaciones se en-
dencia la desigualdad educativa y en el cuentran las críticas a las viejas miradas,
acceso al conocimiento. Para Asagrapa, a las expectativas ante nuevos hechos
la organización es un lugar de lucha que sociales. Tienen en común sus formas
74 Base IS/Ibase/Pólis
Simultáneamente, para afrontar los ciudadanía activa para encontrar los pun-
desafíos de construir las esperadas políti- tos de contacto con el Estado, pues no hay
cas de juventud, lo que se debe acome- posibilidades de avanzar en la construcción
ter es vencer las inseguridades por par- de una agenda básica común sin que las
te de los actores, los desentendimientos partes cedan en algo (aunque sea por un
y ciertas intolerancias. Por lo tanto, como tiempo). Las organizaciones juveniles están
una de las primeras tareas es preciso re- en condiciones de recuperar la iniciativa en
vertir esta tendencia de trabajar (Estado, las políticas de juventud, hoy imposterga-
Organizaciones Juveniles, Ongs, etc.) por ble. La gente joven organizada, e incluso no
canales diferentes y fragmentados. organizada, está en condiciones de hacer
Teniendo en cuenta que en el Pa- aportes concretos desde sus experiencias e
raguay las políticas de juventud tienen ideas acerca del país y los jóvenes.
escasísimo desarrollo institucional, que Son innumerables los requerimientos
presupuestariamente son débiles y que y consecuentes propuestas en todos los
lo poco que existe está fragmentado, es ámbitos de la vida de las personas jóve-
evidente que el Estado del siglo XXI ne- nes en el Paraguay que se podrían suge-
cesita recrearse, requiere ser más con- rir. Pero hay una en particular, importante
fiable y necesita atraer a diferentes sec- de mencionar, como un primer espectro
tores de la sociedad. En este sentido, la de acciones: que el Estado facilite proce-
juventud, es decir el millón seiscientos sos de diálogo de diversos colectivos de
mil jóvenes paraguayos constituye, pre- juventudes rurales y juventudes urbanas
cisamente, uno de los sectores más con- de modo a que ambos mundos y el Esta-
fiables para renovar el ímpetu del Estado do, se abran a conocerse y ensanchen las
hacia las nuevas generaciones. percepciones, y así poder iluminar desde
Por el lado de la sociedad civil, es re- este intercambio la agenda de juventud.
comendable que sus asociaciones más
vinculadas a la juventud apoyen, con la 5.5.2 Recomendaciones para la
activa participación juvenil, a los cuadros Reunión Especializada de Juven-
técnicos del Estado, y a sectores acadé- tud (REJ) del MERCOSUR
micos, de modo a facilitar conexiones Mediante la incorporación en su agen-
más estables y dialogadas entre ellos con da de dos o tres temas transversales de
el fin de desarrollar la capacidad de pro- alta legitimidad en todos los países del
vocar procesos de concertación con las Cono Sur, con la REJ es posible desarro-
organizaciones juveniles. llar, en alianza con las organizaciones de
Por el lado de la representación po- la sociedad civil, un campo de aplicación
lítica, el Estado debería percatarse de la de programas regionales, los cuales por
especificidad de la población juvenil, de ejemplo podrían orientarse a:
la peculiaridad de las organizaciones ju- Diseñar una metodología de registro
veniles. Cuando se trata de personas jó- de repertorios juveniles de la región
venes, el Estado necesita adoptar una que evidencie formas y modos de ac-
renovada lógica, menos estructurada, tuación en los espacios públicos.
debería reducir sus pretensiones políti- Crear instancias, por países, que
cas y exhibir una lógica más transparen- promuevan una acción convergente
te, dejando de lado todo proselitismo, y para con la juventud, más realista y
más aún prebendarismos. menos virtual.
Por el lado de las organizaciones juve- Instalar una Mesa Regional perma-
niles y las plataformas que representan a nente con temas de carácter urgente
estos movimientos en el Paraguay, les cabe y de interés común que requieran de
en una circunstancia histórica de transi- experiencia, trayectoria y similitudes
ción, predisponer todas sus capacidades y culturales.
76 Base IS/Ibase/Pólis
ANEXO
Igualdad entre hombres Muy necesaria Los espacios para la mujer, dependen de los adul-
y mujeres La igualdad se da dentro del movimiento tos de arriba
El machismo se da con ciertas preferencias en Avances lentos en torno a la igualdad
el trabajo con los profesores; famoso: el profesor
dice ‘vos sos mujer’. Hay discriminación!
Ojalá hubiera igualdad para todos
Para los permisos manda el padre, ellas están
para quedarse en la casa
Muchas veces se confunde feminismo con les-
bianismo: en el colegio quiero formar un grupo
feminista y dicen no…, yo no quiero lesbianas en
el colegio.
Ecología y medio ambiente El Estado lo deja totalmente de lado. Se está Alto nivel de conciencia, máxime en el mismo há-
deteriorando demasiado y va a seguir… bitat campesino:intoxicación, deforestación, etc.
Todo el mundo sabe y no hace nada.
Hacen falta leyes e información: ayer se quema-
ron miles de hectáreas de bosque y no sabemos!;
tenemos una materia Educación Ambiental,
donde queremos hacer un proyecto de limpieza
del arroyo más cercano, pero te dicen que no se
puede porque no está en el papelito del plan del
ministerio, entonces no hay práctica!
Es preciso debatir las consecuencias
Lucha por la tierra Paso, paso, paso…(la mayoría no responde) Absolutamente de acuerdo
Cada persona necesita donde desarrollarse
Me parece un tema muy largo
Hoy en día se critica mucho a los campesinos
porque toman las supuestas medidas extremas de
ocupar tierras, de cortar rutas o de manifestarse
frente al Congreso, pero es la única alternativa
Violencia en la vida joven Determinados sectores priorizan la superioridad La violencia pertenece a las ciudades o es más
física factible en los no-organizados
El tekoreí (la inactividad) lleva a beber, a mucha
violencia y a fumar porros.
Rebeldía -el pelo, etc.- no es violencia!
También hay violencia de los adultos hacia los
jóvenes
Muchos porque son de colegios grandes se creen
mbarete (fuertes) se creen los mejores y por ello
nadie les tiene que sobrepasar ‘eliminemos a los
que no son nuestros’ más o menos así!
Como tienen todo servido y papi siempre les va
ayudar, entonces quieren demostrar su poderío
Migración Este país se va a quedar vacío Enorme preocupación, es vista como negativa
Se va a quedar sin jóvenes
El 90% de los jóvenes quiere irse La migración está fuertemente asociada al desem-
La migración del joven es necesaria pleo y a la falta de tierra
Es un super-mal necesario
La migración es mala: al final no progresan y se La organización predispone al arraigo
quiebra la familia
Migran de zonas muy desfavorecidas y tienen Crítica a los inmigrantes agroempresarios extranjeros
ambiciones de superarse
Rechazo
Integración Sudamericana Absolutamente de acuerdo Integración desde abajo, desde los pueblos
América Latina es como una nación
Hay que plantearla desde los pueblos
Que cada pueblo mantenga su idiosincrasia e
individualidad
No solamente limitado a lo económico
Lo más necesario es combatir contra el imperio
estadounidense para dejar de ser sometidos
Todos los países sufrimos la misma pobreza y
cosas, a pesar de tener culturas diferentes
Como dice Eduardo Galeano ‘aprendí a ser someti-
da´, es hora de romper las cadenas y unirnos
78 Base IS/Ibase/Pólis
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