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desde el inicio de la Repblica. Cita dos casos para explicar. El primer caso
donde el primer Congreso de la Repblica eligi, bajo presin del ejrcito y de
la poblacin, a Jos de la Riva Agero, como primer presidente del Per, para
luego hostilizarlo, acosarlo y colocar frente a l un poder militar personificado
en Sucre y deponerlo. Mientras que en el segundo caso, este mismo Congreso
nombr a Torre Tagle como presidente de la Repblica a la vez que llamaba a
Simn Bolvar, a quien entreg la mxima autoridad. Y, ms tarde, el mismo
Congreso aprob una Constitucin terica que no se ajustaba a la realidad.
Finalmente, el mismo Congreso se autodisolvi para entregarle todos los
5 Salinas, Pedro. Per y su tradicin autoritaria. La Ilustracin liberal: revista espaola y
americana, ISSN-e 1139-8051, N. 10, 2001, pgs. 124-134
poderes a Bolvar, quien, a esas alturas, dicho sea de paso, ya no quera ser el
Dictador del Per. Salinas menciona que:
el Per, no entendi que la emancipacin civil de un pas debe tener
como base el respeto de las instituciones y de las libertades, al contrario
se volvi adicto a los personalismos y a los caudillos. Las instituciones
democrticas nunca logran afianzarse. En el Per lo ms curioso no es
cmo se escribe la historia, sino cmo se borra y cmo se olvida.
(Salina, 2001, p 128)
Por otro lado, el autoritarismo como sostiene Portocarrero inicia desde la
personificacin de vctimas y victimarios que frecuentemente es usada:
Si nos vemos como vctimas, el otro tendr que ser el dspota; y si
percibimos al otro como dspota, entonces nosotros tendremos que ser
las vctimas [...] (p. 21). Pero a su vez el subalterno, aquel que se
piensa desintegrado de la nacin, organiza la mirada del otro como
dspota, patrn, y son los medios, la prensa y la televisin quienes
persisten en mantener una imagen del poltico como un sinvergenza y
la poltica como el reino del cinismo y la inmundicia (p. 22).
(Portocarrero, 2010. P 21 y 22)
Por otro lado, otra variedad del autoritarismo ser la homofobia, en tanto que
los gestos que lo definen son siempre la negacin de la alteridad y del
reconocimiento del otro. Un acontecimiento que respaldara este argumento es
la reaccin del rgimen de Fujimori al despedir a decenas de diplomticos
considerados
homosexuales
como
un
acto
totalmente
homofbico-
causas
mltiples,
muy
difciles
de
individualizar,
como