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Explica las relaciones que pueden darse entre pensamiento y lenguaje

El lenguaje es el medio de comunicación básico y fundamental que utiliza la especie humana,


pero también es el medio a través del cual expresamos nuestro pensamiento. Respecto a las
relaciones que pueden darse entre pensamiento y lenguaje podemos decir que existen dos
posturas básicas, aquellas que identifican ambos elementos, y aquellas que los diferencian.
Las posturas que identifican pensamiento y lenguaje consideran que estos no difieren
porque pensar seria simplemente una variedad del habla, la interna. Pensar consistiría en
establecer un monologo interior, por tanto no habría ninguna diferencia entre pensar y hablar.
De entre aquellos que defienden que pensamiento y lenguaje son cosas diferentes
podemos señalar que, precisamente por tratarse de elementos diferentes, entre pensamiento y
lenguaje pueden darse dos tipos de relaciones básicas, aquella que prioriza el lenguaje sobre
el pensamiento, y aquella que da mayor preeminencia al pensamiento.
En el primer caso defienden que aquello para lo que no tenemos conceptos no puede ser
pensando, es decir, que existen parcelas de la realidad o conceptos, que precisamente por
transmitirse a través del lenguaje, nos quedan ocultos, ya que el lenguaje, por poseer una
estructura determinada, no puede transmitir la totalidad de lo real. Dado que cada lenguaje
posee una estructura diferente que permite percibir unos contenidos y evita otros,
dependiendo de la estructura gramatical que se utiliza en nuestro idioma, percibiremos unas
parcelas y aspecto de la realidad y no otros, concebiremos unas cosas y no otras,
pensaremos de una manera determinada y no de otra. Cabe decir que los autores que
defienden esta postura consideran que nuestra mentalidad, comportamiento y aprendizaje,
depende de la mentalidad comportamiento de la sociedad en la que vivimos, y que como esto
se encuentra reflejado en el lenguaje, es este el que determina nuestros contenidos de
conciencia, y no al revés. Es el lenguaje el que determina el pensamiento y no el pensamiento
el que determina el lenguaje, pensamos lo que nos permite y como nos permite el lenguaje. El
lenguaje es anterior y superior al pensamiento y el pensamiento depende del lenguaje.
En el segundo caso relativo a la posible relación entre pensamiento y lenguaje, se opina lo
contrario, aquí es el pensamiento anterior al lenguaje. Los que defienden esta postura
consideran que hay una parcela de pensamiento que no es capaz de atrapar el lenguaje, pero
que existe de algún modo. Seria el pensamiento el que obligaría a expresarse al lenguaje y no
al contrario.

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