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PLOTINO C. RHODAKANATY CARTILLA SOCIALISTA * © sea Catecismo elemental de la Escuela Socialista de Carlos Fourier PROLOGO tracciones guardan proporcién. ‘FOURIER Las a on los dastnes. Hack prez y ocho siglos que la humanidad se conmovia al escuchar la voz elocuente y sublime de doce pescadores inspirados que predicaban la doctrina de Jestis. Esa dectrina era 1a del socialismo. Desde entonces los tronos opulentos de los césares vacilaron, préximos a caer y las cadenas de los esclavos crujieron proximas a romperse, espan- tando de tal manera a los tiranos, que el terror de los emperadores lev} su terrible odio hasta las catacumbas de Roma, donde se sepulté el cris- timismo, para resucitar poderoso y fuerte y establecer Ia libertad extin- guiendo la tirania, hasta que introducidos en su seno los verdaderos fariseos, transformaran la sublime doctrina en Ja doctrina corcompida que desde los pulpitos proclaman abora los hipécritas sicarios de las sectas religiosas. Hoy la humanidad entera se conmueve con Ja regeneradora doctrina de} sucialismo que, germinando en los cerebros Taboriosos de los grandes filésofos de la antigtiedad, ha venido a provocar Ia revolucién més gran- diosa de la edad moderna. El suefio de Jos visionarios no fue m4s que un aviso. La visién va tomando todas las formas de la realidad. La utopia se va verificando. Fl perfeccionamiento social se pone en planta; pronto, muy pronto, el antiguo edificio de las rancias preocupaciones quedaré de- + Seguimos !a versién reeditada en 1970 por el Instituto de Investigaciones His- t6ricas de la Universidad Nacional Auténoma de México, en sus Estudios de Historia Moderna y Contempordnea de México (Vol. III), bajo la direccién del primer especialista mexicano en Rhodakanaty, profesor José C. Valdés, dando el texto completo. N. del E. 189 tribado y sobre sus ruinas se levantard una nueva sociedad Mena de luz y de civilizacién donde 1a armonfa entre todos los seres racionales venga a formar la verdadera felicidad de éstos. Pero para que esto sea, se necesita alumbrar con Ia antorcha luminosa de Ia ciencia social los antros tenebrosos de la ignorancia empirica; se necesita rasgar el velo de las preo- cupaciones que cubre a la sociedad; se necesita, en fin, que ésta com- prenda los males que sobre ella pesan en su constitucién actual y los bienes que deben resultarle cambiando de organizacidn; por eso hoy que la idea del sacialismo germina esponténeamente e inconscientemente entre las masas del pueblo, porque su conciencia interior le revela por una intuicién secreta que sélo esta doctrina eminentemente filantrépica y humanitaria es la que puede conducirlo a su més completo bienestar, y teniendo la imés firme conviccién de ello, me he determinado a formar la presente Cartilla con e] abjeto de dar a conocer las elevadas tendencias de la doctri- na de que me vengo ocupando. Esta pequeia obra Heva también el objeto de que las clases obrera y agricola de México conozcan los verdaderos principios cientificos en que se funda la doctrina soctocrdtica de la que tanto se habla y debate hoy hoy en todas las naciones de ambos continentes, pero sin ser atin com- prendida en su esencia. Espero como tinica recompensa a mi trabajo, la benevolencia de mis Tectores y que alguna yez el pueblo mexicano Hegue a emanciparse del terrible yugo de Ja plutocracia por medio de la asociacién. El autor LECCION © DEL PROBLEMA SOCIAL Pregunta.

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