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MCA Mensura Forestac / Micnai PRopaN Ro anb Peters Fernanno Cox Pepro REAL Proyecto IICA/GTZ sobre Agricultura, Recursos Naturales y Desarrollo Sostenible © Instituto Interamericano de Cooperacién para Ia Agricultura (ICA) / Deutsche Gesellschaft fir Technische Zusammenarbeit (GTZ) GmbH. Julio, 1997. Derechos reservados. Prohibida la reproduccién total o parcial de este documento sin autorizaci6n escrita del ICA y la GTZ. Las ideas y los planteamientos contenidos en los articulos firmados son propios de los autores y no representan necesariamente el criterio del IICA y In GTZ. La Imprenta del IICA es responsable del montaje, fotomecénica e impresién de cesta publicacién. Portada: Claudia Eppelin. Prodan, Michail. Mensura forestal / Michail Prodan, Roland Peters, Femando Cox, Pedro Real. -- San José, C.R. : Deutsche Gesellschaft fir Technische Zusammenarbeit (GTZ) GmbH : Instituto Interamericano de Cooperacién para la Agricultura (ica), 1997. ‘586 p. ; 23 cm. -- (Serie Investigacién y Educacién en Desarrollo Sostenible / IICA, ISSN 1027-2631: no. AUSC-97-01, no. 1). ISBN 92-9039-304 1 1. Dendrometrfa. 2. América Latina. I. Peters, Roland. Il. Cox, Fernando. Il. Real, Pedro. IV. ICA. V. Titulo. Vi. Serie. AGRIS Dewey Kio 634.9285 youl OTE aN 1 SERIE INVESTIGACION Y EDUCACION ao EN DESARROLLO SOSTENIBLE AUSC-97-01 Julio, 1997 San José, Costa Rica LOS AUTORES Dr. h.c. Michail Prodan Profesor emérito de la Universidad de Freiburg, autor del libro original en alem4n Holzmesslehre Dr. Roland Peters Profesor de la Pontificia Universidad Catolica de Chile, profesor extraordinario de la Universidad Austral de Chile y ex profesor de la Universidad de Chile Dr. Fernando Cox Profesor de la Universidad de Chile y Mayor, profesor de la Pontificia Universidad Catdlica de Chile y ex profesor de la Universidad Austral de Chile Dr. Pedro Real Profesor de la Universidad de Concepcién y ex profesor de la Universidad Austral de Chile PROLOGO Es poco comtin que uno de los coautores de un libro se permita y al mismo tiempo sienta la obligaci6n de prologarlo planteando algunas ideas respecto del mismo. Mi libro original hace una presentacién global del métodos cuantitativos de medicién del rendimiento y crecimiento de los bosques, especialmente los europeos. La dréstica reduccién del nimero de especies en el continente europeo durante los tiltimos periodos geolégicos me permitié incluir en el texto una descripcién y deduccién simplificada de las leyes del crecimiento, ala que agregué, procedentes del Norte, Noruega, Suecia y Finlandia (“donde siempre cantan los bosques” - Trygve Gulbranssen), las tiltimas y decisivas ideas respecto de las técnicas de muestreo y del concepto de sustentabilidad (A. Langsaeter, W. Cajanus, Y. Ilvessalo, H. Nasslund, B. Matern, entre otros). Roland Peters se dio a la tarea de incorporar, luego de traducir completamente mi libro original, alguna de la dispersa literatura latinoamericana existente relativa a los més variados aspectos de la mensura. Su amplio conocimiento de los bosques de América del Sur y Central y de la correspondiente literatura especializada, le permitié asociar y demostrar la aplicacién de esas simples técnicas europeas a las miiltiples condiciones de crecimiento y a las numerosas especies presentes en estos bosques. Sus amigos y también coautores Fernando Cox y Pedro Real, a quienes también conozco y aprecio desde hace tiempo, lo apoyaron siempre y contribuyeron significativamente, con temas de su especialidad, a complementar esta obra. Como el de mayor edad fui incluido en la portada como el autor principal, sin embargo, la direcci6n de esta obra y su concepcién general son en primera linea responsabilidad de Roland Peters a quien se lo he manifestado y reconocido siempre tanto personalmente como en nuestra permanente correspondencia Conozco a Roland Peters y su familia desde hace ya varias décadas y desde siempre he mantenido con ellos un respeto y una estimacién que han sido mutuos. En cada obra queda plasmado algo de la personalidad de su autor, de su vida, de su esfuerzo, y en ese sentido es que quiero destacar muy especialmente la preocupacién de Roland por mantener vivo en el texto mi aporte a su libro. Con afecto y admiracién, Michail Prodan PREFACIO El libro Holzmesslehre del Profesor Michail Prodan, editado en Alemania, es ya un clésico entre los textos de dasometria conocidos mundialmente. A través de la fuerte influencia alemana en miiltiples centros de ensefianza e investigacién forestal, este libro se ha constituido para nuestra América Latina en una obra guia, tanto en el campo de la educacién forestal como en la practica profesional. A pesar de estar escrito en idioma alemén, su uso se ha impuesto en numerosas escuelas universitarias y es utilizado ampliamente como texto de consulta por los profesionales forestales de la regién, muchos de los cuales se han perfeccionado y obtenido sus titulos de posgrado en Alemania Sin embargo, los casi treinta aftos transcurridos desde su publicacién, su orientacién casi exclusiva a la silvicultura europea y especialmente el idioma, representan limitantes para un uso més generalizado, lo que hizo recomendable su traduccién, modernizaci6n y adaptacion a las condiciones latinoamericanas. Esta adaptacién trata de resolver el problema de mensura que plantean nuestros bosques, primero, porque existe una variedad muy grande de bosques y situaciones, y luego, porque los Objetivos, técnicas y especies difieren en cada caso particular, requiriendo una solucién distinta. Elautor principal de esta adaptacién es el Dr. Roland Peters, ingeniero forestal, especialista en mensura forestal y profesor universitario con experienacia en Chile y otros paises de Latinoamérica como consultor de organismos internacionales, quien fue especialmente contratado por la Deutsche Gesellschaft fiir Technische Zusammenarbeit (GTZ) con este propésito. El Dr. Peters invit6 a participar a los colegas Dr. Fernando Cox y Dr. Pedro Real, también profesionales chilenos vinculados a la ensefianza de estas disciplinas en diversas universidades, cuya colaboracién constituyé un valioso aporte a la obra. Antes de preparar este libro, los autores visitaron varios centros de ensefianza y de investigacién forestal ademés de proyectos de la GIZ y de otras entidades internacionales en diversos paises, con el fin de ampliar su experiencia y de Teunir material que sirviera de orientacién para estructurar su contenido. Es importante destacar que esta edicién espafola del texto de Prodan noes una traduccién sino un libro nuevo cuya base esta constituida por los conceptos principales contenidos en Holzmesslehre. Ademés de conferirle a este libro una estructura diferente, mas acorde con los. contenidos de las asignaturas de dasometria, dendrometria y epidometria que se imparten en las escuelas forestales, se intents incorporar en él todos los adelantos del conocimiento relativos a este campo de las ciencias forestales que estan actualmente en aplicacién. Dr. Dietrich Burger GTZ, Jefe de la Division Manejo Recursos Forestales, Produccién Animal, Pesca y Conservacién de la Naturaleza AGRADECIMIENTOS La realizacién de este texto no habria sido posible sin el decidido apoyo econémico de la GTZ, el permanente estimulo y entusiasmo del Prof. Michail Prodan, asf como la importante colaboracién de varios colegas de América Latina y muy especialmente de los ingenieros forestales chilenos Juan Carlos Cerda, Harry Exss y Horacio Gilabert, quienes con gran interés participaron en la revisién del texto final. También se hace una mencién muy especial para el Sr. Luis Brito, la Srta. Ver6nica Schuller y la Sra. Norma Valdés quienes con gran solicitud y eficiencia fueron los encargados de preparar las figuras y mecanografiar el manuscrito. Por tiltimo, un reconocimiento al Proyecto IICA/GTZ en Agricultura, Recursos Naturales y Desarrollo Sostenible, y al Servicio Editorial del IICA, especialmente en la persona de la Sra. Daniéle Trottier, por la produccién de este libro. Roland Peters la 12 13 4 141 142 143 144 145 IL. ma Waa maz 113 1.1.3.1 1.1.3.2 11.33 114 mas 116 TABLA DE CONTENIDO INTRODUCCION, Conrentn REVISION HISTORICA SimBoLociA .. UNIDADES DE MEDIDA... Longitud Superficie Peso. Volumen madera aserrada .. Volumen madera arrumada o apilada ol MEDICION DE ARBOLES INDIVIDUALES. MEDICION DE ATRIBUTOS DE ARBOLES Y PRODUCTOS.. Medicién de diametro... 137 Medicién de didmetro a distintas alturas Medicién de alturas. Hipsémetros basados en principios geométricos Hips6metros basados en principios trigonométricos .. Instrumentos de tiltima generacin Medicién de corteza Medicién precisa de crecimiento diametral ... Medicién de didmetro de copa .. tabla de contenido m7 111.10 111.101 111.102 111.103 11.10.31 11.10.32 111.1033 111.1034 111.1035 m2 Medicién de drea basal Medicién de la forma Cuocientes de forma y series de ahusamient Factores de forma El factor de forma verdadero .. EI factor de forma falso o artificial Relacién entre el factor de forma falso y el verdadero. Cuerpos de rotacién .. Formulas de cubicacién Cubicacién de secciones 0 trozas Formula del centroide... Normas de cubicacién de trozas JAS ‘Comparacién entre los cuerpos de rotacién teéricos y la forma fustal. Expresiones matemético-estadisticas para la forma fustal Sistemas para la captacién y representacién de cualquier forma fustal. El sistema de SCHIFFEL (1897) .. Sistemas para la captacién de formas fustales medias Sistemas referidos a su didmetro a igual altura relativa con la utilizacién de cuocientes de forma verdaderos Expresién matemitica de la forma ... Comprobacién de la f6rmula de 4rea central o media Largo dptimo de los fustes para su cubicacién . Discusién y solucién general . Medidas de conicidad del fuste.. Largos permitidos para la aplicaci6n de la formula de érea central. Errores y fuentes de error en la medicién de érboles volteados Relaci6n entre el error del diémetro y el correspondiente error del 4rea basal . Propagacién de los errores del érea basal o diamétrico y del largo sobre el célculo volumétrico ... La precisi6n de la determinacién del 4rea basal y sus errores, Errores de construccién de la forcipula Superficie fustal irregular: Contraccién diamétrica Errores de medicién aleatorio: Desviaci6n del 4rea circular ESTIMACION DE ATRIBUTOS DE ARBOLES Y PRODUCTOS. Funciones de volumen... Funciones de volumen local o tarifas Funciones de volumen general 0213 02.14 0215 02.16 0.22 0.221 1.2.22 1.2.2.3 1224 1225 023 0.23.1 1.232 124 0.2.4.1 1.2.42 11.243 112.44 0245 1246 11247 125 1125.1 1125.2 1.253 125.4 11.26 127 1.28 12.9 1.2.10 m2 Funciones de volumen hasta diferentes di4metros limites Funciones de volumen de razén .. Funciones de volumen con mas de un didmetro. Estructura volumétrica del fuste .. Funciones de ahusamiento Modelos generales de 4rbol completo. Modelo general segmentado Modelos compatibles generales y segmentados .. Modelos de forma o exponente variable Modelos de Arbol individual Problemas estadisticos en la construccin de funciones de volumen y modelos fustales .. Selecci6n de la muestr 121 Heterogeneidad de varianza 123 Validacién de modelos de volumen y ahusamiento Muestra de validacién Evaluacién de modelos. Examen de las capacidades predictivas Estimacién de volumen hasta distintos indices de utilizacién. Estimacién de volumen de productos Pruebas de consistencia de los modelos Inferencia estadistica Reglas madereras. Reglas madereras basadas en diagramas. Regla Scribner . Reglas madereras basadas en férmulas mateméticas Funciones de volumen aserrable derivadas mediante estudios en aserraderos .... Produccién real versus estimada por reglas Estimaci6n de existencias netas ... Estudio de defectos Factores de transformacién (“cull factors” Funciones de producto ... Simuladores de trozado Voltimenes aprovechables en bosques naturales. xi tabla de contenido Il. ma m1 MLL11 mL1.12 M1.1.1.3 mL114 mS mL1.16 W1.2 ma3 ma.4 m.5 m6 MLL? m2 m2. 21.1 2.1.2 m2.2 m23 mL24 m25 M125. 25.2 m26 w27 xii MEepIcION DE RODALES 151 UNIDADES MUESTRALES. Unidades muestrales probabilisticas Parcelas convencionales ... Parcelas concéntricas Muestreo puntual horizontal (MPH). Muestro lineal horizontal (MLH) ‘Muestreo puntual vertical (MPV) y lineal vertical (MLV) Generalizaci6n del MPH . -161 163 175 181 Unidades muestrales no probabilisticas .. Relaciones entre el tamafio de las parcelas y variabilidad . Unidades muestrales en el borde del rodal Unidades muestrales en conglomerados Determinacién de variables en unidades muestrales mediante submuestreo 194 Determinacién del valor promedio de atributos en unidades muestrales .. ‘Disefios MUESTRALE: Generalidades Estadistica de poblaciones .. Descripcién muestral de poblaciones: estimaciones ‘Muestreo aleatorio simple (MAS) .. Estimadores MAS alternativos 218 ‘Muestreo sistematico Muestreo con estimadores de razén . Estimador de raz6n de medias Estimador de media de razones Muestreo estratificado .. Muestreo por conglomerados bietépico (MCB) . m28 m29 29.1 1292 02.10 2.10.1 2.10.2 2.103 m2. M2111 m21.2 1.2.11.3 m2114 m3 131 03.1.1 03.1.2 13.2 ua m4.1 m4.11 14.1.2 14.13 14.1.4° m415 14.1.6 14.1.7 m42 m421 4.2.2 14.23 14.24 W425 Muestreo en bloques Muestreo con probabilidad variable. Muestreo de lista a priori (PPS) Muestreo de lista a posteriori (PPP) Muestreo en dos fases Muestreo en dos fases con estimador de razén Muestreo en dos fases con estimador de regresin .. Muestreo en fases para estratificacién Muestreo en ocasiones sucesivas .. Muestreo en inventarios sucesivos independientes. Inventarios sucesivos con todas las unidades permanentes en ambas ocasiones (inventario continuo o CF). Muestreo con remedici6n parcial .. Muestreo con reposicién parcial (SPR) OFTIMIZACION DE INVENTARIOS . Anilisis de errores en inventarios. Errores no muestrales Errores muestrales Maximizacién de la eficiencia muestral .. DETERMINACION DE PARAMETROS DE RODAL Diémetro medio del rodal .. ees Relacién entre la distribucién diamétrica, el rango diamétrico y la desviacién estandar Los arboles medios de HOHENADL . El érea basal y los correspondientes Arboles medio: El didmetro del arbol de drea basal media o diémetro medio cuadrético D, Didmetro del rbol de area basal central Diametro del érbol medio de WEISE... Errores en la determinacién de didmetros y dreas basales La altura en el rodal La relacién entre el didmetro d y la altura A en un rodal La precisi6n de la curva de alturas de rodal... Propiedades de las curvas de alturas de rodal... Modelos parametrizados de altura .. Los valores medios de altura xiii tabla de contenido m43 1143.1 14.3.2 1.4.3.3 14.3.4 14.35 1143.6 14.3.7 1.4.3.8 4.4 m45 145.1 M452 ms m5.1 m5.2 153 5.4 m55 Iv. Iva v2 v3 1V3.1 1V32 xiv Factores de forma La curva del factor de forma comercial La curva del factor de forma de madera total La curva del factor de forma de madera fustal El factor de forma falso... Coeficiente de forma basal de HOHENADL Estimaci6n del factor de forma falso a partir de otros cuocientes de forma Relacién entre el factor de forma, el didmetro a la altura del pecho y altura del arbol Producto forma-altura (altura mérfica) Estimacién del espesor de corteza .. Determinacién de volumen Métodos del 4rbol muestra Métodos basados en tarifas o funciones generales de volumen ‘MEDICION DE SUPERFICIES.. Por coordenada: Planimetro polar ... Red de puntos o mallas .. Transectos .. Determinacién de errores SiTIO Y PRODUCTIVIDAD.. EXPRESIONES DEL SITIO EN BASE AL COMPLEJO SUELO-CLIMA, EXPRESIONES DE LA CALIDAD DE SITIO EN BASE A PARAMETROS DEL RODAL. (CURVAS DE INDICE DE SITIO. Principios: anamorfismo y polimorfismo . Tipos de datos: parcelas permanentes, parcelas temporales y andlisis fustal 1V3.3 1V3.3.1 1V3.32 1V333 1V33.4 V3.4 IV35 V3.6 V3.7 va Vid V2 v3 via VAS V1.6 vA7 V8 vig v2 v2.4 v22 Construccién de curvas de indice de sitio .. Método de la curva guia . Método de la ecuaci6n de diferencia Método de regresin anidada Construccién de curvas polimérficas .. Modelos de estimacién del indice de sitio en base a factores ambientales .... 383 Indices de productividad Estimaci6n del indice de sitio de rodales Proyeccién del crecimiento en altura ... DENSIDAD Y ESTRUCTURA ssssssssssooes INDICES DE DENSIDAD DE RODAL. Nuimero de arboles .. Area basal ... Indice de densidad de REINEKE .. 395 Indices de espaciamiento Densidad de copas o porcentaje de cobertura 397 Ley del autorraleo o de la potencia -3/2.. Factor de competencia de copas (CFF) Razén de érea de Arboles (TAR) Guia de densidad. INDICES DE DENSIDAD Y DE COMPETENCIA PUNTUAL.. Indices independientes de distancia Indices dependientes de distancia xv tabla de contenido v3 v3. V3.2 V3.3 V34 V35 V35.1 V3.5.2 V353 V35.4 V355 v3.5.6 V35.7 V3.6 V3.6.1 3.6.2 VI. via VL2 VI21 VL22 VL23 V2.4 VL25 VL26 VL3 VI3.1 xvi ESTRUCTURA DE RODALES.. Distribucion uniforme .. Distribucién unimodal..... Distribucién bimodal au Distribucién decreciente y formas de transicién we 412 Funciones de probabilidad de densidad (fp. Conceptos bésicos Elementos estadisticos de las fd, Curtosis Moment Cuartiles, deciles y percentiles Flexibilidad de una funcién de distribucién de probabilidad Funciones de distribucién de probabilidad més importantes en el campo forestal 8 Prediccién de la tabla de rodal Método de prediccién de parémetros Método de recuperacién de parémetros ese RENDIMIENTO Y CRECIMIENTO. Concertos ‘Tiros DE CRECIMIENTO. El crecimiento anual corriente, i... El crecimiento periédico, ip... Relacién entre las curvas de rendimiento y crecimiente El crecimiento medio anual, ima Crecimiento de rodal .. Puntos de culminacién de crecimiento PORCENTAJES DE CRECIMIENTO .. 445 Formulas de interés. V3.2 via V4.1 Vi42 Vi43 VLS VI5.1 V5.1 VI5.1.2 VI5.13 VI5.2 VI5.21 VI5.22 VI53 VI54 vil. VIL1 VIL. VIL12 Vi.12.1 VUL12.2 VUL123 viz Vi.13.1 Vi13.2 VuL2 V2.1 tabla de contenido Formulas de aproximacién 448 INFORMACION BASICA DE CRECIMIENTO. Anilisis de tallo Tarugos de incremento.. Parcelas permanentes MobELOs DE CRECIMIENTO Y TABLAS DE RENDIMIENTO Tablas de rendimiento... Tablas de rendimiento normales Tablas de rendimiento empiricas Tablas de rendimiento de densidad variable . Modelos de rodal Modelos agregados de rodal Modelos de érbol individual .. Compatibilidad y funciones biol6gicas Funciones de crecimiento principales Uso DE FOTOGRAFIA AEREA EN INVENTARIOS FORESTALES «..... FOTOGRAFIA AEREA COMO SISTEMA DE INFORMACION, Ventajas y limitaciones de las fotografias aéreas Escala de las fotografias aérea: 469 Concepto de escala... 469 Determinacién de la escala 470 Otros métodos para determinar la escala 471 Estereoscopia .. 7 Visién estereoscépica y fotografia aérea . A74 Instrumentos para la observacién tridimensional 475 FOTOGRAFIA AEREA E INVENTARIOS FORESTALES 475 Informacién proveniente de un proceso de fotointerpretacién... xvii tabla de contenido VuL22 V2.3 V0L23.1 V0L23.2 V0L23.3, VIL23.4 V—L235 va24 va25 VIL26 V0L2.6.1 VIL26.2 VIL263 V0264 vis V0L3.1 vu3.2 V3.3 VIL34 V034.1 Vu—L35 Vm3.6 VIL4 VIL4.1 vi4.2 VILS vu5.1 vu5.2 xviii Reconocimiento de especies y tipos forestales Organizacién de un proceso de fotointerpretacién Definicién de objetivos Recopilacion de informacién basica .. Fotointerpretacion preliminar Planificaci6n y ejecucién de campafia de terren Fotointerpretacién y delineamiento definitivo ESSSE8 8 Manipulacién de fotografias Informacién fotodendrométrica Cubicacién aerofotogramétrica. Métodos de estimacién del volumen Comparacién visual . Tablas de volumen para uso con fotografias aéreas Tablas de volumen para érboles individuales Tablas de volumen de rodat. PRODUCCION DE CARTOGRAFIA FORESTAL. Mosaicos controlados. 88 § 88888 & 8 Actualizacién de cartografia restituida Restitucién aerofotogramétrica .. Ortofotografia Ventajas del uso de ortofotomapas Presentacién de la cartografia forestal. Mediciones de superficie. ‘SISTEMAS DE INFORMACION GEOGRAFICOS (sIG) Ambiente computacional y SIG Elementos de un SIG 493, ‘SISTEMA DE POSICIONAMIENTO GLOBAL SATELITAL (GPS) 498 Descripcién del sistema GPS ... 498 Configuracién del sistema GPS. vas3 Bases del sistema vss Metodologias de trabajo VOSS Precisién ‘VI5.6 Sistemas de coordenadas. vas? GPS y posproceso BIBLIOGRAFIA ... INTRODUCCION Por mensura forestal se conoce aquella ciencia que se ocupa de la medicién del bosque y sus productos. Representa en tiltimo término la aplicacién de los principios basicos de matematicas, geometria y fisica a la solucién de los problemas planteados en la medicién y estimacién tanto de la madera en pie como tumbada, sustentada especialmente en la metodologia estadistica. Se puede afirmar que hoy por hoy los métodos estadistico-mateméticos son el elemento més importante de la mensura forestal junto a los espectaculares avances de la informatica. 11 CONTENIDO El texto comprende seis capitulos luego de una introduccién general que incluye una breve revisién histérica de esta importante rama de la ciencia forestal, la descripcién de la simbologia normalizada adoptada internacionalmente para la mayoria de las variables y la presentacién de las unidades de medidas principales y sus equivalencias utilizadas en América Latina. La division adoptada para el libro trata de cubrir en forma ordenada los ambitos del quehacer de la dendrometria, dasometria y epidometria a través de los siguientes capitulos: - Medicién de Arboles individuales = Medicién de rodales - Sitio y productividad - Densidad y estructura - Rendimiento y crecimiento - Uso de fotografias aéreas El libro Holzmesslehre, en su versién alemana original, tiene como una de sus principales fortalezas la gran variedad de técnicas dasométricas y dendrométricas para determinar pardmetros de arboles y rodales. El tema de los disefios muestrales, en cambio, no se encuentra desarrollado con igual propiedad, siendo de particular importancia en la mensura de bosques extensos y de dificil acceso y donde la frecuente carencia de recursos obliga a adoptar técnicas de maxima eficiencia. En mérito a lo anterior es que en esta edici6n se dio especial énfasis a los sistemas de muestreo que se aplican en los inventarios forestales con un completo andlisis tanto de sus fundamentos tedricos como de su aplicacién practica ejemplificada a través de ejercicios resueltos. En relacién con el uso de fotografias aéreas es importante mencionar que, sibien el tema de los sensores remotos como imagenes de satélite y similares es de gran relevancia en la actualidad, su tratamiento es tan largo que requeriria la preparaci6n de otro texto. introduccién Esta nueva estructura del libro, algo diferente del texto aleman de Prodan, se adapta més a los programas de educacién forestal que se imparten en nuestro continente americano. Este libro, como su original, esta destinado al estudiante forestal como texto de estudio y al préctico forestal que lo puede utilizar como documento de apoyo y consulta permanente en su ejercicio profesional. 12 REVISION HISTORICA Los principios de la Mensura Forestal se remontan a la Europa de fines del siglo XVII. El problema inicial fue la cubicacién del 4rbol como individuo y luego de la masa boscosa. Las formulas bésicas para la determinacién de volumen de secciones fustales fueron introducidas por OTTELT (1765), KRUNITZ (1781) y otros. PAULSEN (1795) desarrolla la primera férmula empirica para determinar rendimientos y COTTA (1804) construye la primera tabla de volumen. KLAUPRECHT (1846) complementa y publica la teoria de los factores de forma desarrollada también por PAULSEN afios antes. En un libro publicado en 1852, HEYER fue uno de los primeros en plantear las diferentes. relaciones principales entre las variables didmetro, altura y volumen. Problemas posteriores que preocuparon a los investigadores en esta disciplina fueron las funciones de crecimiento y muy especialmente las técnicas de inventario que dieron origen a los sistemas de muestreo a fines del siglo XVIII, pero que s6lo se aplicaron a principios del siglo XX junto a la adopcién definitiva de las técnicas matematico-estadisticas. Una revolucién en los métodos muestrales lo constituyé el método relasc6pico de BITTERLICH (1952). El periodo ultimo se ha caracterizado por su desarrollo sostenido en la aplicacién de técnicas matemético-estadisticas, el acelerado avance tecnolégico en las herramientas computacionales que hoy estan al servicio de esta ciencia y su cada vez més estrecha relacién con otras disciplinas forestales tales como silvicultura, manejo, politica y economia forestal. 13 SIMBOLOGIA La Uni6n Internacional de Organizaciones de Investigacién Forestal (IUFRO), a través desu documento «La normalizacién de los simbolos en dasometria» publicado en 1969, propuso ‘un conjunto de simbolos para representar las principales variables utilizadas en Mensura Forestal. Esta simbologia fue adoptada en su mayoria por este texto en un esfuerzo por contribuir al éxito de esta importante iniciativa que ademés facilitard la comprensién por parte de aquellos lectores que no dominan el idioma espafiol. simbologia La lista de simbolos generales recomendados por IUFRO y utilizados en este libro son los siguientes: mS cm ean sae circunferencia o perimetro didmetro a 1.3 m de altura altura total rea basal volumen espesor de corteza edad crecimiento cuociente de forma factor de forma numero tasa de crecimiento o interés Estas letras mintsculas estén dispuestas para las variables a nivel de Arbol individual, mientras que las mismas letras maytisculas estén reservadas para las variables representativas de rodales. Las mediciones sin corteza se individualizan con el subindice u ; aquellas efectuadas a nivel de tocén con el subindice st . Otros simbolos de uso frecuente son para arboles y/o rodal seguin sea el caso: os ol diémetro medio aritmético diémetro del arbol de 4rea basal media didmetro a 0,i de la altura desde el suelo didmetro a j metros desde el suelo. Se usa también frecuentemente para representar el didmetro de la j- ésima seccién altura media aritmética altura del arbol de 4rea basal media altura dominante altura de LOREY crecimiento anual corriente en diémetro crecimiento anual corriente en 4rea basal introducci6n ky = cuociente de forma verdadero k, = cuociente de forma falso fa: = factor de forma verdadero fis = factor de forma falso 14 UNIDADES DE MEDIDA Para la medicién del bosque y sus productos coexisten en América Latina distintos sistemas de medidas. En general en todos los paises de la regién se esta incorporando el sistema métrico decimal, sin embargo, especialmente en lo concerniente a unidades de superficie y taml voltimenes de madera, se encuentran en uso unidades de los sistemas briténico y espafol. A continuacién se proporcionan algunas equivalencias para las unidades de longitud, 4rea y volumen més ampliamente usadas. crecimiento anual corriente en altura i, = crecimiento anual corriente en volumen 14.1 Longitud Multiplicar por para obtener Centimetros 0.01 Metros 10 Milimetros 0.3937 Pulgadas 0.03281 Pies 0.01094 Yardas 0.01197 Varas Kilémetros 1000 Metros 100000 Centimetros 0.6214 Millas 49.71 Cadenas 1093.61 Yardas 1197.60 Varas 239.52 Leguas 3281 Pies Longitud (continuacién) Multiplicar por para obtener Metros 100 Centimetros 0.001 Kilémetros 1000 Milimetros 3.281 Pies 39.37 Pulgadas 1.197 Varas 6.21376104 Millas 1.094 ‘Yardas 0.0497 Cadenas 0.2395 Leguas Pies 30.48 Centimetros 0.3048 Metros 2 Pulgadas 0.3333 Yardas 0.3646 Varas 0.0730 Leguas Pulgadas 254 Centimetros 0.0254 Metros 0.08333 Pies 0.0386 Varas 0.0278 Yardas Varas 0.8350 Metros 32.91 Pulgadas 2.7474 Pies 0.9132 Yardas 02 Leguas 0.04155 Cadenas Yardas 0.9144 Metros 3 Pies 36 Pulgadas 1.094 Varas 0219 Leguas 0.04545 Cadenas introducci6n Longitud (continuacién) Multiplicar por para obtener Leguas 4175 Metros 137 Pies 164.4 Pulgadas 5 Varas 4.5625 Yardas 0.2075 Cadenas Cadenas 20.1168 Metros 66 Pies 2 Yardas 24 Varas Millas 1.609 Kil6metros 1609 Metros 80 Cadenas 385.4 Leguas 1760 Yardas 1925 Varas Cuerdas 40 varas 40 Varas 1.662 Cadenas 33.400 Metros 109.698 Pies 36.566 Yardas Cuerdas 28 varas 28 Varas 1.163 Cadenas 23.380 Metros 76.789 Pies 25.596 Yardas Cuerdas 25 varas 5 Varas 1.039 Cadenas 20.875 Metros 68.561 Pies 22.854 Yardas 142 Superficie unidades de medida Multiplicar por para obtener Acres 4047 Metros? 0.405, Hectéreas 10 Cadenas* 0579 Manzanas 0.08968 Caballerias 3.618 ‘Cuerdas 40 varas* 7385 ‘Cuerdas 28 varas* 9.624 Cuerdas 25 varas* 43560 Pies? Centimetros* 0.0001 Metros? 100 Milimetros* 1.076010° Pies? 0.155 Pulgadas* Hectéreas 2471 ‘Acres 10000 Metros? 0.01 Kilémetros* 2471 Cadenas? 1.4342 Manzanas 0.02216 Caballerfas 8.944 Cuerdas 40 varas* 18.253 Cuerdas 28 varas* 28.897 Cuerdas 25 varas* 0.64 Cuadras Kilémetros? 2471 Acres 100 Hectéreas 1.00106 Metros? 0.3861 Millas? “4 Cuadras Metros? 2.471010% Acres 10.76 Pies? 1.550 Pulgadas? 0.0001 Hectareas 1.196 ‘Yardas? 1.432 Varas? introducci6n ‘Superficie (continuacién) Multiplicar por para obtener Pies? 2.2960105 Acres 0.9290105 Hectéreas 0.929 Metros? om Yardas? 0.133, Varas? Caballerias 45.03, Hectéreas m.27 Acres 64.58 Manzanas 403.125 Cuerdas 40 varas? 838.50 Cuerdas 28 varas? 1032 Cuerdas 25 varas? 1127 Cadenas* 28.82 Cuadras Manzanas 0.69874 Hectéreas 1.726 Acres 0.01568 Caballerias 625 Cuerdas 40 varas? 13.0 Cuerdas 28 varas? 16.0 Cuerdas 25 varas? 282.78 Cadenas* 1.0918 Cuadras Cuerdas 40 varas* 0.1337 Hectéreas 0.3306 Acres 0.16 Manzanas 0.00248 Caballerias 2.16 Cuerdas 28 varas* 256 Cuerdas 25 varas? 541 Cadenas* 0.2089 Cuadras Cuadras 15625 Metros? 1.5625 Hectéreas 3.8609 Acres 224 Manzanas 0.03462 Caballerias unidades de medida 143 Peso Multiplicar por para obtener Toneladas métricas 1000 Kilogramos Kilogramos 1000 Gramos 220 Libras 35.27 Onzas Quintales 46 Kilogramos 4 Arrobas 1600 Onzas 05 Cargas 101.47 Libras 0.46 Quintales métricos 0.9055 Quintales avoirdupois Cargas 92 Kilogramos 2 Quintales 092 Quintales métricos 0.552 Quintales avoirdupois 8 Arrobas 200 Libras Quintales métricos 100 Kilogramos 247 Quintales 1.968 Quintales avoirdupois 87 Arrobas 220.46 Libras 1.087 Cargas 3526.21 Onzas Libras 0.4536 Kilogramos 453.6 Gramos 16 Onzas Onzas 28.359 Gramos Arrobas ns Kilogramos 400 Onzas Quintales avoirdupois 50.80 Kilogramos nz Libras introduccién Peso (continuacién) Multiplicar por para obtener Quintales avoirdupois 4417 Arrobas 1766.8 Onzas 3200 Cargas 0.508 Quintales métricos 1.1043 Quintales. 144 Volumen madera aserrada Multiplicar por para obtener Metros? 35.314 Pies? 42.37 Pulgadas madereras 423.7 Pies madereros 485 Pulgadas pineras Pies? 0.0283 Metros? 12 Pulgadas madereras 2 Pies madereros 137 Pulgadas pineras Pulgadas pineras 0.0206 Metros* (Chile) 073 Pies? 1" 610" 105° 0.875 Pulgadas madereras 875 Pies madereros Pulgadas madereras 0.0236 Metros? (Chile) 0.833 Pies 1'e10" 612" 114 Pulgadas pineras 10 Pies madereros Pies madereros * 0.00236 Metros* Verer 0.0833 Pies* 01 Pulgadas madereras 0.14 Pulgadas pineras 44 Pulgadas* * También llamado pie tablar o pie cuadrado. 10 145 Volumen madera arrumada o apilada unidades de medida Multiplicar por para obtener Metros estéreo 1 Metros’ en trozas 1meimelm 0.60 - 0.75 Metros? sdlidos Metros ruma 1.66 Metros* sélidos Imelme244m 1.109 Metros Biobio 2217 Metros Masisa 0.6734 Cuerdas cortas 0.5388 Cuerdas largas Metros Biobio 15 Metros’ s6lidos (Chile) 0.9017 Metros ruma 1melme220m 2 Metros Masisa 0.61035 Cuerdas cortas, 0.4855 Cuerdas largas Metros Masisa 075 Metros’ sélidos (Chile) 0.451 Metros ruma 1melme110m 05 Metros Biobio 0.3125 Cuerdas cortas 025 Cuerdas largas Cuerdas cortas 24 Metros? sélidos Vosges 1.4848 Metros ruma 1.6384 Metros Biobio 32 Metros Masisa 0.7989 Cuerdas largas, Cuerdas largas 3 Metros? sélidos Fed 010" 1.856 Metros ruma 2.059 Metros Biobio 4 Metros Masisa 1.2517 Cuerdas cortas 1 II. MEDICION DE ARBOLES INDIVIDUALES Toda medicién implica la comparacién de un elemento u objeto con un patrén esténdar. Cualquier determinacién de caracteristicas tipo de un individuo o de un conjunto de individuos es considerada una medicién cuando existe un contacto entre el instrumento y el objeto, contacto que puede ser fisico, éptico o de otra naturaleza. Al tratar la mensura de individuos, 0 conjunto de individuos, se debe diferenciar expresamente entre mediciones y estimaciones; este tiltimo concepto se aplicaré a la determinacién de un valor o dimensién mediante un estimador, que también es un instrumento, pero de tipo estadistico-matematico. Las definiciones anteriores de los conceptos medicién y estimacién permiten aclarar situaciones ambiguas como lo son las mal lamadas estimaciones oculares, que en realidad corresponden a una medicién, aunque el instrumento ojo-mente sea impreciso. Il.1 MEDICION DE ATRIBUTOS DE ARBOLES Y PRODUCTOS Estas mediciones pueden realizarse por comparacién directa del patron esténdar con el objeto, y en ese caso son llamadas mediciones directas; 0 por medio de soluciones geométricas © trigonométricas, en cuyo caso son denominadas indirectas, como los sistemas 6pticos de medici6n. IL1.1 Medici6n de diametro La medicién de didmetro es la operaci6n més corriente y sencilla de mensura. En drboles en pie, la altura normal del diémetro representativo del Arbol es 1.3 m desde el nivel del suelo, medidos sobre la pendiente. Por la altura de medici6n, se denomina didmetro a la altura de pecho. Otros puntos de medicién de didmetro de tipo comercial en arboles en pie son la altura del tocén, mitad del fuste, cualquier punto sobre el fuste, diémetro a la altura de comienzo de copa, didmetros limites comerciales, etc. En trozas normalmente se miden los diémetros extremos y eventualmente didmetros intermedios. Para la medicién directa o indirecta de diémetros de Arboles en pie o de trozas hay varios instrumentos disponibles basados en diferentes principios. a) Foreipula Se compone de una barra graduada y dos brazos paralelos. Uno de los brazos es fijo, mientras que el otro se desplaza libremente sobre la barra. medicién de arboles individuales i) ii) if) 13m LX Figura 2-1. Punto de medicién del diémetro a la altura de pecho Una forcipula debe cumplir las siguientes condiciones: La barra debe ser recta, suficientemente larga y estable, con una graduacién precisa y legible. Los brazos deben estar en un plano, ser perpendiculares a la barra y paralelos entre si EI movimiento del brazo debe realizarse con facilidad, pero en ningtin caso debe estar suelto. Dos son los errores que se cometen con mayor frecuencia: La forcipula no se mantiene perpendicular al eje longitudinal del 4rbol; los errores son en este caso de signo positivo (sobremedicién). El brazo mévil suelto ha perdido su paralelismo con el brazo fijo, en cuyo caso el error de medicién es sistematico y de signo negativo (submedicién). Existen diferentes modelos que son variedades de la forcipula de brazos paralelos y se basan en distintos principios. En su mayoria, los fundamentos para la graduacion y construccién de forcipulas se desarrollaron en el siglo XIX y fueron acuciosamente descritos por MULLER (1899). 4 Fore{pula finlandesa. Consiste en un brazo recto y otro parabélico, graduado de forma tal que el didmetro se puede leer directamente en el punto de contacto con el érbol. Se usa especialmente para la medicién directa de diémetros superiores, para lo cual se monta en varas de hasta 8 m de longitud. medicién de atributos de érboles y productos Joo] a Figura 2-2. Forcipula de brazos paralelos (de HUSCH et al. 1982) ula de horcaja, Tiene s6lo dos brazos rectos en éngulo y es adecuada solamente para didmetros pequefos. Figura 2-3. Forcipulas de horcaja y finlandesa (de HUSCH et al. 1982) b) —_ Huincha o cinta diamétrica Es de acero, material plastico o fibra de vidrio altamente estable y est4 graduada enunidades n. Permite medir directamente el diémetro, al rodear el tronco a la altura deseada, cuidando que ella se ubique en un plano exactamente perpendicular al eje longitudinal del fuste. A partir de la formula de la circunferencia c=a-d (2-1) se lee directamente el didmetro (2-2) 15 medicién de arboles juales El uso de esta cinta fue muy generalizado en paises europeos en el siglo XVIII y hasta inicios del XIX, pero la cinta fue desplazada por la forcipula. Las grandes ventajas de este instrumento son: su facilidad de transporte y de comprobaci6n de estado, el amplio rango de dimensiones para las cuales es util y la precisin con que permite efectuar las mediciones. Esta tiltima ventaja lo hace recomendable para parcelas experimentales y estudios de crecimiento (ASSMANN 1957, 1961; MULLER 1958; HUMMEL et al, 1959). Su principal desventaja es que, en secciones no circulares, que son la mayoria, sobrestima sisteméticamente el didmetro. ©) Vara Biltmore Un medio préctico para la medicién répida y cémoda de diémetros en Arboles en pie es la vara Biltmore, cuyo principio éptico fue desarrollado por SCHENCK, BELYEA (1932), PRODAN (1957), y se desprende de la Figura 2-4. Dependiendo de la distancia S desde el ojo del observador A al 4rbol y de los dos radios OT, y OT, , se puede leer directamente el diémetro sobre la vara graduada CD. oo | ot Figura 2-4. Principio de la vara Biltmore 16 Juctos De la equivalencia de los tridngulos ABC y AT, se obtiene que: Ss air @3) (23a) Como AT, = (S+n)?-P? y r= resulta Sd Sd? 25+ _ Vs? +25 VS?+Sd Std e4) Reemplazando diferentes valores de d en la formula, se obtienen las graduaciones de la vara Biltmore. En el Cuadro 2-1 se incluye la graduacién para diferentes largos de brazos. Para secciones que difieren fuertemente de una circunferencia, los errores de medicién pueden ser muy grandes. Sin embargo, trabajando en forma correcta, con la longitud de brazo correspondiente y realizando varias mediciones se posibilita una compensacién de errores. Cuadro 2-1. Graduaci6n de la vara Biltmore (segiin KRENN) 'AB (argo de brazos) ‘AB (largo de brazos) Pare 39 6 Nem Para 59 os Tem a a 2 1g7 1st ast 32 2577 26202687 4 387 388 389 4 2108-2185 27.96 5 480 482 483 36 283728882933, ‘6 5.2 5.74 516 38 2964 = 30193067 a 751 755 758 0 30883167 81,99 10 925 931 9136 12 109 =z a 32103273 33,29 4 1s9 (12691280 “ 33300 «33.97 3457 6 W419 1433 18,66 46 34483519 35,83, 18 1575 15,93 16,08 8 35.66 36403707 20 1184976 30 3679-3759 (38,30 2 18771902, 19,28 82 3792387639581 % 2023 ©2052 20,75, 54 3903-3991 40,70 6 2166 «2198 22.24 56 4012 «410s 4.87 8 23063341 23,71 58 4u19 4217 43.03 30 m43 482 25.15 0 422504827 44.17 65 98 4596 46,97 0 S734 4857 09,68. 6 80 4976 S110 82,30 Saiz 5356 SA.86 7 medici6n de arboles individuales La variable incierta en la f6rmula (2-4) es el largo del brazo. Esta incertidumbre puede disminuirse calculando individualmente las graduaciones sobre la vara. Para ello se hacen varias mediciones diamétricas con una forcipula precisa y simulténeamente, definida la distancia AB = S,, se derivan los valores para diferentes pendientes del terreno (Cuadro 2-2). Los valores ajustados entregan las graduaciones para el largo de brazo individual y se representan por una linea continua (Figura 2-5). ‘Cuadro 2-2. Medi es para la vara Biltmore x= Lecture a forcipula Lectura sobre la regia CD Pendiente > 15% Plano x9 x Forcipula Forcpal Forspula Forcpula 1 19S 165 21 3a5 BS 1 460 33521400280 2 235 20 2 265 © 200 2 470 MS 2 470 31S 3 490 325 23 MS OSS 3 190 4s 23 485 320 4 05 BS mH 460 OS 4 290 0 kM AS S 350 25 25 330 235 5 325 240 25 520 33,5, 6 355 2S 26 385 29.0 6 320 24S 26 22.0 180 7 255 20 27 530 380 7 mS Mo oT SIS 33S 8 270 220 28 2s 220 8 305 225 2B 278 220 9 300 244 29 325 250 9 300 220 29 410 310 10 340-250 3065s HO 10 300 21.0 30, 450310 Th aS m0 312958230 MRO 145 BLO 305 12 260 21032245200 12 320 230 © 3220200 1s m0 «22533 aS aS 13 270 «200 33,400 31.0 1% 90S 230 34 24S 195 4 460 295 4300 23.0 1s 395 mas 35 420295 1S 450 310 © 3532.5 245 16 265 205 36 «240 180 We 498 325 36S 170 7 40 Ss) 87 aS 170 17 540 38037520 33,8, 18 370 2S 8B 45S KS 1 390 SB 25,0 19 305 230 3943.5 B15 19 240 16039 200 2% mS 225 40 48S 335 2 380 71040 300 Otras variantes de forcipulas son aquellas que entregan directamente el 4rea basal (WEISE 1880; BITTERLICH 1959; HELLRIGL 1960), y que permiten obtener en forma més directa el Arbol de érea basal media; forcipulas para cubicacién, que miden el contenido de madera rolliza directamente para diferentes clases de longitud. Hoy son utilizadas por la administracién forestal de Wirrttemberg, donde ya en 1865 WALDRAFF la habia introducido (MULLER 1899). 4) —_Forcipula de tarifa o sector de diémetro de Bitterlich Corresponde a una mejoria sustancial del principio de la vara Biltmore y simultanea- mente equivale a una nueva versi6n éptica de la medicién angular de TREFFURTH, MULLER (1899), BITTERLICH (1952, 1959). 18 tos ” » @ 2 x @ Figura 2-5. Relacién entre la graduacién y de la vara Biltmore y el diémetro x medido con foreipula para largos de brazo de 59 y 71 cm Consiste en dos brazos que subtienden un angulo de 135°. Ambos brazos deben encontrarse en contacto con el fuste. Por construccién, estos brazos captan mejor la seccién transversal del Arbol, y los errores por irregularidades disminuyen. El brazo curvo esté graduado en centimetros para diémetro, dm® para drea basal y en m’ para volumen (Figuras 2- 6y27). Figura 2-6. Sector de diémetro de Bitterlich 19 medici6n de Arboles individuales Figura 2-7. Escala del sector de didmetro de Bitterlich. La escala superior ($1) entrega el didmetro en centimetros, Ia central ( 52) entrega el 4rea basal en decimetros cuadrados y la inferior, el volumen en décimos dem’ €) —_ Dendrémetros y forcipulas épticas Existe una serie de instrumentos épticos disefiados para medir diémetros, basados en el principio taquimétrico. Son aptos para mediciones a distancia y especialmente adecuados para efectuar mediciones a diferentes alturas sobre el suelo. Estos instrumentos proyectan un Angulo @ , que debe abarcar exactamente el fuste del arbol en el punto de medicién, conocida la distancia al arbol E . Para un dngulo @ tan pequefio el didmetro se determina de acuerdo con Ia siguiente funci6n: d=£2sen A 25) Cuando las mediciones se hacen en altura sobre el fuste o en un terreno inclinado que tiene un angulo de elevacién 9 ,entonces procede la determinacién del didmetro por la siguiente funcién: d=2-£-senF -s0c0 (26) Figura 2-8. Principio taquimétrico del dendrémetro Por la distancia desde el observador al arbol el angulo @ es muy pequefio de tal forma que practicamente sen a/2 = tga/2. 20 medicin de atributos de drboles y productos Inspirados en este principio, hay desde instrumentos muy sencillos hasta sofisticados y evolucionados equipos. El diatrombo es un instrumento bésico de angulo variable. La variacién del Angulo se logra al desplazarse una placa 0 estadia de ancho fijo a lo largo del instrumento. Desde el siglo pasado, se conocen y han descrito en detalle dendrémetros, construidos para este fin con diversos disefios y distintos grados de precisién, FIRAT (1958), GIERUSZINSKI (1959), KORF (1953), MICHAILOFF (1952), MULLER (1899), SPURR (1952) y TISCHENDORF (1927). Entre los mas importantes estén el pentaprisma de Wheeler, basado en prismas pentagonales disefiados para obtener errores maximos de 0.25 cm desde 15 metros de distancia y factible de montarse sobre tripode (WHEELER 1962); el dendrémetro Barr and Stroud; el Zeiss Teletop; el relascopio y telerrelascopio de Bitterlich (BITTERLICH 1959); el distanciémetro de Stohr (STOHR 1959) (Figura 2-8a). El Zeiss Teletop permite mediciones de dimetro con una exactitud de 1.5 2 mm, pero su uso esta limitado a problemas cientificos, principalmente por su alto costo y su prolongada demora en la medicién (STOHR 1959). El relascopio y el telerrelascopio de Bitterlich son sin duda, entre todas las forcipulas épticas, las que presentan mayores ventajas, ya que permiten emplear angulos diferentes y éstos se ajustan autométicamente al variar el angulo de inclinacién de la medicién para una misma distancia horizontal al objeto. . Figura 2-Ga. Instrumentos para la medici6n de didmetros en altura a = Forcfpula finlandesa, b = Telerrelascopio, c = Relascopio y d= Pentaprisma 2 11.1.2 Medici6n de didmetros a intas alturas La medicién directa de didmetros a diferentes alturas hasta un maximo de ocho metros es factible a través de la forcipula finlandesa, ya descrita en la seccién II.1.1, que montada sobre una vara permite una lectura directa. La medicién indirecta se efectua a través de los dendrémetros 0 forcipulas 6pticas mencionadas anteriormente como el Zeiss Teletop, dendrémetro Barr and Stroud, HUMMEL (1951), JEFFERS (1956), GROSENBAUGH (1963), pentaprisma de Wheeler (WHEELER 1962) y relascopio y telerrelascopio de Bitterlich (BITTERLICH 1959). IL13 Medici6n de alturas Dada la dificultad de emplear instrumentos de contacto o de medicién directa como reglas o varas cuando las alturas sobrepasan los 8 a 10 metros, se usan en general instrumentos de tipo dptico basados en principios geométricos y trigonométricos (MULLER 1899; TISCHENDORF 1927). A continuacién se comentaré la teoria general y se describirén los instrumentos més utilizados. 1113.1 Hipsémetros basados en principios geométricos Entre éstos se cuentan como los més comunes los hipsémetros Christen, Merritt, el suizo Klein y el danés Jal. 4) Hipsémetro Christen El hipsémetro de Christen se fundamenta en la equivalencia de los triéngulos AC'D' y ACD como también de ABC y AB'C’ (Figuras 2-9 y 2-10). Siendo ice eD BC CD (27) y dados por construccién B'C’=b =constante = 030m CD = L=constante = 4.00m medicién de atributos de drboles y productos la expresin queda: b_x bL a yus (2-8) Donde h= altura del 4rbol, m el valor de la graduaci6n en el hipsémetro, m largo de la vara, m Figura 2-9. Hipsémetro Christen Con la ayuda de la relacién anterior se puede calcular para distintas alturas la graduacién del hipsémetro. El hipsémetro Christen se puede construir facilmente. Con los valores de una regla b de 0.3 my una vara o list6n L de 4 m se obtienen los siguientes valores para x hem 4 5 6 8 10 12 15 20 25 30 35 40 xencm: 300 24 20 15 12 10 8 6 48 4 34 3 Para medir, el observador debe elegir una posicién desde la cual pueda ver, sin moverse, labase del 4rbol en el extremo inferior de la regla y el dpice en el extremo superior. El hipsémetro debe estar en posicién vertical. Simulténeamente se visualiza el listén y se hace la lectura de la altura correspondiente en la regla. El hipsémetro de CHRISTEN est4 muy difundido por su sencilla construccién y manejo. medicién de arboles individuales OC’ =cte. Figura 2-10. Procedimiento de medici6n con el hips6metro Christen ‘Ventajas: - Nose requieren mediciones adicionales de distancia. = Utiliza todo el campo visual, de modo que se requiere s6lo una lectura en el instrument. Desventajas: = Esdificil encontrar dentro del rodal cerrado una posicién adecuada para la medicién. Por lo tanto, el margen de libertad en el terreno es muy pequefto. - Por el menor movimiento se pueden producir mediciones erréneas. - Debido a la disminucién de los intervalos de graduacién, la medici6n de alturas se hace muy imprecisa. = Trabajando prolijamente el hips6metro de Christen tiene un error de +5-6% dela altura. b) —_ Hipsémetro Vorkampff-Laue El hipsémetro Vorkampff-Laue est construido con el mismo principio del hipsémetro de Christen y se diferencia de éste sélo por su presentacién (Figura 2-10). 24 medicin de atributos de drboles y productos B'C'=b =constante D'C'= x =constante Asumiendo una relacién constante: B b_ 10 ce 10 (29) qT Ejemplo: BC =b=80cm DC=x=8cm entonces, BC_BC.. Wh — otambién — = — De pc omen eT (24) h=10-L La magnitud DC = L se puede marcar en el fuste y medir posteriormente o medir directamente sobre una mira. El hipsémetro se puede construir en un bast6n cémodamente transportable. Las ventajas y desventajas son las mismas que en el caso de! hipsémetro de Christen. La precision del instrumento, en especial para Arboles altos, poniendo las marcas adecuadas exactamente en el punto visado, es mayor que la de Christen, debido a que x es constante y no disminuye sino permanece relativamente igual. Para simplificar la ubicacién de un punto de medicién es recomendable ubicar dos nuevas marcas en B'C'= 40 cmy D'C'=4 cm. La precision del instrumento se puede establecer entre +4-6% de la altura. © Hipsémetro Merritt Consiste en una vara graduada, generalmente usada en conjunto con la vara Biltmore. La vara se mantiene vertical, a una distancia fija del ojo del observador y paralela al eje del 3 medicién de arboles individuales arbol. Su graduacién, generalmente en términos de nimero de trozas de un tamafio determinado, esté relacionada con el largo del brazo y la distancia al arbol (Figura 2-11). Figura 2-11. Hipsémetro Merritt (de BRUCE y SCHUMACHER 1935) Siendo ABC y ADE tridngulos semejantes AD: DE = AB: BC (2-10) AD: BC DE = 42 BC - AB (2-11) DE es la graduacién sobre la vara para una altura BC. La mayor dificultad en el uso de este hipsémetro es mantenerlo vertical y a una distancia fija del observador. Cualquier desviacién en su verticalidad y distancia al ojo genera importantes errores. En el caso del hips6metro danés JAL, la medicién de alturas se simplifica mucho, pues ésta se lee directamente apuntando a la punta del rbol a través de una plancha de celuloide, donde se encuentra graficado un haz de lineas. 1.1.3.2 Hipsémetros basados en principios trigonométricos Los mas comunes son los hips6metros Blume-Leiss y Haga, el nivel Abney y el clinémetro Suunto, variando sélo los mecanismos y el aspecto externo (Figura 2-13). 26 de atributos de érboles y productos Figura 2-12, Hips6metro danés JAL. Para un jalén de 6m se lee una altura de 26 m a) _ Hips6metro Blume-Leiss Enel hips6metro Blume-Leiss por un sistema pendular puede medirse el &ngulo vertical 0B. Las alturas h, y fy, son: h=E tga (2-12) h, = Ep (2-13) donde E es la distancia horizontal desde el 4rbol. Seguin la Figura 2-14 la altura total es: hah, +h, (2-14) Por lo tanto, se deben hacer dos observaciones. Si ambas mediciones se encuentran al mismo lado de la horizontal, ellas se deben restar. El hipsémetro Blume-Leiss tiene un péndulo con un sistema que permite fijar los angulos a y B automéaticamente. La distancia E se puede determinar en forma éptica, mediante una mira colgada en el Arbol. Con el telémetro Sptico se pueden determinar distancias de 15, 20, 30 y 40 m. Los productos E tga o E tg se 27 medici6n de arboles individuales marcan sobre una escala de modo que las alturas h, y h, se leen directamente en funcién de la distancia elegida y del 4ngulo vertical (MULLER 1899). Figura 2-14, Principio trigonométrico de medici6n de altura Si se tiene una distancia inclinada E' en vez de la distancia horizontal E, se hace necesario una correcci6n. Esta correccién se calcula en la medicién taquimétrica de distancias y se debe aplicar doblemente, porque: 1. La mira forma un ngulo @ con la vertical. 2. Ladistancia E” igualmente forma el 4ngulo a: con la horizontal E 28 juctos Entonces la distancia corregida seré E' cos’ a en vez de E’. Esta correccién esté calculada en el envés del instrumento. Ella entrega la magnitud que se debe restar ala altura en funcién de &. Los angulos se pueden obtener de una escala. Es aconsejable no medir en la segunda observacién la base del arbol, sino el punto donde fue fijada la mira y luego sumar esta altura a la altura calculada. Las ventajas de este instrumento son una gran precisién (+1%) en condiciones de trabajo relativamente cémodas y la medicién éptica de distancia. Se consideran como desventajas la dificil visibilidad para el telémetro, en especial dentro del rodal, y que se requieren dos observaciones, ademés-de ser necesaria la medicién de distancias. De los cuatro instrumentos presentados en la Figura 2-14, el hipsémetro Suunto es el més compacto y el que permite un mayor rango en las distancias desde las cuales puede situarse el observador respecto del 4rbol. Su desventaja es que se deben realizar las actividades de apuntar y leer simulténeamente, mientras que Haga y Blume-Leiss permiten trabar el indicador de altura para una lectura posterior. El nivel Abney es un instrumento més empleado en topografia; sin embargo, también se le usa para medir alturas. Permite mediciones muy precisas, pero su mayor inconveniente también se encuentra en la doble actividad de nivelarlo y apuntar. Por tiltimo, el relascopio y el telerrelascopio de Bitterlich, ya mencionados en relacién con la determinacién de didmetros a distancia, son empleados también para mediciones de altura. 111.33 Instrumentos de ultima generaci6n Durante los tiltimos afios han aparecido varios instrumentos para medicién de didmetros y alturas, tanto directamente como a distancia, con una tecnologia muy avanzada que las provee de otras muchas capacidades en el proceso de captura y procesamiento de los datos en terreno. Entre los més importantes se pueden citar la forcipula Mantax Computer, el hipsémetro Vertex y el Criterion. a) Forcipula Mantax Con una apariencia muy similar a una fore{pula tradicional, este instrumento es un computador con una memoria de 512 KB completamente programable y de s6lo un kilo de peso. Desarrollada en Suecia por la firma sueca Haglof es muy preciso, permite mediciones en el sistema métrico al milimetro, resistente a cualquier situacién atmosférica y de muy fécil uso. La informacién registrada con este instrumento puede transmitirse directamente o via modem a un computador personal, una impresora e incluso intercambiarse con instrumentos como el GPS (ver Seccién VIL5) y el hipsémetro Vertex. b) —_Hipsémetro Vertex Este instrumento, que emplea impulsos ultrasénicos para medir, se compone de dos unidades, el hips6metro propiamente tal y su emisor. De 500 gramos de peso en total, puede utilizarse de 0 a 50 metros de distancia del 4rbol objeto, con una resolucién de 0.01 metros si la 29 medici6n de arboles individuales medicién se hace a menos de 20 metros. Para utilizarlo se fija el emisor al 4rbol y luego desde una distancia cualquiera (ojalé similar a la altura del 4rbol), se apunta al emisor hasta que en pantalla aparecen la distancia real y horizontal y el Angulo; luego se apunta a la copa, se oprime un botén y se lee la altura o alturas requeridas; permite registrar hasta tres alturas en una medici6n. ©) Criterion Entre los nuevos instrumentos destaca éste ya que emplea tecnologia léser y avanzados sistemas electr6nicos para la medicién de ngulos verticales (inclinacién) y horizontales (azimut). El Criterion fue desarrollado por el Servicio Forestal de los EE.UU,, con el fin de integrarlo a todas las operaciones de mensura de tierra y bosques. Es especialmente adecuado para medir distancias (horizontales y en pendientes), coordenadas x, y, z, y medir altura y diémetros a distancia y por lo tanto especialmente apto para delimitar unidades muestrales circulares de superficie fija o unidad de muestreo puntual horizontal. Dispone de una serie de cuatro modelos, 100, 200, 300 y 400 cuyas capacidades son crecientes. IL14 Medicién de corteza Hay muchas ocasiones en que la medicién de didmetro va acompafiada por una medicién del espesor de corteza. Para su medicién se han ideado varios instrumentos siendo el mas sencillo aquel que permite sacar un tarugo de corteza y medirlo directamente con una reglilla. Otros tipos muy usados son el calibrador de corteza sueco y el martillo extractor de corteza (Figura 2-14a). El simbolo de la corteza es b del inglés “bark”. La medici6n de corteza es recomendable hacerla en dos puntos opuestos del didmetro y promediar. Calibrador de corteza Martillo extractor Figura 2-14a, Instrumentos de medicién del espesor de corteza mediciGn de atributos de érboles y productos 115 Medicién precisa de crecimiento diametral En parcelas experimentales normalmente medidas en forma periédica cada cierto mimero de afios, se utiliza la cinta o huincha diamétrica. Sin embargo, crecimientos en periodos mucho més cortos, de horas, dias y hasta meses, no se pueden determinar con una cinta diamétrica, y es necesario utilizar otros instrumentos como microdendrémetros, dendrégrafos y dendroauxégrafos (Figura 2-15). Figura 2-15. Dendroauxégrafo desarrollado por MITSCHERLICH et al. segtin el principio de FRIEDRICH (1877) En la foto se puede ver: el tipo de fijaci6n, el mecanismo de relojeria abierto y los rodillos para la cuerda de Wolfram IL1.6 Medicién de diémetro de copa La medicién del diémetro de la copa de los arboles plantea una problemética diferente. Este no puede ser medido con dendrémetros épticos, porque el rango de didmetros que estos instrumentos permite medir es muy limitado. El diémetro de la copa se determina generalmente mediante la proyeccién de puntos de su contorno sobre el terreno. Hay varios instrumentos que permiten efectuar estas proyecciones; uno de ellos es el Moosehorn (GARRISON 1949). El diametro de copa también puede determinarse en fotografias aéreas (seccién VIL2.5). Una revisién de estas técnicas escapa a los propésitos de este capitulo. En HUSCH et al. (1982) se hace referencia a instrumentos para determinar la proyecci6n vertical de la copa. IL1.7 Medicién de érea basal Una de las dimensiones empleadas con mayor frecuencia para caracterizar el estado de desarrollo de un drbol es el drea basal, que se define como el 4rea de una seccién transversal del fuste a 1.30 cm de altura sobre el suelo. 31 medicién de 4rboles individuales El rea basal, por su forma irregular, nunca se mide en forma directa, sino que se deriva de la medicién del diémetro o perimetro. Siendo: didmetro, cm circunferencia, cm 8 = Area de la seccién, cm? o m* el érea basal se obtiene a partir de las expresiones: Xp =a z 8-4 (2-15) eed sis 2-16) San 4 (2-16) Normalmente, las secciones del fuste se alejan de la forma circular. Algunas presentan diferencias despreciables para los efectos practicos; otras, en cambio, tienen grandes irregularidades, que en general se acentian al aproximarse al suelo y al aumentar la edad. El célculo de la secci6n como si fuera circular a partir del perimetro sesgard siempre positivamente los diémetros, debido a que, para un perimetro dado, el cfirculo es la figura geométrica de mayor 4rea posible. 11.8 Medicién de la forma Muchos érboles, especialmente las coniferas, se caracterizan por un fuste central definido; a este tipo de fuste se le llama excurrente. Las latifoliadas, en cambio, presentan sdlo en su parte inferior hasta el comienzo de la copa un fuste definido, pero esta caracteristica se pierde debido a la gran ramificaci6n. A esta forma se le denomina delisquescente. Todos los arboles tienen una forma fustal tipica, que varia de especie en especie, pero también depgnde del sitio y de la densidad del rodal. No se puede medir la forma de un Arbol o una troza como se hace con el didmetro o la altura, sino que sélo se pueden establecer pardmetros o indices que la representen. El esfuerzo por obtener expresiones de forma que sean independientes de didmetro y altura ha fracasado (HUSCH et al. 1982). Justamente la captacién de la forma se ha hecho realidad a través de la medicién de didmetros a distintas alturas, y son expresiones como factores de forma, cuocientes 32 medicin de atributos de drboles y productos QANANA reno Melo Picea Lowe pee otos = 145 aos ~— ‘115 fos 9 anos thon afos 95 anos Figura 2-16. Formas promedio segin GUTTENBERG de forma, series de ahusamiento y tablas o funciones de ahusamiento las que se utilizan para definirla. tras denominaciones son factores y cuocientes mérficos, y series, tablas y funciones de conicidad. Estos tiltimos también son denominados modelos fustales, porque representan el perfil de los fustes. 1.1.8.1 Cuocientes de forma y series de ahusamiento Un cuociente de forma se define como la raz6n entre un diémetro superior del fuste y un diémetro de referencia, que normalmente es el didmetro a la altura de pecho. Algunos cuocientes de forma son los siguientes: SCHIFFEL (1899) ky = OS (2-17) JONSON (1910 (2-18) GIRARD (1939) (2-19) GIERUSZINSKI (1959) (2-20) medici6n de arboles ZIMMERLE (1950) (2-21) POLLANSCHUTZ (1961) (2-22) Donde 4,; = didmetro en la mitad del fuste, cm doses) = didmetro a la mitad, entre 1.3 m y la altura total del 4rbol, cm 4,13 = diémetro sin corteza, a 17.3 pies (equivalente al final de una troza de 16 pies + tocén, cm) d,, = diémetro a tres décimos de la altura desde el suelo, cm d, = didmetro a5 metros de altura, cm Lanecesidad de describirla variaci6n del didmetro alo largo del fuste dio lugar a diversos. métodos para expresar el ahusamiento o conicidad. Estos se llaman series de ahusamiento y se basan en la divisién relativa o absoluta del fuste. HOHENADL (1936) define la serie de ahusamiento real o verdadera basandose en cinco secciones, para cada una de las cuales calcula el correspondiente cuociente de forma real dado por simples relaciones, refiriéndolas todas al didmetro central de la primera seccién a un décimo de la altura o a nueve décimos desde la punta del 4rbol, d,- 120 06 por 74s 0546 0231 Figura 2-17. Divisi6n del fuste segin HOHENADL a fos (2-23) do, fuctos kaso thoy = i hog = (2-24) Una alternativa a esta serie real es la llamada serie de ahusamiento falsa o artificial constituida por cuocientes de forma cuyo didmetro de referencia es el didmetro a la altura de pecho. El fuste es dividido en secciones absolutas de igual o distinto largo y los cuocientes se calculan dividiendo el diametro central de la seccién por el diémetro a la altura de pecho. 4 kat (225) Donde d, = diémetroa la altura j desde la base, cm d= diémetro ala altura de pecho, cm k, = cuociente de forma falso a la altura j desde la base ‘Como se sefialé anteriormente, la forma real de cada fuste se manifiesta en los diversos didmetros y en su disminucién con la altura creciente (Figura 2-18). Para comparar varios fustes, resulta conveniente expresar los didmetros en valores relativos. La comparacién de fustes diferentes con secciones de igual largo relativo se simplifica, debido a que el ntimero de secciones, sin importar el largo del fuste, es igual. A continuacién se presentan los resultados de la medicién de cinco secciones de igual oS Figura 2-18. Series de ahusamiento falsas 0 artificiales para diferentes especies por clases de altura medici6n de arboles individuales largo absoluto y relativo para una picea (Cuadros 2-3 y 2-4, respectivamente). La diferencia entre series de ahusamiento con igual largo absoluto e igual largo relativo Cuadro 2-3. Secciones de igual largo absoluto (2 m) ) Picea L=20m d= 25em Largo en m_ 10° «13-30 5070-90 «1013.0 15,0 17,0 190 Ahusamionto 202 10099 #65 aT sas b) Picea L=l0m 4 =iéem Largoenm 10°30 «507090 Abusamiento 101 9076577 es fundamental. Dos fustes de igual forma pero de dimensiones absolutas diferentes entregan series relativas de ahusamiento iguales, ya que todos los didmetros se miden ala misma distancia relativa y estén referidos a un diémetro que siempre estar a la misma altura relativa. Por el contrario, con igual forma fustal, pero dimensiones absolutas diferentes, las series de ahusamiento también serén distintas. Los cuocientes de forma estarén en este caso referidos a un didmetro que estaré siempre a una altura absoluta igual, es decir, que segtin la dimension del fuste se encontraré en mayor o menor grado alejado de una seccién dada. Del Cuadro2-4 siguiente se desprende que ambos érboles tienen la misma forma geométrica. Las series de ahusamiento falsas tienen el inconveniente de no ser comparables y la Cuadro 2-4. Secciones de igual largo relativo (0.2 L) @) Picea L=20m = 2hem Largo en m 2 6 wb W WB Ahusamiento 100.0 89,6 75,0 563° 27,1 end b) Picea L=10m doy Ilem Largo en m 1 3 5 7 9 Ahusamiento 1000 89,6 75,0 56,3 27,1 end luctos ‘gran ventaja practica es estar referidas al didmetro ala altura del pecho. Para obtener el diémetro a 0.1 de la altura, se necesita conocer previamente la altura del fuste. La medicién mds simple de d influye para que en la préctica, generalmente, se trabaje con los factores de forma falsos, a pesar de que con ello se oculta la funcionalidad de la forma fustal. Para algunas especies, se han construido series de ahusamiento falsas con secciones de 2 a 4 m, separadas por clase de altura (ALTHERR 1963; HAUSSER y BOLSINGER 1956; MITSCHERLICH 1939; ZIMMERLE 1947). La separacién es necesaria, ya que fustes de distinto largo tienen un nimero desigual de secciones. En el Cuadro 2-5 se muestra un ejemplo de serie de conicidad 0 de ahusamiento. Mas adelante se mostraré cémo HOHENADL pudo eliminar la desventaja del factor de ahusamiento verdadero, estableciendo una relacin entre el didmetro a la altura del pecho y el didmetro a un décimo de la altura. La medicién por secciones de numerosos fustes y el célculo y desarrollo de series de ahusamiento promedio, establecieron !as leyes de la forma fustal y comprobaron el parentesco con diversos modelos fustales tebricos y cuerpos de rotacién (ALTHERR 1953, 1954, 1963; DITTMAR 1956, 1958; HENGST 1959; KRENN y PRODAN 1944; MITSCHERLICH 1939, 1942; PRODAN 1944, 1951; TIREN 1929; ZIMMERLE 1937, 1942). De esta forma se han podido probar objetivamente diversos procedimientos practicos y te6ricos para la determinacién del volumen fustal. Cuadro 2-5. Series de ahusamiento para pino Oreg6n por clase de altura y didmetro (BOLSINGER 1956) (Case de aura: 30m Porcentaje ‘ature el ddmetro a a altar de pecho 2025 sno OSS | S4O OMS CASISO «SOS 1 103.0 103,1 1032 103.3 1034 «03S «103.6 3 93,6 930 924 18 910 90.2 a8 5 879 815 368 85,7 war 33.9 825 1 836 83.0 921 10 92 a8 m2 9 coy 8 mI 162 58 m0 26 n Ba 4S m4 22 08 oa ao B no 100 1 61s 60 46 a3 5 662 6 an 27 09 595 582 n aa 397 se stl 558 S41 528 v 554 53.7 528, sui 498 an 469 2 a4 462 48 442 429 aus 40.2 23 401 3a8 318 361 382 38 32.6 Fa 30.2 290 281 210 261 25,3 244 n 193 183 116 169 164 159 152 2 68 65 6 ST 5S 53 52 DE MILDE (1971) desarrollé otro tipo de series de ahusamiento para especies tropicales, cuya finalidad era permitir estimaciones de diémetro de secciones del fuste de diferentes lar- gos y que debian ser asignadas a diferentes categorias de calidad. 37 medici6n de Arboles individuales Medidos los diémetros a intervalos regulares, se calcula el cuociente entre un didmetro dado y el que lo antecede. Se obtiene asi para cada arbol una serie de cuocientes: k=, 1d, ky =d, 1d, ky =ds/d, =d,/d,, Estos cuocientes son tabulados por especie y clase diamétrica, obteniéndose los promedios correspondientes. La serie de ahusamiento se obtiene al multiplicar en sucesién los cuocientes promediados. Sy = hi Sy = hy 8, 5 Sy = hy Sy 5 Sy = hy Sy (2-26) Graficando estas series sobre las alturas de medicién se obtiene una curva de ahusamiento. Este procedimiento puede modificarse y ser més consistente al emplear alturas relativas. 1.1.8.2 Factores de forma Surge la siguiente interrogante: {Es posible expresar una serie de ahusamiento con un solo nimero, de modo que éste represente la forma y con ello el volumen fustal? El volumen del fuste se calcula con cinco secciones de largo ¢ con la formula de HOHENADL: v= als “© (dj, +g, +35 +do, +de5) (227) Factorizando por d3, se obtiene: d, dos) (dor) , (doo) x aE. gt efi 4{ 3] 4| S05] 4[ Sor (2) 7 Reemplazando ¢= 02h x veal 2, h-02 (1+ ky + kas + key + kis) (2-29) luctos Laexpresion 5 doy -h = Way (2-30) corresponde al volumen de un cilindro de diémetro dg, y largo h, Wo, Por lo tanto de la expresién (2-29) se deduce que 02 (1+ kas + kis + kay + keg) =Fon (2-31) fo, €8 un factor por el cual se multiplica el volumen del cilindro para obtener el volumen efectivo del fuste. HOHENADL denomina a la expresién anterior factor de forma real 0 verdadero. Eais-h- fos (232) EI factor de forma es, en consecuencia, un factor de reduccién del volumen del cilindro al volumen real del arbol. De aqui resulta evidente que fo, es dependiente de cada serie de ahusamiento y que debe ser visto como un indicador de la forma fustal. Al igual que en el caso de los cuocientes de forma, segiin PRESSLER y KUNZE (1873), si el diémetro del cilindro de referencia se mide una altura relativa, el factor de forma se denomina real o verdadero; si se mide a una altura absoluta, el factor de reduccién se llama falso o artifi- cial. Los factores de forma verdaderos eran recomendados ya hacia fines del siglo XVIII y luego también por SMALIAN (1837) en los inicios del siglo XIX. En contraposicién al factor de forma fustal verdadero, el factor de forma falso se obtiene con la siguiente formula: (2-33) (2-34) 39 medici6n de Arboles individuales En este caso, el diémetro a la altura del pecho es el didmetro del cilindro de referencia; f 3 es el factor de reduccién correspondiente para llegar del volumen del cilindro al volumen real (Figura 2-19). Figura 249. Relacién entre d y do, En general, se puede definir el factor de forma con la siguiente formula: f,= y (2-35) aS Ww, veW, f= Fd} hes) (2-36) El indice j indica la altura en el fuste a la cual se mide el diametro del cilindro de referencia. Por ejemplo: G13; F, "fis factor de forma falso o artificial (237) j=01h; fi =for factor de forma verdadero o real (2-38) j=0; factor de forma absoluto propuesto por RINIKER (1873) (2-39) La pregunta en torno ala relacién del factor de forma y la forma fustal es una de las mas interesantes de la mensura forestal. Este tema ha sido tratado tanto por la via matematica formal como por la estadistica (BEHRE 1923; BELYEA 1932; DITTMAR 1958; GIERUSZINSKI 1959; JONSON 1928; KRENN y PRODAN 1944; PRODAN 1944; SCHIFFEL 1902; SIMONY 1904). 40 medicin de atributos de drboles y productos m1. 1 El factor de forma verdadero El factor de forma, en especial el real o verdadero, no es s6lo un factor de reduccién, sino también una expresién para la forma del arbol. Para una visualizacién de esto se plantea el siguiente ejemplo. El Cuadro 2-6 muestra que, en el segundo caso, los cuocientes de forma son mayores que en el primero; por lo tanto también la reduccién de los diémetros relativos es menor. El factor de forma fustal verdadero confirma lo anterior, al ser mayor en el segundo caso. Cuadro 2-6. Dos fustes de d,, = 50 my h = 30 mde diferente forma » he on 03 os 07 09 didmeno: 50 420 35.0 25.2 103 k 1,000 0840 0,700 osia 0,205 ) didmetro: 30 45.0 40.0 319) 15.0 Tox k 1,000 0.901 0.801 0638 0.300 0.590 Numerosos estudios han concluido que también los cuocientes de forma estan relacionados estadisticamente entre si. Como ejemplo se tomaré el cuociente de forma: ko. = dos es (2-40) el cual se denomina cuociente de forma verdadero a media altura. Las investigaciones han demostrado que entre f, y kos existe una relaci6n estadistica lineal, que se expresa a través de la siguiente f6rmula de aplicacién general: Foy = 0894 ky, 0.126 (2-41) Esta expresién representa un valor medio del rodal para todas las especies. La relaciones muy estrecha (coeficiente de correlaci6n (r = 0.974) (KRENN y PRODAN 1944; PRODAN 1944). ROMAN (1988) determiné sin embargo que esta relacién desarrollada para Pinus radiata en Bolivia subestimaba sistemdticamente al factor de forma del rbol, el cual fluctué entre 0.39 y 0.55. 41 medicién de Arboles individuales Existen también relaciones estadisticas entre cada cuociente de forma real y kos ¥ fo, (Figuras 2-20 y 2-21). Estas relaciones son ampliamente coincidentes para todas las especies (PRODAN 1944), y se encuentran representadas en los Cuadros 2-7 y 2-8. Esto apunta a una interesante ley en la estructura de formas fustales (Figura 2-22). Con los Cuadros 2-7 y 2-8, y la ayuda de k,,, se puede determinar la forma fustal con una gran aproximacién. El factor de forma verdadero es un indicador adecuado de la respectiva forma fustal. Cuadro 2-7. Tabla para la determinacién de las relaciones entre los factores de forma f., y kos Tas segin Formula Fas gin formula Kea 241242 241 2422s 0650 (OaSS eT OATS 0750 Oss Oss (SSG ‘660 “04 a5 ‘383 760 353 53 ‘565 0 as 433 “0 m0 360 560 st eo a2 490 8 780 s7 568 383 60 oo 98 506 790 580 516 592 700 500 506 su ‘800 89 so or 0 508 sit 522 a10 598 591 an 720 318 S21 sa 820 or 599 20 730 327 529 339 830 as 07 630 740 536 537 800 os os os Cuadro 2-8, Tabla para la determinacién de la serie de ahusamiento con k,, = 1.0 en KRENN y PRODAN (1944) fas ke Kes Kes Kes (0.490 0.820 0.689) 0512 0202 95 29 5 313 203 500 700 sie 205 505 106 315 207 510 m 516 209 sis nt 519 mu 520 ns saz ms 525 ns 526 26 530 26 530 219 535 19 337 225 540 15 on Bi 4s 1 358 239 550 156 S68 27 sss 182 372 237 560 16t 382 266 565 73 51 203 310 600 29 sts 10 205 380 ei 290 585 620 295 390 68 300 595 68 308 600 658 308 60s 666 3 medicin de atributos de drboles y productos La funcién (2-41) se obtuvo de valores medios de rodal y es valida aproximadamente para todas las especies que tienen un fuste continuo (KRENN y PRODAN 1944) (forma teks kas kerk fas 1 Haya Sas) 249 oss 02 acto ree (Watnch) nts alae ore 2 Hiya Totnes) aa @ la Sr Pea (ueu eo a om of Foes (Wat) ma os ia as 23 Hay (Teton) aa 18 a Po (Langetebuc) ia 0 30583 Posey ma se 3S Ft (Lichen nea ae Se 4 Haya (Totoos). 22 Soi sss Foo angen 80 a) Ps (Lchcmten) ae oom) 5 Haye (Todos) tos ain sa Fa (Langeeibac) 323 Sloe Su. Fes (Wott) as so ie Sas 6 Haya CToamons 162 Sli sa Fee (Walch ae So 3 Sal Pees (Lien) a2 som SST 1 Haye Tako) 2a a me i Pio (Lange) a9 saa S00 Poway ma ain or 8 Hays Todo) aa sie S0r Fi Langetintuchy so sa? 9 Haya Todos) tae Misa ase 10 Haya (Sean) Bs wo Cuadro 2-10. Resultados del ajuste entre ko, y fo, Segdn ALTHERR (1953) Picea ke = + 0,550 ks = 01060 koe = = o.206 om + 0,023 Pino Oregon Kos 0.598 kes + 0,432 07 = 0911 key — 0.127 kes = 0500 ke — 0,120 = 0171479 Kee + 0.006632 Larix japonés Kos = 0.765) Kes + 0,319 Kor = 0835 kee — 0.063 kine = 0.496 kes — 113 01 = 0.77197 Ken — 0.033107 medici6n de arboles individuales Cuadro 2-11. Ecuaci6n para ko, ¥ fo, para picea segtin PRODAN (1965) Cuadro 2-I1a. y para abeto segiin ALTHERR (1963) Picea Ky2 = 0,739 + 0,2733 kos kus = 0479 + 0.5433 kee Kae = 0,222 + 0,800, ky = 0,119 + 1,036 0,194 + 1,000 k, 0,175 — 0,17667 2 Kus = 0,544 — 1,35333 ko + waoostt fas = 03334 — 0.21867 ky. + 0,667 kis Abeto kas = 0,56398 + 0,560 k ky, = -0,275158 + 1,132. k, ~0,284332 + 0,714 kos 0,0792 + 0,8342 kos a) Formas de cuerpos geométricos Cilindro, Ci Cono, C Neiloide, N Paraboloide, Pa Soportante uniformemente resistente, TIREN (1929), T Soportante uniformemente resistente, YLINEN (1952), ¥ b) Formas reales de fuste, PRODAN (1944) Pino Haya Forma kor kos kes kos fas Cilio 1,000 1,000 1,000 1,000 1,000 1,000 ono 718 356 333 ML 407 Paraboloide 882 45 Si 333 555 Neiloide 686 414 192 037 336 ‘Yiinen 901 750 516 210 537 Tiren 887 Bl 529 289 337 Pino Bll 685, 562 244 500 Haya 826 Co 428 236 46 medicin de atributos de drboles y productos —l oe oF or a8 Ke Figura 2-20. Relacién entre el cuociente de forma verdadero k, y las seriesde ahusa- miento koa, Koz koe: koas Koay ka, en picea (PRODAN 1965) Kas os a7 0 0g Figura 2-21. Relacién entre f,, y kos en picea (PRODAN 1965) F 9 = 0.3333-0.21867 - ky, + 0.6667 k2,) medicién de Arboles individuales Figura 2-22. Formas geométricas tedricas que representan la forma fustal (véase Cuadro 2-11a) Cuadro 2-12, Series de ahusamiento (k,, = 1,0) calculadas segtin el modelo para ko, ¥ fo, ker eo Kea kes ke Ker kes Kes fas 0903 0.805 0,702 0,600 0,503 040630196 906806 gS S08 NL 34st 44s 6 = to 37st 7s SSI az. 30 ASI gos m6 TB gto 528 aS S120. no mS 316288 on alg 398 Ss mae 730 SSA 33h m4 att SS 3620646 sis m8 S580 39 TAT] 917 m2 OSS 56, 320 a5 KOSS 5D 36 00a 319 ash 750s SKS ee ae 210 TS gS TOT Fre) ae) m2 STB GTB: TG HE 6a oS TSR gS SRL BL er ee) 5h T6G gt 5868 383220483 92600 asl 7068S SOL BL ce ee 288A TS 88586 360 2500 m9 usT TBS OLSON 363226508 900892700 OT 56 st SOT Cuadro 2-13. Comparacién de la forma de dis 8) dy, = 50 ems fy 20,5505 h luctos de acuerdo con series de ahusamiento reales 30m D) day = 50 em; fy 920,500; h= 30 m Dimetro a la altura de... m Didmetro a la altura de .. m nw 3 9 mo nw 3 9 18 2 ot 1 500 44,6 378 «282 123 1 50,0 420 35,0 25,7 10,2 2 500 441 37,7 R734 2 500 424 341 55S 3 500 443 380 283 130 3 500 423 345 52 4 500 446 37,728,313.) 4 500 420 345 25,7113 5 500 435 37,7 285138 5 500 414 345 (267 2 6 500 447 378 281 126 6 500 419 347 255 1S 7 500 436 381 90,0 2 7 500 413 347 268 10,7 B 50,0 448 39.6 26,6 9.9 8 500 43,2 35,0 24087 9 500 446 37,7 28,0 12.8 9 500 42,7 345 248 112 Cuadro 2-14. Factores de forma de KUNZE (didmetro de referencia 1/20 de la altura (MULLER 1899) Z Edad, aftos medido -Alturafustal 2140 4160-6180 81100101120 121140 ime h au Factor de forma de la madera de fuste Pino 0754 0419 0.421026 0433056062 O5S—O75h 0.410416 0428 0.443040 0.455 035--055h 0397030804298 en Picea 0517 0,518 0,524 052305100523 0503 «0512 OS22OS16 = 0.508053 0478 0.492511 0,508 = 0,500 0.502 0446 = 046104970485 0.460 = Hays 075 0460 0,458 0,482 04920519 O55S—0,75h 04580600478 0497) 0,50) (0,490 035—055h 0.444 0447) 0459046108004 01S—035h «0,376 0,400. - _ = medici6n de arboles individuales Para arboles aislados se calculé la ecuacién: F y= 0.777 - ky, - 0.038 (2-42) Independiente de esto, GIERUSZINSKI (1959), a partir de su formula de cubicacién del fuste: v= 6-(0.23 go, +058 gos +0198,) y (2-43) reemplazando para la secci6n apical g, x £-(023 gq, +058 25 dj, ¢- (023 + 058k,;) (2-44) derivé la siguiente expresién: F,= 058 kj, +023 (2-45) Esta formula es interesante ya que, a diferencia de las ecuaciones (2-41) y (2-42) que fueron obtenidas por ajuste estadistico, fue derivada a partir de formulas empiricas de cubicacién. En el Cuadro 2-7 se entregan los valores de f ,, obtenidos de las ecuaciones (2-41), (2-42) y (2- 45). Naturalmente, cada especie muestra una desviacién sistemdtica, que sin embargo no es grande (Cuadro 2-13). Entretanto, ALTHERR (1953, 1963), al igual que KRENN y PRODAN (1944), dedujo series de ahusamiento medias para las especies picea, pseudotsuga, larix, pinus y abies, con material de la Estaci6n Experimental Forestal de Baden Wiirttemberg. DITTMAR (1958), con material del norte de Alemania, confeccioné cuadros similares para las especies picea (Montes Harz), pinus (Alemania Nororiental) y fagus (Alemania Central y Nororiental). El Cuadro 2-12 entrega los valores para picea, que se obtuvieron de 1146 Arboles. Probablemente, luego de una evaluacién exhaustiva de todo el material disponible a la fecha, resultarfa una dependencia de la relacién con el sitio, la clase diamétrica y la posicién dentro del rodal, como lo comprobaron parcialmente DITTMAR, KONIG y SMALIAN por su subdivisi6n en clases de arboles (Cuadro 2-14). Las relaciones de kj, pueden considerarse como lineales en un segmento medio; sin embargo, para todo su rango de dispersién, una parabola de segundo grado permite un ajuste mejor (PRODAN 1944). También el material de picea se ajusté a una parabola, El Cuadro 2-13 muestra para dy, = 50cm; f9,~055 y fo,~050 la dimensién fustal bajo diferentes series de ahusamiento. Las tablas de conicidad con las series de ahusamiento verdaderas tienen la ventaja de ser validas para todas las formas fustales. Esto da la posibilidad de construir tablas de clases y voliimenes para cualquier forma fustal deseada. medicién de atributos de drboles y productos 0300 (0700 Figura 2-23. Comparacién entre la forma fustal te6rica y la real. Relaci6n entre las series k y fo: (PRODAN 1944) 0 685 —0 Bikey 125Kiy 896k, —0126 0400 0500 0600-0700 0.800 0.900 Figura 2-24. Comparacién entre la forma fustal te6rica y la real. Relacién entre fy, y A, (PRODAN 1944) 49 medici de arboles individuales 11.1.8.2.2 El factor de forma falso 0 a icial Ya se ha mencionado que los factores de forma falsos no son directamente comparables. Igualmente, los factores de forma falsos no permiten una representacién directa de la forma geométrica del fuste, porque debido a su referencia al d , contienen un elemento distorsionante. BELYEA (1932) estudié la relaci6n entre diversos cuocientes de forma y el factor de forma falso (Figura 2-25). 5% 4 8 6 x So a a ae Figura 2-25. Relacién entre las series de ahusamiento Cn x = dy, /d Y =Porcentajes del diémetro ‘or Esta relacién se puede deducir a partir de la f6rmula para el volumen de secciones de igual largo absoluto. Como ejemplo se tiene un fuste de 40 m de largo que fue medido por secciones de 2m. El volumen queda dado por £22 (4; +d? +42 +442 +43) (2-46) Multiplicando toda la expresién por aS i> medicin de atributos de drboles y productos Alaa a 2 gt 2 wa 2 (Sg +-+4t) ean El paréntesis incluye la suma de los cuadrados de los cuocientes de ahusamiento falsos. El volumen del cilindro de referencia es: x Wyageek (2-48) El factor de forma f ,, en este caso esta dado por: (1-0) -@)) a y si €= largo de la seccién, (2-50) donde kaon = (2-51) Intentos mas antiguos para deducir la forma fustal y el factor de forma falso con el conocimiento de pocos cuocientes de forma pertenecen a KUNZE (1891) y SCHIFFEL (1899). Partiendo de la relacién: dys OS Sky (2-52) kin = m= como cuociente de forma falso a media altura desde la base y de (2-53) 51 medici6n de Arboles individuales ‘como el cuociente de forma falso a 1/4 de la altura desde la base y de day d (2-54) ky como el cuociente de forma falso a 3/4 de la altura desde la base, SCHIFFEL plante6 la siguiente f6rmula para el célculo del factor de forma falso: 5,y= 088-k, -015 + 238 (2-55) koh La formula de KUNZE es: f ,5=0903-k, - O15 au (2-56) SIMONY (1901) dedujo la ecuacién general para el factor de forma: Ff y= atbk, + ck} (257) SCHIFFEL plante6 ademés las siguientes férmulas para el célculo de ky. y kis 041 hye = O61 ks #0414 7 (2-58) 2 kya = 0865 k, -0.14- 020. (259) ky-h La aplicacién de los factores de forma verdaderos tiene la ventaja que desaparece el largo, simplificdndose las relaciones. 11.1.8.2.3 Relacién entre el factor de forma falso y el verdadero En contraposicién al factor de forma falso, el factor de forma verdadero o real es una caracterizacién de la forma geométrica del fuste. Sin embargo, tiene el defecto de requerir un didmetro de referencia que se encuentra a una distancia variable desde la base y por lo tanto dificil de medir. El factor de forma falso, por su parte, se refiere al d , el cual se puede medir 52 mediciGn de atributos de les y productos facil y cémodamente tanto en madera volteada como en Arboles en pie, pero caracteriza sélo muy burdamente la forma fustal. Como demostracién de lo anterior se compararon dos fustes con distinta forma. Uno tiene forma cénica y el otro es un paraboloide. Mientras el fuste cénico se caracteriza por un factor de forma real de 0.407 y el paraboidal por un factor real de 0.555, ambos fustes presentan el mismo factor de forma falso: f , = 0.407 (Cuadro 2-15). Cuadro 2-15. Arboles con distinta forma fustal pero con igual factor de forma falso henm a du 4, das dy dy fa fia encm 130 15400-1507 83 5,0 470407 0,407 30,0 467 40,0 35,3 298 23,1 13,3 0,555 0,407 El factor de forma falso puede descomponerse en dos factores, uno es el factor de forma verdadero f ,,, es decir, la caracteristica de la forma geométrica del fuste; el otro muestra la influencia distorsionante (HOHENADL 1936; KLAUPRECHT 1846). El volumen del mismo fuste se puede calcular por la férmula: = aah fo, (2-60) 4 6 vata he Sy (261) 4 Por lo tanto: x x 4 ae he fo, a? hefys (2-62) De aqui resulta: (2-63) 53 medicién de arboles individuales (2-64) es el coeficiente de forma basal de HOHENADL. KLAUPRECHT (1846) establece el método para el célculo de factores de forma falsos y verdaderos a partir del coeficiente de forma basal de HOHENADL. Segiin esto, el factor de forma verdadero se multiplica por la relacién de ambas secciones circulares 0) y 811 para obtener el factor de forma artificial: (2-65) El coeficiente de forma basal de HOHENADL es una medida de la influencia de las raices tabulares, aletones o costillas basales de las raices. Para una altura del fuste de 13 m: dy =d y ky A mayor altura del 4rbol, mayor es la distancia entre d y dy,; d esta siempre a la misma altura absoluta, pero con una altura total creciente, se acerca progresivamente a la zona de los contrafuertes o parte basal del tronco. Con el factor de forma verdadero, la relacién con la forma fustal es clara y univoca. El cuociente k,, no s6lo depende de la especie y el sitio, sino también de la dimensién absoluta del arbol (diémetro y altura). Ello es un factor distorsionante en las relaciones entre el factor de forma falso y la forma fustal. Por la divisi6n del factor de forma falso, en la préctica se pueden definir f., y ky separadamente. Asi, f,, se deja calcular con mayor facilidad. 111.83 Cuerpos de rotacién Las relaciones funcionales de las formas fustales eran tan evidentes que tempranamente hubo preocupacién por explicar su causa, es decir, por determinar los diversos factores que la controlan. Los intentos parten de hipétesis generales, tanto de tipo fisiolégico como mecénico. Estos estudios bésicos que parten de hipétesis deductivas no han tenido resultados completamente satisfactorios. Los modelos calculados no captan suficientemente bien la base medicién de atributos de érboles y productos y la parte alta del rbol. Se ve que las fuerzas y factores que actian en la naturaleza atin no se explican satisfactoriamente como para presentar soluciones l6gicas. Las hip6tesis deductivas ofrecen formulas muy complicadas para la cubicacién préctica. Unicamente la relacién general, establecida estadisticamente entre los diferentes cuocientes de forma y los factores de forma, muestra resultados utilizables (PRODAN 1944). Las instituciones experimentales forestales y los cientificos han reunido y evaluado durante decenios un material estadistico muy rico. Mientras esto no existfa, desde los inicios de la mensura forestal, se trat6 insistentemente de aproximar las partes del fuste a cuerpos de rotacién simples. La utilidad de estos intentos fue considerable, ya que permitieron establecer formulas bésicas de cubicacién y validar las reglas de cubicacién. Eltratamiento de las f6rmulas utilizadas, que ocupaba una parte importante de los libros. de mensura forestal antiguos, esté en parte obsoleto, ya que ahora se tiene a disposicién mucho material referido a la forma real de los fustes. En as Figuras 2-22, 2-23 y 2-24 se representan los valores de cuerpos bésicos en relacién con la forma fustal real. Los cuerpos de rotacién més simples que se acercan a cada parte del fuste son: el cilindro, el paraboloide, el cono y el neiloide. Elcilindro se define como el cuerpo de rotacién cuyo manto es paralelo al eje de rotacién (Figura 2-26). Cono | E=E> Kes Kes Kas Kar Key fas 000 on? oss Dam oar Paraboloide |—.}-.:—| Ta Ma Mas ar Ken fas (od ae aS os? OSs hag Ray Kas ‘oa Koy Ko fas ast ads ost a0 ake Figura 2-26. Cuerpos tebricos de rotacién 55 medici6n de Arboles individuales Sea: y= radio d=2y= diémetro Y= constante El paraboloide apolénico es un cuerpo de rotacién en el cual el érea de la seccién transversal crece en forma proporcional a la distancia de la ciispide. Asumiendo la cispide del paraboloide en el origen del sistema coordenado, se desprende de lo dicho que: (2-66) donde p es el factor de proporcién y x es la distancia desde la cispide. De la férmula se deduce: ny ape (2-67) Por lo tanto, el paraboloide apolénico se genera por una parabola en rotacién. Elcono es un cuerpo de rotacién cuyo radio crece en forma lineal, es decir, proporcional ala distancia x ala cispide. Expresado en forma analitica: y= px nya pixt= px? (2-68) Elneiloide es un cuerpo de rotacién cuya drea de la seccién transversal esté dada por la formula de la parabola semictibica: ny =px* (2-69) Estos cuatro cuerpos simples de rotacién se describen con la siguiente formula general: (2-70) Px" donde p, =% p (2-71) 56 Entonces, para: el cilindro g=constante =0 el paraboloide apolénico§—g = p,x r=l el.cono 8=P, r=2 el neiloide g=px* r=3 Luego, la parte inferior del fuste tendrfa una forma cercana a un neiloide, la parte central seria parecida a un cilindro o un paraboloide y la parte superior tendria una forma similar al cono (Figura 2-26) 11.1.8.4 Formulas de cubicaci6n Laestereometria ha deducido formulas tanto para los voltimenes de conoides completos ‘como para conoides truncados. El volumen puede calcularse de las siguientes formas: A partir del didmetro basal (d,) y del largo ¢, en cuerpos completos (no truncados). - _ Apartir del didmetro medido a media altura y del largo del cuerpo. = Apartir de varios diémetros y largos (en este caso, las frmulas tienen validez para varios cuerpos). - A partir de los diémetros basal y superior (d, y d,) y también de otros diémetros adecuadamente escogidos, y del largo. Las formulas basicas para el célculo del volumen del cuerpo completo a partir del érea dela base g, son: cilindro vege paraboloide apolénico val/2g,-6 cono val/3g,-6 neiloide val/4g,-€ 57 medicién de arboles individuales Estas formulas pueden deducirse fécilmente a partir de lo siguiente: Como y? = px’, entonces x y? = p,x” (2-72) Pix r+l é YB (2-73) Reemplazando los valores por: se obtienen las formulas basicas anteriores (BRUCE y SCHUMACHER 1935). Las f6rmulas volumétricas que utilizan el didmetro medio (diémetro en la mitad del largo) y el largo, son muy importantes. Definiendo el 4rea de la seccién media como: AIA ayy” = Bip (2-74) se obtiene para el: Error % cilindro & = Bin 0 (2-75) paraboloide g, = 2g. v= 0 By 0 (2-76) cono ten VEO Tan 333% am neiloide Be = 88. V=l Bin 100.0% (2-78) medicin de atributos de érboles y productos Las formulas demuestran que el cilindro y el paraboloide apolénico son correctamente estimados por la f6rmula del 4rea de la seccién medi v= Bint (2-79) Contrariamente, las partes fustales que presentan forma de cono o neiloide pueden producir subestimaciones considerables. La formula del 4rea de la seccién media ya era conocida en Francia y Alemania en los siglos XVI y XVIII Se la llama también férmula de HUBER, por un inspector de salinas bavaro. Para aplicaciones précticas se propuso la férmula llamada de reas terminales o de Smalian (SMALIAN 1837). (2-80) Esta formula cubica correctamente el paraboloide y el cilindro pero sobreestima el cono y el neiloide. Las formulas correctas para conoides truncados son: paraboloide truncado: _® dp +d? ae ean cono truncado: vs ny (a tdd+d 4° 3°" (2-82) neiloide truncado: , (ex2 +Vazd? ‘) 4 (2-83) 59 medicién de 4rboles individuales HOSSFELD (1812), SMALIAN (1837), RIECKE (1840), BREYMANN (1868) y en especial SIMONY (1904) desarrollaron la teorfa de la cubicacién de cuerpos de rotacién te6ricos para fines forestales. SIMONY establecié un gran mimero de ecuaciones para cuerpos de rotacion te6ricos, con sus correspondientes factores de forma. Ademés, logré unir algunas férmulas empiricas de cubicacién de fustes completos de SCHIFFEL con cuerpos de rotacién teéricos. Sibien estos cuerpos analiticos no se ajustan bien al fuste completo, las formulas derivadas de ellos son de gran utilidad para determinar voliimenes de secciones fustales cortas y para el método de cubicacién por secciones. Debido a que en la investigacién forestal las cubicaciones precisas tienen una gran significaci6n, se presentan algunas férmulas deducidas de varias secciones, que se refieren a conoides truncados y se aplican principalmente en secciones fustales. Algunas de estas formulas se deducen de la aplicacién repetida de las f6rmulas de dreas terminales o medias sobre el desarrollo de las curvas fustales (integracién practica). La exactitud de estas formulas depende de la cantidad de secciones. (Otras formulas suponen una forma dada, generalmente parabilica, de la forma fustal. De esta manera se logra una exactitud mayor con menos secciones. La forma del cuarto 0 quinto inferior se capta habitualmente con gran exactitud considerando tres a cuatro secciones, incluso cuando esta parte tiene una forma fuertemente decreciente por efecto de las costillas basales. Cuadro 2-16. Datos de la secci6n inferior de 0.2 - ¢ 1: d=34em, h=20m 2: d=60cm, h=30m 3:d =68cm, h=40m ‘Didmetro en em para 28 30.2 328 49 aut 367 308 340 3u7 339 309 339 a 309 medicién de atributos de drboles y productos Cuadro 2-17. Datos de la seccién inferior de 0.2 -# (ver también Figuras 2-27 y 2-28) Datos de la seccién inferior de 0.2 h 1h = 20m; ayy Stem b= 40m 2) h = 30m; diy = 6Dem 1 ~ 60m 3) h= 40m; dy = Bem f= 80m Resultados de las formulas de cubicaci6n Fuste Formula Nr Ne2 N°3 by + y(n) ¥ (mm) p ¥ (em) he 0,3672, 100,0 15468 100,0 24715, 100,0 0328 898 13792892 21503820 0,3812, 158,3 2,4098 155.8 4,0350 163.3 0,4555 124,0 ‘18945, 122,5, 3,0926 125,1 o4ias 1126, azz 2778 = 12s ose 93.7 Tae 915. 22713 (92k 03513987 14480 (93,6 230709383 0,347, 94,7 11,6606, 944 2,3314 94,3 03503958 14599946 23397 OT 03529961 14700 «950, 236339546 0,3685, 100,4 1,5434 99.8 2.4811 100.4 03526 (960 14703 (95,1 2352938 03526960 14705 «951 2357294 03605 982 15003 920 24344 98S a 6 ¢ a dy Aya) dy Figura 2-27. Forma del quinto inferior del fuste de abeto segiin ALTHERR (1960) (ver también Cuadros 2-16 y 2-17) 61 medicién de 4rboles individuales Figura 2-28. Didmetros a distintas secciones (correspondientes a los Cuadros 2-16 y 2-17) 11.1.8.4.1 Cubicaci6n de secciones o trozas En las formulas que siguen significan seguin la Figura 2-28a: ‘ = largo de la seccién fustal & = rea de la seccién transversal del extremo més grueso 8, rea de la seccién transversal del extremo mas delgado Bus = rea de la seccién a 1/3 del largo desde el extremo més grueso Bos=8in = rea dela seccién a medio largo Boas = rea de la seccién a 1/20 del largo desde el extremo més grueso ete. - Formula de éreas transversales conocidas como formula de SMALIAN (SMALIAN 1804, © antes) igual a un paraboloide truncado. (8, + 8.) Nin (2-84) - Férmula del 4rea media 0 central mas conocida como formula de HUBER (KASTNER 1785, o antes; KRUNITZ 1781; HUBER 1828). veh an (286) 62 medicién de atributos de érboles y productos - Aplicacién doble de la férmula de Areas terminales ve é (8 + 8. + 2812) (2-86) : om de NEWTON (introducida en la préctica de la mensura forestal por RIECKE en vet (8 + 48:2 + 8.) (287) Se originé a partir de: aby tbxtb,x? (2-88) con validez para la funcién de ahusamiento, Baby tbxtb,x? +b,x” (2-89) Cubica correctamente los cuerpos de rotacién analiticos (cilindro, paraboloide, cono y neiloide) completos y truncados. - Formula de HOSSFELD (1849) t ¥= 5 Gan + &) (2-90) derivada a partir de (2-88) Formula de aproximacién, con desarrollo apoyado en la formula de HOSSFELD t v= 4 BB + Bn) (2-91) Aplicacion cuadruple de la formula de reas terminales 0 Y= (8 + 28m + 28in + 28m + 8.) (2-92) medicién de Arboles individuales - Formula de SIMONY t v= 5 (28m ~ Bin + 2854) (2-93) deducida a partir de (2-89) - _ Aplicacién triple de formula de 4reas medias ‘ ¥=3 (Bus + 812 + 856) (2-94) - Formula deducida a partir de (2-88) t veg Beie + 28:2 + 385.6) (2-95) Para trozas basales, se logra mejorar los resultados cuando se le da una mayor ponderacién al area de la seccién a 1/6 del largo: £ Y= (2816 + Bin + Bs) (2-96) - _ Férmulas generales de cubicacién por medio de dos éreas transversales medidas a igual distancia del centro (formulas de GAUSS y SIMONY): t oy (8. + 8) ,donde a+b=1 (2-97) - Formula de GAUSS y SIMONY é => (on + fo») (2-98) donde los valores exactos de a y b dados por GAUSS y SIMONY son: a= 02113249 b =0.7886751 mediciOn de atributos de drboles y productos De aqui se puede aplicar también la frmula aproximada de GAUSS y SIMONY: 2 (Bus + Bas) (2-99) Otra f6rmula de SIMONY es: e (81 + 85) (2-100) 2 Formula de varias secciones por aplicacién repetida de la f6rmula de 4rea media, £ 76 (Boos + Bais +--+ Boss) @-101) Formula de GIERUSZINSKI (1959) deducida a partir de (2-88) v= €(0.23g,, + 058g05 + 0.19¢5) (2-102) Sig, =0, la f6rmula se reduce a: = €(023g,, + 05895) (2-103) GIERUSZINSKI deduce de esta expresién la formula (2-45) para el factor de forma fustal verdadero. Las f6rmulas descritas, en especial las (2-93), (2-94), (2-95), (2-96) y (2-97), son de gran importancia para la medicién exacta de arboles muestra en la experimentacién forestal. Los 4rboles muestra se seccionan en largos relativos o absolutos y se cubican por secciones. En general, como consecuencia de la forma basal, la aplicacién de la f6rmula del 4rea media genera un error negativo. También la aplicacién reiterada de esta formula por medio de més subdivisiones, f6rmula (2-94), conduce a un pequefio error negativo. Una subdivisi6n de las secciones en tres 0 cuatro partes es ventajosa por motivos prdcticos, cuando en vez de aplicar la formula de 4reas medias compuesta, se elige la formula (2-96). También la formula (2-100) da resultados muy buenos y se destaca por su simplicidad, en comparacién con la férmula de 4reas centrales (2-96). Los Cuadros 2-16 y 2-17 entregan los resultados de las f6rmulas anteriores sobre el 1/5 basal de un fuste de abeto segtin los datos de ALTHERR (1960) (Figura 2-28). medicién de érboles individuales 11.1.8.4.2 Férmulas del centroide (PATTERSON et al. 1993) EXTREMO MAYOR 1 MAD Fig. 2-28a. Puntos de medicién de trozas OF (1/2)or- + (1/3)8- 0 (2-103a) Donde a=(g,-8,-B-C)/¢ y B=(g,-8.(6/6)-8,(1- 6/6) /O -6-8 ‘secci6n en el punto del centroide a una distancia j desde el extremo més grueso Y= -(G 14,)'+ \" - V8) /(2(@ 14, - iN) 6=¢-y; ds=diémetro mayor; d:= didmetro menor 11.1.8.4.3 Normas de cubicacién de trozas JAS Para el intercambio comercial de trozas en Japén se desarrollé la norma JAS (Japanese Agricultural Standard) que son formulas de cubicacién muy simplificadas (PETERS et al. 1985). ‘Troza menor de 6 metros Troza de 6 metros y més ave (aS) t 2 BD v=(d+——~|—_ : - Toon! 2) 10000 (2-103b) (2-103c) Donde v= volumen dela troza, m? d= didmetro menor aproximado al par inferior, cm 6 medicion de atributos de rboles y productos £= largo en metros aproximado a los 20 cm inferiores (ejemplo: 4.36 m son 4.20 m) £'= _ largo en metros aproximado al entero (ejemplo: 4.36 m son 4 m) 111.85 Comparacién entre los cuerpos de rotacién te6ricos y la forma fustal. Expresiones matemitico-estadisticas para la forma fustal Con las series de ahusamiento reales y el factor de forma verdadero, se hizo posible representar la forma geométrica del 4rbol con buena aproximacién. Un Arbol joven, que atin no ha alcanzado una densidad de competencia o arboles que crecen aisladamente, se asemejan al cono o al neiloide. Los 4rboles que se desarrollan en competencia tienen una forma paraboidal. En general, la forma fustal media con un mismo factor de forma no disminuye tan r4pido como un paraboloide apolénico. Estas comprobaciones son importantes para verificar la aplicabilidad de las férmulas de cubicacién. Paralelamente al estudio teérico y mecénico por deduccién de la forma fustal, desde hace mucho se ha intentado también evaluarla estadisticamente y representarla en tablas 0 formulas. A continuacién se presentarén brevemente los resultados y las investigaciones que se han realizado hasta el momento. 11.1.85.1 Sistemas para la captacién y representacién de cualquier forma fustal. El sistema de SCHIFFEL (1897) Las ecuaciones (2-58) y (2-59) de SCHIFFEL permiten por medio del conocimiento de las magnitudes: hid, dy determinar adicionalmente la forma fustal en los puntos a 1/4 y 3/4 de la altura. Este sistema, basado en material observado, tiene como desventaja que se definen solamente dos puntos adicionales. En cambio, una ventaja sustancial es que se pueden representar todas las formas fustales. La serie de ahusamiento de BELYEA dor dor ad‘ d (2-104) expresada en porcentaje, se estima a partir del cuociente de forma ky, = dy, /d (Figura 2-24). Asf se da la posibilidad de definir la forma fustal para cualquier valor de kos, expresado a 7 juales medicién de Arboles indivi través de los cuocientes o las series de ahusamiento. También asi se pueden captar todas las formas fustales. 11.18.52 Sistemas para la captacién de formas fustales medias Para determinar la forma fustal media de una especie hay dos posibilidades: Construir un modelo fustal con un desarrollo caracteristico para la especie. Sil material fuente se refiere al diémetro a la altura del pecho, los modelos fustales pueden tener validez para cada una 0 todas las clases de altura y pueden ser evaluados para diversos fines practicos. Series de ahusamiento falsas por especie. En los paises de Europa central y oriental y en los EE.UU. se evaluaron datos para la construccién de series de ahusamiento promedio referidos al d (mediciones a 1 m, 3 m, etc.) por cubicacién de secciones de igual largo absoluto de 2 m (Figura 2-18). Estas series de ahusamiento estén estratificadas por clase de altura y se expresan en porcentajes referidos al d . Sobre la problemitica de estas series de ahusamiento y tablas informé MITSCHERLICH (1939). En casi todos los paises existen series de ahusamiento para la mayoria de las especies. La manipulacién practica de estas series de ahusamiento resulta comoda, y la interpolacién de alturas intermedias es facil de realizar. La aplicacion es relativamente segura, a pesar de que en la comparaci6n con la forma fustal observada pueden aparecer desviaciones mayores. 11.1.85.3 Sistemas referidos a un didmetro a igual altura relativa con la utilizacién de cuocientes de forma verdaderos La ventaja de dividir el factor de forma falso f ,, en el factor de forma verdadero f 5, (que representa la forma geométrica) y el coeficiente de forma basal k,, fue destacada por HOHENADL (1936) y KRENN en multiples ocasiones. = fu fae, ape do, Debido a que a un mismo valor de fg, se le pueden asociar distintos valores de k,,, la zona de insercién de raices presenta una variacién mayor, un cuadro menos claro. De aqui 68 medicin de atributos de drboles y productos resulta explicable la estrechez de la relacién del coeficiente de forma y del factor de forma verdadero. Igualmente, las relaciones entre los cuocientes de forma y el factor de forma verdadero son més estrechas que entre cada uno de los valores de k con ky. Persiste la relacién: (2-105) La evaluacién de series de ahusamiento de arboles individuales 0 de valor medio de rodales por especie, permiti6 como primera aproximacién la construccién de los Cuadros 2-7 y 28. De esta forma se posibilita que, conociendo el cuociente de forma verdadero, pueda construirse cualquier forma fustal y evaluarse para fines practicos. Debido a que pueden presentarse desvios unilaterales para cada especie, PRODAN (1950), ALTHERR y DITTMAR publicaron tablas por especie. Las ecuaciones para el material de ALTHERR se presentan en el Cuadro 2-10. Enel Cuadro2-12 aparece una tabla estratificada por valores de ky, para picea, construida por PRODAN. El ajuste de los valores de k, en funcién de k,, es mds simple y las curvas obtenidas pueden considerarse paralelas (Figura 2-20). yy = 0479 +05433 kos qs =0.194+1000 kos ky, = 0544 + 135333 ks + 1.28889 k2, (2-106) Los valores intermedios de kp, ky, kos ¥ ko Se obtuvieron por interpolacién lineal. Con este sistema es posible calcular los cuocientes de forma para cualquier especie. Debido al estado del conocimiento actual, el desarrollo de tablas de cuocientes de forma verdaderos por especie (se expresen en formulas 0 no) es, aparentemente, la manera mds corta y prdctica de representar las mds diversas formas fustales. medicién de 4rboles individuales De la investigacién que se ha llevado hasta aqui, se desprende que para fines précticos el Cuadro 2-8 de KRENN y PRODAN se aplica a todas las especies, no s6lo a coniferas con fuste continuo, sino que también a latifoliadas que crecen dentro de un bosque denso. 11.1.8.6 Expresién matemitica de la forma EI primer intento de representar la forma fustal media por una ecuacién estadistica es la formula de HOJER (1903). c+ C log > (2-107) Cy c= constantes d, = _eldidmetro del rbol a ¢ metros de la punta D = _eldidmetro de la base JONSON (1928) modifica la f6rmula a: (25=cte) (2-108) Donde k, = es el cuociente diémetro superior /diémetro basal £ h altura relativa expresada en porcentaje de h-1.3 altura fustal hasta el épice JONSON reemplaza las constantes C y c con los diferentes grados de cuociente de forma dentro del rango 055< ky, < 080 Lamentablemente estas férmulas tienen como desventaja que la zona de insercién de raices (dentro de la cual cae el d ) tiene una influencia distorsionante. BEHRE (1923) usa para la representaci6n de la curva fustal la ecuacin de la hipérbola: x ress (2-109) medicién de atributos de drboles y productos Donde x= altura relativa, expresada en porcentaje de la altura sobre 1.3m k= didmetro relativo ala altura x con respecto al didmetro normal a la altura del pecho OSUMI (1959) usa para la especie Cryptomaeria japonica un polimonio del tercer grado: k, =a,x+a,x? +a,x? (2-110) Donde x= altura relativa h, /h Elorigen del eje de coordenadas se ubica en el 4pice del 4rbol. El ajuste a formas fustales reales es bueno. En este sistema se desestima la representacién de las diversas formas fustales manifestadas por el cuociente de forma verdadero. La representacién polinomial tiene la ventaja de ser fécilmente integrable a través de lo cual se puede conocer en forma exacta el volumen. Algunos ensayos han demostrado que un polinomio de tercer grado no representa mejor la curva fustal de picea. Si se desea que la curva reproduzca bien los valores de los cuocientes de forma reales, se requiere una ecuacién de cuarto grado. Para la forma fustal promedio de picea con un k,, = 0.750 la funcién de ahusamiento polimonial es: k, = 0.041641 + 2.376875x — 2.709375x" + 1812500x? - 0.468750x* (2-111) Reemplazando x por 0 en la punta, se obtiene un valor de k, = 0.041641. Debido a que el fin del tallo apical de todas maneras tiene un cierto espesor, este resultado es bastante satisfactorio. Por el contrario, la aproximacién para la parte basal del fuste no es tan buena y por eso se debe tratar de representar en forma independiente. Para x=1 k, = 1.052891 Siendo que el diémetro fustal basal es mucho mayor y se ubica dentro del rango: 12 dy, > 0440 2,3088 24972 9026786 27566 30027936 2.8392 520 3,000 2.9376 5303224 3.0108 SS 3992 3,0900 59034368 3.3348 629 3.8160 asm 11.9.1 Largo 6ptimo de los fustes para su cubicaci6n Importante es decidir el gran problema préctico de cuando es ventajoso mantener el fuste en todo su largo y cudndo debe ser seccionado. La aplicacién de una férmula de cubicacién deberia dar en ambos casos el mismo resultado. Sin embargo, con la formula 75 medici6n de drboles individuales del 4rea central no da lo mismo calcular el volumen a partir de una o dos secciones. En el Cuadro 2-20 se calculé el volumen de los fustes del ejemplo anterior con la formula del 4rea central. a Sobre el largo total 24 m(V,) b. Sobre dos secciones de 12 mc/u (V,) De aqui se desprende, considerando las relaciones de forma media de los fustes, que con formas fustales cuyo valor de f ,, sea menor a 0.520, es ventajoso separar el fuste en varias secciones cortas. Con formas fustales de un valor de f ,, superior a 0.520, conviene mantener el fuste completo. 1L1.9.2 Discusién y soluci6n general El valor encontrado en fq, y el célculo volumétrico segtin la férmula del 4rea cen- tral con sélo una seccién vale para el volumen total del fuste y solamente en forma aproximada para el volumen comercial. Por la exclusi6n de la secci6n apical, baja la altura del diémetro central (didmetro a media altura), de manera que en la prdctica las relaciones se complican. Como marco para la cubicacién correcta del fuste completo con la férmula del érea central se puede considerar: 0520 1 se denominan de tipo cénico. Por lo tanto, r puede considerarse un indice de conicidad, debido a que en él se refleja la disminuci6n del diémetro en funcin de la altura relativa. Para cuerpos fustales te6ricos, el error porcentual generado por el uso de la f6rmula de drea central (error de forma porcentual) depende solamente del grado de la forma cénica y no de la dimensién del cuerpo fustal. En formas fustales reales, se puede interpretar su semejanza con el criterio de la forma cilindrica, como la cubicacién correcta de todo el fuste por medio de la férmula de rea central. Puede valer como regla que fustes con un f ., bajo 0.520 sean considerados como cénicos y sobre 0.520 como cilindricos. Para estos tiltimos, la formula de érea central permite la cubicacién correcta de todo el fuste. Para distintas especies, se pueden entregar valores medios y de rango para fo, Y kos (Cuadros 2-24 y 2-25). En la cubicacién de trozas, el error porcentual depende de la disminucién absoluta del didmetro por unidad de longitud. medicién de érboles individuales Cuadro 2-24, Valores medios de fy, y kos para dis b) CROCOLL y RATZEL, ¢) DITTMAR, d) PRODAN Valores medion Espocie Kes faa Kea fas Pea ad 0600.90 0.44067 075 (OSS Pino Oss—081 0,380.59 O73 O83 Abdo nd 0460-090 045 —0,68 076 (Ost Line a 06s—0,00 047059 O72 O83 Larix Japonds a 0,66—0,78 0480.57 om (Os4 Pino Orepin 2 0,650.76 0,47 0,55. 070 Ost Han gd (0520.79 0,400.55 06s 050 Amo’ b 042-072 0,37 —048 ose 042 Cuadro 2-25. Valores segin ZACHAROW en ANUTSCHIN (1960) ‘Didmeros como porcenajes del diametro a 0.1 H Tipode ‘en auras eltivas del tbol smaders oo 01 02 03 «0 =—OS OG OB O90 Abeta —«21BS,T._—«i100=«S ZZ 75O0—6SP—SSS ADS 6A BRO Encina 1694 100 922 836 766 672 556 409 263 120 0 Fresno 1623 100 913 835 Tl OB 0 464 300 128 0 Pino 109 100 916 44 783 TLE AS 554 43,3 2500 Pea Sitchensis 169.9 100 925 85S 19,7 126 632 SL6 M7 110 0 Aamo M479 100936 «B74 BB TSA GES SKS KS BLO Picea 1659 100 95.0 992 837 762 669 S64 423 283 0 Ejemplo: intas especies, segtin a) ALTHERR, Un cono truncado de largo £ puede ser cubicado exactamente por la formula de NEWTON: t v= 5 (8, +482 +8,) Sise expresa la disminuci6n media del diémetro por unidad de longitud (conicidad) como o: d,- t d, a se pueden expresar los didmetros d, y d,, y las correspondientes éreas como: (2-121) (2-122) medicin de atributos de érboles y productos “t x ae d,=dy,-"—", g.== (4n-25") (2-123) (2-124) Para £= 6 m, @ =2cm/m=002; = 30 cm=0.3 m, el error alcanza a: m4 = 133% Ladisminucién 0: se denomina conicidad, y habitualmente se expresa en cm/m 6 mm/m. Un fuste es cilindrico cuando la disminucién por metro lineal es menor a 1 cm, y c6nico, cuando la disminucién es mayor a1 cm/m. La conicidad de la mitad inferior de un fuste se expresa por el cuociente: (2-125) Una desventaja de la férmula anterior es que el didmetro d_esté muy influido por la conicidad basal y por lo tanto no entrega una impresién correcta de la conicidad promedio. En troncos volteados la conicidad por metro lineal se calcula habitualmente con el didmetro medido a 1 metro sobre el extremo més grueso y el diémetro del extremo menor. La disminucién absoluta en cm/m se puede calcular también para cada segmento. En la Figura 2-29 se evalian las curvas de conicidad para picea, suponiendo que: 1. kys = 0.650 d,, =50 om 2 0.750 dy, =50 cm 3. kas = 0.650 do, =50 cm 4 as = 0.750 dy, =50 cm 81 medicién de arboles individuales Figura 2-29. Curvas de ahusamiento (Y = cm/m).de picea en funci6n de la altura relativa en el fuste (= x) Figura 2-30. Curvas de conicidad en picea para las clases de altura 18, 24, 30 y 36, segiin BOLSINGER La Figura 2-30 muestra las curvas de conicidad de formas medias depicea para diferentes, clases de altura. Las series de ahusamiento falsas proporcionan una visin de la conicidad por especie (Figura 2-18). El grado de esbeltez. En el estudio del crecimiento forestal se usa como medida de la conicidad el llamado grado o coeficiente de esbeltez, es decir: Esta medida de conicidad es algo burda, ya que la forma del extremo superior se aleja de la inferior por la influencia de la copa. 82 medicin de atributos de drboles y productos 1.1.9.4 Largos permitidos para la aplicaci6n de la f6érmula de rea central En la préctica, se usan secciones de entre 5 y 20m. Para errores medios, véase Cuadro 2-22. Los ejemplos de los Cuadros 2-17 2-21 son evidencia que también la cubicacién por secciones de largo absoluto, en especial en el extremo inferior del 4rbol, puede estar afectada por un error Se desprende de lo anterior la necesidad de cubicar con secciones de 1 a2 metros cuando se trata de fines cientificos (andlisis de tallo). El procedimiento habitual y esquematico de seccionar todo el fuste es superfluo y engorroso. Bastaria con subdividir la parte inferior del fuste hasta 5 a 6 m de altura. La cubicaci6n en cinco secciones de igual largo relativo esté afectada por un error sistemético negativo. Este error se debe principalmente a la cubicacién de la seccién basal por medio de la formula de érea central. DITTMAR (1956) propuso, para fines de investigacién en la medicién de fustes volteados, dividir cada secci6n de HOHENADL en tres adicionales, es decir, en un total de 15 segmentos. Pero esta proposicién parece ser demasiado complicada, puesto que se puede lograr la misma exactitud dividiendo en tres solamente la primera seccin y manteniendo intactas las cuatro restantes (total siete secciones). Sin embargo, aplicando esquematicamente la formula de rea central en la secci6n inferior subdividida en tres, se origina un error volumétrico de 4a 5%. Por esto es necesario cubicar la seccién basal con una formula compuesta (ecuaciones 2-96 6 2-100). El error sistematico en la seccién inferior se puede eliminar también por formulas estadisticas en funcién del coeficiente de forma basal de HOHENADL, PRODAN (1951). Cuadro 2-26. Tabla para la correccién porcentual P, de los voltimenes calculados con cinco secciones segtin f6rmula (2-127) 4) De acuerdo a un valor de ki a3 49 54 59 70 16 1300 81 La formula aproximadamente valida para todas las especies es: 7 fon 02 do, 100 = 27k, — 27 =27 (ky —1) (2-127) Mediante estas correcciones (Cuadro 2-26) el error medio cubicado por cinco secciones. no deberia exceder el #0.5%. El ahorro de trabajo frente a la medicién de secciones de 2m ode 10.20 secciones de igual largo relativo es considerable. ENGSTLER (1955) confeccioné tablas de correccién a partir de voliimenes determinados con secciones de 2m para las cubicaciones por cinco secciones en funcién del coeficiente k,,.. Investigaciones como ésta demuestran que cada especie tiene un desarrollo propio. Es asf como todas las especies, con excepcién del abies y larix europeos, se ajustan bastante a la f6rmula (2-127). El abies se encuentra por debajo de los valores de la tabla del Cuadro 2-26 y el larix por encima. El Cuadro 2-27 muestra los porcentajes de correccién segiin ENGSTLER. Cuadro 2-27. Tabla para la correccién de los voltimenes calculados con § secciones (en porcentaje del volumen) segtin ENGSTLER (1955) 1. Picea P, = 27.786 ky -27.462 2. Abies P= 23385 ky - 23.318 3. Pinus P= 27.686 ky -27.400 4. Larix europeo P, = 28.660 ky -27.911 5. Larix japonés P= 22.172 ky ~ 21.622 6. Pino Oregin P= 22991 ky - 22.578 medicién de atributos de drboles y productos En promedio, el alejamiento de la formula general (2-127) calculada en el Cuadro 2-26 no es més que un #0.5% para cada especie. En aplicaciones précticas (manejo forestal, construccién de tablas de volumen, etc.), las tablas de correcci6n son suficientes para satisfacer las mas altas exigencias. Sin embargo, en la experimentacién cientifica deberia usarse la medicion del fuste en 5 +2 secciones (con cubicacién de la seccién basal por la formula 2-96). 111.10 _Errores y fuentes de error en la medici6n de arboles volteados Cualquier medicién practica esta sujeta a errores. En mediciones cuidadosas con instrumentos precisos, los errores por lo general son muy pequefios. Aparecen con valores positivos y negativos frente a un valor “real” (compensacién de errores). Estos pequefios errores se llaman errores aleatorios, porque ni su ocurrencia, ni su signo, ni su magnitud son predecibles, sino que son producto del azar. Las instrucciones de la mensura forestal recomiendan aproximar toda fracci6n al centimetro en la medici6n del didmetro. Los “errores” que se producen por ello no son errores en la teoria de los errores, sino que son un descuento sistemético estimable, asumido por razones practicas. En contrapartida a los errores aleatorios, los errores sisteméticos se pueden predecir en su signo y, en caso dado, incluso en su magnitud. Los resultados de la teoria de los errores son en general importantes para la evaluacién de determinaciones y mediciones cuantitativas. Por el crecimiento de la magnitud del error se puede juzgar, caso a caso, si una comprobacién esta asegurada o si, por ejemplo, requiere mediciones adicionales. A continuacién se comentarén las principales fuentes de error y los producidos en la medicién de arboles volteados. Designacién de los errores: - Error absoluto del diémetro m, - Error absoluto del perimetro m, - Error absoluto del largo m, - Error absoluto del rea basal m, - Error absoluto del volumen m, - Error porcentual del didmetro myq - Error porcentual del perimetro 7.4 medicién de Arboles individuales - Error porcentual del largo mis, - Error porcentual del érea basal myx - Error porcentual del volumen m,4 1L1.10.1 Relaci6n entre el error del didmetro y el correspondiente error del érea sal E] rea basal se calcula para un circulo, segiin la férmula: zy 4 Siel didmetro esté afectado por unerror + m,, entonces el rea circular se calcula por la formula: gim, =4 (dtm)! = (@ £2d-m, +d?) (2-128) tm, = 7 (#2d-m, +m,’) (2-129) Habitualmente mj puede ser desestimado en comparacién a 2d-m,. De aqui se desprende la férmula de aproximacién: x tm, = 227 dom, (2-130) El error porcentual del diémetro es: m, d m,% = 100 (2131) El error porcentual del érea circular es: 100 = —""..100 = 2m, % (2-132) medi de tos de érboles La proporcin del error para el rea basal se puede deducir también por medio del cAlculo diferencial. Si el error es igual al incremento infinitesimal d, y se deja ZQ , m,=+% 2d-m, 4 crt 4 En el caso de la medicién del perimetro: cam-d; m.=n-m, De donde se desprende: Mog = May, que el error porcentual de! perimetro es igual al error porcentual del diémetro. Si se calcula el drea basal a partir del perimetro: z (2c -m, +m.) = z 2e-m, m, m, % =! 100 = 2m, % & (2-133) (2-134) (2-135) (2-136) (2-137) Si la medicién de diémetro esté afecta a un error m,, entonces el correspondiente error porcentual en el drea basal es el doble. Lo mismo vale para la medicién periférica, el error porcentual del 4rea basal es el doble del error porcentual de medicién del perimetro. 111.102 Propagacién de los errores del 4rea basal o diamétrica y del largo sobre el cdlculo volumétrico Si el 4rea circular est4 afectada por un error m, y el largo del fuste por un error ‘m,, entonces el error en volumen se calcula: (gm,)-(¢#m,) tm, = tg-m, +m, m,-m, (2-138) 87 medici6n de Arboles individuales El miembro m, -m, puede despreciarse frente a los demés valores. Entonces: tm, =tg-m,tl-m, (2-139) El error porcentual en volumen es: 27. 100= tm, tmyy = tm, £25 (2-140) Ls v Dela férmula se desprende que un error porcentual en el didmetro afecta doblemente el célculo del volumen en comparacién con el mismo error porcentual en el largo. Con la férmula (2-139) se puede calcular cémo se manifiestan los errores en didmetro y largo sobre el error del volumen. Los dos ejemplos en la siguiente tabla son elocuentes. Cuadro 2-28, Influencia del didmetro y de la altura en el error en volumen. Lagpenm 10 20 30 10 20 Didmetro en cm 50 50 50 30 30 my % 2 2 2 2 2 coon as 05 as 03 03 an 02 04 06 a2 as El cuadro anterior muestra que, en un fuste de 50 cm de didmetro y 20 m de largo, un error diamétrico de 0.5 cm tiene la misma influencia que un error de 0.40 m en el largo. Esté demostrado que un error de 0.5 cm en el diémetro es més frecuente que un error de 0.4 men una medicién directa de longitud. Es por esto que se debe poner mayor atencién a la medicién exacta del diémetro. En muchas mediciones de didmetro y largo, se produce la compensacién de errores. El error en volumen se determina a través de la teoria de los errores: 88 ‘medicién de atributos de érboles y productos (2-141) (2-142) 111.103 La precisién de la determinacién del 4rea basal y sus errores La determinacién del drea basal no es exclusiva para la medicién de Arboles volteados, sino que es de gran importancia para la mayoria de las estimaciones de rodal. Es por eso que ha sido tratada en numerosos trabajos de la literatura antigua y moderna (TISCHENDORF 1927; TIREN 1929; MEYER 1942; ABETZ 1960; KENNEL 1959; MATERN 1960; MULLER 1958; SOSTRZIONEK 1958). A través de los trabajos de H.A. MEYER y MATERN, se fijaron las fuentes de error y se hicieron estimables sus magnitudes. Pueden originarse errores en la determinacién de la seccién por una obtencién defectuosa del didmetro, debido a: a. Error de construccién de la forcfpula b. _Inregularidades de la superficie fustal — Contraccién del didmetro 4. Errores aleatorios al usar la forcipula @._Desviacién del érea circular f. Aproximacién prescrita del didmetro a centimetros enteros 11.1.10.3.1 Errores de construccién de la foreipula Los brazos de la forcipula deben ser paralelos. Si por el contrario se encuentran en un Angulo at, entonces el error en el diémetro m, es con gran aproximacién igual a: (2-143) medicién de Arboles individuales a ' 48 L— q— a o Figura 2-31. Error producido en la medicién del didmetro con foreipula de brazos no paralelos Cuadro 2-29. Error porcentual en érea basal segiin ngulo de desviacién de los brazos de una forcipula 3 4 5 6 7 8 9 0 a 1 2 0017 0,035, 47 35 0,052 0,070 0,087 0,105 0,123 0,141 0,150 0,176 52 70 87 = 105.143 150176 Este error sistemético siempre se manifiesta con signo negativo. Puede ser definido en forcipulas usadas, aun desconociendo el angulo @ en forma empirica, midiendo la distancia d" entre las dos puntas de los brazos y comparandola con la lectura d en el instrumento. Segiin la ilustraci6n “b” de la Figura 2-31, el largo de los brazos se define como ¢ (2-144) (2-145) medicién de atributos de érboles y productos Elerror porcentual del didmetro es entonces: (2-146) m,4 = 100tga = 100 (2-147) Por lo tanto, el errur porcentual del drea circular y el del diémetro pueden determinarse directamente. El error diamétrico es independiente del didmetro del 4rbol objeto. Por eso, deben utilizarse forcipulas en buen estado, ose debe eliminar el error sistemético por medio de una correccién. 11.10.32 Superficie fustal irregular Los troncos pueden ser medidos con o sin corteza. Las mediciones con corteza en especies con corteza lisa son més precisas que las con corteza gruesa (pinos, lérix, encinas, acacias, etc.). Elerror en mediciones con corteza es en general positivo. En troncos descortezados, puede ser positivo o negativo. No es posible efectuar mediciones de diémetro con precisi6n inferior a1 mm; el error de mediciones prolijas va de 1 5 mm y se considera como error aleatorio. Esta demostrado que los troncos descansan sobre un lado més plano. Por eso, al hacer sélo una medicién, se capta el didmetro superior. Para la estimacién de la seccién transversal, se debe utilizar el valor medio de dos mediciones perpendiculares. De esta forma, se evita el error producido por una posicién inadecuada del fuste. 11.1.10.3.3 Contraccién diamétrica La experiencia préctica y las investigaciones han demostrado que en todas las especies forestales se produce una contracci6n a lo més de m, = 1% de la madera que es almacenada. La contraccién va en promedio de 0.2 a 0.5% del érea circular. La magnitud de la contraccién depende entre otros, segtin DITTMAR (1958) y ETTER (1952), de: - _ estacién de volteo - tiempo de almacenamiento = exposicién al sol ‘Como valores maximos de contraccién, FLURY indica una cifra de hasta 4% para un tronco de picea y de fagus. 21 medici6n de arboles individuales Estas cifras pueden sobrepasarse si las condiciones son adversas. Segiin MAYER- WEGELIN (1953) y KOLLMANN (1951), los valores de contraccién para las especies de Europa Central son mucho mayores: Contraccién longitudinal 0.4% (0.1 - 0.6%) Contraccién radial 43% 23- 68%) Contraccién tangencial 8.2% (6.0 - 11.8%) Contraccién volumétrica 12.9% (85 - 18.8%) Estos valores de contraccién se obtuvieron de muestras saturadas y secadas completamente, por lo cual no son coincidentes con aquellas almacenadas al aire libre. Los didmetros de arboles en pie estan sujetos a variaciones diarias que pueden llegar a +£0.2% de la seccién circular. 1L1.10.3.4 Errores de medicién aleatorios El error producido por una localizacién incorrecta de la forcipula, dependiendo de la forma fustal, puede ser positivo o negativo; es aleatorio. Bajo el supuesto de una desviacién del punto correcto de medicién de +10 cm y una disminucién diamétrica general de 1cm/m, se - puede estimar el error en +1 mm. 11.1.10.3.5 Desviaci6n del 4rea circul: La seccién transversal se aleja en mayor o menor grado de la circunferencia. Esta desviacién se explica entre otros por: = crecimiento irregular tipico (fagus, robinia) - _ iinfluencia de contrafuertes = iinfluencia de las ramas - crecimiento excéntrico por influencia de factores externos (pendiente, condiciones de luz y copa, viento, etc.) El 4rea transversal se calcula generalmente a partir del perimetro, de un didmetro o del promedio de dos didmetros perpendiculares, con la f6rmula del érea circular. Por la desviacién que existe entre el 4rea transversal y la del circulo, se produce un error que TISCHENDORF denominé desviacién del 4rea circular o déficit de convexidad (Figura 2-32). Las investigaciones te6ricas pasadas se basaban en la aproximacién de la seccién trans- versal del Arbol a un évalo o una elipse (BRUCE y SCHUMACHER 1935). Las investigaciones actuales sefialan que para secciones regulares, el Svalo es més coincidente que la elipse. Las investigaciones tedricas de MATERN (1947) han hecho descubrimientos valiosos sobre la forma 92 medicin de atributos de drboles y productos de la secci6n transversal arbérea e introducen algunos conceptos mateméticos sobre contornos convexos. Fundamentalmente se debe diferenciar entre: - la medicién interna, con visién de la forma de la secci6n (rodelas, extremos de trozas) y - la medicién externa, sin visién de la forma de la secci6n (4rea central, d, drea de la secci6n a cualquier altura de un arbol en pie). Figura 2-32. Cortes transversales del fuste a nivel del suelo demostrativos de a) déficit de convexidad ; by ©) efecto de la edad en la irregularidad de la seccién El rea transversal, para todas las especies, en las cercanias de la base y de la copa, es més irregular que en las secciones intermedias del sector libre de ramas, donde el rea transversal se asemeja més a un 6valo. Coniferas como abies y picea en posiciones protegidas del viento, tienen una seccién transversal regular, lo cual puede representarse con gran aproximacién por un cfrculo por un 6valo compuesto por un semicirculo o un arco elptico y un arco parabélico (MULLER 1957). La irregularidad de los segmentos basales, y en general también la de otros, aumenta con la edad (Figura 2-32). ‘Como indicadores para los elementos de una secci6n transversal se utilizan: - el didmetro promedio aritmético de una serie de mediciones sobre la misma secci6n transversal; - la varianza s de los valores diamétricos; y - el coeficiente de correlacién r 0 el coeficiente de determinacién r? de dos mediciones diamétricas mutuamente perpendiculares. (El coeficiente de correlaci6n es importante, porque es muy comin que se midan dos diémetros perpendiculares.) 93 medicién de arboles individuales IL2 ESTIMACION DE ATRIBUTOS DE ARBOLES Y PRODUCTOS La estimacién del volumen del Arbol individual es un problema relevante en dendrometria e inventarios forestales. La dificultad en la determinacién directa del volumen mediante la cubicacién de secciones hace conveniente contar con expresiones mateméticas que, basadas en una muestra objetivamente seleccionada y cuidadosamente medida, permitan estimar el volumen de los arboles sobre la base de mediciones simples. Un érbol esté compuesto del sistema radicular, el tronco o fuste y las ramas y hojas que en conjunto conforman la copa. Las especies cuyo tronco se prolonga para formar un fuste principal que nose divide, como el de las coniferas, es denominado excurrente, en contraposicion. al tronco de las latifoliadas, que presentan el fuste dividido en la porcién alta denominado delicuescente (HUSCH et al. 1982). Seguin FAO (1981), tiene gran importancia definir clara y objetivamente a qué voltimenes se hace referencia, dado que existen muchos casos en que la ausencia de esta definicién ha provocado malentendidos sobre las existencias en referencia y una err6nea toma de decisiones. Las técnicas que se describen en este libro se refieren a la estimacién de voltimenes del fuste 0 tronco principal que, por lo general, representa la porcién del arbol con mayor valor comercial y, en una gran mayoria de las veces, la tinica de interés. EI manual de FAO sobre inventarios forestales citado anteriormente presenta diversas definiciones de tipos de voliimenes. Volumen bruto: Es el volumen de una parte especifica de un Arbol sin corteza y sin deducci6n por defectos; cuando se usa, el término debe calificarse por una palabra o declaracién especificando la porcién del arbol a la que se refiere. Por ejemplo, volumen bruto total del arbol. ‘Volumen neto: Volumen de una parte especifica de un arbol sin corteza, hechas las deducciones por defecto o partes no titiles; este término también se calificaré de acuerdo con la porcién del Arbol ala que se refiere. Volumen total: Volumen correspondiente al fuste principal de un Arbol; para los arboles de forma delicuescente, hasta el punto de inicio de la copa; para los Arboles de forma excurrente, hasta la punta del arbol. Volumen de ramas: Para los arboles de forma excurrente, el volumen de todas las ramas; para los arboles de forma delicuescente, el volumen por encima del punto de inicio de la copa (y algunas ramas que puedan salir més abajo). Volumen industrial: El volumen neto potencialmente titil de madera rolliza, sin deducci6n por pérdidas debidas a la utilizaci6n de tipos de corta y procesos de manufactura; es igual a la suma de los voltimenes de trozas mds otros voltimenes aprovechables. estimacién de atributos de drboles y productos Volumen de productos: Volumen neto de un érbol, considerado apropiado para trozas para chapas, trozas de aserrio, trozas para durmientes, pilotes y postes; este volumen se puede identificar también como madera pulpable, para tableros de particulas u otros usos industriales. Otros voltimenes iitiles: El volumen neto de un Arbol no es apropiado para los fines resefiados en volumen de troza, pero silo es parael caso de postes, madera para pulpa, tableros de particulas y otros usos industriales. 11.2.1 Funciones de volumen La determinacién directa del volumen se ha descrito con detallle en las secciones precedentes. En esta seccién se describirdn los métodos utilizados para estimar esta variable, basados en su relacién con otras variables del Arbol individual. En general, el contenido volumétrico-del fuste se considera funcién de las variables diémetro a la altura de pecho d, altura total o altura del fuste hasta su bifurcacion hy alguna expresi6n de la forma f. v= f(d,h,f) El término “tabla de volumen” se ha utilizado frecuentemente para referirse a un modelo matemético para predecir el volumen fustal. Esta denominaci6n proviene de los albores de la historia forestal, cuando para facilitar el uso de las ecuaciones 0 de los ajustes de tipo gréfico, se los entregaba en forma tabular. El uso de las calculadoras electr6nicas y del computador per- sonal ha desplazado fuertemente esta forma de presentacién, por lo que en adelante nos referiremos a los términos funciones 0 ecuaciones de volumen. 112.11 Funciones de volumen local o tarifas Las funciones de volumen local o tarifas relacionan el volumen del 4rbol con sélo una variable dependiente, generalmente el dimetro normal o de referencia d o transformaciones y potencias de esta misma variable. El calificativo de local se debe a que estas funciones son de aplicacién limitada al rea, para la cual es aplicable la relaci6n didmetro/altura implicita en el modelo de volumen; generalmente una cierta clase de edad y un mismo sitio. Los modelos de volumen local son simples y algunos de uso corriente se entregan a continuacién: DISSESCU-STANESCU (1956) v=b, +bd? (2-148) HOHENADL, KRENN (1944) vaby thd + bd? (2-149) KOPEZKI-GERHARDT (1899) v=b the (2-150) 95 medici6n de arboles individuales E1 modelo local de volumen que emplea como variable independiente el rea basal del 4rbol se denomina linea de volumen, debido a que esta transformacién lineariza la relacién volumen-didmetro y su diagrama de dispersion se muestra como una linea recta (Figura 2-32a). Volumen, m? 2 1] “ wa ° @* Grea basal, m* Figura 2-32a. Modelo lineal volumen-érea basal Un modelo comtinmente usado es el de BERKHOUT citado por MULLER (1915): v=bd” (2-151) que al linearizarse queda: log v=b, +b, log d (2-152) Es l6gico pensar que los modelos de volumen pasan a través del origen, dado que si las variables independientes son cero, el volumen también es nulo. Sin embargo, si no existen datos observados (como generalmente ocurre) para modelar la porcién inferior de la curva, siempre seré estadisticamente sano conservar el intercepto. Las tablas de volumen local pueden obtenerse a partir de ecuaciones de volumen con més de una variable dependiente. Esto ocurre cuando una de las variables de la ecuacién se obtiene de una muestra de 4rboles con los que se ajusta un modelo con el fin de obtener su 96 estimacién de atributos de drboles y productos prediccién parael total de arboles medidos. Frecuentemente es la altura la que se muestrea y se estima para el total de la muestra de Arboles, mediante un modelo que relaciona el didmetroy la altura. v = 0.03949 + 000002495 d’ h + 0.00005902 d? y con la funcién altura-didmetro h=35-522e0™4 por lo tanto la ecuacién local de volumen derivada de estas relaciones es: v= 0.03949 + 000002495 d? (35 - 52.2 e°™*) + 0,00005902 d? v = 0.03949 + 000087325 d? — 000130239 d? e+ 0,00005902 d? El modelo (2-151) es ampliamente utilizado en Honduras para estimar el volumen total de las especies latifoliadas (FERREIRA 1993). 112.12 Funciones de volumen general Se denominan funciones generales de volumen los modelos que estiman el volumen con dos 0 més dimensiones del Arbol, por lo general el didmetro y la altura total o comercial h y en algunos casos una expresién de la forma. Este tiltimo tipo de ecuaciones de volumen se denominan funciones de volumen de clase de forma; corrientemente se utilizan en Estados Unidos e incluyen como predictor, ademés del didmetro y altura, el cuociente de forma de Girard (HUSCH et al. 1982). Las funciones generales de volumen son de aplicacién més amplia que las locales, debido a que la relaci6n diémetro-altura esta explicita en el modelo, lo que facilita su uso para clases de edad y sitio diferentes. Muchos de los modelos de volumen general incluyen como predictores s6lo el didmetro de referencia y alguna expresi6n de la altura; las razones que apoyan este tipo de formulacién son citadas por CLUTTER et al. (1983): 1. Mediciones de didmetros en altura son dificiles de realizar. 2. Variaciones en la forma de los 4rboles: éstas tienen un impacto menor en el volumen que la variacién en altura o diémetro. 3. Para algunas especies, la forma es relativamente constante e independiente del tamafio. 7 medici6n de Arboles indi ales 4, Enalgunasespecies, la forma de los arboles esté a menudo correlacionada con el tamafio de los arboles; de modo que didmetro y altura generalmente explican gran parte de la variacién del volumen causada por la forma. La funcién de volumen general més conocida es la denominada de variables combinadas (SPURR 1952): vaby+bd°h (2-153) Este modelo, ajustado sin intercepto, se denomina de factor de forma constante, dado quela expresi6n d?h al ser multiplicada por la constante 7° /40,000, representa el volumen de un cilindro; de esta manera, en el modelo sin término constante, el coeficiente de regresién b, representaria el factor de forma falso que reduce el cilindro para transformarlo en volumen del rbol. Una funcién de volumen general ajustada para Pinus oocarpa en la Regién Central desarrollada por el Inventario Nacional de Honduras (FERREIRA 1993), es la siguiente para volumen en metros cibicos, didmetro en centimetros y altura en metros. v = —0,0063522 + 0,00002838 d? h — 0000023077 d? El Cuadro 2-30 muestra otros modelos de volumen comuinmente utilizados: Cuadro 2-30. Algunos modelos de volumen general Factor de forma constante v=b,d*h (2-154) Variables combinadas generalizadas vaby+b,d? +b,h+b,d7h (2-155) Logaritmico sin intercepto vebd?h (2-156) Logaritmico con intercepto vaby +h, bd’*h?® (2-157) Variables transformadas de HONER ved? / (by +b,h") (2-158) Clase de forma v=b, +b,d*hk (2-159) Autraliana de STOAT veh +b,d?+b,d'+bht+bsh (2-160) WENK v= g(h? /b, Vd +b,Vd) (2-161) 112.13 Funciones de volumen hasta diferentes didmetros limites Los variados objetivos del manejo forestal exigen la estimacién del volumen potencial hasta diversos didmetros limites de utilizacién (IU). Tradicionalmente, este problema se ha 98 estimacién de atributos de drboles y productos encarado a través del desarrollo de tantas funciones como didmetros limites sea preciso definir. En principio, es suficiente desarrollar estimadores de volumen para algunos de ellos, a partir de los cuales pueden determinarse otros por interpolacién. Este procedimiento es sin embargo imperfecto, ya que exige un gran esfuerzo para obtener una informacién poco flexible, que queda obsoleta ante cualquier cambio de la tecnologia. El Instituto Forestal de Chile desarrollé este tipo de funciones para Pinus radiata en 1965. Los modelos son de la forma: v, =by +b, d? hkg (2-162) donde i es el indice de utilizacién y k,, es el cuociente de forma de GIRARD. Se desarrollaron ecuaciones para los indices 10, 15, 20 y 25 cm (INFOR 19657PETERS 1979). Cuadro 2-30a. Tabla de volumen para Pino caribaea Morelet en Guatemala Ssaze see28 seers seats sees se! Desivada de la ecuacién V = 0.0684728026 + 0,900030846 5 (D2H1) de arboles: medi luales PETERS (1977), dentro de un proyecto de asistencia de la FAO al Gobierno de Guate- mala, preparé este mismo tipo de funciones de volumen para las diez especies coniferas principales del pais. Un ejemplo de estas tablas se muestra para Pinus caribaea (Cuadro 2-30a). Por otra parte, FERREIRA (1993) desarrollé la siguiente funcién para estimar el volumen hasta el indice de utilizaci6n 15 cm en Pinus oocarpa para el Inventario Nacional de Honduras: 0.03949 + 000002495 d?h + 0.00005902 d? (2-163) Ys 112.14 Funciones de volumen de raz6n Tal como se expresé en el capitulo precedente, por muchos afios el procedimiento usual para obtener funciones de volumen hasta diferentes didmetros limites era ajustar modelos independientes para cada uno de ellos. Pero al utilizar esta aproximacién aparecian tres problemas: 1) __ Las funciones para distintos indices de utilizacién pueden cruzarse, entregando estimaciones equivocadas en algunos casos (ej.: volumen hasta 10 cm menor que el volumen hasta 20 cm). 2) Hay que manipular un importante ntimero de ecuaciones de volumen si se necesitan varios indices de utilizacién. 3) __ Rigidez en el sistema de procesamiento, que estaré limitado a laestimacién de voltimenes s6lo para los indices de utilizacién en que exista funcién; la especificacién de cualquier otro indice de utilizacién requiere un nuevo ajuste. Para superar los inconvenientes planteados, se han desarrollado las denominadas funciones de volumen de razén, que permiten estimar en forma consistente el volumen hasta cualquier indice de utilizacién por medio de dos ecuaciones: a) una ecuacién de volumen para predecir el volumen total del 4rbol; y b) una de transformacién para estimar la proporcién de volumen hasta un indice de utilizacién especificado. El concepto de funciones de volumen de razén fue introducido por BURKHART (1977). Desde esa fecha, se han ido desarrollando algunas variantes que tienen interesantes perspectivas, por los excelentes resultados que ha demostrado poseer el método (CAO et al. 1980). Estas ecuaciones permiten la prediccién directa del volumen y son més simples de usar que los modelos de ahusamiento. Como los modelos se ajustan a datos minimizando la suma de cuadrados del volumen, proporcionarian estimaciones més precisas de esta variable que las funciones de ahusamiento, que son ajustadas minimizando sumas de cuadrados de los didmetros 0 didmetros al cuadrado. 100 estimacién de atributos de drboles y productos v =f(d,h) (2-164) r =f(d,.d) (2-165) Vy ever (2-166) Donde v= volumen del fuste, calculado con la funcién de volumen " proporcién del volumen hasta un didmetro limite de utilizacién = d, d= diémetroa la altura de pecho volumen hasta el indice de utilizacién j4sicamente las funciones de volumen de razén utilizan el cuociente del volumen comercial y el volumen total r , en funcién de variables predictoras del tipo d,/d y (h-£)/h. Entre los modelos estimadores de la razén aplicados hasta la fecha se encuentran: Modelos con variable dependiente que incluyen s6lo diémetros: r=1+b)(d)'/d’?) | BURKHART (1977) (2-167) r=exp (by, X") VAN DEUSEN (1981) (2-168) r=1+b,X +b,X? +b,X'+b,X*+b,X°+b,X° — CAOetal. (1980) (2-169) Modelos con variable dependiente que incluyen altura al didmetro Ifmite: r=1+b(¥/d) CAO et al. (1980) (2-170) r=exp(b, (Y/h)b?) VAN DEUSEN (1981) (2-171) r=byX +b,X7h MATINEY y SULLIVAN (1982) (2-172) En ambos casos: X=dld ¥ =(h-hi) 101 medici6n de Arboles individuales En esta tiltima funcién los autores, por transformacién matematica e imponiendo las restricciones: 1) que la altura comercial para d sea 45 pies y 2) que r=0 para d,=0, la transforman en una funcién que calcula la altura a la que se encuentra el diémetro limite. hy =h+ X (45-h) + (576/ m)(V /d?) X (a, (X 1) +4, (X?=1) + a,(X*-1) +a,h(X?-1) (2-173) La precisi6n de estimaci6n de alturas y volimenes disminuye al aumentar el diémetro limite (r se acerca a 1), situacién por lo demés similar a lo que ocurre con algunos modelos fustales (BRUCE et al. 1968). Con esta posibilidad de estimar alturas, los modelos de volumen de razén representan una alternativa interesante a los modelos fustales en los simuladores de trozado. Desde que BURKHART introdujera el método, se han ido mejorando los modelos y estimaciones. VAN DEUSEN (1978) corrige con su modelo la estimacién de valores negativos de r, cuando el cuociente d, /d es muy cercano a 1. También PARRESOL et al. (1987) aplican esta metodologia en cuatro especies, compardndola con funciones de ahusamiento y utilizando en vez del diémetro a la altura de pecho, el diémetro a 10 pies de altura, para salvar el efecto de los contrafuertes basales de la especie en la medicién diamétrica. ZEPEDA, ESTRADA y ESPARZA (1990) ajustaron las siguientes funciones para estimar alturas y voltimenes comerciales en tres especies de pino del noroeste de Chihuahua en México. Funcién estimadora de altura comercial h, =h—[h—13[(ax? + bx" + cx® + de! +x] (2-174) Funcién de raz6n estimadora de volumen comercial 1r=b, (h,/h) +b, (h, 1h)? (2-175) Donde h, = altura comercial A = altura total r=y/v ¥ = volumen total x=d/d estimacién de atributos de érboles y productos Por otra parte, ZEPEDA (1993) propone un sistema de cubicacién para Pinus patula Schl. y Cham. en Veracruz, México. La funcién de volumen total ajustada para Pinus patula es: .00007 1243 (47h)? (2-176) v Se ajustaron ademés funciones de raz6n para estimar voltimenes comerciales a distintas alturas y a distintos diémetros respectivamente. y, v(1-o89248314[(n— A, 2") (2.177) y, = v(1 [1-6 gan x]?7™) (2-178) Donde x = 0813776084 h°°"%"™"§ (d, do) Para estimar d,, se ajusté In dy, = 0.2000025 + 0921963 In d (2-179) Donde a diémetro a la altura de pecho dy, diémetro a un 10% de la altura total h ——_=altura total h, altura en el punto i d, = didmetroen el punto i y volumen total ¥, volumen hasta el punto i MARTIN y REAL (1992) desarrollaron una investigacién en Pinus radiata en Chile sobre el tema; en esta confirman la confiabilidad de los modelos de raz6n, especialmente aquellos que incluyen la altura en donde se encuentra el diémetro limite. Modelos con esta variable predictora se muestran superiores al modelo fustal de BRUCE eet al. utilizado como comparaci6n. FERREIRA (1993) presenta los siguientes modelos desarrollados por PEREZet al. (1990), con una muestra de 550 arboles de la especie Pinus oocarpa en Honduras: v = 0.000028402d*h — 0.002525 (2-180) v, =v (1~ 1.2668 (d)"" /d*") (2-181) 103 medici6n de Arboles individuales 112.15 Funciones de volumen con més de un diémetro Tanto las funciones tradicionales de volumen locales, que s6lo utilizan como variable predictora el didmetro de referencia, como las funciones generales con dy h ,sonconfrontadas por SCHMID-HAAS (1981) con funciones a las cuales agrega un diémetro extra medido en altura, obtenido en una submuestra en la parcela. Para la medicién del didmetro en altura probé diferentes instrumentos: relascopio, telerrelascopio, pentaprisma de Wheeler, dendrémetro Barr y Stroud y forcipula finlandesa. El instrumento ms eficiente para medir el segundo didmetro result6 ser la forcipula finlandesa, con la que se realiza una medicién directa del didmetro en altura. Este segundo diémetio se midié a una altura relativa de 0.3% de la altura total y a una altura absoluta de 7 m, con el objeto de probar cual era més eficiente. El didmetro a7 m probé ser mejor que el didmetro a 0.3 h. El estudio desarrollado en picea, con una muestra de 14 000 Arboles, demostré que la incorporacién del segundo diémetro mejora significativamente la estimacién de volumen, reduciendo la desviacién esténdar de las estimaciones. Esto se muestra en la Figura 2-33a. La desviacién estndar del volumen estimado con funciones sin el didmetro extra es entre 30% y 110% mayor que aquella que lo incluye. 0.08 0.06 0.04 0.02 Figura 2-33a, Disminucién del error de estimacién del volumen incorporando un dimetro superior dz 104 estimacién de atributos de drboles y productos (Otra conclusién interesante del estudio es que la estimacién de volumen mediante una funcién con dos diémetros, supera la precisién de la expresin de didmetro y altura, siempre y cuando el didmetro en altura sea medido sobre los 5 m. Esta evidencia podria significar el reemplazo de la medicién de altura por un segundo didmetro, con las consiguientes ventajas operacionales. SCHMID-HAAS concluye, ademés, que Jas funciones con didmetro extra son més independientes del sitio. En la Figura 2-33b se muestra la desviacién estandar de los errores de medicién del segundo didmetro segiin el mismo autor y para diferentes instrumentos. mm %, 20 16 2 Forcipula fniandesa___— ° eo ary Stroud ° 4 8 2 16 20 m Figura2-33b. Desviacién esténdar de los errores de medicién del segundo didmetro 11.2.1.6 Estructura volumétrica del fuste Las series de ahusamiento permiten deducir una relaci6n muy estrecha en la distribucién del volumen en diferentes segmentos del fuste (BRABAENDER 1957; EIDMANN 1956; KUNSTLE 1873; SPEIDEL 1955). Apartir dela formula de HOHENADL de las cinco secciones, la porci6n de cada segmento de 0.2 h con respecto al volumen total del fuste es: 105 medicién de arboles individuales Anélogamente, 1 2 02-h-d3, 4 02 zp Ghdas-fos Sor (2-182) (2-183) (2-184) (2-185) (2-186) En el Cuadro 2-31 se entregan para cinco valores de f , proporciones volumétricas de los cinco segmentos de igual largo y los correspondientes valores acumulados hasta el extremo superior de las secciones. Cuadro 2-31. Estructura volumétrica del fuste para distintos factores de forma verdaderos Secciones Porcentajes de volumen para fy = de Hohenadl 0,407 0,442 0,500 0,550 0,600 Volts E Vol% F Vol% =F Vol% = Vol% 1 49,1 49,1 45,3 45,3 40,0 40.0 364 «364 33,3333, Tl 29,7 788 29,3 746282682290 65,4 27,1604 MT 15,1 939 16,3 90,9 19.6 87,8 208 = 86.2 22,0824 Vv 5S 96 74 983 105 983 116 978 144 968 v as too «17 100k? 1000-22 «too 82 000 106 estimacién de atributos de drboles y productos Cuadro 2-32, Estructura volumétrica del fuste para distintas especies Picea Pino Oregin Liix ‘Abeto seeciin = 880 hr = 0.520 fr = 0,530 fa = 0510 far = 0,567 Vole E Vol E Vol% % Vol = Vol 1 364 364 385385377377 39,2392 BRST " 290 654 BESTT SA BB TS OBS M = 208862198 BH 20.0 S418. AG. V6 978108 97,7 122 97GB 7B BORE v 22 100.0 23 1000 24 1000 22 1000 1,6 100.0 "a800 ‘0.600 Figura 2-34. Estructura volumétrica del fuste segiin diferentes series de ahusamiento (BRABAENDER 1957) El Cuadro 2-32 contiene las cifras calculadas para diferentes especies y relaciones de forma promedio. De este cuadro y de los resultados de los estudios de BRABAENDER (1957) se desprende que, con la excepcién de formas fustales extremas, que son escasas, la distribuci6n porcentual del volumen para diferentes secciones fustales permanece bastante constante (Figura 2-34). 107 medici6n de Arboles individuales Figura 2-35. Distribucién del volumen en el fuste para distintos factores de forma segin KRENN-PRODAN, BRABAENDER (1957) Cuadro 2-33, Estructura volumétrica del fuste. Largo de las secciones 0.1 h roca Vole = Tra Vol = 1 220 2 177 1 397 397 3 153, 4 132 0 235 a2 5 109 ‘6 ar Mm 6 a8. 7 63 8 38 wv ro 9 9 ar 10 o v 2a 1000 04 of 02 03 04 05 06 O07 08 09 10 Figura 2-36. Estructura volumétrica del fuste segiin secciones de 0.1 de la altura total 108 de atributos de érboles y productos Para comparar sirve una tabla preparada por ANUTSCHIN (1960) (Cuadro 2-33 y Figura 2-36) sobre la distribucién porcentual del volumen fustal en diez secciones de igual largo y las Cifras resultantes para cinco secciones. La coincidencia entre las cifras dadas por ANUTSCHIN y los valores para f , = 0.500 (Figura 2-37) es sorprendente. Esta relacién consistente puede ser aprovechada para la estimaci6n volumétrica, 0 la clasificacién por calidades o valores de arboles individuales. a) az 0s | 06 |) 8 10 Figura 2-37. Estructura volumétrica del fuste de picea con un f ., = 0.500 Aproximando las cifras de los cuadros anteriores, se obtiene el siguiente Cuadro 2-34 para la distribucién del volumen en el fuste. Cuadro 2-34, Valores aproximados de volumen por seccién Altura relativa Secciones Vol % (0 —0,2) I 40 (0,2 — 0,4) a 30 0,4 — 0,6 ul 20 0,6 —0,8 Iv 10 0,8 — 1,0 v — Este cuadro puede servir para el célculo de volumen de cada clase. Ejemplo: Pino con h = 25m y do, =50cm 109 medici6n de 4rboles individuales El largo de las cinco secciones es 25:5 = 5 m. El diémetro central del primer segmento se ubica a2.5 m, y puede ser medido con una escalera o una forcipula especial. Se asume que tiene 45 cm. El contenido de la primera seccién es entonces: ri do, 02h = 0.795m* El contenido de todo el fuste oe = 199m? Las cinco secciones segiin el Cuadro 2-35 tendrfan los siguientes voltimenes aproximados: 0.795 0597 0398 0.199 0 m 0.80 0.60 0.40 020 o m SPEIDEL (1955) divideel 4rbol en pie en cuatro partes de igual volumen para la formacién de clases. En el Cuadro 2-35 se indican las alturas relativas para la distribuci6n volumétrica con fox = 0.500 (también ANUTSCHIN) y fo: = 0.550. Cuadro 2-35. Cuadro comparativo de la distribucién volumétrica segtin diferentes métodos ‘% Altura relava en ol érbot Pare Vol % 1 2 3 4 Observaciones 25 26 13 2 12 1 = Speier (1955) 30 300 28 21 30 2 = fay = 0,500 13 515 48 46 50 3 = fy = 0.550 95, % 2 7 4 = aprox. 100 = 100) 1001002100 A esta consistente estructura volumétrica le corresponde una estructura de calidades igualmente estricta. En general, el valor de las clases de madera por el aumento de las ramas a mayor altura va disminuyendo, y el precio por unidad de volumen aumenta con el diémetro, siendo siempre las secciones inferiores de mayor calidad. 10 estimacin de atributos de érboles y productos 1122 Funciones de ahusamiento La medicién de didmetros a lo largo del fuste y su expresi6n grAfica se utilizan en la determinacién del volumen de Arboles individuales. Para este efecto, los didmetros se miden mediante un muestreo destructivo, registrando sus valores con y sin corteza. La flexibilidad de la informacién proporcionada por la grdfica de ahusamiento ha motivado la generacién de ecuaciones para describir la forma y conicidad de los arboles, conocidas corrientemente como funciones de ahusamiento. En la actualidad, se prefiere denominar las ecuaciones de ahusamiento como modelos fustales o de perfil, ya que la funcién describe tanto la forma geométrica del Arbol (cono, parabola, etc.) como el ahusamiento o abombamiento, entendido como la tasa de decrecimiento del didmetro a medida que se incrementa la altura fustal (NEWBERRY 1976). Los modelos fustales son funciones que representan la variacién diamétrica a lo largo del fuste como funcién del diémetro normal d y la altura total h. Al igual que las funciones de volumen, este tipo de ecuaciones puede incluir otras variables independientes, como la raz6n de copa. Los modelos fustales constituyen una importante herramienta estadistica de uso corriente en la determinacién de voltimenes de arboles y trozas; permiten al usuario estimar tres caracteristicas basicas de los Arboles: 1. _Diémetros en cualquier punto del fuste. 2. Altura del fuste en que se encuentra un didmetro limite especificado. 3. Volumen entre dos puntos cualesquiera del fuste, o volumen hasta cualquier indice de utilizaci6n. Las caracteristicas mencionadas son parte fundamental de cualquier sistema flexible de procesamiento de datos para determinar existencias que consideren la evaluacién de productos. Por otra parte, los modelos fustales tienen aplicacién en los simuladores de crecimiento y rendimiento y en la simulacién de trozado, cuando un usuario tiene interés en conocer el surtido de productos posible de obtener de la simulacién de diferentes estrategias de manejo. Variables dependientes La variable dependiente de una funcién de ahusamiento es el diémetro a una altura dada (d, ). Siel interés del modelo estuviera centrado tinicamente en la estimaci6n de didmetros, la minimizacién de la suma de cuadrados con respecto a esta variable proporcionarfa buenas estimaciones; sin embargo, consideraciones estadisticas u otros usos del modelo justifican en muchos casos utilizar transformaciones. 1 medici6n de arboles individuales Se ha demostrado en muiltiples investigaciones (BRUCE et al. 1968; KOZAK et al. 1969; REAL y MOORE 1987) que transformaciones del tipo d,/d homogenizan la varianza en précticamente todo el rango de alturas en el fuste /h,, con excepcién de la porcién basal entre toc6n y diémetro de referencia. Por otra parte, el uso de los modelos en estimacién de volumen ha llevado a utilizar la transformacién propuesta al cuadrado d; /d*, ya que al minimizar la suma del cuadrado del diémetro, por su alta correlacién con el volumen, proporcionaria mejores estimaciones volumétricas (BRUCEet al. 1968; REAL y MOORE 1987). Este supuesto ha sido en alguna medida contradicho por CARRASCO (1986), quien realizé ajustes en latifoliadas del bosque chileno, encontrando que la transformacién no cuadrética proporcionaba mejores estimaciones volumétricas que la lineal. Variables independientes La variable dependiente es la altura a la que se encuentra un cierto didmetro en el fuste h,. Consideraciones précticas para obtener una unidad de altura comparable en arboles de dimensiones distintas, hacen recomendable utilizar una expresi6n de altura relativa de la forma 4, 1h. Una propiedad deseable en las ecuaciones de ahusamiento que se ajustan a especies de fuste excurrente es que estimen un diémetro cero cuando la altura en el fuste h, se iguale ah. Esto se ha logrado condicionando la ecuacién mediante procedimientos mateméticos (KOZAK et al. 1969), 0 por nuevas transformaciones de la variable independiente para facilitar un ajuste sin int Para lograr este objetivo, MAX y BURKHART (1976) utilizan una transformacin del tipo , /h — 1 que pone el origen de la ecuacién en la altura total y diémetro cero del Arbol. Una segunda propiedad deseable es que el modelo estime el didmetro de referencia cuando la altura en el fuste es la altura de medicién del didmetro (1.30 m). BRUCE et al. (1968) utilizaron la transformacién (h—h,)/ (h— 1.3); esta forma de variable dependiente permite el condicionamiento del modelo sin intercepto para estimar d cuando h, es 1.3, bajo la condicién de ajustar didmetros con o sin corteza en forma exclusiva. La utilizacién de d como didmetro con corteza y d, sin corteza implica la estimacién de un pardmetro que se puede interpretar como el factor de corteza, razén entre d, /d (Figura 2-37a). Desde el siglo XIX se han estudiado métodos para expresar la forma y ahusamiento de las especies arbéreas como funcién del didmetro y altura. Con el mejoramiento de las herramientas computacionales, se pas6 de métodos graficos a analiticos (GRAY 1956), desarrollandose en el curso de los tiltimos afios numerosos modelos. El primero en publicar un modelo de ahusamiento fue HOJER en 1903 (férmula 2-107) con la presentacién de una ecuacion logaritmica de amplio uso en Escandinavia. ORMEROD (1973) y BEHRE (1923, 1927) encontraron que la misma no entregaba resultados satisfactorios al ensayarla en especies americanas. 12.2.1 Modelos generales de arbol completo La forma més comtin para describir los cambios diamétricos que se presentan desde la base hasta el fin del fuste contempla el empleo de una tinica funcién. Como ejemplos de esta forma de ajuste pueden nombrarse los modelos propuestos por MATTE (1949), OSUMI (1959), KOZAK et al. (1969). Modelos de este tipo serén denominados modelos generales de arbol completo. 12 estimacin de atributos de drboles y productos Yodi Yea —« —# \ ‘—s ~ hish heh a0 3-0 \. \ 2 1 " Qe tam xh xehi/h © Yedi o— o— / / 4 = 7 za 4 al aa! % 5 Xet-hish Xe(h-hi)/(h-1.3) Figura 2-37a, Diversas expresiones utilizadas como variables independientes en modelos fustales 113 medicién de érboles individuales Entre ellos, algunos utilizados en América Latina son: el desarrollado por BRUCE et al. (1968), que ha sido ajustado para pino insigne en Chile y de amplio uso en plantaciones de la VII, VIII y IX regiones de ese pais (INFORA 1984, 1985). El modelo tiene la forma: d? 1d? =b,X"* +b,(X" - X*)d +b (X"-X')h +b (X'S — X™)hd +b (X'S — XA +b (XS — X*)h? (2-187) (hh) I (h~13) diémetro medido a la altura h, del fuste, cm didmetro a 1.30 m con corteza, cm altura total del arbol, m altura de medicién desde el suelo hasta el didmetro d,,m coeficientes de regresién Debido a que el modelo incluye altas potencias en X,, ajusta y tiene un buen comportamiento en la parte basal del fuste; por otra parte, como en él se incluyen funciones de d y h, el modelo representa una familia de curvas de ahusamiento. El modelo de KOZAK et al. (1969) fue ajustado por REID y COLLINS para la especie Pinus oocarpa en Olancho, Honduras. Tomando como muestra 270 Arboles, obtuvo el siguiente ajuste (FERREIRA 1993): 85002(h, / A) +11.43929(h, /4)*) (2-188) Otro modelo muy simple es el presentado por ORMEROD (1973), un modelo no lineal que pose la caracteristica de presentar un coeficiente que controla el ahusamiento del arbol (b,)y otro que controla su forma o perfil (b, ) d,=b,d-xX” (2-189) Esta caracteristica del modelo de ORMEROD permitié a NEWBERRY y BURKHART (1976) utilizarlo en un modelamiento de dos etapas en un estudio de la forma de Pinus taeda en Estados Unidos. THOMAS y PARRESOL (1991) describen un modelo que incluye funciones trigonométricas en su estructura; éste fue ajustado a una muestra de arboles de Pinus radiata en Chile en una investigacién de modelos de ahusamiento para un modelo de crecimiento y 4 estimacién de atributos de drboles y productos rendimiento (REAL 1993). Los resultados obtenidos con esta forma no fueron satisfactorios para la especie. d? /d? =b, (L~1) +b, sen(c-3.14159- L)+b, ctg (3.14159 L/2) (2-190) Donde Lo = Ash ¢ = 15paraconiferas y 2 para latifoliadas sen = funcién seno ctg funcién cotangente 1122.2 Modelo general segmentado La ventaja de modelar todo el fuste a través de una expresi6n tinica es que los modelos resultantes son féciles de ajustar y usar; habitualmente se integran con facilidad para transformarlos en ecuaciones de volumen, y pueden en muchos casos reordenarse para el célculo de alturas comerciales. Su desventaja es que presentan un sesgo significativo en la estimaci6n de didmetros, tanto en la base del fuste como en otras porciones del tronco (KOZAK 1988). Se ha sugerido que el uso de diferentes modelos para la parte superior e inferior del fuste puede mejorar considerablemente el sistema de prediccién. HUSCH et al. (1982) proponen que en el fuste pueden diferenciarse diferentes formas, dependiendo de la ubicacién de la seccién en el 4rbol: un neiloide en la base, un paraboloide en la seccién central y un cono en la parte superior. Los modelos polinomiales segmentados descritos por FULLER (1969) consisten en una secuencia de submodelos. En el caso de una variable independiente, se divide su dominio y se define un submodelo para cada seccién de la particién. Estos submodelos son luego unidos, con la condicién de que las funciones se conecten correctamente en los puntos de uni6n para formar un modelo polinomial segmentado. Un modelo clasico de este tipo es el investigado por MAX y BURKHART (1976) para Pinus taeda. El mejor y més usado de sus modelos une tres parébolas bajo las restricciones de continuidad, igual estimacién de didmetro, y pendientes iguales en los puntos de unién. d?/d? =b,(h, /h-1) +b, (h? /h? -1) +b, (a, —h, Sh)? “1, +b, (a, -h, 1h)? +1, (2-191) Donde si hh<=a,; 0 si hlh>a, 15 medici6n de arboles individuales Un modelo de esta forma fue ajustado por ZEPEDA (1993), para generar un sistema de cubicacién para Pinus patula Schl. y Cham. de Perote, en Veracruz, México; el modelo ajustado es de la forma: d, 1d =7.23028x, - 44.40331x? + 44.2749 [007342376 - x,]-1, +5215252 [082671059 -x,]’-1, (2-192) x, = h-hh-13 1, = 0, 007342376 - x, >=0 1, = 0, 007342376- x,<=0 1, = 0, 082671059 - x, >=0 I, = 0, 082671059 - x, <=0 La supuesta ventaja de estos modelos es la predicci6n de los diémetros en las diferentes porciones del fuste con valores de sesgo inferiores a los encontrados al trabajar con funciones simples. Sin embargo, aun cuando ellos utilizan diferentes modelos para las diferentes partes del fuste, generalmente fallan en solucionar el problema del sesgo. DEMAERSCHALK y KOZAK (1977) presentan como razones para explicar esto que: i) los modelos se han mantenido muy simples; i) los sistemas no se condicionaron adecuadamente, de forma de hacerse continuos en los puntos de unién donde los diferentes modelos se unen; iii) 0 las ecuaciones no estaban condicionadas a entregar cero didmetro en el Apice e interceptar el didmetro ala altura de pecho. 12.2.3 Modelos compatibles generales y segmentados Los modelos de ahusamiento compatibles fueron introducidos por DEMAERSCHALK (1972, 1973). La compatibilidad se refiere a que ellos, al ser integrados, entregan el mismo volumen que una ecuacién de volumen previamente ajustada a los datos. El concepto de compatibilidad es itil cuando existen funciones de volumen que seguiran en uso junto al modelo de ahusamiento por un periodo de tiempo considerable, situacién en que sera deseable no tener discrepancias entre ambos elementos de estimacién. Por otra parte, la compatibilidad de los modelos est dada para el volumen total, y no existe forma de asegurarla para la determinacién de voltimenes de secciones o trozas del fuste. Un modelo polinomial compatible es el presentado por GOULDING y MURRAY (1976), de amplio uso en plantaciones de Pinus radiata en Nueva Zelandia: d? =v/(Kh)(b, Z +b, Z? +b, Z' +b, Z* +b,Z°) (2-193) 116 estimacién de atributos de drboles y productos Donde Z= (h-h)th K= 7/40000 v = volumen total en m’, obtenido mediante una ecuacién de volumen; el resto de los términos ya ha sido definido Para que la ecuacién recién presentada sea compatible, debe ser reordenada y ajustada en la siguiente expresién: (d? Kh/ v-2Z) = b, (3Z? -2Z) + b, (4Z’ -2Z) +b, (SZ* —2Z) +b, (62° -22) (2-194) CAO et al. (1980) presentan un modelo general compatible segmentado de la forma: (d? Kh} v—-2Z) = b, (32? -22) +b, (Z-a,) , +by(Z-a,) 1, (2-195) Donde Lak si Z<=4,; 0 si Z>a, 11.2.4 Modelos de forma o exponente variable Para explicar la variacién en la forma del fuste, los trabajos recientes en ecuaciones de ahusamiento incluyen un ntimero mayor de variables o nuevas técnicas para modelos con las. dos clasicamente usadas d y h . Ejemplos de ecuaciones de esta naturaleza son las denominadas de forma o exponente variable, en los cuales el exponente de la variable que iguala la altura en el fuste con su respectivo diémetro d, / DI = X* es una funcién que varia con la altura a la que ‘se encuentra ese diémetro en el fuste y otras dimensiones del arbol (KOZAK 1988). NEWNHAM. (1990) es el autor original dela idea pero KOZAK en la publicacién previamente referida presenta diversos modelos con esta estructura. KOZAK (1988) ajusté para diversas especies de Columbia Briténica, Canada, un modelo de exponente variable: d,/DI=X* (2-196) Donde x = (i-\a(-V)) 17 medici6n de arboles individuales C= BZ? +b,In(Z +0001) +b, f(Z) + be? +b, (d/h) Z = hth DI didmetro sin corteza en el punto de inflexién, cm HI altura del punto de inflexién, m P= (HDIh En trabajos anteriores, el autor encontré que el punto de inflexién se encuentra a un 20-25% de la altura total y que se podfa estimar a través de la expresi6n: DI =a, d*' a,d (2-197) Alreemplazar DI y transformar linearizando la ecuacién original, se obtiene: In(d,) = In (ag) + a, In(d) + In(a,)d +b, In(X)Z? + by In(X) In(Z + 0.001) +, In(X) JZ) +b,In(X)e” +b,In(X)(d/h) (2-198) Este modelo fue modificado por PEREZ et al. (1991), quienes utilizaron una muestra de 590 arboles de Pinus oocarpa en Olancho, Honduras, para desarrollar el modelo: log d, =~ 0.463871 + 1.022897 log (d) + 0553862 log(X)z? — 0.67647 log(X )log (Z + 0.001) + 0.126413 log(X)d /h (2-199) Donde Z = hlh x = (1-J@)/(1- J) 1 = (h-025)/h Los autores concluyen que este modelo, més simple que el de KOZAK, entrega estimaciones de igual calidad, por lo que esta expresién mas simple puede reemplazar a la original en esta especie. Variaciones del modelo de NEWNHAM (1988) se ajustaron para Pinus radiata y su modelo nacional de simulaci6n de crecimiento y rendimiento en Chile. Una expresién con buenos resultados es la variante: 18 estimacién de tos de érboles In(d, /d) =b, In(X) + by In(X)d /h-+b, In(X)(d 1h) X +b, In(X)h/ fH) +b, In(X)(d /h) X? +b, In(X) (d/h) X? (2-200) 11225 Modelos de 4rbol individual Los modelos de érbol individual o en dos etapas son modelos en los cuales una ecuaci6n de ahusamiento se ajusta al perfil de cada rbol para, posteriormente, en una segunda etapa, construir modelos predictores de los coeficientes de esta ecuacién. En elajuste de modelos de ahusamiento de arboles individuales, la primera etapa consiste en generar una matriz. de n- p coeficientes (n =ntimero de Arboles muestra; p =parémetros de la ecuacién de ahusamiento); esto se consigue al ajustar un modelo de ahusamiento a cada uno de los arboles muestra. En la segunda etapa, con la matriz obtenida y usando las variables del 4rbol, rodal y ambiente como variables predictoras, se ajusta un sistema de ecuaciones para estimar los pardmetros del modelo fustal en cada arbol. Un sistema de ahusamiento de esta naturaleza fue probado con buenos resultados por REAL y MOORE (1987) en bosques de segundo crecimiento de pino Oregén, en el noroeste de Estados Unidos. La formulacién del sistema es la siguiente: d? 1d?2-X? =b,(X°-X*) +b? (X*-X?) +b, (X*-X?) (2-201) Donde X = (h-h M(h-13) d, = diémetro normal sin corteza Los modelos predictores de los parémetros son: b, =a, +a,h+a,Q+a, CR b, =a, +a,h+a,Q+a, CR (2-202) In(b,) =a, +a,h°™ +a,Q+a,CR Donde Q = hI(d/100) CR = raz6n de copa = largo de copa/h El modelo ajusta las diferencias entre (d,/d,)* en un drbol y la expresién [=A Mh-1 3 jesta definicién de la variable dependiente corresponde a la diferencia entre 19 medici6n de Arboles individuales las razones al cuadrado de los didmetros de un Arbol y de un cono de didmetro igual al d, y altura total del arbol. La ecuacién est doblemente condicionada a estimar cero diémetro cuando h, esiguala h,y d, cuando h, es igual a 1.30 m. De la Figura 2-37b se desprende que si el cono y el rbol tienen igual dy h y eleje horizontal Z, se define como h — h,, el diémetro del cono en cualquier punto se expresa como: 4, (eno = k-Z, donde k es una constante que depende de dy h. La raz6n del diémetro del cono a una altura dada y d es (k-Z i(k Zs = (hh) (a= 13) El cuadrado de la expresién de la derecha se utiliza en la definici6n de la variable dependiente del modelo de ahusamiento que puede ser escrito como: Y= (4, ete !4)" ~ Cd, eno 14)" Si un exponente de 1 63 se usara en la segunda parte de la ecuaci6n anterior se obtendrian las diferencias con respecto a un paraboloide o un neiloide respectivamente. diametro Zeh-hi Figura 2-37b. Funcién de ahusamiento del érbol y de un cono 120 estimacién de atributos de drboles y productos El uso de potencias de alto grado le confieren al modelo la propiedad de actuar como una ecuacién segmentada cuyo término en b, se conecta o desconecta ( X“ con valores practicamente cero) segtin las cercanias del didmetro a estimar con el diémetro d. La misma raz6n le confiere al modelo la propiedad de diferenciar el efecto de los coeficientes, ya que b, y b, controlan en general la forma del fuste del arbol, en tanto que b, actiia como un coeficiente que representa el mayor o menor grado de ahusamiento basal. Existen teorfas sobre la influencia de la copa en la forma de los Arboles; éstas expresan que gran parte de la variacién en la forma del fuste puede ser atribuida a cambios en el tamafio y distribucién de la copa viva (LARSON 1963). Existen, por lo tanto, razones para aseverar que el manejo intensivo de plantaciones con podas y raleos fuertes genera cambios en la forma de los Arboles que pueden afectar las estimaciones de diémetro y volumen obtenidas con funciones de ahusamiento tradicionales (MEAD 1990). BURKHART y WALTON (1985) trataron de incorporar sin éxito y sin disminucién del error de estimacién, la variable raz6n de copa (largo de copa / altura total) en un modelo de ahusamiento general para plantaciones de Pinus taeda. Por otra parte, REAL (1988, 1989) desarroll6 un modelo de ahusamiento de Arboles individuales para renovales de pino Oreg6n (Pseudotzuga menziessi) en el noroeste interior de Estados Unidos, en que la variable razén de copa result6 ser el mejor predictor en las ecuaciones utilizadas para estimar los coeficientes de la funci6n de ahusamiento. Este modelo fue ajustado aplantaciones de pino insigne en Chile (INFORA 1989, 1990), y sus resultados, comparados también en términos del error de estimacién, no fueron superiores, pero s{ equivalentes a otros modelos de ahusamiento corrientemente en uso en la regién de aplicacién. 11.23. Problemas estadisticos en la construccién de funciones de volumen y modelos fustales En la actualidad el procedimiento de mayor uso, si no el tinico utilizado, para la construccién de funciones de volumen y modelos fustales es el andlisis de regresién. Por lo tanto, si en los datos se encuentran caracteristicas contrarias a los supuestos de esta técnica estadistica, deberdn investigarse alternativas de estimadores para producir las funciones requeridas. A continuacién se presentan aspectos de la recoleccién de datos para constituir una muestra y algunas metodologias de anilisis. 11.2.3.1 Seleccién de la muestra Usualmente los arboles muestra para la construccién de modelos provienen de muestreos destructivos que se realizan sobre la poblacién objetivo. La distribucién geografica de los puntos © parcelas dentro de los cuales se seleccionan los arboles tipo debe basarse de preferencia en un disefio de muestreo objetivo, ya sea aleatorio o sistemético (FAO 1980), que asegure la representatividad de la muestra a utilizar. 121 medici6n de Arboles individuales Por razones logisticas o econémicas, en algunas ocasiones se prefiere concentrar la muestra en sectores de fécil acceso; al respecto es necesario considerar que individuos que crecen a orillas de camino tienen en general habitos de crecimiento diferentes a los que lo hacen dentro de la masa. Otra practica comin es obtener las mediciones en lugares en que se realizan cortas, lo que tiene el inconveniente de concentrar la muestra en rodales e individuos con ciertas caracteristicas especiales. Ambas formas de recoleccién de datos tienden a limitar severamente la representatividad de la muestra, lo que pudiera conducir a sesgar los modelos que se ajusten y a estimaciones errdneas de existencias cuando las funciones se utilizan en la practica. tra fuente de sesgo que generalmente esté presente en la etapa de selecci6n de drboles tipo es la tendencia a concentrar la muestra en los mejores individuos, desechando en algunos casos a los de inferior calidad. Al respecio, debe tenerse presente que los modelos tienen que representar a la poblacién objetivo, por lo que todos los miembros de ella, sin excepcién, deben tener la probabilidad de ser seleccionados para el ajuste. Al planificar la seleccién de los lugares geogréficos en unidades muestrales (parcelas) de superficie fija, debe cuidarse de no concentrar la muestra en unos pocos rodales, sacrificando la calidad y diversidad de los datos, que deben representar el maximo de condiciones de tipos forestales y estructuras, edades, sitios y clases de manejo de los bosques. Los datos también deben contener una amplia variabilidad en informacién ambiental susceptible de ser analizada por su influencia en la forma de los rboles (¢}.: pendiente, altitud, exposicién, etc.). Contrariamente a lo que ocurre cuando se desea seleccionar una muestra para estimar un cierto parémetro, no existe en el caso de regresiones una expresién explicita para determinar el tamafio muestral n de Arboles tipo necesarios para obtener una precisién dada. Cuanto mayor sea el nimero, més precisa ser la estimaci6n. La experiencia en la construccién de modelos fustales indica que el niimero de Arboles muestra necesario para construir un buen modelo es cercano a los 500 arboles bien distribuidos sobre la poblacién objetivo. Sin embargo, la calidad de los ajustes estar influida también por otros factores tales como la distribucién de la frecuencia diamétrica observada, la relacién altura-diémetro, la extensi6n del rea geografica en que se aplicaran los modelos y la necesidad de agrupar especies en bosques mixtos. Seguin LANLY (1974) se han construido ecuaciones de volumen para una especie o grupos de especies con incluso 100 6 menos Arboles tipo o muestra. Los modelos que se han discutido son dinémicos en el tiempo, y la nueva informacion que permita una validacién multitemporal de ellos puede ingresarse a un banco de datos y administrarse para lograr una ampliacién de la base muestral que sustente los modelos. Asi serd posible capturar la variabilidad proveniente de nuevos regimenes y técnicas de manejo, la expansién de la cobertura espacial patrimonial de una empresa forestal o de la administraci6n del Estado. Una consideracién de mucho interés corresponde a la distribucién diamétrica de los Arboles muestra. Si se acta con un muestreo objetivo y parcelas convencionales, la distribucién resultante seré representativa; esto es, proporcional a la presencia de Arboles de una cierta especie 122 estimacién de atributos de érboles y productos y diémetro en el bosque (LANLY 1974). Muestras de esta naturaleza pueden fallar en la Tepresentacién de los arboles de gran tamafio aumentando el error en las estimaciones de! modelo para este tipo de Arboles, que generalmente representan un alto porcentaje de las existencias. SCHMID-HAAS y WINZELER (1981) recomiendan seleccionar la muestra de arboles para funciones de volumen proporcionalmente al diémetro al cuadrado. Esta metodologia es simple de llevar a la préctica mediante la utilizacién de un prisma o relascopio, seleccionando los Arboles tipo con muestreo puntual horizontal, lo que naturalmente concentraré la muestra en los Arboles mas grandes. Si se conoce el érea basal del bosque, serd posible establecer a priori el factor de 4rea basal (FAB) apropiado para obtener una cuenta promedio de arboles deseada en cada punto de muestreo. Una selecciGn de érboles con esta tecnologia se aproximaré en muchos casos a la afijacién de NEYMAN (LANLY 1974). 11.2.3.2 Heterogeneidad de varianzas Uno de los supuestos del modelo de regresién es que la varianza de la variable dependiente Y sea constante para cualquier nivel de la o las variables independientes. Este supuesto es conocido como homocedasticidad u homogeneidad de la varianza. Si un conjunto de datos posee varianzas heterogéneas, las estimaciones de los parémetros del modelo de regresin obtenidos por minimos cuadrados no serfan los mejores estimadores lineales insesgados, pero de ninguna forma invalidarian el uso de esta minimizacién matematica en el ajuste. Es comtin, en relaciones que involucran variables biolégicas, encontrar varianzas heterogéneas. Esto se manifiesta al observar el grafico de dispersi6n entre dos variables, en donde la tendencia presenta una banda con dispersin mayor de los datos al avanzar hacia la derecha en el eje de las X . Al tener el modelo, se puede recurrir a la gréfica de los residuales versus las variables independientes. La heterocedasticidad se manifiesta en una dispersién del tipo embudo, tal como se muestra en la Figura 2-38. Se presentan como alternativas dos formas de corregir una situacién de heterogeneidad de varianza: a) transformar la variable dependiente; o b) ponderar las variables por el inverso de una funcién que represente la relacién entre la varianza de Y y las variables independientes X . El caso de heterocedasticidad en funciones de volumen es uno de los més estudiados en estadistica forestal. CUNIA (1962) constaté que la varianza del volumen tenia una relacién directa con el valor d7h’, factor que se utiliza frecuentemente como factor de ponderacién en ajustes de funciones de volumen. Por otra parte, GERRARD (1966) recomend6 el empleo de la siguiente funcién para relacionar la varianza del volumen con las variables independientes diametro y altura: log(var{¥}) = by + bd + bd (2-203) En el Cuadro 2-36 se presentan tres ejemplos de modelos de volumen y su forma de ajuste al utilizar dos ponderaciones distintas. 123 medici6n de Arboles individuales wey 0.020. 0010 0.010 0.020 Figura 2-38. Heterogeneidad de varianzas en anélisis de residuales, con respecto al volumen estimado, al didmetro y a la altura (FAO 1980) El uso de minimos cuadrados ponderados no asegura que el modelo transformado presente mejores cualidades predictivas que el modelo sin ponderar. Esto sucede porque en el caso original la minimizaci6n de la suma de cuadrados se realiza directamente sobre la variable de interés y no en una transformacién, como es el caso en la expresién ponderada. 124 estimacién de atributos de érboles y productos ‘Cuadro 2-36, Forma de ajuste de modelos de volumen al utilizar dos ponderaciones diferentes Modelo original Ponderaciones Modelo de regresién 1. Modelo de factor de forma constante bd7h, +E (a) d?h, Y=by donde ¥, =v, /d?h, ¥ =X, donde ¥, = v,/(d,7h,) 2. Modelo de variables combinadas v, =Dyt+bd7h, +E (a) d?h, Y, =by +b,X, v,/d?h, 1/(d?h,) donde x, Y=bX, +bXy donde ¥, = v,/ y(d,"h,) x, =1¥(474,) X,, = sqr(d?h) 3. Modelo de variables combinadas generalizado v, = by +b,d3h, (@) dh, ¥, = by +b, X, +b, Xy +h Xy tbyh, + bd 7h, + E donde ¥, =v, /d7h, la? y x, x, x. de arboles Cuadro 2-36. (continuacién) Modelo original Ponderaciones Modelo de regresién 3. Modelo de variables combinadas generalizado (continuacién) © (474) ¥, =b,X,, +b, Xq, + Xy td Xu, donde ¥, v, X,=1 (a, sarc, Xx Xy Xu (az) ( ) ‘Comoal ponderar se cambia la expresién de la variable independiente (cambio de espacio muestral), no es posible comparar los modelos con los estadisticos comunes coeficientes de determinacién, R?, y el error estandar de la estimacién, S,,, por lo que modelos con y sin ponderacién deben ser comparados sobre una base comin. FURNIVAL (1961) propone un procedimiento basado en ajustar el error mediante un factor adecuado que los hace comparables al situarlos conceptualmente en el mismo plano muestral. Esta prueba, sin embargo, es paramétrica y necesita del supuesto de normalidad de los residuales. Hoy, la forma universalmente aceptada para decidir sobre la calidad de los modelos que se adopten, corresponde a procedimientos de validacién que se discuten en detalle a continuacién. 11.24 Validacién de modelos de volumen y ahusamiento Después del desarrollo de un modelo de regresién para el que se han evaluado buenas medidas de ajuste, se procede a usarlo en predicciones o estimaciones, control de actividades, o en aprender y concluir sobre los mecanismos que generan los datos. Hay conciencia en los usuarios de modelos que antes de que éstos puedan ser utilizados, deben realizarse pruebas y controles sobre su validez y calidad de sus predicciones (SNEE 1977), para asi establecer la confianza en el modelo desarrollado. 126 estmacion de struts debe y productos Aun cuando las medidas de ajuste tales como el coeficiente de determinacién R? y el error estndar de la estimacién S,, son criterios importantes para evaluar el ajuste de una ecuacién de regresién, su uso en predicciones hace necesario ademiés utilizar criterios que permitan evaluar la calidad predictiva en todo el rango de las variables independientes. Cuando se comprueba que un modelo entrega buenas estimaciones dentro del rango observado de las variables independientes (interpolacién), generalmente existe la tentaci6n 0 necesidad de utilizarlo fuera del rango de los datos observados en su construccién (extrapolacién), raz6n por la que examinar las propiedades de extrapolacién de los modelos es también un objetivo importante del proceso de validacién. La vali i6n de modelos fustales debe considerar la capacidad predictiva para estimar: 1. Didmetros en cualquier punto del fuste. 2. Altura del fuste en la que se encuentra un diémetro limite especificado. 3. ‘Volumen entre dos puntos cualesquiera del fuste, o volumen hasta cualquier indice de utilizacién. En los parrafos siguientes se entregan consideraciones sobre tamafio muestral, estimaciones a evaluar y anélisis para corroborar el comportamiento de un modelo fustal en validaci6n. 11.2.4.1 Muestra de validaci6n Los residuos independientes de observados menos estimados, R, = (0, - E,), deben ser representativos de la poblacién a la cual se aplica el modelo. Por lo tanto, la muestra de validacién debe cubrir todas las condiciones de edades, sitios y manejos en donde operan el 0 los modelos. De aqui se derivan dos recomendaciones importantes. 1. La muestra de validacién debe ser grande, con un tamafio minimo de n > 100. 2. Los Arboles que se utilicen en la validacién deben proceder de mediciones muestrales realizadas (grupos de rboles) de manera que sea posible analizar la muestra segiin distintas variables de estado de los rodales. Asi, serd posible extraer conclusiones sobre el comportamiento de la ecuacién en una determinada condicién, por ejemplo estimacin en rodales jévenes con poda intensa. Por otra parte, al seguir la recomendacién anterior, debe cuidarse de no concentrar la muestra en unos pocos rodales, sacrificando la calidad y diversidad de los datos, que deben representar el maximo de edades, sitios y clases de manejo; como también contener una amplia variabilidad en variables ambientales. 127 medici6n de arboles individuales 11242 Evaluacién de modelos Para comparar los modelos, deben utilizarse medidas de exactitud y sesgo de las estimaciones. Tres estadisticos para medir exactitud se presentan frecuentemente enla literatura (CAO et al. 1980; MAX et al. 1985; REAL 1989): a) Rajiz cuadrada del error medio cuadratico (REMC). REMC = \3(0,-£,)' /n (2-204) b) _Elerror medio absoluto (EMA). EMA = 30,-E,|/n (2-205) ©) Desviacién esténdar de los residuos (DSR). DSR = E(R, ~ Ryep)? /n (2-206) La diferencia entre los estadisticos a) y b) es minima y seré notoria slo si se presentan en los modelos valores de residuales extremos; la expresin cuadrética es sensible a ellos. En tanto, el estadistico c) es una medida de la dispersi6n de los residuales con respecto a su media. Ante dos valores iguales de error, el modelo que estime con una menor DSR puede considerarse superior. Como medida de sesgo se utiliza la media de los residuales, denominada frecuentemente diferencia agregada. Si el modelo es insesgado, se espera que esta suma sea cercana a cero. Sin embargo, si el modelo resulta sesgado, la suma de los residuales ser diferente de cero. La expresi6n de la medida de sesgo es la siguiente: d) _Diferencia agregada (DA). DA = L(0,-E,)/n (2-207) En las cuatro formulas presentadas, O, es un valor observado, E, es un valor estimado y n esel nimero total de observaciones. En el andlisis de modelos fustales conviene utilizar las expresiones tanto en unidades de medicién como porcentuales, para permitir una evaluacién exhaustiva de las estimaciones del modelo en las diferentes porciones del fuste. Enel estadistico usado para la deteccién del sesgo, los signos negativos estan asociados con sobreestimaciones, en tanto que los valores positivos de la DA indican subestimacién. 128 estimacién de atributos de drboles y productos Las medidas de error y sesgo deben ser aplicadas a todos los arboles muestra, tanto para el total del fuste como para porciones de él. En el caso de las estimaciones de diémetro a lo largo del fuste y altura en la que se encuentra un didmetro especificado, se recomienda la division del fuste en secciones de igual longitud, para comprobar las caracteristicas y «performance» del modelo en las diversas porciones del fuste de donde provendran los surtidos de productos posibles de obtener. Es recomendable una amplia desagregacién de esta informacién para el anélisis, por lo que el uso de 5 a 10 secciones de igual longitud corresponde a tamafios de trozas adecuados. 1.2.4.3 Examen de las capacidades predictivas Los estadisticos descritos deben aplicarse a la evaluacién de la capacidad predictiva de los modelos. Concordante con el uso de los modelos fustales, su capacidad predictiva debe evaluarse en la estimacién de didmetros en diferentes porciones del fuste d,, estimacién de la altura a la que se encuentra un diémetro especificado h, y estimacién de vohimenes. Estimaciones diamétricas: se deben generar residuales para comparar las estimaciones de didmetros en cada punto de medicién en el fuste. Los residuales generados pueden ser clasificados por clases de didmetro a la altura del pecho d , altura total h y seccién o porcentaje de medicién con respecto a la altura total h, /h. Estimaciones de altura para un diémetro especificado: en este caso se deben generar estimaciones de h, para cada uno de los diémetros d, , determinados en los rboles muestra. Al igual que en el caso anterior, los estadisticos que miden sesgo y calidad de prediccién deben examinarse clasificando los residuos segiin clases de d, h yh, /h. Estimaciones volumétricas: en el caso de estimaciones volumétricas deben evaluarse: i) la estimacién de voltimenes hasta diferentes diémetros Ifmites (uso del modelo como funcién de volumen); e ii) la estimacién de productos con un simulador de trozado. 1.2.4.4 Estimacién de volumen hasta distintos indices de utilizacién En este caso, deben generarse para los rboles muestra los voltimenes reales hasta diferentes indices de utilizacién (IU). Se sugiere por lo menos considerar los IU 0,5, 10, 15,20 y 25cm. Para realizar estas determinaciones deben interpolarse las ediciones diamétricas en ios arboles muestra. El efecto de la interpolacién en estos tipos de voliimenes agregados no deberia ser importante y, en todo caso, la magnitud de su error es despreciable con respecto a los posibles sesgos y falta de operatividad que se generaria al especificar la medicién de todos los IU en terreno. Generados los voltimenes hasta los diferentes IU, éstos deben compararse con los valores estimados por la funcién; los residuos de cada IU deben examinarse clasificados por clases de dyh 129 medicién de arboles i ividuales 1.2.45 Estimacién de volumen de productos Alrealizar este andlisis debe definirse, en primer término, el surtido de productos rollizos a obtener y un esquema de trozado (prioridades en la obtencién de productos). Para cada 4rbol muestra deberé generarse por interpolacién el volumen de productos, en tanto que con el simulador de trozado se debe aplicar el esquema definido utilizando el modelo fustal. El anélisis, en este caso, debe realizarse a nivel de unidad muestral (conglomerado de Arboles) y los residuos examinarse por clases de diémetro cuadratico medio, altura dominante y volumen medio. Los valores generados deben ser graficados con respecto a las variables de rodal descritas y también con respecto a otras ambientales que pueden tener influencia en el comportamiento del modelo (pendiente, elevacién, etc.). 112.46 Pruebas de consistencia de los modelos Estas revisiones del modelo estén destinadas a descubrir posibles comportamientos erréticos en las estimaciones. Especial importancia tiene, en esta etapa, el andlisis gréfico y la realizaci6n de estimaciones fuera de los rangos de los datos con los que se estimaron sus coeficientes. Pueden tomarse los siguientes cursos de accién. i) Capacidad de extrapolacién. Deben generarse pares de d y h que abarquen un amplio rango, extrapolando la muestra de ajuste fuera de su rango, de manera de cubrir valores méximos y minimos que puedan alcanzarse en la poblacién en que se aplica el modelo. Para estos valores, deberé generarse la linea de ahusamiento y graficarla para tener una imagen visual del comportamiento del modelo. ii) Estudio de la secuencia diamétrica. Para todos los drboles muestra deben calcularse con el modelo los didmetros en distancias muy cortas (¢j.: cada 20 cm). La funcién de didmetros ha de ser monot6nica decreciente desde la base a la punta; de esta misma manera puede observarse la estimacién de alturas h i , que debe presentar una funcién creciente desde la base a la punta del fuste. iii) Estudio adicional sobre volumen. Se recomienda comparar las estimaciones volumétricas del modelo de ahusamiento con estimaciones proporcionadas por una ecuacién o tabla de volumen que haya sido construida con una muestra muy amplia y de la que se tengan evidencias de buen comportamiento. iv) Curvas isovolumen. Se crean mapas de curvas de igual volumen y se observa su comportamiento en forma grafica. Estos mapas deben crearse graficando lineas de igual volumen generadas por distintos pares de d y h. Un comportamiento irregular de las lineas con quiebres o depresiones, indica que hay problemas en el modelo. De esta manera podré probarse también la capacidad de extrapolacién del volumen. 130 estimacin de atributos de érboles y productos v) _ Baisqueda de estimaciones negativas. Deben analizarse exhaustivamente los modelos en su estimacién dentro y fuera del rango de los valores observados buscando estimaciones negativas en d,, h, y v- Una forma interesante de aplicar los criterios de validacién presentados es la publicada por CAOet a. (1980). Los autores aplican para comparar modelos de estimacién de volumen los estadisticos b), c) y d) a diferentes modelos. En un paso posterior, asignan un valor “ranking” a cada una de las ecuaciones comparadas resultante de sumar tres valores (uno por cada estadistico) asignados a cada modelo. En todos los casos, el modelo que presenta un estadistico con menor valor tiene el valor 1;y el valor se incrementa hasta un maximo que corresponde al niimero total de modelos comparados; finalmente, se considera mejor el modelo con menor valor total. 1.2.4.7 Inferencia estadistica Los antecedentes de la literatura sobre validacién de modelos, en general no recomiendan_ la realizacién de inferencia estadistica al realizar una validaci6n; la raz6n invocada es que las pruebas adecuadas son paramétricas, requiriendo supuestos como el de normalidad de los residuos y aleatoriedad e independencia estadistica de los datos bajo andlisis (SNEE 1977; REYNOLDS 1984; MAX et al. 1985; CZAPLEWSKI et al. 1989). Por otra parte, si el supuesto de normalidad se cumple al expresar el error en unidades de medicién, la expresién porcentual de los residuos no sigue una normal y viceversa (REYNOLDS 1984). Tradicionalmente, se han usado dos pruebas de hipétesis cuando se desea examinar si una nueva técnica de prediccién es igual o puede sustituir a una ya existente: la Prueba t para observaciones pareadas (OSTLE 1973) y el Test de Freese (FREESE 1960). 11.25 Reglas madereras Es comin en la préctica forestal entregar las existencias de la materia prima madera (fustes completos o trozas) en unidades del producto final a obtener; las ecuaciones o formulas que entregan la cuantia de producto para el caso de la madera con destino aserrable se denominan reglas madereras. En el caso de trozas destinadas a aserradero, la cuantia de producto se comercializa y mide generalmente en pies madereros (0 pies tablares); en Chile se utiliza la unidad denominada pulgadas madereras, unidad equivalente a 10 pies madereros. Las estadisticas de produccién emplean con frecuencia el metro cibico como unidad. Un m equivale a 42.37 pulgadas madereras 0 423.7 pies madereros, pies cuadrados o pies tablares (Seccién 14.4). El rendimiento en volumen aserrado de madera rolliza se estima tradicionalmente empleando las reglas madereras. Estas corresponden a representaciones graficas de la relacién 131 medici6n de arboles individuales entre dimensiones caracteristicas de las trozas y el volumen de producto aserrado que rendiria una troza bajo una serie de supuestos 0 experiencias précticas. Algunas reglas madereras de uso corriente en la préctica forestal se describen a continuacién. 1125.1 Reglas madereras basadas en diagramas. Regla Scribner Se basan en el dibujo a escala, sobre secciones circulares que representan la cara correspondiente al diémetro menor de una troza, de las piezas de madera aserrada que pueden obtenerse durante el proceso de aserrio. El estudio de aprovechamiento potencial se repite en tuna serie de circulos de diémetro creciente para obtener los rendimientos teéricos de trozas con diferentes didmetros menores. Los supuestos utilizados para simular los rendimientos teéricos pueden ser establecidos por los usuarios de la informacién en cuanto a pérdidas por tapas y cantoneras, contraccién y ancho de corte. Una regla de esta naturaleza esté atin en uso en los Estados Unidos y se denomina Regla Scribner. Los siguientes supuestos se utilizaron en su construccién: - Circularidad de la cara menor y rectitud de la troza. - Nose aprovechan piezas de largo menor a la longitud de la troza. = Elespesor de las piezas es 1”. = Elancho de corte de 1/4”. = Ellargo de las trozas es de 16 pies. Los voltimenes aserrables obtenidos en la serie de didmetros bajo estos supuestos fueron ajustados posteriormente a una funcién. Asi se originé la regla SCRIBNER DECIMAL-C, que corresponde a la siguiente expresién: V =079D’-2D-4 (2-208) V = pies madereros Donde D = diémetro menor, pulgadas El volumen de trozas de otras longitudes se obtiene proporcionalmente al nuevo largo (Len pies). =LN6V (2-209) 132 estimacién de atributos de drboles y productos Otras reglas de menor importancia han sido derivadas mediante similares procedimientos. 1125.2 Reglas madereras basadas en férmulas matematicas a) —_Regla Doyle Representada por una funcién muy simple =O-0t at (1-0.25) (2-210) El factor de ajuste (1-0.25) se explica por una supuesta pérdida por ancho de corte y contracci6n que alcanza un 25%. La reducci6n impuesta al didmetro de las trozas ( D -4) vendria a compensar las pérdidas de tapas y cantoneras. Se ha comprobado que esta regla subestima para didmetros pequefios y sobreestima para diémetros grandes. Las estimaciones son ajustadas en general cuando el didmetro de las trozas fluctia entre 26 y 36 pulgadas. b) _Regla internacional Se basa en la reduccién en volumen que experimenta el cilindro correspondiente al didmetro menor de una troza ( D); la longitud unitaria asumida por las trozas es de 4 pies. Otros supuestos: = Troza circular y recta. = Conicidad de 0.5 pulgadas cada 4 pies. - Ancho de corte de 1/8" y reduccién por contraccién de 1/16". = Seobtienen s6lo piezas de 1 pulgada de espesor. El volumen ciibico del cilindro de diémetro D y largo L es: D DL A Gq bis 07854 <= (2-211) V = _volumen en pies madereros (1 pie maderero = 1/12 pies cibicos) Enconsideracién al ancho de corte y contraccién por cada pieza de 1 pulgada de espesor se produce la siguiente pérdida: 133 medici6n de arboles individuales 1/8+1/16) 841/16) _ 3 og 158% Porcentaje de pérdid: (1+1/8+1/16) 19 Porcentaje de aprovechamiento = (1-3/19)-100 = 84.2% El volumen, descontadas las pérdidas de aserrio y contracciones, es el siguiente: 2 2 V =0.7854 = +0842 = 0.66 a (2-212) Las pérdidas por tapas y cantoneras se asumen proporcionales al didmetro de las trozas. El autor MARK (1960) sugirié una pérdida por tal concepto equivalente a 2.12D: V =(0.66D* -22p) 5 Para el largo basico de trozas (4’), el volumen final es: V =022D? -071D Si el supuesto ancho de corte se modificara, asumiendo para el valor 1/4", la expresion deberia modificarse proporcionalmente: V =(022D* -0.71D) 0905 (2-213) V =0199D? -0642D Para trozas de 16 pies, el volumen aserrable corresponde a la suma del volumen de sucesivas trozas de 4 pies, en las cuales el didmetro menor se incrementa cada vezen 0.5 pulgadas por efectos de la conicidad. 0.199 D* 0.642 D 0199 (D+05)? - 0642 (D+05) 0.199 (D+ 1.0)’ - 0.642 (D+ 1.0) 0.199 (D+ 15)’ - 0642 (D +15) V =0.796 D? - 1374 D- 1.2294 (2-214) 134 Ea de atributos de érboles y productos Las siguientes funciones han sido derivadas para trozas de 8', 12', 16' y 20', para un ancho de corte de 1/4”. V 8 =0398D? -1085D-02712 V 12 =0597 D? - 1329 D-0.7142 « V16=0796 D* - 1374 D-1.2294 V20 = 0995 D* ~ 1220 D-1.7174 (2-215) Los voltimenes para largos intermedios se obtienen como se explicé antes: 4 . vise a (0597D* - 1.329D - 0.7142) (2-216) 112.53 Funciones de volumen aserrable derivadas mediante estudios en aserraderos Las reglas madereras que se han presentado, como todas aquellas que se basan en un conjunto de supuestos generales, no permiten efectuar estimaciones insesgadas del rendimiento de un determinado proceso de aserrio, o de la cantidad potencial de madera aserrable en pie. Cuando se precise tal informacién ser necesario ajustar funciones de estimacién de volumen aserrable. Ellas pueden construirse mediante medicién de una muestra representativa de trozas, empleando como modelo de regresién una expresién similar a las formulas de la regla internacional. Si se considera el largo de las trozas como una variable independiente, los modelos. serén algo més complejos. El uso de modelos complejos puede obviarse si se emplea como variable dependiente la cantidad de pies madereros obtenidos por metro cuibico (PVA). El empleo de diémetro menor como variable independiente no es recomendable si el largo de las trozas es variable, como normalmente ocurre. En tal caso parece recomendable usar como variable independiente el didmetro al centro de las secciones D... PVA = f(D.) Se ha propuesto el siguiente modelo (COX 1976): pva = +5, 1 +0, 1, D. * D, (2217) 135 medici6n de &rboles individuales Este tipo de funciones ha sido ajustado en estudios realizados en bosque nativo, empleando un modelo més simple. Las funciones obtenidas para algunas especies del bosque nativo chileno son las siguientes: Para olivillo (Aextoxicon punctatum, R. et. Pav): va = 2673-72753 2218) 12.5.4 Produccién real versus estimada por reglas El rendimiento de un proceso de aserrio puede expresarse en funcién de la proporcién de volumen producido respecto al estimado por una regla maderera en particular. Como base de comparacién se emplea con frecuencia la regla internacional: (2-219) R = rendimiento V, = volumen real (observado) V, = volumen estimado con una regla maderera Cuando R es positivo se dice que hay “overrun”. Cuando es negativo se habla de underrun; esta medida no es en si un indicador vlido del proceso de aserrio, dado que su valor depende en gran medida de las caracteristicas de la regia maderera empleada. Un indicador més consistente es el porcentaje de recuperacién. Se define como el rendimiento en madera aserrada como proporcién del volumen cubico total de las trozas. 10236 Ye (2-220) Porcentaje de recuperacion = V, = volumen aserrado obtenido en pulgadas madereras, V, = volumen cibico total de la troza, en metros cibicos El porcentaje de recuperacién observado para un aserradero alternativo que procesa pino insigne alcanza para didmetros entre 20 y 39 cm un porcentaje de recuperacién entre 46 y 50% (KAWAS y ZILLER 1975). 136 estimacién de atributos de drboles y productos En procesos de aserrio en bosque nativo los rendimientos pueden superar el 60%, dependiendo de los diémetros, especies y proceso de aserrfo. Para rauli en aserraderos de huincha, considerando un didmetro promedio de 60 cm, el porcentaje de recuperacién es aproximadamente un 62%. 11.2.6 Estimacién de existencias netas Si se analizan los inventarios forestales realizados hasta la década del 60, se puede comprobar que sélo se proporcionaban antecedentes de voltimenes brutos de madera en pie, méxime sin corteza, pero sin ningtin descuento, ya sea por accesibilidad, restricciones legales, ni tampoco calidad y menos con una clasificacién por tipo de producto. De esta forma, muchos proyectos industriales que aparecian como factibles en primera instancia, una vez puestos en marcha, terminaban fracasando. Este enfoque ha sido modificado gradualmente durante los tiltimos 30 aos evaludndose la madera realmente explotable. En la actualidad este nuevo enfoque es exigido por cualquier inventario y més atin debe ser consecuente con el impacto ambiental que tenga el proyecto industrial que se piensa establecer sobre la base del recurso inventariado. Las existencias netas corresponden a los vohimenes efectivamente aprovechables, descontadas las pérdidas atribuibles a los siguientes factores: = Accesibilidad = Restricciones legales (bosque de proteccién, normas silviculturales de aprovechamiento) - _ Especies no utilizables - efectos de la madera - Calidad y dimensiones de las trozas = Pérdidas de explotacién y transporte (simuladores de fractura) Las restricciones legales en cuanto a la posibilidad de aprovechamiento de dreas consideradas de proteccién afectan principalmente a la superficie aprovechable. La aplicacién previa de estas restricciones evita la medicién de bosques que bajo ninguna forma son explotables. Los métodos de aprovechamiento definidos por la ley también constituyen un factor de reducci6n de volumen utilizable, al fijar ciertos minimos en cuanto a érboles remanentes a dejar desde el punto de vista silvicultural, lo que reduce significativamente el volumen util. El segundo aspecto vital en el proceso de estimacin de voliimenes netos es la accesibilidad econémica del recurso. En la situacién tecnol6gica actual, la inaccesibilidad esta dada sélo por razones de orden econémico. La factibilidad de extraccién de la madera va a depender del volumen y del valor de mercado del producto que se puede obtener. Es por lo tanto necesario obtener informacién de existencias en este caso, para luego evaluar econémicamente su extracci6n y eventualmente deducirlo del volumen neto titil. 137 medici6n de arboles individuales En una situaci6n de bosque constituido por varias especies, es también importante reducir los voltimenes de aquellas especies no utilizables para los fines industriales que consulta el inventario y de esta forma no crear falsas expectativas con voliimenes sobreestimados. El descuento por defecto de sanidad y forma de los Arboles es indudablemente de mas dificil cuantificacién y exige, en casi todos los casos, un estudio local de presencia e incidencia de defectos en Arboles volteados y seccionados, durante el llamado muestreo dendrométrico. Este procedimiento esta muy subordinado a las condiciones locales de homogeneidad o heterogeneidad del bosque, y especialmente al tipo de producto que se busca obtener; exige la clasificacién de los arboles en pie, en clases de calidad durante el inventario y su asociacién con el aprovechamiento de los arboles volteados. En muchas publicaciones, ala calidad determinada en el inventario se le denomina calidad aparente y a la calidad obtenida directamente en el trozado, calidad real. HOSIUS (1988) de la Misién Forestal Alemana en Bolivia describe en el Manual del Técnico Forestal los principales defectos por forma, estructura y aquellos derivados del ambiente. Este procedimiento se aplica tanto a bosques naturales como a plantaciones, siendo el problema mucho més complejo en los primeros. La clasificacién de calidad puede tener como objetivo minimo la clasificacién de las existencias en tipos de productos en pie, como es el caso normal de los inventarios realizados en plantaciones. En el caso del bosque natural, la clasificacién de calidad tiene normalmente el doble objetivo de estimar pérdidas por defectos, para la estimacién de existencias netas posterior a la clasificacién por productos. Las restricciones en cuanto a calidad y dimensién son controladas mediante una adecuada clasificacién de las existencias brutas. Por ultimo, deberdn descontarse de los voltimenes disponibles las pérdidas producto del proceso de explotacién y transporte, normalmente mediante factores de reduccién promedio muy relacionados con la dimensién de los arboles, la topografia y el método de aprovechamiento. La determinacién de existencias netas de productos en plantaciones es mucho més simple, porque no requiere la evaluacién de defectos. Basta aplicar, a partir de los voltimenes brutos, ya sea factores de conversi6n a distintos indices de utilizacién, funciones de productos sobre la bbase de variables de rodal o, por tiltimo, simuladores de trozado y de fractura, para obtener los. voltimenes netos de productos, descontadas las pérdidas por explotacién y trozado. Lanecesidad de uno u otro procedimiento dependeré especialmente de las diferencias de precios de los diversos productos; mientras mayores, més ajustada debe ser su evaluacién. 11.2.7 Estudio de defectos La estimaci6n de existencias netas, casi sin excepci6n, supone en el caso de los bosques naturales la realizacién de un estudio de defectos y su asociacién con la clasificacién de los 138 estimacién de atributos de érboles y productos Arboles en pie. Sélo en bosques muy homogéneos seré factible aplicar, disponiendo de una base de datos idénea, los lamados factores de transformaci6n o “cull factors” utilizados comiinmente en los Estados Unidos. Elestudio de defectos y desechos se realiza paralelamente al muestreo dasométricoy en aquellos rboles que serdn volteados para obtener, ya sea el volumen o los modelos fustales que permiten su posterior cubicacién. Estudio de detecto FORMULARIO A Medicton del érbol Corr auerag]>aNETRO wenon | oudwerno wavon | cenreo] o eaciono causa & [tareo | Muinewa loukmetro| 3 B [om | ce | eve | sre | eve | src |muncnal 3 g of ae ete les sanoao | roma econ CoO T 3 | § | TTT 10 TI ATT TT) Figura 2-39. Formulario utilizado para registro y cubicacién de defectos (INFORA 1988) Laselecci6n de los arboles a voltear deberia hacerse aleatoriamente, dentro de las mismas parcelas de muestreo dasométrico, en un nimero minimo por especie estimado de 50 arboles 139

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