You are on page 1of 11

CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD, SISTEMAS DE PROTECCIÓN Y GARANTÍA

DE LA CONSTITUCIÓN

El Control de constitucionalidad es el mecanismo jurídico por el cual para asegurar


el cumplimiento de las normas constitucionales se invalidan las normas de rango inferior
que no hayan sido hechas con conformidad con aquellas.

Fundamento del Control de la Constitucionalidad

El control de constitucionalidad tiene como fundamento el principio de supremacía


constitucional, esto es que la Constitución de un país es la norma de mayor jerarquía a la
cual deben sujetarse las de valor inferior, entendiéndose por tales a las leyes dictadas
por el parlamento, los decretos y demás resoluciones dados por el Poder Ejecutivo o por
entidades autárquicas y las sentencias y demás resoluciones de los jueces.

Clasificaciones del Control de la Constitucionalidad

1) Según la Admisión

• Positivos: explícitamente en el texto constitucional, o tácitamente en el Derecho


Constitucional consuetudinario, admiten la existencia de control. Sagüés
diferencia dentro de esta categoría los sistemas completos, que cumplen los cinco
requisitos que apuntamos sub 1, de los incompletos, que no los cumplen a todos,
aclarando que la mayoría de los sistemas son incompletos.
• Negativos: no admiten el control de constitucionalidad pese a tener necesidad de
él por ser su Constitución del tipo rígido.

2) Según los Órganos de Control

• Judiciales (o con fisonomía judicial): el control se encarga a tribunales,


pertenecientes o no al Poder Judicial. Esta variante se subdivide en tres:
o Difuso (o desconcentrado): Todos los jueces ejercen la potestad de
interpretar la Constitución y pueden dejar de aplicar una norma en el caso
concreto cuando la reputen contraria a dicha Constitución.
o Concentrado (o especializado): es el sistema ideado por Kelsen que
otorga tal función del Tribunal Constitucional a un órgano ordinario del
Poder Judicial, a la "Sala Constitucional".
o Mixto: intenta compaginar las ideas del sistema difuso y del concentrado.
Así, por ejemplo, todos los jueces resuelven las cuestiones de
constitucionalidad en las acciones ordinarias con efectos inter partes, pero
en ciertas acciones especiales, generalmente reservadas a ciertos órganos
(Presidente, Fiscal General) van directamente al Tribunal Constitucional
cuya sentencia será erga omnes. O bien La Sala Constitucional del Tribunal
Supremo de Justicia conoce por apelación en los aspectos constitucionales
de los casos comunes.

• No judiciales: En algunos países la desconfianza por la judicatura (conservadora,


no electa popularmente) ha hecho que se entregue el control de
constitucionalidad a otros entes. Veamos:
o Poder Legislativo: Es el mismo Parlamento quien controla, o él a través
de un órgano suyo. Se trata principalmente de naciones que sostienen la
doctrina del "centralismo democrático" donde el órgano más representativo
1
del pueblo (Poder Legislativo) es quien concentra mayor poder,
prevaleciendo sobre los demás.
o Poder Ejecutivo: normalmente el Ejecutivo puede vetar cuando considera
que una ley sancionada es inconstitucional.
o Electorado: se han estructurado algunos sistemas bajo la idea de la
democracia directa en los cuales es el pueblo quien decide si determinada
norma coincide o no con los lineamientos constitucionales. Un sistema,
denominado "apelación popular de sentencias", prevé que cuando el
Superior Tribunal declara inconstitucional una norma, el 5% del electorado
puede exigir que se someta a referéndum la decisión del tribunal. Otro ha
previsto que mediante consulta popular se derogue una ley por considerarla
inconstitucional.

• Órganos sui generis o Políticos: Incluiremos bajo este acápite a órganos que, o
no se estructuran como tribunales, o su forma de integración es especial, o fundan
el control en principios extrajurídicos, o su método de control es novedoso.
o El Consejo de la Revolución portugués: estuvo integrado por el
Presidente de la República y oficiales de las fuerzas armadas. Podía declarar
la inconstitucionalidad con efectos erga omnes. Tenía también a su cargo el
control de la inconstitucionalidad por omisión.
o El Consejo de los Custodios iraní: está conformado por seis teólogos
designados por el Ayatollah y seis juristas musulmanes. Antes de la sanción
controlan los proyectos de ley comparándolos con los principios socio
religioso del Islam y con la Constitución.
o El Consejo Constitucional francés: inscripto dentro de los sistemas de
control especializado, preventivo, abstracto y limitado. Lo componen todos
los ex-presidentes de la República y nueve miembros más: tres designados
por el presidente, tres por el presidente del Senado y tres por el de la
Asamblea Nacional (Cámara de Diputados).
o El Tribunal de Garantías Constitucionales ecuatoriano: se compone
de once miembros, tres designados directamente por el Congreso y ocho
elegidos por el Congreso entre ocho ternas enviadas por las centrales
nacionales de trabajadores, cámaras de la producción, presidente de la
República, alcaldes cantonales, prefectos provinciales, etcétera. Puede
suspender los efectos de las leyes, decretos y ordenanzas que considere
inconstitucionales pero sometiéndose a la decisión definitiva del Congreso
Nacional.

3) Según los Límites Estatales

• Nacional: los órganos del control son órganos propios del Estado controlado.
• Internacional: los países firmantes de ciertos convenios internacionales se han
sometido a la jurisdicción de ciertos tribunales supranacionales que pueden
desvirtuar lo sentenciado por el Poder Judicial Nacional, pues sus sentencias
definitivas son obligatorias para los estados.

4) Según la Formación de los Jueces

• Letrados: en la mayoría de los sistemas. Algunas constituciones con sistema


concentrado exigen una altísima formación profesional, lo que, sin duda, redunda
en beneficio de la independencia y capacidad de los magistrados.

2
• Legos: en algunos sistemas se admite que los jueces legos (no abogados)
realicen el control en las jurisdicciones donde no hay jueces letrados.
• Mixtos: otros regímenes mezclan juristas con legos.

5) Según el Momento
• Preventivo: el control se efectúa antes de la sanción de la ley, sobre el proyecto.
O bien, sobre la ley pero antes de su promulgación. En el caso del Consejo
Constitucional Francés el control es preventivo, se ejerce antes de la
promulgación. En algunos casos obligatoriamente (leyes orgánicas, reglamentos
de las cámaras) y en los demás casos, sólo a petición de parte, siendo los únicos
legitimados el Presidente de la República, el Primer Ministro, el Presidente de la
Asamblea Nacional, el Presidente del Senado, sesenta diputados o sesenta
senadores.
• Reparador: después de que la norma entró en vigencia.
• Mixto: Se puede controlar antes y después de que la norma se sancione. En algún
sistema el presidente de la República puede reclamar al Tribunal Supremo el
control de un proyecto, si esto no ocurrió, el tribunal puede controlar la norma
reparadoramente. Otro da el control preventivo al Tribunal Constitucional y el
reparador a la Corte Suprema.

6) Según el Modo de Impugnación

a) Abstracto: el impugnador no se halla en una relación jurídica donde se vea


afectado por la norma inconstitucional. Aquí se utilizan las acciones populares o
las acciones declarativas puras (o abstractas) de inconstitucionalidad.
b) Concreto: está legitimado únicamente cuando hay una relación jurídica donde
alguien se ve lesionado por la norma inconstitucional en un derecho subjetivo, un
interés legítimo o un interés simple. Las vías de acceso a la jurisdicción son
diversas: acción declarativa concreta de inconstitucionalidad, acción de amparo,
demanda incidental, juicio ejecutivo o sumario, etc.

7) Según la Posibilidad de Acceso

• Condicionado: hay un órgano preseleccionador de los casos que llegarán al


órgano controlador de la constitucionalidad.
• Incondicionado: todos los casos pueden llegar al órgano máximo de control,
aunque haya instancias previas.

8) Según los Sujetos Legitimados

• Restringido: sólo los sujetos taxativamente enumerados pueden excitar el


control. Así en Francia donde los legitimados son: el Presidente de la República, el
Primer Ministro, el Presidente de la Asamblea Nacional, el Presidente del Senado,
sesenta diputados o sesenta senadores.
• Amplio: está legitimado todo aquél que tenga un derecho subjetivo, un interés
legítimo o un interés simple, afectados por la norma inconstitucional.
• Amplísimo: está legitimada cualquier persona, se vea o no afectada.

9) Según la Cobertura

3
• Total: todo acto, ley y omisión, del Estado y de los particulares, están sujetos al
control.
• Parcial: sólo una porción del mundo jurídico está sometida al control.

10) Según la Facultad de Decisión

• Decisorios: el controlador invalida la norma. Hay tres variantes:


o Inter partes: sólo para las partes y respecto al asunto de la sentencia.
o Erga omnes: todos los habitantes quedan exentos de respetar la norma
declarada inconstitucional. Otra posibilidad es que la norma embrionaria
quede preventivamente abolida, con efectos absolutos, e incluso sin recurso
alguno contra la decisión, como en Francia.

• No decisorios: en estos sistemas el órgano de control emite pronunciamientos


que no invalidan la norma cuestionada sino que transmite una recomendación al
órgano encargado de dictarla y abrogarla (doctrina del paralelismo de
competencias).

11) Según la temporalidad de los efectos

• Ex nunc: los efectos no son retroactivos.


• Ex tunc los efectos son retroactivos

LOS SISTEMAS DE PROTECCIÓN Y GARANTÍA DE LA CONSTITUCIÓN EN


VENEZUELA
El Art. 7 de la Constitución de 1999, reafirma que la Constitución es la norma
suprema y el fundamento de todo el ordenamiento jurídico, de manera que todas las
personas y los órganos que ejercen el Poder Público están sujetos a la misma;
constituyendo, además, uno de los deberes constitucionales “cumplir y acatar” la
Constitución (art. 131).
Ello conduce a la previsión, en el propio texto constitucional, de un conjunto de
sistemas para la protección y garantía de esa supremacía constitucional que, sin duda,
constituye uno de los pilares fundamentales del constitucionalismo contemporáneo y del
Estado de Derecho.
En Venezuela, el sistema de control de la constitucionalidad es mixto en cuanto que
además de consagrarse el control concentrado de la Constitucionalidad atribuido en
nuestro caso a la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia, se instituye
además el control difuso de la Constitucionalidad, ahora elevado a rango constitucional,
ejercido por todos los jueces de la República, tal como se dispone en la Constitución del
99.
I. LA VIGENCIA DE LA CONSTITUCIÓN
Una vez que entró en vigencia la Constitución, mediante su publicación en la
Gaceta Oficial, el texto de la Constitución de 1999 comenzó a regir como norma suprema
(art. 7) y, por tanto, con las consecuencias que ello conlleva:
1) La supremacía misma, que implica tanto el poder derogatorio de la Constitución
respecto de toda norma que contradiga o se aparte de las previsiones del texto
constitucional como la nulidad de todo acto estatal que se dicte en contravención con
sus disposiciones.

4
2) La Inviolabilidad, es decir, que la misma no pierde su vigencia “si dejare de
observarse por acto de fuerza o porque fuere derogada por cualquier otro medio distinto
al previsto en ella” (art. 333).
3) Desde que entró en vigencia la Constitución goza de imperatividad, es decir, de
fuerza coactiva inmediata y por si misma, lo que implica que sus normas son de
aplicación inmediata. La imperatividad implica, por tanto, que si la Constitución deja de
observarse por acto de fuerza o fuere derogada por cualquier otro medio distinto al
previsto en ella, todo ciudadano investido o no de autoridad tiene “el deber de colaborar
en el restablecimiento de su efectiva vigencia. Así lo dispone el artículo 333 de la
Constitución, siguiendo lo que regulaba el artículo 250 de la Constitución de 1961.
Además, como lo establece el artículo 350,
“El pueblo de Venezuela, fiel a su tradición republicana, a su lucha por la independencia,
la paz y la libertad, desconocerá cualquier régimen, legislación o autoridad que contraríe
los valores, principios y garantías democráticas o menoscabe los derechos humanos”.

II. LA GARANTÍA DE LA CONSTITUCIÓN: El Control Judicial de la Constitucionalidad


La consolidación en Venezuela del Estado de Derecho está en el establecimiento
de un completo sistema de control de la constitucionalidad de los actos estatales, es
decir, de justicia constitucional.

Jurisdicción Constitucional es una noción orgánica que tiende a identificar a un


órgano específico del Poder Judicial que tiene en forma exclusiva, la potestad de anular
ciertos actos estatales por razones de inconstitucionalidad, en particular las leyes y
demás actos con rango de ley o de ejecución directa e inmediata de la Constitución.

Justicia Constitucional un concepto material que equivale a control judicial de la


constitucionalidad de las leyes y demás actos estatales, el cual ha sido ejercido por
todos los Tribunales y a todas las jurisdicciones, es decir, a todos los órganos que
ejercen el Poder Judicial”.

1. Aspectos de la Justicia Constitucional


A. La Competencia Judicial
En efecto, siendo la Constitución norma suprema y el fundamento del
ordenamiento jurídico (art 7); dicha supremacía no tendría efectividad si no fuera por la
existencia de un sistema de justicia constitucional para garantizarla.
De allí que el artículo 334 de la Constitución atribuya a todos los Jueces, en el
ámbito de sus competencias y conforme a lo previsto en la Constitución y la ley, la
obligación “de asegurar la integridad de la Constitución.
En consecuencia la justicia constitucional, como competencia judicial para velar
por la integridad y supremacía de la Constitución corresponde a los Jueces en cualquier
5
causa o proceso que conozcan y, además, en particular, cuando conozcan de acciones
de amparo o de las acciones contencioso administrativa al tener la potestad para anular
actos administrativos contra a la Constitución (art. 259); y no sólo al Tribunal Supremo
de Justicia. Este, sin embargo, en forma particular tiene expresamente como
competencia garantizar “la supremacía y efectividad de las normas y principios
constitucionales, correspondiéndole ser “el máximo y último intérprete de la
Constitución” y velar por su uniforme interpretación y aplicación” (art. 335); y, en
particular, ejercer la jurisdicción constitucional (arts. 266, ord. 1° y 336).

B. Control Difuso de la Constitucionalidad de las leyes o Control por Vía de


Excepción:
(Justicia Constitucional)
Una de las formas específicas para el ejercicio de la justicia constitucional, es la
posibilidad que tiene todo juez de la República de ser juez de la constitucionalidad de las
leyes. Se trata del método denominado de control difuso de control de la
constitucionalidad de leyes.
Este mecanismo existe en nuestro país desde el siglo pasado regulado en el
artículo 20 del Código de Procedimiento Civil, que establece que:
“Artículo 20: Cuando la ley vigente, cuya aplicación se pida, colidiere con alguna
disposición constitucional, los jueces aplicarán ésta con preferencia.
El principio del control difuso, más recientemente, se recogió en el artículo 19 del
Código Orgánico Procesal Penal, con este texto:
“Artículo 19: Control de la Constitucionalidad. Corresponde a los jueces velar por la
incolumidad de la Constitución de la República. Cuando la ley cuya aplicación se pida
colidiere con ella, los tribunales deberán atenerse a la norma constitucional.
“Art. 334: (CRBV) A los efectos de consolidar constitucionalmente el método de control
difuso de la constitucionalidad de las leyes, se establece en este artículo: “En caso de
incompatibilidad entre esa Constitución y una Ley u otra norma jurídica, se aplicarán las
disposiciones constitucionales, correspondiendo a los tribunales en cualquier causa, aun
de oficio, decidir lo conducente.
En esta forma, el método de control difuso de la constitucionalidad adquirió en
nuestro país rango constitucional, el cual, incluso puede ser ejercido de oficio por los
tribunales.
Este tipo de control se caracteriza por el deber que tienen los Jueces que conozcan
de una causa en particular, de abstenerse de aplicar una Ley, invocada por una de las
partes envueltas en el proceso y que en criterio del juzgador viola un precepto
constitucional.
Este sistema de control no funciona por acción directa contra la Ley o acto que se
estime violatorio de la Constitución, sino que surge incidentalmente en el desarrollo de
un proceso, por vía de excepción, como consecuencia de los alegatos que pudiere hacer
una de las partes o bien por modus propio del Juez, que al analizar la cuestión o asunto
que debe resolver encuentra que la Ley invocada es a su juicio inconstitucional. De ahí
entonces que este tipo de control opera a instancia de parte o por decisión de oficio del
Juez.
Hay que resaltar que a través de este medio de control el Juez solo está facultado
para “no aplicar” la Ley u otra norma jurídica que sea incompatible con la Constitución;
pero nunca para declarar la nulidad de la Ley. Como consecuencia de ello, el fallo que
produzca el Juez conforme a estos presupuestos solo produce efecto entre las partes y
no “erga omnes”.
6
C. Control Concentrado de la Constitucionalidad o Control por Vía de Acción de
Constitucionalidad:
(Jurisdicción Constitucional)
La característica fundamental de esta forma de control lo determina el hecho de que
el ordenamiento constitucional confiere a un solo órgano estatal el poder de actuar
como juez constitucional, generalmente respecto de ciertos actos estatales (leyes o
actos de similar rango dictados en ejecución directa de la Constitución), en general con
potestades para anularlos.
Art. 334 (CRBV): “Corresponde exclusivamente a la Sala Constitucional del Tribunal
Supremo de Justicia como jurisdicción constitucional, declarar la nulidad de las leyes y
demás actos de los órganos que ejercen el Poder Público dictados en ejecución directa e
inmediata de la Constitución o que tengan rango de ley”.
La Jurisdicción Constitucional no es exclusiva de la Sala Constitucional del Tribunal
Supremo de Justicia, ésta se ejerce por todas las Salas del Tribunal. La Sala
Constitucional ejerce el control de la constitucionalidad sobre los actos normativos con
rango de ley o cualquier otro acto dictado en ejecución directa o inmediata de la
Constitución.
En esta forma quedó definitivamente establecida la diferencia entre la jurisdicción
contencioso-administrativa y la jurisdicción constitucional, por el objeto del control y no
por los motivos de control, por lo que sólo compete a la jurisdicción constitucional,
conocer de la anulación, por inconstitucionalidad de las leyes y demás actos dictado en
ejecución directa e inmediata de la Constitución (como los actos de gobierno) o que
tengan rango de ley (Decretos Leyes); correspondiendo, en cambio, a la jurisdicción
contencioso administrativa conocer de la nulidad de los actos administrativos incluidos
los Reglamentos, por motivos de inconstitucionalidad y de legalidad (contrariedad del
derecho).
Este control funciona a instancia de parte, bien sea de un particular o de cualquier
órgano o institución del Estado, de cualquier jerarquía en la estructura organizativa del
Estado, que se tramita ante el Tribunal Supremo de Justicia, mediante un procedimiento
pautado en el ordenamiento jurídico del Estado, ante el cual se denuncia la violación de
una ley que choca o colide con lo establecido con tal o cuales disposiciones de la
Constitución. La finalidad de ese recurso de inconstitucionalidad, es lograr la nulidad de
la ley que viole preceptos constitucionales, lo cual ha de acarrear efecto erga omnes.

2. Las competencias del Tribunal Supremo de Justicia en materia de justicia


constitucional
Una de las novedades de la Constitución de 1999 ha sido la creación de la Sala
Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia, a la cual se le ha atribuido la jurisdicción
constitucional (art. 266, ord. 10) consistente en la potestad anulatoria de las leyes y
demás actos de igual rango y jerarquía, y el ejercicio de otras competencias en materia
de justicia constitucional, enumeradas en el artículo 336, así:

A. La potestad anulatoria por inconstitucionalidad


La Sala Constitucional del Tribunal Supremo, como jurisdicción constitucional tiene
las siguientes atribuciones de control concentrado de la constitucionalidad de
determinados actos estatales, con poderes anulatorios, previstas en el artículo 336:

7
1. Declarar la nulidad total o parcial de las leyes nacionales y demás actos
con rango de ley de la Asamblea Nacional que colidan con esta
Constitución.
2. Declarar la nulidad total o parcial de las Constituciones y leyes
estadales, de las ordenanzas municipales y demás actos de los cuerpos
deliberantes de los Estados y Municipios dictados en ejecución directa e
inmediata de la Constitución y que colidan con ésta.
3. Declarar la nulidad total o parcial de los actos con rango de ley dictados
por el Ejecutivo Nacional que colidan con esta Constitución.
4. Declarar la nulidad total o parcial de los actos en ejecución directa e
inmediata de la Constitución, dictados por cualquier otro órgano estatal en
ejercicio del Poder Público.

B. El control previo de la constitucionalidad de actos estatales


El Tribunal Supremo de Justicia en Sala Constitucional, además, tiene las
siguientes competencias para controlar la constitucionalidad de actos estatales antes de
su entrada en vigencia:
1) La prevista en el artículo 336, ordinal 5 en relación con los tratados internacionales:
5. Verificar, a solicitud del Presidente o Presidenta de la República o de la Asamblea
Nacional, la conformidad de la Constitución con los tratados Internacionales
suscritos por la República antes de su ratificación.
2) La prevista en el artículo 203 de la Constitución conforme a la cual, la Sala
Constitucional debe pronunciarse sobre la constitucionalidad del carácter orgánico, antes
de su promulgación, de las leyes que así hayan sido calificadas por la Asamblea
Nacional.
3) La prevista en el artículo 204 de la Constitución, en los casos del Veto presidencial a
las leyes, conforme al cual la Sala Constitucional debe Pronunciarse sobre la
inconstitucionalidad de una ley de algunos de sus artículos, a solicitud del Presidente de
la República, antes de la promulgación de la ley.

C. La revisión obligatoria de la constitucionalidad de los Decretos de Estado de


Emergencia
De acuerdo con el artículo 339 de la Constitución, el Decreto que declare el Estado
de Excepción debe ser presentado a la Sala Constitucional del Tribunal Supremo, para
que se pronuncie sobre su inconstitucionalidad.
Por ello, el artículo 336 le atribuye a la Sala, competencia expresa
6. Revisar, en todo caso, aun de oficio, la constitucionalidad de los decretos que
declaren estados de excepción dictados por el Presidente o Presidenta de la
República.

D. El control de constitucionalidad de las leyes por omisión


Artículo 336, le atribuye a la Sala Constitucional, competencia para:
7. Declarar la inconstitucionalidad del poder legislativo municipal, estadal o
nacional, cuando haya dejado de dictar las normas o medidas indispensables para
garantizar el cumplimiento de la Constitución, o las haya dictado en forma
incompleta, y establecer el plazo y, de ser necesario, los lineamientos de su
corrección.
8
E. El control de la constitucionalidad de las leyes mediante la declaración de
colisión
Artículo 336, le atribuye a la Sala Constitucional, competencia para:
8. Resolver las colisiones que existan entre diversas disposiciones legales y
declarar cuál de éstas debe prevalecer.

F. La resolución de controversias constitucionales entre los órganos del Poder


Público
Artículo 336, le atribuye a la Sala Constitucional, competencia para:
9. Dirimir las controversias constitucionales que se susciten entre cualesquiera de
los órganos del Poder Público.
Esta competencia de orden constitucional tiene por objeto resolver los conflictos
entre los órganos del Poder Público, tanto en su distribución vertical (República, Estados
y Municipios), como en su división horizontal a nivel nacional (poder Legislativo, Poder
Ejecutivo, Poder Judicial, Poder Ciudadano, Poder electoral) y a nivel estadal y municipal
(Poder Legislativo y Poder Ejecutivo).
Es decir, se trata de resolución de controversias sobre atribuciones
constitucionales entre los órganos del Poder Público; que son distintas a las
controversias administrativas que se susciten entre la República, los Estados, Municipios
u otro ente público, las que compete ser resueltas por la Sala político-Administrativa del
Tribunal Supremo (art. 266, ord. 4°), como jurisdicción contencioso-administrativa.

G. La revisión de las sentencias dictadas por los tribunales en cuestiones de


constitucionalidad
Artículo 336, le atribuye a la Sala Constitucional, competencia para:
10. Revisar las sentencias de amparo constitucional y de control de
constitucionalidad de leyes o normas jurídicas dictadas por los tribunales de la
República, en los términos establecidos por la ley orgánica respectiva.
Por supuesto, esta competencia no se configura como la de una apelación ni como
la de una segunda instancia general en la materia. Se trata de una competencia
excepcional para que la Sala Constitucional pueda revisar, a su juicio y discreción,
mediante un recurso extraordinario que se puede ejercer contra sentencias de última
instancia dictadas por los tribunales de la República (excluido, por supuesto, el Tribunal
Supremo y sus Salas) en materia de amparo constitucional o en ejercicio de control
difuso de la Constitucionalidad de las leyes.

3. El Tribunal Supremo como supremo intérprete de la Constitución


De acuerdo con el artículo 335 de la Constitución el Tribunal Supremo de Justicia
debe garantizar la supremacía y efectividad de las normas y principios constitucionales;
y es el máximo y último intérprete de la Constitución, por lo que debe velar por su
uniforme interpretación y aplicación.
En todo caso, el valor de las interpretaciones constitucionales que, en particular,
establezca la Sala Constitucional sobre el contenido o alcance de las normas y principios
constitucionales “son vinculantes para las otras Salas del Tribunal Supremo de Justicia y
demás tribunales de la República.

9
Se le da, así, a las interpretaciones constitucionales de la Sala, valor de
precedente, de obligatoria aplicación por los demás tribunales y, además, por las otras
Salas del Tribunal Supremo.
Ello, no debía excluir sin embargo, la competencia de las otras salas para tomar
decisiones en materia constitucional e interpretar la Constitución, al aplicarla en los
casos concretos que conozcan. Todas las Salas deben considerarse que son en sí
mismas el Tribunal Supremo.

SISTEMA DE JUSTICIA CONSTITUCIONAL EN VENEZUELA

1- Control Difuso de la constitucionalidad de las leyes y demás actos normativos.


Art. 334 CRBV y 20 C.P.C., Desaplica la norma que colide con la Constitución, no la
anula. Este Control Difuso lo aplican todos y cada uno de los jueces a cualquier
instancia.
En la Constitución del 99, el control difuso adquiere rango constitucional, en la del
61 era rango legal.
2- Protección de los derechos constitucionales mediante las acciones de amparo.
3- Control por contrariedad a derecho de los actos administrativos por motivos de
inconstitucionalidad mediante las acciones contenciosas administrativas de
anulación, cuando contiene vicios.
Jurisdicción Contencioso Administrativo, el juez conoce actos de rango
sublegal, pero si se demanda la nulidad por motivos de inconstitucionalidad el
juez se comporta como juez constitucional, mientras que si se demanda la nulidad
por ilegalidad, el juez se comporta como juez contencioso administrativo.
4- Control Previo:
Art. 336, Numeral 5°: Verificar, a solicitud del Presidente o Presidenta de
la República o de la Asamblea Nacional, la conformidad de la Constitución con los
tratados internacionales suscritos por la República antes de su ratificación.
Art. 214. El Presidente o Presidenta de la República promulgará la ley dentro
de los diez días siguientes a aquél en que la haya recibido. Dentro de ese lapso
podrá, con acuerdo del Consejo de Ministros, solicitar a la Asamblea Nacional,
mediante exposición razonada, que modifique alguna de las disposiciones de la ley
o levante la sanción a toda la ley o parte de ella.
Art. 203. Las leyes que la Asamblea Nacional haya calificado de orgánicas
serán remitidas, antes de su promulgación a la Sala Constitucional del Tribunal
Supremo de Justicia, para que se pronuncie acerca de la constitucionalidad de su
carácter orgánico. La Sala Constitucional decidirá en el término de diez días
contados a partir de la fecha de recibo de la comunicación. Si la Sala Constitucional
declara que no es orgánica la ley perderá este carácter.

5- Control Posterior: o Control Concentrado


Art. 336, Numeral 1,2,3,4:
Son atribuciones de la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia:

10
1- Declarar la nulidad total o parcial de las leyes nacionales y demás actos con
rango de ley de los cuerpos legislativos nacionales que colidan con esta
Constitución.
2- Declarar la nulidad total o parcial de las Constituciones y leyes estadales, de las
ordenanzas municipales y demás actos de los cuerpos deliberantes de los Estados y
Municipios dictados en ejecución directa e inmediata de la Constitución y que
colidan con ésta.
3- Declarar la nulidad total o parcial de los actos con rango de ley dictados por el
Ejecutivo Nacional que colidan con esta Constitución.
4- Declarar la nulidad total o parcial de los actos en ejecución directa e inmediata
de la Constitución, dictados por cualquier otro órgano estatal en ejercicio del Poder
Público.

11

You might also like