FEFEVUTUPVVIPVIII HHH HD.VB av Beer
108 (CARLOS CONTRERAS / MARCOS CUETO
rmortizaci6n agraria, ofrecer acceso a la modernizaciGn tecnolOgica y reincor-
poblacién indigena al sistema fiscal y econémico, como lo habia sido
la consolidacién del Estado independiente, pero sobre bases econémicas y socia-
en Ja medida que descansaba en una mera inyeccién de
fa del crecimiento del mercado y la produccién internas,
sino de una renta convertida en patrimonio del Estado en virtud de la prolongacién
de principios fiscales coloniales. Jo de prosperidad econémica que
trajo consigo las export fa un origen claramente extemo y
una naturaleza absolutamente coyuntural.
2, LAREVOLUCIONDEL GUANO
rianos habfa desembarcado de vuelta en el pais el arequi-
ie fue co-director del Memorial de Ciencias
ya falta de un ambiente propio para las actividades eulturales y educatvas.
‘A pesar de ello muchos estudiosos, como Rivero y Ustariz, persistieron en st
csfuerzo por hacer ciencia en la adversidad. Entre los trabajos de investigacién
{que realiz6 el arequipefio 2 su regreso, esto el de las pr
del guano (excrement) de las aves del litoral en la agricultura. Estos trabajos
fueron publicados y conocidos en Europa. Los embarques iniciales que se hicie-
ron en 1841 a Inglaterra, a manera de ensayo, resultaron tan alentadores, que
pronto desatdse una gran demanda en el mundo por el guano del Peri
guano convertiaen realidad el milagro de la multiplicacign de los panes. La
tierra incrementaba su produccién tras la inyeccién del poderoso fosfato de
origen marino. Durante unos pocos afios hubo de soportarse la competer
1 Peri tavo el monopolio mundial del fertitizante por
ech
ado patimonio el Estado, procediéndose en una primera
arrendamiento de las isas guaneras a diversas compas
LA REPUBLICA DEL GUANO 109
Estas pagaban una suma al Estado, a cambio del derecho a extraer y vender el
guano. Con el vertiginoso aumento de precio que sobrevino, se decidié abandonar
este sistema, por el de consignacién. Mediante éste, el Estado mantenfa la pro-
piedad del producto hasta el momento de su venta final, aunque Ia Tabor de ex
traccidn y venta corria a cargo del consignatario. Este trataba de lograr el mayor
‘guano en el mercado: descontaba sus gastos y comisi6n
mejores precios) y entregaba la diferencia al
;s¢ con un 60 por ciento del precio bruto,
i, por cuanto resultaba del hecho de
gobierno. Este venia al final a q
tuna gananeia enorme y meramente re
tuna propiedad y no de una inversi6n.
‘Al comienzo, los contratos de consignacién se hicieron con comerciantes
peruanos asociados con casas mercantiles extranjeras. Esta asociaci6n era indis
pensable para io del guano, aunque sencillo en
apariencia, requeria capital que debfa ser adel bores de extracci6n
yy embarque, operaciones de flete y seguros. una wcenes en Europa y
‘otros mercados, donde el producto debia ser depositado a la espera de su venta,
y contactos con bancos europeos ¥ casas comerciales que pudieran conceder
Jos eréditos necesarios. En sume, ura organizacién y capacidad de financiamiento
que excedfa las posibilidades de los hombres de negocios del
El gobierno pronto encontré que bien podia prescindir de los eomerciantes
ales, que al fin y al eabo no cumplian mas que un rol de testaferros, pas6
a tratardirectamente con las casas comerciales extranjeras. Estas ofrecian mejores
condiciones econémicas al Estado y.tenfan menos mafias para inflar los costos