Para el Psicoanálisis Budista, el saber lo que todos conocen no es la verdadera sabiduría, pues ésta comienza en el plano en el que los otros no saben. Por ello, la verdadera ciencia meditativa se encuentra más allá de la ciencia académica.
Para el Psicoanálisis Budista, el saber lo que todos conocen no es la verdadera sabiduría, pues ésta comienza en el plano en el que los otros no saben. Por ello, la verdadera ciencia meditativa se encuentra más allá de la ciencia académica.
Para el Psicoanálisis Budista, el saber lo que todos conocen no es la verdadera sabiduría, pues ésta comienza en el plano en el que los otros no saben. Por ello, la verdadera ciencia meditativa se encuentra más allá de la ciencia académica.
Para el Psicoanlisis Budista, el saber lo que todos conocen no es la verdadera
sabidura, pues sta comienza en el plano en el que los otros no saben. Por ello, la verdadera ciencia meditativa se encuentra ms all de la ciencia acadmica.1
A travs de la cruel visin freudiana,2 la articulacin Gautama-Lacan transmite
que el goce inconsciente es un mal porque entraa el mal del prjimo.3 As, el Maitriyana presenta al aprendiz la tesis del cruzamiento hacia la frontera del Ser, es decir, hacia el ms all del principio del bien que constituye la tica de lo bello, la cual es el Arte Espiritual y la Sublimacin (Nirodh).
Concordantemente, el eje central de la sntesis dialctica del Psicoanlisis Budista
es la comunin con una tica de la Vacuidad. Para la articulacin Gautama-Lacan ese Camino analtico meditativo posiciona un sujeto trans-tico, que tras haberse reconciliado con su falta-en-Ser puede hacer poesa con la traumtica situacin existencial de la finitud, lo que en trminos clnicos se conoce como Cura (Nirvana) de la frustracin generada por la escisin (Spaltung).
Precisamente, el Ser Libre e Iluminado (Arhat-Bodhisattva) es la personificacin
de la estructura sublimatoria (Nirodh), pues al atestiguar la imposibilidad fundamental del sujeto de escapar del Deseo (Kama), encarna as el prototipo perfecto del semblante del psicoanalista budista que evanescentemente ha encauzado el Deseo hacia el saber-no-sabido.
De esta manera, la figura del maestro espiritual revela la posibilidad de una
evolucin de la subjetividad, demostrando en cada acto y palabra la importancia del amor incondicional (agape) al saber que caracteriza al dispositivo de la meditacin analtica. Esto se debe a que la sabidura del Ser Libre e Iluminado (Arhat-Bodhisattva) le es ajeno al aprendizante, siendo ste instaurado como un sujeto supuesto al saber inconsciente. Por ende, es evidente la trascendentalidad de la epistemologa del Psicoanlisis Budista con respecto a la psicologa clnica, pudiendo nutrir la prctica teraputica del sujeto por medio de la Atencin Plena flotante del maestro espiritual.
Pero el Discurso Analtico de la Espiritualidad ha demostrado que el Bien (Gute)
tiene su margen donde el goce inconsciente del sntoma tiene derecho al
1 R. de Gourmont, Le pas sur le sable.
2 S. Freud, El Malestar en la Cultura. 3 J. Lacan, Seminario VII: tica del Psicoanlisis. sufrimiento y la frustracin (dukkha).4 La articulacin Gautama-Lacan se refiere entonces al constructo metateraputico inventado por el Psicoanlisis Budista, cuyo smbolo actual emerge como Maitriyana. Bajo esta modalidad transdisciplinaria del Discurso Analtico, el Ser Libre e Iluminado (Arhat- Bodhisattva) opera como un metapsiclogo, desplegando su accionar a partir de su propio Despertar (Bodhi) para que la incompletud inefable del S-Mismo resuene en el centro mismo del Deseo (Kama).
Este profundo descubrimiento subjetivo ha llevado no slo a caracterizar al Yo
como una defensa ilusoria contra el aspecto inevitable de la existencia, sino tambin como una estructura sintomtica que expresa simblicamente el conflicto psquico fundacional del individuo mediante la constitucin de un compromiso entre el Deseo y la pulsin de muerte (mara). Por ello, el Maitriyana diferencia al sujeto de la instancia engaadora del Yo, el cual conserva un carcter cautivante e imaginario del que el aprendiz debe desprenderse para acceder a la concepcin analtica meditativa de subjetividad.5
En concordancia, el maestro espiritual desea que su aprendiz se libere (moksha)
de su compulsin a la repeticin (karma), apuntando al revolucionario proyecto de la trascendencia del Yo espejado. As, el fin de anlisis meditativo asciende al mundo un sujeto sublimado y ms aceptativo de lo Real y de su escisin o vacuidad constitutiva (sunyata).
En concordancia con el Maestro Freud, la funcin de la meditacin analtica no
se limita a responder a la demanda de no-sufrimiento, sino que ensea al aprendiz a aceptar que el sufrimiento (dukkha) es constitucional en la existencia. Este aprendizaje dialctico pretende transitar de la miseria neurtica a la desdicha cotidiana. As, para el Maitriyana, la frustracin constituye una Verdad organizada a travs de la Vacuidad, la cual es la Escisin (Spaltung) constitutiva del sujeto dividido por la fuerza pulsional del lenguaje. Ergo, el Ser Libre e Iluminado (Arhat-Bodhisattva) no responde a la demanda yoica del aprendizante con el fin de preservar la experiencia traumtica del Vaco, siendo un acto de renuncia que determina una situacin ms all de la culpa y el miedo en la cual el sujeto debe aprender a responder no cediendo impulsivamente a su Deseo.
El Discurso religioso metafsico trata de evitar, desplazar (verschiebung) y reprimir
(verdrangung) a la Vacuidad, mientras que el Discurso cientfico materialista directamente lo forcluye (verwerfung) al tapar el sntoma constituyente del ser- parlante. Por eso es que el Psicoanlisis Budista no puede ser confundido con los
4 J. Lacan, Kant con Sade.
5 J. Lacan, Seminario 2: El yo en la teora de Freud y en la tcnica psicoanaltica. Discursos de la religin y del materialismo, emparentndose nicamente con el Camino del Arte, la Sabidura y la Espiritualidad.
No obstante, los contemporneos paradigmas cientficos, como la Fsica
Cuntica y la Teora de Sistemas, han avanzado notablemente hacia una concepcin no-mecanicista y no-reduccionista de la humanidad y del Universo, priorizando una visin holstica de la vida que es concordante con las tradiciones espirituales que permiten a los pueblos una salida de la alienacin y la posibilidad de aprehensin de la traumtica experiencia del vaco. Es en este dilogo fructfero en donde el Maitriyana debe insertarse, reconociendo a las ciencias relativistas como un modo de expresin para la Verdad, por ser el smbolo de una realidad que pertenece a un orden superior. De este modo, el maestro espiritual concuerda con Platn al decir que lo sensible no es sino el reflejo de lo inteligible.6
Ms all de los recursos neurticos del individuo para sostenerse-en-el-mundo, el
Discurso Analtico de la Espiritualidad, por medio de la articulacin Gautama- Lacan, despliega una tica de lo Bello cuya frontera bordea los cnones de la metafilosofa y la poesa, recordando siempre que la Sublimacin del Deseo (Nirodh-Kama) no slo sigue siendo un buen amparo contra el goce inconsciente sino que adems es la caracterstica principal que define al Ser Despierto (Buddha).