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EL CONSENSO DE WASHINGTON ¥ LA CRISIS DE LA EDUCACION EN AMERICA LATINA Pano Gewnus Desde inicios de los aftos 70, y siendo su mareo de origen lt dictadura militar impuesta en Chile luego del desrocamiento del ‘gobierno constitucional de Salvador Allen, el programa de refor mas impulsado por el acoliberalismo en América Latina se ha ‘expand progzesivamente a casi todos de los paises de la regiin [a frig! insrocionalidad que marcé la tansicién hacia la demo- cracia en aquellas naciones que supetaban la traumétiea expetien- cia de lagas dictaduras, por un lado, por otro, las peculiaridades de regimenes polticos democriticos de carieter eutelar y con un alto grado de corrupcién, en los poeos paises que no enfrentaron spobiernos de facto durante este periodo, constituyeron factores _propicios para la expansida del neobiberalismo en América Latina! leone de Wasingon te La poderosa hegemonia que Fue ganando dicho proyecto acabé de ctistalizarse durante los aos 80 a patie de I apicacién de un con- junto de reformas orientadas a garanizar un riguroso progeama de ajuste econémico como producto de la Tamada crisis de la duc. “Ta ocroxia oeoibelpromovida por ls orpaismos fnanieos internacionales, especialmente el Banco Mundial y el Fondo. Monetario Internacional, fue asumida por las éites politicas y ‘econémicas locales como la gniea receta wilida part superar ef Aéficit pilico y estabilizar las convulsionadas economlas de la regién, Este nicleo de doctrnas, ast como Ia restica que pretende darls sustento y legitimacion discursing, se ha Fundado en un apt- rente acuerdo plobal que ha kio peneteando capilarmente en el sentido comin de las administrciones gubernamentales latinoa- ‘mericanas. Los medios académicos y periodistcos han populaiza do este conjunto de propuestas y diseursos como cl Consenso de Washington que subyace en las dessiones politias de gran parte delos gobiernos de la regisn’. La valider de esta fOrmola ha sido cuestionads y diteutda por ‘aumerosos autores, Sin embargo, evalquier estudio comparativo ‘medianamente riguroso acerca de ls polticas pblieas en los pal ses ltinoamericanos no s6lojustifca el so de este concept sino aque demuestra la necesidad de ampliar sy aleance mas alla de los limites alos cuales ha sido habitualmente restringido. Ba efecto, si bien casi con exclusividad la expresién aewads por Joba Williamson ha sido wsada para hacer referencia general a las pol cas de juste econdmico, es posible defender la tess de que existe ‘ambién un Consenso de Washington en el campo de las polteas educativas. Fsto puede permiticnos reconoeer los dos aspectos articulados através de los cuales se vehicula el proyecto neoliberal como construccidn hegeménica?; revaloizand, al mismo tempo, ms Pub Gets 1 papel activo que ha tendo la construccin de un nuevo sentido omni tecnocttico en la orientacin de ls politcas guberoamen- tales implementadas en América Latinas, El llamado Consenso de ‘Washington resume ambas dimensiones: da cuenta del programa de reforms instucionales levado a eabo (en nuestro caso spect fico la reforma educativa) 5, al mismo sempo, de Ia retiea des- plegada por los gobiernos que las impulsan y pretenden, legitmatlas. Sobre este asunto tata el presente trabajo. EL CONSENSO DE WASHINGTON EN EDUCACION Quien estudi los programas de estabilzaciin y reforma econé: ‘mica en los paises latinoamericanos pod reconocer entre ellos tuna notable homogencidad. Ksta earacterstca también puede see identifcada en ls propuestas de refotma educativaevadas a cabo en la region. Tal regularidad se verifiea en la expansién de un mismo ntcleo de diagndsticos, propuestas y argumsentos “oficiales” acerca de la ersis edcativa y de sus supuestassalidas asf como en Ja circulacion y el impacto (recto € indireeto) que los documentos y “recomendaciones” del Banco Mundial y del FMI tienen eft Sefinicién de las politicas puiblicas destinads » este sector. Un. ‘nuevo sentido comin tecnocriico ha también penettado expla mente en los Ministerios de ducacién orientando los diagnésticos yylasdecisiones politieas de los administradores del sistema escola La regulaidad y semejanza entre las politicas educaivas desarvolt das en los diferentes paises dela repidn, mas alli y contea ls dife- renciasespecifcas de cada caso nacional, ha pasa a ser una de las catactristicas mis destacadas de ls reforms escolaes implemen- tadas durante los ikimos quince afos. Siendo asi se ha tornado cada ver mis diffe reconocer alguna dvergencia sustantiva en las ens de Waring 10s acciones y en los discursos de quienes actualmente orientan las propuestas de cambio edueativo en Amétiea Latina’ Una retérica y un niicleo de propuettas comunes orienta las politicas de ajste implementadas en la esfera educacional, lo cual tno exprest otra cosa que la partcularidad que asume el Consenso de Washington en un area priositari de ln reforma social impulsa td por el neoliberalisma, De hecho, podemos decie que este con juoto de discursos, ideas y propuestas sinttiza Jo que podtia ser tefinida como la forma neoliberal de pensar y disefar la reforma cehativa en ln América Latina de los aos 9. Ess posible carcterizar el Consenso de Washington en educi in tratando de respondes a cuatro interrogates: Ze6m0 entien- den Jos neoliberaes la crisis educative? zquignes son, segtin esta perspectia, los culpables ell; zqué estategias eben ser defindas pats salic de dicha crise) zquiénes deben ser consultados, desde ‘esta Optica, si se pretende encontrar una solucién alos problemas, ‘que hoy enfrenta la escuela? ‘Trataré de responder a estas preguntas apelando a un critrio ‘qos, a pesar de ser exageradamente generalizador, puede ayuda ‘nos a reconocer las regularidades, los aspectos plobales, los nicleos ‘comunes e invariantes de Is politica educativa en América Latina, ‘mis alli de las especificidades locales. La ars, Desde la perspectiva neoibers, os sistemas educativos Intinosmericanos se enfzentan hoy, bisicamente, a una crisis de ef ciencia,eicacia y produetvidad, mas que a una ctiss de universal zacién y extension de los sexvicios oftecidos. La expansi6n acelerada de la oferta edocativa durante la segunda mitad del siglo se produjo,segin este argumento, sn que la misma haya ido acom- pada de una distibucion eficente de los recursos asignados al fectory sn un efiss contol de la peoductivided aleanzada por ls a Pale Genie leone de Washing a instuciones escolares. De est forms, se interpreta que los siete ‘mas educativos ltinoamericanos han crecido cuanttaivamente sin ‘garantizar un consecuente crecimiento cualitatvo. Bl desafio de I “universalizaciéa, habiéndose cumplido, fv sleanzado a expensas de un progresivo detrioro dela caltlad y de los indices de productvi- dad de las instituciones escolares. América Latina se estaria enften- ‘ando asf a una profunda crisis de gerencia, de management de as politcas educatvas en sunma, a una profunel criss de elie. En Ia dptica neoliberal, dicha exsis express la incapacidad estructural del Estado para adminisuar las politicas sociales. Este hecho, siendo wn atsburo general del asistencilismo estatal, se ‘exptesa eon una peculiaridad propia en el ampo educativo la ti sls de productividad de la escuela no sintdza otra cosa que Ia eri sis del centralismo y la burocratizacién propias de todo Estado. interventor. Los gobiernos han sido, segin esa perspectiva, inc paces de asegurar Ia democratizacin de I educacién mediante el aceeso de las masas a ls instcaciones educaivas yal mismo tiem- po, a eficencia productiva que debe caracteizar a las pricticas ppeilagdgicas en las esculas de calidad Semejante diagnéstico se fundamenta en tres premisas extensi- bles 2 todo el campo de las politieas sociales: a) los gobiernos no sélo han sido incapaces para asegutar calidad y cantidad, sino que ellos son estructurlmente ineptos para combinar ambas dindmi- cas; b) ln expansion de los servicios educativos es un objeivo ya, conquistado por casi todos los paises de América Latina, sendo los indices de exclusion y marginalidad edueativa expresin dara ‘dela falta de eficieneia del sistema y no de su escasa niversaliza- ‘in; «) la posbilidad de combina ealidad y eantidad con esiterios, ‘gualitaros y unversales es una falsa promesa de los Estados inte ventoresy populistas En la perspectiva neoliberal, la perniciosa penetracién de la polities en Ia esfera educativa a producido un contaminante ef to improduetivo que se constitaye en In eausa Fandamental de fos males que aqucjan ala escuela, La polisca se apoderd del espacio escolar al ser reconocide que éste debiafancionar como un dmb to fundamentalmente pablico y estta. La naturalcza piblica y el smonopolio estatal de l edueacidn conducen, segin esta perspeet ‘va, una inevitable ineficacia compettva de la escuela, Existe uns criss de calidad porque los sistemas educativos latinoamericanos no se han configurado como verdaderos mercados escolares regu- lados por una lopica inter-insttucional flexible y meritocritca. La ‘seul esti en criss porque en ella no se han institucionalzado los cterios compettivos que garantizan una distibucién diferencia del servicio que se fundamente en el métto y el esfuerzo indivi- ‘dual de los “usuario” del sistema, En su émbito no se ha estable- ido el necesatio sistema de premios y eastigos que recompensa © ‘snciona las acciones y decsiones individvales; en suma, un sste- ‘ma donde los “mejores” tiunfan y los “peores” fracasan, La ersis de calidad expresa, po otto lado, I incapaciad geren- cial del Estado para administra los inmensos y apatentemente ingobernabes sistemas educativos nacionales, Se tata de un com= plejo problema administrativo cuya solucién no requiere un fsumento de recursos sino una asignacién mis eficax de los mis- ‘mos. De abi, que los gobiernos neoliberales se esfuerzan en enfati- sar que la cuestién centeal no radica en aumentar el presupuesto ceducativo, sino “en gastae mejor”; que no hacen flea mis traba- dores de la educacién, sino “docentes mejor formados y eapacita- dos”; que no hace falta constrie mis escueas, sino “hacer un uso ris racional del espacio escola”; que no hacen fala mas alamnos, sino “alumnos més responsables ycomprometidos con el estudio”. abl Gent Con los mismos recursos financieros, la misma cantdad de maes- tros y macstras, de alumaos, de escueas y de aula, los gobiernos ncoliberales prometen hacer una verdadera revolucién edvcatva Para cll, sostienen, se precisa de una condlcién inevitable: impol- ‘sar una profindla reforma administrativa que econozea que sélo el mercado puede desempefiar un papel eficaz en la asignacién de recursos ¥ en ln produccién de la informacién necesatia pats implementacion de mecsnismos competitivos meritoeriticos que otienten los procesos de seleccién y jerarquizacién de ls insticu- clones escolaresy de los inivduos que en ells se desempetian. Se trata, en definiiva, de transfer In educacin de la esfera de Ia pollia a la esfera del mercado, negando su condicién (teal 0 hipotttica) de derecho social y tansformiadola en una posibil: dad de consumo individual, variable segin el mézito y In capaci: dad de los consumidores. La edueacién debe ser pensada como tun bien sometido a las reglas diferenciales de la competencia. Lejos de ser un derecho del que gozan los individuos dada sa, condicién de ciudadanos, debe ser transparentemente establecida como una oportunidad que a los individios emprendedores, a los ‘consumidores “responsables”, se les presenta en la esfera de un ‘mercado flexible y dinimico (el mercado escola). La reforms administratva propuesta por el neolberalismo se orienta a des- ‘mantelar ln educacin pabliea, a transfertla la esfern de la eom= petencia privaca. Reducida a su condicién de mercancia, la educacién sélo debe ser protegida no por suptestos derechos “sociales, sino pot los derechos que asisten el uso y disposicién de la propiedad privada por parte de sus legtimos propietatios. [Bs en este matco en el que se reconeeptuaiza la nocién de ciuda- ania mediante una revalorizscion de a accién del individuo en tanto que propictario que elge, opta, compte para accedet (com- teats de Weshingon fe prat) un conjunto de propiedades-mereancias de diversa indole, siendo la educacién una de ellas El modelo de hombre neoliberal ‘sel ciudadano privatizado, responsable, dimieo: el consumidor Lae enpable. Siendo as es rlativamente fil avanzar en la iden tiacién de los “culpables” de la ersis. Existen, dese esta pers pectiva, algunos tesponsables que, de forma directa o inditecta, han aetuado promoviendo y profundizando la dinémica improdvc- tiva de la escuela, En primer lugar, obviamente, el modelo de Estado “interventor” ha sido el principal culpable y promotor de Ia crisis a la que hoy se enffentan las instituciones educativas. Por ‘otto lado, los grandes sindicatos (especialmente las organizaciones, de trabajadores yttabsjadoras de la educacibe), 2 pesar de su opo- sicin y resistencia 2 las polticas gubernamentales, también son. identfieados por e} neoliberaismo como uno de los principales calpables de la ersi educativa, En efecto, los sindicatos han justa- mente exigido al Estado aquello que, en la perspectiva neoliberal, ‘genera la propia crisis: mas intervencién, aumento de los recursos, criterios igvalitarios, expansin de la escuela piiblica, ete. Los ‘biernos ltinoamericanos han tenido en los sindiestos un enemi> {go pansdoral. Desde esta dptica, la accién sindieal al haber reafir- mado (y exgido) Ia centzlidad del Estado en la planifieacin y el disefio de Ins politieas educativas, se ha transformado en una barrerainsslvable par la modernizacién de los sistemas escolares, as como ha impedido la taasformacidn de los mismos en un con- junto de mercados competiivosyflexibles. ‘Sin embaago, se apresuran a reconocer los eficentes felmmpos el consenso neoliberal, la euestién no se agoen al. i asi fuera, la simple “reforma” (0 destruccién) del modelo de Estado populis- ta/interventor y cl debiltamiento de las estrategias de resistencia sindical, garantizatian por si mismas el ambiente favorable para at abl Gent ‘una mejora de la ersis edacativa que enfeentan la naciones latino americanas. A pesar de que dichas condiciones ya se han produc do en algunos paises de la rein, la eis no parece tenet una via de solucion en el corto plazo. Ocurre, argunientan los expertos ali reads en las fas bancomundialstas, que hay un teeer gran eul- pable de I crisis educadiva: Ia sociedad. Imponer (0 “consensuar”, {que en la terminologia neoliberal quiere decir més o menos lo ‘mismo) condiciones de mercado que garanticen una competencia cfectiva entre las institaciones escolaes y los aetores que en ells intervienen, supone un gran desafio cultural, Bl Estado de Bienestar cred, por el contri, as condiciones de una profunda indisciplina social basada en l confianea que Ia comunidad acabé depositando en las falsas promesas que los propios Estados han formulado y que los sindicatos han exigido: la necesidad de cons- truir una escuela pablica, gratuita y de calidad pata todos. Perdiéndose el componente cultural que da sustento a la compe- tenciay al éxito 0 al facaso fundados en crtetios meritocriticas, se pierde inexorablemente ~dicen~ la étiesindivideslitta que reco” nove el valor del esfuerzo, de la trea atdua constante, del amor al dinero yal progreso materia, la admitacin alos trunfadores a satisfaccién espisiual y material de ser un ganador en la Vida, et [Las sociedades latinoamericanas no han cultivado, aparentemente, este tipo de principios ticos. Su perezoso coleeivismo no les ba permitido reconocer el valor de la cultura del trabajo; acttud ésta ‘que terminé por delegar en un Estado falsamente patesnalsta la Solucisn de los principales problemas que aquejan la vida dasa de los individuos, {La educacién pensada como “capital human” inivdsal debe set um asunto que compete pura y exchusivamente a a esfera de las decisiones y eleeciones privadas que cada uno precisa realizar con Leones de Weabingon Be Lobjeto de mejorae su posicdn relative en los mereados de sctuat. Siendo la educacién una inversin cuyo retoeno inmediato es fundamentalmente individual, la ransfetencia al Estado de cha responsabilidad convierte a éste en wna instanca inoperante yal individuo ieresponsable e incompetente en una de la causa iis evidences dela ess dela escuela. EI neoliberaismo privatiza todo, inclusive el éxito y el fncaso social, Ambos pasan a ser consideridos ana vasible dependiente dal conjunto de opciones individuales mediante las cuales las per- sonas se uggan dis a dia su destino, Sia gran mayoria de los indi- viduos es responsable de un destino no demasiado pratificante c= porque todavia no han sabido reconocer las ventajas que ofzece el miétit y el esfuerao mediante los cuales se triunfa en la vida. Hay ‘que competir,y una sociedad moderna (y “Mbre") es aquella en a cual s6lo los mejores triunfan. Dicho de manera simple: la escuela fanciona mal porque las personas no eeconocen cl valor del eano- cimiento ¢ invierten poco en su “capital humana”; los profesores teabajan ml y 90 se actualizan; los alunos hacen como si ext- lian cusndo en realidad pierden el tiempo, ete. La sociedad no sélo sufte la erisis de In edueacién, Ella también la produce y produce ‘La retérica neoliberal enfatioa asi que debe desconfirse de Ia ‘capacidad supuestamente milagrosa del gobiceno para mejorst Ia calidad de Ia escuela. Semejante tarea depende mucho més del cempefio y del esfuerzo individual de ls personas y las fala que de ls niciativas que pueda (0 quiets) implementa el Estado. Por foto lado, siendo la sociedad también responsable de la crisis de productivided del sistema educativo, confiar en que ella como con- jum indiferenciado puede eficazmente formular una solucin via- ble a este problema, es, en la perspectiva neoliberal, tan ilusorio ist Pb Get Eteatcte de Wehigon fe ‘como confiar en que el gobierno lo hark, Deseonfia del Estado y de la sociedad es, de esta forma, el primer paso para reconocer que Ja trnsformacidn de la educacién depende sélo de la eapacidad, a inventiva, cl esfuerzo y el mérito incesante de cada individuo (maestios, alunos, personal no docente padres, ete) para cam- bia su propio trabajo en su propia excucla. Se trata de wna llamacla a que cada uno “ocupe su lugar” y no espere soluciones milagrosas justamente de aquellos ambitos que han creado las condiciones propicias para cl desarzollo de la crisis. Ba suma, el cambio edues- tivo depende, en apariencia, de que “eada uno haga lo que tiene {que haces” y reconozcs la responsabilidad que ha tenido con rela- ibn alla crisis de calidad de la escuel Lar estas. Bl diagnéstico de la ersisy Ia identifieacion de sus aparentes responsables constieuyen el marco orientador de las cstrategias que el neoliberalismo define para superar la actual crisis educativa. En efecto, deste dicha perspectva, salir de la crisis supone desarrollar un eonjunto de propuestas a niveles macro y ‘micto institucionales mediante las cuales sea posible institacional- zat el principio de la competencia que debe regular el sistema eseo. lar en tanto mercado educative. Dos grandes objetivos dan coherencia y atraviesan horizontalmente tales estrategas: ) la recesidad de estblecer mecanismos de contol de calidad (en la ampliaesfera de los sistemas edueacionales y, de manera especitia, hacia el interior de las propias insttuciones escolares); yb) la nece- sidad de articular y subordinat Ia produceién de sistema educativo alas demandas que forenula el mercado de trabajo. El primer objetivo garaniza la materalizacién de los citados prin- ipios del mérito la competencia. El segundo, da sentido y estble- ce el horizonte de las polticas edueativas al mismo tiempo que permite precsar los citerios necesarios pars evaluat I pertinence de Ins propucstas de reforma escolar. Hs el mercado de trabajo duien emite las sefales que deben orienta las decsiones en mate~ sia de politica educativa. Bs la evaluacin de las insttuciones esco= lates y el establecimiento de eriterios de ealdad, lo que petmite dinamizar el sistema mediante una logiea de premios y castigos que estimulan la productividad y la eficiencia en el sentido ante riormente destacado. 1 limitado espacio de que dispouemos aqui no nos permite Aesarrollar de manera especties Ins caracteristcas y el contenido aque asumen Ins estrategias derivadas de estos objetivos. De ex ice forma, es importante destacar que las propuestas neoibers- les combinan dos logicas aparentemente contradictorias: la centralizacién y la descennalizacion. Generalmente, se enfatiza esta ultima como la earscterstiea fundamental de lo programas de reform educativa impalsados por el neoiberaismo, lo ewl limita nuestra comprensid estica de los mismos, En efecto, por an lado, las politica de ajuste edueativo promo- Vidas por el Consenso de Washington se fundamentan en una ‘vigorosa descentmlizacn de funciones y responsabilidades en el fmbito educativo: se transfieren las instituciones escolares de la jursdiccion federal ala provincial y de ella ala esfera municipal se eopone repasar el fondo piblico hacia niveles cada ver mis ricto, evitando asi Ia interferencia “perniciosa” del centalismo cesttal; se desaticulan los mecanismos unificados de negociacicn ‘on las organizaciones greminles de los trabajadores de Ia educa- dn (dindmica que tiende a cuestionar la validez misma de las eati- dades sindicales de sivel nacional y regional); se flexibilizan las formas de contratacion y las retrbucionessalaiales de los colect- vos docentes. Pero, por otto lado, yal mismo tiempo, se leva a ‘cabo una no menos poderosa eststegia centralzadorafundada en: ae Pal Gent 4) desarrollo de programas racionales de evaluaci6n de Ios siste- mas educativos alammente centalizados en su disefo ¢ implemen- tacién (bésicamente, pruebas de rendimiento aplicadas a Ia ppoblaciéa estadianti; b) el disefio hipercentralizado de reformas Ccurricuares a parti de las cuales establecer los contenidos bisicos ‘de un Curriculum Nacional, e la implementaeiin de programas nacionales de formacién de profesores que permitan la sctaliza ‘cién de los docentes segin el pln cuticular esablecido en a cits sda reforma. En suma, la salida que el neoliberaismo encuentra la crisis ‘educativa es produeto de la combinacién de una doble logca cen- tralizante y descentalizante: centraizacién del control pelagSxico (@ nivel curricular, de evaluacién del sistema y de formacin de los docentes) y descentrlizacin de los mecanismos de financiamien- toy gestion del sistema, “Lar exert. Riel 20/1 Univesda Fese de Ro Grande do 1995 Las aminisncones eoiberes fan denscada con ea ex ms és la second de deste progr de cad total en edocacio, apelin paella» na sei de exegesis de cone medion yr én se lon proceaos pradusenswansTerdos a to escola Sia excel Abe sex pea como ana empresa, el debe set esha como se eas ‘opacid competi de cuaguee fms. Hemor raza una xcs x eos ‘nfogucsreduccionstss cn GENTIM y'T. Da SIVA (cls) Newel, Drala Tt Fagie.Vie oo, Voss, Psp, YH, ° Ua importnte nm de gobimoslinarericanos han implementa + promovido programas de alopein y/o eteaiin de ecu pox pate de {Enprestiony endaes emprorres. La apcacin los enpcsoe “hans ‘roa prs que adopten ws ecole fecuent nos dacs de ran part Astor betex pcos netbers en los pater de sven, Fn ta en of Preemie Carlow, en So pier mene al pats ddiado exci tmeni ls cuestign dca somtvor kt eta ot mat my, a emp ad: ain eer err od ot alanis etc ‘Mee ceo! nda al he So Ps, 08/02/1995), "creo que, en Geto semi, este proceso ha renin efecto colar oso. Lor eueadores Gieoshinomereanorcomenseton 4 prespare Eon ls preduccones de us cols con y vier Ls ignore nn {ie fablacascterendo mucrasurncia de iereanbioe dite low lomo Stow comenat et ttf de mance nope, tae pregreatee WVéqae N. Cross, An $0F. A amg tos, Sx, Sao Pao, 1S Una desi sale el pape Gero por el maewo igopoko monaco ls fd ye mat jratguendat tone ineroaconas depo bli. > pacde rnconiare en, CINSNAI, 1 aed dbl amd, Soo Palo, 19965 y, JM: Gonz Ghee de Pati Mis, mala dies UPR, Rio de fn, 197 "BAB Curcnono, Lapomon das, Leas, Bens Aie, 1988 a Pabis Got 18 N.C Gove, Banco Munda: pa € reform, em ID Tons IM. Wan! YS, HADDAD (es) 0 Ramo Mini polis edna Core ‘Sho Paso, 1996. M,C. avant ¥ JL: Pow, Desi she made aman, Pas ¢ “era io de Jane 13 3) Coc, wd haan, pl 9a Ri Ages ses As, 1995, 1 aa posi apcad sl ampo edoativ puede encontarse en: Bate Mandl Pride y tration. Examen del Bape Mad BIRD, Wathingon, 1996 7M. Foss, 0 Banco Mandl eda: reflexes sob 0 eu bras Jee, em: PGES (ed). 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Law aos Wy espe llment la primera mitad de fos 90, Turton el mareo de un espectacular iment dels pretaor cco a res Soi Fn 994 als fecusos ‘onstusn el254% de raidad del pestamos eecras pote Banco “Mundi sector educative sli, en ete Contest, un eeenienn po menat |presonane Sr conten cl eso de Bra em ejemplo ent ue atespacsin secon de ees consti, ene 198? y' 199, el ed {otal de recur inverts ye ef Panco und en lp ente 1991 y 1934, ‘ch investi cxec acs on 0 de os pretarosredvalos por ext int tela dl otal de ecrs iveride Vener De Tomas M. Warde S Haddad (ds) op. 1996 " Consiereéagal como referencia gener el imporane eta de F emuersy Ie Tere Ey, be J eons sos pe ec, UNESCO, Par, 1988 Hl majo de Reiners y Tibco se i lai {al ao ninoumsiane sno ue dee lence ud. De tal f, cs pot ie velar que snocae de a tendencisqueinicaeros ag pra Ames Litin tambien extenden a gran pare dos pases de Af y Aaa gue ap Elomnea de Watingon a acon on alcan programs de jue exter 0 sector fnancidos por e Banco Mond 2A. E, CALEAGNO y A. F.CALCNGNO, ain mae Raat de pe ems Aina, Buenos Aes Madd, 195.

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