Este documento habla sobre la práctica de aceptación de uno mismo y de los demás. Compara a las personas con las flores de loto y el barro, señalando que al igual que las flores no rechazan el barro sino que florecen gracias a él, las personas no deben rechazar sus "semillas negativas" sino aceptarlas para poder progresar. También enfatiza la necesidad de practicar continuamente la aceptación para transformar nuestros defectos en cualidades positivas.
Este documento habla sobre la práctica de aceptación de uno mismo y de los demás. Compara a las personas con las flores de loto y el barro, señalando que al igual que las flores no rechazan el barro sino que florecen gracias a él, las personas no deben rechazar sus "semillas negativas" sino aceptarlas para poder progresar. También enfatiza la necesidad de practicar continuamente la aceptación para transformar nuestros defectos en cualidades positivas.
Este documento habla sobre la práctica de aceptación de uno mismo y de los demás. Compara a las personas con las flores de loto y el barro, señalando que al igual que las flores no rechazan el barro sino que florecen gracias a él, las personas no deben rechazar sus "semillas negativas" sino aceptarlas para poder progresar. También enfatiza la necesidad de practicar continuamente la aceptación para transformar nuestros defectos en cualidades positivas.
Practicamos como la flor de loto y el barro. La flor
de loto no piensa: "No quiero el barro". La flor de loto sabe que puede florecer tan bella sólo gracias al barro. Para nosotros, ocurre lo mismo. Tenemos semillas negativas en nuestro interior, el elemento del barro, si sabemos cómo aceptarlo, nos aceptamos a nosotros mismos. La flor de loto no necesita deshacerse del barro. Sin barro, moriría. Si no tenemos deshechos, no podemos florecer. No deberíamos juzgarnos, ni juzgar a los demás. Sólo necesitamos practicar la aceptación y así progresar sin lucha. El proceso de transformación y sanación requiere prácticas continuadas. Producimos basura cada día, y por este motivo necesitamos practicar continuamente para cuidarnos de nuestra basura y convertirla en flores." - Thich Nhat Hanh.