República Bolivariana de Venezuela

Ministerio del Poder Popular para la Educación Superior

Universidad José Antonio Páez
Facultad de Ingeniería – Escuela de Mecánica

El Átomo, la Base de los Materiales.

Sección: 205N1

Integrantes:
Badiali, Luis. C.I.: 25.534.417
Báez, Sebastián. C.I.: 26.337.849
Parra, Carlos. C.I.: 25.090.545
Toro, Manuel. C.I.: 25.455.016
San Diego. Junio, 2017
 Índice:

Introducción 3
Átomos y Electrones 4
Tipos de Enlaces Químicos 5
Distancias Interatómicas 7
Arreglo Atómico 8
Sistemas de Coordenadas Atómicos 11
Espacios Intersticiales 12
Índice de Miller 13
Cristales Iónicos, Covalentes y Metálicos 13
Conclusión 14
Bibliografía 15

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 Introducción:

Los materiales son elementos que pueden ser transformados y agrupados en conjuntos,
los cuales pueden tener elementos de naturaleza real, es decir tangible, naturaleza virtual o
totalmente abstractos. Esto quiere decir, que los conjuntos pueden estar compuestos por
elementos tangibles, como por ejemplo piedras, arena, cemento, etc… o elementos de
naturaleza virtual como lo sería una aleación, que contiene hierro y carbono, los cuales no
pueden ser diferenciados a simple vista.

Es importante saber, que para la formación de un material, es necesario el enlace de

uno o varios elementos, los cuales pueden ser enlaces primarios o secundarios, asimismo
deben cumplir con ciertas concentraciones, ciertos procesos, de manera que obtengan las
características que son requeridas. En este orden de ideas, es importante saber qué tipo de
estructura tendrá el material, debido a que, de esto dependen las características que tendrá,
ejemplo, el vidrio es un sólido amorfo, es decir que, a pesar de ser sólido como una barra de
acero, no tendrá la misma estabilidad, la misma elasticidad, ni el mismo punto de fusión, el cual
tampoco es definido debido a su característica de ser amorfo.

El caso contrario al vidrio, y todos los materiales amorfos, son los materiales con
estructura cristalina, en el cual encontramos a los metales en general. Asimismo, la mayoría de
las aleaciones son de esta forma, con estructuras cristalinas de un elemento, a las cuales son
añadidas moléculas o átomos de otro material dentro de los espacios intersticiales.

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 Átomos y Electrones:
Los átomos son las unidades básicas de la materia y, la estructura que define a los
elementos. Los átomos están compuestos por tres partículas: los protones, los neutrones y los
electrones.

Los protones y los neutrones son más pesados que los electrones. Residen en el centro
del átomo, que recibe el nombre de núcleo. Los electrones son extremadamente ligeros,
permaneciendo en una nube que orbita el núcleo. La nube de electrones tiene un radio 10.000
veces más grande que el del núcleo.

Los protones y los neutrones tienen, aproximadamente, la misma masa. Sin embargo, un
protón pesa más que 1.800 electrones. Los átomos siempre tienen el mismo número de
protones y de electrones, y el número de protones y neutrones normalmente suele ser el mismo
también. Añadir un protón a un átomo da lugar a un nuevo elemento, mientras que si añadimos
un neutrón forma un isótopo, una versión más pesada de un átomo.

La mayoría de átomos cuentan con tres partículas

subatómicas diferentes dentro de ellos: los protones, los
neutrones y los electrones. Los protones y neutrones están
empaquetados juntos en el centro del átomo (conocido como
el núcleo) y los electrones, que tienen un tamaño mucho más
pequeño, zumban alrededor por la parte externa.

Partes diferentes dentro de un átomo

El Núcleo: El núcleo fue descubierto en 1911, aunque

sus partes no fueron identificadas hasta el año 1932. Virtualmente toda la masa del átomo
reside en el núcleo. Este se mantiene compacto por la “fuerza fuerte”, una de las cuatro fuerzas
básicas de la naturaleza.

La fuerza existente entre los protones y los neutrones sobrepasa a la fuerza eléctrica de
repulsión, según las reglas de la electricidad,
empujando a los protones en dirección contraria.

Descripción detallada de un esquema de un átomo

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 Protones: Los protones están cargados con partículas positivas y se encuentran situados
en el núcleo del átomo. Fueron descubiertos en los experimentos realizados por Ernest
Rutherford entre 1911 y 1919.

El número de protones que existen en un átomo definen el elemento que es. Por ejemplo,
los átomos de carbono tienen seis protones, los átomos de hidrógeno tienen uno, mientras que
los átomos de oxígeno cuentan con ocho. El número de protones que hay en un átomo se
conoce como el número atómico de un elemento. De la misma forma, esta cantidad determina
el comportamiento químico de un elemento; la tabla periódica de los elementos los organiza a
medida que el número atómico va en aumento.

Electrones: Los electrones tienen una carga negativa y se encuentran atraídos de forma
eléctrica hacia los protones que están cargados positivamente. Están situados alrededor del
núcleo atómico en las vías denominadas orbitales. Los orbitales internos que rodean el átomo
son esféricos pero los que se encuentran en los orbitales externos son mucho más
complicados.

La configuración electrónica indica la manera en que los electrones se estructuran o se

modifican en un átomo de acuerdo con el modelo de capas electrónicas. Utilizando la
configuración del electrón y los principios de la física, los químicos pueden predecir las
propiedades de un átomo, como su estabilidad, su punto de ebullición y su conductividad.

Neutrones: Los neutrones son partículas sin carga que se encuentran dentro del núcleo
atómico. La masa de un neutrón es ligeramente un poco más grande que la de un protón. Al
igual que estos, los neutrones están formados por quarks. Esta partícula fue descubierta en
1931 por James Chadwick.

Tipos de Enlaces Químicos:

Cuando dos o más átomos se unen para formar moléculas, se mantienen unidos mediante un
puente entre sus electrones más externos. A este puente se le llama enlace químico. No todos
los enlaces químicos tienen las mismas características. Existen 3 tipos de enlaces:

● Enlace Iónico: Los enlaces iónicos son los que se

dan cuando se combinan un elemento metálico y
uno no metálico. El elemento no metálico le falta
un electrón para completar su órbita, por lo que se
convierte en receptor, con carga negativa y se le
llama anión. Los elementos metálicos tienen un
electrón en su última órbita, que es con el que se
acoplan a otros átomos. Este electrón externo le
da al átomo metálico una carga positiva, y le se
llama catión. En este caso los átomos se atraen

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 por fuerzas electrostáticas por las que el anión (el elemento no metálico) atrae al catión
(elemento metálico). Es decir, que un átomo cede y otro absorbe un electrón. Estos
compuestos son sólidos químicamente estables. Cuando se disuelven en líquido, se
rompe el enlace, y permanecen en el líquido con sus cargas eléctricas. Esto permite que
la solución sea conductora de la electricidad. A esta solución se le llama electrolito.

● Enlace Covalente: Los enlaces covalentes son los enlaces con los que se unen dos
átomos, y ambos comparten o intercambian electrones. Estas uniones son más
estables. Hay varios tipos de enlaces covalentes.

○ Enlace Covalente Polar: Estos enlaces son los que existen cuando dos
elementos no metálicos diferentes se unen mediante el enlace covalente, en el
cual, por ser diferentes las moléculas, pues cada una de ellas tiene una carga
positiva o negativa (como en los enlaces iónicos), pero que en este caso se une
con enlaces covalentes. Estos enlaces covalentes son asimétricos, es decir, un
átomo puede tener dos electrones para ceder (como el oxígeno) y dos espacios
para absorber electrones, mientras que el hidrógeno tiene un electrón para ceder
y un espacio para completar. Por las características de cada elemento, el
oxígeno requiere dos electrones para completar su órbita, mientras que el
hidrógeno sólo requiere uno. Por ello se combinan en proporción de una
molécula de oxígeno por dos de hidrógeno.

○ Enlace Covalente No Polar: Es el enlace con el que se unen dos átomos de un

mismo elemento no metálico, para formar una molécula. Como ambos átomos
tienen la misma carga, no hay uno que predomine en la atracción, sino que
ambos están equilibrados en su carga energética y sus enlaces son simétricos,
es decir, que ambos átomos comparten y reciben el mismo número de
electrones.

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 ● Enlace Metálico: Los enlaces metálicos son los
enlaces electrónicos con los que se mantienen
unidos los metales, los cuales toman una
forma cristalina en la que los electrones forman
una nube que mantiene unido el conjunto. Esta
disposición es la que permite que cuando se
hace circular una corriente eléctrica (flujo de
electrones) o el calor, éstos se desplacen los
electrones de los átomos circundantes,
transmitiendo el flujo eléctrico o calórico.

Distancia Interatómica:

Es la distancia desde el centro de un átomo y el centro del otro átomo que evita que los
átomos o moléculas se acerquen demasiado. Dependiendo del tipo de enlace, se ven
resultados diferentes en cuanto a la distancia existente entre los átomos. Es decir, si hablamos
de un enlace iónico, en el cual ambos átomos son de polaridades distintas, y asimismo ambos
radios atómicos son diferentes (por lo general), las fuerzas y energías aumentan fuertemente
con la disminución de la distancia interatómica. Finalmente, hay una distancia interatómica la
cual es llamada distancia de equilibrio, en la cual ambas fuerzas se igualan, es decir, que la
fuerza neta es igual a cero (0). Esta fuerza se calcula de la siguiente manera:

−k i e2 b
​ a=Fr → a2 =
1
a0 = ( k be2 ) n−2 , la cual resulta de igualar → F
i an

Siendo:
● "k i " una constante negativa de los elementos enlazados, función de las cargas
electrónicas transferidas.
● "e" la carga del electrón
● "a" la distancia interatómica
● "a0 " la distancia interatómica de equilibrio
● "b" y "n" características del par ionizante

En el caso de los enlaces covalentes, la distancia ao es igual a la suma de ambos radios

atómicos, es decir, a0 = R + r , y, en el caso de enlaces metálicos, se calcula de la misma
manera, suponiendo que si ambos átomos son del mismo elemento,​ a0 = 2R

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 Arreglo Atómico:

Para hablar de arreglo atómico, es necesario saber que el átomo es la entidad más
pequeña que influye directamente en las propiedades de los materiales. El tipo y la fuerza del
enlace determinan las propiedades físicas y mecánicas del material sólido que se forma.
Cuando se forman enlaces entre átomos existe afinidad química entre estos. En caso contrario,
quiere decir que no existe afinidad química, por lo tanto los átomos no se unen, quedando cada
uno de ellos bien separado de los, resultando elementos que son gaseosos a temperaturas y
presiones ordinarias. Asimismo, al haber afinidad química, existe una fuerza de atracción
electroestática (coulómbica) positiva de largo alcance, FA, que acerca mucho los átomo unos a
otros.

El término arreglo atómico es descrito por una o varias estructuras, vistas con distintos
grados de detalle. Los científicos e ingenieros en materiales no solo tienen que ver con el
desarrollo de materiales, sino también con la síntesis y el procesamiento de materiales con los
procesos de fabricación correspondientes a la producción de los componentes. La síntesis
indica la manera de fabricar los materiales a partir de elementos naturales o hechos por el
hombre. El Procesamiento revela el modo en que se conforman los materiales en componentes
útiles y para causar cambios en las propiedades de distintos materiales. Una de las funciones
más importantes de los científicos e ingenieros en materiales es establecer las relaciones entre
la propiedad y el funcionamiento de un material.

La estructura de los materiales se puede examinar y describir en cinco niveles diferentes:

● Macroestructura: Es la estructura del material a nivel macroscópico, donde la escala de

longitud es aproximadamente mayor a 1000 nm (nanómetros). Entre las propiedades
que constituyen la macroestructura están la porosidad, los recubrimientos superficiales y
las microfisuras internas o externas.
● Microestructura: Es la estructura del material a una escala de longitud de

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 aproximadamente 10 a 1000 nm. Comprende propiedades como el tamaño promedio
del grano, la distribución de ese tamaño, la orientación de los granos y otras
propiedades relacionadas con los defectos en los materiales
● Nanoestructura: Estructura con un tamaño Intermedio entre las estructuras moleculares
y microscópicas.
● Estructura atómica.
● Arreglos atómicos de corto y largo alcance

Los materiales se caracterizan por ser átomos de diferente naturaleza unidos para
formarlo. Dependiendo del tipo de material, puede presentar dos formas de enlace:

-Arreglo sin orden o con orden de corto alcance - Arreglo con orden de largo alcance

Cuando un el arreglo de un material es ordenado, se forman estructuras cristalinas,

conformadas por celdas unitarias, las cuales conservan las características de la red espacial. A
través de ella, se puede conocer el tipo de estructura cristalina, la posición de los átomos en el
material (Coordenadas X,Y,Z) y las direcciones cristalográficas.

Las estructuras se forman de la siguiente manera:

Existen 7 tipos de estructuras, también

denominadas sistemas, y 14 diferentes
arreglos, que son subdivisiones de los
sistemas mencionados. A continuación un
gráfico en el cual se aprecian:

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 Visualmente, algunas estructuras pueden parecer iguales, pero no es así, aquí la
explicación:

SISTEMA EJES Y ÁNGULOS ENTRE EJES

Cubico Tres ejes iguales perpendiculares entre sí

a=b=c α = β = θ = 90°

Tetragonal Tres ejes que se cortan en ángulos rectos siendo uno desigual
a=b≠c α = β = θ = 90°

Hexagonal Tres ejes coplanarios iguales, a 120° y un cuarto eje distinto,

perpendicular al plano de los otros tres
a=b≠c α = β =90° , θ = 120°

Ortorrombico Tres ejes desiguales que se cortan en ángulos rectos

a≠b≠c α = β = θ = 90°

Romboedrico Tres ejes iguales, formando ángulos iguales distintos de 90°

a=b=c α = β = θ ≠ 90°

Triclinico Tres ejes desiguales formando ángulos desiguales no rectos

a≠b≠c α ≠ β ≠ θ ≠ 90°

Monoclinico Tres ejes desiguales, dos angulos de 90° y un ángulo distinto a 90°
a≠b≠c α = β = 90° ≠ θ

Los metales, comúnmente están ordenados en 3 estructuras específicas:

-Hexagonal Compacto -Cúbica Centrada en el cuerpo -Cúbica Centrada en las Caras

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 Sistemas de Coordenadas Atómico:

En la actualidad el modelo atómico estándar y aceptado

por la comunidad científica posee diversas características tales
como que el átomo en sí y toda su configuración está
conformado y dispuesto en forma de esfera y orbitales que
describen circunferencias es por ello que para su estudio y
comprensión es necesario poder ubicarlos en el espacio usando
herramientas que nos permitan su análisis.

Para ello es necesario sistema de coordenadas que es un conjunto de valores y puntos

que permiten definir unívocamente la posición de cualquier punto de un espacio euclídeo, ​al
suponer en los átomos simetría esférica, se suele trabajar con un sistema de coordenadas
esféricas y polares dejando el sistema rectangular para otro tipo de estudio como lo es el índice
de Miller.

En los casos dependiendo de las

características del material hay
ocasiones en la que los átomos se
acuñan para formar cuerpos
geométricos rectangulares es propicio el
uso de un sistema rectangular y se
emplean para localizar las posiciones de
los átomos en la red o dentro de la celda
unitaria. La distancia se mide en
parámetros de red usando un sistema
cartesiano.

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 Espacios Intersticiales:

Se puede afirmar que un intersticio es el espacio que existe entre dos cuerpos o dos
partes de un mismo cuerpo a nivel microscópico cuando se aplica energía como calor a un
material se logra romper los enlaces que forman el material y se abre paso a un intersticio que
puede ser llenado con otro material creando así una aleación.

En las estructuras cristalinas los espacios vacíos (intersticios) es dónde pueden alojarse
los átomos dependiendo del material dicho espacio puede variar, cuando seis átomos iguales
se sitúan en los vértices de un octaedro, el espacio vacío que dejan en el centro se denomina
intersticio octaédricos, en el caso de que cuatro átomos iguales se coloquen en contacto, de
modo que sus centros forman un tetraedro, el espacio vacío que dejan los átomos en el centro
se conoce con el nombre de intersticio tetraédrico. Así, por ejemplo, el espacio vacío que queda
en el centro de la estructura cristalina constituye un intersticio cúbico

El conocimiento del número, tipo y ubicación de los intersticios de una determinada

estructura es una cuestión de relativa importancia, porque a menudo estos espacios vacíos
sirven de alojamiento a átomos extraños. La incorporación de átomos extraños en el interior de
la red de un material suele modificar drásticamente las propiedades de éste prueba de ello es el
acero que no es más que hierro al cual en los intersticios de cuya estructura se ha incorporado
una pequeña cantidad de átomos de carbono.

Por sí solo un intersticio no cumple su función si no se

sabe la proporción en la cual un material debe ser agregado
para mejorar sus características al máximo, este fue el
principal problema a la hora de crear las aleaciones ya que es
un estudio de prueba y error al pasar de los años la humanidad
y su búsqueda por mejorar la calidad de los materiales se han

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creado gran cantidad de aleaciones que se usan a diario y son necesarias para que el día a día
sea como lo conocemos.

Índice de Miller:

Los índices de Miller, en cristalografía, son un juego de tres números que permiten
identificar unívocamente un sistema de planos cristalográficos. Los índices de un sistema de
planos se indican genéricamente con las letras (h k l).Los índices de Miller son números
enteros, negativos o positivos, y son primos entre sí. El signo negativo de un índice de Miller
debe ser colocado sobre dicho número. El índice de Miller fue presentado por primera vez por el
mineralogista británico William Hallowes Miller en 1839. Existen además otras notaciones para
los casos especiales de cristales con planos simétricos.

Cristales Iónicos, Covalentes y Metálicos:

La estructura y propiedades, como densidad, dureza y punto de fusión, de los cristales,

están determinados por el tipo de fuerzas que mantienen unidas a las partículas. Un cristal
podrá clasificarse dentro de uno de estos grupos: iónico, covalente, molecular o metálico.

Los cristales iónicos poseen dos características importantes. La primera es que están
formados por especies cargadas; y la segunda, es que los aniones y cationes suelen ser de
distintos tamaños. La mayoría de los cristales iónicos tienen puntos de ebullición elevados, que
refleja la gran fuerza de cohesión que mantiene juntos a los iones. La estabilidad de los
cristales iónicos depende de la energía reticular; cuanto mayor es esta energía, más estable es
el compuesto. Además, lo sólidos cristalinos no conducen la electricidad ni el calor, debido a
que los cationes y aniones se encuentran en posiciones fijas. En el estado fundido o disueltos
en agua, los iones recuperan la movilidad y se convierten en buenos conductores. Además
presentan elevados puntos de fusión y son quebradizos. El cloruro de sodio es un ejemplo de
cristal iónico.

Los átomos de los cristales covalentes se mantienen unidos en una red tridimensional
únicamente por enlaces covalentes. Este tipo de cristal son extremadamente duros y difíciles de
deformar, y son malos conductores del calor y por lo tanto de la electricidad (ya que sabemos
que el calor y la conductividad tienen una relación directa) ya que no existen electrones libres
que trasladen energía de un punto a otro. Un ejemplo típico de este tipo de cristal es el
Diamante.

Los cristales metálicos, poseen la estructura más sencilla de todas, ya que cada punto
reticular está ocupado por un átomo del mismo metal. Generalmente poseen una estructura
cúbica centrada en el cuerpo o en las caras; pero también pueden presentar un
empaquetamiento hexagonal compacto. Debido a esto, suelen ser muy densos. En un cristal
metálico, los electrones están deslocalizados y tienen gran movilidad. Esto los hace gran

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conductores de calor y electricidad, además de darle buena resistencia al metal. Con respecto a
la dureza y los puntos de fusión, son muy variados.

Conclusión:

Es importante saber cómo se encuentran constituidos los materiales, desde la parte

microscópica hasta la macroscópica, ya que, como se ha descrito en el trabajo, de esto
dependen todas las características que lo describan. Es decir, si deseamos un material que
tenga alta dureza, alto punto de fusión, buena conductividad eléctrica y calorífica, tenemos que
tratar con un material que tenga enlace metálico.

Asimismo, tenemos que saber de qué forma de extracción y sintetizado, para extraer un
material generalmente el proceso comienza con cristales, los cuales pueden ser iónicos,
covalentes o metálicos, luego viene el proceso de sintetizado o manufacturado el material, es
decir, no es igual la resistencia que tendrá una viga de acero si el acero se trabajó a baja
temperatura con un prensado, a que se haya trabajado a alta temperatura con una extrusión.
Estos cambios de proceso hacen que el material se ordene de manera diferente, por lo cual las
características obtenidas serán diferentes, para diferentes usos.

Ahora, como fue explicado en el trabajo, se pueden calcular estas características en los
materiales metálicos, simplemente analizando una celda unitaria, la cual pertenece a la red
ordenada de átomos, mediante el uso de los índices de Miller, la cual reduce las direcciones y
los planos cristalográficos a tan solo un juego de 3 números, los cuales se escriben sin coma,
solo los 3 números mencionados.

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 Bibliografía:

● http://www.uclm.es/profesorado/maarranz/Documentos/MaterialesT3b.pdf
● http://www.mim-us.es/estructuras_cristalinas/intersticios.html
● http://depa.fquim.unam.mx/amyd/archivero/7.Atomodehidrogeno1_10971.pdf
● http://gestion.uniblog.uo.edu.cu/files/2015/09/Anejo1sistemasreferencia.pdf
● http://personales.upv.es/~avicente/curso/unidad3/naturaleza.html
● http://www.monografias.com/trabajos104/arreglo-atomico/arreglo-atomico.shtml
● http://comofuncionaque.com/que-es-un-atomo-y-un-electron/
● http://www.ejemplode.com/38-quimica/4045-tipos_de_enlaces_quimicos.html

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