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UNIVERCIDAD AUTÓNOMA DE QUERÉTARO

CIENCIA DE MATERIALES

PREPARACIÓN METALOGRAFÍCA

ALUMNOS
OSBALDO MORALES MARTÍNEZ
ALAN RANFERI CERVANTES HERNÁNDEZ
JOSÉ MANUEL MUÑOZ UGALDE

PROFESOR
DR. LUIS ALBERTO MORALES HERNÁNDEZ

24/09/2017
Introducción
Metalografía es el estudio de la microestructura, se puede emplear por la composición y el
control de proceso, para preparar una muestra y observar y registrar su microestructura.
Así como también es la ciencia que estudia las características estructurales o constitutivas
de un metal o aleación. (Azkelant, 2004)
Para examinar la microestructura, tenemos que preparar muestras de forma correcta para
que la verdadera estructura, libre de artefactos debido a la preparación, pueden ser
observadas y adecuadamente identificados, medidos e interpretados.
Microestructura es la estructura de una adecuada preparación de muestras según lo
revelado por un microscopio.
Microestructura se compone de fases. Una fase es físicamente homogénea,
mecánicamente parte separable de un sistema material. Un componente es una fase o una
combinación de las fases, que se produce en una configuración de características en una
microestructura de la aleación.
Los ensayos metalográficos consisten en la preparación y observación de una probeta
metálica mediante microscopios:
- Ópticos
- Electrónicos de Barrido (S.E.M.)
- Transmisión(T.E.M.)
Con el objeto de reconocer y valorar las microestructuras o las fases de los metales y
aleaciones. En las observaciones metalográficas se analizan las siguientes características
de las microestructuras y fases:
- Tamaño de grano,
- Cantidad (% de las fases),
- Distribución de tamaños,
- Forma y morfología de las fases presentes
Con esta caracterización de los metales se puede predecir y conocer las propiedades
mecánicas, de los materiales.
En esta práctica se desarrolla la preparación metalográfica de un metal para su observación
bajo un microscopio óptico, y con el equipo que se cuenta en la universidad se pueden
observar hasta 500 aumentos.
Para observaciones que requieran mayor número de aumentos sería necesario:

 Microscopía óptica con técnica de aceite entre el microscopio y la muestra para


mejorar el índice de refracción (hasta 2000 aumentos).
 Microscopía Electrónica de Escaneo o Barrido (hasta 100,000 aumentos).
 Microscopía Electrónica de Transmisión (hasta 500,000 aumentos).
Microscopio Óptico:
También se le conoce como microscopio de luz, y se utiliza para estudiar la microestructura;
sistemas ópticos y de iluminación. (Azkelant, 2003)

Figura 1 Microscopio Óptico

Descripción: A) Ocular, B) Objetivo, C) Portador del objeto, D) lentes de la iluminación, E)


Sujeción del objeto, F) Espejo de la iluminación. (Wikipedia,2010)

PREPARACION DE LAS PROBETAS PARA LA OBSERVACION


MICROSCOPICA INTRODUCCIÓN.
La metalografía es:
Esencialmente, el estudio de las características estructurales o de constitución de un metal
o una aleación para relacionar ésta con las propiedades físicas y mecánicas. Sin duda
alguna, la parte más importante de la metalografía es el examen microscópico de una
probeta adecuadamente preparada, empleando aumentos que, con el microscopio óptico,
oscilan entre 100 y 2000 aumentos, aproximadamente. Tales estudios microscópicos, en
manos de un metalógrafo experimentado, proporcionan una abundante información sobre
la constitución del metal o aleación investigados. Mediante ellos se pueden definir
características estructurales, como el tamaño de grano, con toda claridad; se puede
conocer el tamaño, forma y distribución de las fases que comprenden la aleación y de las
inclusiones no metálicas, así como la presencia de segregaciones y otras heterogeneidades
que tan profundamente pueden modificar las propiedades mecánicas y el comportamiento
general de un metal. Cuando el examen microscópico ha permitido la determinación de
estas y otras características constitucionales, es posible predecir con gran seguridad el
comportamiento del metal cuando se le utilice para un fin específico. Importancia parecida
tiene el hecho de que, con ciertas limitaciones, la micro estructura refleja casi la historia
completa del tratamiento mecánico y térmico que ha sufrido el material.
La experiencia demuestra que poco a nada se puede obtener del examen microscópico si
antes no se prepara la probeta, para obtener una superficie satisfactoria, con arreglo a
normas más o menos rígidas y precisas. Una preparación defectuosa puede arrancar todas
las inclusiones interesantes, destruir los bordes de grano, revenir un acero templado y, en
resumen, originar una estructura, por lo menos en la superficie, que no guarda ninguna
relación con la verdaderamente representativa y característica del metal. Está claro que el
examen de una tal superficie dará lugar a interpretaciones erróneas y a conclusiones
inadmisibles.
La preparación de la probeta consiste, en general, en obtener primero una superficie plana
y semi-pulida, mediante el empleo de papeles de esmeril de finura de grano creciente o
realizando este desbaste con discos adecuados sobre los que se deposita un abrasivo,
terminando con un pulido fino y final sobre discos provistos de paños. El final de la operación
es la obtención de una superficie especular que es la requerida para, después, efectuar el
ataque y observar adecuadamente la estructura. Uno de los factores más esenciales que
influyen sobre la técnica de la preparación de probetas es el cuidado con que se las maneja
en todas las fases de operación. De igual importancia es el trabajar con limpieza, porque
una partícula del esmeril o de una materia extraña puede inutilizar una probeta que sin ello
estaría perfectamente pulida. A intervalos frecuentes, durante el transcurso de la
preparación, tanto la probeta como las manos del laborante deben lavarse con agua y jabón.
Tal operación de limpieza es necesaria para evitar que la superficie se raye a causa de los
deterioros del papel de esmeril y es en particular indispensable cuando se pasa de un papel
a otro más fino.

TOMA DE MUESTRAS.
La elección de la muestra que ha de ser examinada al microscopio es de gran importancia,
ya que ha de lograrse una probeta representativa del material a examinar; por desgracia,
no se le suele dar toda la importancia que merece. Las probetas seleccionadas deben ser
representativas del metal a analizar y que permita hacer el estudio de este; por ejemplo, si
se ha roto durante el servicio una pieza y el objeto del estudio metalográfico es determinar
las causas de la rotura, la probeta debe seleccionarse y obtenerse de aquella región
particular de la fractura que pueda dar el máximo de información. Para poder hacer
comparaciones, una probeta de esta naturaleza debe complementarse con otra tomada en
una sección normal sana de la pieza en cuestión. El examen de ambos tipos de probeta es
deseable por que las inclusiones y otras características pueden no observarse
satisfactoriamente sobre probetas tomadas en una sola dirección.
Si la sección que ha de ser observada y ha de tomarse como probeta es relativamente
blanda, la separación puede hacerse mediante una sierra mecánica o manual. Cuando las
aleaciones son frágiles, como ocurre con las fundiciones y algunos bronces ricos en estaño,
se puede romper la pieza con un martillo y seleccionar un fragmento adecuado como
probeta.
DESBASTE GRUESO
La superficie que haya de observarse se debe de hacer primero plana mediante un
desbaste grueso. Cuando el área es grande, se puede terminar en un tiempo muy corto si
se le gira 90° mientras se desbasta. Ni durante el desbaste grueso, ni durante los
posteriores, intermedio y final, se debe aplicar la probeta contra el medio abrasivo con
presión demasiado grande. La presión excesiva no sólo produce rayas muy profundas,
difíciles de eliminar después, sino que también distorsiona intensamente el metal de la
superficie de la probeta.

DESBASTE INTERMEDIO
El papel de esmeril se coloca sobre una placa o sobre cualquier superficie bien plana y
limpia. La probeta se mueve longitudinalmente de un lado a otro del papel comprimiéndola
con una presión suave; la dirección del movimiento se mantiene constante, para que todas
las rayas producidas sean paralelas. El final de la operación sobre un papel está
determinado por la desaparición de las rayas producidas por el desbaste grueso o el papel
anterior, y para poder reconocerlo fácilmente se opera en forma que las nuevas rayas sean
perpendiculares a las anteriores; así es más fácil ver cuándo estas nuevas rayas sustituyen
totalmente a las anteriores más gruesas.

DESBASTE FINAL
El desbaste final o fino se realiza de la misma forma que el desbaste intermedio, pasando
del papel de esmeril empleado al número 00; en general se utilizan dos papeles, que son
el número 00 y el 000.
Cada vez que se cambia de papel se opera en la forma descrita anteriormente, a fin de
obtener rayas nuevas perpendiculares a las anteriores. Cuando la observación visual
Universidad Autónoma de Querétaro Facultad de Ingeniería Electromecánica Laboratorio:
Ciencia de Materiales 7 demuestra que sólo existen las rayas producidas por el último papel
empleado y se han eliminado totalmente las anteriores, la probeta está en condiciones de
ser pulida.

DESBASTE MECÁNICO
Un desbaste más eficaz se puede realizar mecánicamente, empleando un disco giratorio,
que se cubre con papeles de esmeril, sujetándolo mediante un anillo de fijación apropiado.
El disco debe girar a unas 600 rpm para el papel más grueso y a velocidades de preferencia
más pequeñas con los papeles más finos. En el desbaste mecánico es preciso extremar el
cuidado para que la presión excesiva no produzca sobrecalentamiento de las probetas, con
las consiguientes alteraciones estructurales en las probetas térmicamente tratadas y
distorsión exagerada del metal superficial.

DISCOS CON PARAFINA


Un disco con parafina es sencillamente un disco de pulidora cubierto con una capa de
parafina de alto punto de fusión o con un paño de billar o lona que se han impregnado con
parafina. Los discos para el desbaste se cargan, antes y durante la operación, con
suspensiones, en una solución acuosa de jabón o polvos abrasivos.
PULIDO GENERALIDADES
El pulido de una probeta metalográfica tiene por objeto eliminar de su superficie las rayas
finas producidas en la última operación de desbaste y conseguir una superficie sin rayas y
con alto pulimiento. El éxito del pulido y el tiempo empleado en la operación dependen en
gran manera del cuidado con que se haya realizado el desbaste. Si una probeta tiene
rayas profundas y gruesas, que no se han eliminado en la última de desbaste, se pierde el
tiempo y el trabajo, ya que estas no pueden ser eliminadas en un pulido fino.
Preferentemente hay que tomar precauciones para que la operación se realice en un
ambiente relativamente limpio de polvo.
PULIDORAS METALOGRÁFICAS

Figura 3 Pulidora Automática de discos

El pulido preliminar y el final de una probeta metalográfica desbastada se realizan en uno


o más discos. Tales discos son, esencialmente, platos de bronce de 20 a 25 mm de
diámetro, cubiertos con un paño de calidad apropiada. Los discos giran, generalmente, en
un plano horizontal, y es conveniente que cada disco posea su motor individual para facilitar
el control y ajuste de la velocidad de rotación.
Los equipos de desbaste y pulido automáticos ahorran, sin duda alguna, mucho tiempo y
trabajo del operador en las operaciones rutinarias de preparación de las probetas
metalográficas.

ABRASIVOS PARA EL PULIDO METALOGRÁFICO


Físicamente, un abrasivo metalográfico ideal debe de poseer una dureza relativamente alta;
la forma externa de las partículas debe ser tal que presenten numerosas y agudas aristas
y vértices cortantes; las partículas, si se rompen durante su uso, deben hacerlo en forma
que se produzcan nuevas aristas y vértices cortantes; por último, la naturaleza del abrasivo
debe de ser adecuada para permitir la eliminación de estas partículas y no interfieran
cuando se observe en el microscopio.

Polvo de diamante.
El abrasivo que más se aproxima al ideal es el polvo de diamante no adulterado y bien
clasificado. Se ha empleado mucho en el pasado para preparar probetas de aleaciones muy
duras, tales como carburos sinterizados de volframio o boro y recientemente se ha
extendido su uso, con gran éxito, para el pulido de las aleaciones y metales más comunes.

Alúndum.
Para el pulido intermedio o preliminar de las probetas metalográficas, en aquellos casos en
que tal operación se realiza, se emplea como abrasivo el alúndum (óxido de aluminio
fundido) y, a veces, carborundo (carburo de silicio) o carburo de boro, todos en un grado de
finura de 500 a 600 mallas. Se emplean en forma de suspensión acuosa, que se añade al
paño que recubre al disco de la pulidora.

Oxido de magnesio.
Es el abrasivo que suele recomendarse para el pulido final de los metales blandos, tales
como el aluminio, magnesio y otros, o para sustituir a la alúmina en el pulido de las
fundiciones y otros materiales relativamente duros. La técnica adecuada para el empleo del
óxido de magnesio en el pulido final metales blandos como el aluminio, plomo, estaño, etc.

Alúmina.
La alúmina (óxido de aluminio) es, probablemente, el abrasivo más satisfactorio y universal
desde el punto de vista metalográfico. Se encuentra en forma de pastas o suspensiones
acuosas.

Objetivo
Realizar una probeta con la preparación metalográfica hasta quedar en acabado espejo, en
este caso usar un material ferroso.

MATERIAL:
1 trozo de barra de acero (Recomendación cold roll 10-45 o 10-50 diámetro 1 plg.).
- 1 tornillo de grado automotriz
- 1 tornillo comercial de ½ in de diámetro
- Algodón
- Alcohol
- Agua
- Equipo de preparación metalográfica
- Microscopio óptico EPIPHOT 200 NIKON
- Pulidora automática de discos
- Cortadora de probetas
- Montadora hidráulica de probetas
- Baquelita
- Multi- esmeriladora plana
- Pulidora de discos ECOMET 6
- Computadora

DESARROLLO:
Preparación Metalográfica
Para la realización de la probeta que se estudiará es necesario conocer cada uno de los
instrumentos que se utilizarán.

Palanca de
corte

Disco de
corte
Palanca de
Prensa de apriete
sujeción

Figura 1 Cortadora de Probetas

Esta cortadora sirve para darle un corte al metal a estudiar y así mismo dejarlo al tamaño
adecuado para analizarlo.

1. Corte del tornillo para la probeta.


Para esto se tomará un tornillo automotriz o cualquier pieza de acero, se realizarán
2 cortes para tener un trozo adecuado para el tamaño de la probeta, después se
hace un corte transversal y se obtiene el material para trabajar. Este trabajo se
realiza en una cortadora de probetas del laboratorio mostrada en las Figura 1

Figura 2 corete del material para la probeta

2. Realización de la probeta.
Con el equipo SIMPLIMET 2 (montadora de probetas) quitar la tapa superior de sellado
con la presión en cero, levante el pistón hasta el borde superior del molde girando la
perrilla de presión hacia los sentidos de las agujas del reloj hasta que cierre por completo,
operando la palanca de presión mostrada
Tapa superior
Resistencia
térmica

Manómetro Palanca de presión

Perilla de presión

Figura 3 Montadora Hidráulica de Probetas

a) Coloque la muestra a analizar sobre la cara del pistón y bájela aflojando la presión
girando la perilla de presión en sentido contrario de las agujas del reloj. (ver Figura 7)
b) Agregue en el cilindro de moldeo una medida (una cucharada) de baquelita en polvo.
c) Coloque la tapa superior de sellado teniendo cuidado que la cuerda de la tapa de
sellado entre libremente y girándola hasta que llegue a tope sin apretar como se
muestra en la siguiente figura.

Figura 4 Cerradura de cilindro


d) Colocar la resistencia térmica alrededor del cilindro de molde. Encender la resistencia
térmica, verificar que la luz roja este encendida y tomar en cuenta un tiempo
aproximado de 8 minutos. (ver Figura 10)

Figura 5 Calentador para solidificación de baquelita

e) Aplicar presión hasta que en el manómetro llegue a la presión de moldeo (Figura ) y


mantenerla con dicha presión durante el tiempo de calentamiento, aplicar presión las
veces que sea necesario, ya que al derretirse la baquelita la presión tiende a bajar.

Presión de
moldeo

Figura 6 Indicador de presión en montadora


f) Una vez transcurrido el tiempo de calentamiento. Coloque el disipador térmico sobre
el cilindro y esperar un tiempo aproximado 15 minutos(Ver Figura 13)

Disipador
térmico

Figura 7 Proceso de enfriamiento de probeta

g) Terminado el tiempo de enfriamiento, gire la perilla de presión en sentido contrario a


las agujas del reloj para disminuir la presión y el pistón sea liberado. Retirar la tapa de
sellado, tener cuidado, porque puede estar caliente.

Figura 8 retiro de la tapa superior

h) Una vez liberada la tapa superior gire la perilla de presión en sentido de las agujas del
reloj a tope y bombee la palanca de presión para que suba el pistón y la probeta
quede fuera de la cavidad del cilindro. Retire la probeta.
i) empezar el pulido grueso de la probeta. Abrir la perilla del agua girándola en sentido
contrario de las manecillas del reloj. Poner la cara de la probeta sobre la lija 240 y
hacer el desbaste en una sola dirección (arriba-abajo), cuando la muestra metálica
tenga líneas en una sola dirección rotar la muestra 90° y volver a desbastar, repetir
esta operación hasta llegar a la posición inicial y pasar a la siguiente lija, el proceso
termina en la lija 600.

Figura 9 a) Tipos de lija Figura 9 b) Multi- Esmeriladora

j) Encender el ECOMET 6 y ajustar la velocidad del motor a 170 rpm Colocar la probeta
sobre el paño de la pulidora y mantenerlo lubricado con la mezcla de agua-alúmina. El
proceso termina cuando se han eliminado todas las líneas en el área de observación
de la pieza metálica.

Figura 10 Panel de control Figura 11 Pulido de la probeta

k) La probeta final debe quedar sin ninguna línea que se aprecie a simple vista como se
muestra en la Figura 18.
Figura 12 Pulido espejo de probeta

l) Antes de poner la muestra sobre el portaobjetos del microscopio debe ser lavada con
agua y jabón. Hecho esto, se le aplica un lavado de alcohol y se seca con una pistola de
aire caliente para que la probeta no contenga humedad.

Figura 13 Lavado de la probeta


m) Colocar la probeta en el microscopio sobre el portaobjetos y observar con el lente a
100X

Figura 14 observación de la muestra en el microscopio

n) Observar la pobreta montada en el microscopio con ayuda del pc ya que tienen


incorporada un sistema de adquisición de imágenes.

Imagen 1 imagen 2
Imagen 3. Imagen 4

CONCLUSIÓN

En conclusión, el preparado de la muestra cortada en esta práctica debe ser muy detallado ya que
al lijarse si no se hace cuidadosamente se daña la pieza de modo que sea más difícil al momento de
hacer el pulido espejo, y además se vean ciertos errores a la hora de ver en el microscopio.

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