VIERNES SANTO
CELEBRACION DE LA PASION DEL SENOR
Nos hemos reunido, en este Viernes Santo, en
el silencio y la oracién. Jestis, el Sefior, muere
en la cruz. Y nosotros estamos aqui movidos
por la fe, por la admiracién, por el
agradecimiento, por el amor. Porque su
Sangre, su Cruz, son la fuente de nuestra
vida, la luz de nuestro camino, la fuerza que
nos transforma.
Cuatro partes tendri nuestra celebracién de esta tarde: En
primer lugar escucharemos la Palabra de Dios, especialmente
el relato de la pasién. Luego, todos juntos, elevaremos al Pa
dre nuestras oraciones por diversas necesidades de nuestro
mundo y de la Iglesia. En un tercer momento veneraremos la
‘santa cruz como simbolo del amor de Dios que nos libera. Por
Ultimo, comulgaremos de la eucaristia que ayer guardamos en
el monument. ves ,
Dispongamonos a vivir en profundidad esta celebracién de
nuestra fe. (breves, momentos de oracién en silencio)
|. ORACION: Recuerda, Sefior, que tu temura y tu
misericordia son eternas; santifica a tus hijos y
protégelos siempre, pues Jesucristo, tu Hijo, en favor
nuestro Instituyé por medio de su sangre el misterio
pascual. Por Jesucristo nuestro Sefior.
{elo Teta cote a ese pes ap cease
Murié los malvados habiz et ingt
etfs Retest Babi comet gin
'saias 52, 13-53, 12 Mirad, mi siervo tendré éxito,
subird y crecera mucho Como muchos se espantaron
de él, porque desfigurado no parecia hombre ,ni tenia
aspecto humano, asi asombraré a muchos pueblos,
ante él los reyes cerrarén la boca, al ver algo
inenarrable y contemplar algo inaudito. .Quién crey6
nuestro anuncio?, 2a quién se revel6 el brazo del
Sefor? Crecié en su presencia como brote, como
raiz en tierra drida, sin figura, sin belleza. Lo vimos
sin aspecto atrayente, despreciado y evitado de los
hombres, como un hombre de dolores,
acostumbrado a sufrimientos, ante el cual se ocultan
los rostros, despreciado y desestimado. El soports
Nuestros sufrimientos y aguanté nuestros dolores;
nosotros lo estimamos leproso, herido de Dios y
humillado; pero él fue traspasado por nuestras
rebeliones, triturado por nuestros crimenes Nuestro
Castigo saludable cayo sobre él, sus cicatrices nos
Curaron. Todos errébamos como ovejas, cada uno
siguiendo su camino y el Sefior cargo sobre él todos
“nuestros crimenes. Maltratado, voluntariamente se
inte el esquilador, enmudecia
Sin defensa, sin justicia, se lo
llevaron, 2quién medité en su destino? Lo arrancaron
de la tierra de los vivos, por los pecados de mi
Pueblo lo hirieron. Le dieron sepultura con los
‘malvados, y una tumba con los malhechores, aunque
a a |
no habia cometido crimenes ni hubo engafio en su
boca. El Sefior quiso triturarlo con el sufrimiento, y
entregar su vida como expiacion; vera su
descendencia, prolongara sus affos, lo qu
quiere prosperara por su mano. Por los
su alma vera la luz, el justo se saciara de
conocimiento. Mi siervo justificaré a muchos, porque
‘cargo con los crimenes de ellos. Le daré una multitud
como parte y tendré como despojo una
muchedumbre, Porque expuso su vida a la muerte y
fue contado entre los pecadores, él tomo el pecado
de muchos ¢ intercedié por los pecadores.
SEGUNDA LECTURA Hch 414165 7-0 Dios nos comprende
Eentanga El sefumieno deJesa ef camino ds ahactiny
licidad.
Hebreos 4, 14-16; 5, 7-9 Hermanos: Mantengamos la
confesién de la fe, ya que tenemos un sumo
sacerdote grande, que ha atravesado el cielo, Jess,
Hijo de Dios. No tenemos un sumo sacerdote incapaz
de compadecerse de nuestras debilidades, sino que
ha sido probado con todo exactamente como
nosotros, menos en el pecado. Por eso,
acerquémonos con seguridad al trono de la gracia,
para alcanzar misericordia y encontrar gracia que
nos auxilie oportunamente. Cristo, en los dias de su
vida mortal, a gritos y con lagrimas, presento
oraciones y siplicas al que podia salvarlo de la
muerte, cuando en su angustia fue escuchado. El, a
pesar de ser Hijo, aprendi6, sufriendo, a obedecer. Y,
llevado a la consumacion, se ha convertido para
todos los que le obedecen en autor de salvacion
eterna.
LVERSICULO ANTESDEL.EVANGELIO tp 2. 31,
Cristo, por nosotros, se sometié incluso a
la muerte, y una muerte de cruz. Por eso lo
levanté sobre todo, y le concedié el «Nombre-
sobre-todo-nombre».
LECTURA DE LA PASION Jn 18,1-19,42
El cronista nos ir narrando el dilogo verbal y vital
entre Jestis y las realidades que se oponen a su mensaje.
Escuchemos la lectura, no simplemente como un relato
de algo que ocurrié en otro tiempo, sino como unos
hechos en los que nosotros estamos implicados.
Por nuestra salvacién bajé
del cielo...
--Por nuestra causa fue
crucificado, muerto y
sepultado.ll, ORACION UNIVERSAL
eucaristias’ presentamos a Dios
reccupaciones en forma de preces
pretendemos con ello elu
responsabilidad sino mas bien reforzar ta decision de
en Ia construccién de un mundo
més humano y solidario.
Hoy, ante Jestis que dala vida por la humanidad
enter nuesta oracion debe ser mas intensa, para
que a todos llegue la vida que nace de la cruz.
Unamonos pues, ahora, en la oracién universal, que
hoy, como cada Viemies Santo, hacemos con una
especial solemnidad.
ll. ADORACION DE LA CRUZ
La cruz, simbolo de suplicio y de deshonor, ha sido
convertida por Cristo en sefial de amor y solidaridad. En
este Viernes Santo no glorificamos el dolor sino el amor
{ue ha sido capaz de soportarlo.
Mirad el Arbol de la cruz,
donde estuvo clavada la
salvacié6n del mundo.
Venid a adorarlo.
Victoria Td reinaras. Oh Cruz! Td nos salvaras,
1, El Verbo en ti clavado muriendo nos rescat6;
de ti, madero santo, nos viene la Redencién,
2. Extiende por el mundo tu Reino de salvacién,
oh Cruz, fecunda fuente de vida y bendicién,
°3. Impere sobre el odio tu Reino de caridad,
Alcancen las naciones el gozo de la unidad.
4. Aumenta en nuestras almas tu Reino de Santidad;
el rio de la gracia apague la iniquidad.
5. La gloria por los siglos a Cristo Libertador.
Su Cruz nos Heve al cielo, la tierra de promision.
ORACION
Miro tu cruz, Jests,
y veo el amor
Miro tu cruz, Jestis,
y veo al Padre.
Miro tu cruz, Jests,
y veo a los crucificados.
Miro tu cruz, Jesus,
y veo una nueva humanidad,
Miro tu cruz, Jests, /
y veo la victoria de la vida.
Miro tu cruz, Jesus, :
y veo la plenitud del Espiritu.
Miro tu cruz, Jesds, :
y veo a Maria de pie, contigo.
Miro tu cruz, Jesus, yme veo
mirado y amado por TI.
IV. COMUNION
Jesis fue fil a la voluntad del Padre incluso a costa de
su vida. La Palabra de Dios, la comunién del cuerpo de!
Seftor y el apoyo de la comunidad de fe nos ayudan a man-
tenemos ilusionados en su seguimiento. Asi, el espiitu del
Sefior se va haciendo, poco @ poco, motor de nuestro ac-
tuar. Que no se dé entre nosotros la contradiccién. de ali
‘mentarnos del cordero de Dios y comportarnos después
‘como lobos con ios demas.
Nuestra Sefiora estaba con san Juan y, estoy
segura, con Maria Magdalena, fue la primera
Persona en oir el grito de Jestis: jTengo sed! Ella
conocia la intensidad y la profundidad de este
ardiente deseo de Jesiis. Os deseaba a vosotros y a
los pobres. Pero nosotros itenemos este deseo? {Lo
‘oimos como ella? Tiempo atras, nuestra Sefiora me lo
Pedia a mi, pero ahora soy yo quien, en nombre de
Maria, 0s lo pido a vosotros y os suplico: «jOid el
grito de la sed de Jestis!» Que esto sea para cada
Uno una palabra de vida. Cémo acercamos a la sed
de Jestis? El secreto es este: cuanto mas nos acer-
camos a Jesis, mas conoceremos su sed.
iArrepentios y creed en la Buena Nueva! nos dice
Jess. ;De qué hay que arrepentirse? De nuestra indi-
ferencia, de nuestra dureza de corazén. :Y en qué
hay que creer? En que Jesus tiene sed de vuestro
corazén y de los pobres. El conoce vuestra debilidad
y, sin embargo, desea vuestro amor. Quiere
simplemente que le deis una oportunidad para
amaros. jEscuchadle pronunciar vuestro nombre! Y
asi, haced que mi alegria, y la vuestra, sea
Completa. Sura Teresa oe CALCUTA
MAS HE APRENDIDO ORANDO ANTE EL CRUCIFIJO QUE DE LOS LIBROS” (Sro Towis oe AQUINO)