You are on page 1of 5

Paridad de género en las candidaturas federales a diputados y senadores, así como garantizar la

presencia de candidatos indígenas para el Congreso, son las líneas que el Instituto Nacional
Electoral (INE) aprobó por unanimidad y que los partidos políticos o coaliciones deberán cumplir
para el proceso electoral de 2018.

Elecciones 2018: candidaturas independientes

A juntar firmas: INE le da luz verde a 40 aspirantes independientes por la Presidencia en 2018

El registro de Marichuy, la candidata indígena e independiente que no aceptará un peso del INE

En los criterios aprobados se establece que para el Senado, por el principio de mayoría relativa, la
primera fórmula deberá ser diferente a la segunda y de la totalidad de las listas de candidaturas
por entidad federativa, la mitad debe ser encabezada por hombres y la mitad por mujeres.

Par el caso de las diputaciones por mayoría relativa, los partidos deberán postular fórmulas
integradas por personas que se reconozcan como indígenas en por lo menos 12 de los 28 distritos
electorales que tienen población indígena, además, deberá ser 50% para hombres y 50% para
mujeres.

Las solicitudes de registro de candidaturas de partidos políticos o coaliciones, tanto para


propietario como para suplente, tienen que oficializarse entre los días 11 y 18 de marzo de 2018;
la Plataforma Electoral de partidos o coaliciones, deberá presentarse en los primeros 15 días de
enero de 2018, y Consejos Locales y Distritales del INE sesionar para validar estos registros, por el
principio de mayoría relativa, el 29 de marzo de 2018.

Al respecto, el consejero presidente Lorenzo Córdova, dijo que las principales innovaciones de este
proyecto de acuerdo están orientadas a contribuir y a subsanar dicha asignatura pendiente del
Sistema Electoral Mexicano con las comunidades indígenas, así como para contribuir a consolidar
el mandato constitucional de paridad en las candidaturas.

En tanto, la consejera Pamela San Martín hizo un recuento histórico de la representación


legislativa de las mujeres y los indígenas de México.
“En 2006 tuvimos 12 hombres indígenas y sólo dos mujeres indígenas. En 2009 siete hombres
indígenas y sólo tres mujeres indígenas. En 2012 cinco hombres indígenas y sólo dos mujeres
indígenas. Y en 2015 seis hombres indígenas y cero mujeres indígenas”.

Por otra parte, la consejera Dania Ravel mencionó que el principio constitucional de paridad no
garantiza, por sí mismo, los resultados. Por ello se requieren tomar medidas adicionales para que
se pueda ver su efectividad.

“En el Senado la desproporción entre hombres y mujeres que lo han integrado es histórica: La
Legislatura 2012-2018 está conformada por un total de 86 hombres y 42 mujeres; en la 2006-2012
hubo 106 hombres y 22 mujeres, y en la Legislatura anterior, es decir, 2000-2006, hubo 108
hombres y 20 mujeres”, dijo.

La última sesión ordinaria del año legislativo, que iba a realizarse ayer, finalmente no existió en la
Cámara Baja. Según informaron desde Cambiemos, por “falta de acuerdo en el temario” el propio
oficialismo decidió levantar la sesión. Y con esa decisión dejó trunco el debate sobre varios
proyectos de ley de importancia. Entre ellos, la discusión sobre paridad de género en las listas
electorales.

Vale recordar que la discusión sobre la paridad de género se había instalado en el marco del
proyecto oficial de reforma electoral. Por estar en contra de la idea, el macrismo había aceptado
incorporar la cuestión pero atada a su proyecto de reforma electoral integral. Sin embargo en el
Senado se votó favorablemente un proyecto de paridad de la senadora Marina Riofrío, que con
media sanción llegó a Diputados y varios bloques esperaban discutirlo en la sesión de esta semana
que finalmente no se produjo.

El macrismo respondió así al revés que sufrió la semana pasada en el Senado, cuando el
peronismo desistió de discutir la reforma electoral.

Como ya informó este diario, había otros proyectos sobre la paridad de género que también
pretendían ser discutidos en el recinto. Es el caso del proyecto de la diputada del PTS-FIT Myriam
Bregman, quien propone que en las listas de cargos electorales debe haber como mínimo (y no
como máximo) un 50 % de mujeres y debe haber al menos dos mujeres cada cuatro candidatos.
Leé también Ley de cupo: Bregman propone garantizar un 50 % de mujeres como mínimo en las
listas

A su vez el proyecto de la izquierda plantea la flexibilidad para que luego del resultado de las
PASO, respetando la voluntad de los electores, se pueda incorporar incluso a más mujeres. “Así lo
hicimos en 2015 en las PASO del Frente de Izquierda”, manifestó Bregman el mes pasado,
recordando que con su compañero Nicolás del Caño revirtieron “ampliamente el cupo que rige en
la actualidad con un 70 % de candidatas mujeres”.

La reacción por el levantamiento de la sesión de ayer no se hizo esperar. “Las mujeres no


queremos ser prenda de negociación por el voto electrónico. Somos muchos diputados y
senadores de distintos bloques, junto a organizaciones civiles y sociales, los que le exigimos al
Gobierno que se trate el proyecto de paridad en las próximas sesiones extraordinarias”, manifestó
la diputada peronista Cristina Álvarez Rodríguez. Y agregó que, como ya no habría posibilidades de
votación hasta el año que viene, “de votarse en marzo las mujeres no llegarían a ocupar su espacio
en igualdad de condiciones con los hombres para las PASO de 2017”.

En consonancia con sus declaraciones también repudiaron la decisión de Cambiemos las diputadas
Victoria Donda, Carla Pitiot, Teresita Madera, Lucila De Ponti y la senadora que impulsó la paridad
en la Cámara Alta, Marina Riofrío.

Sin embargo los bloques a los que pertenece esas legisladoras se habían negado a la propuesta de
Bregman de debatir la paridad de forma separada a la reforma electoral.

Consultada por este diario, Myriam Bregman manifestó que “desde el PTS en el Frente de
Izquierda queríamos discutir la paridad de género en las listas porque estamos por defender todas
las demandas de las mujeres, incluso aquellas que sólo implican una igualdad o una paridad ante
la ley, ya que son un punto de apoyo para pelear por la igualdad real”.

“En ese marco dimos una defensa de la paridad de género en la Cámara de Diputados,
presentamos un proyecto propio, claramente superador al resto de los proyectos, donde ampliaba
notablemente la participación de las mujeres en las listas electorales y desde el primer momento
sostuvimos que esta discusión no podía quedar atada a la reforma electoral”, agregó la
excandidata a vicepresidente del FIT.

Leé también Reforma electoral: qué dice el dictamen de rechazo presentado por Bregman
Sobre la posibilidad de que se discutiera el proyecto que ya tiene media sanción del Senado,
Bregman dijo que su bloque exigió “en los últimos días que eso se trate, que al menos se abra esa
discusión específica sobre paridad en las sesiones extraordinarias, en la última sesión del año y
esto no fue posible”.

En ese marco la diputada recordó que no sólo quedó trunco el debate sobre este tema sino sobre
otros que también estaban para ser tratados ayer. “Se hizo una sesión formal sólo para discutir los
cargos de la Cámara de Diputados”, dijo. “Y que se discuta finalmente esto en las sesiones
extraordinarias depende de la voluntad del Poder Ejecutivo. Así que la paridad de género, la ley
contra la violencia machista que venimos exigiendo, el proyecto de camino de Sirga, es decir
volver a los 35 metros que debe tener sí o sí el acceso a lagos y ríos del país que fue modificado
con la sanción del último Código Civil, al cuál mi compañero Nicolás del Caño se opuso, ninguno de
esos proyectos se trataron y ahora dependen de la voluntad del Ejecutivo, que ya ha demostrado
que ninguno de estos temas que afectan a la vida de millones de personas le interesa realmente”,
sentenció Bregman.

PARIDAD DE GENERO Es una disposición cuyo propósito es promover una mayor participación de
las mujeres en los cargos de representación popular y que pretende remediar la escasa presencia
que tienen en los asuntos públicos. ...

1. Igualdad:

La igualdad es el derecho inherente de todos los seres humanos a ser reconocidos como iguales
ante la ley sin discriminación por su género, condición sexual, raza, creencia, nacionalidad o clase
social o cualquier otro motivo.

Se traduce en la igualdad de trato de individuos, grupos sociales o comunidades sin condiciones en


la representación pública (parlamentos, ministerios, organismos,...), la educación (acceso a los
estudios, becas,...), la sanidad (acceso universal a la sanidad), las empresas públicas y privadas
(igualdad salarial, igualdad en la contratación y promoción en base únicamente a la valía
profesional,...). Un ejemplo de su no cumplimiento es la desigualdad salarial: la demanda
pendiente de que mujeres y hombres cobren lo mismo por el mismo trabajo realizado y las
mismas capacidades demostradas.

La igualdad de género, como principio jurídico universal, está recogido en diversas declaraciones
de derechos humanos y forma parte de los principios fundamental de la Constitución europea, así
como de normas nacionales, como la Constitución española.
Una inadecuada interpretación de este concepto es el que lleva a antifeministas a criticar las leyes
que proponen cuotas o medidas especiales para las mujeres, como las recogidas en la Ley Integral
contra la Violencia de Género o la Ley de Igualdad 3/2007 española.

2. Paridad:

El concepto de paridad está relacionado con corregir la falta de representatividad de las mujeres
en la esfera pública, sobre todo en la política. Según Alicia Miyares, "garantiza el derecho civil de
las mujeres a ser electas y también a representar políticamente a la ciudadanía". La paridad en la
representación establece por ley en España un 60%-40%, es decir, ningún género puede estar
representado en una proporción menor a un 40% ni mayor a un 60%, siempre entre candidatas y
candidatos de igual valía y méritos para un puesto.

La paridad tiene que ver con las llamadas cuotas de género que siguen generando rechazo por
parte de algunos sectores incapaces de aceptar la deuda histórica existente con las mujeres. Así, el
Gobierno alemán acaba de aprobar que haya como mínimo un 30% de mujeres en los consejos de
administración de las grandes empresas alemanas para contribuir a superar el "techo de cristal"
que impide a muchas trabajadoras ostentar puestos de poder y dirección.

3. Equidad:

La equidad (del inglés, equal) se utiliza más en Latinoamérica, en ocasiones como sinónimo de
igualdad pero va más allá de ésta y articula tanto los derechos individuales como la justicia social.
Tiene en cuenta las condiciones de partida y las necesidades específicas y diferenciadas de las
mujeres de forma que la igualdad de condiciones y oportunidades pueda ser efectiva y no
androcéntrica.

Las feministas latinas, tras la Conferencia de Pekín de 1995, prefirieron utilizar el término equidad
frente a igualdad, ya que entendían la igualdad como el querer equiparar a las mujeres con los
hombres para poder gozar de los mismos derechos que ellos, en vez del reconocimiento de una
realidad específica de las mujeres que rechaza esa comparación.

You might also like